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GOBIERNO DEL ESTADO DE BAJA CALIFORNIA SUR

SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA

DIRECCIÓN DE PROFESIONES, EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR Y SUPERIOR


BENEMÉRITA ESCUELA NORMAL URBANA “PROFR. DOMINGO CARBALLO FÉLIX”
LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PRIMARIA, PLAN DE ESTUDIO 2012.

VII SEMESTRE
CICLO ESCOLAR 2020-2021

CURSO:
PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA ESCOLAR (OPTATIVO)

COORDINADOR:
PROFR. RICARDO MEZA ARCE

TRABAJO A ENTREGAR:
ESTRATEGIAS PARA PREVENIR LA VIOLENCIA EN TU ESCUELA.

NORMALISTAS:
KARINA GPE. GONZÁLEZ CESEÑA
MARÍA GPE. HIGUERA MATA
YÉSICA LISET OCHOA RAMOS
MA. FERNANDA OLACHEA VALDEZ

4°C
GENERACIÓN 2017-2021

LA PAZ, BAJA CALIFORNIA SUR, 23 DE ENERO DEL 2021


ESTRATEGIAS PARA PREVENIR LA VIOLENCIA EN TU ESCUELA.

 Con ayuda del diagnóstico anterior identifica los tipos de violencia que se pueden
prevenir desde la escuela.

Como se hizo mención en el trabajo anterior a este, derivado de las


jornadas de práctica puestas en marcha en la Escuela Primaria Álvaro Obregón
Salido, se puede describir lo siguiente:

Dentro de las manifestaciones más comunes de la violencia que se presentan en


la escuela, se observó que debido al contexto en el cual se encuentra inmersa la
institución, los alumnos, sin importar edades, desde los primeros hasta los grados
superiores suelen tener conductas desafiantes, así como a demostrar agresividad,
en su mayoría no respetan a las personas que imponen o son una figura de
autoridad dentro de la escuela.

En cuanto a lo respectivo referente a las manifestaciones más comunes que


se presentan en la escuela primaria, de manera general se pudo observar que las
conductas que niños más pequeños tienen acceso y observan en sus hermanos
mayores, o familiares tienden a repetirlas, los alumnos de grados superiores de
igual manera, realizan acciones un poco más explicitas. De acuerdo a lo
observado durante esta jornada de práctica, puede decirse que, lamentablemente,
la ausencia de valores se hace presente en los alumnos que asisten a esta
institución, por lo que los tipos de violencia que más suelen ser notables dentro de
la institución son los siguientes:

La violencia interpersonal (violencia familiar, que incluye menores, pareja y


ancianos; así como violencia entre personas sin parentesco).
La violencia colectiva (social, política y económica).

Dentro de estos dos grupos, cabe mencionar que se considera que


específicamente dentro de esta institución se hacen más notables los siguientes
tipos de violencia escolar, los cuales pueden ser prevenidos si se tratan de la
manera adecuada:

Bullying verbal
Bullying social
Bullying físico

En adicción con lo antes descrito, cabe rescatar que esto no es un sinónimo


de que todo está perdido o que la situación por la cual atraviesa la escuela no
tiene solución; en contrario, esta situación es una de las razones por las cuales se
debe de poner mayor énfasis en la parte de la educación de los alumnos, y no es
referencia a la parte académica como tal, sino a la parte humana, la carencia de
valores en las nuevas generaciones puede llegar a ser notable, dentro de estos
comportamientos suelen entrar diversos aspectos que influyen de manera directa
en la personalidad del alumno.

Prevenir la violencia es responsabilidad de toda y cada una de las personas


que conformamos nuestra sociedad. Cabe destacar que, cada institución es
diferente, puesto que a ella asisten diverso tipo de alumnado, que conforma la
comunidad escolar, recordemos que, no todos los grupos son iguales, cada uno
está conformado por alumnos que tienen características, necesidades, e intereses
distintos, por lo que los tipos de violencia existentes dentro de cada una de las
escuelas puede ser distintos. Prevenir la violencia no es una tarea de un
momento, es de toda la vida y en todo lugar en los distintos roles que nos toca
desempeñar: como jóvenes, niños, niñas, padres y madres de familia,
profesionales, vecinos y vecinas, miembros de una familia, otros.

