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SAT

● Alerta: estado declarado con el fin de tomar precauciones específicas, debido a la


probable y cercana ocurrencia de un evento adverso

● Alerta Temprana: Provisión de información oportuna y eficaz a través de


instituciones identificadas, que permiten a individuos expuestos a una amenaza, la
toma de acciones para evitar o reducir su riesgo y su preparación para una
respuesta efectiva. (MINISTERIO DE EDUCACIÓN DE PANAMA, 2011, p. 56)

¿Qué es un Sistema de alerta temprana (SAT)?

Un mecanismo articulado de gestión de información, análisis oportuno, toma de


decisiones y acciones, producto de un proceso concertado de actores técnicos científicos,
autoridades y la sociedad civil, que permiten alertar, dar alarma y evacuar poblaciones en
riesgo en tiempo oportuno, de forma eficiente y eficaz y refleja la capacidad organizativa
de la sociedad en sus diferentes niveles institucionales y de la sociedad civil.

¿Cuál es la importancia de un SAT?

La importancia de un SAT radica en que permite conocer anticipadamente y con cierto


nivel de certeza, en que tiempo y espacio, una amenaza puede desencadenar situaciones
potencialmente desastrosas.
¿Cuál es el objetivo de un SAT?

El objetivo fundamental de un SAT es reducir o evitar la posibilidad que se produzcan


lesiones personales, pérdidas de vidas, daños a los recursos, medios de vida y al
ambiente.

¿Cuáles son los propósitos de un SAT?

Tienen entonces como propósito (CEPREDENAC 2002 y García 2002):

● Monitorear y dar seguimiento permanente a los fenómenos monitoreados;

● Emitir oportunamente avisos de recomendación de alerta;

● Sugerir medidas de prevención;

● Facilitar la toma de decisiones de los organismos políticos;

● Crear y fortalecer una estructura que permita la inserción de los diferentes


sectores, quienes elaboraran planes de acción específicos.

En qué eventos aplicamos un SAT

Son aplicables tanto a eventos naturales, como aquellos provocados por la actividad
humana y por la interacción de ambos elementos, cuyas características permiten su
vigilancia y monitoreo. Entre las amenazas o eventos más comunes a los cuales se
aplican SAT tenemos las inundaciones, deslizamientos de tierra, huracanes, volcanes,
tsunamis, incendios forestales, fenómeno del niño y la niña, entre otros.

Los sistemas de alerta temprana incluyen tres elementos, a saber:

● Conocimiento y mapeo de amenazas;

● Monitoreo y pronóstico de eventos inminentes;

● Proceso y difusión de alertas comprensibles a las autoridades políticas y


población; así como adopción de medidas apropiadas y oportunas en respuesta a
tales alertas.

Función del SAT

El funcionamiento de un Sistema de Alerta Temprana consiste en los siguientes pasos:

● Lectura y registro de la medición de los instrumentos sobre el evento monitoreado:


Cuando el fenómeno monitoreado produce alguna alteración, activación o
manifestación de peligro, es registrado por los instrumentos, y se procede a tomar
las lecturas correspondientes, manteniendo una vigilancia pormenorizada,
continua y permanente para conocer sus cambios y evolución.

