Visto Bueno Sr. Ministro

JUICIO DE AMPARO DIRECTO 22/2012
QUEJOSA: **********
VISTO BUENO
SR. MINISTRO
PONENTE: MINISTRO JORGE MARIO PARDO REBOLLEDO

SECRETARIA: MERCEDES VERÓNICA SÁNCHEZ MIGUEZ
México, Distrito Federal. Acuerdo de la Primera Sala de la

Suprema Corte de Justicia de la Nación, correspondiente al día
diecisiete de octubre de dos mil doce.
V I S T O S, para resolver los autos relativos al amparo directo

22/2012, interpuesto en contra de la sentencia de diecinueve de
octubre de dos mil once, dictada por la Segunda Sala Familiar del
Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, en el toca número
**********;
R E S U L T A N D O:
PRIMERO. Demanda de amparo. Por escrito presentado el

dieciséis de noviembre de dos mil once, ante la Segunda Sala Familiar
del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, **********, por su
propio derecho y en representación de sus menores hijas **********,
todas de apellidos **********, promovió demanda de amparo directo, en
contra de las autoridades y actos que a continuación se indican:
Autoridades Responsables:
 Segunda Sala Familiar del Tribunal Superior de Justicia del

Distrito Federal, en su carácter de autoridad ordenadora.
 Juez Trigésimo Octavo de lo Familiar del Distrito Federal, en

su carácter de autoridad ejecutora.
Actos reclamados:
 Sentencia dictada con fecha diecinueve de octubre de dos mil
once, en los autos del toca número **********, formado con
motivo del recurso de apelación interpuesto en contra de la
sentencia de cinco de agosto de dos mil once, dictada por el
Juez Trigésimo Octavo de lo Familiar del Distrito Federal, en
los autos del juicio ordinario civil **********.
 Ejecución de la sentencia definitiva de diecinueve de octubre

de dos mil once.
SEGUNDO. Garantías constitucionales violadas y tercera

perjudicada. La parte quejosa señaló como garantías violadas en su
perjuicio, las establecidas en los artículos 1, 4, 14, 16 y 17 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y señaló como
tercero perjudicado a **********.
TERCERO. Antecedentes. El presente juicio de amparo tiene su

origen en el expediente **********, del índice del Juzgado Trigésimo
Octavo de lo Familiar del Distrito Federal, el cual encuentra su génesis
en la demanda formulada por **********, por su propio derecho y en
representación de sus menores hijas, en contra de **********; no
obstante, como con antelación a la presentación de dicho libelo, éste
último presentó una demanda en contra de **********, la cual fue
radicada con el número de expediente **********, del índice del
2
Juzgado Vigésimo Octavo de lo Familiar en el Distrito

Federal (con posterioridad **********del Juzgado
Vigésimo Noveno de lo Familiar del Distrito Federal), en el caso, se
estima necesario hacer una breve referencia de lo acontecido con
motivo de esta demanda, para después referirnos a la que da sustento
al expediente que dio origen al presente juicio, ello con el único fin de
entender adecuadamente los antecedentes del mismo.
Lo que se hace de la siguiente manera:
I. Expediente **********, del índice del Juzgado Vigésimo

Octavo de lo Familiar en el Distrito Federal, formado
con motivo de la demanda presentada por **********
(con posterioridad ********** del Juzgado Vigésimo
Noveno de lo Familiar en el Distrito Federal).
1. Demanda Inicial. Por escrito de catorce de agosto de dos mil

ocho, ********** demandó de **********, el restablecimiento de los
derechos de visita y convivencia con sus menores hijas ********** de
apellidos **********, apercibiendo a la demandada a efecto de que no
impida de manera alguna el ejercicio de esos derechos.
Para dar sustento a sus pretensiones el actor señaló que desde

el veinticuatro de junio de dos mil ocho ********** abandonó sin
motivo el domicilio conyugal; que durante un periodo de
aproximadamente dos semanas, le permitió el acceso a sus
menores hijas dentro de la casa de su padre, sin que le permitiera
retirarlas de dicho domicilio, pero a partir del diez de julio de dos
mil ocho, no le ha permitido ningún acceso a las menores. 1
1
Copia certificada del expediente **********. Fojas 1 a 11.
3
2. Hechos supervenientes expuestos por el actor. En escrito

de veinte de agosto siguiente, el actor manifestó que el diecinueve de
agosto de ese mismo año, fue informado por **********, Directora del
**********, que sus menores hijas ********** y ********** no asistieron a
clases en el inicio escolar 2008-2009, a pesar de estar pagada la
inscripción y el material escolar, lo cual consideró, viola los derechos
de sus hijas.2
3. Trámite de la demanda inicial. De esa demanda tocó su

conocimiento al Juez Vigésimo Octavo de lo Familiar en el Distrito
Federal, quien la admitió y radicó con el número **********, ordenando
emplazar a la demandada3.
4. Contestación a la demanda. Mediante escrito de veintiséis

de septiembre de dos mil ocho, **********contestó el libelo instaurado
en su contra, negando que existiera la necesidad de restablecer
derechos de visitas y convivencias con sus menores hijas, en
razón de que ha sido el mismo actor quien se ha abstenido de
procurar cualquier acercamiento con las menores; que su hija
********** se niega de manera categórica a salir con su padre,
incluso a tener cualquier contacto con él, situación que se agravó
desde que el actor dejó de buscar cualquier acercamiento físico y
emocional con la menor; y que además, las menores ********** y
********** no reconocen en ********** una figura paterna, lo que sólo le
puede ser imputado a él, puesto que es él quien se ha ocupado de
alejar a las menores, absteniéndose por completo de crear cualquier
clase de nexo emocional o sentimental.4
2
Ibídem. Fojas 37 a 39.
3
Ibídem. Fojas 31 y 32.
4
4
5. Contestación a los hechos supervenientes.

********** manifestó que sus hijas se encuentran
inscritas y estudiando en el **********.5
6. Régimen provisional de guarda y custodia. En audiencia de

seis de noviembre de dos mil ocho, el Juez Vigésimo Octavo de lo
Familiar en el Distrito Federal, después de escuchar a la menor
**********, decretó de manera provisional la guarda y custodia de las
menores en favor de la madre y fijó un régimen de visitas y
convivencias en favor de **********, de la siguiente manera:
“…por lo que hace a la menor ********** los días sábados de cada

ocho días, debiendo pasar por la menor a las nueve horas con treinta
minutos, al domicilio de la parte actora ubicado en **********,
debiendo devolverla al citado domicilio a las diecisiete horas con
treinta minutos del mismo día.- Por lo que hace a las menores
********** y **********, ambas de apellidos **********, dada sus cortas
edades, el actor podrá convivir con las mismas los días sábados de
cada ocho días, sin poderlas sacar de dicho domicilio de la parte
demandada…”6
6.1. Recurso de apelación en contra del régimen

provisional de guarda y custodia. Inconforme con esa
determinación, **********, interpuso recurso de apelación mismo que
por proveído de diecinueve de noviembre de dos mil ocho, fue
admitido en ambos efectos, originando la suspensión del régimen de
visitas y convivencias provisionales decretado el seis de noviembre de
dos mil ocho, hasta en tanto cause estado dicha resolución. 7 Recurso
que resolvió la Primera Sala de lo Familiar del Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal, el siete de enero de dos mil nueve, en el
5
Ibídem. Foja 167.
6
Ibídem. Fojas 162 y 163.
7
Expediente **********. Tomo I. Foja 197.
5
sentido de modificar el auto recurrido, para quedar en los siguientes

términos:
“...se decreta un régimen de visitas y convivencias a favor del señor

********** con sus menores hijas ********** de apellidos ********** los
días sábados de cada quince días, sin estar en posibilidad de
sacarlas del domicilio de la parte demandada en un horario
comprendido entre las doce y las quince horas, previniéndose a
ambas partes para que otorguen las facilidades necesarias a fin de
que se puedan realizar dichas convivencias con absoluto respeto y
tranquilidad, todo esto para beneficio de las infantes, apercibidos los
contendientes que en caso de desacato a esta determinación judicial
se harán acreedoras a cualquiera de las medidas de apremio que
establecen los artículos 61 y 73 del Código de Procedimientos
Civiles…”8
6.2. Demanda de amparo indirecto y cumplimiento a lo

ordenado en una ejecutoria de amparo en revisión. En contra de
esta decisión, **********, promovió demanda de amparo indirecto, el
cual le fue concedido con motivo de un recurso de revisión, razón por
la que en cumplimiento a lo ordenado por el Decimocuarto Tribunal
Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, en fecha veintinueve de
mayo de dos mil nueve, la Primera Sala de lo Familiar del Tribunal
Superior de Justicia del Distrito Federal, dejó insubsistente la
resolución de siete de enero del año dos mil nueve, y procedió a
confirmar el auto dictado en la audiencia de fecha seis de noviembre
de dos mil ocho.9
6.3. Incidente de modificación del régimen provisional

visitas y convivencias. ********** promovió el incidente de referencia,
mismo que en fecha ocho de marzo de dos mil diez, se declaró
8
Ibídem. Tomo I. Fojas 286 a 288.
9
Ibídem. Tomo II. Fojas 29 a 52
6
procedente, razón por la que se modificó para quedar

en los siguientes términos:
“… el régimen de visitas y convivencias provisional que se decreta a

favor del señor **********, respecto de sus menores hijas ********** de
apellidos **********, tendrá verificativo en el Centro de Convivencias
Familiar Supervisadas de este Tribunal Superior de Justicia del
Distrito Federal, los días sábados de cada semana, en un horario
comprendido de las 9:00 horas a las 13:00 horas, salvo aquellos días
en que no preste sus servicios dicho Centro, apercibiendo a las
partes para que en caso de desacato, se harán acreedoras a
cualquiera de las medidas de apremio que establece el artículo 61 y
73 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal… ”10
7. Excusa. Por proveído de once de marzo de dos mil diez, el

Juez Vigésimo Octavo de lo Familiar en el Distrito Federal, se excusó
de seguir conociendo del asunto, razón por la cual lo remitió a la
Oficialía de Partes Común del Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal, a efecto de que se turnara al juzgado correspondiente,
tocando su conocimiento al Juzgado Vigésimo Noveno de lo Familiar
en el Distrito Federal, quien lo radicó con el número **********.11
8. Sentencia de primera instancia. En fecha veinticinco de

noviembre de dos mil diez, el Juez Vigésimo Noveno de lo Familiar en
el Distrito Federal, dictó sentencia en la que decretó un régimen de
visitas y convivencias en favor de **********, estableciendo que éste se
llevaría a cabo los días sábados y domingos de cada quince días
pasando por las menores los sábados, a las nueve de la mañana, al
domicilio en que **********ejerce la guarda y custodia sobre sus hijas
debiendo reintegrarlas a las dieciocho horas de ese mismo día, y que
10
Ibídem. Tomo II. Fojas 963 a 974.
11
Ibídem. Tomo II. Foja 1251.
7
esa situación debería acontecer de la misma forma el domingo

siguiente.12
9. Expedientillo **********. Conforme a la Ley de Acceso de las

Mujeres a una Vida Libre de Violencia del Distrito Federal, **********
compareció ante la Juez Décimo Noveno de lo Familiar en el Distrito
Federal, solicitando la suspensión provisional del régimen de visitas y
convivencias que ********** tendría con sus menores hijas el día ocho
de enero de dos mil once en el Centro de Convivencias; medida
provisional que le fue concedida el siete de enero de dos mil once; sin
embargo, después de analizar las comparecencias de las partes y las
pruebas aportadas por ellas, dicha medida de protección provisional
fue revocada el día siguiente, es decir, el ocho de enero de dos mil
once.13
II. Expediente **********, del índice del Juzgado Trigésimo

Octavo de lo Familiar en el Distrito Federal, formado
con motivo de la demanda presentada por **********, por
su propio derecho y en representación de sus menores
hijas.
1. Demanda inicial. Por escrito presentado el veintiséis de

septiembre de dos mil ocho, ante la Oficialía de Partes Común en
Materia Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal,
**********, por su propio derecho y en representación de sus menores
hijas ********** de apellidos **********, en la vía ordinaria civil, demandó
de ********** las siguientes prestaciones:
12
13
8
a. La declaración judicial de que ********** ha

incurrido y perpetrado actos de violencia
familiar en contra de la actora y de sus menores hijas;
b. La declaración judicial de que ********** ha incumplido con la

obligación de proveer alimentos por un periodo mayor a
noventa días;
c. La declaración judicial de que ********** ha abandonado a sus

hijas en un periodo mayor a tres meses;
d. La declaración judicial de que ********** ha perdido la patria

potestad de sus menores hijas (esto como consecuencia de lo
anterior);
e. El pago de una pensión alimenticia provisional y luego

definitiva a favor de ella y de sus menores hijas, no menor al
50 por ciento de los ingresos del demandado;
f. La guarda y custodia, primero provisional y luego definitiva de

sus menores hijas;
g. El pago de los daños y perjuicios que los actos de violencia

familiar perpetrados por el demandado han ocasionado en ella
y en sus menores hijas, en términos del artículo 323 Sextus, a
cuantificarse en ejecución de sentencia; y
h. El pago de los gastos y costas que se originen con motivo del

presente juicio.
Para sustentar sus pretensiones, en los hechos de la demanda

señaló que su esposo es adicto a la pornografía, que él y su hermano
9
han abusado sexualmente de su hija ********** y además ha incumplido

con sus deberes alimentarios para con ella y sus menores hijas. 14
Al respecto básicamente argumentó lo siguiente:
En cuanto a la adicción a la pornografía y el abuso de la

menor.
El doce de abril de dos mil tres contrajo matrimonio con el

demandado y de esa unión procrearon a tres hijas de nombres
********** de apellidos **********.15
Desde su luna de miel en abril de dos mil tres, sorprendió a su

cónyuge masturbándose y viendo pornografía; que al regresar a la
Ciudad de México, lo sorprendió en repetidas ocasiones con la misma
actitud, y cuando le hacía saber que era insostenible esa situación, él
se molestaba y comenzaba a pelear gritándole que ya estaba harto de
ella, corriéndola en diversas ocasiones del domicilio conyugal.
Así, en noviembre de dos mil tres la corrió del domicilio conyugal,

situación que le comentó a su cuñada **********, sin mencionarle el
problema de adicción a la pornografía que sufría su hermano; después
de escucharla, ella habló con sus padres, siendo así que fue el padre
del demandado **********, quien tomó la decisión de mandarlo con el
psiquiatra **********, profesionista con quien el demandado inició sus
terapias, controlándose por dos o tres semanas, pero posteriormente
recayó en su adicción, poniéndose muy agresivo, a tal grado que ella
decidió iniciar un tratamiento terapéutico con la doctora ********** en la
clínica **********; luego de un par de consultas la doctora le mencionó
que el problema de su esposo es conocido como voyerismo, y que era
14
Expediente **********. Tomo I. Fojas 1 a 14.
15
Actualmente de 8, 6 y 4 años, respectivamente.
10
un padecimiento clínico que ameritaba ser tratado en

forma urgente por especialistas y profesionales.
Como el tiempo trascurría y el demandado seguía

masturbándose y viendo pornografía, en marzo de dos mil seis, le
contó a su cuñada ********** el problema de su hermano, su respuesta
fue “que no era posible que su hermano siguiera haciendo esas
tonterías de siempre”.
Al explicarle a sus suegros lo ocurrido, recibió su total apoyo; y

como para ese entonces, ya le había conseguido a su esposo un
doctor, en la misma clínica en la que ella tomaba su terapia, de
nombre **********, sus suegros hablaron con el demandado, diciéndole
que no podría ver a la actora ni a su hija, mientras no se atendiera y
solucionara su padecimiento.
Durante el plazo que no excedió de un mes a partir de que el

demandado empezó a recibir terapia con ese doctor, ella se quedó a
vivir en la casa de sus suegros, pero finalmente regresó a su casa y
nuevamente sorprendió a su esposo masturbándose y viendo
pornografía, lo que ya hacía a todas horas, quejándose de que la
medicina que tomaba le caía muy mal y poco a poco la dejó e incluso
la tiraba, por lo que aprovechando que ella iba a terapia a la misma
clínica, le solicitó a la doctora ********** que le preguntara al doctor
********** si su cónyuge continuaba asistiendo a terapia, a lo que unos
días después le confirmó que hacía tiempo ya no asistía.
Posteriormente, en la semana del trece al diecinueve de abril de

dos mil ocho, lo vio tres veces masturbándose viendo pornografía,
pero el diecisiete de abril fue más grave, pues en esa ocasión su hija
11
********** lo estaba viendo, advirtiendo que el demandado ya ni

siquiera se percataba de su presencia ni de la de sus hijas.
Como la enfermedad de su esposo ya afectaba directamente a

sus hijas, se dio a la tarea de investigar nombres de varios doctores
para ver cómo podía atenderlas en este proceso; así un día uno de
esos doctores le dijo que seguramente su hija mayor **********
también había visto masturbándose al demandado mientras veía
pornografía, por ello le recomendaron que jugara con ella
auxiliándose de títeres para que estuviera más tranquila, pues la
menor estaba afectada, no dormía bien y tenía pesadillas
recurrentes.
Así jugando con los títeres, la menor le comentó que lo más feo
que le había pasado era cuando su papá y su tío **********, le
raspaban con los dedos su colita, diciéndoselo de diversas
formas.
Ante esa situación decidió llevar a la menor con la psicóloga

**********, pero como el demandado se dio cuenta y ante el temor de
que revelará el daño causado a su hija, las quiso acompañar; estando
con la especialista ella le comentó la situación por la que estaban
pasando y lo que la menor le dijo al jugar con los títeres, ocultando lo
del padre, pues sólo le dijo lo que la menor le comentó sobre el
tío, situación ante la que el demandado se puso furioso, a pesar
de que la especialista fue clara al decir que si ********** le había
platicado algo tan grave, era porque realmente había ocurrido;
ante esa situación entraron en el tema de la adicción de su
esposo, y ante el estado de cólera y ofensas que éste le profirió a
la especialista, ella le recomendó que mientras no se aclarara la
situación de su hija no podía ir a la casa del tío ni de visita. Pese a
12
ello, el padre hizo caso omiso de lo manifestado

por la psicóloga y llevó a ********** a casa de sus
abuelos donde vive el tío.
Por esa situación, ante el peligro que corren sus hijas por la
enfermedad del demandado, y por el abuso sexual sufrido por
********** por parte de su padre y la conducta permisiva de éste, para
que el tío de la menor cometiera actos ilícitos en su contra, el
dieciocho de junio de dos mil ocho se vio obligada a salir del domicilio
conyugal para ir a vivir a casa de su padre; y el diez de julio de dos mil
ocho se presentó ante la Fiscalía Central de Investigación para Delitos
Sexuales a fin de denunciar al demandado por el delito de abuso
sexual, por lo que se abrió la indagatoria número **********.
Ante la magnitud del problema que afectaba a su hija **********,

el dieciocho de julio de dos mil ocho, la Subdirectora Clínica del Centro
de Terapia de Apoyo a Víctimas de Delitos Sexuales, la canalizó con
la doctora **********, adscrita a la Procuraduría General de Justicia del
Distrito Federal; en dicha Procuraduría iniciaron un proceso dentro del
Sistema de Terapia para Menores y la psicóloga que atendió a
********** comentó que tenía depresión moderada y síntomas de
auto mutilación, razón por la que se encuentra en tratamiento
psiquiátrico clínico y emocional con la supervisión de la
subdirectora clínica **********, quien la remitió con el psiquiatra
particular en la Clínica **********, Doctor ********** (psiquiatra
infantil) y con la dentista particular **********, para evaluar y tratar
las lesiones que su hija se había infligido.
La dentista le informó que el problema de su hija se debía a

grandes cargas de estrés emocional, y por ello, era necesario
13
someterla a un tratamiento multidisciplinario que incluya

tratamientos profesionales en psicología y psiquiatría.
La terapia con el doctor ********** es dos veces por semana y ha

logrado estabilizar en lo posible a su hija.
Actualmente la doctora ********** está tratando el daño emocional

sufrido.
Cabe aclarar que con relación a lo antes narrado, en el hecho número

17 de la demanda, se encuentran las siguientes manifestaciones:
Primer párrafo:
“…me dijo que lo más feo que le había pasado era cuando su papá y
el tío ********** (hermano de **********, quien al parecer padece un
problema psiquiátrico) le raspaban con los dedos su colita y con
cada títere me lo decía de diferente modo pero se refería a que la
tocaban de su colita. (Revisar si esto es correcto, porque según
lo manifestado en la denuncia lo dijo sólo una vez durante el
juego y después ya no quiso hablar del tema).”
Tercer párrafo:
“Es importante que se agregue lo manifestado en la
ampliación toda vez que es más claro con quien la llevó y el
motivo por el cual llegó son (sic) esa psicóloga. La lleve…”
Cuarto párrafo:
“Falta mencionar lo que sucedió después de que el papá hizo caso
omiso de lo manifestado por la psicóloga y se llevó a **********a casa
de sus abuelos, donde vive el tío **********. Asimismo, no se
menciona el motivo por el cual se sale de su casa y que llevaron a la
menor al psiquiatra y a presentar la denuncia.”
14
En cuanto al incumplimiento de los deberes

alimentarios.
Que desde septiembre del año dos mil tres ella dejó de trabajar
para dedicarse al cuidado de sus hijas, y que desde el primer día del
mes de junio de dos mil ocho, el demandado dejó de proporcionarles
alimentos, tanto a ella como a sus menores hijas, por lo que ha dejado
de cumplir con su obligación alimentaria por más de noventa días sin
causa justificada.
2. Trámite de la demanda inicial. De esa demanda tocó su
conocimiento al Juez Trigésimo Octavo de lo Familiar del Distrito
Federal, quien la radicó y admitió con el número **********, ordenando
emplazar al demandado.16
3. Contestación de la demanda. Por escrito presentado el

veinte de octubre de dos mil ocho, ante la Oficialía de Partes Común
en Materia Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal, **********, dio contestación a la demanda negando la
procedencia de las prestaciones reclamadas, señalando
substancialmente que no es adicto a la pornografía, que jamás se ha
masturbado o visto pornografía delante de sus hijas, ni mucho menos
ha abusado sexualmente de ellas, considerando que la actora no está
en condiciones de hacer frente a sus obligaciones como madre; y que
nunca se ha opuesto a otorgarle la pensión alimenticia a la actora y a
sus hijas.
Al respecto básicamente alegó lo siguiente:
En cuanto a la adicción a la pornografía y el abuso de la

menor.
16
Ibídem. Fojas 21 y 21 vuelta.
15
Señala que con independencia de que en las imputaciones que

le hace la actora no se narran circunstancias de modo, tiempo y lugar,
desde abril de dos mil tres y a lo largo de su matrimonio, existen
diversos escritos de puño y letra de la actora que no demuestran
ningún malestar o descontento de parte de ella para con él, por el
contrario, en ellos lo describe como un buen hombre y no hace
mención de los hechos que ahora falsamente le atribuye, ni manifiesta
ninguna molestia con él, por el contrario, es ella quien le ofrece
disculpas por sus constantes cambios de ánimo y mal humor; lo cual
pone en evidencia que los actos llevados a cabo por la actora en las
mismas fechas no son congruentes con la posición calumniosa que
asume en su demanda.17
17
Los escritos a que hace referencia el demandado son los siguientes:
Postal de **********, enviada desde ********** a los padres del demandado.