El hogar y la escuela es uno de los principales factores de prevención, es


desde la familia y la escuela donde se debe educar para eliminar determinadas
actuaciones violentas. Se deben corregir rabietas y no consentir modos de
comportamientos agresivos. Se debe establecer un compromiso ampliamente
asumido por profesores de enseñar temas de comportamiento no violento. Desde
el centro también se deberá corregir distintos comportamientos agresivos,
mostrarse cercano con los alumnos y concienciar sobre el uso de la no violencia
para resolver conflictos de la vida diaria.

Las siguientes son algunas medidas que se pueden tomar en cuenta apara
prevenir los tipos de violencia antes mencionados:
Fortalecer las actividades formadoras de una cultura cívica y de la legalidad
que promuevan el respeto a las normas en el entorno escolar y el
conocimiento de las sanciones aplicables a conductas negativas.

Ante los alumnos violentos lo mejor es actuar con mano dura pero con
afecto, fomentando su integración y nunca su discriminación, ya que esta
última sólo sería un motivo más para fomentar su violencia.

Establecer y debatir una serie de normas y reglamentos que sea aceptada


por todos los afectados: profesores, alumnos y padres.

Para prevenir la violencia escolar conviene tener en cuenta que las condiciones
de riesgo y de protección que sobre ella influyen son múltiples y complejas.
Además, que es preciso analizarlas desde una perspectiva evolutiva y a distintos
niveles, incluyendo, junto a la interacción que el alumnado establece en la
escuela, la que existe en la familia, la calidad de la colaboración entre ambos
contextos, la influencia de los medios de comunicación, o el conjunto de creencias,
de valores y de estructuras de la sociedad de la que forman parte. Cuando se
analiza cada caso de violencia escolar desde esta perspectiva, suelen encontrarse
incontables clases de riesgo y escasas o nulas condiciones protectoras en cada
nivel y desde edades tempranas.

Tomando en consideración lo antes mencionado, es importante destacar que,


el trabajo de prevención no es una tarea sencilla, por lo cual, se requiere de un
esfuerzo muy grande, es un trabajo que debe de realizarse de manera conjunta o
colaborativa, puesto que como sabemos las bases de la educación, los valores, el
fundamento de la ética y la moral, si, pueden enseñarse o impartirse dentro de una
institución académica; sin embargo, hay que recordar que los niños desde
pequeños aprende, y lo hacen mediante el ejemplo que nosotros como personas
adultas, ene este caso docentes en formación inicial les brindamos; por lo que es
de suma importancia que estemos preparados para poder enfrentarnos a los
nuevos retos que se nos presenten y saber cómo darles solución o aportar nuestro
granito de arena.

 Investiga y reflexiona sobre el papel de la escuela y los maestros ante los


diversos tipos de violencia que se identificaron.

A lo largo de ésta asignatura estuvimos reflexionando acerca de cómo


identificar, prevenir y ayudar a los alumnos que sufren de violencia escolar; ya
sabemos que La violencia escolar es aquella agresión física, psicológica o verbal
que se da dentro del ambiente escolar, ya sea en la propia escuela o alrededores.

Nuestros alumnos deben asistir a la escuela y sentirse protegidos, ser feliz


y aprender de manera armónica, convivir y desarrollarse en un espacio sano y
seguro; así que parte de nuestra tarea es cuidar su integración física y emocional.

Los problemas del acoso escolar suelen venir marcados por brotes de
violencia en los menores. Para que los alumnos se integren en las escuelas y
aprendan normas de convivencia es necesario fomentar valores como el respeto y
las buenas relaciones.

