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ISSN: 1794-192X
investigaciones@ubscali.edu.co
Universidad de San Buenaventura
Colombia
O imperator, defende me gladio, et ego el poder pontificio que termina con el Cis-
defendam te verbo.1 ma de Occidente, el derrumbamiento del
ideal imperial con la muerte de Enrique VII
(1313); la peste negra que diezma sensible-
Introducción mente la población europea; el comienzo de
El Doctor Invincibilis, el Venerabilis Incep- la llamada Guerra de los Cien Años entre los
tor, el Doctor Singular, Guillermo de Surrey, reyes de Francia e Inglaterra (1337-1453);
el profesor oxfordiano, el cuarto maestro de el conflicto alrededor de la pobreza que en-
la escuela franciscana, el maestro de profe- frentó a la Orden Franciscana y al Papado;
sores, el franciscano de Oxford, el doctor de la desintegración y lucha en la sociedad y en
la Orden Franciscana, el pensador bisagra, el las instituciones eclesiásticas y la pérdida de
filósofo de transición, el último escolástico y hegemonía de las grandes síntesis medievales
el primer moderno, el príncipe de los nomi- de un Tomás, un Buenaventura y un Scoto.
nalistas o simplemente, como se le conoce, Todas estas son circunstancias históricas que
Guillermo de Ockham, es un personaje que influyeron inevitablemente sobre la reflexión
une dos culturas limítrofes en el tiempo, pero filosófica-teológica-política del personaje que
muy distantes en sus intenciones y propó- nos ocupa.
sitos; un pensador de transición que por el Pero aparece una serie de interrogantes:
cambio de época en que le toca vivir encarna si Ockham jugó un papel tan importante
lo antiguo y se lanza a la via modernarum. De en el siglo XIV con repercusiones para la
ahí que resulte un personaje muy discutido, posteridad, ¿por qué su desconocimiento?
incomprendido y con criterios opuestos, lo ¿por qué aparece Ockham en la historia del
que da lugar a la disparidad de interpretacio- pensamiento occidental –citemos las obras
nes sobre su vida y sus obras. de Fraile y las de Copleston, por nombrar
El comienzo del siglo XIV marca el fin sólo dos de las más conocidas– simplemente
del ideal teocrático; se da el enfrentamiento como un escéptico y un verbalista culpa-
entre Bonifacio VIII y Felipe IV de Fran- ble de la decadencia y crisis de la filosofía
cia por las querellas de las investiduras; el escolástica? ¿por qué es tildado de hereje y
drama del cautiverio babilónico de Aviñón enemigo acérrimo de la escolástica? ¿por qué
(1309-1377) y las disputas con Roma por no hace parte de los currículos académicos
1. Según una antigua leyenda, Ockham
• Fecha de recepción del artículo: 26 de marzo de 2009 • Fecha de aceptación: 21 de mayo de 2009. habría dicho esta frase a su protector
Luis de Baviera: Oh emperador, defién-
deme con la espada que yo te defenderé
EDGAR ALONSO VANEGAS CARVAJAL. Filósofo y teólogo. Especialista en pedagogía y docencia universitaria. Estudios de pos- con la pluma, después de haber sido
grado en Ecumenismo y Diálogo Inter-religioso de la Pontificia Universidad Bolivariana. Docente del Centro Interdisciplinario excomulgado por la Iglesia y participar
de Estudios Humanísticos de la USB Cali. Miembro del Grupo de Investigación Franciscanismo y Problemas contemporáneos. abiertamente en la luchas entre el Papa
Correo electrónico: eavanega@usbcali.edu.co y el Emperador.
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Edgar Alonso Vanegas Carvajal
Los años de 1319 a 1324 los dedica al obras, entre ellas el Scriptum in librum unum
estudio y a la composición de escritos filo- y los Quodlibeta septem. Por esta larga época
sóficos y teológicos. sostiene una larga disputa con los papas
En 1322 recibe el grado académico de Juan XXII, Benedicto XII y Clemente VI
Licenciado en Teología en la Universidad en torno a cuestiones teológicas y políticas:
de Oxford. el problema de las relaciones entre el poder
eclesiástico y el poder temporal. Los aspectos
En Aviñón más destacados de esta polémica se reunirán
En 1324, en un ambiente de ruptura entre luego en una de sus obras más famosas titu-
la Orden Franciscana y el Papa Juan XXII, lada Opera Política.
