BARQUISIMETO, FEBRERO 2021

LOS SACRAMENTOS FUENTE DE VIDA.

¿Cómo los sacramentos han sido fuente de vida para ti? (Testimonios)
Para mí como consagrado y sacerdote la vida sacramental es fundamental.
Siempre la eucaristía y la confesión me han sostenido y me siguen sosteniendo
encontrando en la consagración de las especies la razón de ser de mi consagración
bautismal y religiosa. Es una experiencia continua en el espíritu que me ayuda para
ayudar, es mi esencia, sin eso pudiera decir que mi razón de vida consagrada no tendría
razón de ser para actuar. La ordenación sacerdotal es mi acto esponsal con Cristo esposo
y la Iglesia Esposa llamado al ministerio desde el ministerio sacerdotal y eucarístico de
Cristo. También invoco el Espíritu santo que cada vez me confirme en la misión
recibida y la unción de enfermos me ha tocado en algún momento de peligro y
enfermedad. Puedo decir que mi vida es sacramental y para mí se ha transformado es
señal de vida para Cristo y para los demás.
P. Antonio Larocca, SMC.
La confesión cuando me ordené sacerdote pensé que iba a ser algo terrible, y
antes de concelebrar la primera misa, en Guanare, me tocó confesar por primera vez.
Dado que es un santuario mariano sucede que hay personas que pasan por allí y sienten
el deseo de confesarse, siendo que no lo han hecho por años. Me tocó una mujer como
de 23 años sin confesarse, otra como de 17 años sin confesarse, y estuvimos el Padre
Antonio y mi persona confesando por varias horas. Desde ese día considero que es
quizás lo más hermoso del ser sacerdote.
P. Javier Alson, SMC.
¿Cómo los sacramentos han sido fuente de vida para mí?
Para mí los sacramentos han sido una base muy esencial en mi vida, desde mi
bautismo, aunque estaba aún inconsciente de la gracia que recibía, fui ungido como
Sacerdote, Profeta y Rey –regalo que hoy en día agradezco al Señor- luego en mi
comunión, al ver como Jesús se hacía Pan Consagrado por mí, en un acto bello de
admirar. Pero es justo en el momento de mi confirmación donde realmente siento un
llamado más íntimo del Señor, un llamado más profundo, lleno de amor y de sacrificio,
en el momento no lo entendía y me escondía, pero poco a poco Dios se hizo entender y
yo respondí a su llamado. Ahora voy caminando por el camino donde se escucha la voz
del Señor, desde donde me llama, a veces, me pierdo en la inmensidad del camino, pero
el Señor me sigue llamando y reencuentro su voz para seguir caminando. Puedo decir
que los sacramentos son la fuente y/o base de la vocación, pues en ellos y por ellos me
siento llamado a seguir caminando, y en la gracia que estos me regalan encuentro
fuerzas para seguir…
Neyerson Rodríguez.
Comunidad María Corredentora.