Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Introducción:
Hoy veremos uno de esos curiosos pasajes que le pueden parecer extraños pero nos
entregaran valiosos principios de una fe ganadora.
El evangelio es el negocio de Dios y cada vez que nosotros evangelizamos, perleamos,
compartimos una célula, lo que estamos haciendo es VENDER UNA IDEA, negociamos
nuestra fe con otros, comercializamos el producto que Dios nos ha dado que la visón y
todos nosotros vendemos un producto llamado evangelio, a través de la visión; algunos
son buenos vendedores, otros regulares, PERO todos somos vendedores.
Cuando usted asiste a la iglesia, carga un biblia, habla evangélico, USTED ESTA
VENDIENDO LA IDEA DE QUE EL EVANGELIO ES BUENO Y FUNCIONAL, DE MANERA QUE
QUIEN LO VE A USTED DETERMINE COMPRARLO PORQUE LO NECESITA, pero si la gente
lo ve desesperado, afligido, angustiado, arruinado y enfermo nunca venderá su
evangelio, PORQUE COMO VENDEDOR NO PROYECTA UNA BUENA IMAGEN DE SU
PRODUCTO.
• El negocio que veremos hoy fue hecho entre dos grandes naciones hace ya 3.000
años. Israel necesitaba un producto del Líbano siendo en aquellos días Salomón el
rey de Israel, decidió enviar a sus ministros de economía al Líbano para hacer esta
negociación y la respuesta que este recibió nos enseña grandes principios para
activar una fe ganadora.
El rey del Líbano recibe la propuesta de venderle madera a Salomón para que este
construyera el hermoso templo de Jerusalén, maravilla arquitectónica del mundo
antiguo, lleno de oro, plata, piedras preciosas, pero la madera más fina del mundo
estaba en el Líbano (cedro del Líbano). Tan famoso es su cedro que si observas hoy la
bandera del Líbano encontrara que en medio de sus franjas rojas hay pintado un cedro,
caracterizando así que este es su producto más valioso.
• 2 Crónicas 2:11,16 Aquí hay escondidos extraordinarios principios para
desarrollar una fe ganadora.
Salomón está construyendo su proyecto más ambicioso “El templo de Jerusalén” obra
de hermosura nunca antes vista en todo el oriente PERO necesitaba peritos, ebanistas,
orfebres, plateros. Entonces manda a pedir ese personal al Líbano juntamente con el fino
cedro, ya que Israel no contaba con esa mano de obra calificada. La pregunta es ¿Cómo
sabia Salomón donde estaba la madera de cedro más fina? , durante siglos el Líbano
había hecho famosos sus cedros como la mejor madera del mundo y eso se llama
POSICIONARSE EN EL SECTOR. Para vender nuestro producto que es el evangelio
debemos aplicar los siguientes principios: