SYLLABUS HERMETICAE 2.

48 (69)
"NOTICIAS DE LA FRATERNIDAD
o FAMA FRATERNITATIS "
Día 483 en la Senda de la Luz

Dominus, 13 de Enero de 2002

QUERIDO FRATER, QUERIDA SOROR:

SÍNTESIS DE LAS BODAS QUÍMICAS-Tercer Manifiesto

Sexto Día

El Sexto Día fue estudiado

en los Syllabus 2.35 a 2.38
y se corresponde con la
culminación de la Gran
Obra, representada por el
proceso alquímico que
permite crear los cuerpos
físicos, naturales y
renovados del Rey y de la
Reina a la cual está dirigida
esta obra con el nombre de
“BODAS QUÍMICAS”. Es en
este Día en el que logran
ascender los Siete Pisos
de la Torre del Olimpo.
Cada uno de estos Pisos
representa un Grado
Esotérico de las antiguas
Escuelas de Misterios Egipcios, denominados PASTOPHORIS,
NEOCORIS, MELANOPHORIS, CHISTOPHORIS, BALAHATE,
ASTRÓNOMO y PROFETA o SAPHENATH PANCAH.
I-ALGUNOS DATOS HISTÓRICOS SOBRE EL ROSACRUCISMO
APORTADOS POR EL FILÓSOFO RENÉ GUÉNON
He seleccionado para entregar en este Syllabus, la información proporcionada
por el filósofo orientalista René Guenón, - ampliamente conocido por los
simbolistas especialmente de ramas masónicas -, así como respecto de sus
creencias sobre este movimiento espiritual. Es necesario que los miembros de
nuestra Orden tengan conocimiento de lo que ha sido dicho por este Gran
Maestro, lo cual no constituye una “Verdad”, sino apenas lo que él creyó o
sospechó sobre el Rosacrucismo, no siendo él un verdadero Adepto Rosacruz.
Sus conclusiones son por lo tanto, parciales en relación a este asunto, pues
todo lo que ha escrito alrededor del Rosacrucismo, está teñido de prejuicios y
mala fe hacia las organizaciones esotéricas que se han dedicado a la
Rosacruz. No obstante sus peculiares opiniones, su obra es monumental, y
excepto por su exceso de soberbia y la forma dogmática en que sostiene sus
creencias, sus obras son altamente recomendables para leer y meditar.

Al escribir su segundo libro en 1921, denominado “El Teosofismo”, dedicó el

capítulo tercero “La Sociedad Teosófica y el Rosacrucianismo” a condenar a
estas dos ramas esotéricas. A pesar de esto , nos ha proporcionado
interesantes datos históricos, que son los que compartiremos con nuestros
estudiantes. Por ejemplo, en tal capítulo nos ha dicho que el título de Imperator,
era el del jefe de una sociedad secreta inglesa, la Order of the Golden Dawn in
the Outer (literalmente «Orden de la Aurora de Oro en el Exterior»). Que esta
Orden se presentaba como una «sociedad de ocultistas que estudian la más
alta magia práctica», y que «marcha de alguna manera paralelamente al
verdadero Rosicrucianismo»; que las mujeres eran admitidas en ella lo mismo
que los hombres, y la cualidad de miembro permanecía oculta. Que había en
ella tres oficiales principales: El Imperator, el Praemonstrator y el Cancellarius.

También comenta Guenón que esta Orden está estrechamente vinculada a la

Societas Rosicruciana in Anglia, fundada en 1867 por Robert Wentworth Little;
que ésta comprende nueve grados, repartidos en tres órdenes; siendo sus jefes
en número de tres como los de la Golden Dawn, y que llevan el título de
Magos. Nos informa que en 1901, sus jefes eran: W. Wynn Westcott, Supremo
Magus; J. Lewis Thomas, Senior Substituto Magus; S. L. Mac-Gregor Mathers,
Junior Substituto Magus (Cosmopolitan Masonic Calendar, p. 59).

Guenón nos dice que la Societas Rosicruciana no admite más que a masones
que posean el grado de Maestro entre sus miembros, cuyo número está
limitado a ciento cuarenta y cuatro, sin incluir los miembros honorarios; que
posee cuatro «Colegios», que están establecidos en Londres, York, Bristol y
Manchester. También que en Escocia existe una organización similar desde
1877, y que en Norteamérica, en 1880, se estableció otra rama; que ambas son
dos filiales de la sociedad inglesa, de la que, no obstante, son
administrativamente independientes.

También reproduce que en una carta dirigida al director de la revista

teosófica Lucifer, en julio de 1889, por el conde Mac-Gregor Mathers, que era
entonces secretario del Colegio Metropolitano de la Societas Rosicruciana y
miembro del Alto consejo de Inglaterra, se dice entre otras cosas: «Esta
Sociedad estudia la tradición occidental… Los conocimientos de práctica son el
privilegio de los más altos iniciados, que los mantienen en secreto; todos los
Hermanos mantienen secreto su grado. La Sociedad Teosófica mantiene
relaciones amistosas con ellos… Los estudiantes herméticos de la G.D.
(Golden Dawn) Rosicruciana, son, por así decir, sus representantes en el
exterior».

Dice Guenón que la publicación de esta suerte de manifiesto tenía como

meta principal desaprobar a una cierta «Ordo Rosis et Lucis» (Orden del Rocío
y de la Luz), otra sociedad inglesa supuestamente Rosicruciana, de la que se
había hablado precedentemente en la misma revista; esta última sociedad se
encontraba en competencia directa con la Golden Dawn y con la Societas
Rosicruciana, y sus miembros, que eran espiritistas en su mayor parte, eran
acusados de hacer «magia negra», según una costumbre que, por lo demás,
dice Guenón, estaba muy extendida en los medios teosofistas.

Dice Guenón que la carta del conde Mac-Gregor lleva las divisas siguientes:
«Sapiens dominabitur astris. — Deo duce, comite ferro. — Non omnis moriar.
— Vincit omnia veritas», de las que la última, cosa curiosa, es igualmente la
divisa de la H. B. of L., adversaria declarada de la Sociedad Teosófica y de la
Societas Rosicruciana. La carta concluye con estas palabras que le confieren
un carácter oficial: «Publicada por orden del Superior Sapere Aude,
Cancellarius in Londinense», a lo que sigue este post-escriptum bastante
enigmático: «Siete adeptos que poseen el elixir de larga vida, viven
actualmente y se reúnen cada año en una ciudad diferente».