Para evitar la violencia escolar lo más importante es apostar por la


prevención en los menores. Actuar antes de que se desarrolle el problema de
violencia. Una de las cosas más importantes para erradicar la violencia de las
escuelas es trabajar la educación emocional.

Se ha dado el caso en que en muchos de los estudiantes tienen dificultad


para pedir ayuda, en este proceso se les brinda la oportunidad de expresar de
manera escrita sus sentimientos, propósitos, miedos y dificultades. A partir de lo
anterior, el docente genera un ambiente de confianza de tal forma que pueda
involucrase en la situación problema y actuar como mediador. La mediación en el
ámbito educativo aparece como una herramienta útil para mejorar la
comunicación, el clima escolar y la formación integral del alumno. Para que sea
posible una acción mediadora ante cualquier situación Blanchard (1997)
recomienda unas condiciones previas como:
Aceptación, confianza mutua y respeto.
Un clima de relaciones afectuosas que contribuya a dar seguridad y
a formar una imagen positiva en los estudiantes.
Una intervención que reta a los alumnos y les ofrece alternativas
para mejorar.
Reconocimiento de las capacidades de los estudiantes, por parte del
docente, para crearles confianza y que puedan avanzar en su
proceso de formación.

Estas herramientas en las instituciones educativas mencionadas han


permitido que el docente actué de manera eficiente ante cualquier tipo de
violencia; aún más, establece fuertes vínculos de amistad con las personas
indicadas; apoya que los estudiantes actúen como pensadores activos que
participan, defienden opiniones, escuchan y argumentan; se da gran importancia
al diálogo, se favorece la comunicación entre compañeros y se elaboran
reconocimientos en forma grupal a partir de actos de violencia escolar.

A continuación, algunas herramientas útiles ante problemas que afectan la


convivencia en las instituciones educativas:

Utilizar lecturas que tenga como fin la reflexión y el rescate de


valores.
Desarrollar una relación afectiva.
La función del docente debe ser un seguimiento del proceso personal
de los estudiantes.
Se debe resaltar lo positivo de cada estudiante para abordar
posteriormente los aspectos negativos.
Fomentar la participación de cada estudiante.
Canalizar inquietudes.
Favorecer la solidaridad y el apoyo mutuo.
Potencializar el apoyo de responsabilidades entre los miembros de
un grupo, asumiendo un juego de roles.
Lo anterior ha permitido reflexionar acerca de la práctica docente, hacer un
replanteamiento de nuestra autonomía profesional, transformando la enseñanza
tradicional basada en la transmisión de contenidos en un proceso de enseñanza
constructivo, formativo, ético y crítico, que se involucra en situaciones contextúales
y favorece la convivencia, que no olvida a la persona como objetivo esencial de la
profesión docente.

Es importante realizar unas reglas de convivencia claras en el aula. Tener


pautas establecidas es una forma de proteger ante los conflictos escolares.
Conocer las reglas internas del establecimiento escolar, que cosas se pueden
hacer y qué cosas no es fundamental para un buen clima de convivencia. Premiar
el cumplimiento de dichas normas, en lugar de castigar el no cumplimiento puede
favorecer a largo plazo la adherencia a las mismas.

Entonces, ¿Cómo prevenir la violencia en el centro escolar?