Ockham recibe la orden de comparecer ante
el tribunal eclesiástico en la corte papal de Mueren su mayor protector y su mayor
Aviñón, por lo que se traslada al convento opositor
franciscano de esta ciudad. Debido a este En1334, pese a la muerte del Papa Juan
hecho no le es otorgado el título de doctor, XXII en Aviñón, la situación con la Iglesia no
pese a que había completado el ciclo de cambia; al parecer, su excomunión se mantie-
estudios requeridos. Su título de Inceptor o ne hasta su muerte. Continúa en polémicas,
bachiller se debe al hecho de que nunca llegó ahora contra el sucesor del anterior, el papa
a enseñar como doctor. Benedicto XII.
En 1327 se encuentra en Aviñón con Parece que de 1337 data la redacción de
Miguel de Cesena, general de la Orden su obra Principios de teología. Aunque al igual
Franciscana, quien tiene que comparecer que Tractatus de successivis se cree que son
ante el Papa Juan XXII por sus ataques a las compilaciones hechas por otra mano a partir
constituciones pontificias sobre la pobreza. de escritos originales del filósofo.
Motivado por este General de la Orden,
Ockham se interesa por la disputa sobre la 1342
pobreza evangélica y la propiedad privada. Muere su protector y hermano de religión
Miguel de Cesena, después de haber sido
En Munich depuesto de su cargo; pero Ockham queda
En la noche del 26 de mayo de 1328 como vicario general de la Orden y deposi-
Ockham huye del convento franciscano de tario de su sello oficial. Sólo un año antes
Aviñón, junto con Miguel de Cesena, Bo- de morir envía el sello oficial al Capítulo
nagratia de Bérgamo y Francisco de Ascoli. General de la Orden.
Pero antes de partir, los cuatro fugitivos son
excomulgados por el Papa (principalmente Desenlace final
por la bula Quia Vir reprobus). Más tarde se En 1347, tras la muerte de su protector,
reúnen en Pisa con el emperador alemán Luis Luis de Baviera, su situación no es fácil en
de Baviera (electo en 1314 pero no consa- Múnich ya que su sucesor cambia de polí-
grado) y en 1329 marchan a Munich, bajo tica, mediante las Dietas de Nuremberg y
la protección del emperador. De esta época de Metz, celebradas en 1356 para sancionar
es su célebre frase que ha pasado a ser como los ideales del bávaro. Trata de dar algunos
un lema de su pensamiento: “¡Oh Emperador: pasos para reconciliarse con la Iglesia; aun-
defiéndeme con la espada que yo te defenderé que la misma Iglesia preparó una fórmula
con la pluma!”. Ockham es excomulgado e de sumisión, no es claro si llegó a firmarla
inicia así la segunda etapa de su vida intelec- y si su reconciliación tuvo efecto en algún
tual, extraacadémica, práctica, de polemista momento.
y, de algún modo, de reformador. Finalmente, en 1349 muere Ockham
A partir de 1331 y hasta su muerte se en Munich, como miembro de la Orden
establece en Munich a pedido de Luis de Franciscana que abrazó desde muy joven, al
Baviera. Así se inicia el período más fecundo parecer de la peste negra que durante ese año
de su vida con la redacción de sus grandes asoló esta parte de Europa.