Se pregunta Guenón :¿Era el Imperator de la G. D. uno de estos «siete

adeptos» misteriosos? Es muy posible, y tenemos otros indicios que parecen
confirmarlo; pero, sin duda, el «Superior Sapere Aude» no había autorizado
revelaciones más explícitas a este respecto.

Luego sigue Guenón diciendo que Olcott ha contado en varias ocasiones,

en el Theosophist y en sus libros, que Mme Blavatsky llevaba siempre consigo
una joya de Rosa-Cruz «que había recibido de un adepto». Reproduce Guenón
una carta de Olcott a Staiton Moses de 1875: «La Fraternidad (de los Rosa-
Cruz), en tanto que rama activa de la Orden verdadera, ha muerto con
Cagliostro, como la Francmasonería (operativa) ha muerto con Wren; lo que
aún queda no es más que la cáscara». Aquí, las palabras «rama activa de la
Orden verdadera» hacen alusión a un pasaje de las enseñanzas de la H. B. of
L., en el que se dice que «el término Rosa-Cruz no designa a la Orden toda
entera, sino sólo a aquellos que han recibido las primeras enseñanzas en su
prodigioso sistema; éste no es más que un nombre de paso por el cual los
Hermanos divierten y, al mismo tiempo, embaucan a la gente».

Finalmente Guenón dice: “No pretendemos entrar aquí en las controversias

relativas al origen y a la historia de los Rosa-Cruz verdaderos y falsos; en eso
hay verdaderos enigmas que jamás han sido resueltos de una manera
satisfactoria, y sobre los que los escritores que se dicen más o menos
rosicrucianos no parecen saber mucho más que los otros.”

Luego dedica Guenón unos párrafos al Gran Maestro FRANZ HARTMANN,

del cual dice lo siguiente: que nació en 1838 en Donauwerth, Baviera,
pretendiendo ser un Rosacruz, pero de otra rama distinta de las sociedades
inglesas de las que hemos hablado precedentemente. Hartmann manifestaba
haber «descubierto» una Fraternidad de verdaderos Rosa-Cruz en Kempten,
localidad célebre por sus mansiones encantadas, y donde murió en 1912.
Franz Hartmann fue el promotor de una «Orden de la Rosa-Cruz Esotérica».

El Dr Hartmann publicó un gran número de obras, entre ellas el libro titulado:

(En el Pronaos del Templo de la Sabiduría) «que contiene la historia de los
verdaderos y de los falsos rosicrucianos, con una introducción a los misterios
de la filosofía hermética», y que dedicó a la duquesa de Pomar. En 1887, hizo
aparecer en Boston, centro de la rama norteamericana de la Order of the
Golden Dawn in the Outer, una novela cuyo título era (Una Aventura en la
Mansión de los Rosacruces), y que contiene la descripción de un monasterio
teosófico imaginario, supuestamente situado en los Alpes; y el autor cuenta que
este monasterio depende de la Orden de los «Hermanos de la Cruz de Oro y
de la Rosa-Cruz», y que su jefe lleva el título de Imperator. Guenón relaciona
esta novela con la “Rosa Cruz de Oro” de Alemania, fundada en 1714 por
Samuel Richter, más conocido por Sincerus Renatus. Su jefe ostentaba
efectivamente, como más tarde el de la Golden Dawn, el título de Imperator,
heredado de organizaciones rosicrucianas anteriores, y que se remontaría
incluso hasta el origen del mundo, si se ha de creer a algunos relatos
legendarios, ya que se encuentra en el Clypeus Veritatis, que data de 1618,
¡una lista cronológica de los Imperatores desde Adán!

También comenta Guenón que la «Rosa-Cruz de Oro», en la que algunos

han creído reconocer ya un carácter político, no existe ya desde hace mucho
tiempo; que fue remplazada en 1780 por los «Hermanos Iniciados de Asia»,
cuyo centro estaba establecido en Viena, y cuyos superiores se intitulaban, por
alusión al comienzo del Apocalipsis: «Padres y Hermanos de las Siete Iglesias
Desconocidas de Asia”.

Comenta Guenón que el relato novelístico del D r Hartmann tuvo una

consecuencia: en septiembre de 1889, se constituyó en Suiza una sociedad,
bajo el nombre de Fraternitas, para materializar el establecimiento teosófico-
monástico que él había visualizado. El D r Hartmann tuvo como asociados, en
ese asunto al Dr R. Thurmann, al Dr A. Pioda y a la Condesa Wachmeister; esta
última era una sueca amiga íntima de M me Blavatsky. En cuanto a la «Orden de
la Rosa-Cruz Esotérica», la otra creación del D r Hartmann, parece haber
estado en relaciones continuas con la «Orden Renovada de los Illuminati
Germaniae», fundada o reorganizada por Leopoldo Engel de Dresde. Esta
última Orden, dice Guenón, se remite al Iluminismo de Weishaupt, al que, sin
embargo, no la vincula filiación ninguna directa. Dice que hubo también
relaciones ciertas entre esa «Rosa-Cruz Esotérica» y la «Orden de los
Templarios Orientales» (OTO), fundada en el año 1895 por el D r Karl Kellner, y
propagada sobre todo, después de la muerte de éste, sobrevenida en 1905, por
Theodor Reuss; parece incluso que la «Rosa-Cruz Esotérica» devino
finalmente el «Círculo Interior» de los «Templarios Orientales».

Guenón nos comenta también que “en nuestra época el Rosicrucianismo ya

no tiene una significación bien definida: una multitud de gentes que se intitulan
«Rosacruces» o «Rosicrucianos» no tienen entre sí ningún lazo, ni tampoco lo
tienen con las antiguas organizaciones del mismo nombre, y ocurre
exactamente lo mismo con aquellos que se intitulan «Templarios». Aún sin
tener en cuenta los grados masónicos que, en diversos ritos, llevan el título de
Rosa-Cruz o algún otro que se deriva de él, podríamos dar, si no se estuviera
fuera de nuestro tema, una larga lista de sociedades más o menos secretas
que no tienen apenas en común más que esta misma denominación,
acompañada lo más frecuentemente por uno o varios epítetos distintivos.