● Transmisión de los datos registrados: Luego que las lecturas han sido tomadas y
registradas, son transmitidas inmediatamente, para que los encargados o
especialistas efectúen los cálculos necesarios y se realicen los pronósticos
respectivos, sobre la posible ocurrencia o no de un evento adverso o destructivo.
● Procesamiento y análisis de los datos transmitidos: Los datos llegan a manos de
expertos o encargados de procesarlos, quienes realizan sus cálculos y establecen
si estos indican la posibilidad o no de manifestarse un evento adverso o
destructivo.
● Pronóstico de la situación y Establecimiento del nivel y tipo de alerta: Las
instituciones encargadas o los miembros de los comités de Emergencias de las
comunidades, evalúan la información o el resultado del análisis de los datos
procesados y lo contrastan con un Mapa de Riesgo, determinando así el daño
potencial, nivel y tipo de alerta que se debe declarar y emitir. Comúnmente se
utilizan tres colores de alertas, las cuales describimos a continuación:
a) Verde: indica que se debe estar atento al comportamiento y evolución del
fenómeno o evento monitoreado, y de las alertas que se continúen
emitiendo. Esta alerta debe dirigirse a los especialistas de las instituciones,
los encargados del Plan de Emergencia y los habitantes de las
comunidades en peligro.
b) Amarilla: aumenta la alerta y los diferentes equipos e instituciones inician
sus preparativos para ejecutar las acciones correspondientes, dirigidas a
28 enfrentar el impacto del evento y sus consecuencias.
c) Roja: significa que es inminente la llegada o materialización del evento,
esta alerta es emitida a través de las instituciones responsables o
entidades autorizadas, tanto nacionales como locales. Se activa el Plan de
Emergencias y, en la mayoría de los casos, se ordenará la evacuación de
los pobladores a zonas seguras o albergues, además otras acciones,
según las condiciones en que se presenta el evento.

En algunos países se utilizan cuatro colores, en el cual el color naranja se sitúa


después del color amarillo, representando la Alerta Naranja, que significa lo
siguiente: Cuando se han concretado las condiciones necesarias para que se
presente el fenómeno y sólo sea cuestión de minutos y horas para que se
manifieste el fenómeno.
● Difusión del nivel de alerta: Al contar con la alerta oficial debidamente definida,
emitida y comprobada, se procede a notificarla a la población. La alerta debe ser
clara y oportuna, garantizando la confianza de las comunidades o beneficiarios. La
alerta se podrá difundir utilizando radios de comunicación, radio emisoras,
teléfonos, radio parlantes, bocinas, sirenas, banderas, sonando pailas, campanas
y cualquier otro instrumento que tenga el alcance, que permita informar
rápidamente a la comunidad.
● Activación de un Plan de Emergencias o Evacuación. Sin este paso la alerta, no
tendría sentido o ningún resultado, por lo tanto es imprescindible que todos los
centros educativos y las comunidades cuenten con planes o actividades de
preparación para responder.

Sub-Sistemas

De acuerdo a Maskrey et al. (1997), el sistema de alerta temprana contempla cuatro sub-
sistemas: Medición y seguimiento de las amenazas; Conocimiento de los riesgos;
Preparación y Capacidad de Respuesta; Difusión y Comunicación. Estos sub-sistemas
son esquematizados.

1. El pronóstico, monitoreo y la alerta con:


● Manejo de la información en tiempo real (pronósticos y seguimiento de la
evolución de un desastre mediante la utilización de imágenes de satélite);
● Monitoreo y vigilancia permanente de las condiciones y manifestaciones de
los fenómenos (equipos para el seguimiento de las variables, medidores de
aforo, estaciones meteorológicas y mantenimiento de redes
instrumentales);
● Implementación de puestos de mandos locales y/o centro operativo
(seguimiento y análisis de los datos, desarrollo de modelos de simulación,
elaboración de pronósticos, definición de niveles -preaviso, aviso, alerta y
emergencia- en colaboración con las instituciones involucradas

2. La caracterización de riesgos con:


● Identificación de amenazas
● Identificación y análisis de vulnerabilidad
● Análisis de riesgos y reconocimiento de los escenarios de riesgo y
escenarios de desastres o crisis (estudios detallados de los niveles de
impacto potencial de un desastre y generación de mapas de riesgo)

3. La preparación, que es de gran importancia local y comunitaria


● Planificación y definición participativa de los protocolos de preparación y
respuesta: elección de respuestas apropiadas, pasos a seguir y zonas de
intervención, asignación de recursos, entidades responsables, usuarios y
beneficiarios de las acciones de respuesta.
● Organización y conformación de brigadas
● Establecimiento de mecanismos para la evacuación
● Fortalecimiento de capacidades para el manejo de albergues y atención
primaria ante desastres
● Programas de capacitación comunitaria en zonas expuestas –de carácter
específico- involucrando los diferentes segmentos de la población –líderes,
voluntarios, mujeres, población escolar, etc.

