LA NORMA JURÍDICA Y LAS FUENTES DEL DERECHO Ensayo
Cuando se tiene que interpretar una norma, el intérprete lo hace
recurriendo a técnicas y métodos que le permitirán encontrar el significado de la disposición, pues de ese modo tendrá los elementos para resolver la controversia planteada con motivo de discrepancia surgida a propósito del alcance de la ley. La interpretación de la norma jurídica, elemento clave en el Derecho, se basa en la técnica jurídica de la que derivan la interpretación, la integración, la vigencia, la retroactividad y los conflictos de leyes en el tiempo y el espacio. La interpretación consiste en tratar de vislumbrar el sentido de la norma jurídica. En ese sentido, la interpretación jurídica puede definirse desde una visión restringida que “consiste en la atribución de significado a una formulación normativa en presencia de dudas o controversias en torno a su campo de aplicación” (Ursúa, 2004, p. 2) o desde un punto de vista amplio para referirse a cualquier atribución de significado a una formulación normativa, independientemente de dudas y controversias. Según lo establecido por Vigo (2012) la interpretación jurídica que antes intentaba concebir pura y completamente el pensamiento del legislador, hoy en día pueden considerarse cinco dimensiones más de la interpretación jurídica, como la propiamente jurídica o regulatoria, la fáctica, la axiológica, la lingüística o semiótica y la lógica. La dimensión propiamente jurídica o regulatoria de la interpretación jurídica trata no sólo de buscar las normas jurídicas sino también los principios jurídicos que respaldan esas normas cuando se intenta solucionar un problema. En el caso de la dimensión fáctica, el jurista y quien interpreta la norma es visto como un constructor de los hechos y no un mero descriptor, lo cual ha sido un cambio notorio tras la exclusiva interpretación de la norma que se realizaba cuando la interpretación de las leyes se basaba en el paradigma dogmático. Por su parte, la dimensión axiológica de la interpretación trata de los juicios de valores implícitos en los derechos humanos y morales que incluyen interpretaciones subjetivas que pueden llegar a ser relegadas por las interpretaciones científicas de la norma. Otro aspecto de la interpretación se trata de los problemas del lenguaje. Hoy en día el interpretador es mucho más cuidadoso respecto al lenguaje y el conjunto de términos que se encuentran dentro del lenguaje jurídico, por vaguedad, ambigüedad e interpretación abierta. Por último, la dimensión lógica, antes dominada por principios dogmáticos matemáticos, falacias y razonamientos inválidos con apariencia de correctos. La aplicación de las diferentes dimensiones de la interpretación de la norma jurídica debe estar basada en el silogismo jurídico, en el cual, según Iturralde (1991), “la decisión judicial es el resultado de la subsunción de unos hechos bajo una norma jurídica” (p. 3). De ello derivan la premisa mayor, constituida por la norma jurídica que establece un hecho con consecuencias jurídicas, la premisa menor, que es la proposición factual según la cual el hecho ha tenido lugar en un determinado momento y lugar y pertenece a la clase de hechos previstos por la norma que constituye la premisa mayor y la conclusión, que es la decisión judicial en la que el caso concreto se vincula a las consecuencias jurídicas establecidas por la norma jurídica. Un ejemplo de la aplicación de silogismo sería: “Todos los que cometan el delito de falsificación de una vacuna contra el COVID-19 deben ser castigados con pena de dos años a siete años de prisión y multa de cien mil millones de bolívares” [premisa mayor], “Todos los acusados en el proceso penal contra Pfizer son falsificadores de vacunas contra el COVID-19” [premisa menor], “Todos los acusados en el proceso penal contra Pfizer deben ser castigados con la pena de dos a siete años de prisión y multa de cien mil millones de bolívares” [Conclusión]. Es de suma importancia entender los silogismos jurídicos porque representan un intento de buscar las vías de racionalización de la toma de decisión judicial, por lo que puede entenderse como un esquema de razonamiento, respecto al que considera que es una manera apropiada de justificar la decisión judicial como una decisión racional. La búsqueda de la racionalidad implica ser metódico y analítico. Las técnicas de interpretación jurídica vienen de los métodos o estrategias utilizadas para alcanzar un fin, mientras que la técnica atiende específicamente a los elementos, instrumentos, mecanismos o herramientas que al efecto se apliquen. En cuanto a los métodos, son conocimientos en el ámbito jurídico, el exegético que propone, según Anchondo (2009) “encontrar el sentido de la norma o de una cláusula en el texto de las mismas” (p.37), lo cual implica que la ley es la expresión de la voluntad legislativa, donde la intención del legislador predomine sobre el alcance literal del texto jurídico. El método de Derecho Libre, se trata de la interpretación de lo que dice el juzgado y se refiere a la facultad discrecional del juzgador para resolver conforme a su concepción propia del deber ser. Este movimiento de derecho libre se caracteriza por una visión no solo estatal