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Woods, Guy N .. Preguntas y respuestas (Open Forum Questions Book 1).

Universidad
Freed-Hardeman.

¿Es una violación de la enseñanza del Nuevo Testamento cantar canciones religiosas
con el acompañamiento de instrumentos de música en otros momentos y lugares
fuera de nuestros servicios de adoración habituales, como en el hogar, las bodas y
los ejercicios escolares?"

Creo firmemente que así es .


En mi opinión, la probabilidad de que Dios esté gravemente disgustado con la acción de
quienes lo hacen es muy grande.
Lamento profundamente que nuestro hermanos ocasionalmente suministren a los enemigos
de la verdad municiones para dispararnos en nuestras batallas con innovaciones para una
fe pura y una práctica impecable.

Un tratado escrito por un predicador de la Iglesia Cristiana, en defensa del uso de la música
instrumental en la adoración,contiene la siguiente declaración:
"Mientras discutía con at, dijo que estaba bien cantar canciones de gospel con el piano en
casa si lo hacías como pasatiempo".

Oh! pero qué hipócrita sería eso.

Solo piense que cantaría 'Qué amigo tenemos en Jesús' solo por pasatiempo.
O 'Te alabamos, Dios por el Hijo de tu amor', como un pasatiempo ...

"Recientemente, la iglesia de Cristo anti-instrumento en una convención de canto.


No usarían el piano para el servicio de la mañana porque no utilizan ninguno, pero movieron
un piano por el resto del día para la convención de canto.

Después de que terminó el servicio de canto, lo sacaron de nuevo. ¿Es esto consistente?

No, no lo es; y no mantengo ningún escrito para estos hermanos, ni buscaré justificar o
disculpar su práctica como se indicó anteriormente.
A menudo me he encontrado en debate con este cargo .
Los que hacen esto pueden intentar justificarlo; yo no puedo, y por lo tanto no lo intentaré.

Es mi posición que está mal en cualquier momento, en cualquier lugar,


y bajo cualquier circunstancia, intentar adorar a Dios con una canción al acompañamiento
de instrumentos mecánicos de música.

El tercer mandamiento del Decálogo prohibió en vano tomar el nombre del Señor:
"No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano; porque Jehová no lo tendrá por inocente
al tomar su nombre en vano "(Ex. 20: 7).

La frase "en vano" traduce un término hebreo que significa lo que se hace de una manera
frívola y frívola, sin la debida atención o atención a la naturaleza sagrada de la misma.
Los que pronuncian los nombres de Dios, Cristo, y dar voz a otros asuntos sagrados como
los que están involucrados en nuestras canciones de alabanza por "pasatiempo", violan, en
principio, el mandamiento anterior y son culpables de blasfemias.

No puedo escapar de la convicción de que cantar canciones religiosas al acompañamiento


de instrumentos de música para "pasatiempo" limita peligrosamente con lo prohibido en el
tercer mandamiento.

El hecho de que una melodía acompañe las palabras no cambia el principio ni mitiga la
seriedad del acto.

El esfuerzo, a veces hecho, de poner en paralelo ese canto con el uso de jugo de uva que
no sea en la mesa del Señor, falla por falta de relevancia.
Es cierto que el jugo de uva, cuando no se usa en relación con la Cena, no tiene un
significado religioso y puede usarse adecuadamente como bebida, ya que no mantiene
ninguna relación con la Cena.

Pero, esto no es cierto para los temas sagrados que caracterizan las canciones religiosas.
Los santos nombres de Dios, Cristo, el cielo; la doctrina de la gracia,la redención,
y salvación;la esperanza del cielo y de la vida eterna, temas frecuentes en nuestros
cancioneros poseen espiritual y significado religioso, en todas partes y en todo momento.

Cualquier uso de ellos, por lo tanto, debe ser sagrado o profano.


Si el uso en cualquier caso es sagrado, la música instrumental para el acompañamiento de
la misma es incorrecta, como hemos demostrado en otra parte; Si el uso es profano, la
acción viola el principio expresado en los solemnes edictos de Dios emitidos desde el Sinaí.

Muchas de las canciones en nuestros libros son himnos de oración;


y, otros son direcciones y atribuciones de alabanza a Dios y a Cristo.
Entre muchos cientos de tales canciones están,
"Salvador, concédeme descanso y paz"
"Salvador como un pastor guíanos"
"Alabadle, alabadle", "Más puro de corazón"
"Llévame a casa" y "Mi fe te admira".

¿Cómo podría uno cantar aceptablemente estas canciones,


cuando hay ausencia de dedicación y consagración de ellos a Dios; y se pronuncian
simplemente "para pasatiempo"?

Es difícil ver cómo tal es mucho menos que un uso profano y sacrílego de nombres
sagrados y cosas. Seguramente, el curso seguro y prudente es abstenerse de cantar
canciones religiosas cuando se utilizan instrumentos de música.

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