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FRAMPTON, K. (1981). Historia crítica de la arquitectura moderna. En K. FRAMPTON, El estilo internacional, tema y variacionas 1925-1965.

Barcelona: Gustavo Gili . SOJA, E. W. (2008). Postmetrópolis. En E. W. Soja, La Tercera Revolución (págs. 117-148). Traficantes de
Sueños.

RESEÑA COMPARATIVA

En la primera mitad del siglo XX surgió la ciudad moderna, caracterizada por las profundas
transformaciones sociales y espaciales que replantearon los modelos de ciudad y la forma de ser
experimenta y habitada, todo esto como resultado de un contexto de industrialización, producción y
capitalismo, que generó el crecimiento de las urbes a gran escala. En el texto “El estilo internacional,
tema y variaciones” del arquitecto Framptontitulado contenido en su libro “Historia crítica de la
arquitectura moderna”, y el del geógrafo Edward Soja, titulado “La tercera revolución” del libro
“Posmetrópolís”; se establecen a grandes rasgos las problemáticas que ha traído este modelo de
ciudad.
Los libros mencionados establecen una crítica a los modelos de ciudad de la modernidad, en el
primero, del historiador y crítico de arquitectura moderna: Kenneth Frampton, se plasma un análisis de
la arquitectura moderna, respaldada con referentes urbanos y arquitectónicos, desglosados en
diferentes momentos, entre ellos el ”El estilo internacional, tema y variaciones, 1925-1965” (cap. III), en
el cual el autor, a través del relato histórico del estilo internacional, critica los modelos repetitivos de
este movimiento, sometiendo los proyectos del estilo internacional a un juicio de valor, apoyado de
ideas de arquitectos como Lovell, Neutra, Hitchcock Johnson, Niemeyer y Mayekawa. Cabe destacar
que este texto mantiene una postura crítica de la arquitectura moderna, apoyado en su mayoría con
citas de terceros, que dan cuenta y respaldan el pensamiento del autor, y por otro lado muestra los
proyectos en gráficos, lo que facilita el entendimiento del texto, enfocándose además en diferentes
partes del mundo, como América y Asia, saliéndose de lo comúnmente reconocido como el
eurocentrismo y ampliando el panorama.
En el segundo texto, del geógrafo Edward Soja, se manifiesta un enfoque más amplio y ambiguo de la
teoría del urbanismo, con teorías como la de Marx, sobre el ímpetu de un socialismo científico
revolucionario, y las de Comte frente al cientificismo social liberal Al igual que Frampton, Soja hace uso
de referentes, solo que, en este caso, el foco principal es Estados Unidos, específicamente en las
ciudades de Chicago y los Ángeles. También mantiene una estructura de tiempo y de espacio,
dividiendo la historia en momentos que marcaron una revolución para el desarrollo de la ciudad,
principalmente en el capítulo que nos concierne que es el de tercera revolución, perteneciente al
periodo de las industrias, y a los avances tecnológicos de la modernidad. Este texto cuenta con poco
acompañamiento de gráficos que faciliten el entendimiento sobre cómo la teoría de la ciudad
contemporánea se refleja en los modelos de ciudad, tales como diagramas, fotografías y planos,
considerando que, en últimas, las imágenes son el medio a través del cual comprendemos la
dimensión espacial de estas problemáticas de configuración urbana. Los textos abordan la modernidad
desde diferentes miradas, de cierta forma complementarias, por un lado, entender, los cambios de las
ciudades de Norte América tras las transformaciones sociales con el texto de Soja, y la explicación de
que esta industrialización trajo modelos pocos humanos y repetitivos, con el estilo internacional, en
Europa, América Latina y Asia con el texto de Frampton.
Frampton inicia su texto explicando las principales características del estilo internacional, enunciando
que su aparente homogeneidad era engañosa ya que su forma plana era modificada para responder a
diferentes condiciones climáticas. Parte de la premisa de que el estilo internacional nunca llegó a ser
auténticamente universal, pero había un enfoque general en cuanto a la técnica de peso ligero,
materiales sintéticos modernos que facilitaban su fabricación y con la flexibilidad de la planta libre, sin
embargo cuando no habían las condiciones tanto económicas ni culturales, se aplicaba un estilo
formalista, en el que generaban un disfraz a partir de formas aparentes del estilo internacional, blancas
y homogéneas, cuando en realidad estaban construidas por unos bloques de hormigón. Presenta
proyectos del estilo internacional que se ajustaban a la etapa europea de este movimiento, como la

Diana Isabel Velásquez Álvarez


FRAMPTON, K. (1981). Historia crítica de la arquitectura moderna. En K. FRAMPTON, El estilo internacional, tema y variacionas 1925-1965.
Barcelona: Gustavo Gili . SOJA, E. W. (2008). Postmetrópolis. En E. W. Soja, La Tercera Revolución (págs. 117-148). Traficantes de
Sueños.