El hogar y la escuela es uno de los principales factores de


prevención, es desde la familia y la escuela donde se debe educar
para eliminar determinadas actuaciones violentas. Se deben corregir
rabietas y no consentir modos de comportamientos agresivos.
Se debe concienciar a los alumnos de que son iguales ante la ley,
que nadie es distinto a los demás y que nadie puede ser juzgado por
las apariencias, de ese modo se evita la discriminación por cualquier
motivo y se fomenta la tolerancia, en otras palabras, nadie puede ser
objeto de burlas, o maltrato.
Se debe educar con el ejemplo, es necesario que se instauren
valores como: cooperación, igualdad de sexo, respeto hacia las
personas mayores, empatía….
Se debe establecer un compromiso ampliamente asumido por
profesores de enseñar temas de comportamiento no violento. Desde
el centro también se deberá corregir distintos comportamientos
agresivos, mostrarse cercano con los alumnos y concienciar sobre el
uso de la no violencia para resolver conflictos de la vida diaria.
En los recreos, los profesores deben de vigilar y corregir cualquier
tipo de conducta, al igual que atender a alumnos que suelan estar la
mayoría de los días solos.
Proponer proyectos y planes para formación del profesorado (cursos,
congresos, jornadas y actividades), y participar en ellos para la
prevención de la violencia en las aulas.
Fortalecer las actividades formadoras de una cultura cívica y de la
legalidad que promuevan el respeto a las normas en el entorno
escolar y el conocimiento de las sanciones aplicables a conductas
negativas.
Ante los alumnos violentos lo mejor es actuar con mano dura, pero
con afecto, fomentando su integración y nunca su discriminación, ya
que esta última sólo sería un motivo más para fomentar su violencia.
Establecer y debatir una serie de normas y reglamentos que sea
aceptada por todos los afectados: profesores, alumnos y padres.

Así pues, como docentes nos enfrentamos ante una tarea difícil, pero
tenemos opciones para apoyar a nuestros alumnos, afortunadamente existe
mucha información y grupos de ayuda, es importante que nos informemos y
actualicemos, pidamos ayuda de ser necesario, pero sobre todo que nos
preocupemos, involucremos y nos ocupemos de nuestros alumnos que pasen por
esta triste situación.

Prevenir la violencia es responsabilidad de toda y cada una de las personas


que conformamos nuestra sociedad. No es una tarea de un momento, es de toda
la vida y en todo lugar en los distintos roles que nos toca desempeñar: como
jóvenes, niños, niñas, padres y madres de familia, profesionales, vecinos y
vecinas, miembros de una familia, otros.
 Busca en medios digitales las distintas estrategias para prevenir la violencia.

El primer paso es actuar ante una situación de violencia, ser empáticos y


brindar ayuda a quien lo necesite, no volvernos ciegos, sordos y mudos, actuar y
brindar ayuda.

Podemos prevenir la violencia y debemos hacerlo a partir de hoy mismo. Por ello
Unicef ha elaborado un plan con varias estrategias con las que toda la sociedad
puede colaborar para erradicar esta lacra que sufren día a día muchos pequeños
en sus hogares. El objetivo es Involucrar al público general y movilizarlo para la
acción. Alentarlos a entender la gravedad de esta situación y trabajar por ponerle
fin.

Estrategias para erradicar la violencia, según Unicef:

1. Dar apoyo a los padres y madres, los cuidadores y a sus familias Cuando
las familias, los cuidadores y los padres y madres reciben educación acerca
del desarrollo de los niños en la primera infancia, aumentan las
probabilidades de que ellos empleen métodos de disciplina positivos. De
esa manera se reduce el riesgo de violencia en el ámbito del hogar.
2. Ayudar a los niños y adolescentes a hacer frente a los riesgos y desafíos
Para reducir la violencia en las escuelas y las comunidades resulta
fundamental dar a los niños y adolescentes los conocimientos y aptitudes
necesarios para hacer frente y resolver las situaciones de riesgo y los
desafíos sin apelar a la violencia, así como a buscar el apoyo requerido
cuando se susciten situaciones de violencia.
3. Modificar las actitudes y normas sociales que fomentan la violencia y la
discriminación La manera más segura de evitar la violencia antes de que
ésta se desencadene consiste en modificar las actitudes y normas sociales
que esconden la violencia oculta a plena vista.
4. Promover y prestar apoyo a los servicios para los niños Si se alienta a los
niños a que busquen apoyo profesional adecuado cuando se susciten
incidentes de violencia, y a que denuncian los mismos, se les ayuda a
hacer frente y resolver mejor sus experiencias con la violencia.
5. Aplicar leyes y políticas que protejan a los niños La imposición y aplicación
de las leyes y políticas de protección de los niños constituyen un claro
mensaje a la sociedad en general de que la violencia no es aceptable y
será castigada.
6. Llevar a cabo tareas de obtención de datos e investigación Adquirir
conocimientos sobre la violencia (dónde ocurre, de qué manera, y cuáles
son los sectores de la población infantil más afectados, desagregados por
origen y edad) resulta imprescindible para planificar y diseñar estrategias de
intervención y fijar metas numéricas y plazos para vigilar el progreso
logrado y eliminar la violencia.