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de la Universidad, y aunque nunca llegó a ral y había descubierto en ella las huellas de
ingresar a la Orden de los Menores, como Dios. Pues bien, nuestro pensador se vuelve
sucedió con Alejandro de Halles en París, a esta realidad con rigurosidad científica. Para
sin embargo, fue el animador del estudio de nuestro autor el verdadero conocimiento es
los Menores de Oxford). el experimental, que se capta en el mundo
Como características diferenciales de los de la naturaleza. Así, Ockham se convierte
maestros ingleses hay que destacar su carácter en el precursor de la investigación naturalista
de practicidad y la importancia fundamen- propia del Renacimiento.
tal que dan a las ciencias experimentales Precisamente y refiriéndose a él nos dice su
en general. En esta escuela –que F. Canals hermano de hábito Agustín Gemelli:
Vidal considera más libre, en el sentido Realmente Ockham extrema las dos exigen-
de ser menos institucionalizada y regulada cias de su educación oxfordiense y francisca-
por la autoridad pontificia, heredera de la na. Siente la necesidad de saber y creer, con
Escuela de Chartres– se conoce a Aristóteles, indiscutible concreción; posee la mentalidad
pero la actitud ante él es crítica y de oposi- intuitiva y experimental de Bacon; quiere
ción; mientras el aristotelismo de París va a en las doctrinas científicas la demostración
estar centrado en un terreno especulativo matemática; exige para las investigaciones
orientado a la sistematización metafísica, en que no atañen a la teología la mayor libertad
Oxford la recepción de Aristóteles se centra de pensamiento (1979, p. 67).
en sus libros sobre cuestiones naturales. Allí,
Y sintetiza su orientación netamente
por el contrario, el currículo hace énfasis
franciscana, diciendo:
en el cultivo de las lenguas y el cultivo de
las ciencias experimentales: matemáticas y Ockham mantiene algo vivamente francis-
física. Esta inclinación por la ciencia estruc- cano: el amor a la verdad práctica y obrado-
tura el espíritu eminentemente empírico del ra, el amor a la pobreza (1979, p. 67).
movimiento intelectual de los franciscanos En muchos autores, podemos distinguir
británicos. Ya el gran novelista italiano, claramente dos, tres o más etapas distintas
Umberto Eco, en sus Apostillas a El Nombre de su pensamiento, que se van sucediendo
de la Rosa, va a decirnos por qué escogió a o se superponen, debido a las preferencias
Guillermo de Ockham como protagonista temáticas, a las exigencias científicas y/o a
para su novela: las circunstancias personales, familiares y/o
Por ejemplo, ¿por qué en mi libro aparecen sociales, que van cambiando a lo largo de la
los fraticelli del siglo XII? Si debía escribir vida de una persona. Tal es el caso de Blaise
una historia medieval, hubiese tenido que Pascal (Vanegas, 2005), por ejemplo, que va
situarla en el siglo XIII, o en el XII, que pasando de científico a filósofo, y de teólogo
conocía mejor que el XIV. Pero necesitaba a místico, acentuando estos aspectos de su
un detective, a ser posible inglés (cita ter- vida de acuerdo con circunstancias externas
textual), dotado de un gran sentido de la e intereses personales que lo acompañan.
observación y una sensibilidad especial para Aunque algunos autores se resistan a esta-
la interpretación de los indicios. Cualidades blecer un itinerario –por utilizar una palabra
que sólo se encontraban dentro del ámbito genuinamente franciscana– consecutivo en la
franciscano, y con posterioridad a Roger persona y personalidad de Ockham, consi-
Bacon(…) (1986, p. 13). dero que vale la pena destacar los momentos
El contacto del espíritu franciscano con más significativos que marcaron la vida y
el método científico, que halló su caldo de obra de nuestro autor, y en esto la mayoría
cultivo en Oxford, encontró en Ockham a de autores identifican por lo menos dos
un pensador unificador entre los principios grandes momentos en la vida de Ockham: el
franciscanos y la ciencia empírica basada en filosófico-teológico y el político-jurídico.
