A raíz de los descubrimientos geográficos en el siglo XVI, la mentalidad oc-
cidental comenzó a gestar nuevas ideas hasta culminar con el movimiento enciclopedista y la Ilustración, lo cual condujo a novedosas explicaciones sobre el mundo y creó mejores soluciones para los problemas sociales. En Europa, el siglo XVIII, llamado de la Ilustración o de las Luces, provocó que la razón y la ciencia se vieran como la piedra filosofal orientada a la prosperidad y felicidad de los pueblos, dando paso al mundo moderno. La Ilustración coincide con un cambio dinástico en la monarquía espa- ñola, de los Austrias a los Borbones, quienes inician una serie de reformas, a ejemplo de la Francia ilustrada, con el fin de mejorar su administración e incrementar, en consecuencia, la recaudación e ingresos de sus arcas. Sin embargo, la Ilustración, que veía en la educación un agente de la formación del capital humano y del progreso, estuvo fuertemente controlada por dos poderes soberanos: la Iglesia y la Corona. Sería hasta el advenimiento al trono de Carlos III cuando el reformismo administrativo y las ideas ilustradas llegaran libremente a España y sus colonias. Mas parece que las reformas borbónicas no fueron el vehículo de la Ilustración, ya que el Santo Tribunal de la Inquisición, agente de la Iglesia, se encargaba de censurar todo tipo de escritos. Fue la lectura, sin duda, pero la de textos prohibidos y los relatos de los viajeros los que ayudaron en gran medida a la difusión de las nuevas ideas, dando lugar a otras formas de concebir el mundo, sus problemas y alternativas para solucionarlos. Por otra parte, la paulatina conquista, evangelización y colonización del territorio de la Nueva España durante los siglos XVI, XVII y XVIII, por la Corona española, y en virtud del Real Patronazgo, creyendo que se transplantaban las estructuras y formas de organización castellanas, en realidad conformaron un nuevo mundo. Al transformarse la propiedad
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Actores educativos en la región minera de Zacatecas
y usufructo de la tierra, la cual pasó paulatinamente de sus propietarios
originales a los europeos, aparecieron otras formas de explotación eco- nómica. Al mismo tiempo, se fueron creando diversos grupos humanos, raciales y culturales, que al interactuar y relacionarse entre sí conformaron una nueva y particular sociedad. Se trató de un mestizaje no sólo físico, sino que incluyó creencias, formas de vivir y nuevas costumbres. Fue entonces un proceso educativo. En consecuencia, también hubo de adaptar las formas tradicionales de inculcación educación reivindicando como ideal de convivencia una sociedad que era, en realidad, estratificada y discriminatoria. Esa trans- culturalización fue un proceso educativo, al tratarse de aprendizajes, realizada en ocasiones de manera consciente, en otras inconscientemente, formando el pensamiento novohispano. Se sabe que la Iglesia fue la gran educadora, participando en todo tipo de educación (formal, informal y no formal) y en todos los niveles. Fue la responsable de la gran tarea de evangelización, mas también lo fue de la mentalidad del nuevo súbdito español que nacía en este lado del océano. Las órdenes regulares, –sus frailes– fueron sus principales agentes, unos en lo informal, otros en lo no formal y algunos como los franciscanos, los dominicos, los agustinos, los mercedarios y los jesuitas, educadores formales. Los franciscanos se dedicaron sobre todo a la evangelización y a las primeras letras, si bien como herramienta de la primera, no como educación propiamente. Los dominicos, en cambio, tuvieron colegios y algunos de ellos otorgaron títulos y grados, como si fueran universidades. Los agustinos participaron en la educación superior, pero dirigida a la formación sacerdotal y universitaria. Los mercedarios atendieron escuelas de primeras letras y algunos colegios superiores. La Compañía de Jesús, fue, sin duda, la orden dedicada a la educación en todos sus niveles y modalidades, llegando a todos los grupos sociales. Como fenómeno social, la educación tiene un carácter recíproco con la sociedad que la alberga y sustenta, ya que su filosofía y la normativi-