4. La comunicación
● Definición de un sistema y mecanismos de comunicación: circulación de la
información, transmisión de datos, emisión de alertas y alarmas y
coordinación de comunicaciones en situaciones de emergencia, sistemas
de radiocomunicación en caso se requiera, etc.
● Divulgación de información general sobre SAT, las alertas y mensajes
relacionados con el monitoreo y pronóstico y sobre las condiciones de
riesgo socio-natural del área, promoviendo además la participación de los
medios masivos de información.
Los SAT deben ser concebidos como estructuras multisectoriales y multi-institucionales,
que teniendo conocimiento del territorio y de los factores causales de los riesgos
existentes, usan pronósticos para responder de manera oportuna y eficiente en caso de
que ocurra un evento de gran intensidad. Hablamos de tres tipos actores:

● Instituciones científicas y técnicas: encargadas fundamentalmente del estudio y


monitoreo de los eventos naturales; elaboración de modelos de pronóstico de los
eventos por intensidad, tiempo y región geográfica; proveer información técnica
correspondiente a la caracterización de los riesgos en los territorios.
● Autoridades, organismos de Defensa Civil, Protección Civil (o su equivalente en el
país) u organismos de atención y prevención de desastres: a cargo de establecer
operaciones y marcos relacionados con la preparación y la respuesta en caso de
dichos eventos.
● Comunidades, las cuales deben entender la naturaleza de las amenazas, sus
posibles intensidades y rangos, sus condiciones de vulnerabilidad, prepararse para
manejar eficiente y adecuadamente situaciones de crisis y reaccionar de acuerdo
con los protocolos establecidos y consensuados en conjunto con las autoridades y
las instituciones competentes (protección civil, defensa civil, comités de
emergencia, etc.) y fortalecer sus capacidades.

Por otro lado también, en cuanto a la implementación de los SAT, existen dos estrategias
que se han venido impulsando:

a) Los sistemas centralizados desde entidades de nivel nacional (y/o regional según
sea el caso); en donde se utiliza la estructura del sector defensa civil (comités
regionales, provinciales y distritales de defensa civil) para llevar a cabo las
diversas actividades y emitir las alertas usando los medios masivos de
comunicación (radio, prensa, TV, etc.), y las instituciones nacionales de monitoreo
y pronóstico climático como el SENAMHI.
b) Los sistemas comunitarios descentralizados, que se caracterizan por ser operados
desde una red de voluntarios (sea la población, jóvenes voluntarios, escolares,
etc.) empleando equipos muy simples para el monitoreo de condiciones
hidrometeoro lógicas, así como redes de radiocomunicación.

Alcance de los sistemas de alerta temprana

Gran parte de la conceptualización y de la aplicación de los sistemas de alerta temprana


sigue centrándose en los desastres que se producen en forma repentina o en intereses
sectoriales individuales. Sin embargo, los desastres deben abordarse con criterio amplio y
como eventos que obedecen a múltiples factores, cuyo inicio puede ser lento. De esta
manera se ampliará el foco de atención de la alerta temprana de manera de incorporar
problemas menos conocidos relacionados con amenazas y fenómenos a mayor plazo,
incluidos el cambio climático, los fenómenos de El Niño y La Niña, las amenazas de
incendio, las enfermedades contagiosas y los procesos sociales.

Venezuela por encontrarse en una zona intertropical, el clima es predominantemente


cálido. Esta ubicación geográfica conduce además, a que solo se registren dos estaciones
o períodos del año, el lluvioso y el periodo seco. Quiere decir que en Venezuela uno de
los fenómenos naturales más frecuente son las lluvias que ocurren, entre los meses de
mayo y octubre.