la observación y los vestigios. Ya Francisco de Para nuestro estudio, tanto desde el punto
Asís había amado la realidad cósmica y natu- de vista metodológico como por claridad
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temática, hemos elegido cuatro grandes Quizá uno de los momentos más para-
momentos en el itinerario académico del dójicos y curiosos que encontramos en la
Profesor Oxfordiense, que se suceden y se historia de la cultura es la sorprendente y
complementan mutuamente, sin caer en desconcertante conjunción entre Francisco
maniqueísmos o rupturas en la vida y obra de Asís y la misma cultura. No se explica
de nuestro pensador. Estos cuatro momentos fácilmente cómo este santo cristiano, con-
son: como franciscano, como filósofo, como siderado como inculto, ignorante e idiota
teólogo y como político. (en el sentido de no saber) haya tenido un
Sin embargo, no pretendemos hacer un influjo tan grande en la historia de la cultura
desarrollo sistemático y acabado de la vida occidental y una fascinación en las culturas
y obra del Doctor Franciscano. Por el con- no occidentales. Francisco fue un creador
trario, nos limitaremos a presentar de una de cultura, no distribuidor ni consumidor
manera general una primera aproximación de cultura. Estaba muy lejos de la avidez
libresca, pero era hombre de profunda y
a la semblanza de nuestro autor.
prolongada reflexión y estudio personalizado.
No estudió en los libros, sino en las fuentes
Como franciscano que originan los libros y que inspiran tantos
Ockham debió de ingresar muy joven a volúmenes de bibliotecas: la naturaleza. El
poverello ha contribuido, con su estilo de
la Orden Franciscana, fundada por Francis-
vida, a crear una forma de ser y de vivir con
co de Asís en 1209, pues entró en 1310 al
no pocas repercusiones en nuestra cultura.
Convento de los Menores en Oxford, sede
de la más importante universidad inglesa, Buenaventura de Bagnoregio y su ejem-
perteneciente a la diócesis de Lincoln. Allí plarismo, Juan Duns Scoto y el voluntarismo,
inicia sus estudios superiores y recibe leccio- Roger Bacon y su método experimental y,
por supuesto, Guillermo de Ockham y su
nes de teología e imparte, posteriormente,
nominalismo, por mencionar sólo a algunos
lecciones sobre Sagrada Escritura y sobre las
de los más representativos doctores de la Es-
Sentencias de Pedro Lombardo.
cuela Franciscana con sus tesis y aportes más
Como franciscano, Ockham bebe del significativos a la cultura, han inspirado sus
pensamiento del fundador de su Orden, monumentales sistemas de pensamiento y sus
Francisco de Asís: la primacía que le otorga métodos de investigación a partir de la centra-
a la praxis sobre la teoría; la afirmación de lidad de la persona, lo cotidiano, lo individual
los seres singulares –hermano Sol, hermana y singular, las relaciones dialógicas fraternas
Luna–, la valoración de la subjetividad con la naturaleza, con las personas y con Dios,
individual por encima de la noción de va- la observación, la creatividad y la intuición
cío de la humanidad. Francisco no previó (P.E.B., 2007, pp. 70-71), y sobre todo la
ni intentó una determinada metodología profunda sensibilidad que tuvo Francisco de
de estudio; ni siquiera se preocupó por la Asís para interpretar la realidad observada en
ciencia y los estudios de los hermanos. Pero términos de signos y símbolos.
los valores que vivió, la experiencia personal Al respecto, afirma el filósofo franciscano
que tuvo del otro (los hermanos), lo otro Fray José Antonio Merino:
(la naturaleza) y el Totalmente Otro (Dios), Es sorprendente que Francisco de Asís, que se
fueron tan intensos y al mimo tiempo tan consideraba a sí mismo idiota e ignorante,
profundos, que no solamente permearon la diera un impulso de gran magnitud a todo
sociedad y la cultura de su tiempo, sino que un nuevo movimiento evangélico dentro
sirvieron de inspiración y creación de sentido de la cristiandad. Pero es más sorprendente
para dar origen y continuidad a una de las aun que a partir de él, con quien convivían
escuelas filosófico-teológicas más influyentes simples y letrados, se creara y se articulara
en la historia del pensamiento occidental: la una auténtica escuela de pensamiento, que
Escuela Franciscana. es solidaria con los temas tratados en las
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realiza a un mismo tiempo en todos y cada cosa se predican de igual manera de otra que
uno de los hombres concretos. Dicho de otra le es semejante.