casa de la Salud del Doctor Philip Lovell, cuya expresión arquitectónica responde a las principales
características del estilo internacional, cuyo interés radicaba en mejorar la salud del hombre a través
de la arquitectura. Después de la exposición de Hitchcock y Johnson en 1932, el estilo internacional se
extendió fuera de Europa y Norteamérica, y empezó a surgir en lugares tan lejanos como Sudáfrica y
Japón. También en Brasil la arquitectura moderna tuvo sus inicios en la sociedad formada a mediados
del siglo XX por Lucio Costa y Gregori Warhavchik, en ella también participó Le Corbusier como
consejero en el diseño del edificio para el Ministerio de Educación en Río de Janeiro, arquitectura que
no respondía a su contexto pues aplicó un estilo formalista.
Plantea el caso de Brasilia, propuesta de Costa a mediados de la década de 1950 que llevó a la
arquitectura brasileña a la crisis que acabaría por generar una reacción global contra los preceptos del
movimiento moderno, ya que se generó una indiferencia frente al clima por querer plantear edificios
con formas platónicas. Por otro lado, Japón, sometido a la influencia occidental durante más de
cincuenta años, estaba bien preparado para asimilar la arquitectura internacional que llegó en 1923
con la primera casa de hormigón armado de Raymond en Tokio, quien sí introdujo elementos
tradicionales del lugar, manierismo que se convertiría en el principal atributo de la arquitectura
japonesa. Concluye con las palabras de Mayekawa en 1965 en el ensayo titulado “Pensamiento sobre
la civilización en arquitectura”, relativas a que la arquitectura moderna debe estar basada en los logros
de la tecnología y la ingeniería modernas evitando que se convierta en algo inhumano, ya que está
pensada para resolver las necesidades humanas, para apuntar que la cultura japonesa tradicional
pudo sobrevivir en su esencia como única fuerza que resistió a los excesos tecnocráticos de occidente
de la era de estilo internacional, y esta etapa concluyó no solo en Japón sino en el resto del mundo, sin
embargo, los intereses por un particular grupo social se han mantenido en la historia, situación a la que
se refiere más claramente Edward Soja, como la modernidad capitalista.

Soja comparte a grandes rasgos lo que considera que es la metrópolis, representada con la alegoría
de la crisis de la modernidad que hemos aprendido a reconocer en las voces de Baudelaire, Benjamin
y Kafka [ CITATION Edw08 \l 9226 ]. También nos contextualiza acerca de los orígenes de la
conciencia colectiva de la modernidad, con la Europa postfeudal, la reclamación de la democracia
liberal expresada en la libertad, igualdad, fraternidad y los derechos universales del «hombre, en 1776
en Norteamérica y en 1789 en Francia, que se traducía en mayores derechos para la ciudad y el
espacio urbano.

El reconocimiento del espacio urbano como espacio social y el modernismo capital, exponen los
argumentos planteados por el autor, de ser esta la Tercera Revolución Urbana, desarrollada por la
relación entre los procesos de urbanización e industrialización con alcances a escala inigualables
históricamente, esto es tan importante que daría lugar a la relación de poder del capitalismo industrial
como una manera de producción principalmente urbana. Este periodo trajo nuevos grupos sociales
como el proletariado, y la burguesía capital, indispensables en la configuración de la ciudad de
Manchester, entre otras, ya que el proletariado había tomado los centros de la ciudad por sus fábricas
y almacenes en condiciones de baja salubridad, y la burguesía ocupaba las periferias con una
configuración expansiva y cómoda. El crecimiento de la ocupación de las fábricas y la limitación del
espacio llevó a las industrias a ubicarse en el exterior, y el centro pasó a zonas de privilegio de la
burguesía capital, ahora la ciudad se definía claramente por procesos mercantiles de la tierra que se
extendía hacia el exterior, desde el centro de la ciudad a los nuevos suburbios. Otro punto importante
de ese cambio colectivo de la ciudad es el replanteamiento de la modernidad por corrientes como la de
Marx y el socialismo científico revolucionario; la de Comte y el cientificismo social liberal que dio el
poder a los líderes, que eran de otras disciplinas como científicos y profesionales. Luego Soja nos

Diana Isabel Velásquez Álvarez


FRAMPTON, K. (1981). Historia crítica de la arquitectura moderna. En K. FRAMPTON, El estilo internacional, tema y variacionas 1925-1965.
Barcelona: Gustavo Gili . SOJA, E. W. (2008). Postmetrópolis. En E. W. Soja, La Tercera Revolución (págs. 117-148). Traficantes de
Sueños.

habla de la Escuela de Chicago y su estudio de la “ecología urbana” y las implicaciones que trajo sobre
la forma de estudiar la ciudad.

La Tercera Revolución Urbana supuso para Soja, y a diferencia de Frampton, no tanto el crecimiento
exponencial de las ciudades, sino también una reconfiguración de la expansión de la población urbana
y de la urbanización asociada en sociedades nacionales enteras.

Diana Isabel Velásquez Álvarez

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