En la ciencia está la verdad.

Adopción homoparental.

La discusión sobre la adopción homoparental se da en un terreno escabroso

siempre que se cruza de frente con creencias religiosas y conservadoras de lo que
debería ser una familia, estamos todos adaptados a los conceptos que nos
inculcaron y los cuales vimos en los hogares de nuestros padres y ahora
defendemos para nuestra propias familias, así mismo muchas personas entienden
la homosexualidad como un desorden mental, como una enfermedad, si le
agregamos que los grupos ultraconservadores argumentan que si la familia es el
núcleo de la sociedad, “corromperla” seria torpedear nuestras propias bases,
tenemos un argumento que desde el punto de vista de la “ética y moral religiosa”
es válido para quienes no están de acuerdo con esta adopción.

Sabemos que es inevitable para el ser humano juzgar algo sin el filtro de lo
“moral”, pero eso que llamamos moralidad es subjetiva, ya que la mayoría de las
veces se basa en creencias las cuales no son compartidas por todo el mundo, lo
que es moral para una persona en Colombia, puede ser absolutamente inmoral
para un africano o un islamita, entonces como dirimir estos temas sin imponer
creencias personales a las minorías, respetando los derechos humanos de cada
persona en forma individual tal como debe ser.

Nuestra constitución y la carta de derechos humanos la cual es parte integral de

ella, nos indica como deberíamos comportarnos frente a estos dilemas, en este
sentido la Corte Constitucional estableció que no está prohibido por nuestra
constitución que las parejas del mismo sexo adopten, sin embargo los fallos que
los diferentes entes generan sobre este tema son ambiguos y dejan vacíos, esto
se entiende desde el “respeto” al primario, al pueblo que es el que elije, ningún
político o entidad quiere tener un mala opinión de los que votan.

Es así como la mayoría ejerce su tiranía sobre los grupos o individuos que son de
opiniones distintas, pero entonces quien, o que, puede arbitrar este debate.

Desde siempre el ser humano ha tenido una herramienta la cual ha hecho que
evolucionemos de forma mental y en nuestro entorno, perseguida y prohibida
muchas veces por las distintas religiones pero certificada una y otra vez por la
validez de sus argumentos, es la ciencia, entonces que pasa si estas discusiones
se dan desde un punto de vista científico, de estudios en los cuales no se
involucre a Dios, ni la moral sesgada, más bien rigor científico y ética clínica, la
pureza de estos resultados serían más validos que cualquier debate acalorado y
amañado que no conduce a ninguna parte.
Entonces el propósito debería ser que al apoyar, o, no este tipo de adopciones se
deberían resolver de forma explícita preguntas tan importantes como,
 ¿En que afecta a un niño tener padres del mismo sexo?
 ¿La homosexualidad es una conducta, por lo tanto los niños criados por
padres del mismo sexo tendrán tendencia ser homosexuales también?
 ¿Los hijos de parejas homosexuales tienden a conductas aberrantes o que
vayan en contra de la sociedad por el hecho de haber sido criados por
padres homoparentales?
 ¿Qué tan seguro es el entorno de un niño en una familia homnoparental?

Pude ser que las preguntas en sí sean de alguna forma discriminatorias, pero son
las que la sociedad ortodoxa pretende responder desde un criterio sesgado, y las
cuales deben ser respondidas con rigor y sin fanatismos.

¿Hay estudios de este tipo?, por supuesto que sí, la Academia Americana de
Pediatría, publico en el 2013 en la revista Pediatrics, un estudio en el cual indica
que no hay impactos negativos de ningún tipo en niños criados por parejas
homoparentales, así mismo hay cientos de estudios que llegan a esta misma
conclusión, es más, en la cultura occidental en las familias de padres
heterosexuales muchas veces los roles masculino y femenino se diluyen por
diferentes circunstancias, así la madre termina teniendo el rol del padre y
viceversa (Margaret Mead, antropóloga).

Entonces si nuestra constitución y los derechos humanos nos dan bases para
saber cómo actuar frente a este tipo de situaciones ¿por qué es tan difícil
ponernos de acuerdo en una posición?

Es aquí donde pienso que los estudios y la ciencia deberían tomar un papel
relevante, apoyando las ideas de un lado o del otro, inicialmente para informar de
forma veraz y con argumentos lejanos de pasiones moralistas o religiosas, una
sociedad informada toma mejores decisiones.

Personalmente mis principios y mi crianza no me permiten estar a favor de este

tipo de adopción, pero si me demuestran con rigor científico que estoy equivocado,
lo aceptaría, sin compartirlo, porque hay algo que me da más miedo que una
pareja homoparental adopte un niño, y es vivir en una sociedad donde la política y
los derechos de los individuos sean dictados por creencias fuera de la ley del
estado, así sean la mayoría.