manera, el concepto universal es como una Para el Príncipe de los Nominalista, los
representación intelectiva y abstracta que se universales son términos que significan cosas
puede aplicar a muchos objetos en el mismo
individuales termini conceptus, y las represen-
sentido. Ej: casa, mesa, belleza, grandeza,
tan en las proposiciones. Esto equivale a decir
hombre, animal, etc. El concepto que ten-
que solamente existen cosas individuales,
go de las cosas concretas es muy diferente
del concepto abstracto y universal que se singulares y por el mimo hecho que una
puede aplicar a un conjunto determinado cosa existe es ya individual. No hay ni puede
de cosas. haber universales; afirmar los universales es
Toda la historia de la filosofía se ha una insensatez según Ockham, porque si el
planteado este problema y ha buscado una universal existe ha de ser individual.
solución satisfactoria. Ockham, por su parte,
se plantea el problema de la siguiente manera: Primado de lo individual
¿Carecen de contenido los universales? ¿Tie-
Según Ockham, es lo individual lo que
nen realmente valor objetivo los conceptos
conocemos. Lo individual es lo primero, lo
universales, o es una pura fabricación de la
mente? ¿Será el universal una mera represen- conocido y lo único propiamente conocido,
tación nominal, un puro nombre, o tiene hasta llegar a pensar que no se puede aplicar
realmente un contenido en nuestra mente y el concepto hombre a Sócrates y a los demás
por tanto no es pura palabra sin sentido? Es- hombres.
tos y otros interrogantes son comunes a otros Tampoco existen ideas universales en
pensadores medievales, pero Guillermo de Dios. Dios crea sólo lo individual y por eso
Ockham dilucidó una solución bastante clara sólo podemos tener ideas individuales. En la
y verídica, hasta entonces desconocida. medida que una cosa sea simple y abstracta,
en esa medida se encumbra en la escala de
Solución dada por Ockham la realidad.
al problema de los universales
No existe ninguna contradicción si deci-
Tesis principal mos que lo universal se realiza en lo singular.
Por ejemplo, si tomamos a Pedro que es un
No hay realidad común alguna que exista
al mismo tiempo en dos miembros de una individual, ¿por qué le atribuimos la idea
misma especie. hombre, que es multiplicidad y pertenece
a todo el género? Y decimos que cuando
Argumentación nosotros pronunciamos el juicio “Pedro es
Podemos argumentar con un ejemplo: hombre” no estamos afirmando que Pedro,
si Dios ha creado a un hombre de la nada, que es algo singular y concreto, es igual a
eso no afecta a ningún otro hombre en su hombre; si así fuera, Pedro sería a la vez uno
esencia; igual, una cosa individual puede ser y muchos. Por el contrario, afirmamos que
aniquilada sin la destrucción de otra cosa en Pedro, que es un sujeto singular, se verifica
individual. Por eso nada hay común a ambos este contenido de notas animal–racional que
porque si lo hubiera, con la aniquilación de
en sí no excluye ni incluye la multiplicidad ni
un hombre todos sufrirían en su esencia y
la singularidad. Así, pues, en lo singular se ve-
por la experiencia comprobamos que no es
rifica lo universal. Pedro es hombre equivale a
así. Lo que Ockham quiere darnos a enten-
der es que no tenemos cosas en común con decir que Pedro es un animal racional.
los demás seres de nuestra especie, sino que Coloquemos un ejemplo: lo antagónico
solamente guardamos semejanzas; esto lo que puede aparecer un juicio a los ojos de
sabemos porque los predicamentos de una los universalistas.
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hombre tiene tres clases de lenguaje: el oral, la fe cristiana y todo aquello que un buen
el escrito y el mental. El primero tiene la cristiano debe creer. Esto no puede entrar en
materialidad de un sonido, el segundo tiene dudad en nuestro autor. Pero se plantea un
la materialidad de un grafismo y el tercero la problema previo a la teología: el problema
cualidad real de un acto del espíritu. Por eso, de la situación de la teología como discurso
reiteramos, que en esto consiste la genialidad científico, ya que una ciencia, en el sentido
de Ockham: en notar la importancia y las riguroso de la palabra, se funda no solo en la
implicaciones de algo bastante común en concatenación coherente de los términos o
su siglo pero no reflexionado epistemoló- signos de varias proposiciones, sino también
gicamente. Pues bien, mientras el término en el acceso directo a sus referencias en una
pronunciado y escrito es resultado de una experiencia intuitiva que puede verificar
libre convección, el terminus conceptus o sig- tales referencias. En el caso de la teología,
no natural –como lo llama Ockham– apunta tal acceso a la experiencia no es posible al
a significar, denotar o señalar algo. Esto lo homo viator. Por lo tanto, la teología no es
sabe muy bien Humberto Eco y por eso no posible como ciencia. Esto no significa que
duda en señalar: se niegue la fuerza informativa de las propo-
(…) Además, sólo en los occamistas encon- siciones teológicas y/o de los razonamientos
tramos una teoría desarrollada de los signos; lógicos. Ello significa que los razonamientos
mejor dicho, ya existía antes, pero entonces teológicos se conocen a través de la fe, y no
la interpretación de los signos era de tipo son demostraciones científicas.
simbólico o bien tendía a leer en ellos la De aquí parte Ockham para proponer
presencia de las ideas y los universales. Sólo abiertamente la separación radical entre fe
en Bacon y en Occam los signos se usan para y ciencia, pues se trata de contenidos y de
abordar el conocimiento de los individuos. exigencias epistemológicas completamente
Por tanto, debía situar la historia en el distintos. La fe no se opone a la ciencia ni
siglo XIV, aunque me incordiase, porque se opone a las especulaciones y a los razo-
me costaba moverme en esa época. De allí namientos filosóficos, sino que no queda
nuevas lecturas, y el descubrimiento de que atrapada en ellos y está más allá de todo
un franciscano del siglo XIV, aunque fuera razonamiento; trasciende a otros niveles de
inglés, no podía ignorar la querella sobre la comprensión, no aprehensibles por medio de
pobreza, sobre todo si era amigo o seguidor o la sola razón. Siendo ciencias complementa-
conocido de Occam (1986, p. 13). rias, requieren metodologías diferentes.18 De
Así, vemos que la filosofía del lenguaje es esta manera queda solucionada la antigua
la base de la crítica al problema de los univer- discusión de Filosofíae ancilla teologiae. Pero
sales y el punto germinal de su sistema nomi- vale la pena aclarar que Ockham propone
nalista, según el cual la naturalidad del signo una teología práctica, y desconfía de una
se fundamenta en la estructura psicosomática teología netamente especulativa.
del hombre. Ockham no conceptualiza el El punto de partida ockhamniano, tanto
signo como Ferdinand de Saussure o Charles para su filosofía como para su teología, fue-
Sanders Peirce; no obstante, Eco nos dice que ron las tesis de la Escuela Franciscana sobre la
la búsqueda de Ockham del auxilio racional primacía de la voluntad y la incondicional li-
para penetrar los misterios del Signo en aquellos bertad de la omnipotencia divina. El teólogo
aspectos donde Saussure aún es oscuro (1986, franciscano describe su principio como sigue:
p. 9), le valió el protagonismo –Guillermo “Dios puede crear todo lo que, al ser hecho, no
de Baskerville– a lo que quería en la novela incluye contradicción” (1985, pp. 29-30).
El nombre de la rosa. Como buen teólogo franciscano, Ockham
mantiene como punto de partida el primer
artículo del credo, o Símbolo de los apóstoles y
Como teólogo niceno-constantinopolitano: “Credo in uum
Ockham es un teólogo y, como tal, está Deum Patrem omnipotente” (Creo en Dios
preocupado por explicar el contenido de Padre Todopoderoso). Se trata de un acto
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gobernantes que tengan jurisdicción tempo- armónica colaboración y ayuda entre ambos
ral, ya que la jurisdicción temporal entra poderes. En este sentido, podríamos afirmar
en todo aquello que es necesario y útil para que Ockham allana el camino de la Refor-
una vida tranquila y ordenada (Manual de ma de Lutero, y que aparece explícita en su
teología franciscana, p. 465). exposición sobre los dos reinos.