sino libre y vivo, la crítica al dogma de la plenitud del ordenamiento jurídico y el reconocimiento de las lagunas jurídicas, la primacía de la equidad y la justicia, el libre descubrimiento del Derecho y la labor del juez en el Freirechtsbewegung (Movimiento de Derecho Libre) (Núñez Leiva, 2014) El método lógico-sistemático de interpretación jurídica, se refiere a la interpretación de lo que debió decir el legislador, donde se afirma que no debe buscarse el “querer ser” sino el “deber ser” pretendiendo buscar el deber ser de la norma, en otras palabras “busca extraer del texto de la norma un enunciado cuyo sentido sea acorde con el contenido general del ordenamiento al que pertenece” (Achondo, 2009, p. 41) Por otra parte, el método histórico de interpretación “estudia los contextos anteriores que puedan influir en el entendimiento actual de las normas” (Achondo, 2009, p. 45) en cual se justifica la atribución de significado a un enunciado, que sea acorde con la forma en que los distintos legisladores a lo largo de la historia han regulado la institución jurídica que el enunciado actual regula. Cuando se analizan los métodos y técnicas sobre interpretación del derecho, usualmente se estudia cómo se produce el conjunto de normas que integran el ordenamiento jurídico, es decir, las fuentes del derecho. Según Du Pasquier (1950) en Varela Cáceres (2016) “inquirir la fuente de una regla jurídica es buscar el punto por el cual ha salido de las profundidades de la vida social para aparecer en la superficie del Derecho” (p. 374-375). Tanto la interpretación como la fuente representan un eslabón importante en la cadena de aplicación del Derecho, por lo que pueden considerarse dos procesos distintos pero convergentes que se requieren para aplicar la norma jurídica a una situación dada. Las fuentes del derecho se clasifican en fuentes reales y formales. Las fuentes reales o materiales “indican cuando un mandato es una norma jurídica objetivamente” (Varela Cáceres, 2016, p. 379). Es decir, que el precepto es dictado por un órgano habilitado para crear normas jurídicas y se ha seguido el procedimiento respectivo para tal fin, el producto de dicha actividad es una norma obligatoria. Cuando la fuente de Derecho tiene carácter formal, se hace alusión a “los pasos que cumple un determinado órgano o autoridad para generar como resultado un tipo concreto de norma jurídica” (Varela Cáceres, 2016, p. 378), es decir, atiende a los criterios de órgano y procedimiento necesario para producir como derivación una norma jurídica que será obligatoria por existir. Las fuentes formales más comunes son la legislativa (Constitución, ley y reglamento), la jurisprudencia, la práctica social y los estudios científicos o dogmáticos. La interpretación y argumentación jurídicas son unas de las principales herramientas que guían la actividad jurídica y muy en particular la del juez. Por ello siempre es importante reflexionar sobre qué es lo que hace a una interpretación y argumentación jurídica correcta o incorrecta, qué tan libre es el juzgador al interpretar la legislación, qué resultados pueden conseguirse tras aplicar cierto método o técnica de interpretación y qué errores interpretativos pueden cometerse si se obvian las fuentes reales o formales del Derecho. Sin duda alguna, el Derecho es un fenómeno social objeto de interpretación porque regula las conductas de los hombres unidos en sociedad, posibilita múltiples apreciaciones sobre su contenido y objeto, al grado de que una misma norma jurídica puede ser comprendida desde distintas ópticas. Por ello, uno de los principales problemas que enfrenta el juzgador al momento de dirimir los conflictos sometidos a su potestad tiene que ver con los alcances interpretativos que debe dar al texto normativo a aplicar y este tipo de situaciones se dan diariamente en el quehacer judicial de los jueces, magistrados y ministros, quienes aplican de manera casi mecánica algún texto normativo y argumentan con la debida fluidez y lógica matemática, pero también incurren en conflictos interpretativos y argumentativos. Referencias
Anchondo Paredes, V. (2009). Métodos de Interpretación Jurídica.
[Artículo en línea]. Disponible: https://bit.ly/3aXviDr [Consulta: Febrero 23, 2021] Iturralde, V. (1991). Sobre el silogismo judicial. Anuario de Filosofía del Derecho VIII [Revista en línea] Disponible: https://bit.ly/3uBBBEo [Consulta: Febrero 24, 2021] Núñez Leiva, J. (2014). El movimiento del derecho libre: una fuente de ideas que perviven hasta hoy en distintas teorías del derecho, incluso en el constitucionalismo contemporáneo. Revista de Derecho, 42 [Revista en línea] Disponible: https://bit.ly/3aWwvLl [Consulta: Febrero 24, 2021] Ursúa, J. (2004). La interpretación jurídica: una propuesta de esquematización de planteamientos. Isonomía. [Revista en línea] Disponible: https://bit.ly/2ZOaY0U [Consulta: Febrero 24, 2021] Varela Cáceres, E. (2016). Introducción a las fuentes del Derecho. Revista Venezolana de Legislación y Jurisprudencia, 7 [Revista en línea] Disponible: https://bit.ly/3pRpzDm [Consulta: Febrero 24, 2021] Vigo, R. (2012). Interpretación Jurídica. [Documento en línea]. Disponible: https://bit.ly/3uAwC79 [Consulta: Febrero 24, 2021]