Con respecto a la Orden Rosacruz AMORC, dijo Guenón: “Señalaremos

sólo una de esas sociedades, que se intitula A. M. O. R. C. (Ancien Mystic
Order of the Rosy-Cross), fundada en 1916 «con el fin de salvar la Civilización»
(sic); tenemos ante nuestros ojos una circular que anuncia que se esta
constituyendo una rama francesa, y que «un Enviado especial vendrá de los
Estados Unidos en mayo (1921) para dar la Iniciación y abrir los trabajos»
(después se nos ha dicho que su viaje no había podido tener lugar). Esta
organización tiene a su cabeza un Imperator, pero que, naturalmente, no es el
mismo que el de la Golden Dawn; no está vinculada al Teosofismo, pero
sabemos que los teosofistas son ya bastante numerosos entre sus adherentes.
La A.M.O.R.C. no parece haber tenido gran éxito en Francia; sin embargo, su
jefe llegó a París en 1927, e incluso fue solemnemente recibido, el 12 de julio,
por el "Gran Colegio de los Ritos", es decir, el Supremo Consejo del Gran
Oriente de Francia, lo que es tanto más singular cuanto que éste no tiene
relación alguna con las organizaciones masónicas americanas, que lo
consideran como "irregular"; quizá la Orden Rosacruciana en cuestión tampoco
posea demasiada "regularidad".

En su quinto libro publicado en 1925, denominado “El Esoterismo de Dante”,

dedicó unos párrafos al Rosacrucismo. Dijo que los jefes de diferentes
organizaciones de origen rosacruciano, a partir del siglo XVI, han llevado el
título de Imperator; y que hay razones para pensar que la Fede Santa, en los
tiempos de Dante presentaba algunas analogías con lo que fue más tarde la
«Fraternidad de la Rosa-Cruz», si es que ésta no se deriva incluso más o
menos directamente de aquella.

En relación a la publicidad de la Rosa Cruz en Alemania, dijo Guenón en su

“Dante”: “se sabe que el sello de Lutero llevaba una cruz en el centro de una
rosa; se sabe también que la organización Rosacruciana que manifestó
públicamente su existencia en 1604 (aquella con la que Descartes buscó
vanamente ponerse en relación) se declaraba claramente «antipapista». Pero
debemos decir que esa Rosa-Cruz de comienzos del siglo XVII era ya muy
exterior, y estaba muy alejada de la verdadera Rosa-Cruz original, la cual no
constituyó nunca una sociedad en el sentido propio de esta palabra; y, en
cuanto a Lutero, no parece haber sido más que una suerte de agente
subalterno, sin duda incluso bastante poco consciente del papel que tenía que
jugar; por lo demás, estos diversos puntos nunca han sido completamente
elucidados.”

También relaciona Guenón al Rosacrucismo con el Templarismo. Nos dice que

se constatan varias manifestaciones importantes de las doctrinas tradicionales
que coinciden, en pocos años, con la destrucción de la Orden del Temple; que
existe una relación incontestable, aunque bastante difícil de determinar con
precisión, entre estos diversos acontecimientos. Y que por consiguiente, en los
primeros años del siglo XIV había, tanto en Francia como en Italia, una
tradición secreta («oculta» si se quiere, pero no «ocultista»), la misma que
debía llevar más tarde el nombre de tradición Rosacruciana. También agrega
que la denominación de Fraternitas Rosœ-Crucis aparece por primera vez en
1374, o incluso, según algunos (concretamente Michael Maier), en 1413; y la
leyenda de Christian Rosenkreuz, el fundador supuesto cuyo nombre y cuya
vida son puramente simbólicos, quizás no fue enteramente constituida más que
en el siglo XVI; pero que el símbolo de la Rosa-Cruz es ciertamente muy
anterior.

Interesante es la mención a la “Paz Profunda”, aspiración sublime de los

Rosacruces. En su sexto libro publicado en 1926, “El hombre y su devenir
según el Vedanta”, nos dice sobre la Tranquilidad: “Es la «Gran Paz» (Es-
Sakînah) del esoterismo islámico, o la Pax Profunda de la tradición
Rosicruciana; y la palabra Shekinah, en hebreo, designa la «presencia real» de
la Divinidad, o la «Luz de la gloría» en y por la cual, según la teología cristiana,
se opera la «visión beatífica».

Otro comentario de singular valor en el libro anteriormente mencionado es el

que dice: “Del mismo modo, Leibnitz, que había recibido algunas enseñanzas
esotéricas (bastante elementales por lo demás) de fuente Rosicruciana,
designa los tres principales atributos divinos como «Sabiduría, Poder,
Bondad», lo que es exactamente la misma cosa, ya que «Belleza» y «Bondad»
no son en el fondo (como se ve en los griegos y concretamente en Platón) más
que dos aspectos de una idea única, que es precisamente la de «Armonía».”

Asimismo añade en su libro sobre el Vedanta, que : “De la misma manera, en

las tradiciones esotéricas occidentales, se dice que los verdaderos Rosa Cruz
se reúnen «en el Templo del Espíritu Santo, que está por todas partes». —
Entiéndase bien que los Rosa Cruz de que se trata no tienen nada de común
con las múltiples organizaciones modernas que han tomado el mismo nombre;
se dice que, poco después de la guerra de los Treinta Años, los Rosa Cruz
abandonaron Europa y se retiraron a Asia, lo que, por lo demás, puede
interpretarse simbólicamente más bien que literalmente.”

René Guenón arriesga su propia hipótesis sobre el origen del Rosacrucismo.

Nos dice en su “Dante” que: “pero el origen real del Rosacrucianismo, ya lo
hemos dicho, son precisamente las Órdenes de Caballería, y son ellas las que
formaron, en la edad media, el verdadero lazo intelectual entre Oriente y
Occidente.”

