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Los escenarios comparten algunas aproximaciones en cuanto a que todos los rangos son
posibles, no se pueden descartar completamente ninguno. Lo que sí se puede hacer es
observar que en ambos se tiene mayor probabilidad de caer en los rangos medios, dentro de
los cuales la diferencia es de 2 grados Celsius que implican consecuencias muy diferentes
en el aspecto ambiental. En el escenario con un incremento menor de temperatura, se
prevén aumentos de nivel del mar, reducción de masas de hielo, incremento en picos
climáticos en todo el mundo, modificaciones sociales y de producción de alimento, etc.,
mientras que en el peor escenario estos cambios estarían modificando las condiciones de
prácticamente todos los ambientes naturales y sociales con efectos difícilmente reversibles.
b) ¿Qué consecuencias considera que son las más peligrosas y por qué? Justifique su
respuesta.
Dentro de los dos escenarios México es vulnerable ante situaciones como el aumento del
nivel del mar, sobre todo en la península de Yucatán, lo que implica pérdida de espacios
naturales y habitacionales inmensos; las sequías intensas e inundaciones fuertes pues se
provocan cambios en las precipitaciones que afectan al norte, centro y sur del país; La
producción agrícola se vería seriamente afectada dejando una crisis alimentaria en la mayor
parte del territorio. Lo que los diferencia es la magnitud del posible desastre, por ejemplo,
en el ejercicio del link sugerido se muestra un aumento de 2-2.5 ºC lo que implica ya
fuertes cambios, pero en la otra rueda el incremento es de 4-5 ºC por lo que serían
escenarios mucho más complicados para el país.
d) ¿Es necesario reducir las emisiones de CO2?, ¿por qué? Justifique su respuesta.
Con los posibles escenarios de emisión de gases que se explican en la gráfica inicial, es
necesario la reducción de GEI por los efectos del aumento en la temperatura del planeta.
Con las concentraciones actuales se prevén cambios climáticos graves en los próximos cien
años, por lo que si no se reduce la emisión de esos gases de forma inmediata, los efectos
serían devastadores, incluyendo potenciadores de estos cambios como la perdida de mantos
de hielo que deja expuesto el océano para que se caliente aún más, la liberación de las
reservas de carbono submarinas de la Antártida y o los nitrógenos del lecho marino, que
van a provocar un acelerado incremento en GEI y posibles cambios irreversibles.