“Hola familia: Estamos felices en Tahití. Hoy nos vamos de crucero, todo esta increíble! La hemos
pasado de pelos. Espero que todos estén bien. Aunque no lo crean se les extraña. Les mandamos
un beso. Los quieren ********** y **********.
P.D. La boda estuvo preciosa, gracias por todo. Saludos al ********** y al **********. Aloha!”
Tarjeta enviada en 2003 por el día de las madres, a la madre del demandado.
“Feliz día de las madres!!!
Espero que la festejen mucho sus hijos, porque se lo merece.
Quiero decirle que como madre se graduó con “Excelencia”. Tiene un hijo maravilloso y en estos
días he vivido la mejor experiencia de mi vida al lado de **********, es un hombre con muchísimas
virtudes y me está haciendo cada día más feliz. Realmente sé que el que ********** sea así se lo
debe mucho a usted. La quiero mucho y espero que la pase súper en su día.
P.D. Gracias por todo.
Feliz Día
**********.”
Carta de 18 de junio de 2004, dirigida al demandado diez días después del nacimiento de su
primer hija.
“**********:
Antes que nada quiero darte las gracias por tu apoyo desde el parto al día de hoy te has portado
increíble. La tarea de ser padres por lo visto no es nada fácil, al menos para mí me ha costado un
poco. Yo sé que esta semana estuvo muy pesada para los dos, el irte desde muy temprano y no
llegar hasta en la noche me imagino que es muy duro. Lo se me he dado cuenta que te es muy
pesado y si me moleste anoche contigo y con todos en general es porque me fastidie llego el
momento que creí que no iba a poder mas en todos los aspectos me duele mucho algunas partes
del cuerpo no siento que puedo tranquilizar a ********** al estar aquí con tanta gente me ataranto
(No porque sea tu familia) créeme que es con la gente que HOY me siento más cercana, pero tanto
tu como yo llevamos casi 2 semanas fuera de casa y empezando una nueva vida. Si te quiero decir
que me perdones y me entiendas. Han sido unos días con muchas emociones y cambios de ánimo
y de humor me pongo muy triste y lloro sin razón y no tengo ganas de estar con nadie. Tengo
miedo de no estar haciendo bien las cosas y me ha costado mucho trabajo TODO en general. El
simple hecho de no comer ni cenar juntos la verdad te extraño mucho y conforme va pasando el
día me empiezo a sentir mal y de mal humor y a la hora que llegas estoy insoportable lo acepto y te
pido perdón. Quiero que sepas que hasta hoy has sido el mejor papá. Te felicito. Por siempre te
voy a amar. No lo olvides.
**********”.
16
Que la verdad de las cosas es que la actora fue

quien abandonó el domicilio conyugal después de una
discusión, que efectivamente acudió a ver a su hermana y a sus
padres y con motivo de ello tuvieron una plática en la cual éstos
últimos sugirieron ver a un doctor para tratar de resolver sus
problemas y no discutieran de la manera en que lo hacían; en
consecuencia, ambos acudieron de manera independiente a ver al
doctor **********.
Aunque niega los hechos narrados por la actora en cuanto a la

obsesión de ver pornografía y masturbarse, acepta que acudió a
consultas con el médico **********.
Niega haberse masturbado o haber visto pornografía enfrente de

alguna de sus hijas y aclara que en el mes de marzo de dos mil
ocho, su hija ********** comenzó con una infección urinaria, al no
quitársele esa infección acudieron a su médico pediatra **********
y en la consulta respectiva la actora le mencionó al referido
médico que su hija había acusado a un niño de su salón de
haberla lastimado en su zona genital.
Saliendo de la cita la actora fue al colegio de **********a expresar

su molestia, habló con la maestra de la niña y la psicóloga de la
escuela, ellas le explicaron que no había posibilidad de que eso
hubiera ocurrido, no obstante, la actora pidió tajantemente que la
Tarjeta de 2 de mayo de 2007, dirigida al demandado.
“Te amo:
Espero que todo salga bien en esta nueva etapa de nuestra vida. Te juro (te prometo) que voy a
poner todo para estar al 100% para mi familia en todos los aspectos. Te amo y gracias por ser mi
esposo. Cuentas con todo mi apoyo. Sólo te pido algo y piénsalo Se feliz. No estés enojado todo va
a estar bien. Hoy hace 4 meses se fue ********** y la extraño, pero sé que está muy contenta por
nosotros. Siempre me lo decía ********** es muy buen hombre y así es. Vales mucho como hombre,
amigo, amante y papá Felicidades! Se cumplió UNA DE NUESTRAS ilusiones tener 3 hijos”.
Escrito de marzo de 2008, con motivo de un regalo entregado al demandado.

“Mi amor:
Espero que te guste y te sirva mucho. Te amo y eso nunca va a cambiar. Espero que este sea un
muy buen año en tu vida. Se feliz. Tu esposa **********.”
17
psicóloga de la escuela no evaluara a **********, que ella lo haría con

un particular; con motivo de esa situación la actora coordinó una cita
con la psicóloga ********** para que evaluara a **********, a fin de saber
si había sucedido efectivamente algo en la escuela; en dicha consulta
la actora cambió la versión y sostuvo que había sido su hermano
********** quien había lastimado a **********.
Frente a esa situación y preocupado por lo sucedido, solicitó a la

doctora realizar todo lo necesario para determinar la veracidad de la
información que ahora compartía la actora; inicialmente recomendó
que ********** únicamente no pernoctará en casa de sus abuelos
donde vive su hermano, pero que si podía acudir con alguno de
ellos.
Aclara que jamás se molestó o llevó a cabo algún acto para

entorpecer la labor de la doctora, por el contrario, sugirió que para
aprovechar el periodo vacacional, la menor asistiera a citas con la
misma; pero al hablar nuevamente con la doctora, ésta le informó que
ya no podía ver a su hija por falta de tiempo en su agenda,
comentándole que ya le había recomendado a la actora otra doctora.
Que no debe pasar desapercibido que en la demanda

aparecen varios comentarios, que supone no fueron omitidos por
un error de la actora, en los cuales se hacen diversas notas sobre
posibles imprecisiones y defectos en la narración de los hechos,
lo cual dice pone en evidencia la maquinación y falsedad con que
se conduce la actora.
En cuanto al incumplimiento de los deberes alimentarios:
18
Manifiesta que jamás ha dejado de cumplir con

sus obligaciones alimentarias, por el contrario, que es
la actora quien ha intentado impedir que cumpla con ellas, pues
cuando la actora abandonó el domicilio conyugal la única manera de
cumplir con sus obligaciones alimentarias era a través de la cuenta
**********, que ambos tenían aperturada como cotitulares en **********,
sucursal **********, en la que el día dos de julio de dos mil ocho, le
depósito la cantidad de **********; no obstante, al intentar realizar otro
depósito se le informó que la actora ya había cancelado dicha cuenta
el cuatro de julio siguiente, quedándose sin ese medio para cumplir
con su obligación.
Por ese motivo, a partir del quince de agosto de dos mil ocho ha
acudido a la Dirección General de Consignaciones del Tribunal
Superior de Justicia del Distrito Federal a consignar diversas
cantidades por concepto de pensión alimenticia a favor de la actora y
sus hijas.18
Que adicionalmente, ha continuado pagando las colegiaturas de

sus hijas a pesar de que la actora no llevó a las niñas a la escuela en
ese periodo; así como el seguro de gastos médicos de la actora y de
sus menores hijas.
Del mismo modo y con el propósito de poner en evidencia que es

la actora quien ha intentado impedir que cumpla con sus obligaciones
alimentarias, refiere que por políticas de la empresa en que trabaja
todas las conversaciones telefónicas son grabadas, razón por la que
transcribe una conversación sostenida con la actora el dieciséis de
18
Las cantidades consignadas son las siguientes:
$**********, el *********
$**********, el *********
$**********, el *********
19
julio de dos mil ocho, de la cual asevera se advierte que la actora se

ha negado a recibir cantidad alguna por parte de él. 19
Que la actora sin ningún motivo o justificación abandonó el

domicilio conyugal el veinticuatro de junio de dos mil ocho y
desde el día diez de julio del mismo año, le ha negado el acceso a
sus hijas, a las que no ha podido ver ni hablar, motivo por el cual
el catorce de agosto de dos mil ocho, demandó de la actora el
derecho de visitas y convivencias que por ley tiene para con sus
menores hijas, y es de destacarse que cuando contestó dicha
demanda asumió una posición radicalmente distinta a la que
ahora pretende hacer valer, pues en esa contestación niega que
ella le impida ver a sus hijas, señalando que si el actor en esa
demanda no había tenido acceso a ellas es porque no las había
procurado, pero en ningún momento menciona alguna de las
acusaciones que ahora hace valer en su contra, ni tampoco
menciona la existencia de la denuncia por abuso sexual que inició
en su contra.
19
La conversación trascrita, es la siguiente:
“**********: Bueno. --- **********: eeeh ¿Qué pasó? --- **********: ¿Qué pasó? --- **********: Oye
este bueno te quería decir que el no sé si el 22 o el 21 es el pago de tu tarjeta que me digas que
si te la pago o te mando el dinero o que hacemos digo, porque tienes ahí lo que te, lo del pago
de los libros de las niñas, lo tu estudio y no sé qué otra cosa. --- **********: No hay ningún pago.
--- **********: Entonces ¿Te mando el dinero o qué? --- **********: No, ya me lo pagó mi papá. ---
**********: Bueno necesitas dinero. --- **********: No. --- **********: Para las niñas. --- **********:
No. --- **********: ¿No necesitas dinero? --- **********: NO. --- **********: Bueno, ¿no necesitas
dinero para que, para nada de las niñas?, bueno. --- **********: No. Mi papá me está pagando
todo. --- **********: Pero yo tengo que pagarlo son mis hijas. --- **********: No necesito que tú me
des dinero. --- **********: Bueno, no es para ti, ya sé que tú ya no quieres nada de mí, eso me
quedo muy claro, pero… --- **********: Haaa. --- **********: tengo la responsabilidad de pagarles
las cosas a mis hijas y a ti aunque tú no quieras, digo si tú no quieres, pero tengo que pagarles
cosas a mis hijas. --- **********: Mande. --- **********: Tengo la responsabilidad y la obligación de
pagarle cosas a mis hijas. --- **********: Bueno, cuando necesite yo te aviso, ahorita no necesito.
--- **********: ¿Me puedes pasar, podría platicar con las niñas? --- **********: No. --- **********:
Bueno, ¿No me dejas saludarlas? --- **********: No. --- **********: Bueno, ¿las puedo ir a ver? ---
**********: No. --- **********: Ok, este, bueno, está bien, voy, ¿les puedo hablar mañana? ---
**********: No **********, y sí ya no puedes hablar con ellas. --- **********: ¿Hasta cuándo? ---
**********: Hasta que me lo autoricen. --- **********: ¿Te lo autorice quién? --- **********: La
persona con quien estoy viendo mis cosas, ahorita no. --- **********: Bueno, ¿entonces no
necesitas que te dé dinero, no necesitas nada? --- **********: No. --- **********: Bueno ok, hasta
luego.”
20
También menciona que la actora le ha negado la

convivencia con sus menores hijas y hace notar el
hecho de que la actora haya presentado una denuncia en su contra,
de ninguna manera implica que la misma sea fundada.
Como excepciones y defensas opuso las que estimó

convenientes, destacando en ellas que la actora no aporta elementos
de prueba para acreditar sus hechos; que del contenido de las cartas
suscritas por la actora se aprecia que los hechos narrados en la
demanda no corresponden a la verdad, pues en las fechas en que la
actora sostiene que el demandado realizó conductas aberrantes, le
enviaba cartas en las cuales sólo expresaba amor y felicidad; que en
todo caso, es la actora quien está causando daño a sus hijas al
privarlas de tener una vida familiar normal, ya que fue ella quien sin
motivo abandonó el domicilio conyugal, les impide acudir a la escuela,
canceló la cuenta bancaria en la que hacia pagos por concepto de
pensión alimenticia, impide a las menores ver a su padre y las somete
a pruebas psicológicas y físicas sumamente delicadas; y que además
se opone a que la actora sea la titular del derecho de guarda y
custodia, hasta en tanto no se someta a las terapias y tratamientos
correspondientes para regular su estado emocional evidentemente
afectado.
4. Reconvención. En el mismo escrito en el que dio

contestación a la demanda, ********** inició demanda reconvencional
en contra de **********, en la cual le reclamó las siguientes
prestaciones:
a. La suspensión de la patria potestad que **********ejerce sobre

********** de apellidos **********, hasta en tanto no exista
certeza médica de que se encuentra en un estado físico y
21
mental adecuado para hacerlo, en virtud de las conductas que

ponen en riesgo el sano desarrollo de sus menores hijas;
b. La guarda y custodia provisional y definitiva de sus menores

hijas, hasta en tanto no exista certeza médica de que la
demandada reconvencional se encuentra en un estado físico y
mental adecuado para hacerlo; y
c. El pago de gastos y costas.
Para sustentar sus pretensiones básicamente argumentó lo

siguiente:
Que a la demandada se le debe suspender la patria potestad

que ejerce sobre sus hijas, hasta en tanto no exista certeza médica
de que la demandada se encuentra en un estado físico y mental
adecuado para hacerlo, en virtud de que sus conductas ponen en
riesgo el sano desarrollo de sus hijas; que ello es así, en virtud de
que sin razón o justificación alguna abandonó el domicilio conyugal,
mudándose al domicilio de su padre y durante aproximadamente dos
semanas a partir del abandono, le permitió el acceso a sus hijas, sin
que se le permitiera retirarlas del domicilio donde se encontraban,
(casa del padre de la demandada), a efecto de tener convivencia libre,
personal y directa con ellas.
Que a partir del diez de julio de dos mil ocho, no le ha permitido

tener acceso a sus hijas ni por teléfono y que la única manera que
tenía para cumplir con sus obligaciones alimentarias era a través de
depósitos bancarios, sin embargo, la demandada canceló la cuenta
bancaria en que podía hacerlos con la intención de que incumpliera
con sus obligaciones alimentarias.
22
Añade que el catorce de agosto de dos mil ocho,

él interpuso una demanda en contra de **********, en la que solicitó un
régimen de visitas y convivencias con sus menores hijas, la cual fue
del conocimiento del Juzgado Vigésimo Octavo de lo Familiar en el
Distrito Federal, bajo el expediente **********; que al contestar esa
demanda, ********** argumenta que no ha visto a sus hijas por no
desear hacerlo y después en forma incongruente lo demanda diciendo
que él es un peligro para sus hijas y que por lo tanto no debe ni
acercárseles; situación que dice, es indicativa del estado mental
de la demandada reconvencional, ya que por un lado le impide ver
a las niñas, y por el otro, alega que no ha tenido acceso a ellas
porque no las ha procurado y es un peligro para ellas.
Que el diecinueve de agosto de dos mil ocho, fue informado por

la directora del ********** que sus hijas ********** y ********** no
asistieron a clases en el inicio del ciclo escolar 2008-2009, a pesar de
que él realizó los pagos correspondientes para su inscripción y
material escolar, señalando que tal situación es un claro indicativo del
desequilibrio emocional por el que está pasando la demandada
reconvencional.
Indica que el tres de octubre de dos mil ocho, acudió en

compañía del Notario Público número ********** del Distrito Federal al
domicilio del padre de la demandada donde habitan sus menores
hijas, con el fin de convivir con ellas, sin embargo, al tocar el timbre le
contestó el padre de la demandada indicándole que no iba a ser
posible su petición y que tampoco podía hablar con él ni con la
demandada, porque había una orden del Juez; por lo que ante esa
negativa decidió retirarse del lugar pero en ese momento arribó al
lugar una patrulla de la Secretaría de Seguridad Pública, por lo que el
23
Notario procedió a identificarse como tal ante el Agente que la

conducía, preguntándole sobre el motivo de su presencia en ese lugar,
a lo cual indicó que venía a ese sitio, porque el vecino de la casa
objeto de la diligencia había requerido los servicios de la autoridad
para retirar a personas que estaban perturbando su tranquilidad
mediante agresiones; posteriormente el agente de la Secretaría de
Seguridad Pública, llamó al timbre y unos instantes después se abrió
la puerta del estacionamiento de la casa y apareció el padre de la
demandada reconvencional y en ese momento nuevamente le indicó
que iba a ver a sus hijas, manifestándole con tono agresivo que no era
posible, ya que había una orden del Juez que no se lo permitía, por lo
que le pidió una copia de dicha orden, misma que indicó no tener, y
después de varios minutos de discusión le volvió a insistir que él tenía
derecho a ver a sus hijas y que mientras no existiera una orden
judicial, él podría verlas, a lo que en esa ocasión el padre de la
demandada le reiteró que tenía entendido de que había una orden del
Juez que se lo impedía.
Aduce que este hecho es otro indicativo del estado mental

de la actora y evidentemente existe una clara posibilidad de poner
en riesgo la salud y estado emocional de sus menores hijas, ya
que crecerán bajo esa misma falsa apreciación de la realidad,
causándoles un grave daño al pretender contaminar en su mente
y persona la imagen que de su padre tienen y de hecho al intentar
con este procedimiento privarlas del derecho de contar con una
figura paterna en su vida.
Que de igual manera, atenta contra la salud y estado

emocional de sus menores hijas el hecho de que sean educadas y
crezcan con la falsa idea de que su padre no quiso participar en
su educación y desarrollo, creyendo que las abandonó, cuando
24
no pasa ni un sólo minuto en que no se preocupe

por su sano desarrollo.
Señala que el mismo día tres de octubre de dos mil ocho el

padre de la demandada reconvencional le informó que se interpuso
una demanda en su contra, por lo que acudió a ver de qué se trataba
y, en consecuencia, se dio por notificado, percatándose de que estaba
demandado bajo argumentos falsos, calumniosos, absurdos e
incongruentes; causándole angustia que con motivo de las mentiras
que sostiene la hoy demandada, se someta a su hija ********** al
calvario que implica una denuncia penal por abuso sexual con los
consiguientes análisis físicos y psicológicos que ello implica.
Que la demandada inició una denuncia en su contra por abuso

sexual, pero ello de ninguna manera prejuzga sobre la veracidad de la
misma, pues conforme al derecho de presunción de inocencia se le
debe considerar inocente hasta en tanto no se le encuentre culpable
por sentencia firme de la comisión de algún delito.
Agrega que con fecha catorce de septiembre de dos mil

ocho su hija ********** fue ingresada a urgencias del **********, sin
que hasta la fecha tenga información sobre lo ocurrido en dicho
evento.
Que es procedente la suspensión de la patria potestad en el

supuesto de que el progenitor que tenga la custodia pueda llevar a
cabo actos que pongan en riesgo la salud física o emocional de los
menores, y en el caso la demandada está poniendo en riesgo a sus
menores hijas a través de su conducta desde su separación, que en
resumen es la siguiente:
25
 El veinticuatro de junio de dos mil ocho la demandada

abandonó el domicilio conyugal.
 A partir de su abandono y durante dos semanas

aproximadamente no le permitió el acceso a sus hijas.
 El cuatro de julio de dos mil ocho cancela su cuenta bancaria
 La demandada reconvencional no llevó a sus hijas a la escuela

a pesar de que es derecho de las mismas.
 No le ha permitido tener acceso a las mismas.
 Que la demandada reconvencional alega que el suscrito es el

que se ha abstenido de buscar cualquier clase de
acercamiento físico y emocional con sus menores hijas y se ha
ocupado de alejar a las mismas.
 El padre de la demandada reconvencional le negó el acceso a

las mismas, sin justificación alguna.
 Sin avisarle, la demandada lleva a su hija **********a urgencias

del **********.
 Que inició una denuncia en su contra por el delito de abuso

sexual.
 Que la demandada reconvencional escribió cartas de su puño

y letra en las que lo describe como una persona totalmente
distinta a la que ahora pretende describir en su escrito inicial
26
de demanda, cartas que inclusive fueron

escritas en el mismo lapso de tiempo en el
que según la demandada reconvencional él realizaba los
supuestos actos depravados que narra.
5. Contestación a la reconvención. Por escrito presentado el

siete de noviembre de dos mil ocho, ante la Oficialía de Partes Común
en Materia Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal, ********** dio contestación a la demanda argumentando en
esencia lo siguiente:
Que el hecho de que hubiera o no abandonado el domicilio

conyugal, no tiene ninguna relación con su estado físico y mental; que
la afirmación vertida en el sentido de que no le ha permitido tener
acceso con sus menores hijas ni siquiera por vía telefónica, resulta
falso, además de que tal argumento carece de circunstancias de
modo, tiempo y lugar.
Que a ********** le corresponde acreditar que no es apta para

ostentar la guarda y custodia de sus hijas y no a ella acreditar que si lo
es, además de que el actor en la reconvención no expone actos de los
que realmente se desprenda que ha puesto en peligro la vida o
desarrollo de sus hijas.
6. Sentencia de Primera Instancia. Seguidos los trámites

legales, el cinco de octubre de dos mil diez, el Juez de Primera
Instancia, dictó sentencia en donde resolvió:
“PRIMERO.- Fue procedente la vía Ordinaria Civil para la

substanciación de este juicio de Pérdida de la Patria Potestad.
27
SEGUNDO.- La parte actora en el principal no acreditó su acción y el

demandado justificó sus excepciones y defensas; y en cuanto a la
reconvención, el actor acreditó su acción y la demanda (sic) no
justificó sus excepciones y defensas; en consecuencia,
TERCERO.- Se ABSUELVE al señor ********** de la Pérdida de la

Patria Potestad que ejerce sobre sus menores hijas de nombres
**********, todas de apellidos **********, en términos de los
considerandos IV a VI de esta resolución.
CUARTO.- Se SUSPENDE la Patria Potestad que la C. **********

venía ejerciendo sobre sus menores hijas de nombres **********
todas de apellidos **********, hasta en tanto se someta a una terapia
Psicológica o Psiquiátrica, que la ayude a sobrellevar los conflictos
con el señor **********, así como la orientación que necesite para
cumplir con las obligaciones de crianza, ejerciendo la patria potestad
sobre dichas menores, únicamente al señor **********.
QUINTO.- UNA VEZ QUE LA PRESENTE RESOLUCIÓN QUEDE

FIRME, se deberá girar atento oficio al C. Director del Centro Integral
de Salud Mental, para que se sirva, realizar el Tratamiento
Terapéutico, que sea conveniente a la señora **********, que la ayude
a sobrellevar los conflictos con el señor **********, así como la
orientación que necesite para cumplir con las obligaciones de crianza
establecidas en el artículo 414 Bis el Código Civil, debiendo
presentarse la señora **********, a dicha institución ubicada en
**********; los días y horas que al efecto se señalen para la práctica
del citado tratamiento terapéutico, apercibida que en caso de no
hacerlo se le impondrá como medida de apremio una MULTA POR
EL EQUIVALENTE A SESENTA DÍAS DE SALARIO MÍNIMO
GENERAL VIGENTE EN EL DISTRITO FEDERAL, de conformidad
con la fracción I del artículo 73 del Código de Procedimientos Civiles.
SEXTO.- Se decreta la Guarda y Custodia definitiva de las menores

**********, todas de apellidos **********, a favor de su señor padre
**********, a quien se le previene para que dentro del término de
28
TRES DÍAS manifieste a este H. Juzgado el

domicilio donde detentará dicha guarda y custodia
apercibido de que en caso de no hacerlo, se le impondrá alguna de
las medidas de apremio previstas por la ley.
SÉPTIMO.- UNA VEZ QUE LA PRESENTE RESOLUCIÓN QUEDE

FIRME, se señalará día y hora, a fin de que ante la presencia
judicial, la C. **********, ENTREGUE A SUS MENORES HIJAS
**********, todas de apellidos **********, a su señor padre **********.
OCTAVO.- Mediante atento oficio hágase del conocimiento al C.

JUEZ VIGÉSIMO OCTAVO DE LO FAMILIAR DEL DISTRITO
FEDERAL, que mediante sentencia definitiva de fecha cuatro de
octubre del año en curso, se decretó la guarda y custodia definitiva
de las menores hijas de las partes de nombres ********** todas de
apellidos **********, a favor de su señor padre **********, ello en
estricto cumplimiento a lo ordenado por la sentencia de fecha tres de
febrero del año dos mil nueve, dictada por la H. SEGUNDA SALA
FAMILIAR DE ESTE TRIBUNAL, en la que se ordenó al suscrito se
avocara a resolver sobre la Guarda y Custodia definitiva de dichas
menores, acompañando a dicho oficio la copia certificada de la
sentencia dictada por el Tribunal de Alzada, señalada en líneas
anteriores, visible a fojas 486 a 503 (sic) del Primero (sic) tomo.
NOVENO.- Se condena al señor **********, al pago de una Pensión

Alimenticia Definitiva a favor de la parte actora **********, por el
equivalente al DOCE PUNTO CINCO POR CIENTO MENSUAL, de
los ingresos y demás prestaciones ordinarias como extraordinarias,
que reciba el demandado; sin embargo no pasa por desapercibido
que, le resta al demandado un OCHENTA Y SIETE PUNTO CINCO
POR CIENTO de sus ingresos y demás prestaciones para solventar
sus necesidades alimenticias, las cuales no se cuantificaron ni se
acreditaron, aunado a que no se demostró que la actora labore y
obtenga ingresos, por lo que UNA VEZ QUE LA PRESENTE
SOLUCIÓN QUEDE FIRME se deberá girar atento oficio al C.
REPRESENTANTE LEGAL DE LA INSTITUCIÓN BANCARIA
29
DENOMINADA **********, para que en forma definitiva se sirva

ordenar a quien corresponda, descuente el porcentaje arriba
señalado, por concepto de pensión alimenticia; y tomando en
consideración que en diverso informe rendido por ********** visible a
fojas 233 Primer Tomo (sic), se informó que la citada Institución abrió
la cuenta número ********** a nombre de la actora en la cual se
realiza de manera quincenal el depósito de la pensión alimenticia; en
consecuencia, el C. REPRESENTANTE LEGAL DE LA FUENTE
LABORAL DEL DEMANDADO O EN SU CASO A QUIEN
CORRESPONDA, deberá depositar la cantidad que resulte de la
pensión alimenticia decretada en la cuenta número ********** de la
citada institución bancaria a nombre de la actora **********, una vez
efectuados los descuentos estrictamente legales que se le hagan al
deudor alimentario, previa identificación y recibo que otorgue; en
términos del considerando XI de la presente resolución.
DÉCIMO.- Se absuelve al señor ********** del Pago de Daños y

Perjuicios en términos del Considerando XII de este Fallo.
DÉCIMO PRIMERO.- No se hace especial condenación en costas.
DÉCIMO SEGUNDO.- Agréguese al legajo correspondiente copia

autorizada de la presente resolución.
DÉCIMO TERCERO.- NOTIFÍQUESE.”20
7. Recurso de Apelación. Inconforme con la resolución anterior,

hijas interpuso recurso de apelación, del que conoció la Segunda Sala
Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, quien
dictó sentencia el veinticuatro de enero de dos mil once, en el sentido
siguiente:
20
Expediente **********. Tomo II. Fojas 1102 a 1150.
30
“PRIMERO.- Resultan uno fundado y otro fundado

en suplencia de la queja deficiente en beneficio de
las hijas menores de edad, de los agravios hechos valer por la actora
**********, por propio derecho y en representación de sus menores
hijas **********, todas de apellidos **********, omitiendo el estudio de
los demás; en consecuencia.
SEGUNDO.- Se deja insubsistente la sentencia impugnada de fecha

cinco de octubre del año dos mil diez, por lo que se ordena la
reposición del procedimiento.
TERCERO.- No se hace especial condena en costas procesales.
CUARTO.- Notifíquese. Remítase testimonio de esta resolución al A

quo para su conocimiento, devolviéndole los autos principales y
documentos base de la acción y en su oportunidad archívese el toca,
como asunto concluido.”21
8. Reposición del procedimiento ordenado por la Sala.

En cumplimiento a lo ordenado en la ejecutoria anterior por la
Segunda Sala Familiar del Tribunal Superior de Justicia del
Distrito Federal, el Juez Trigésimo Octavo de lo Familiar del
Distrito Federal repuso el procedimiento para los fines ordenados
y seguidos los trámites legales correspondientes, mediante
resolución de cinco de agosto de dos mil once, volvió a dictar
sentencia, en la que determinó lo siguiente:
“PRIMERO.- Fue procedente la vía Ordinaria Civil para la

substanciación de este juicio de Pérdida de la Patria Potestad.
SEGUNDO.- La parte actora en el principal no acreditó su acción y el

demandado justificó sus excepciones y defensas; y en cuanto a la
21
31
reconvención, el actor acreditó su acción y la demanda (sic) no

justificó sus excepciones y defensas; en consecuencia,
TERCERO.- Se ABSUELVE al señor ********** de la Pérdida de la

Patria Potestad que ejerce sobre sus menores hijas de nombres
**********, todas de apellidos **********, en términos de los
considerandos IV a VI de esta resolución.
CUARTO.- Se suspende la Patria Potestad que la C. **********venía

ejerciendo sobre sus menores hijas de nombres ********** todas de
apellidos **********, hasta en tanto se someta a una terapia
psicológica o psiquiátrica, que la ayude a sobrellevar los conflictos
con el señor **********, que permitan una adecuada manifestación de
sus emociones y sentimientos, así como la orientación que necesite
para cumplir con las obligaciones de crianza, ejerciendo la patria
potestad sobre dichas menores, únicamente el señor **********.
QUINTO.- UNA VEZ QUE LA PRESENTE RESOLUCIÓN QUEDE

FIRME, se deberá girar atento oficio a la **********, ubicada en la
calle de **********, a efecto de que a la mayor brevedad posible, se
sirva realizar el tratamiento terapéutico, que sea conveniente a la
señora **********, que la ayude a sobrellevar los conflictos con el
señor **********, que permitan una adecuada manifestación de sus
emociones y sentimientos, así como la orientación que necesite para
cumplir con las obligaciones de crianza establecidas en el artículo
414 Bis del Código Civil; debiendo presentarse la señora **********, a
dicha institución, los días y horas que al efecto se señalen para la
práctica del citado tratamiento terapéutico, apercibida que en caso
de no hacerlo se le impondrá como medida de apremio una MULTA
POR EL EQUIVALENTE A SESENTA DÍAS DE SALARIO MÍNIMO
SEXTO.- UNA VEZ QUE LA PRESENTE RESOLUCIÓN QUEDE

FIRME, se deberá girar atento oficio a la **********, cuya ubicación se
señaló en el Punto Resolutivo que antecede, a efecto de que a la
32
mayor brevedad posible, se sirva realizar el

tratamiento terapéutico, que sea conveniente al
señor **********, que para el efecto de tener una mejor integración
con sus menores hijas, a fin de que pueda atenderlas de la mejor
manera posible, y cumplir así con sus obligaciones de crianza
establecidas en el artículo 414 Bis del Código Civil; debiendo
presentarse el señor **********, a dicha institución; los días y horas
que al efecto se señalen para la práctica del citado tratamiento
terapéutico, ello a efecto de que no se perjudique la debida
integración de las menores **********, ambas de apellidos **********
con sus padres, apercibido que en caso de no hacerlo se le
impondrá como medida de apremio una MULTA POR EL
EQUIVALENTE A SESENTA DÍAS DE SALARIO MÍNIMO
SÉPTIMO.- Se decreta la Guarda y Custodia definitiva de las

menores **********, todas de apellidos **********, a favor de su señor
padre **********, a quien se le previene para que dentro del término
de TRES DÍAS manifieste a este H. Juzgado el domicilio donde
detentará dicha guarda y custodia apercibido que en caso de no
hacerlo, se le impondrá alguna de las medidas de apremio previstas
por la ley.
OCTAVO.- UNA VEZ QUE LA PRESENTE RESOLUCIÓN QUEDE

FIRME, se señalará día y hora, a fin de que ante la presencia
judicial, la C. **********, entregue a sus menores hijas **********,
todas de apellidos **********, a su señor padre **********.
NOVENO.- Mediante atento oficio hágase del conocimiento al C.

FEDERAL, que mediante sentencia definitiva de fecha dos de agosto
del año en curso, se decretó la guarda y custodia definitiva de las
menores hijas de las partes de nombres ********** todas de apellidos
**********, a favor de su señor padre **********, ello en estricto
cumplimiento a lo ordenado por la sentencia de fecha tres de febrero
33
del año dos mil nueve dictada por la H. Segunda Sala Familiar de
este tribunal, en la que se ordenó al suscrito se avocara a resolver
sobre la Guarda y Custodia definitiva de dichas menores,
acompañando a dicho oficio la copia certificada de la sentencia
dictada por el Tribunal de Alzada, señalada en líneas anteriores,
visible a fojas 511 a 530 (sic) del Primero (sic) tomo.
DÉCIMO.- Se ABSUELVE al C. ********** del pago de una pensión

alimenticia definitiva en favor de sus menores hijas de nombres
********** todas de apellidos **********, así como de la señora
**********, por lo que, se decreta la CANCELACIÓN de la pensión
alimenticia provisional que fue fijada en este procedimiento por el
equivalente al CINCUENTA POR CIENTO MENSUAL, del sueldo y
demás prestaciones que obtenga el C. **********, a favor de sus
menores hijas y de la C. **********, por lo que, UNA VEZ QUE LA
PRESENTE RESOLUCIÓN QUEDE FIRME, se deberá girar atento
oficio al C. Representante legal de **********, para que se sirva
DEJAR SIN EFECTOS la pensión alimenticia provisional ordenada
mediante oficio número ********** de fecha nueve de octubre del año
dos mil ocho.
DÉCIMO PRIMERO.- Se ABSUELVE al señor **********, del pago de

daños y perjuicios, en términos del considerando XII de este fallo.
DÉCIMO SEGUNDO.- No se hace especial condenación en costas.
DÉCIMO TERCERO.- Agréguese al legajo correspondiente copia

autorizada de la presente resolución.
DÉCIMO CUARTO.- NOTIFÍQUESE.”22
9. Segundo recurso de apelación. Inconforme con esa

determinación, **********, por su propio derecho y en
22
Ibídem. Tomo III. Fojas 264 a 322.
34
representación de sus menores hijas interpuso

recurso de apelación.
En fecha diecinueve de octubre de dos mil once, la Segunda

Sala Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal,
dictó sentencia en la que resolvió:
“PRIMERO.- Se declaran infundados, inoperantes e

insuficientes los agravios hechos valer por la apelante;
en consecuencia se CONFIRMA la sentencia definitiva
recurrida de fecha cinco de agosto del año dos mil
once.
SEGUNDO.- No se hace condena en costas

procesales.
TERCERO.- Notifíquese y remítase testimonio de esta

resolución, autos principales y documentos al Juzgado
de origen y en su oportunidad archívese el toca como
asunto concluido”.23
CUARTO. Trámite del juicio de amparo. Inconforme con esta

última sentencia, **********, por su propio derecho y en representación
de sus menores hijas **********, todas de apellidos **********, promovió
demanda de amparo directo, la cual por razón de turno correspondió
conocer al Decimocuarto Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Primer Circuito, cuyo presidente la admitió a trámite mediante proveído
de trece de diciembre de dos mil once, en el que ordenó su registro
bajo el número D.C. **********.
QUINTO. Solicitud de ejercicio de la facultad de atracción.

Por escrito de dos de febrero de dos mil doce, presentado ante la
23
Toca de Apelación **********. Fojas 119 a 175.
35
Oficina de Certificación Judicial y Correspondencia de la Suprema

Corte de Justicia de la Nación, la parte quejosa solicitó que el asunto
se pusiera a consideración de los Ministros integrantes de la Primera
Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, por considerar que
el asunto reunía los requisitos de importancia y trascendencia para ser
atraído.
SEXTO. Trámite de la facultad de atracción ante la Suprema

Corte de Justicia de la Nación. Por auto de nueve de febrero de dos
mil doce, el Presidente de la Primera Sala de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación ordenó formar y registrar la solicitud de ejercicio
de la facultad de atracción bajo el número ********** y dispuso que se
sometiera a consideración de los Ministros integrantes de la Primera
Sala.
En sesión privada de quince de febrero de dos mil doce, el

Ministro Jorge Mario Pardo Rebolledo hizo suya la solicitud de ejercicio
de la facultad de atracción, razón por la que en acuerdo de veintidós
de febrero siguiente, el Presidente de esta Primera Sala admitió a
trámite la solicitud de referencia y ordenó formar y registrar el
expediente, turnando los autos a la ponencia del Ministro Jorge Mario
Pardo Rebolledo, para la elaboración de la resolución correspondiente.
Por sentencia de fecha veintiocho de marzo de dos mil doce,

esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación,
determinó ejercer la facultad de atracción para conocer del amparo
directo **********.24
SÉPTIMO. Trámite del juicio de amparo directo atraído.

Mediante acuerdo de diecisiete de mayo de dos mil doce, el
24
Juicio de Amparo Directo ********** Fojas 3 a 28.
36
Presidente de esta Primera Sala de la Suprema Corte

de Justicia de la Nación ordenó avocarse al
conocimiento del asunto, registrándolo con el número 22/2012, y
designó como ponente al Ministro Jorge Mario Pardo Rebolledo, para
la elaboración del proyecto de resolución. 25
C O N S I D E R A N D O:
PRIMERO. Competencia. Esta Primera Sala de la Suprema

Corte de Justicia de la Nación, es legalmente competente para
conocer del presente amparo directo, en términos de lo dispuesto por
los artículos 107, fracción V, último párrafo, de la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos; 182, fracción I de la Ley de Amparo
y 21, fracción III, inciso b) de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la
Federación; en concordancia con lo dispuesto en el punto segundo,
párrafo segundo y cuarto del Acuerdo General 5/2001, emitido por el
Pleno de este Alto Tribunal, publicado en el Diario Oficial de la
Federación, el veintinueve de junio de dos mil uno, en razón de que el
asunto corresponde a la materia civil, competencia exclusiva de esta
Sala y, su resolución no requiere la intervención del Tribunal Pleno.
SEGUNDO. Oportunidad de la demanda. La demanda de

amparo se interpuso con oportunidad debida en razón de lo siguiente:
De acuerdo con la certificación a que alude el artículo 163 de la

Ley de Amparo, la sentencia reclamada fue notificada a la parte
quejosa por Boletín Judicial el jueves veinte de octubre de dos mil
once, en consecuencia, en términos de lo dispuesto en el artículo 34
de la propia ley, esa notificación surtió efectos el día hábil siguiente, es
decir, el viernes veintiuno del mismo mes y año.
25
Ibídem. Foja 173.
37
Atendiendo a lo anterior, el término de quince días que para la

interposición de la demanda de garantías, establece el artículo 21 de
la Ley Reglamentaria de los Artículos 103 y 107 Constitucionales,
empezó a correr el lunes veinticuatro de octubre de dos mil once y
feneció el miércoles dieciséis de noviembre del propio año,
descontando de ese plazo los días veintidós, veintitrés, veintinueve y
treinta de octubre, cinco, seis, doce y trece de noviembre de dos mil
once por ser sábados y domingos, y por tanto inhábiles en términos de
lo dispuesto en los artículos 23 de la Ley de Amparo y 163 de la Ley
Orgánica del Poder Judicial de la Federación, así como el treinta y uno
de octubre del propio año por ser inhábil para la autoridad
responsable, de conformidad con lo establecido en el Acuerdo General
42/45/2010, emitido por el Consejo de la Judicatura del Distrito Federal
el veintiséis de octubre de dos mil diez; y uno y dos de noviembre de
dos mil once, por ser inhábiles conforme a la circular 29/2011, del
Consejo de la Judicatura Federal.
En ese orden de ideas, si la demanda de amparo fue presentada

ante la autoridad responsable el dieciséis de noviembre de dos mil
once, como se anticipó, se concluye que fue presentada en tiempo.
TERCERO. Existencia del acto reclamado. En términos de lo

dispuesto en el artículo 77, fracción I, de la Ley de Amparo, se tiene
por cierto el acto reclamado que se atribuye a la Segunda Sala
Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, por así
manifestarlo dicha autoridad al rendir su informe justificado 26, lo cual
además se corrobora con las constancias anexas a dicho informe.
26
Ibídem. Foja 155.
38
CUARTO. Consideraciones que sustentan el

acto reclamado. Las consideraciones que sostienen
el sentido de la sentencia reclamada, son las que a continuación se
resumen:
El tribunal de Alzada consideró improcedente la pérdida de la

patria potestad que el señor **********, ejerce sobre sus menores
hijas, toda vez que de las pruebas aportadas durante el
procedimiento estimó que cumplió parcialmente con su
obligación alimentaria.
Que los argumentos de agravio que hace valer la
recurrente, devienen infundados; en razón de que toda vez que
si bien es cierto también solicitó la Pérdida de la Patria Potestad
en términos del artículo 444, fracción V, del Código Civil, que
dispone:
“La patria potestad se pierde por resolución judicial… V. Por el

abandono que el padre o la madre hicieren de los hijos por más
de tres meses, sin causa justificada…”.
Así, la palabra abandono significa “dejación o desamparo,

ya sea de personas, cosas, derechos o de obligaciones”. Dicho
concepto conlleva a la actitud en el incumplimiento a su
responsabilidad de ejercer la patria potestad, implicando un
desapego o abdicación total de los deberes y obligaciones que
impone la patria potestad, en tales condiciones, el abandono no
requiere necesariamente que el menor sufra la falta de vivienda y
alimentación o de los restantes elementos a que alude el
concepto legal de alimentos, sino que es una causa que se
invoca por la actuación del progenitor sin necesidad de que las
menores sufran en toda su intensidad, bastando tan sólo la
39
conducta culposa del progenitor que abandona, sin que sea

óbice que la actora, durante el período contemplado en la norma
(por más de tres meses) hubiera subvenido a las necesidades de
la menor dado que la conducta que se prejuzga no es la de la
actora, sino la conducta del que incumple con la obligación que
deriva de la patria potestad y tomando en consideración que la
actora refiere que sus hijas están viviendo a su lado; lo anterior,
no excluía al demandado estar al pendiente de la educación y
salud de la menor; esto es para el sano y normal desarrollo de la
misma.
Por lo que hace a la reproducción de las grabaciones

ofrecidas, la parte actora manifestó que sí reconoce el contenido
de las mismas, por lo que como acertadamente lo consideró el
juez de autos, dichas grabaciones tienen valor probatorio pleno,
beneficiando a su oferente. Máxime que la señora **********,
reconoció expresamente el contenido de las mismas.
Señala que ante el incumplimiento de la parte actora a un

mandato judicial por medio del cual se decretó un régimen de
visitas y convivencia provisional a favor del demandado y sus
menores hijas, específicamente, mediante auto dictado en
audiencia de fecha seis de noviembre de dos mil ocho, no se
demostró que el señor **********, haya abandonado a sus
menores hijas por más de tres meses sin causa justificada, dado
que es la propia actora quien no le permitía u obstaculiza las
convivencias entre padre e hijas, además, como acertadamente
lo resolvió el juzgador, la parte actora tampoco demostró el
supuesto abuso sexual del demandado hacia su hija **********,
dado que determinó el no ejercicio de la acción penal; asimismo,
del resultado de los dictámenes periciales en psiquiatría
40
practicados a la parte actora, se desprende que

la menor **********, es portadora del Síndrome
de Alienación Parental, con características imputables a su
madre.
Dada las conductas desplegadas por la señora ********** y

respecto a las conclusiones en los diversos estudios psicológicos
practicados tanto a las partes como a las menores, permite
concluir las circunstancias que imperan en torno a dicho núcleo
familiar, como lo son la personalidad, trastornos, dinámica
familiar, estabilidad social y familiar, sin que se advierta que el
señor ********** haya desplegado conductas impropias en contra
de alguna de sus hijas que tuvieran como propósito afectarlas
tanto física como emocionalmente. Además, contrario a lo que
sostiene la recurrente, fue correcto por el A quo valorar en su
integridad todas las pruebas que se allegaron al juicio, pues no
puede hacer una valoración de manera aislada, sino que deben
valorarse atendiendo a las reglas de la lógica y la experiencia.
Que son inoperantes las alegaciones que hace valer la

recurrente, toda vez que el A quo al suspender la patria potestad
que venía ejerciendo respecto de sus menores hijas, la resolvió
porque fue una prestación que reclamó el señor **********, quien
promovió demanda reconvencional en contra de la recurrente, en
la cual reclamó como prestación la suspensión de la patria
potestad que ejerce sobre sus menores hijas, **********, todas de
apellidos **********.
Señala que el juez de autos no sólo se fundamentó en un

dictamen rendido en diverso juicio (donde se les tuvo por
conforme), sino también en los dictámenes rendidos en el
41
presente juicio y en los constantes incumplimientos a los

regímenes de visitas decretado, asimismo, en lo sustentado en el
dictamen rendido por el Doctor **********, quien practicó el
dictamen pericial en psiquiatría a la menor ********************, y
en el que le diagnosticó Síndrome de Alienación Parental, así
como se robusteció y adminiculó con diversas actuaciones de
dicho juicio, en específico a las audiencias de fecha seis de
noviembre de dos mil ocho, ocho de marzo de dos mil diez y el
acuerdo de fecha veinticuatro de junio de dos mil diez.
Que queda demostrado que la señora **********, ha

generado que la menor **********, desarrolle el Síndrome de
Alienación Parental y dado a los continuos incumplimientos al
régimen de visitas y convivencias, resuelve que la parte actora
en el principal no ha cumplido con las obligaciones que le
impone el artículo 414-Bis del Código Civil; además es
conveniente dejar en claro que de las averiguaciones previas
que se iniciaron en contra del demandado, se infiere que se
decretó el no ejercicio de la acción penal.
Que el juez de la causa tuvo a bien suspender la patria

potestad que venía ejerciendo la parte actora sobre sus menores
hijas **********, todas de apellidos **********, en términos del
artículo 447, fracciones IV, V y VI del Código Civil, hasta en tanto
se someta a una terapia psicológica o psiquiátrica que le ayude a
sobrellevar los conflictos con su contrario el señor **********, que
permita una adecuada manifestación de sus emociones y
sentimientos; así, la orientación para cumplir con sus
obligaciones de crianza para sus menores hijas, lo que quiere
decir lógicamente que puede recuperar la patria potestad
siempre y cuando cumpla con esos supuestos.
42
De ahí que la suspensión de los derechos

de patria potestad que ejercía la parte actora sobre sus menores
hijas, lejos de atentar contra los derechos de las menores a ser
protegidas por las diversas instituciones competentes, garantiza
que a través de un procedimiento en el que sean escuchadas
todas las partes interesadas, incluyendo a las hijas de las partes,
el juzgador tenga al alcance los elementos necesarios para
tomar una decisión trascendente para la vida de aquellas y de
sus padres.
Lo anterior es así, ya que una de las características

esenciales de la institución de la patria potestad es la de
conformar un complejo funcional de derechos y obligaciones,
dirigido a lograr la formación integral de los hijos a partir de la
intervención de los padres que ejercen su derecho derivado de la
relación natural paterno-filial, de proteger y educar a sus
descendientes directos; de ahí que al prever el legislador que
únicamente corresponde a un juez la determinación de limitar,
suspender o decretar la pérdida de la patria potestad, que reviste
las características de ser una institución de orden público en
cuya preservación y debida aplicación de sus normas está
interesada la sociedad, permite que exista seguridad jurídica en
cuanto a la forma de resolver sobre el ejercicio de la patria
potestad y el derecho de convivencia, asegurando a padres e
hijos que la determinación tomada es la más adecuada para
proporcionar al menor un ambiente sano que le permita
desarrollarse con plenitud tanto física como mental, aun a pesar
de la separación de sus padres. De esta forma y dado que a la
parte actora se le suspendieron sus derechos de patria potestad
43
sobre sus menores hijas, fue correcto por el A quo no establecer

un régimen de visitas y convivencias.
Finalmente, consideró insuficientes los motivos de disenso
en los que la recurrente alega que le causa perjuicio la sentencia
recurrida, ya que en su conjunto éste resolvió revocar los
alimentos y la guarda y custodia, lo anterior, porque dichos
argumentos, por si mismos no constituyen la expresión de un
motivo de inconformidad.
Además, señala que devienen inoperantes sus motivos de

inconformidad, toda vez que la apelante no hace razonamiento
alguno tendiente a desvirtuar las consideraciones que tuvo el
juzgador para llegar a la conclusión apuntada en la sentencia
combatida.
QUINTO. Apreciación del acto reclamado. El artículo 78 de la