EXPERIENCIAS EN LA IMPLEMENTACIÓN DE UN SAT EN EL ESTADO VARGAS

(puede comprobarse que la experiencia en venezuela con respecto a las (SAT)


carecen de dispositivos apropiados de "alerta" generando con ello respuestas
inadecuadas, ineficientes y lentas un ejemplo claro de esto es lo ocurrido ) A
mediados de Diciembre de 1999, las intensas lluvias que tuvieron lugar a lo largo de la
costa central de Venezuela causaron torrenciales e inundaciones que afectaron a gran
parte de la población. Entre la infraestructura afectada por este desastre se cuenta el
campus de la Sede de la Universidad Simón Bolívar en Camurí Grande, que perdió el
80% de su planta física y el 90% de su dotación y equipamiento, quedando incomunicada
por un buen tiempo, al igual que otras comunidades del estado Vargas.

En febrero del año 2005 un nuevo evento causó inundaciones sobre la región norte
costera aunque en menor grado que el evento del año 1999. En esta oportunidad, las
comunidades de Naiguatá y Camurí Grande y en particular esta última, resultaron
seriamente afectadas, quedando incomunicadas con el resto del estado por casi un mes.
Nuevas precipitaciones ocurridas durante los meses de Noviembre y Diciembre de 2010
causaron un número de casi 300.000 personas afectadas a nivel nacional, ocurriendo en
este caso un mayor impacto en gran parte del país. Numerosas familias establecidas en
zonas de alta peligrosidad y terrenos inestables tuvieron que ser desalojadas por
deslizamientos y derrumbes y reubicadas en varios refugios, especialmente en la zona
norte costera y los estados Zulia, Táchira y Mérida.

El proyecto del SATC-NC tiene entre sus antecedentes al proyecto PreDeReS


(Prevención de Desastres y Reconstrucción Social del Estado Vargas), desarrollado a
partir del año 2003 con financiamiento de la Unión Europea y el estado venezolano a
Desarrollo de un sistema de alerta temprano comunitario en el estado Vargas. Venezuela
169 través de CORPOVARGAS; entre sus componentes consideraba el desarrollo de un
sistema de alerta temprana para las zonas de Tacagua, La Zorra y Mamo, ubicadas en la
parroquia Catia La Mar, en la parte occidental del Estado Vargas. En ese proyecto se
instalaron 20 estaciones de medición de precipitación y caudal conectadas a un sistema
de transmisión satelital y centralizadas en una sala situacional, que permite obtener la
información en tiempo real y emitir alertas inmediatas en situaciones de peligro a las
autoridades competentes y a los organismos de respuesta encargados de velar por la
seguridad ciudadana

A partir de experiencias de logros y fracasos en la implementación de sistemas de alerta


en varias regiones del país, surge la iniciativa de realizar en el año 2009, con el apoyo de
la Embajada Británica, un conjunto de talleres con el objetivo de brindarle a la comunidad
herramientas para que esté mejor preparada ante riesgos hidrometeoro lógicos, al
conocer los fenómenos naturales que pueden ocasionar los aludes e inundaciones y
contribuyendo a minimizar el riesgo al disminuir la vulnerabilidad de la comunidad. Los
talleres dirigidos a la comunidad (que siguen evolucionando) fueron organizados en cuatro
sesiones de aproximadamente tres horas de duración cada una.