En su séptimo libro publicado en 1927, “El Rey del Mundo”, comenta sobre los
Rosacruces: “después de la destrucción de la Orden del Temple, el
Rosacrucianismo, o aquello a lo que se debía dar este nombre después,
continuó asegurando el mismo lazo, aunque de una manera más disimulada...
es sorprendente que varios autores hayan afirmado precisamente, que, poco
después de la guerra de los Treinta Años, los verdaderos Rosa-Cruz
abandonaron Europa para retirarse a Asia; y recordaremos, a este propósito,
que los Adeptos rosacrucianos eran en número de doce, como los miembros
del círculo más interior del Agarttha, y conformemente a la constitución común
a tantos centros espirituales formados a la imagen de ese centro supremo.”

Nos llama poderosamente la atención la escasa atención que ha dado Guenón

al simbolismo de la Rosa Cruz, aunque se entiende por su prejuicio contra todo
aquello de lo cual él sospechaba “irregular”, es decir, todo aquello que no
estaba de acuerdo con su propio pensamiento. Por ejemplo, en su libro número
once, “El Simbolismo de la Cruz”, no menciona en absoluto el simbolismo de la
Rosa Cruz. No por falta de conocimientos, sino por un deliberado propósito de
ocultamiento del pensamiento rosacruciano.

En el libro número catorce de Guenón, publicado en 1945, “El Reino de la

Cantidad y los signos de los tiempos”, fue particularmente impiadoso con las
organizaciones rosacrucianas modernas. El dijo: “Uno de los mejores ejemplos
que se puedan dar de éste último caso, son las numerosas organizaciones
que, en la época actual, se titulan «rosacrucianas», y que, no hay que decirlo,
no dejan de estar en contradicción las unas con las otras, e incluso de
combatirse más o menos abiertamente, al tiempo que se pretenden igualmente
representantes de una sola y misma «tradición». De hecho, se puede dar
enteramente la razón a cada una de ellas, sin ninguna excepción, cuando
denuncia a sus concurrentes como ilegítimas y fraudulentas; ¡Ciertamente, no
ha habido nunca tantas gentes para decirse «rosacrucianos», si no incluso
«Rosa-Cruz», como desde que ya no los hay auténticos! Por lo demás, es
bastante poco peligroso hacerse pasar por la continuación de algo que
pertenece enteramente al pasado, sobre todo cuando los desmentidos son
tanto menos de temer cuanto que aquello de lo que se trata ha estado siempre,
como es el caso aquí, envuelto en una cierta oscuridad, de suerte que su fin no
es conocido más ciertamente que su origen; ¿y quién, entre el público profano
e incluso entre los «pseudoiniciados», puede saber lo que fue exactamente la
tradición que, durante un cierto periodo, se calificó de Rosacruciana?

En su publicación número 15, aparecida en 1946 y denominada “Apreciaciones

sobre la Iniciación”, lanzó nuevos ataques contra las organizaciones rosacruces
modernas. Dijo: “existe una multitud de agrupaciones, de origen muy reciente,
que se titulan «rosacrucianos», sin haber tenido jamás el menor contacto con
los Rosa-Cruz, bien entendido, aunque no fuera más que por alguna vía
indirecta y desviada, y sin saber siquiera lo que éstos han sido en realidad,
puesto que se los representan casi invariablemente como habiendo constituido
una «sociedad», lo que es un error grosero y también específica-mente
moderno. Lo más frecuentemente, es menester no ver ahí más que la
necesidad de adornarse con un título efectista o la voluntad de imponerse a los
ingenuos; pero, incluso si se considera el caso más favorable, es decir, si se
admite que la constitución de algunas de esas agrupaciones procede de un
deseo sincero de vincularse «idealmente» a los Rosa-Cruz, eso no será
todavía, bajo el punto de vista Iniciático, más que una pura nada. Por lo demás,
lo que decimos sobre este ejemplo particular se aplica igualmente a todas las
organizaciones inventadas por los ocultistas y demás «neoespiritualistas» de
todo género y de toda denominación, organizaciones que, sean cuales sean
sus pretensiones, no pueden, en toda verdad, ser calificadas más que de
«pseudoiniciáticas», ya que no tienen absolutamente nada real que transmitir,
y ya que lo que presentan no es más que una contrahechura, e incluso muy
frecuentemente una parodia o una caricatura de la iniciación.
En este último libro dedica el capítulo 38 a explicar las diferencias entre “Rosa
Cruz y Rosacruciano”. En esta obra Guenón dice dogmáticamente, sin ninguna
prueba objetiva, por la simple autoridad de sí mismo, que los Rosacruces
nunca se asociaron, que nunca formaron organización alguna y que cualquier
filósofo que se dijera miembro de una organización rosacruz, no lo sería en
verdad solo por haber dicho que era parte de ella.
El real concepto que tenía Guenón sobre el Rosacrucismo, ahora podrán leerlo,
no deja de asombrarnos. Considera Guenón que el estado Rosa-Cruz es: “un
grado Iniciático efectivo, es decir, de un cierto estado espiritual, cuya posesión,
evidentemente, no está ligada de una manera necesaria al hecho de
pertenecer a una cierta organización definida. Lo que representa, es lo que se
puede llamar la perfección del estado humano, ya que el símbolo mismo de la
Rosa-Cruz, por los dos elementos de los que está compuesto, figura la
reintegración del ser en el centro de este estado y la plena expansión de sus
posibilidades individuales a partir de este centro; por consiguiente, marca muy
exactamente la restauración del «estado primordial», o, lo que equivale a lo
mismo, el acabamiento de la iniciación a los «misterios menores». Por otro
lado, desde el punto de vista que se puede llamar «histórico», es menester
tener en cuenta el hecho de que esta designación de Rosa-Cruz, ligada
expresamente al uso de un cierto simbolismo, no ha sido empleada más que
en algunas circunstancias determinadas de tiempo y de lugar, fuera de las
cuales sería ilegítimo aplicarla; se podría decir que aquellos que poseían el
grado de que se trata han aparecido como Rosa-Cruz en esas circunstancias
únicamente y por razones contingentes, como, en otras circunstancias, han
podido aparecer bajo otros nombres y bajo otros aspectos. Eso, bien
entendido, no quiere decir que el símbolo mismo al que se refiere este nombre
no pueda ser mucho más antiguo que el empleo que se ha hecho así de él, e
incluso, como para todo símbolo verdaderamente tradicional, se-ría sin duda
completamente vano buscarle un origen definido. Lo que queremos decir, es
sólo que el nombre sacado del símbolo no ha sido aplicado a un grado
Iniciático sino a partir del siglo XIV, y, además, únicamente en el mundo
occidental; así pues, no se aplica más que en relación a una cierta forma
tradicional, que es la del esoterismo cristiano, o, más precisamente todavía, la
del hermetismo cristiano; volveremos más adelante sobre lo que es menester
entender exactamente por el término «hermetismo».
Como conclusión, Guenón niega todo movimiento histórico Rosacruz, niega
toda intervención Divina en la formación de sociedades inspiradas por Seres
Elevados, niega la existencia del Egrégor Rosacruz, niega el uso del término
Rosacruz excepto para un “Estado Espiritual”. Todo esto nos demuestra el nulo
conocimiento que tenía Guenón de las doctrinas rosacruces de las diversas
organizaciones rosacrucianas modernas, puesto que ninguna de ellas postula
que sus miembros sean ROSACRUCES, sino que todas admiten que son
“estudiantes Rosacruces”, y que aspiran a alcanzar el “Estado de Rosacruz”.
Con lo cual nos encontramos con una falta de lógica en el razonamiento
Guenoniano: sólo se puede ser “Rosacruz” estando alejado de todas las
organizaciones “Rosacruces”.
Es nuestra profunda convicción que este gran sabio ha sufrido una ceguera, y
un fuerte y corrosivo prejuicio en contra de todas las formas modernas de
manifestación de la Tradición Primordial, pues para él, únicamente el
Compañerismo y la Masonería tendrían “algo” de la Tradición Primordial, y todo
lo demás sería inservible. No podemos estar de acuerdo con estas severas e
imprudentes aseveraciones, mas comprendemos que la personalidad siempre
oscurece al Ser Interno, y que en estos aspectos, Guenón ha quedado en la
posición que nuestro Venerable Gran Maestro Carlos de Eckartshausen ha
comunicado en su insuperable “La Nube sobre el Santuario”, que de paso sea
dicho, no es tratada por Guenón, pues “La Nube sobre el Santuario” afirma
precisamente lo opuesto de lo que predicó Guenón: que la Tradición Primordial
puede y de hecho lo hace, manifestarse en formas nuevas organizativas
esotéricas.