Ley de Amparo, en su primer párrafo señala que “…el acto reclamado
se apreciará tal y como aparezca probado ante la autoridad
responsable y no se admitirán ni se tomarán en consideración las
pruebas que no se hubieren recibido ante dicha autoridad para
comprobar los hechos que motivaron o fueron objeto de la resolución
reclamada”.
Lo anterior interpretado a contrario sensu, implica que para

poder analizar la constitucionalidad del acto reclamado, se deben
tener en cuenta todas esas probanzas, mismas que la autoridad está
obligada remitir junto con su informe justificado al menos en copia
certificada, a efecto de que el acto reclamado pueda apreciarse
correctamente, es decir, teniendo en cuenta las pruebas que la Sala
valoró o que en su caso omitió al momento de emitir la determinación
que se contiene en el acto reclamado.
44
Ahora bien, en el caso a estudio no pasa

inadvertido que la autoridad responsable no remitió la totalidad de las
pruebas ofrecidas en el curso del procedimiento, pues no se advierte
que haya remitido las copias certificadas de las diversas
averiguaciones previas que se iniciaron con motivo de la denuncia
penal presentada por ********** en contra de **********, y que fueron
ofrecidas como prueba, pues sólo remitieron algunas copias que de
ellas se extrajeron.
Pese a lo anterior, en el caso a estudio esta Primera Sala de la

Suprema Corte de Justicia de la Nación, estima que por economía
procesal, en el caso es innecesario requerir las copias certificadas de
esas averiguaciones, pues las constancias anexas al informe
justificado, permiten hacer un pronunciamiento sobre la
inconstitucionalidad del acto reclamado.
SEXTO. Transcripción o síntesis innecesaria de los

conceptos de violación: Si bien el artículo 77 de la Ley de Amparo,
establece que la sentencia de amparo debe contener una fijación clara
y precisa del acto reclamado, la apreciación de las pruebas
conducentes para tenerlos o no por demostrados, los fundamentos
legales en que se apoye para sobreseer en el juicio o en su caso para
declarar la constitucionalidad o inconstitucionalidad del acto
reclamado, así como los puntos resolutivos correspondientes, lo cierto
es que en él no se exige que en la sentencia se haga una transcripción
de los conceptos de violación formulados por el quejoso.
Luego, como esa exigencia tampoco se deriva de algún otro

precepto de ese ordenamiento legal, y además la lectura de los
conceptos de violación en confrontación con la sentencia reclamada y
45
las constancias remitidas por la autoridad responsable al rendir su

informe justificado, permite advertir que nos encontramos en presencia
de un caso en el que es necesario suplir la deficiencia, esta Primera
Sala estima que por economía procesal es innecesario transcribir o
sintetizar el contenido de los conceptos de violación formulados por
hijas **********, de apellidos **********.
Lo anterior encuentra apoyo en la jurisprudencia 2a./J. 58/2010,

sustentada por la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta,
Novena Época, Tomo XXXI, Mayo de 2010, página 830, que lleva por
rubro: “CONCEPTOS DE VIOLACIÓN O AGRAVIOS. PARA
CUMPLIR CON LOS PRINCIPIOS DE CONGRUENCIA Y
EXHAUSTIVIDAD EN LAS SENTENCIAS DE AMPARO ES
INNECESARIA SU TRANSCRIPCIÓN.”27
SÉPTIMO. Razones por las que se estima que es necesario

suplir la deficiencia de la queja.
De los antecedentes narrados en el resultando tercero de esta

ejecutoria, se aprecia que la controversia gira en torno a la patria
potestad de las menores **********, de apellidos **********, pues
mientras la madre (actora en lo principal) demanda –entre otras
27
“CONCEPTOS DE VIOLACIÓN O AGRAVIOS. PARA CUMPLIR CON LOS PRINCIPIOS DE
CONGRUENCIA Y EXHAUSTIVIDAD EN LAS SENTENCIAS DE AMPARO ES INNECESARIA
SU TRANSCRIPCIÓN. De los preceptos integrantes del capítulo X "De las sentencias", del título
primero "Reglas generales", del libro primero "Del amparo en general", de la Ley de Amparo, no se
advierte como obligación para el juzgador que transcriba los conceptos de violación o, en su caso,
los agravios, para cumplir con los principios de congruencia y exhaustividad en las sentencias,
pues tales principios se satisfacen cuando precisa los puntos sujetos a debate, derivados de la
demanda de amparo o del escrito de expresión de agravios, los estudia y les da respuesta, la cual
debe estar vinculada y corresponder a los planteamientos de legalidad o constitucionalidad
efectivamente planteados en el pliego correspondiente, sin introducir aspectos distintos a los que
conforman la litis. Sin embargo, no existe prohibición para hacer tal transcripción, quedando al
prudente arbitrio del juzgador realizarla o no, atendiendo a las características especiales del caso,
sin demérito de que para satisfacer los principios de exhaustividad y congruencia se estudien los
planteamientos de legalidad o inconstitucionalidad que efectivamente se hayan hecho valer.”
46
cosas– que su contrario pierda la patria potestad que

ejerce sobre ellas, al respecto, el padre (actor
reconvencional), reclama que ésta le sea suspendida a la actora en lo
principal.
En ese orden de ideas, como en el fondo del asunto subyace

una afectación a la esfera jurídica de las menores, en el caso cobra
aplicación lo dispuesto en el artículo 76 Bis, fracción V, de la Ley de
Amparo, el cual ordena suplir la deficiencia de la queja en favor de
menores o incapaces.
Suplencia que en el caso se estima necesaria, en razón de

que del análisis de las constancias que la autoridad responsable
adjuntó a su informe justificado, en confrontación con la
sentencia constitutiva del acto reclamado, permite advertir que en
la decisión tomada al respecto, no se atendió el interés superior
que en favor de las menores se deriva de lo dispuesto en los
artículos 4 y 133 de la Constitución Federal, en relación con lo
establecido en los numerales 3, parágrafo 1 de la Convención
sobre los Derechos del Niño 28, 1 y 3, apartado A de la Ley para la
Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes 29, 4,
fracción I, de la Ley de los Derechos de las Niñas y Niños en el
28
“Artículo 3. --- 1. En todas las medidas concernientes a los niños que tomen las instituciones
públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos
legislativos, una consideración primordial a que se atenderá será el interés superior del niño.
[…]”.
29
“Artículo 1. La presente ley se fundamenta en el párrafo sexto del artículo 4 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, su disposiciones son de orden público, interés social y
de observancia general en toda la República Mexicana y tiene por objeto garantizar a niñas,
niños y adolescentes la tutela y el respeto de los derechos fundamentales reconocidos en la
Constitución.
[…]”.
“Artículo 3. La protección de los derechos de niñas, niños y adolescentes, tiene como objetivo
asegurarles un pleno desarrollo e integral, lo que implica la oportunidad de formarse física, mental,
emocional, social y moralmente en condiciones de igualdad.
Son principios rectores de la protección de los derechos de niñas, niños y adolescentes:
A. El interés superior de la infancia.
[…]”.
47
Distrito Federal30 y 941-Ter, párrafo tercero del Código de

Procedimientos Civiles para el Distrito Federal 31.
En consecuencia, el presente asunto deberá ser estudiado y

resuelto atendiendo en lo conducente, los criterios que llevan por
rubro:
 “MENORES DE EDAD O INCAPACES. PROCEDE LA

SUPLENCIA DE LA QUEJA, EN TODA SU AMPLITUD, SIN
QUE OBSTE LA NATURALEZA DE LOS DERECHOS
CUESTIONADOS NI EL CARÁCTER DEL
PROMOVENTE”.32; y
30
“Artículo 4. Son principios rectores en la observancia, interpretación y aplicación de esta Ley, los
siguientes:
I El interés superior de las niñas y los niños. Este principio implica dar prioridad al bienestar de
las niñas y niños ante cualquier otro interés que vaya en su perjuicio.
Este principio orientará la actuación de los órganos Locales de Gobierno encargados de las
acciones de defensa y representación jurídica, provisión, prevención, protección especial y
participación de las niñas y niños, y deberá verse reflejado en las siguientes acciones:
a) En la asignación de recursos públicos para programas sociales relacionados con las niñas
y los niños;
b) En la atención a las niñas y niños en los servicios públicos; y
c) En la formulación y ejecución de políticas públicas relacionadas con las niñas y niños;
[…]”
31
“Artículo 941-Ter. […]
El juez de lo familiar, antes de regular el derecho de convivencia de manera provisional, deberá
tomar en cuenta todos los elementos que estén a su alcance para decidir bajo el principio del
interés superior del menor. En especial valorará el hecho de que una de las partes manifieste
que ha habido violencia familiar, pudiendo solicitar valoración psicoemocional que determine si
existen síntomas en el menor, de haber vivido cualquier tipo de violencia familiar, ya sea
psicológica, física o sexual, independientemente de que exista o no indagatoria al respecto, a fin de
proteger la integridad física y psicológica de los hijos.
32
Jurisprudencia 1ª./J. 191/2005 sustentada por esta Primera sala, publicada en el Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXIII, mayo de dos mil seis, página
167, cuyo texto es el siguiente: “MENORES DE EDAD O INCAPACES. PROCEDE LA
SUPLENCIA DE LA QUEJA, EN TODA SU AMPLITUD, SIN QUE OBSTE LA NATURALEZA DE
LOS DERECHOS CUESTIONADOS NI EL CARÁCTER DEL PROMOVENTE. La suplencia de la
queja es una institución cuya observancia deben respetar los Jueces y Magistrados Federales;
suplencia que debe ser total, es decir, no se limita a una sola instancia, ni a conceptos de violación
y agravios, pues el alcance de la misma comprende desde el escrito inicial de demanda de
garantías, hasta el periodo de ejecución de la sentencia en caso de concederse el amparo. Dicha
suplencia opera invariablemente cuando esté de por medio, directa o indirectamente, la afectación
de la esfera jurídica de un menor de edad o de un incapaz, sin que para ello sea determinante la
naturaleza de los derechos familiares que estén en controversia o el carácter de quién o quiénes
promuevan el juicio de amparo o, en su caso, el recurso de revisión, ello atendiendo a la
circunstancia de que el interés jurídico en las controversias susceptibles de afectar a la familia y en
especial a menores e incapaces, no corresponde exclusivamente a los padres, sino a la
sociedad, quien tiene interés en que la situación de los hijos quede definida para asegurar la
protección del interés superior del menor de edad o del incapaz. Se afirma lo anterior,
48
 “MENORES DE EDAD O INCAPACES. LA

SUPLENCIA DE LA QUEJA DEFICIENTE PROCEDE EN
TODO CASO, SIN QUE OBSTE LA NATURALEZA DE LOS
DERECHOS CUESTIONADOS NI EL CARÁCTER DEL
PROMOVENTE”.33
OCTAVO. Análisis de fondo del asunto supliendo la

deficiencia de la queja.
Se afirma que en el caso a estudio no se atendió al interés

superior de las menores en razón de lo siguiente:
Interés superior de la infancia.

considerando la teleología de las normas referidas a la suplencia de la queja, a los criterios
emitidos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, así como a los compromisos
internacionales suscritos por el Estado mexicano, que buscan proteger en toda su amplitud
los intereses de menores de edad e incapaces, aplicando siempre en su beneficio la
suplencia de la deficiencia de la queja, la que debe operar desde la demanda (el escrito)
hasta la ejecución de sentencia, incluyendo omisiones en la demanda, insuficiencia de
conceptos de violación y de agravios, recabación oficiosa de pruebas, esto es, en todos los
actos que integran el desarrollo del juicio, para con ello lograr el bienestar del menor de
edad o del incapaz”.
33
Tesis aislada 2a. LXXV/2000 sustentada por la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia
de la Nación, consultable en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época,
Tomo XII, Julio de 2000, página 161, que dice: “MENORES DE EDAD O INCAPACES. LA
SUPLENCIA DE LA QUEJA DEFICIENTE PROCEDE EN TODO CASO, SIN QUE OBSTE LA
NATURALEZA DE LOS DERECHOS CUESTIONADOS NI EL CARÁCTER DEL PROMOVENTE.
Los Jueces Federales tienen el deber de suplir la deficiencia de los conceptos de violación o de los
agravios respectivos, siempre que esté de por medio, directa o indirectamente, el bienestar de un
menor de edad o de un incapaz, sin que para ello sea determinante la naturaleza de los derechos
familiares que estén en controversia o el carácter de quien o quienes promuevan el juicio de
amparo o el recurso de revisión, toda vez que el interés jurídico en las cuestiones que pueden
afectar a la familia y principalmente en las concernientes a los menores y a los incapaces, no
corresponde exclusivamente a los padres, ya que su voluntad no es suficiente para determinar la
situación de los hijos menores; por el contrario, es la sociedad, en su conjunto, la que tiene interés
en que la situación de los hijos quede definida para asegurar la protección del interés superior del
menor de edad o del incapaz. Lo anterior, debido a que el propósito del Constituyente y del
legislador ordinario, plasmada en los artículos 107, fracción II, párrafo segundo,
constitucional y 76 bis, fracción V y 91, fracción VI, de la Ley de Amparo, y de las
interpretaciones realizadas por la Suprema Corte fue tutelar el interés de los menores de
edad y de los incapaces, aplicando siempre en su beneficio la suplencia de la deficiencia de
la queja, incluso hasta el grado de hacer valer todos aquellos conceptos o razones que
permitan establecer la verdad y lograr el bienestar del menor de edad o del incapaz. Luego,
no hay excusa tocante a la materia ni limitante alguna para la intervención oficiosa y
obligada de las autoridades jurisdiccionales en esta clase de asuntos, pues la sociedad y el
Estado tienen interés en que los derechos de los menores de edad y de los incapaces
queden protegidos supliendo la deficiencia de la queja, independientemente de quienes
promuevan en su nombre o, incluso, cuando sin ser parte pudieran resultar afectados por la
resolución que se dicte”.
49
Desde la reforma constitucional publicada en el Diario Oficial de

la Federación el siete de abril de dos mil, el artículo 4 constitucional en
sus párrafos séptimo, octavo y noveno, establecía lo siguiente:
“Los niños y las niñas tienen derecho a la satisfacción de sus

necesidades de alimentación, salud, educación y sano
esparcimiento para su desarrollo integral.
Los ascendientes, tutores y custodios tienen el deber de

preservar estos derechos. El Estado proveerá lo necesario para
propiciar el respeto a la dignidad de la niñez y el ejercicio pleno
de sus derechos.
El Estado otorgará facilidades a los particulares para que

coadyuven al cumplimiento de los derechos de la niñez”.
De lo anterior se advierte que desde entonces, el Estado asumió

la obligación de propiciar el respeto a la dignidad de la niñez y el
ejercicio pleno de sus derechos, comprometiéndose a realizar lo
que resultase necesario para tal efecto.34
Luego, si la palabra “necesario”, es un adjetivo que precisa lo

que forzosa o inevitablemente debe suceder; y que por tanto, es
opuesto a lo voluntario35, ello implica que no podía quedar a voluntad
del Estado, propiciar el respeto a la dignidad de la niñez y el ejercicio
pleno de sus derechos, sino que era su obligación hacerlo.
34
Obligación asumida desde la reforma al artículo 4 constitucional publicada en el Diario Oficial de
la federación el 7 de abril de 2000.
35
El Diccionario Enciclopédico Océano Uno Color, Edición 2003, de Editorial Océano en Barcelona
España, en su página 1122 define la palabra necesario de la siguiente manera:
“NECESARIO, RIA. Adj. Que precisa, forzosa o inevitablemente ha de ser o suceder. *Díc. De lo
que se hace o ejecuta obligado por algo, como opuesto a voluntario, y también de las causas que
obran sin libertad y por determinación de su naturaleza. *Que es menester o hace falta para un fin”.
50
Obligación que resulta lógica, porque el

propósito de esa reforma constitucional, a través
de la cual se reconoció el interés superior del menor, se sustentó
en la necesidad de darle una protección especial, a fin de
asegurarle el pleno ejercicio de sus derechos, incluidos los
reconocidos a nivel internacional.
Ello es así, pues en la exposición de motivos de diecinueve de

marzo de mil novecientos noventa y ocho, se afirmó lo siguiente:
“[…]
El Senado de la República debe considerar de la mayor prioridad

la revisión del marco jurídico de atención a niños y jóvenes, con
sentido práctico y realista conforme a la condición de los menores,
es decir, sin papeleo ni burocracias que envuelven de trámites
engorrosos y muchas veces lentos y hacen inalcanzable el
apoyo que debe brindárseles.
La importancia de los menores y jóvenes para el futuro inmediato de

la República es más que evidente. México será mañana lo que hoy
hagamos por los niños y jóvenes. No podemos siquiera pensar en
su desarrollo y progreso, si no atendemos cuando menos sus
necesidades básicas. No se trata de populismo, sino se debe
entender que a la parte débil de la sociedad tienen que
atenderla, principalmente el Estado que la representa.
[…]
Para precisar en la Constitución que se suprima la ambigüedad

que hoy tiene y esta obligatoriedad de la sociedad de los
padres de familia, de los particulares y del Gobierno se
convierta en una necesidad imperiosa. Es un deber solidario con
los más débiles, con los más indefensos de entre los pobres que
debe cumplirse. Confío en que el Congreso de la Unión y en su
51
momento, el Ejecutivo promulgue y que no quede solamente en

buenas intenciones, pues es indudable que en esta reforma está
de por medio el futuro de la Nación.
[…]”.
Por su parte, en el dictamen de la cámara de origen (Senadores)

de nueve de diciembre de mil novecientos noventa y nueve, se indica
lo siguiente:
“[…]
Históricamente la inclusión de los derechos del menor en el texto

constitucional, obedeció principalmente a un movimiento
reivindicatorio de los mismos promovido por la Organización de las
Naciones Unidas, al grado que el año de 1979 fue declarado como
el año internacional del Niño.
Con ello se gestó a nivel mundial un nuevo enfoque social y jurídico
del papel del niño en la sociedad, pretendiendo darle una mayor
protección y un tratamiento especial más humanitario.
El texto constitucional, no obstante coincidir con los

postulados internacionales sobre los derechos del niño, no
resulta suficiente en la actualidad para satisfacer las exigencias
de una realidad cambiante, ya que la misma revela nuevas
necesidades de los niños y de las niñas.
Resultaría lógico pensar y promover la protección de sus derechos

en el desarrollo de su núcleo familiar como hasta ahora ha
acontecido, pero evidentemente la realidad actual supera en mucho
la citada expectativa, ya que un porcentaje muy alto de menores,
además de graves insuficiencias, carecen hasta de este seno
familiar.
Por tanto, la responsabilidad de protegerlos debe hacerse extensiva

como una asistencia a los niños y las niñas, que carecen de un
52
medio familiar, o que teniéndolo, requieran de

acciones adicionales del Estado para asegurar su
desarrollo integral.
La responsabilidad social con la niñez, no puede ni debe limitarse a

la obligación de los padres de satisfacer sus necesidades y a la
debida protección de su salud física y mental, sino que debe
trascender hacia otros ámbitos tendientes a garantizarles
plenamente la protección contra la violencia, la explotación, el abuso
físico o el abuso sexual, en el hogar o fuera de él.
En el proceso de formación de los menores, éstos experimentan

grandes transformaciones con relación a su conocimiento y su
desarrollo, así como en la adopción de conductas cada vez más
complejas derivadas de los problemas socioeconómicos, educativos
y culturales de la actualidad.
El menor de edad, por su propia condición requiere de una
protección especial que le permita su realización como ser
humano y de esta manera contribuir en el desarrollo de la
sociedad en la que se desenvuelve.
La importancia de niños, niñas y jóvenes para el futuro inmediato de

la República es más que evidente; el porvenir de México será lo que
hoy hagamos por ellos.
Corresponde al Estado en su ámbito Federal, Estatal y

municipal promover lo necesario para lograr que los menores
tengan las condiciones para satisfacer sus necesidades de
alimentación, salud, educación, sano esparcimiento para su
pleno desarrollo físico intelectual y emocional.
Cabe destacar que la familia es el núcleo natural que debe

garantizar el cuidado, protección y desarrollo de niños y niñas,
siendo los padres, tutores y custodios, los responsables inmediatos
de ello.
53
En las relatadas condiciones, resulta el texto constitucional el

marco adecuado para consagrar los derechos del menor,
especialmente el citado artículo 4º, toda vez que en el mismo se
consignan tanto el principio de igualdad jurídica del hombre y
la mujer, como el derecho a la protección y fomento del núcleo
familiar.
Considerando a la familia como el eje sobre el que gira la sociedad

en general, y tomando en cuenta que ésta representa a su vez la
forma óptima para el desarrollo de los hijos, se concluye que la
inclusión de los derechos del menor en el citado precepto
constitucional es plenamente justificada.
Por otra parte, no escapa a estas Comisiones Unidas el hecho de

que resulta necesario para la citada reforma constitucional
reconocer ideales consignados en la legislación internacional,
así como los generados en diversos foros en la materia, por lo que
resulta conveniente citar algunos casos que a nivel del Derecho
Comparado justifiquen en la solidaridad internacional, una reforma
cabal al respecto de la Constitución General de la República.
[…]
Por todo lo antes expuesto y considerado, en opinión de estas

Comisiones Unidas, debe aprobarse la modificación que se propone
al artículo 4º de la Constitución General de la República, para
proteger y tutelar desde el supremo magisterio de la Carta
Fundamental de la República, los derechos de los menores.
Sin embargo, estas Comisiones consideran necesario introducir

algunas modificaciones formales al texto propuesto a fin de que por
un lado se declaren los derechos fundamentales de los menores y
se establezca la obligación de los ascendientes de preservar tales
derechos.
54
Por otro lado, aludir a las responsabilidades del

Estado, así como a los particulares para
promover las acciones conducentes a efecto de lograr los fines
propuestos.
En mérito de lo anteriormente expuesto, estas Comisiones Unidas

someten a la consideración del Pleno de este Senado de la
República, el siguiente proyecto de…”
Por otro lado, en la discusión llevada a cabo en la Cámara de

Senadores el diez de diciembre de mil novecientos noventa y nueve,
destacaron las aseveraciones siguientes:
“[…]
El espíritu que nos anima al presentar esta reforma, al artículo 4º

Constitucional, en su sexto párrafo, es el compromiso irrenunciable
que tenemos como legisladores hacia nuestros niños; aún más,
permítame señalarlo, las madres y mujeres legisladoras nos
sentimos todavía más comprometidas con las niñas y los niños de
México.
Es cierto que la adición a la disposición Constitucional que nos

proponemos modificar, aprobada el 16 de marzo de 1980, fue un
avance para la protección de los menores, de entonces a nuestros
días mucho ha cambiado.
Hace diez años se replanteó a profundidad en la Asamblea

General de las Naciones Unidas, lo que derivó en la Convención
sobre los Derechos de la Niñez, que comprometió a los países
miembros a revisar programas, estrategias, y políticas de
atención al cuidado de los niños. Por cierto que esta Honorable
Cámara ha ratificado ya ese convenio.
55
Con estas bases, en todo el mundo, la protección a los

derechos del menor adquirió prioridad; y en México se tomó
conciencia de la importancia que tiene proteger al menor, cuyas
estadísticas de abandono, maltrato, y carencia de lo más elemental
son estrujantes.
La importancia de los menores y jóvenes, como lo sostiene, y con

razón, el senador Alfonso Martínez Domínguez, en su iniciativa, para
el futuro de México es más que evidente. México será mañana lo
que hoy hagamos por los niños y por los jóvenes.
Por eso es oportuno, con el impulso de esta iniciativa, 20 años

después, abocarnos a la modificación del último párrafo del artículo
4º Constitucional.
Las circunstancias nos llevan a hacerlo. Acciones legislativas,

de tan dilatados alcances sociales no admiten demora. Debemos
responsabilizarnos socialmente con las niñas y los niños de
nuestro país, asegurando con ello que no se limite ni atropellen
sus derechos, que su salud física y mental se preserve y se
extienda aún más a la sociedad, a fin de garantizarles una vida
plena, libre de explotación, maltrato físico, violencia, abandono,
y abuso sexual.
Son los menores los seres más desprotegidos, que viven día con día
las experiencias de una sociedad ferozmente cambiante y en
transición.
Son, por lo tanto, receptores de buenos y malos proyectos de vida,

sin que puedan en ello participar ni opinar en estos propios
proyectos; más aún, son víctimas de una sociedad de dramáticos
contrastes, que lanza a los menores a la calle a trabajos sin
remuneración, y sí en ello también va la explotación, el tráfico y la
prostitución.
56
Es el Estado, las instituciones privadas, la

sociedad en general, somos todos quienes
debemos buscar y proporcionar las mejores condiciones que
requieren la protección de las niñas y niños, para que se les
permita un pleno desarrollo y su realización como seres
humanos, y posteriormente sean ellos los que a través de estas
políticas de Estado, en todos sus niveles, federal, estatal y
municipal, logren un desarrollo social que toda nación busca y
necesita. La reforma constitucional que analizamos, transita en ese
camino.
Todos sabemos que la generalidad de las familias mexicanas,

tradicionalmente se esfuerzan por cuidar y proteger a los niños.
Apoyemos y alentemos esa noble costumbre, y procuremos que el

núcleo familiar siga siendo el que garantice ese cuidado, y
protección para el desarrollo de las niñas y niños; y que sean,
primordialmente, los padres, tutores y custodios los responsables.
En noviembre pasado se llevó a cabo la Conmemoración del