● En el primer módulo se contempla la sensibilización e identificación de las


amenazas que pueden afectar a la comunidad y se presenta información sobre lo
que significa un sistema de alerta temprana comunitaria ante amenazas
hidrometeoro lógicas.
● En la segunda sesión se trabaja con la comunidad para identificar cuáles son las
condiciones climáticas que pueden dar origen a las inundaciones y deslaves en la
zona, se interroga a los asistentes sobre las condiciones previas a las
emergencias o desastres ocurridos en el pasado y con ello se recogen insumos
para elaborar una guía de pronóstico comunitario, todo con el objetivo de
internalizar que una comunidad preparada es una comunidad que puede tomar
acciones que minimicen el peligro al que se encuentran expuestos cuando ocurren
eventos extremos.
● El tercer taller tiene como objetivo lograr que los participantes sean capaces de
construir y utilizar dos herramientas que pueden empoderar a la comunidad: la
primera es un mapa de amenazas realizado por ellos, a través de recoger las
experiencias pasadas, los lugares que fueron afectados y los lugares seguros, de
manera que la propia comunidad establece los lugares de refugio y las rutas de
escape frente a una posible inundación o alud torrencial; la segunda herramienta
es el pluviómetro comunitario, esencialmente un colector de agua, como puede ser
un embudo y un recipiente como una botella plástica de refresco al que se le han
realizado marcas que indican la cantidad de milímetros de lluvia que han sido
recogidos en un intervalo de tiempo.
● La cuarta sesión se dedica a establecer el protocolo de acción, a considerar cuales
son las labores que deben realizarse dentro del sistema de alerta temprana
comunitario, antes, durante y después de un evento, quienes son los responsables
de estas labores y cómo se van a realizar las acciones de enlace con los
organismos de respuesta del estado.

Las estrategias utilizadas para impartir dichos talleres, la evaluación de su impacto en las
comunidades y su grado de efectividad en la percepción del riesgo son tareas pendientes
que siguen en pleno desarrollo.

Conclusiones

La alerta temprana es un proceso, no una actividad aislada, y los participantes en este


proceso tienen que conformar un amplio y representativo sector de la sociedad. Aun
cuando la diversidad de la participación debe considerarse positiva, frecuentemente la
coordinación nacional y local del proceso de alerta temprana no es el adecuado.
La alerta en sí misma no tiene mucho valor. Lo fundamental es la forma en que
reaccionan las personas frente a ella. En definitiva, éste es el indicador de la eficacia del
sistema. El hecho de que exista un sistema de alerta temprana no debería crear una falsa
impresión de seguridad. En el diseño y aplicación de los sistemas de alerta temprana, se
debe prestar cuidadosa atención al último eslabón de la cadena, que es la respuesta a los
mensajes de alerta.

Aunque la experiencia en venezuela en la implementación de los sistemas de alerta


temprana fue frágil en un momento . A partir de las experiencias de logros y fracasos en
la implementación se puede afirmar que aún existen deficiencias en la implementación de
estos sistemas, un punto que debe ser pensado nuevamente es la necesidad de llegar
mejor a la población, ya que la mayoría de los SAT son técnicamente viables pero
presentan deficiencias para transmitir la alerta al público, aun cuando carece en casi su
totalidad de una evaluación rigurosa sobre la efectividad de su implementación, tomando
en cuenta las condiciones iniciales sobre las cuáles se desarrollaron dichas iniciativas y el
impacto de las mismas al evaluar la respuesta comunitaria ante la ocurrencia de eventos
recientes y posteriores al evento de 1.999
Organización Mundial de la Salud, 2015. Detección temprana, evaluación y respuesta
ante eventos agudos de salud pública: Puesta en marcha de un mecanismo de alerta
temprana y respuesta con énfasis en la vigilancia basada en eventos. Edición por la
Organización Panamericana de la Salud.
file:///C:/Users/ARMANDO/Documents/Vulnerabilidad/2015-cha-deteccion-temprana-
eventos-agudos.pdf

MINISTERIO DE EDUCACIÓN DE PANAMA, 2011. MANUAL: SISTEMAS DE ALERTA


TEMPRANA. http://www.unesco.org/new/fileadmin/MULTIMEDIA/FIELD/San-
Jose/pdf/Panama%20MANUAL%20INFORMATIVO.pdf

Naciones Unidas EIRD, 2004. Vivir con el Riesgo: Informe mundial sobre iniciativas para
la reducción de desastres. http://bvpad.indeci.gob.pe/doc/pdf/esp/doc2570/doc2570-
contenido.pdf

Bravo de Guenni, Lelys; Hernández Rafael José; Llatas, Isabel y Salcedo, Abraham,
(2011). Desarrollo de un sistema de alerta temprana comunitaria en el estado Vargas,
Venezuela. file:///C:/Users/ARMANDO/Downloads/1928-6170-1-PB%20(1).pdf

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