Por la anterior cita podemos afirmar que El Venerabilis Inceptor critica la teoría teo-
la propiedad privada es un derecho natural crática que afirma el poder espiritual como
inviolable, que Dios le ha otorgado al hom- superior al poder temporal, pero también se
bre para que él disponga de ella conforme al aparta de las teorías de Marsilio de Padua
dictamen de la recta ratio, y por lo mismo, (expuestas en su Defensor Pacis), al defender
también puede el hombre, por ley natural, la subordinación de la Iglesia al Estado. Su
renunciar a ella siempre y cuando se tenga posición es más conciliadora entre el poder
en cuenta una causa justa y racional. El de- espiritual del Papa y el poder temporal de
recho de poseer y el derecho de renuncia a la autoridad civil, pero sin intervencionis-
la legítima posesión son derechos naturales mos de las partes. No olvidemos que estas
y fundamentales de la persona como el ser reflexiones fueron dadas por el intelectual
singular y relacional. franciscano en el llamado Cisma de Occiden-
Sobre este tema vale la pena destacar la te, cuando existieron dos y hasta tres papas
distinción que hace nuestro autor entre el electos simultáneamente por sus seguidores
derecho de usar algo y la propiedad sobre en Roma y Aviñón.
ello. Para el pensador inglés el uso lícito no La Iglesia se ha de preocupar por el bien-
significa la propiedad de la cosa usada, sino estar espiritual y la salvación de las almas, y
el permiso de usarla dado por el propietario. por su misión pastoral de evangelización;
Por lo tanto, los franciscanos que usan cosas mientras que al gobierno temporal, –empe-
con el permiso de sus bienhechores no tienen rador, príncipe o gobernante– le corresponde
ningún derecho sobre la cosa usada. De esta velar por el bienestar social, la distribución
manera relaciona nuestro genial autor la del Estado y los intereses económicos del
pobreza evangélica con la propiedad privada pueblo que lo ha elegido libremente, y de
en un tema que particularmente para los ninguna manera necesita el reconocimiento
franciscanos espirituales de aquella época del Papa para ejercer su cargo.
era muy sensible. Digamos, entonces, que el Doctor In-
La relación Iglesia-Estado: como todo vencible, reflexionó profundamente sobre
pensador medieval, el maestro franciscano se problemas concretos propios de su época:
preocupó por los grandes problemas propios personales, sociales, políticos, franciscanos y
de la época y que se pueden sintetizar en eclesiales. Como seguidor de los principios
el problema de los universales, las pruebas franciscanos defendió con ardor el valor de
de la existencia de Dios y la relación entre la libertad, amenazado tanto por la Iglesia
fe y razón y entre el poder temporal y el como por el Estado. Analizó con valentía
espiritual, más conocido como el problema la relación Iglesia-Estado, Papa-Emperador,
de las investiduras. Ockham intenta resolver entre los gobernantes y la sociedad. Podría-
estos temas de una manera muy particular mos, incluso, hablar de una teología política
y diferente a la solución que hasta entonces en Ockham. Como franciscano entendió que
se les había dado; y por ello da el golpe de toda teología es liberadora y se comprometió
gracia a la escolástica, no por la novedad de en la acción eclesial, política y social de su
los temas tratados, sino por la manera de tiempo.
darles solución. Sinteticemos, para terminar, afirmando
Como es sabido, Ockham es un acérrimo que a Guillermo de Ockham hay que mirarlo
luchador por la separación entre la Iglesia y el y estudiarlo como fue en realidad:
Estado, entre el Papa y el Rey, pero también Como un franciscano, que de confor-
postula, como ya hemos mencionado, la midad con el más genuino franciscanismo
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