Décimo Aniversario de la Convención de los Derechos de la
Niñez, en la cual se enfatizó el gran cuidado que muchos países
latinoamericanos y europeos han tenido al abocarse con gran
preocupación en proteger los derechos fundamentales de los
niños y niñas.
Es ineludible, compañeras y compañeros legisladores, reconocer

que son las niñas, niños y jóvenes el recurso más importante para
construir el México pleno, saludable, desarrollado y justo al que
todos aspiramos.
Cabe mencionar, que se celebraron reuniones en conferencia con

las comisiones respectivas de la Cámara de Diputados; en ello va un
trabajo de consenso de otras fuerzas políticas representadas en la
Cámara de Diputados y, por supuesto, en esta Honorable Cámara.
57
Que en mucho contribuyeron a presentar un trabajo serio,

responsable y comprometido como el que consigna el dictamen que
nos proponemos fundamentar, y pedir, desde luego, la aprobación
del Honorable Pleno.
México siempre ha fomentado la cultura de respeto hacia los

derechos de las niñas y niños. Un ejemplo de ello, es que fue
uno de los primeros países de la comunidad internacional en
suscribir la Convención sobre sus Derechos, y en
comprometerse a alcanzar metas en beneficio de sus niños.
Este esfuerzo legislativo fortalece esa política tutelar del Estado

mexicano.
El reto de hoy es lograr una alianza entre padres, Estado y sociedad

a favor de la infancia.
[…].
La Iniciativa que se presenta, y que nos congratula comentar el día

de hoy, recoge los planteamientos que nuestros compañeros
Diputados del Grupo Parlamentario del PAN presentaron en la
colegisladora.
Tiene un gran, y un elevado valor en cuanto a su nobleza, a su

justicia y la sensibilidad, pues se pretende una mayor y más
eficiente protección del menor.
[…]
La propuesta de modificación que se presenta tiene un sólido

fundamento que la inspira. Se encuentra encuadrada en la teoría
general de los derechos humanos. Corresponde a aquellos
derechos, que por su naturaleza, son susceptibles de ser
ampliados, siempre y cuando garanticen una mejor y más eficaz
protección a la persona humana. Este es el propósito elevado
58
que anima a la presente adición

constitucional.
Lo anterior recoge el contenido y el espíritu de las normas

internacionales de las Naciones Unidas, y pretende darle una
mayor protección, y un tratamiento más humanitario a los
menores; sobre todo de una sociedad de realidades cambiantes
donde los niños viven en constantes situaciones de angustia
familiar, violencia social y carencias económicas agudas.
Es valiosa esta Reforma Constitucional, en cuanto busca

proteger, como un paraguas, por medio de una norma superior,
de rango constitucional, los derechos centrales del menor.
Se apoya también en la concepción del desarrollo como un

derecho humano al que todos deben tener acceso si la ley es
correcta y adecuada; desarrollo que no puede dejar fuera las
necesidades básicas de alimentación, salud, educación y cultura.
Por otro lado, con esta adición, de manera acertada, se integra en la

responsabilidad a los diversos protagonistas, a los padres, a los
ascendientes, a la autoridad y a la sociedad en general.
[…]”.
Finalmente, del dictamen de la revisora de quince de diciembre

de mil novecientos noventa y nueve, sobresalió lo siguiente:
“[…]
Esta Comisión Dictaminadora, de conformidad con las facultades

que le otorgan los artículos 39, 44 y demás relativos de la Ley
Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos,
así como los artículos 60, 65, 87, 88 y demás aplicables del
Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los
Estados Unidos Mexicanos, somete el presente dictamen a la
59
consideración del Pleno de la Cámara de Diputados en su calidad

de integrante del Poder Revisor de la Constitución, a partir de los
siguientes
ANTECEDENTES.
[…]
4. Como ha quedado señalado, la Cámara de Diputados del

Congreso de la Unión ha recibido dos iniciativas de reformas al
mismo artículo de la Ley Fundamental y sobre la misma materia, es
decir, la protección de los derechos de la infancia, habiéndose
invocado en ambos casos el compromiso internacional
asumido por nuestro país en su calidad de Estado Parte de la
Organización de las Naciones Unidas, al haber signado en los
términos previstos por el artículo 133 constitucional, la
Convención sobre los Derechos del Niño de 1989, aprobada por
el Senado de la República el 19 de junio de 1990 y publicada en
el Diario Oficial de la Federación el día 31 de julio del mismo
año.
[…]
D. Como ha sido señalado previamente, el Ejecutivo Federal
suscribió y la Cámara de Senadores aprobó la Convención
sobre los Derechos del Niño, publicada en el Diario Oficial de la
Federación el 31 de julio de 1990. Dicho instrumento internacional
establece en 54 artículos distribuidos en tres partes, los Derechos
del Niño y los compromisos adquiridos al respecto por los Estados
signatarios. Por su estrecha relación con el contenido de la iniciativa
y minuta que se dictaminan, transcribimos a continuación los
artículos 1, 4, 8, 19 y 24 de la Convención sobre los Derechos del
Niño:
[…]
60
I. El texto en vigor sólo contiene dos

disposiciones esenciales: la relativa al deber de
los padres respecto de la satisfacción de las necesidades de sus
hijos, y la referente a que la ley secundaria determinará los apoyos a
la protección de la niñez, a cargo de las instituciones públicas. Por
su parte, la iniciativa que se dictamina contiene los siguientes
conjuntos de disposiciones y modalidades:
a) El deber de los padres previsto en el texto vigente es propuesto

como obligación de éstos, del Estado y de la sociedad.
b) Se hace la distinción de género entre niños y niñas.
c) El derecho a la satisfacción de las necesidades y a la salud

física y mental de niños y de niñas, tutelado por sus padres en
el texto vigente, es ampliado a "su desarrollo integral y el
ejercicio pleno de sus derechos", como obligación de padres,
Estado y sociedad.
d) La disposición relativa a las instituciones públicas, en esencia, no

se modifica, aunque también aquí se propone establecer la
diferencia de géneros.
e) Se enuncian algunos de los Derechos del Niño contenidos en la

Convención, como es el caso de la protección contra toda forma de
discriminación, a formar parte de una familia, a tener un nombre
desde su nacimiento, etc. Además, aunque sin definir, se propone
agregar en éste que sería el párrafo séptimo el concepto de
adolescentes, con lo que en rigor estaríamos hablando ya de los
derechos de los niños, niñas y adolescentes.
f) En un párrafo tercero se propone prevenir que "los niños,

niñas y adolescentes" especificados en el párrafo inmediato
anterior, gozarán también de las garantías constitucionales y
los demás derechos consagrados en las leyes y tratados
internacionales ratificados por México .
61
g) Finalmente, se propone establecer el derecho de cualquier

persona para exigir de la autoridad competente el cumplimiento de
los derechos anteriormente señalados, así como la sanción a los
infractores.
J. Coincidimos con los autores de la iniciativa originada en esta

Cámara, en su propósito de reforzar la disposición vigente en el
cuarto constitucional, a efecto de hacer extensiva al Estado, así
como a la sociedad, entendiendo por ésta para el caso específico a
los ascendientes, adoptantes y tutores, la obligación de velar por la
protección de la infancia. En consecuencia, nos parece pertinente la
modificación del texto vigente a efecto de precisar y ampliar tal
obligación del Estado y deber cívico de los gobernados, misma que
se materializa en la parte inicial del párrafo sexto y en la parte final
del párrafo octavo del articulado propuesto en la iniciativa. Esta
misma obligación y deber cívico, como puede apreciarse en la
transcripción anterior, están consideradas en el texto de la minuta
aprobada por nuestra Colegisladora.
Sin embargo, nos parecería no sólo innecesario sino incluso

reductor transcribir en el texto constitucional un catálogo
incompleto de los derechos establecidos en la Convención
sobre los Derechos del Niño, mismos que deben ser regulados
no sólo en uno sino en diversos ordenamientos vigentes, como
bien lo apuntan los autores de la iniciativa presentada en la LVI
Legislatura y planteado por los Diputados en sus excitativas, a las
que ya nos hemos referido. Asimismo, nos parece innecesario y
redundante establecer que las niñas, niños y adolescentes, gozarán
también de las garantías consagradas en la Constitución y de los
derechos establecidos en las leyes y tratados internacionales. Se
trata de consideraciones que, por su parte, tiene ya incorporadas el
texto aprobado por nuestra Colegisladora.
[…]
62
A 10 años de la Convención, estamos

concretando en esta sesión de la Honorable
Cámara de Diputados un paso más para cumplir con la
recomendación del Comité Sobre los derechos de la Infancia,
en el sentido de que nuestro país como Estado parte de la
Convención, continúa con las reformas legislativas que
garanticen que la legislación concerniente a los derechos de la
infancia esté en plena, en completa concordancia con los
principios y estipulaciones de la Convención y se logre un
enfoque integral.
[…]
La Convención de los Derechos del Niño de 1989, fue

indudablemente un presagio para el 50 Aniversario de la Aprobación
de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y 150
Aniversario de la Abolición de la Esclavitud.
Ya han transcurrido once años desde que se aprobó la Convención

de los Derechos del Niño y más de 191 países del mundo la han
ratificado, es más, éste es el instrumento de derechos humanos que
ha sido más ampliamente refrendado en la historia de toda la
humanidad.
A pesar de ello, se tiene conocimiento que desgraciadamente se
siguen violando los derechos de los niños de todo el mundo, de los
niños y de las niñas en todos los países del orbe y por tanto se
requiere que tanto instituciones públicas o privadas y la
sociedad civil, por otro lado, respondan a este reto y sigan
luchando para que la Convención se convierta en una realidad
en beneficio de los niños y de las niñas del mundo.
Los derechos humanos trascienden las fronteras. Los derechos

humanos concretamente contenidos en esta Declaración de los
Derechos del Niño, deben ser precisamente refrendados y
reglamentados no sólo en nuestra Constitución sino también en
una Ley Reglamentaria.
63
Ya el proyecto de dictamen lo señala específicamente, que el 31 de

julio de 1990 el Senado concretamente aprobó la Convención de los
Derechos del Niño y ahí existía precisamente una obligación en su
artículo 4°. que dice específicamente: ‘Los Estados partes adoptarán
todas las medidas administrativas, legislativas y de otra índole, para
dar efectividad a los derechos reconocidos en la presente
Convención. En lo que respecta a los derechos económicos,
sociales y culturales, los Estados partes adoptarán estas medidas
hasta el máximo de los recursos de que dispongan y, cuando sea
necesario, dentro del marco de la cooperación internacional’.
Es indudable que estos son ya los derechos de la tercera

generación, que no tienen que estar regulados en el Código Civil,
sino que tienen que estar precisamente fundamentados en
nuestra máxima ley, que es nuestra Constitución.
Se ha dicho que es un adefesio, cuando en realidad lo que se

pretende incluir con esta reforma es precisamente el darle ya
plena vigencia a esta recomendación internacional, a esta
obligación de México en el campo internacional, para que
precisamente nuestro país a través del derecho se convierta en
un instrumento de cambio.
Es una realidad que en nuestro México se requieren indudablemente
grandes cambios en materia de la niñez. Es importante reconocer
que la pobreza, la falta de educación, la falta de cuidado que todavía
sufren los niños y las niñas en nuestro país, es algo que no se va a
alcanzar inmediatamente con la reforma constitucional. No se
pretende que con la pura reforma constitucional se transforme la
realidad, pero es indudable, y esto es innegable, el derecho es un
instrumento de cambio, el derecho ha sido siempre un instrumento
para el progreso de la humanidad; gracias a ello hemos logrado
avances en materia internacional.
Yo quisiera terminar mencionando que lo que fundamentalmente

mueve esta reforma, es precisamente hacer una realidad la vigencia
64
de los derechos humanos en nuestro México.

Los niños, con su falta de madurez física o
mental, necesitan protección y cuidados especiales, incluso la
debida protección legal tanto antes como después del
nacimiento y por ello tenemos que hacer realidad precisamente
estos derechos que los niños tienen desde el momento en que
son concebidos, precisamente para que puedan tener una
infancia feliz y desarrollarse adecuadamente como lo marca
nuestra propia naturaleza.
Y por eso esta Declaración Universal de los Derechos Humanos,

después refrendada en el Pacto de Apoyo a los Niños y Niñas y
posteriormente, ahora, con esta reforma constitucional, hará
precisamente que estas normas de carácter internacional
puestas en protocolos internacionales, tengan vigencia en
nuestro México, se hagan una realidad, puedan ser exigibles a
nuestro Estado, a nuestras autoridades en todo el país, gracias
precisamente a la modificación.
Y aquí todos los países del mundo y México incluido entre ellos,
tienen la obligación de legislar en esta materia con base en los
acuerdos internacionales y esto que se está haciendo ahorita es dar
cumplimiento con un precepto internacional, con una obligación que
nuestro país adoptó hace once años y que hasta ahora le estamos
dando vigencia.
[…]”.
Como se advierte de las anteriores transcripciones, las cuales

corresponden al proceso legislativo que dio origen a la reforma del
artículo 4° de la Carta Magna, en la cual se estableció que “El Estado
proveerá lo necesario para propiciar el respeto a la dignidad de la
niñez y el ejercicio pleno de sus derechos”, el legislador no sólo
buscó ampliar, profundizar y fortalecer las garantías constitucionales
de los niños; sino que además, esa reforma tuvo como propósito
65
directo reconocer los ideales que en materia de los derechos de

los niños han sido reconocidos a nivel internacional, para de esta
forma cristalizar la obligación asumida por el Estado Mexicano al
suscribir la Convención sobre los Derechos del Niño, en la que
se comprometió a dar prioridad a los derechos del menor, a fin
de asegurar que tales derechos no fueran atropellados.
Obligación que se corrobora e incluso se intensifica en la

reforma constitucional publicada en el Diario Oficial de la Federación
el doce de octubre de dos mil once, pues a raíz de ella, el artículo 4°
de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en sus
párrafos sexto, séptimo y octavo, establece lo siguiente:
“En todas las decisiones y actuaciones del Estado se velará y

cumplirá con el principio del interés superior de la niñez,
garantizando de manera plena sus derechos. Los niños y las
niñas tienen derecho a la satisfacción de sus necesidades de
alimentación, salud, educación y sano esparcimiento para su
desarrollo integral. Este principio deberá guiar el diseño, ejecución,
seguimiento y evaluación de las políticas públicas dirigidas a la
niñez.
Los ascendientes, tutores y custodios tienen la obligación de

preservar y exigir el cumplimiento de estos derechos y
principios.
El Estado otorgará facilidades a los particulares para que

coadyuven al cumplimiento de los derechos de la niñez.”
En efecto, se dice que en esta última reforma se corrobora e

incluso se intensifica la obligación que el Estado tiene de respetar el
interés superior de la niñez, pues como se advierte de la nueva
redacción del artículo 4° constitucional, lo que antes era un deber del
66
Estado en el sentido de proveer lo necesario para

“propiciar” el respeto a la dignidad de la niñez y el
ejercicio pleno de sus derechos, ahora constituye un imperativo
constitucional que va más allá de la simple obligación de propiciar,
pues en la actualidad no sólo se obliga al Estado a velar por ello, sino
que se le exige cumplir con el interés superior del menor y
garantizar de manera plena sus derechos.
Incluso, la intensidad de la obligación que ahora se

reconoce, se extiende a los ascendientes, tutores y custodios,
pues lo que antes era un deber de preservar tales derechos, ahora se
convierte en una obligación que no sólo los conmina a preservarlos,
sino a exigir el cumplimiento de los derechos y principios
reconocidos en favor de la niñez; obligación que incluso también
atañe a la sociedad, pues los particulares deben coadyuvar al
cumplimiento de los derechos de la niñez.
Ciertamente, el propósito de intensificar o dejar en claro la

obligación que tiene el Estado de velar y cumplir con el principio del
interés superior de la niñez y garantizar de manera plena sus
derechos, se corrobora con la exposición de motivos 36 que dio origen
a la reforma de doce de octubre de dos mil once, pues en lo que al
tema interesa, señala lo siguiente:
“En lo conducente, párrafos 6 y 7 del citado artículo 4, actualmente

se prevé que: "Los niños y las niñas tienen derecho a la satisfacción
de sus necesidades de alimentación, salud, educación y sano
esparcimiento para su desarrollo integral.
Los ascendientes, tutores y custodios tienen el deber de preservar

estos derechos. El Estado proveerá lo necesario para propiciar el
36
Exposición de motivos de 22 abril 2004, del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional.
67
respeto a la dignidad de la niñez y el ejercicio pleno de sus

derechos".
La propuesta se sustituye en este párrafo séptimo la expresión

"deber" por la de "obligación" por estimar que es más enfática y
que como tal, atendiendo a la terminología legal, concretamente
a la bilateralidad de la norma jurídica, expresa mejor el grado de
responsabilidad que los sujetos a quienes va dirigida. Además,
se agrega a la previsión vigente de que el Estado proveerá lo
necesario para propiciar el respeto a la dignidad de la niñez y el
ejercicio pleno de sus derechos, la de que también deberá proveer
lo necesario para lograr la plena identidad de niños y niñas. Con lo
anterior, se pretende que las legislaturas locales emprendan las
medidas necesarias para establecer en sus respectivas
legislaciones, las normas legales que constriñan a los progenitores a
someterse a las pruebas idóneas para acreditar la paternidad, entre
ellas, obviamente, las comparativas de material genético, dada su
fiabilidad.”
Atendiendo a lo anterior, es evidente que el interés superior de

la niñez es un principio de rango constitucional, en tanto que el
artículo 4° de la Carta Magna es terminante en señalar que el Estado
–a través de sus diversas autoridades incluidas las de índole
jurisdiccional–, está obligado a velar y cumplir con el interés superior
del menor, así como a garantizar el ejercicio de sus derechos,
incluidos los de rango internacional, entre ellos, los contenidos en la
Convención Sobre los Derechos del Niño, pues no se debe perder de
vista que ésta, según lo dispuesto en su artículo 3, parágrafo 1,
también se sustenta en ese principio, 37 y que la reforma que lo elevó a
rango constitucional, tuvo como propósito directo reconocer los
ideales que en materia de los derechos de los niños han sido
37
“Artículo 3. --- 1. En todas las medidas concernientes a los niños que tomen las instituciones
públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos
legislativos, una consideración primordial a que se atenderá será el interés superior del niño.
(…)”.
68
reconocidos a nivel internacional, para de esta forma

cristalizar la obligación asumida por el Estado
Mexicano al suscribir la Convención Sobre los Derechos del Niño, en
la que se comprometió a dar prioridad a los derechos del menor, a fin
de asegurar que tales derechos no fueran atropellados.
Así, es dable concluir que el interés superior de la niñez,

además de ser un principio de rango constitucional, es un principio
rector del marco internacional de los derechos del niño; por esa razón,
y en concordancia con ello, en el ámbito interno, este principio
también ha sido expresamente reconocido en diversas legislaciones
entre ellas, la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños
y Adolescentes38, la Ley de los Derechos de las Niñas y Niños en el
Distrito Federal39 y el Código de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal40.
38
Artículo 1. La presente ley se fundamenta en el párrafo sexto del artículo 4 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, su disposiciones son de orden público, interés social y
de observancia general en toda la República Mexicana y tiene por objeto garantizar a niñas,
niños y adolescentes la tutela y el respeto de los derechos fundamentales reconocidos en la
Constitución.
[…]”.
“Artículo 3. La protección de los derechos de niñas, niños y adolescentes, tiene como objetivo
asegurarles un pleno desarrollo e integral, lo que implica la oportunidad de formarse física, mental,
Son principios rectores de la protección de los derechos de niñas, niños y adolescentes:
B. El interés superior de la infancia.
[…]”.
39
“Artículo 4. Son principios rectores en la observancia, interpretación y aplicación de esta Ley, los
siguientes:
I El interés superior de las niñas y los niños. Este principio implica dar prioridad al bienestar de las
niñas y niños ante cualquier otro interés que vaya en su perjuicio.
Este principio orientará la actuación de los órganos Locales de Gobierno encargados de las
acciones de defensa y representación jurídica, provisión, prevención, protección especial y
participación de las niñas y niños, y deberá verse reflejado en las siguientes acciones:
d) En la asignación de recursos públicos para programas sociales relacionados con las niñas
y los niños;
e) En la atención a las niñas y niños en los servicios públicos; y
f) En la formulación y ejecución de políticas públicas relacionadas con las niñas y niños;
[…]”
40
“Artículo 941-Ter. […]
El juez de lo familiar, antes de regular el derecho de convivencia de manera provisional, deberá
tomar en cuenta todos los elementos que estén a su alcance para decidir bajo el principio del
interés superior del menor. En especial valorará el hecho de que una de las partes manifieste que
ha habido violencia familiar, pudiendo solicitar valoración psicoemocional que determine si existen
síntomas en el menor, d haber vivido cualquier tipo de violencia familiar, ya sea psicológica, física o
sexual, independientemente de que exista o no indagatoria al respecto, a fin de proteger la
integridad física y psicológica de los hijos.
69
Lo anterior se corrobora con el contenido de la tesis aislada

XLVII/2011, sustentada por esta Primera Sala, visible en el Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXXIII,
Abril de 2011, página 310, cuyo rubro es: “INTERÉS SUPERIOR DEL
NIÑO. ES UN PRINCIPIO DE RANGO CONSTITUCIONAL
IMPLÍCITO EN LA REGULACIÓN DE LOS DERECHOS DE LOS
MENORES PREVISTOS EN EL ARTÍCULO 4o.
CONSTITUCIONAL”.41
Violación al principio del interés superior de la infancia.
Ahora bien, pese al hecho de que el interés superior de la

niñez es un principio de rango constitucional, rector del marco
internacional de los derechos del niño y ampliamente reconocido
en el ámbito interno, en el caso a estudio no fue debidamente
atendido.
Se afirma lo anterior, porque si el interés superior de la infancia

radica en que cualquier decisión que se tome en torno a ella, debe ser
acorde con lo que más convenga a sus intereses, ello implica que
para poder cumplir con esa obligación, en primer lugar es necesario
tener presente cuáles son los derechos que la Constitución, los
Tratados Internacionales y las legislaciones ordinarias reconocen a su
[…].”
41
“INTERÉS SUPERIOR DEL NIÑO. ES UN PRINCIPIO DE RANGO CONSTITUCIONAL
IMPLÍCITO EN LA REGULACIÓN DE LOS DERECHOS DE LOS MENORES PREVISTOS EN EL
ARTÍCULO 4o. CONSTITUCIONAL. De acuerdo a una interpretación teleológica, el interés
superior del niño es principio de rango constitucional, toda vez que en el dictamen de la reforma
constitucional que dio lugar al actual texto del artículo 4o., se reconoce expresamente que uno de
los objetivos del órgano reformador de la Constitución era adecuar el marco normativo interno a los
compromisos internacionales contraídos por nuestro país en materia de protección de los derechos
del niño. En este sentido, el interés superior del niño es uno de los principios rectores más
importantes del marco internacional de los derechos del niño. En el ámbito interno, el legislador
ordinario también ha entendido que el interés superior es un principio que está implícito en la
regulación constitucional de los derechos del niño, ya que es reconocido expresamente en la Ley
para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes como un principio rector de los
derechos del niño”. Amparo Directo en Revisión 1187/2010. 1°. de septiembre de 2010. Cinco
votos. Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretarios: Ana María Ibarra Olguín y Javier
Mijangos y González.
70
favor, después es preciso que esos derechos se

interpreten y apliquen en forma adecuada, es decir,
de la manera que más favorezca las prioridades de los infantes,
teniendo siempre en cuenta su condición personal, a efecto de
salvaguardar su sano desarrollo en todos los ámbitos posibles, como
son el físico, el mental, espiritual, moral, psicológico y social, pues es
evidente que por su falta de madurez física y mental, los menores
requieren de cuidados especiales y una protección legal reforzada.
Lo anterior implica que en un juicio en el que se discuten

derechos de menores, el juzgador a efecto de dar cumplimiento a
lo dispuesto en el artículo 4° constitucional que obliga al Estado
a velar y cumplir con el interés superior de la infancia
garantizando de manera plena sus derechos, está constreñido a
atender todas las circunstancias o hechos que se relacionen con
la niñez, ya sea que éstas formen parte de la litis o vayan
surgiendo durante el procedimiento, por tanto, también está
obligado a ordenar la práctica, repetición o ampliación de
cualquier diligencia probatoria que estime conducente para
investigar todo lo que sea necesario con relación a los hechos o
circunstancias advertidas, a efecto de dictar una sentencia en la
que con razonamientos objetivos se tenga plena convicción de
que lo decidido con relación a la infancia no le resultará nocivo,
ni contrario a su formación y desarrollo integral.
Situación que en el caso no aconteció, porque después de

analizar con detenimiento las constancias que se anexaron al informe
justificado remitido por la autoridad responsable, las cuales tienen
valor probatorio pleno en términos de lo dispuesto en los artículos 129
y 202 del Código Federal de Procedimientos Civiles, aplicado
supletoriamente en términos del artículo 2° de la ley de la materia, se
71
advierte que a pesar de que la controversia gira en torno a la

patria potestad y los derechos y obligaciones que se derivan de
ella, el juzgador faltando al interés superior de la infancia, que
ordena garantizar los derechos de las menores involucradas en la
controversia, no atendió a todas las circunstancias o hechos que
con relación a ella se fueron dando durante el procedimiento, las
cuales no sólo obligaban a valorar las pruebas aportadas
teniendo en cuenta esas circunstancias o hechos, sino además a
recabar, ampliar y perfeccionar diversas probanzas, a efecto de
estar en posibilidad de dictar una sentencia en la que con
razonamientos objetivos, se tuviera plena convicción de que lo
decidido con relación al tema de la patria potestad no es nocivo
para las menores, ni contrario a su formación y desarrollo
integral.
Para demostrar con claridad lo anterior, conviene recordar qué

es lo que se demandó y qué se resolvió al respecto, así tenemos lo
siguiente:
De la demanda inicial se desprende que ********** demandó de