Damos por terminado nuestras referencias a René Guenón, del cual

nuevamente como al principio lo hemos indicado, sugerimos su cuidadosa y
meticulosa lectura, pues sus escritos tienen un incalculable valor simbólico y
tradicional.

CLAVES PARA LA COMPRENSIÓN DE LAS BODAS QUÍMICAS

V-SEXTO DÍA: Los Iniciados terminan sus labores alquímicas.

Elección de escaleras, cuerdas y alas para subir al segundo piso. El
Templo Alquímico. Disolución de los cadáveres. La esfera hueca de
oro. El ascenso al tercer piso. La sala de los espejos. Trabajo
alquímico concluido en la esfera de oro. El ascenso al cuarto piso.
Maduración del Huevo Filosófico. El pájaro negro nacido del Huevo
Filosófico. Ascenso al quinto piso. El baño del pájaro. El Pájaro
Azul. El ascenso al sexto piso. La muerte del Pájaro Azul. El
ascenso al séptimo piso. Creación de la pareja alquímica. El
descenso de las Almas dentro de los cuerpos preparados. El Rey y
la Reina son despertados por Cupido. El dulce sueño del Iniciado.
1. Cuando a la mañana siguiente se despiertan los Iniciados, uno de ellos
despierta primero. La expresión "el primero que se despertó sacó a los otros
del sueño", no es una frase trivial. Significa que el ser humano que se
desarrolla espiritualmente hasta un grado Iniciático que le permite darse
cuenta de la realidad , está en condiciones de "despertar" al resto.
2. Al levantarse, discuten qué sucedió con los Reyes decapitados. Las
siguientes tres frases velan tres Leyes Divinas relacionadas con la
Redención de la Humanidad. La Primer Ley es la de la Resurrección ("unos
sostenían que los decapitados revivirían todos juntos"). La Segunda Ley es
la de la Evolución ("la desaparición de los viejos debería dar a los jóvenes
no sólo la vida, sino también la facultad de reproducirse"). La Tercer Ley es
la del Sacrificio ("sino que eran otros los que habían sido decapitados en
vez de ellos").
3. Cuando aparece el Anciano que examina sus obras y productos alquímicos,
simboliza que los Iniciados han realizado los trabajos del grado anterior y
están listos para ingresar al grado superior.
4. Luego viene el momento en que se les pida que elijan entre una Cuerda,
una Escalera y un Par de Alas. Resulta una paradoja que se les pida elegir
entre escoger voluntariamente, o dejar el futuro librado al azar. El Enigma
se resuelve cuando usamos la clave que nos dice que en la etapa iniciática,
la voluntad del hombre es reemplazada por la voluntad de la Divinidad.
Entonces, si el hombre elige, puede equivocarse, pues basará su elección
en lo que él piensa que será más provechoso según su situación actual. En
cambio, la Providencia - que se presenta bajo la forma del azar - tiene una
visión de largo alcance, de las consecuencias más allá de las necesidades
coyunturales de la persona. Se les dice a los Iniciados que pueden escoger
o dejarse librados al azar. Ellos responden que prefieren escoger, pues
piensan en el libre albedrío. Pero el anciano que los guía, representando la
Providencia Divina, no les permite escoger, sino que les dice que se
aplicará el azar. Esto significa que cada uno recibirá lo que le corresponde,
no lo que desea.
5. Estos tres elementos, la cuerda, la escalera y las alas, son distintas
herramientas para un mismo fin, pero que requieren diferentes esfuerzos.
Como indicamos en la nota anterior, estas pruebas Iniciáticas no pueden
elegirse, sino que son el resultado de nuestras experiencias pasadas. Es
posible, como le sucedió a nuestro Querido Maestro C.R+C que no
entendamos la naturaleza de la prueba, hasta el momento en que debemos
ser probados.
6. Les revelaré el misterio simbólico de estos tres elementos: la CUERDA
corresponde a la HUMANIDAD vulgar, que debe esforzarse rudamente por
elevarse, es el Sendero de la Humanidad. La ESCALERA DE DOCE
PELDAÑOS es el Sistema Iniciático Rosacruz en Doce Grados, es el
Sendero del Iniciado, del hombre que elige progresar de peldaño en
peldaño, de grado en grado. Las ALAS corresponden a los ADEPTOS, que
son los Iniciados que ya han alcanzado la más alta espiritualidad, y pueden
elevarse por sí mismos desde el plano material al plano espiritual.
7. Observen ahora con qué claridad y simplicidad se entiende esta tripartita
distribución de las almas terrestres. Los ADEPTOS con sus ALAS son
quienes "volaron fácilmente por el agujero". Los INICIADOS con sus
ESCALERAS son quienes "comprenden inmediatamente su utilización", es
decir, el valor de un sistema Iniciático. La HUMANIDAD con sus CUERDAS
son quienes "estaban en la confusión" y que debían subir "como mejor
pudieran". Esto nos indica que la Humanidad en general puede progresar
aun sin un sistema Iniciático, pero el sistema Iniciático acelera y permite
progresar condiciones menos penosas, pues la gran diferencia entre los
INICIADOS y la HUMANIDAD reside en que los primeros "Comprenden" ,
mientras los segundos viven "Confundidos".
8. La Torre representa el medio o sendero de la Iniciación, donde se
encuentran los secretos símbolos de la Tradición. Se menciona que se
ingresa a ella "por tres peldaños". Estos son los tradicionales grados
universales de Aprendiz, Compañero y Maestro.
9. Las Siete Capillas representan las influencias planetarias de los Siete
Planetas de la Astrología antigua. Rezar por la vida de los Reyes y de las
Reinas significa orar por los Maestros y Maestras que ayudan a la
Humanidad.
10. Se describe a continuación la Iniciación del Sexto Grado Rosacruz. Los
doce músicos son doce Oficiales de la Logia Rosacruz, que representan a
los Doce Maestros Celestiales. Son Maestros de Armonía, y como las
Esferas emiten vibraciones que producen sonidos musicales, ellos reciben
el título general de MAGISTER MUSICAE. Son los encargados de transmitir
la armonía planetaria de cada una de las Doce Mansiones Celestiales.
11. Como se darán cuenta, la ubicación de los personajes alrededor de la
Fuente simboliza una Logia. La Fuente es el centro de la Logia, llamado
NAOS o SHEKINAH. Todas las energías de los asistentes a la Logia se
concentran en este punto. Obsérvese la simbología de la Polaridad:
tenemos dos columnas y dos horizontes .
12. Si bien la descripción del proceso alquímico que tiene lugar en esta
Iniciación está más allá de la tarea de instrucción del presente Syllabus, les
ofreceremos algunos indicios:
13. Primera Clave: el objeto de la Iniciación es devolver la Vida a lo que está
muerto.
14. Segunda Clave: la devolución de la Vida significa devolver la Consciencia
a lo que está Inconsciente.
15. Tercera Clave: el proceso alquímico requiere de la participación de la
voluntad del Iniciado, y de la Voluntad de la Providencia Divina.
16. Cuarta Clave: la Obra Alquímica requiere de la participación de los cuatro
elementos.
17. La función de estas Vírgenes Vestales o Columbas, es la de guiar y ser la
Voz Divina de los Adeptos, manifestada en el Sendero Iniciático. Ellas están
exentas del pecado. No han conocido las penas de la vida. Son “espíritus
virginales”, que conocen los Misterios del Mundo Espiritual. Por esta razón
se las representa subiendo por un camino fácil, que no puede ser utilizado
por los Iniciados. Cristian Rosenkreutz nos informa acerca de esta notable
diferencia.
18. C.R+C describe el interior de un Templo o Sala, cuyos espejos reflejan la
luz de la Esfera de Oro central. En primer lugar vemos aquí que el autor de
las Bodas Químicas aprovecha para describir el método de iluminación de
los Templos Egipcios, que usaban espejos de metal pulido para que los
rayos del Sol llegasen a los sitios más profundos de los Santuarios
enterrados.
19. En segundo lugar hay una razón simbólica que puede explicarse de la
siguiente forma: el Sol es la Luz Mayor y penetra en el Santuario Rosacruz,
donde los Grandes Maestros son los “espejos” de esta Luz Mayor. Cada
uno de estos Grandes Maestros es un “espejo”. Y todos los “espejos”
enfocan su Luz Menor sobre la Esfera de Oro que pende del centro del
Templo. Vemos que la Esfera recibe una concentración de energías a partir
de las Doce Puertas que están representadas en la Astrología como los
Doce Signos Zodiacales.
20. Mientras esperan que la Gran Obra produzca su fruto, los Iniciados se
dirigen a desayunar, y se les sirvió “un menú verdaderamente filosófico”.
Les pido que reflexionen sobre las palabras empleadas, pues no se trata de
una simple merienda física, sino de las enseñanzas profundas y secretas de
los misterios Divinos. En cuanto al uso de la palabra “física”, debe
entenderse en el sentido del nacimiento que están presenciando en esta
Gran Obra Alquímica, que es la creación de la Vida a partir de la Muerte.
21. Los Iniciados están presenciando cómo Dios crea y opera sobre la materia.
Siempre está presente la Providencia Divina en esta narración, y aún el
azar es parte de esta Voluntad que todo lo puede. Nuestro Magíster Lucis
Hermann Hesse dice en su obra “Demián”: “El pájaro rompe el cascarón. El
Huevo es el Mundo. El que quiere nacer tiene que romper un Mundo. El
pájaro vuela hacia Dios. El Dios se llama ABRAXAS”.
22. Cuando ascienden al Cuarto Piso pueden ver una “Caldera cuadrada”, que
es símbolo del mundo material. Construida del metal cobre, nos lleva a
meditar sobre Venus y el amor instintivo. La arena amarilla es polvo de oro,
esto significa las condiciones ideales para la maduración. El Huevo no es
otro que la Humanidad. En cada una de las caras de la Caldera hay una
expresión esotérica.
23. Sobre la primer leyenda se nos pide meditar. Su significado está perdido.
24. La segunda leyenda evoca tres colores de la Gran Obra: Blanco, Rojo y
Negro. La LANZA representa el color negro. La NIEVE el color blanco. La
SALUD el color rojo de la sangre.
25. La tercer leyenda lleva el mandato bíblico “Hágase”. Al mismo tiempo, la
palabra F.I.A.T. representa los cuatro elementos: F= FUMUS, vapor de
agua; I= IGNIS, fuego; A= AER, aire; T= TERRA, tierra.
26. La cuarta leyenda dice “Lo que el Fuego, el Aire, el Agua, la Tierra, no
pudieron arrancar a las santas cenizas de nuestro Rey y nuestra Reina, la
fiel turba de los químicos lo depositaron en esta urna”.
27. Viene ahora una descripción sobre el crecimiento del Pájaro. Este extenso y
oscuro párrafo se entiende cuando reemplazamos el pájaro por la
Humanidad. Nacida en la ignorancia, al recibir los alimentos de sus
primeros conocimientos crece en violencia y arrogancia. Es solo mediante el
sacrificio de la sangre real – CRISTO – que la Humanidad se redime y
cambia su plumaje de “negro” a “blanco”. Luego del sacrificio de Cristo, la
Humanidad puede acercarse a los Iniciados o, más bien , los Iniciados
pueden acercarse a la Humanidad. El “tercer alimento” es el símbolo de los
Tres Grados Tradicionales. En este momento la Humanidad puede liberarse
de sus ataduras de prejuicios religiosos, científicos y políticos.
28. A lo largo de este capítulo observarán que constantemente se producen
transmutaciones que cubren un aspecto dual: lo material y lo trascendental.
El aspecto material es el de las transformaciones químicas, mediante las
cuales, ciertos elementos químicos se recombinan y dan lugar a nuevos
compuestos químicos. Pero la parte que nos interesa es la Alquimia
Trascendental, de la que decimos que su fin último es el de aplicar
TRANSMUTACIONES. Esto es evidente en toda la simbología alquímica de
este libro. Los elementos, los personajes, los caracteres MUTAN de un
estado a otro.
29. La TRANSMUTACIÓN alquímica es la acción de cambiar abruptamente las
características de algo.
30. En la anterior Instrucción revelamos que el Pájaro simboliza la Humanidad.
Encerrar al Pájaro en un baño y aplicarle calor progresivamente, simboliza
el inicio de la encarnación de las almas y el comienzo de las acciones y
reacciones kármicas. Implica también el proceso de evolución mediante el
cual llega a revestirse de una forma similar a la humana, cuando dice “se le
quedó la piel tan lisa como la de un hombre”.
31. Las plumas disueltas en el proceso alquímico representan las
personalidades cambiantes del alma en sus encarnaciones pre-humanas.
Representa todo lo que es superficial, y de hecho las plumas estaban en la
superficie de su piel. Al retirarse la Humanidad del Baño de la experiencia
pre-humana, todo lo superfluo desaparece y queda el alma inmaculada. Por
eso dice: “estaba tan liso y tan brillante que daba gusto verlo”.
32. Así es que la Humanidad estaba lista para comenzar su carrera evolutiva
bajo una forma reconocida como “Humana”. El uso de un “collar” en el
Pájaro representa la necesidad de los Grandes Seres de guiar a la
incipiente raza de los hombres en el sendero evolutivo.
33. La “materia azulada” que quedó en el baño donde se disolvieron las plumas
y que se usó para pintar al Pájaro, significa por los colores mencionados, el
fin de la Gran Obra en la Humanidad: la completa purificación de todos los
Hombres – simbolizado por la cabeza blanca del Pájaro – y su estadía en el
Mundo Espiritual – simbolizado por el color azul de su piel.
34. Tal como fue descrito en el Syllabus 2.32 ,los Seis Objetos o Insignias eran
1-un Libro cubierto con terciopelo negro; 2- una Lucecita inextinguible en un
candelero de marfil; 3- una Esfera celeste; 4- un Reloj metrónomo; 5- una
Fuente de cristal manando agua roja; 6-un Caput Mortem refugio de una
serpiente blanca.
35. La Fuentecita de la que bebió el Pájaro dijimos anteriormente que
simbolizaba el Bautismo y la muerte de Cristo. Vemos el símbolo de la
Humanidad recibiendo el Bautismo por el agua y bebiendo el “Esta es mi
sangre” de Cristo.
36. Cuando el Pájaro pica a la Serpiente – de la cual explicamos que era el flujo
de vida consciente que penetra en la materia – se simboliza que TODA la
corriente de vida en sus múltiples formas de manifestación, alcanzará la
CONSCIENCIA HUMANA. Esta Gran Obra Cósmica sucederá en el “Fin de
los Tiempos”, cuando la “Serpiente Blanca” sea redimida completamente y
la Materia desaparezca tal como la percibimos, de modo que habitemos en
otros Mundos compuestos por materia sutil.
37. Intervienen ahora tres elementos, la Esfera, el Reloj y el Libro. Otras
simbolizaciones para estos tres elementos y su relación con el Pájaro son:
la Esfera es el Mundo o Cosmos material; el Reloj es el Tiempo; y el Libro
es la Ley de Dios o conjunto de Leyes físicas.
38. La decapitación del Pájaro – que puso él mismo su cabeza sobre el Libro –
significa que la Humanidad llegó al mismo punto de evolución que el de
Cristo, ofreciendo su vida humildemente y sin resistencia.
39. La apertura del pecho, como único lugar del cual puede brotar sangre tiene
dos analogías: en el pecho está el Corazón y sólo del Corazón puede brotar
 la redención. No puede salir de la Cabeza, que es la Inteligencia, pues esta
a veces carece de la virtud de la Caridad.
40. Es necesario meditar sobre esta frase “el Pájaro por sí solo no servía para
gran cosa”. Se trata del aspecto FORMA de la Humanidad. En tanto medio
material, la parte de valor es el ALMA de la Humanidad. Nos enseña que no
debemos fijarnos en aquello que es perecedero.
41. Cuando la Virgen quema el cuerpo del Pájaro y la tablilla que llevaba
colgada, está indicando que la Materia vuelve a sus constituyentes
primordiales, lista para ser utilizada cuando nuevamente el Rey así lo
decida, en otro ciclo de manifestación cósmica.
42. Una última instrucción les es dada a los Iniciados, haciéndoles creer que no
