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María y Ernesto

Por Guillermina González Rangel

Son las 6:00 am y la actividad de Ernesto y su familia comienza. María, la esposa, va a la cocina a preparar
lo que se llevarán para comer, pues los dos trabajan. Mientras, Ernesto despierta a su hijo Daniel, que acude
a la escuela primaria.

El transporte que los conduce a la escuela de Daniel y al lugar donde laboran pasa a una distancia de 400
metros de su casa, por lo que se van caminando al lugar donde lo abordan y les toma 5 minutos en llegar.
Sin embargo, deben atravesar una avenida muy transitada, por lo que necesitan usar un puente para evitar
riesgos innecesarios, pero el tiempo para cruzar el puente peatonal debe ser considerado a fin de no llegar
tarde a sus trabajos y escuela.

Ernesto es trabajador en la rama de la construcción y se desempeña como albañil, por lo que tiene como
actividades principales la realización de zapatas, alzado de paredes, colados de techos, enjarre, enyesado,
puesta de pisos, etc. También está capacitado como electricista y a medida que termina sus actividades
como albañil, se va incorporando a las actividades como electricista, entre las que puede realizar la
instalación del cableado eléctrico en las construcciones, la instalación de lámparas, apagadores, contactos y
cualquier tarea afín que le sea asignada.

Por lo general, al inicio de una obra sus actividades son principalmente a la intemperie bajo distintas
condiciones climáticas, por lo que Ernesto siempre procura llevarse alguna gorra y un paño para cubrirse del
sol y mantener con él un recipiente con agua para no deshidratarse.

María, en cambio, trabaja en una maquiladora de ropa, en donde se desempeña como costurera. Sus
actividades son principalmente confeccionar prendas con el material que se le entrega, utilizando para ello
máquinas y utensilios de coser de diferentes tipos. Conforme a los procesos de confección, realiza y termina
prendas a mano, pero además lubrica y prepara en su caso la maquinaria para mantenerla en buen estado.

Cuando su encargado así se lo solicita, también hace funciones de teñido de prendas con diferentes
químicos. Hay ocasiones en que la empresa tiene un exceso de pedidos y debido a que cuenta con poco
personal, se les obliga a los trabajadores, ente ellos María, a cargar cajas de ropa hasta el camión de carga.
Ella lo hace con gusto, aun cuando sabe que esa actividad no le pertenece.

A diferencia de Ernesto, María trabaja en un espacio cerrado y reducido con poca ventilación, lo que trae
como consecuencia que en tiempo de calor su lugar de trabajo sea muy caliente.

Ya en el transporte, Ernesto desciende de él con su hijo y lo acompaña hasta la escuela y de ahí se va

caminando a su trabajo, María no baja del camión sino hasta que ha llegado al lugar donde labora.

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El día de hoy María está muy entusiasmada pues en su trabajo habrá una jornada de capacitación que será
dirigida por un conferencista experto en seguridad e higiene en el trabajo, quien les hablará sobre las medidas
de protección y normas que rigen las actividades en su trabajo a fin de evitar accidentes en su ambiente
laboral. Por tal motivo, está muy ansiosa de llegar a su trabajo y terminar de coser algunas prendas
pendientes que dejó del día anterior para después irse a la conferencia.

Camino a su trabajo, Ernesto siempre pasa frente a un parque que está a una cuadra de donde labora.
Cuando pasa, los niños siempre lo saludan por su nombre y se acercan a él para preguntarle si habrá trabajo
ese día para ellos, aunque sea de cargar cosas o traer encargos. Él les responde que no sabe y que llegando
al trabajo le preguntará al capataz. Ante esta situación, Ernesto se pone un poco triste, pues siente que
aquellos niños en lugar de buscar trabajo, deberían estar en la escuela como su hijo.

Ya en el trabajo, Ernesto escucha un golpe fuerte y corre a ver lo que sucede, al llegar al lugar observa que
uno de sus compañeros cayó de un andamio y todo indica que se fracturó un pie. De inmediato, el supervisor
de obra llamó al hospital para reportar el accidente y que le enviaran una ambulancia. Días después, del
hospital le enviaron a un inspector de seguridad que revisó de manera detallada las condiciones en las que
se desempeñan las actividades en la obra y les hizo recomendaciones de seguridad para evitar cualquier
otro accidente. Con este accidente, la empresa rompió su récord de cero accidentes en 60 días.

Al final del día, Ernesto pasa a recoger a su hijo a la escuela y se reencuentra con María en el autobús.
Durante el camino María comienza a platicarles a Ernesto y Daniel sobre lo aprendido en la conferencia de
su trabajo.

Así termina un día más de trabajo para Ernesto, María y Daniel.

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