PLAN DE ACCIÓN DE MÉXICO.

ALIANZA GLOBAL PARA PONER FIN A LA VIOLENCIA CONTRA NIÑAS,


NIÑOS Y ADOLESCENTES

En este contexto, en julio de 2016 México fue uno de los primeros cuatro
países del mundo en sumarse a la “Alianza Global para poner fin a la violencia
contra Niñas, Niños y Adolescentes” (en adelante Alianza Global). Esta iniciativa
es promovida en distintos países, con el respaldo de organismos internacionales y
organizaciones de la sociedad civil en el marco de los Objetivos del Desarrollo
Sostenible (ODS). La Alianza está encabezada por una Secretaría con sede en
UNICEF en Nueva York, responsable de promover las actividades derivadas de
esta iniciativa, así como de proporcionar apoyo técnico a los países. El objetivo es
que los gobiernos, en colaboración con la sociedad civil, asuman que poner fin a la
violencia es fundamental y se comprometan a implementar, de manera prioritaria y
urgente, acciones concretas que visibilicen, prevengan, atiendan y eliminen la
violencia contra niñas, niños y adolescentes. Se trata de un llamado a la acción a
los gobiernos, sector académico, empresas, medios de comunicación,
organizaciones de la sociedad civil y religiosas, así como a la sociedad en general
para:

1. visibilizar, sensibilizar y tomar conciencia sobre el impacto que tiene la violencia


en la vida de las niñas, niños y adolescentes;

2. comprometerse en poner fin a todas las formas de violencia contra la niñez,


asumiendo que es un asunto prioritario y urgente;

3. poner en acción este compromiso, incrementando los recursos y acciones para


identificar, prevenir, atender y dar respuesta a todas las formas de violencia;

4. movilizar y articular a todos los sectores de la sociedad para actuar contra la


violencia y,

5. mejorar e implementar servicios, estrategias y programas coordinados,


integrales e intersectoriales que den evidencia de un cambio significativo en la
prevención, erradicación y atención a la violencia, en todas sus formas y ámbitos
donde se presenta.

Dichas estrategias abordan los factores de riesgo y de protección contra la


violencia en cuatro niveles de riesgo: individual, de las relaciones interpersonales,
de la comunidad y de la sociedad. Las siete estrategias cuyas iniciales forman el
acrónimo INSPIRE son:

1. Implementación y vigilancia del cumplimiento de las leyes;

2. Normas y valores;

3. Seguridad en el entorno;

4. Padres, madres y cuidadores reciben apoyo;

5. Ingresos y fortalecimiento económico;

6. Respuesta de los servicios de atención y apoyo; y

7. Educación y habilidades para la vida


Resumen de propuestas realizadas por niñas, niños y adolescentes
ENTORNO PROPUESTAS
Que los gobiernos y las instituciones se comprometan con acciones contra la
violencia y reconozcan que niñas, niños y adolescentes son titulares de derechos;
que su participación es importante para prevenir y detener la violencia, así como
para contribuir a la construcción de un México en paz.
• Sensibilizar a las y los políticos sobre las necesidades que presentan las niñas y
INSTITUCIONAL
niños.
• Eliminar la corrupción.
• Elegir gobernantes honestos y preocupados por el país y que cumplan lo que
prometen.
• Respetar, por parte de las autoridades, los derechos humanos.
• Garantizar los derechos de las niñas, niños y adolescentes.
• Crear centros de ayuda para niñas y adolescentes que han sido abusadas
sexualmente y que viven otros tipos de violencia.
• Denunciar la violencia familiar y otros tipos de violencia que se cometa contra
niñas, niños y adolescentes.
• Fomentar la igualdad de género y la no discriminación.
Fomentar en las escuelas la educación para la paz y aprender distintas habilidades
que mejoren sus relaciones interpersonales.
• Realizar campañas en las escuelas para fomentar la igualdad entre niñas y niños.
• Establecer programas contra la violencia escolar entre compañeros y de los
maestros hacia las y los alumnos.
ESCOLAR • Capacitar a las y los maestros sobre cómo tratar correctamente a las niñas y
niños.
• Abrir espacios de diálogo en las escuelas para aprender a resolver de manera
pacífica los conflictos.
• Recibir talleres para fortalecer su autoestima, conocer sus derechos y evitar la
discriminación.
• Contar con apoyo psicológico en las escuelas secundarias para detectar la
violencia en pareja.
• Desarrollar habilidades que permitan a los distintos integrantes de la familia
comunicar los diferentes puntos de vista de forma clara y respetuosa y así construir
relaciones más positivas en su familia.
FAMILIAR • Enseñar al interior de las familias que mujeres y hombres tienen los mismos
derechos.
• Difundir los derechos de niñas, niños y adolescentes en sus familias.
• Enseñar a padres y madres de familia cómo tratar y dialogar con sus hijas e hijos
para evitar el castigo corporal.
• Crear espacios libres de violencia para que desarrollen sus actividades
COMUNITARI cotidianas.
O • Garantizar la seguridad en las calles y contar con lugares seguros para poder
realizar actividades recreativas.
• Establecer en cada municipio lugares para denunciar casos de violencia y donde
también se impartan talleres a todas las personas para identificar y prevenir la
violencia
Save the Children:
Save the Children hacemos un llamado a todos los sectores de la sociedad a
asumir una responsabilidad colectiva para generar espacios libres de violencia, en
donde las niñas y los niños puedan sentirse seguros y desarrollar su potencial, en
donde la vida y los derechos de las mujeres sean protegidos. Gobierno, empresas,
escuelas, líderes comunitarios, familias, todas las personas y las instituciones,
tenemos que trabajar juntas para logarlo. 

Este programa debe ser parte del Proyecto de Gobierno actual y contar con
presupuesto público. Para hacerlo realidad necesitamos que la Cámara de
Diputados y Senadores se sumen apoyando esta iniciativa, así como a una
Secretaría de Hacienda sensible que destine presupuesto suficiente.   

El Programa de Emergencia que proponemos desde Save the Children, debe


llevar a cabo, entre otras, las siguientes acciones:

1. Activar esfuerzos nacionales, estatales y municipales para georreferenciar


zonas de riesgo, haciendo uso de sistemas de seguridad como el 911para
detectar información de donde prevalece la violencia de género y hacia la
niñez. 
2. Fortalecer medidas de seguridad garantizando la existencia de unidades de
atención especializada adecuadas y prestación de servicios para mujeres,
niñas y niños víctimas o en riesgo de violencia. 
3. Asegurar que todos los casos en los que no se conozca el paradero de una
niña, niño o mujer, inicien como una probable comisión del delito de
desaparición forzada o desaparición de persona cometida por particulares,
a fin de que los mecanismos de búsqueda y localización de personas
inicien de manera inmediata.
4. Armonizar y simplificar los procedimientos de la Alerta Amber en todo el
país. Se requiere una regulación clara que permita su activación oportuna y
eficiente. 
5. Aprovechar las tecnologías de la información para asegurar la mayor
difusión posible de la Alerta Amber entre la sociedad, por ejemplo, mediante
un sistema que haga llegar a cada teléfono móvil la notificación de alguna
desaparición. Para lograr efectividad, esto debe estar acompañado de
claridad ciudadana sobre los canales para dar aviso a las autoridades.
6. Proteger los derechos de las personas víctimas y sus familiares cuando se
lleva a cabo una investigación, atendiendo a los derechos de
confidencialidad e intimidad, particularmente para evitar poner en mayor
riesgo a la niña, niño o mujer desaparecida.
7. Es necesario que las Alertas de Género y las acciones encaminadas a la
reducción de la violencia de género se vinculen con los mecanismos de
protección de la niñez como son los Sistemas Integrales de Protección a
Niñas, Niños y Adolescentes y las Procuradurías de Protección de Niñas,
Niños y Adolescentes. 
8. Tipificar el delito de feminicidio en todos los códigos penales estatales, y
asegurar que en la práctica se reconozcan y categoricen como tal.  
9. Fortalecer las capacidades institucionales de las Fiscalías Generales, de los
Ministerios Públicos y de las Procuradurías de Protección de la Niñez, para
gestionar coordinada y eficientemente los casos de vulneración a los
derechos de la niñez integrando la perspectiva de género.
10. Incrementar el presupuesto público federal, estatal y municipal para las
Procuradurías de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes.
11. En las escuelas de todo el país, generar, difundir y aplicar Protocolos de
Protección y Seguridad Escolar. En dichos protocolos se deben establecer
claramente los roles del personal docente, administrativo, de familiares, de
la policía, de dependencias públicas vinculadas y de las redes comunitarias
para garantizar la protección y salvaguarda de niñas y niños. 
12. Ratificar el Tercer Protocolo Facultativo de la Convención sobre los
Derechos del Niño y establecer un mecanismo o plataforma en la que niñas
y niños puedan denunciar directamente violaciones a sus derechos
humanos, así como los canales apropiados de atención. 
13. Garantizar la pronta impartición de justicia de todos los casos de niñas,
niños, y mujeres que han sido afectadas por la violencia, desaparecidas o
asesinadas. 

Además de acciones inmediatas como las anteriores, el Programa de Emergencia


para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar todas las formas de Violencia contra
las Niñas y los Niños, debe incorporar estrategias y acciones que generen
transformaciones profundas a mediano y largo plazo, entre ellas: 

1. Garantizar un entorno familiar y comunitario propicio para la protección,


bienestar y desarrollo de la niñez. Esto implica estrategias contra la
pobreza, que superen el asistencialismo y clientelismo, y que fomenten el
desarrollo autónomo y sostenible de las comunidades. Las leyes y
regulaciones laborales deben fortalecerse también para garantizar que las
personas, incluyendo mujeres y jóvenes, tengan empleos dignos.
2. Prohibir en la legislación nacional y local el castigo corporal y humillante
como forma de crianza de niñas y niños, y brindar a padres, madres y otros
cuidadores herramientas para criar a sus hijos desde la ternura.  
3. Mejorar la capacidad de las instituciones públicas para identificar y atender
casos de riesgos para niñas y niños en sus entornos familiares y
comunitarios, establecer medidas alternativas de cuidados, trabajar con las
familias para lograr la reintegración, y garantizar efectividad en la restitución
de derechos que les hayan sido vulnerados.
4. Garantizar que en la Nueva Escuela Mexicana se incorporen contenidos
que promuevan la igualdad de género y la construcción de paz.  
5. Implementar campañas de comunicación que generen consciencia y
transformación de las prácticas y actitudes patriarcales que violentan a las
niñas, niños, y mujeres.  
6. Promover la formación de las personas que trabajan en los medios de
comunicación para que contribuyan en la erradicación de los estereotipos
discriminatorios contra niñas, niños, y mujeres.  
7. Incrementar progresivamente el presupuesto del Sistema de Protección
Integral y Protección Especial de Niñas, Niños y Adolescentes en los tres
niveles de gobierno. 
8. Capacitar continuamente y de forma obligatoria a jueces, fiscales,
defensores públicos, abogadas/os, agentes de policía y funcionariado
público responsables de hacer cumplir la ley e impartir justicia a nivel
federal, estatal y municipal, acerca de los derechos de la niñez y la
perspectiva de género. 