********** la pérdida de la patria potestad que ejerce sobre sus
menores hijas, entre otras razones, porque éste acostumbra ver
pornografía y masturbarse, motivo por el que a instancias de ella,
acudió a diversas terapias con el doctor ********** y el doctor **********,
pero como abandonó dichas terapias, su problema llegó a tal grado
que ya ni siquiera se percataba o le importaba hacerlo en presencia
de sus hijas, pues el diecisiete de abril de dos mil ocho, lo vio
masturbándose frente de su hija **********. Así, como esa situación ya
afectaba directamente a sus hijas, se dio a la tarea de buscar ayuda
profesional para ver cómo podía atenderlas, acudiendo a diversos
especialistas, siendo uno de ellos quien le comentó, que seguramente
72
su hija mayor ********** también ya lo había visto

masturbándose pues no dormía bien y tenía
pesadillas, razón por la que le recomendaron platicar con ella jugando
con títeres, siendo así como dicha menor le comentó que lo más feo
que le había pasado era que su tío ********** (hermano de su padre) y
su papá, le raspaban con los dedos su colita, por lo que abandonó el
domicilio conyugal y presentó la denuncia penal correspondiente por
el delito de abuso sexual cometido en agravio de su menor hija
**********.
De lo anterior, se advierte que la pretensión de la actora en

cuanto a estos hechos concretos, básicamente se sustenta en dos
premisas, a saber:
 En el daño que pueden sufrir sus hijas ante la conducta

masturbatoria de su padre, en tanto que según afirma, su
problema llegó a tal grado que ya ni siquiera se percataba
o le importaba hacerlo en presencia de sus hijas; y
 En el abuso sexual que ********** le informó ha sufrido por
parte de su padre y el hermano de éste.
Por su parte, de la demanda reconvencional se desprende que

**********, reclama la suspensión de la pérdida de la patria potestad
argumentando en esencia, que ello debe ser así hasta en tanto no
exista certeza médica de que la demandada se encuentra en un
estado físico y mental adecuado para hacerlo, en virtud de que sus
conductas ponen en riesgo el sano desarrollo de sus hijas, pues con
ellas pretende que las menores crezcan con la falsa apreciación de
que su padre no quiso participar en su educación y desarrollo,
creyendo que las abandonó, lo cual les está causando un grave daño
que atenta contra la salud y estado emocional, pues pretende
73
contaminar la mente de sus hijas en cuanto a la imagen que tienen de

su padre, intentando con ese procedimiento privarlas del derecho de
contar con una figura paterna en su vida.
De lo anterior se advierte que la pretensión del actor

reconvencional básicamente también se sustentó en dos premisas, a
saber:
 Que no existe certeza médica de que ********** se encuentre

en un estado físico y mental adecuado para ejercer la
patria potestad de sus hijas; y
 Que con sus conductas, la demandada pretende

contaminar la mente de sus hijas en cuanto a la imagen
que tienen de su padre, intentando con ese procedimiento
privarlas del derecho de contar con una figura paterna.
Al respecto el juez de primer grado consideró que la pretensión

de la actora en lo principal era improcedente, pues después de
analizar los dictámenes periciales ofrecidos en materia de psiquiatría 42,
consideró que en el caso no se había demostrado que **********
tuviera el hábito de observar pornografía y masturbarse; y que
tampoco se demostró que haya abusado sexualmente de su hija
**********, porque en la indagatoria iniciada por tal motivo se determinó
el no ejercicio de la acción penal; además de que en el dictamen
pericial en psiquiatría emitido por el doctor ********** en el diverso
procedimiento, practicado a ********** se advirtió un riesgo potencial de
devaluar o agredir al padre de las menores como en el síndrome de
alienación parental, mientras que en el dictamen pericial en
42
Concretamente los emitidos por los peritos ********** y **********, porque al dictamen rendido por
********** le negó valor probatorio por no haber demostrado que cuente con un título que lo avale
como psiquiatra.
74
psiquiatría practicado a la menor ********** en el

diverso procedimiento por el doctor **********, se
determinó que no presenta criterios de diagnóstico para establecer
que fue víctima de abuso sexual; que del expediente clínico rendido
por la **********. y la constancia emitida por el **********, no se
desprende que la menor haya sido abusada sexualmente, además de
que en el estudio psicológico practicado por ********** se determinó
que la menor no presenta ninguna alteración en la esfera de su
sexualidad, ni manifestaciones de agresividad, ni violencia, ni estrés
postraumático, por lo que se descarta que haya sufrido violencia física
o verbal.
Por el contrario, estimó que la pretensión del actor

reconvencional si era procedente, ello por considerar que **********
ha ejercido sobre su menor hija ********** el síndrome de
alienación parental.
En efecto, al respecto el A quo señaló lo siguiente:
“Ahora bien tenemos que de constancias de autos se desprende que

la **********ha puesto en riesgo el estado emocional de su mejor hija
**********, al someterla a un procedimiento de carácter penal, y en el
juicio en que se actúa, no se acreditó el supuesto Abuso Sexual que
dijo cometió el señor **********, en agravio de dicha menor, puesto que
atendiendo al informe por la PROCURADURÍA GENERAL DE
JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL, visible a fojas 1032 del
Segundo Tomo, en dicho procedimiento se decretó el NO EJERCICIO
DE LA ACCIÓN PENAL, el dieciséis de marzo del año dos mil diez.
Aunado a ello, tenemos que en autos se demostró que la actora no ha

permitido que el demandado señor **********, conviva con sus
menores hijas en los términos que provisionalmente decretó el C.
75
FEDERAL, tal y como se señaló en el considerando VI de la presente

resolución, afectando la relación paterno filial entre el demandado y
sus menores hijas pues el derecho del hijo a convivir con sus padres
deriva simplemente de su condición de hijo; pues el DERECHO DE
VISITA, comprenderá el DERECHO DE LLEVAR A LOS MENORES,
POR UN PERIODO DE TIEMPO LIMITADO, A OTRO LUGAR
DIFERENTE A AQUEL EN QUE TIENE SU RESIDENCIA HABITUAL,
como lo establece el inciso A) del artículo 5° de la Convención Sobre
Aspectos Civiles de la Sustracción Internacional de Menores,
adoptada en la Haya, Países Bajos el veinticinco de octubre de mil
novecientos ochenta; por lo que es derecho de todo menor convivir
con ambos padres cuando éstos se encuentren separados; aunado a
ello, tenemos el resultado de los Dictámenes Periciales en Psiquiatría
practicados a la señora **********, tanto en este procedimiento como
en el diverso tramitado ante el C. JUEZ VIGÉSIMO OCTAVO DE LO
FAMILIAR DE ESTA CIUDAD, cuyas conclusiones se señalaron en el
cuerpo de esta resolución, denotándose que la menor
********************, es portadora del Síndrome de Alienación Parental,
con características imputables a su madre señora **********, como se
concluyó en el Dictamen Pericial en Psiquiatría practicado a la actora
por el Psiquiatra **********, en el procedimiento radicado ante el C.
JUEZ VIGÉSIMO OCTAVO DE LO FAMILIAR DE ESTA CIUDAD, el
cual fue ofrecido en este procedimiento como prueba superveniente
por el demandado visible a fojas 408 a 418 de autos, el cual benefició
a su oferente, sin que pase por desapercibido que para el Psiquiatra
RICHARD GARDNER, la ALIENACIÓN PARENTAL, ‘es un proceso
que consiste en programar a un hijo para que odie a uno de su
padres sin que tenga justificación. Cuando el síndrome es
presente, el hijo da su propia contribución a la campaña de
denigración del padre alienado’. Es decir, consiste en que un
progenitor vuelva a los hijos en contra de otro, es la ‘predisposición
del niño hacia su padre no custodio, a consecuencia de ello, el
niño rechaza todo contacto con el padre. El niño alienado tiene
miedo a ser independiente en sus sentimientos y captan que el
padre custodio rechaza al no custodio y que el padre custodio va
76
a estar más contento con el menor, si este

también rechaza al no custodio’.
Aunado a lo anterior, tenemos que en las actuaciones del Tercer

Tomo del asunto que nos ocupa, corren agregadas las copias
certificadas de los Reportes del Centro de Convivencia dependiente
de este Tribunal, de los que se desprende que en diversas ocasiones
no se llevaron a cabo las convivencias entre el señor ********** y su
menores hijas, dada la inasistencia de la señora ********** y de las
menores hijas de las partes, sin que pasen por desapercibidas las
observaciones reportadas cuando se llevan a cabo dichas
convivencias, las cuales se tienen por reproducidas como si se
insertasen a la letra, en obvio de repeticiones; en consecuencia,
atendiendo a la conducta presentada por la señora **********, aunado
a las conclusiones formuladas en los diversos Estudios Psicológicos
practicados tanto a las partes como a sus menores hijas, las cuales se
hicieron alusión en el cuerpo de esta Resolución, las cuales
permitieron conocer las circunstancias que imperan entorno a dicho
núcleo familiar, como son los rasgos de personalidad, trastornos,
dinámica familiar, estabilidad social y familiar, sin que se haya
percibido que las menores hijas de las partes hayan sido violentadas
por parte de su padre, con fundamento en las fracciones IV, V y VI del
artículo 447 del Código Civil, se SUSPENDE la Patria Potestad que
la ********** venía ejerciendo sobre sus menores hijas de nombres
********** todas de apellidos **********, hasta en tanto se someta a una
Terapia Psicológica o Psiquiátrica, que le ayude a sobrellevar los
conflictos con el señor **********, que permitan una adecuada
manifestación de sus emociones y sentimientos; así como la
orientación que necesite cumplir con las obligaciones de crianza
establecidas en el artículo 414 Bis del Código Civil, ejerciendo la
Patria Potestad sobre dichas menores, únicamente el señor
**********.”43
**********se inconformó con esta determinación alegando entre

otras cuestiones, que se soslayó el interés superior de sus
43
77
menores hijas, pues sin atender todas las constancias de autos,

ni el caudal probatorio ofrecido con el propósito de demostrar la
pretensión consistente en la pérdida de la patria potestad, el A
quo absolvió a su contrario, sin advertir que en las
averiguaciones previas existen dictámenes periciales emitidos
por peritos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito
Federal, de donde se desprende que existió un abuso sexual por
parte de ********** hacia su menor hija **********, así como conductas
por parte de éste que hacen peligrar a sus menores hijas.
Ahora bien, pese al hecho de que en sus agravios **********hizo

valer que no se analizaron todas las constancias de autos ni las
pruebas aportadas, en especial los dictámenes periciales emitidos por
peritos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, la
Segunda Sala Familiar del Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal, básicamente se limitó a señalar que como acertadamente lo
había resuelto el juzgador, la parte actora no demostró el supuesto
abuso sexual del demandado hacia su hija **********, dado que con
respecto a la averiguación iniciada por la actora se determinó el
no ejercicio de la acción penal; además del resultado de los
dictámenes en psiquiatría practicados por el doctor ********** se
desprende que ********** es portadora del síndrome de alienación
parental con características imputables a la madre, lo que se vio
robustecido y adminiculado con lo manifestado por la menor en las
audiencias de seis de noviembre de dos mil ocho y ocho de marzo de
dos mil diez44, así como con los continuos incumplimientos al régimen
de visitas y convivencia llevados a cabo por **********; además de que
con el dictamen en psicología rendido por **********, se acredita que
********** incumplió con sus obligaciones de crianza, toda vez que no
ha procurado la seguridad física, psicológica y sexual de sus hijas; sin
44
El dictamen pericial y las audiencias mencionadas no tuvieron lugar en el expediente del que
deriva el acto reclamado, sino en el diverso **********, con posterioridad **********
78
que por otro lado se advierta que ********** haya

desplegado conductas impropias en contra de alguna
de sus hijas.
De lo anterior se advierte que por un lado, sin hacer un

análisis pormenorizado de los hechos y circunstancias que con
relación a la litis se fueron dando durante el desarrollo del
proceso, se estimó que la actora en lo principal no acreditó su
acción, desprendiéndose además que el hecho de que no se haya
ejercido acción en contra de **********, fue suficiente para negar
valor probatorio a cualquier aspecto o indicio que se pudiera
derivar de la averiguación previa que ********** inició por el abuso
sexual que asegura se cometió en contra de su menor hija
**********.
Mientras que por otro lado, se consideró que el actor

reconvencional demostró su acción, en razón de que ********** era
portadora del síndrome de alienación parental.
Al respecto debe decirse lo siguiente:
Síndrome de alienación parental (SAP) y abuso sexual.
La figura del “Síndrome de Alienación Parental”, conocido por

sus siglas SAP, fue propuesta en mil novecientos ochenta y cinco, por
el psicólogo estadounidense Richard Gardner, como “un desorden que
surge principalmente en el contexto de las disputas legales sobre la
custodia de los hijos. Su manifestación primaria es la campaña de
denigración de un hijo hacia uno de sus progenitores, una campaña
que no tiene justificación. El fenómeno resulta de la combinación del
sistemático adoctrinamiento (lavado de cerebro) de uno de los padres
79
y de las propias contribuciones del niño dirigidas a la denigración del

progenitor objetivo de esta campaña. El hijo está esencialmente
preocupado por ver a un padre como totalmente bueno y al otro como
el contrario. El “padre malo” es odiado y difamado verbalmente,
mientras que el “padre bueno” es amado e idealizado.”45
En efecto, a partir de su práctica privada, Richard Gardner

sostuvo que en más del 90% de los casos en que se disputa la
custodia legal de los hijos, la madre aliena al hijo contra el padre,
alegando falsas acusaciones de agresión sexual hacia los hijos; sin
embargo, en el marco de una disputa legal, la alienación parental no
sólo puede ejercerse por la madre, sino que también puede ser
utilizada por el padre y no necesariamente conlleva alegaciones sobre
agresiones de tipo sexual.
José Manuel Aguilar Cuenca, refiere que “el Síndrome de

Alienación Parental (SAP) es un trastorno caracterizado por el
conjunto de síntomas que resultan del proceso por el cual un
progenitor transforma la conciencia de sus hijos, mediante distintas
estrategias, con objeto de impedir, obstaculizar o destruir sus vínculos
con el otro progenitor”;46 pero a diferencia de Richard Gardner, indica
que ese trastorno no sólo encuentra su origen en las cuestiones
relacionadas con la guarda y custodia de los hijos, sino que incluso
puede ser motivado por el inicio de una nueva relación de pareja del
progenitor alienado, al nacimiento de un nuevo hijo, y en muchos
casos por diferencias de tipo económico.47
45
Véase: “ESTUDIO DESCRIPTIVO DEL SÍNDROME DE ALIENACIÓN PARENTAL EN
PROCESOS DE SEPARACIÓN Y DIVORCIO. DISEÑO Y APLICACIÓN DE UN PROGRAMA
PILOTO DE MEDIACION FAMILIAR”, Tesis Doctoral, Universidad Autónoma de Barcelona, pp. 80
a 93.consultable en http://www.tesisenxarxa.net/TDX-0613102-130415/
46
AGUILAR CUENCA, José Manuel. “S.A.P. SÍNDROME DE ALIENACIÓN PARENTAL HIJOS
MANIPULADOS POR UN CONYUGE PARA ODIAR AL OTRO”, Segunda edición, España,
Editorial Almurza, 2005, p. 21.
47
Ibídem. pp. 37 y 38.
80
En la página de internet
http://www.separadasydivorciadas.org/articulos/SAP.pdf, se dice que “alienar según el
Diccionario de la Real Academia Española, es equivalente a enajenar,
y en el sentido utilizado por Gardner alude a que el niño sometido a la
influencia de un progenitor (fundamentalmente la madre) tendría una
percepción distorsionada del otro progenitor”.
Richard Gardner señaló que como parte de la dinámica de la

alienación parental, el progenitor manipulador (alienador), pretende
que el hijo acabe rechazando e incluso odiando al otro progenitor
(alienado), aunque éste no haya dado motivo para ello; sin embargo,
José Manuel Aguilar Cuenca indica que Douglas Darnall, agrega que
en ocasiones las críticas que se utilizan por el progenitor alienador en
contra del alienado pueden llegar a ser reales y que no
necesariamente necesitan tener un carácter injustificado y exagerado
como refería Gardner, ya que el alienador manipula los
acontecimientos o palabras reales torciéndolos en su interés hasta
hacerlos irreconocibles, pues según refiere “no existe mejor estrategia
que la deformación malintencionada de la verdad, de tal modo que sea
muy difícil, sino agotador, describir qué parte es cierta y cuál
inventada.”48
En ese orden de ideas, ya sea que en el proceso de alienación el

alienado haya dado o no motivo a críticas reales, lo cierto es que el
alienador precisa torcer los sentimientos del niño hasta hacerlos
coincidir con los suyos (mediante técnicas de lavado de cerebro) y,
para conseguir su objetivo, que básicamente consiste en destruir toda
posibilidad de contacto y encuentro entre el hijo y el progenitor
alienado, se marca como imprescindible para el hijo.
48
AGUILAR CUENCA, José Manuel. ob. cit. p. 22.
81
Para lograr su objetivo, el alienador puede incurrir en los

siguientes comportamientos:
 Impedir que el otro progenitor ejerza el derecho de

convivencia con sus hijos oponiéndose sin razón alguna
a una custodia compartida.
 Desvalorizar e insultar al otro progenitor en presencia de

los niños y en ausencia del mismo, aludiendo cuestiones
de pareja que no tienen nada que ver con el vínculo
parental.
 Ridiculizar o subestimar los sentimientos de afecto de los

niños hacia el otro progenitor.
 Incentivar o premiar las conductas despectivas y de rechazo

hacia el otro progenitor.
 Prohibir a los hijos que se refieran al progenitor

denigrado como papá o mamá, obligándoles a nombrarlo
con su nombre de pila, como a un tercero o con nombres
despectivos y ridículos.
 Aterrorizar o influir en los niños con mentiras de la figura

del progenitor ausente, insinuando o diciendo
abiertamente que pretende secuestrarlos, dañarlos o,
incluso, matarlos.
 Inducir recuerdos falsos que desvaloricen al progenitor

denigrado en la mente de los niños.
 Implicar al entorno familiar propio (nuevo cónyuge, abuelos,

primos, tíos, etc.) en el lavado de cerebro de los hijos.
 Presentar falsas alegaciones de abuso (físico y/o sexual)

en los tribunales para separar a los niños del otro
progenitor.
82
 Focalizar la atención de los hijos hacia los

normales errores, defectos y carencias del
otro progenitor, exagerándolos y negar la existencia de rasgos
positivos.
 Exigir una adhesión absoluta a la causa y percepciones del

progenitor alienador colocando a los hijos ante un conflicto de
lealtades.
 Intentar cambiar los apellidos de los hijos para que pierdan el

del progenitor denigrado.
 Cambiar de domicilio, incluso a miles de kilómetros, con el

único fin de impedir todo contacto y así destruir la relación del
progenitor denigrado con sus hijos.
 Presentar al nuevo cónyuge a los hijos como el nuevo y
verdadero padre o madre, o actuar como si lo fuera.
 Rehusar pasar las llamadas telefónicas a los hijos
 Organizar actividades con los hijos durante el periodo en

que el otro progenitor debe normalmente ejercer su
derecho de visita.
 Impedir el derecho de visita del progenitor alienado.
 Omitir avisar al progenitor alienado de citas importantes.
 Impedir al otro progenitor el acceso a los expedientes

escolares y médicos de los hijos.
 Irse de vacaciones sin los hijos y dejarlos con otras personas,

aunque el otro progenitor esté disponible.
 Contar a los hijos que la ropa o regalos del otro progenitor son
feos y prohibirles usarlos. etc.49
49
Los comportamientos del progenitor alienador fueron obtenidos de las páginas de internet:
http://www.secuestro-emocional.org/main/maltrato.htm,
http://síndromedealienaciónparental.apadeshi.org.ar/tejedor_huerta.htm,
http://es.wikipedia.org/wiki/S/%C3%ADndrome_de_alienaci%B3n_parental y
http://72.29.89.31/~padresp/padresp//index.php?
option=com_content&task=view&id=128&Itemid=45
83
Bajo la presión del programa alienador, los hijos pueden mostrar

los siguientes rasgos indicadores de maltrato emocional:
 Desarrollarán una distorsión perceptiva hacia el progenitor

denigrado que les facilitará la coincidencia con los puntos de
vista del alienador.
 Se verán forzados a negar las propias experiencias,

obligados a olvidar y borrar segmentos de su memoria
originados en sus vivencias reales, en los que aparecía el
progenitor denigrado bajo un prisma favorable. Por el
contrario tendrán que considerar como recuerdos
realmente vividos, sucesos imaginarios inducidos por el
alienador, en los que el progenitor denigrado aparece
mostrando facetas negativas y odiosas.
 Serán sometidos a un neurotizante conflicto de lealtades.
 Aprenderán formas disfuncionales de comunicación, tanto

para tratar con el progenitor denigrado como con el alienador,
basadas en la represión de sus sentimientos y en la no
exteriorización de los mismos.
 Aprenderán a fingir y a mentir para sobrevivir.
 Tendrán que aprender rápidamente cuáles son las conductas,

sentimientos y actitudes no permitidas, según los criterios del
alienador, reprimiendo su natural espontaneidad y sus propios
criterios.
 Desarrollarán modos de pensamiento rígidos y dicotómicos,

los propios del alienador, que utilizarán para la interpretación
de la realidad social.
 Aprenderán formas inadecuadas de conseguir el afecto y la

apreciación del progenitor alienador: serán premiados
mostrando su odio hacia el otro progenitor.
84
 Finalmente, los hijos romperán,

injustificadamente, los lazos afectivos con un progenitor
plenamente capaz y afectuoso. Perderán el vínculo con una
figura de referencia fundamental para su armonioso
desarrollo. 50
Según Richard Gardner, los ocho síntomas primarios que

usualmente aparecen en los niños afectados con el síndrome de
alienación parental, y que permiten su identificación son los siguientes:
 Campaña de denigración. El niño está obsesionado con odiar

a uno de los padres. José Manuel Aguilar Cuenca dice que los
menores tratan a sus progenitores no como a un enemigo,
sino como a un desconocido cuya proximidad sienten como
una agresión, por lo que señala que la principal
recomendación a un progenitor víctima del SAP, por mínimo
que sea, es no romper nunca el contacto con sus hijos.
 Débiles, absurdas y frívolas justificaciones para el desprecio.

