Micro-práctica:

‘Paro, Respiro, Elijo’

¿De qué se trata?

Esta micro-práctica te ayudará a entrenar tu habilidad para

responder de un modo más consciente y efectivo en momentos de
tu día a día en los que te sientas “secuestrado/a por tu amígdala” y
especialmente disparado/a o disturbado/a.

¿Cómo se realiza?

Simplemente trae a tu mente en el momento en el que estés

viviendo la situación estos tres pasos:

Para

De este modo vas a interrumpir la respuesta automática que surge

desde la amígdala, puedes enfocar tu mente en la respiración,
simplemente observando cómo tu abdomen sube y baja por unos
segundos.

Respira

Activa la respiración que ayuda a calmar sistema nervioso:

Intenta inspirar profundamente y exhalar en el doble de tiempo.
Si estás interactuando con alguien puedes hacerlo
disimuladamente.

Elije

Hazte esta pregunta ¿Qué forma de responder en este momento a

esta situación tendrían el resultado más positivo, efectivo y
amable?

¿Cuándo realizarla?

Puedes realizar esta práctica cada vez que sientas que te sientas muy estresada/o o que notes que
tu amígdala está secuestrándote y te sientas especialmente alterada/o.

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