Encabezado por el Presidente de la República, se debe lograr un Pacto Nacional


en el que funcionarias y funcionarios de las instituciones del poder ejecutivo,
legisladores, servidores del Poder Judicial, se articulen y colaboren con el objetivo
común de lograr que nunca más, ninguna niña, ningún niño y ninguna mujer, sea
asesinada por su edad y por su género. 

Por nuestra parte, como Save the Children reafirmamos nuestro compromiso para:

1. Cuidar la integridad de cada niña, niño y adolescente. 


2. Promover entre las niños y niños su auto protección.  
3. Impulsar un cambio cultural y de conciencia con las madres, padres,
docentes, aliados, socios, y con las autoridades, para promover una cultura
de paz y de patrones de crianza con ternura. 
4. Contribuir con recomendaciones de política pública, basadas en nuestra
experiencia. 
 Realiza estrategias didácticas para prevenir los tipos de violencia detectados en el
diagnóstico anterior a partir de pertinencia, factibilidad (pedagógico, normativo), y
accesibilidad.

Evitar la violencia dentro de las escuelas trabajando conjuntamente y creando


entre todos, adultos y niños, un ambiente sano, en el cual prevalezca el respeto,
libertad y la posibilidad de expresarse abiertamente sin miedos. Dirigido a:
Personal Docente y Administrativo, Padres de Familia y Alumnos.

Los objetivos principales son: Impulsar el pensamiento crítico, la inteligencia


emocional, la solidaridad, el compromiso y la tolerancia. Promover la educación en
valores, la educación intercultural, la educación cívica, la educación para la
democracia y la educación para la convivencia. Cuidar la motivación e implicación
de los alumnos, la cooperación, la interacción, creando un ambiente de trabajo
positivo para docentes y alumnos. Fomentar la comunicación, el diálogo, la
participación y el trabajo cooperativo entre padres de familia, alumnos y maestros.
Proponer proyectos y planes para formación del profesorado (cursos, congresos,
jornadas y actividades), y participar en ellos.

Estrategias didácticas para prevenir los tipos de violencia detectados en el


diagnóstico:
 Incluir en las sesiones de trabajo juegos cooperativos, juegos de simulación
y enfoque socioafectivo.
 Implementar programas de prevención e intervención. Buscar estrategias
que corrijan o prevengan la violencia escolar.
 Establecer y debatir una serie de normas y reglamentos que sea aceptada
por todos los afectados: profesores, alumnos y padres.
 Aplicar y cumplir las normas y reglamentos establecidos en la escuela.
 Fomentar la capacitación en temas que contribuyan a prevenir los
problemas de disciplina y agresividad.
 Compartir las experiencias pedagógicas referentes al tema.
 Mantener un buzón de sugerencias y de quejas siempre abierto.
 Formar una comisión especial de atención a la violencia entre iguales.
 Generar espacios de participación para las alumnas y los alumnos.
 Dar importancia al ambiente interno y externo de la escuela para prevenir la
violencia.

Resultados Esperados: Aumentar la convivencia entre alumnos por medio de


actividades y juegos que mejoren su entorno escolar. Disminuir la violencia,
mediante platicas, conferencias y participación entre los alumnos. Mediante el
buzón crear espacios para mejorar la convivencia entre los alumnos. Con las
comisiones especiales disminuir los problemas, la agresividad física y verbal entre
los alumnos.
 Elabora un folleto, en el que propongas estrategias didácticas para la prevención
de los tipos de violencia que se manifestaron en el diagnóstico.

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