El niño plantea argumentaciones irracionales, incoherentes o
absurdas y a menudo ridículas para no querer estar cerca del
progenitor alienado.
José Manuel Aguilar Cuenca refiere que por lo general los

menores aprenden una retahíla de argumentos –hechos del
pasado, exageraciones de personalidad o carácter del
progenitor alienado, episodios negativos de sus vidas en
común, etcétera– a los que recurren una y otra vez; e indica
que cuando se está en presencia del SAP, hay ausencia de
dialogo o entendimiento entre el progenitor alienado y los
hijos, así como ausencia total del contacto ocular y el
mantenimiento de una excesiva distancia con el padre
alienado.
50
Los rasgos indicadores fueron obtenidos de la página de Internet http://www.secuestro-
emocional.org/main/maltrato.htm.
85
 El hijo alienado muestra un odio sin ambivalencias,51 sin

fisuras ni concesiones. Todas las relaciones humanas,
incluidas las paterno-filiales, tienen algún grado de
ambivalencia En este caso, los niños no muestran
sentimientos encontrados. Todo es bueno en un padre y todo
es malo en el otro.
Para mejor comprensión de cómo opera la ausencia de

ambivalencia en los menores sometidos al síndrome de
alienación parental, José Manuel Aguilar Cuenca señala
que un niño abusado sexualmente es capaz de reconocer
situaciones agradables que vivió con su abusador en
otras circunstancias; pero que por el contrario frente a la
realidad psicológica que encierra el síndrome de
alienación parental, un hijo alienado únicamente es capaz
de expresar un sentimiento sobre su odiado progenitor: el
odio. El hijo alienado muestra un odio sin ambivalencias,
sin fisuras ni concesiones, un odio que dice, sólo puede
ser equiparado con el fanatismo terrorista o religioso.
 Fenómeno del “pensador independiente”. Muchos niños

afirman orgullosamente que su decisión de rechazar a uno de
sus padres es completamente suya. Niegan cualquier tipo de
influencia por parte del padre aceptado.
 Apoyo o defensa del progenitor “alienador” en el conflicto

parental. Habitualmente los niños aceptan incondicionalmente
la validez de las alegaciones del padre aceptado contra el
odiado, incluso cuando se les ofrece evidencia de que aquél
miente, pues en el SAP, el conflicto surgido entre los
progenitores es vivido por el hijo como una consecuencia
motivada por razones lógicas y reales, en el cual hay que
tomar partido asumiendo la defensa del progenitor alienador,
por lo que se convierte en un guerrero cruel y fiel del
alienador, y un ataque hacia él es vivido como un golpe hacia
sí mismo, de modo que en ausencia del progenitor asume su
defensa.
51
Para la psicología AMBIVALENCIA consiste en: “Estado de ánimo, transitorio o permanente en el
que coexisten emociones o sentimientos opuestos: la ambivalencia de mis sentimientos se traduce
en una lucha entre amor y odio.” Fuente de consulta: http://www.wordreference.com
86
 Ausencia de culpa hacia la crueldad y la

explotación del progenitor “alienado”.
Muestran total indiferencia por los sentimientos del padre
odiado, de modo que cualquier ataque a su persona carece
de sentimientos de culpa.
 Presencia de argumentos prestados. La calidad de los

argumentos parece ensayada. A menudo usan palabras o
frases que no forman parte del lenguaje de los niños; se
apropian de escenas, pasajes y conversaciones, como si las
hubiesen vivido, aún cuando jamás hubiera estado presente
cuando ocurrieron o resulten incoherentes con su edad.
 Extensión de la animadversión a la familia extensa y red

social del progenitor “alienado”. El niño rechaza a personas
que previamente suponían para él una fuente de
gratificaciones psicológicas.
 Psicológicamente la animosidad se extiende a todo aquello

que de un modo u otro, pudiera tener relación con el
progenitor odiado.52
Como se advierte, para quienes afirman la existencia del

síndrome de alienación parental, éste se sustenta en todo un análisis
que permite advertir cuáles son los comportamientos más comunes del
padre alienador, los rasgos de los hijos que están sometidos a la
alienación y los síntomas primarios que éstos presentan; y a partir de
ello, es posible diferenciar cuándo se está en presencia de un abuso o
negligencia y cuándo ante una manipulación o alienación; es decir, no
se trata de una simple afirmación de la existencia de una
manipulación sin sustento, sino que por el contrario, su
existencia se revela con el propio comportamiento de los hijos
alienados y el progenitor alienador.
52
Los síntomas primarios o criterios de identificación del niño sometido al síndrome de alienación
parental fueron obtenidos de la obra de AGUILAR CUENCA, José Manuel previamente citada,
páginas 25 a 36, así como de la página electrónica de Internet siguiente:
http://72.29.89.31/~padresp/padrespindex.php?option=com_content&task=view&id=128&Itemid=45
87
No obstante, a partir de mil novecientos noventa y uno, Richard

Gardner también advierte que cuando un maltrato/abuso sexual
está presente, la animosidad puede estar justificada y así el
síndrome de alienación parental no es aplicable.
Los psicólogos forenses Laura Fátima Asensi Pérez y Miguel

Díez Jorro, señalan que en esos casos el Síndrome de Alienación
Parental no sólo otorga un argumento ad hoc para la defensa,
sino que instala la sospecha sobre la víctima; los niños y las
niñas; así también advierten que en ocasiones es utilizado
peligrosamente en casos de incesto devaluando la palabra y
creando sospecha sobre el testimonio infantil, cuando en la
mayoría de los abusos sexuales, ésta es la única prueba para
iniciar una investigación.
Por ese motivo, cuando haya una acusación de abuso

sexual, para poder considerar la posibilidad de que se está en
presencia de una manipulación o síndrome de alienación
parental, primero es preciso descartar el abuso.
José Manuel Aguilar Cuenca señala que en ocasiones el

síndrome de alienación parental y las denuncias por abuso sexual
se encuentran relacionadas, pues si bien las falsas denuncias por
abuso sexual son una estrategia común de los alienadores para
interferir en las relaciones de los hijos con el otro progenitor,
obteniendo una posición de ventaja en litigios en los que se están
tratando temas relacionados con la separación y el divorcio de
una pareja, al pretender justificar que la animadversión de sus
hijos viene dada por el abuso sexual del cual han sido víctimas,
también ocurre que algunos abusadores pretenden justificar la
88
animosidad de los hijos aduciendo que han sido

adoctrinados por el otro progenitor.
Así, advierte que ante esta situación, es importante distinguir

claramente cuándo se está en presencia de un abuso sexual y cuándo
ante el síndrome de alienación parental, para ello propone el siguiente
diagnóstico diferencial:53
EN CASO DE ABUSO SEXUAL O SÍNDROME DE ALIENACIÓN

NEGLIGENCIA. PARENTAL.
El hijo recuerda lo ocurrido sin El hijo programado no ha vivido lo que

ninguna ayuda externa. su progenitor denuncia.
Necesita recordar.
Los datos que aporta son creíbles Los datos que aporta son menos
con mayor cantidad y calidad de creíbles, carecen de detalles e incluso
detalles. son contradictorios entre hermanos.
Los conocimientos sexuales son No tienen conocimientos sexuales de

inapropiados para su edad: carácter físico –sabor, dureza, textura,
erección, eyaculación, felación, etcétera-.
sabor del semen …
Suelen aparecer indicadores No aparecen indicadores sexuales.

sexuales-conductas sexualizadas,
conducta seductora con adultos,
juegos sexuales precoces e
inapropiados con iguales (por ejemplo,
felatio), agresiones sexuales a otros
menores más pequeños,
masturbación excesiva, etcétera.
Suelen existir indicadores físicos – No existen indicadores físicos.

infecciones, lesiones- del abuso.
Suelen presentarse trastornos No suelen presentarse trastornos

funcionales –pautas de sueño funcionales acompañantes.
alteradas, Euneresís, Encopresis,
53
Op. Cit. pp. 56-58.
89
trastornos de la Alimentación.
Suelen presentarse retrasos No suele presentarse retraso

educativos –dificultades de educativo consecuente con la
concentración, atención falta de denuncia.
motivación, fracaso escolar-.
Suelen presentarse alteraciones en el El patrón conductual del sujeto no se

patrón de interacción del sujeto ve alterado en su entorno.
abusado –cambios conductuales
bruscos, aislamiento social, consumo
de alcohol u otras drogas, agresividad
física y/o verbal injustificada, robos,
etcétera.
Suelen presentarse desórdenes No aparecen sentimientos de culpa o

emocionales –sentimientos de culpa, estigmatización o conductas de
de estigmatización, síntomas autolisis.
depresivos, baja autoestima, llanto
inmotivado, intentos de suicidio, …
El menor siente culpa o vergüenza Los sentimientos de culpa o

por lo que declara. vergüenza son escasos o inexistentes.
Las denuncias por abusos son previas Las denuncias por abusos son
a la separación. posteriores a la separación.
El progenitor se da cuenta del dolor y El progenitor no tiene en cuenta, ni

la destrucción de vínculos que la parece importarle la destrucción de los
denuncia provocará en la relación vínculos familiares.
familiar.
Sería esperable que un progenitor Un progenitor alienado aparenta estar

que abusa de sus hijos pudiera sano en las distintas áreas de su vida.
presentar otros trastornos en
distintas esferas de su vida.
Un progenitor que acusa a otro de Un progenitor programador sólo

abuso de sus hijos lo suele acusar denuncia el daño ejercido hacia sus
también de abusos a sí mismo. hijos.
Las doctoras M. Arch y Noemí Pereda (Profesora del

Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico
de la Facultad de Psicología de la Universidad de Barcelona), señalan
90
que la investigación sobre maltrato infantil se inició

focalizándose casi exclusivamente en el análisis de los
malos tratos de tipo físico; sin embargo, precisan que cuando se
abusa sexualmente de un niño no sólo hay daño físico, sino que
generalmente existe también una secuela psicológica; no obstante,
advierten que en ocasiones no hay un daño físico visible y las
consecuencias psicológicas son diversas, pues los trabajos
publicados al respecto, demuestran la no existencia de un patrón
de síntomas único.
Así, indican que debido a la ausencia, en numerosas

ocasiones, de un daño físico visible, así como a la no existencia
de un conjunto de síntomas psicológicos uniforme que permitan
su detección y diagnostico unívoco, el abuso sexual ha sido una
patología difícil de estudiar y advierten que un error de
diagnóstico entre abuso sexual e interferencia parental
conllevaría un gran perjuicio para el menor, su familia y el
sistema social.
Así, por la especial gravedad que pueden revertir ambas

problemáticas para los menores, como por la evidencia de la dificultad
que entraña para los profesionales su adecuado diagnóstico y
abordaje, M. Arch y Noemí Pereda señalan que es fundamental insistir
en la necesidad de una adecuada diferenciación de ambas
situaciones, y proporcionan una tabla de indicadores clínicos o
patrones de conductas que presenta el menor y que se han observado
en gran parte de las víctimas de abuso sexual, así como una tabla de
indicadores de baja credibilidad de la denuncia y que pueden estar
relacionados con una posible manipulación o alienación del menor.
Esas tablas de indicadores son las siguientes:
91
INDICADORES DE CREDIBILIDAD INDICADORES DE RIESGO DE

POSIBLE FALSA DENUNCIA
El abuso sexual es revelado por el El abuso sexual es revelado por el
menor. progenitor y se sitúa en un contexto de
separación o divorcio conflictivo.
La información específica sobre el El relato se centra en la descripción
abuso se encuentra dispersa a lo del abuso sexual.
largo del relato, alejándose de un
relato estructurado.
El relato de abuso se enmarca en
unas coordenadas espacio
temporales.
El menor describe el acto sexual El menor describe el acto sexual con
con vocabulario acorde a su edad. vocabulario adulto.
El relato del abuso incluye una gran El relato de abuso sexual incluye los
cantidad de detalles. detalles justos .
El relato del abuso incluye detalles El relato del abuso se basa
irrelevantes para la acusación. exclusivamente en detalles necesarios
para la acusación.
El menor incluye en su relato El menor muestra un discurso

fragmentos de conversaciones o automatizado.
interacciones verbales que pueden
presentar expresiones del presunto
abusador, de uso poco común para
la edad del menor.
El menor realiza rectificaciones y
apostillas a lo largo de sus
declaraciones.
Presencia de sentimientos de culpa No aparecen sentimientos de culpa
y/o vergüenza en el menor. ni estigmatización.
Conocimientos sexuales inapropiados El menor no presenta
para la edad de la víctima. conocimientos a nivel físico:
textura, sabor, etc.
El progenitor se preocupa más por el El progenitor se preocupa más por el
bienestar del menor que por el castigo castigo del abusador que por el
92
del abusador bienestar del menor.

Indicadores de El menor presenta la mayoría de los
trastorno por estrés postraumático ocho síntomas primarios descritos por
(TEPT). Gardner y escasamente alguno de
TEPT.
Como se advierte, aunque la distinción entre un abuso sexual y

el síndrome de alienación parental resulta compleja, ésta no puede
descartarse de manera inmediata.
Pese a ello, y sin importar que la alienación parental se sustenta

en todo un análisis que permite advertir cuáles son los
comportamientos más comunes del padre alienador, los rasgos de los
hijos que están sometidos a la alienación y los síntomas primarios que
éstos presentan, la existencia del síndrome de alienación parental no
ha sido científicamente aceptada.
En efecto, aunque las ideas de Richard Gardner sobre la

existencia del síndrome de alienación parental son apoyadas por
especialistas en psicología y en asuntos de orden familiar como son
L.F. Lowenstein,54 J. Michael Bone,55 Michael R. Walsh,56 Jayne A.
Major y Aguilar Cuenca José Manuel, lo cierto es que a nivel
internacional el Síndrome de Alienación Parental no ha sido
reconocido por la Organización Mundial de la Salud ni por la
Asociación Americana de Psicología.
54
Especialista en psicología en el “Cebtre for the Diagnosis and Emocional-Behavioural Problems”
Allington Manor School and Terapeutic Centre. Eastleigh, Hampshire. UK 5050 7DE.
55
Psicoterapeuta practicante independiente y mediador familiar en Maitland. Se especializa en
divorcios y temas post-divorcio, hijos menores, ha actuado como testigo en el tema y reconocido
por los tribunales por realizar recomendaciones a propósito del Síndrome de Alienación parental.
56
Practicante independiente en Orlando, abogado certificado y familiar mediador certificado y
árbitro.
93
Así, ninguno de los dos grandes sistemas diagnósticos de salud

mental utilizados en el mundo, han incluido el llamado Síndrome de
Alienación Parental entre los síndromes y enfermedades reconocidas,
pues fue rechazada su inclusión en el DSM-IV por la Asociación
Americana de Psicología, así como en la ICE-10 de la Organización
Mundial de la Salud, por no cumplir los criterios de cientificidad y
bases empíricas que ambas instituciones defienden. 57
Ciertamente, en mil novecientos noventa y seis, la Asociación

Americana de Psicología señaló que no hay evidencia científica
que avale al síndrome de alienación parental, pues según afirmó,
términos como ese pueden ser usados para culpar a los
progenitores que se pretenden alienadores, de los miedos o
angustias razonables en los niños hacia sus progenitores
verdaderamente violentos.
A consecuencia de lo anterior, en la edición dos mil seis, de la

guía de evaluación para jueces de los casos de custodia infantil en
contextos de violencia doméstica, editada por el Consejo Nacional de
Juzgados Juveniles y de Familia de Estados Unidos, se advierte sobre
el descrédito científico de dicho síndrome.
Quienes niegan la existencia del síndrome de alienación parental

sostienen los siguientes argumentos:
“la aversión, rechazo o miedo de los menores hacia uno de los

progenitores puede explicarse mejor sin recurrir a la teoría pseudo-
57
Ello obedece a que “las ciencias de la salud, acuerdan en diagnosticar como síndrome sólo (y
sólo si) un grupo de signos y síntomas constantemente relacionados entre sí, que expresan una
situación patológica, cuando se corroboran, a través de un número considerable de casos y
durante un tiempo prolongado, la a de los signos y síntomas que lo conforman. Cuando a su vez,
se convalido la metodología utilizada y cuando se expusieron los estudios y pruebas a
consideración de la comunidad científica, para que cualquier profesional del sector pueda
fácilmente verificarlo de manera objetiva. Véase Vaccaro, Sonia, en web:
http://www.isabelmonzon.com.ar/sindromePas.htm.
94
científica de Gardner”, pues según indican, “la

ansiedad normal del menor tras la separación de
sus padres, la inquietud del menor por el progenitor ausente durante
la visita al no custodio, el comportamiento inapropiado del progenitor
rechazado (que puede ser insensible a las necesidades del niño), la
negligencia o maltrato del progenitor no custodio, la manipulación
espontánea del niño a ambos padres... o la violencia previa por parte
del padre hacia la madre y los menores (bien de forma directa o por
la exposición a la violencia de género). Esta última circunstancia
lleva primero a los menores a adoptar conductas de adaptación al
ambiente violento, y más tarde, cuando la separación de los padres
les aleja del foco de violencia y de la amenaza del padre maltratador,
a generar una evitación de su contacto por todo lo que significa y por
todo lo que han vivido junto a él.”
“Con el SAP se está desviando la atención desde el posible

comportamiento peligroso del progenitor que busca la custodia,
hacia el progenitor que la tiene, ya que la persona que está
intentando proteger al menor es acusada de mentir y “alienar” al
menor.”58
Síndrome de alienación parental en el Código Civil para el

Distrito Federal.
Como la existencia del síndrome de alienación parental no ha

sido plenamente reconocida en el ámbito científico, ello ha tenido
trascendencia en diversas legislaciones, entre ellas el Código Civil
para el Distrito Federal, pues a pesar de que dicho ordenamiento en
un principio aceptó la existencia del síndrome de alienación
parental, con posterioridad lo desconoció.
58
La información mencionada se puede corroborar en la página de Internet
http://www.google.com.mx/search?hl=es&q=aclaraciones+sobre+el+sindrome+de+alienaci
%C3%B3n+parental&meta=, a la cual se puede acceder mediante la frase “Aclaraciones sobre el
síndrome de alienación parental”.
95
En efecto, mediante una adición al artículo 411 del Código Civil

para el Distrito Federal, publicada el seis de septiembre de dos mil
cuatro, en la Gaceta Oficial del Distrito Federal, se reconoció la
alienación parental, al señalar dicho precepto:
“Artículo 411.- En la relación entre ascendientes y descendientes debe

imperar el respeto y la consideración mutuos (sic), cualquiera que sea su
estado, edad y condición.
Quien ejerza la patria potestad, debe procurar el respeto y el

acercamiento constante de los menores con el otro ascendiente que
también ejerza la patria potestad. En consecuencia, cada uno de los
ascendientes debe evitar cualquier acto de manipulación, alienación
parental encaminado a producir en la niña o el niño, rencor o
rechazo hacia el otro progenitor.”
No obstante, mediante una reforma publicada el dos de febrero

de dos mil siete, en la Gaceta Oficial del Distrito Federal, el artículo
411 quedó en los siguientes términos:
“Artículo 411.- En la relación entre ascendientes y descendientes

debe imperar el respeto y la consideración mutuos (sic), cualquiera
que sea su estado, edad y condición.
Quienes detenten la patria potestad tienen la responsabilidad de

relacionarse de manera armónica con sus hijos menores de edad,
independientemente de que vivan o no bajo el mismo techo.”
A través de esta reforma el legislador no sólo dejó de hacer

referencia al síndrome de alienación parental, sino que en realidad lo
desconoció, pues de acuerdo con el dictamen de origen sometido a
consideración de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, IV
Legislatura, la razón para suprimir del Código Civil el reconocimiento
96
de la alienación parental, obedeció al hecho de que,

según se consideró, no es una conducta reconocida
científicamente, pues en los estándares internacionales en materia de
psicología, no se encontró ese concepto, además, se descalificó al
Doctor Richard Gardner, autor de ese término.
En efecto, en el dictamen de origen del proceso legislativo

correspondiente, se señala:
“Respecto al artículo 411, relativo a la patria potestad, se coincide en

establecer que las relaciones entre ascendientes y descendientes
debe imperar el respeto, con independencia de que vivan o no en el
mismo domicilio.
Se elimina en este artículo la alineación parental, debido a que

después de revisar estándares internacionales en materia de
psicología, no se encontró ese concepto, por lo cual no es adecuado
regular una conducta no reconocida científicamente, basada en los
supuestos del Doctor Richard Gardner, siquiatra estadounidense,
que sostiene que el niño sexual abusado se considera generalmente
ser la víctima, aunque el niño puede iniciar encuentro sexual por
medio del cual seduce al adulto. Además señala que diversos tipos
de comportamiento, como la pedofilia, la necrofilia (sexo con los
cadáveres), la zoofilia (sexo con los animales), pueden ser
considerados teniendo valor de la supervivencia de la especie y tales
parafilias pueden responder a los propósitos de la naturaleza por la
capacidad de realizar el nivel general de la excitación sexual en
sociedad y de tal modo de aumentar la probabilidad de que la gente
tendrá sexo, por tanto, supone que se contribuye a la supervivencia
de la especie.
Para este siquiatra de la última parte del siglo XX, la alineación

parental es un proceso que consiste en programar a un hijo para que
odie a uno de sus padres sin que tenga justificación.
97
Cuando el síndrome es presente, el hijo da su propia contribución en

la campaña de denigración del padre alineado, y que inducir un
síndrome de alineación parental a un hijo es una forma de maltrato.
Sostiene que en los casos de abuso sexual o físico, llegan un día a
superar las heridas y humillaciones que han sufrido y por el contrario
en un abuso emocional, tendrá de seguro recuperaciones
psicológicas y pueden engendrar problemas psiquiátricos durante
toda la vida.
Por lo anterior, se coincide con la propuesta formulada en la

iniciativa, toda vez que no se pueden aceptar en la legislación
del Distrito Federal, ideas que lejos de ser científicas
representan un grave riesgo para la salud psicoemocional y
física de los menores y de la sociedad, debido a que el creador de
la alineación parental, defendió y justificó los abusos sexuales en
contra de víctimas menores de edad, al señalar ante el Jurado de los
Estados Unidos que eran denuncias falsas de abuso sexual y que se
trataba de manipulación de los hijos, lo que llamó alineación
59
parental.”
En este orden de ideas, si en el dictamen de origen del

proceso legislativo que suprimió la alienación parental del Código
Civil para el Distrito Federal, se menciona que la alienación lejos
de ser científica, constituye un riesgo para la salud
psicoemocional y física de los menores, y que por ende no se
puede aceptar, es evidente que al resolver controversias relativas
a la patria potestad y los derechos de guardia y custodia que de
ésta se derivan, los juzgadores del Distrito Federal, no podrían
aceptar, ni siquiera de manera probable, la existencia del
síndrome de alienación parental, ya que ello iría en contra del
espíritu del legislador ordinario.
59
El dictamen de origen puede consultarse en la página de internet
http://172.16.12.251/LeyesFederales/UnProcLeg.asp?nIdLey=25996&nIdRef=74&nl
98
Necesidad de reconocer la posibilidad de que

los hijos pueden ser alienados o manipulados.
Pese a ello, el espíritu del legislador ordinario no puede

estar por encima del interés superior de la infancia, por ese
motivo, esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación estima que negar de manera tajante la posibilidad de que
un padre sea capaz de manipular a sus hijos en contra del otro, ya
sea que a esa manipulación se le asigne el nombre de síndrome
de alienación parental o no, iría en perjuicio del interés superior
del menor.
Se estima de esa manera, porque si de acuerdo con los

