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20 años atrás el PC tenía una pantalla monocromática, una modesta unidad de disco

flexible y tan solo 64.000 bytes de memoria; hoy, el PC promedio es un supercomputador


de escritorio. Remontándonos a principios de la década de los 80, la simple idea de un
computador personal era una novedad. Para mucha gente, los computadores eran
demasiado intimidantes eran difíciles de instalar y mantener, y la mayoría de los programas
que se ejecutaban eran muy lentos y complicados de utilizar. Pocas personas veían un
computador como parte esencial de su vida diaria.

Los disquetes, esos pequeños, planos y delicados pedazos de plástico, eran el lugar
en el que guardábamos algunos de nuestros más preciados tesoros.

Desde el de 3”, hasta el de 3½”, pasando por el clásico de 5¼”, disponían de


capacidades que hoy sonarían tan ridículas como 1,44Mb. No obstante, los cuidábamos
como oro en paño, porque eran la única opción que teníamos para salvar nuestros
valiosísimos archivos, cosa que con frecuencia debíamos hacer en varias unidades. Era lo
que había. Después apareció el CD-ROM y el salto fue sideral…

Teclear órdenes: ¿Piensas que todo ha sido siempre tan sencillo como ahora? ¿Qué
el puntero del ratón o la pantalla táctil llevan ahí desde tiempos de Pitágoras? Hubo una
época en la que, si querías hacer cualquier cosa con tu ordenador, ¡tenías que teclear las
órdenes!

Efectivamente, hablamos de la época del sistema operativo MS-DOS. Aunque esto


suene casi como a tiempos de la formación del planeta Tierra, el primer sistema operativo
visual y utilizado masivamente en el entorno Windows fue Windows 95 (existieron
versiones anteriores, como la 3.1, pero su éxito comercial no fue comparable). Es decir,
poco más de 20 años -el 95 se refiere al año de su lanzamiento-, y parece que habláramos
del Cretácico…
Conectarnos a Internet ocupando la línea telefónica: Eran los tiempos en los que una
señora vestida con una bata y rulos en el pelo tenía mucho que ver con conectarse a
Internet. Efectivamente, hablamos de nuestra madre, o de nuestra abuela.

Porque, en los años 90, eso de estar permanentemente conectado era algo propio de
la ciencia-ficción. Por el contrario, para entrar en la red necesitábamos invadir la línea
telefónica de nuestro domicilio (habitualmente, la única que había), lo que provocaba
quejas y resoplidos de toda la familia, que ni siquiera entendía las tonterías que estábamos
haciendo.

Conectarnos desde la Universidad (o desde un cibercafé): Y es que antes aún de que


nos dedicáramos a incordiar a la abuela, ya habíamos hecho nuestras incursiones en la red,
en entornos un poco más clandestinos.

Para muchos, nuestros primeros contactos con la red tuvieron lugar en los
ordenadores que las universidades disponían para uso de los estudiantes. Evidentemente, su
intención no era que los utilizáramos “para eso”, sino para buscar información académica.
De hecho, incluso había “vigilantes” en las salas de ordenadores que se dedicaban a cuidar
por su correcto uso, pero tampoco es que se esmeraran demasiado… Al final, la mitad de la
sala acababa entreteniéndose en la ya difunta Teknoland…

Cambiar componentes: Vale, es algo que algunos usuarios todavía hacen, pero ya es
una práctica en desuso. En los años 90, sin embargo, estaba a la orden del día. Conforme
nuestras necesidades lo requirieran, aquí quitábamos o allí poníamos una memoria RAM o
una grabadora de CD dentro de las enormes torres de nuestros equipos.

Desfragmentar el disco duro: Efectivamente, los ordenadores aún desfragmentan su


disco duro, pero lo hacen de forma automática, por lo que ni nos enteramos.
Sin embargo, en los años 90, era una operación que ejecutábamos por nuestra cuenta
cada cierto tiempo (normalmente, cuando el equipo iba lento) y en la que observábamos
hipnóticamente durante minutos cómo cambiaba de color una cuadrícula de cuadraditos que
nos acercaba, poco a poco, a la velocidad que tanto ansiábamos…

Jugar en 256 colores: Es cierto que, comparados con los 8 colores del ZX
Spectrum , los 256 colores de las tarjetas VGA parecían pura ambrosía, pero hay que
reconocer que tenían poco que ver con las imágenes de las que disfrutamos hoy en día.

Hoy, el computador personal se ha convertido en algo cotidiano. Más de 500


millones de PC están en uso en el mundo, y otros 140 millones serán vendidos en el 2001-
muchos más que el número de televisores que se comprarán este año-.

Actualmente, los PC son económicos, poderosos, confiables y lo suficientemente


sencillos para que casi cualquier persona los utilice. El software de productividad personal
ha hecho que el PC sea una herramienta indispensable para los negocios, y que sea mucho
más fácil que nunca utilizarlo para manejar las finanzas, hacer las compras de la familia o
no perder de vista los horarios en el hogar.

Los PC han revolucionado la manera en que vivimos, trabajamos, aprendemos y


jugamos, y han transformado la forma de comunicarnos los unos con los otros. Han
permitido a la gente ser más creativa y a los negocios ser más eficientes; han abierto
oportunidades asombrosas para la educación, y han ayudado a estimular la productividad
alrededor mundo.

Combinados con el económico y extenso acceso a Internet, han ayudado a que las
noticias y la información viajen más rápido y más libremente como nunca antes; así mismo,
han roto las fronteras entre las naciones, la gente y la economía. Por lo tanto, no debe
sorprendernos que más de la mitad de los usuarios de PC lo consideren ahora como el
dispositivo más importante de su hogar.

Experiencia personal: Cuando comencé a utilizar por primera vez los computadores
personales, me sorprendieron e inspiraron por lo que podían hacer- y por lo que podrían
hacer en un futuro- . Pero lo que es aún más emocionante, incluso ahora, es que aún
estamos muy lejos de agotar el potencial de los PC.

Hoy estoy tan entusiasmado como nunca antes lo había estado en relación con el
PC. Estamos en el comienzo de una nueva ola de innovación digital, que creará gran
cantidad de nuevas y emocionantes formas para que los computadores enriquezcan nuestras
vidas.

El PC se está convirtiendo rápidamente en algo que tiene que estar siempre


encendido y conectado a Internet, es más sencillo para que la gente confíe en él para hacer
más cosas de las que hacen cada día, desde leer las noticias hasta escuchar su música
favorita.

Los servicios avanzados de la web están facilitando a la gente manejar sus vidas y
poder acceder a la información que necesitan, desde su PC casero o desde cualquier otro
dispositivo inteligente.

Al mismo tiempo, las unidades de disco económicas de gran capacidad y las


cámaras fotográficas digitales fáciles de usar hacen posible que la gente pueda guardar y
compartir fácilmente en su PC las fotografías y videos digitales de los momentos más
importantes de su vida, mientras que las capacidades de audio y video están transformando
al PC en un centro de entretenimiento para el hogar.
No solamente tenemos hoy software más avanzado y más fácil de utilizar que nunca
antes, sino que también puede mantenerse a sí mismo, buscando y arreglando problemas sin
que el usuario se entere. El resultado es que el PC está comenzando a ser el centro de una
red, de continua ampliación, de dispositivos inteligentes conectados, desde teléfonos
móviles hasta televisores y dispositivos portátiles, incluso aparatos electrodomésticos.

Tengo la confianza de que no nos quedaremos sin nuevas cosas por hacer con el PC.
Si los últimos 20 años han sido impresionantes, los 20 siguientes serán asombrosos.

Alejandro Linares
17.974.010

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