eran merecedores del ascenso al Séptimo Piso. Se representa aquí la
Providencia Divina, que tiene sus misteriosos caminos y modos de obrar.
Los Cuatro Adeptos Rosacruces que son “engañados” haciéndoseles creer
que no eran merecedores de alcanzar la Séptima Iniciación, son en realidad
Adeptos que han llegado a ese estado, pero que aún así, se encuentran
infinitamente lejos de la Deidad Suprema. Siempre debemos humildemente
inclinarnos ante el Misterio de la frase que hemos leído, para que nunca
alcemos altivamente nuestra frente pretendiendo conocer lo que
suponemos real a nuestros sentidos internos y externos: “El hombre no
conoce nunca los bienes que Dios le otorga”.
43. La Gran Obra Alquímica es sencilla por naturaleza, pues se basa en aplicar
los Cuatro Principales sobre los Tres Principios. Los Cuatro Principales son
la TIERRA – simbolizada por las cenizas -; el AGUA con la que humidifican
esas cenizas; el FUEGO que se le aplica a esta cocción; y el AIRE
necesario para que el Fuego actúe.
44. En nuestra Gran Obra Alquímica aprendemos que Dios CREA, la
Naturaleza PRODUCE y el Arte MULTIPLICA. Dios creó el Caos y de él
extrajo el Orden. La Naturaleza produce las Formas. El Arte multiplica y
perfecciona esas formas.
45. La Naturaleza y el Arte están simbolizadas alquímicamente por el
matrimonio de dos figuras montadas en una Cruz, significando el
casamiento de la Mujer Blanca con el Servidor Rojo de cuya unión vendrá el
MÁS POTENTE REY.
46. Nos enseña este capítulo cuál es el fin de la Gran Obra, que es dar vida a la
materia inerte. Detrás de la simbología alquímica existe una enseñanza
Cosmogónica. La materia inanimada se diferencia en positivo y negativo o
macho y hembra. La creación de las dos formas físicas para el Rey y la
Reina marcan esta Polaridad.
47. La sangre del pájaro que se vierte en las dos figuras humanas simboliza el
Alma Universal que penetra en la materia, encarnando como Hombre y
como Mujer. El proceso por el cual las formas masculina y femenina crecen
a medida que se incorpora el Alma Universal, explica la evolución de las
formas y el perfeccionamiento de los cuerpos receptores del Alma
Universal.
48. Los vestidos blancos que parecían estar hechos de cristal puro simbolizan
los cuerpos espirituales que se desarrollan durante el proceso de las
encarnaciones del Alma Universal. Cuando la Gran Obra se realiza, el
 espíritu se libera de la materia y se reviste de un cuerpo sutil. Esto está
representado por los vestidos blancos que aguardan al Rey y a la Reina.
49. El techo con sus siete grandes semiesferas abovedadas representa los
Siete Planetas de la antigüedad. Al momento de escribirse las BODAS
QUÍMICAS, aún no se habían descubierto Urano, Neptuno y Plutón. Esta
Cámara donde se lleva a cabo el proceso de la encarnación de las Almas
de los Reyes dentro de dos cuerpos jóvenes, ejemplifica el Macrocosmos.
Los cuerpos esperando recibir las Almas representan el Microcosmos.
50. En este momento debo recordarles que eran Seis los Reyes decapitados.
Tres Reyes y tres Reinas. Al incorporarse tres almas en cada cuerpo, se
está simbolizando a la Trinidad y la Ley del Triángulo. Las tres Almas de los
Tres Reyes descienden en el cuerpo del Joven Rey y las tres Almas de las
Tres Reinas descienden en el cuerpo de la Joven Reina.
51. En esta obra se establece una diferencia entre el conocimiento oculto que
logra C.R+C y el conocimiento del resto de sus compañeros de viaje. Esto
quiere demostrar la superioridad del conocimiento esotérico sobre el
conocimiento exotérico o conocimiento vulgar. Mientras que sus demás
compañeros Iniciados suponen que la encarnación de las Almas se debe a
un proceso material, como ha sido la destilación de la sangre del Ave,
C.R+C sabe que se debe a un proceso espiritual – simbolizado por el
aparato cósmico de los Siete Planetas en el techo de la Cámara, y por el
cual descienden las Almas por su centro.
52. Observen que las Almas se habían insuflado en los cuerpos, pero no podían
tomar posesión del mismo. Es solo cuando Cupido actúa sobre ellos que
toman posesión de sus cinco sentidos y pueden conocer el mundo material
donde se encuentran. Aquí Cupido equivale al agente mercurial, que se
disemina por toda la Creación transmitiendo las sensaciones a todos los
seres vivos.
53. El Rey y la Reina se elevan a Planos superiores a los que C.R+C y sus
compañeros no pueden acceder. Esto está simbolizado por la “gran
distancia de mar” que atravesaron.
54. La aparición del Rey y la Reina en el Sexto Día de las Bodas Químicas
tiene un paralelo con el Génesis 1: 27 “Y creó Dios al hombre a su imagen,
a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó”.

QUERIDOS FRATRES Y SORORES, existe una Tradición Primordial QUE

NO TIENE NOMBRE, pero que adopta nombres en diferentes lugares y
épocas, para llegar desde Lo Alto – que es Dios- a Lo Bajo – la
Humanidad. Mal que le pese a René Guenón, la Rosa Cruz existe en los
Planos Invisibles y en los Planos Visibles.
“Sólo es ciego quien no quiere ver”.

Reciban mis fraternales bendiciones en L.’.V.’.X.’.

Frater Lucis FIDUCIUS
Superior de la O.’.F.’.L.’.