artículos 3, apartado 2, 4 y 19, apartado 1, de la Convención sobre
los Derechos del Niño60, el Estado Mexicano se ha comprometido
a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios
para su bienestar, adoptando todas las medidas administrativas,
legislativas y de otra índole para dar efectividad a los derechos
que les han sido reconocidos en la propia Convención, como lo
es el adoptar las medidas que resulten necesarias para protegerlo
contra toda forma de perjuicio o abuso, físico o mental, descuido
o trato negligente; es evidente que ante la mínima posibilidad de
que un progenitor esté tratando de manipular (llámese alienar) a
60
“Artículo 3.
[..]
2. Los Estados Partes se comprometen a asegurar la niño la protección y el cuidado que sean
necesarios para su bienestar, teniendo en cuenta los derechos y deberes de sus padres, tutores u
otras personas responsables de él ante la ley y, con ese fin, tomarán todas las medidas legislativas
y administrativas adecuadas.”
Artículo 4. Los Estados Partes adoptarán todas las medidas administrativas, legislativas y de otra
índole para dar efectividad a los derechos reconocidos en la presente Convención. En lo que
respecta a los derechos económicos, sociales y culturales, los Estados Partes adoptarán esas
medidas hasta el máximo de los recursos que dispongan y, cuando sea necesario, dentro del
marco de la cooperación internacional.”
“Artículo 19
1. Los Estados Partes adoptarán todas las medidas legislativas, administrativas, sociales y
educativas apropiadas para proteger al niño contra toda forma de perjuicio o abuso físico o mental,
descuido o trato negligente, malos tratos o explotación, incluido el abuso sexual, mientras el niño
se encuentre bajo la custodia de los padres, de un representante legal o de cualquier otra persona
que lo tenga a su cargo.”
99
los hijos en contra del otro, el interés superior de la infancia

consagrado en el artículo 4 constitucional, reconocido a nivel
internacional en el artículo 3, parágrafo 1 de la Convención sobre los
Derechos del Niño, y aceptado internamente en los numerales 1 y 3,
apartado A de la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas,
Niños y Adolescentes, 4, fracción I, de la Ley de los Derechos de las
Niñas y Niños en el Distrito Federal y 941-Ter, párrafo tercero del
Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, obliga al
juzgador a tomar todas las medidas que resulten necesarias a
efecto de determinar si realmente existe la manipulación
denunciada, pues con independencia del nombre que se le dé a
esa manipulación, no se puede pasar por alto que de existir, ésta
necesariamente conllevaría una agresión a los sentimientos y
emociones y psique de los hijos manipulados, de quienes se
pretende distorsionar la percepción que tienen del otro progenitor
a efecto de que acaben despreciándolo u odiándolo, agresión que
necesariamente afectaría la integridad psicológica y emocional de
los hijos.
Por tal motivo, cuando en un juicio sobre patria potestad o

de derechos que derivan de ella (guarda y custodia y
convivencia), se alega que los hijos han sido manipulados o
alienados por un progenitor en contra del otro, el juzgador
teniendo en cuenta que ello necesariamente conlleva una
agresión hacía los hijos, la cual es capaz de llegar a comprometer
la integridad psicológica y emocional de los mismos, está
obligado a recabar las pruebas que resulten necesarias a efecto
de determinar si los hijos han sido o no manipulados, pues pasar
por alto ese alegato, implicaría desatender una denuncia de
agresión en contra de ellos, lo que es inaceptable en tanto que
debido a su condición derivada de su falta de madurez física y
100
mental, necesitan una protección legal reforzada;

máxime que dicha manipulación podría llegar a
implicar una forma de violencia familiar, pues el artículo 323-Quáter,
fracción II, del Código Civil para el Distrito Federal, dispone lo
siguiente:
“Artículo 323 Quáter.- La violencia familiar es aquel acto u omisión

intencional, dirigido a dominar, someter, controlar o agredir física,
verbal, psicoemocional, o sexualmente a cualquier integrante de la
familia dentro o fuera del domicilio familiar, y que tiene por efecto
causar daño, y que puede ser cualquiera de las siguientes clases:
[…]
II. Violencia psicoemocional: a todo acto u omisión consistente en

prohibiciones, coacciones, condicionamientos, intimidaciones,
insultos amenazas, celotipia, desdén, abandono o actitudes
devaluatorias, que provoquen en quien las recibe alteración auto
cognitiva y auto valorativa que integran su autoestima o alteraciones
en alguna esfera o área de la estructura psíquica de esa persona;
[…]”
Atendiendo a lo anterior, los alegatos relacionados con el

síndrome de alienación parental o manipulación de los hijos en contra
de uno de los progenitores, no pueden ser rechazados por el juzgador
por la simple circunstancia de que en la reforma al Código Civil para el
Distrito Federal de dos de febrero de dos mil siete, se haya suprimido
el término relativo al síndrome de alienación parental por considerar
que no tenía sustento científico, pues con independencia de que ese
síndrome no sea una conducta reconocida científicamente en los
estándares internacionales de psicología, no se puede negar que
existe la posibilidad de que los hijos puedan ser manipulados en
contra de uno de sus progenitores, a grado tal que acaben
sintiendo rencor, rechazo e incluso odio en contra de uno de
101
ellos; y la sola posibilidad de que ello ocurra, frente al interés

superior del menor, obliga al juzgador a investigar al respecto; y
en su caso, a atribuirle consecuencias jurídicas, pues en los juicios
en que se discute la patria potestad de menores y los derechos y
obligaciones que de ella derivan como son la guarda y custodia, la
existencia de esa manipulación, llámese o no síndrome de alienación
parental, además de representar una agresión hacia los menores, en
caso de no llegar a ser investigada adecuadamente, puede llegar a
trascender o afectar algunos de sus derechos, como son entre otros:
 El derecho a ser oído y escuchado en cualquier

procedimiento que afecte su esfera personal y familiar -en
tanto que esa opinión podría no ser genuina por la
manipulación o alienación de que es objeto- (artículo 12,
apartado 1 de la Convención sobre los Derechos del Niño, 41
de la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños
y Adolescentes, 5 apartado D, fracción I, de la Ley de los
Derechos de las Niñas y Niños en el Distrito Federal). 61
 Derecho a vivir una vida libre de violencia y no ser objeto
de abuso o maltrato mental (artículo 19, apartado 1, de la
Convención sobre los Derechos del Niño y los artículos 3,
apartado E y 11, apartado B, de la Ley de Protección de
Niñas, Niños y Adolescentes, 5, apartado A, fracción IV, de la
61
“Artículo 12
1. Los Estados Partes garantizarán al niño que esté en condiciones de formarse un juicio propio el
derecho de expresar su opinión libremente en todos los asuntos que afectan al niño, teniéndose
debidamente en cuenta las opiniones del niño, en función de la edad y madurez del niño”.
“Artículo 41. El derecho a expresar opinión implica que se les tome su parecer respecto de:
A. Los asuntos que los afecten y el contenido de las resoluciones que les conciernen.
B. Que se escuchen y tomen en cuenta sus opiniones y propuestas respecto a los asuntos de su
familia o comunidad”.
“Artículo 5.- De manera enunciativa, más no limitativa, conforme a la presente Ley las niñas y niños
en el Distrito Federal tienen los siguientes derechos:
A) A la Vida, Integridad y Dignidad:
IV. A ser respetado en su persona, en su integridad física, psicoemocional y sexual;
D) A la Educación, recreación, información y participación:
I. A expresar su opinión libremente, conocer sus derechos y a ser escuchados en el ámbito familiar
y comunitario, así como en todo procedimiento administrativo o judicial, que afecte sus esferas
personal, familiar y social;
102
Ley de los Derechos de las Niñas y Niños en

el Distrito Federal).62
 Derecho de que se inculque en el niño el respeto a sus

padres (Artículos 29, apartado 1, inciso c), de la Convención
sobre los Derechos del Niño y 9 de la Ley de Protección de
Niñas, Niños y Adolescentes).63
 Derecho de integración y relación familiar (Artículos 8,

apartado 1, 9, apartados 1 y 3, de la Convención sobre los
Derechos del Niño y 5 apartado B, fracción IV, de la Ley de los
Derechos de las Niñas y Niños en el Distrito Federal). 64
62
“Artículo 19
1. Los Estados Partes adoptarán todas las medidas legislativas, administrativas, sociales y
educativas apropiadas para proteger al niño contra toda forma de perjuicio o abuso físico o
mental, descuido o trato negligente, malos tratos o explotación, incluido el abuso sexual,
mientras el niño se encuentre bajo la custodia de los padres, de un representante legal o de
cualquier otra persona que lo tenga a su cargo”.
Artículo 3. La protección de los derechos de niñas, niños y adolescentes, tiene como objetivo
asegurarles un desarrollo pleno e integral, lo que implica la oportunidad de formarse física, mental,
E. El de tener una vida libre de violencia.
Artículo 11. Son obligaciones de madres, padres y de todas las personas que tengan a su cuidado
niñas, niños y adolescentes:
B. Protegerlos contra toda forma de maltrato, prejuicio, daño, agresión, abuso, trata y explotación.
Lo anterior implica que la facultad que tienen quienes ejercen la patria potestad o la custodia de
niñas, niños y adolescentes no podrán al ejercerla atentar contra su integridad física o mental ni
actuar en menoscabo de su desarrollo.
Artículo 5.- De manera enunciativa, más no limitativa, conforme a la presente Ley las niñas y niños
A) A la Vida, Integridad y Dignidad:
IV. A ser respetado en su persona, en su integridad física, psicoemocional y sexual;
63
Artículo 29
“1. Los Estados Partes convienen en que la educación del niño deberá estar encaminada a:
c) Inculcar al niño el respeto de sus padres, de su propia identidad cultural, de su idioma y
sus valores, de los valores nacionales del país en que vive, del país de que sea originario y
de las civilizaciones distintas de la suya;”
“Artículo 9. Niñas, niños y adolescentes tienen los deberes que exige el respeto de todas las
personas, el cuidado de los bienes propios, de la familia y de la comunidad, y el
aprovechamiento de los recursos que se dispongan para su desarrollo.
Ningún abuso, ni violación de sus derechos podrá considerarse válido ni justificarse por la
exigencia del cumplimiento de sus deberes.”
64
“Artículo 8
1.- Los Estados Partes se comprometen a respetar el derecho del niño a preservar su
identidad, incluidos la nacionalidad, el nombre y las relaciones familiares de conformidad
con la ley sin injerencias ilícitas.”
“Artículo 9
1. Los Estados Partes velarán por que el niño no sea separado de sus padres contra la voluntad de
éstos, excepto cuando, a reserva de revisión judicial, las autoridades competentes determinen, de
conformidad con la ley y los procedimientos aplicables, que tal separación es necesaria en el
103
 Derecho a ser cuidado por los padres (Artículo 7, apartado

1, de la Convención sobre los Derechos del Niño). 65
 Derecho a mantener relaciones personales y contacto

directo con ambos padres (artículo 9, apartado 3 de la
Convención sobre los Derechos del Niño).66
 Derecho de que sus progenitores (incluido el alienado)

cumplan con las obligaciones de crianza y desarrollo del
niño (Artículo 18, apartado 1, de la Convención Sobre los
Derechos del Niño).67
En esa virtud, se insiste, la circunstancia de que el síndrome

de alienación parental no sea una conducta reconocida
científicamente en los estándares internacionales de psicología,
no puede ser suficiente para negar la posibilidad de que los hijos
interés superior del niño. Tal determinación puede ser necesaria en casos particulares, por
ejemplo, en los casos en que el niño sea objeto de maltrato o descuido por parte de sus padres o
cuando éstos viven separados y debe adoptarse una decisión acerca del lugar de residencia del
niño”.
“3. Los Estados Partes respetarán el derecho del niño que esté separado de uno o de ambos
padres a mantener relaciones personales y contacto directo con ambos padres de modo regular,
salvo si ello es contrario al interés superior del niño”.
“Artículo 5.- De manera enunciativa, más no limitativa, conforme a la presente Ley las niñas y niños
B) A la identidad, Certeza Jurídica y Familia:
IV. A vivir y crecer en el seno de una familia, conocer a sus progenitores y a mantener relaciones
personales y contacto directo con ellos, aún en el caso de estar separados, salvo si ello es
contrario al interés superior de la niña y niño;”
65
“Artículo 7
1.- El niño será inscripto inmediatamente después de su nacimiento y tendrá derecho desde que
nace a un nombre, a adquirir una nacionalidad y, en la medida de lo posible, a conocer a sus
padres y a ser cuidado por ellos”.
66
“Artículo 9
3. Los Estados Partes respetarán el derecho del niño que esté separado de uno o de ambos
padres a mantener relaciones personales y contacto directo con ambos padres de modo regular,
salvo si ello es contrario al interés superior del niño”.
67
“Artículo 18
1. Los Estados Partes pondrán el máximo empeño en garantizar el reconocimiento del principio de
que ambos padres tienen obligaciones comunes en lo que respecta a la crianza y el desarrollo del
niño. Incumbirá a los padres o, en su caso, a los representantes legales la responsabilidad
primordial de la crianza y el desarrollo del niño. Su preocupación fundamental será el interés
superior del niño”.
104
se encuentren manipulados, pues con

independencia del nombre que pueda recibir esa
manipulación (síndrome de alienación parental, lavado de
cerebro, contaminación de la mente, etcétera) la sola posibilidad
indiciaria de que ello ocurra, obliga al juzgador a investigar al
respecto; y en su caso, atribuirle consecuencias jurídicas.
Así, la sola circunstancia de que el síndrome de alienación

parental no esté reconocido científicamente y, por ende, no
constituya una patología o enfermedad psicológica reconocida,
no es suficiente para rechazarlo, no como una enfermedad, sino
como una manipulación que los progenitores pueden ejercer en
sus hijos, de ahí que para su identificación sí resulta válido acudir
a los síntomas y rasgos indicadores propuestos por quienes
sostienen su existencia; sin embargo, cuando el llamado
síndrome de alienación parental se enfrenta a una acusación de
abuso sexual, para poder concluir que se está en presencia de
una alienación parental o manipulación, primero se debe
descartar el abuso, de ahí que para ello, también es válido tener
presente que para distinguir entre uno y otro, se han propuesto
diagnósticos diferenciales e indicadores de credibilidad o de
riesgo de falsas acusaciones que resultan útiles para ese efecto,
sin embargo la prueba idónea siempre será una pericial.
Además cabe destacar que la posibilidad de que uno de los

padres manipule a los hijos en contra del otro progenitor, ya ha sido
aceptada por diversos tribunales de corte internacional, entre ellos el
Tribunal Europeo de Derechos Humanos68.
68
El veinte de julio de dos mil seis, dicho Tribunal emitió una sentencia en el caso **********.
La Republica Checa, demanda 1633/05, en donde se reconoce la influencia negativa que una
madre puede ejercer sobre un hijo, a través del llamado síndrome de alienación parental.
La sentencia deriva de un asunto en donde la madre se niega a ejecutar un régimen de
convivencias decretado a favor del padre, quien considera que su hijo sufre del síndrome de
alienación parental.
105
El Síndrome de alienación parental o manipulación frente al

abuso sexual en el caso concreto.
Atendiendo a lo anterior, si en el caso a estudio **********

aseveró que no existe certeza médica de que ********** se encuentre
en un estado físico y mental adecuado para ejercer la patria potestad y
que con sus conductas pretende contaminar la mente de sus hijas en
De esa sentencia destaca lo siguiente:

“[…]
I. LAS CIRCUNSTANCIAS DEL CASO
[…]
35. Después de un encuentro previo con el demandante un centro especializado organizó una
tentativa de encuentro entre él y su hija, el 9 de julio de 2002.
Según el informe del psicólogo que había estado presente, el encuentro había durado sólo tres
minutos porque la menor se negaba a hablar al demandante y se comportaba de manera histérica.
Según el psicólogo, E.P. inducía al desarrollo del síndrome de alienación parental,
comprometiendo así la evolución de sus relaciones con el padre, y la inducía a sus
manifestaciones histéricas y egocéntricas. Dado que el demandante había sido reconocido apto
para relacionarse con la niña, se interesaba por ella y cumplía la pensión alimenticia, el experto
consideró que podría compensar las faltas de la educación dispensada por E.P, así se interesaba
igualmente una psicoterapia de la menor, acompañada, si llegaba el caso, por su hospitalización.
[…]
39. Como consecuencia de una denuncia realizada por E.P., el mediador realizó un estudio del
asunto. En su informe del 24 de marzo de 2004, no comprobó ninguna falta en el trabajo del tutor.
Consideró por otro lado que tenía interés en la menor, sufriendo desde hace tiempo una
presión negativa y sufriendo del síndrome de alienación paterna, debía ser atendida por un
experto en un medio neutro.
[…]
B. Sobre el fondo
1. Tesis de las partes
[…]
58. El demandante se dice totalmente consciente de la situación actual en la que su hija,
sufriendo del síndrome de alienación parental y patológicamente apegada a la madre, le
odia. Considera sin embargo que la responsabilidad procede no sólo a E.P. sino también a la
actitud laxa de las autoridades nacionales que descuidaron durante mucho tiempo las advertencias
de los especialistas. Según él, si los tribunales hubieran seguido las recomendaciones de estos
últimos y si debidamente hubieran utilizado los medios legales para traer a E.P. a permitirle realizar
su derecho de visita, la susodicha situación habría podido ser evitada. Entonces, dada la situación
considera adecuado abstenerse de todo contacto con su hija para preservar el equilibrio psíquico
de ésta y su papel de padre se limita al pago de la pensión alimenticia.
[…]
2. Apreciación de la Corte
[…]
62. En este caso, la Corte observa que el derecho de visita ha sido concedido al demandante por
las decisiones del 24 de octubre de 1995 y 28 de marzo de 1996 y que siempre está vigente,
aunque un procedimiento que se refiere en su supresión, iniciado por E.P., está en curso
actualmente. Es también importante anotar que desde 1995, los expertos llamaron la
atención de la actitud negativa de la madre y del hecho de que el derecho de visita no podía
ser realizado sin su cooperación (paragraphe 10 más arriba); los informes ulteriores
certificaron la fijación patológica de la niña respecto de la madre y el síndrome de alienación
parental (paragraphe 35 más arriba). Más teniendo en cuenta de que advertían que transcurso
del tiempo tenía en el caso efectos desfavorables para el demandante.
[…]
67. A la vista los hechos susodichos, la Corte supone que la no realización del derecho de
visita del demandante es imputable sobre todo a la negativa manifiesta de la madre, luego al
del niño, programado por esta última. Considera sin embargo que los tribunales nacionales no
106
cuanto a la imagen que tienen de su padre, intentando

con ese procedimiento privarlas del derecho de contar
con una figura paterna; es evidente que atendiendo al interés superior
de la infancia, aún y cuando el Código Civil para el Distrito Federal no
reconozca el síndrome de alienación parental, partiendo de la base de
que dicho síndrome implica la existencia de una manipulación con el
objeto de que los hijos acaben sintiendo rencor, rechazo e incluso odio
en contra de uno de los progenitores, y que ello como tal es una
agresión en contra de los hijos, el juzgador sí estaba en posibilidad de
investigar y en su caso aseverar que se estaba en presencia de un
síndrome de alienación parental en perjuicio del padre; no obstante,
teniendo en cuenta que ********** lo acusa de que con sus conductas
masturbatorias ha puesto en riesgo a sus menores hijas, en tanto que
ya ni siquiera se percataba o le importaba masturbarse en presencia
de ellas; y que además, abusó sexualmente de su hija **********, para
poder concluir que en el caso se ejerció el síndrome de alienación
parental, y por ende suspender la patria potestad ejercida por la
madre, el juzgador estaba obligado a atender todas las
circunstancias o hechos que rodean las acusaciones que ambos
progenitores se hicieron en sus respectivas demandas, así como
a las circunstancias o hechos que con relación a esas
tomaron, con vistas a llevar a E.P. a respetar la decisión que le daba el derecho de visita al
demandante, todas las medidas que se podía razonablemente exigirles en el conflicto muy difícil en
causa, y que no se mostraron bastante rápidos y sistemáticos en su recurso a diferentes medios de
ejecución previstas por el derecho interno. Por otro lado, dada la conclusión del psicólogo a
partir del encuentro del 9 de julio de 2002, según el cual E.P. comprometía el buen desarrollo
del niño (paragraphe 35 más arriba), la cuestión es saber si los tribunales han sido
acertados en sus acciones por el interés del niño debidamente establecido.
68. En estas condiciones, no podemos imputarle al demandante la responsabilidad ante la
impotencia de las autoridades que toman medidas rápidas y adecuadas que pretenderían instaurar
contactos efectivos entre él y su hija (ver, mutatis mutandis, Bove c. Italia, n o 30595/02, § el 50, 30
de junio de 2005), ni sostener que las autoridades hubieran emprendido esfuerzos adaptados para
encontrar una solución a esta situación desconsolada. Es opinión de la Corte que los tribunales
nacionales en el caso han permitido que el litigio sea solucionado por el transcurso simple del
tiempo, de modo que el restablecimiento de los lazos entre la interesada y su hija no parece ya
posible hoy.
69. Estos elementos bastan para la Corte para concluir que hubo violación del artículo 8 del
Convenio a causa de la no ejecución del derecho de visita del demandante.
[…]”
Esta información puede consultarse en la siguiente dirección electrónica:
http://www.secuestro-emocional.org/Sentencias/TEDH-AP/SAP-TEDH-Sentencia.htm
107
acusaciones se fueron advirtiendo durante el procedimiento,

allegándose de todas las pruebas posibles a efecto de descartar
que realmente haya existido un abuso sexual por parte del padre;
y por ende, en su caso, estar en posibilidades de asegurar que
realmente se está en presencia de una manipulación o del
síndrome de alienación parental ejercido por la madre, lo que en
el caso no aconteció, en razón de lo siguiente.
Como ya se mencionó, la pretensión del actor reconvencional se

sustentó básicamente en lo siguiente:
 Que no existe certeza médica de que ********** se encuentre

en un estado físico y mental adecuado para ejercer la patria
potestad; y
 Que con sus conductas, pretende contaminar la mente de sus

hijas en cuanto a la imagen que tienen de su padre,
intentando con ese procedimiento privarlas del derecho de
contar con una figura paterna.
En el caso, la primera aseveración no está acreditada; y la

segunda no puede considerarse debidamente probada como afirma la
responsable, pues para ello primero era necesario descartar que
********** puede poner en riesgo a sus hijas con alguna conducta
masturbatoria; y que además, no abusó sexualmente de su hija
**********, lo que en el caso no ha acontecido.
Se afirma lo anterior en razón de lo siguiente:
Para demostrar las aseveraciones referentes a que no existe

certeza médica de que ********** se encuentra en un estado físico y
108
mental adecuado para ejercer la patria potestad y que

con sus conductas pretende contaminar la mente de
sus hijas en cuanto a la imagen que tienen de su padre, intentando
con ese procedimiento privarlas del derecho de contar con una figura
paterna, lo idóneo era el desahogo de pruebas periciales de carácter
científico a través de las cuales se pudiera establecer cuál es el estado
mental de la demandada, si éste le permite ejercer de manera
adecuada la patria potestad de sus menores hijas y si con sus
conductas ha contaminado o no la mente de sus hijas en cuanto a la
figura paterna.
Con esa finalidad ********** ofreció la pericial en psiquiatría a

realizarse en **********, designando como perito de su parte al doctor
**********, probanza con la que se dio vista a la contraria para los
efectos legales procedentes; y una vez que ********** desahogó la vista
designando como perito de su parte al doctor **********, la misma se
admitió, requiriendo a ambos peritos a efecto de aceptar y protestar el
cargo conferido69.
En cumplimiento a ese requerimiento, los peritos aceptaron y

protestaron el cargo conferido70; y con la oportunidad debida
exhibieron los dictámenes correspondientes; no obstante como éstos
eran contradictorios, se designó como perito tercero en discordia a
**********, quien en la oportunidad debida también presentó el
dictamen correspondiente71.
Ahora bien, esta probanza no es apta para demostrar que la

actora en lo principal ha contaminado la mente de sus hijas en cuanto
a la figura paterna y, por ende, para evidenciar que ha ejercido el
69
Ibídem. Tomo I. Fojas 235 a 238, 255, 261 y 262.
70
Ibídem. Tomo I. Fojas 297 y 302.
71
109
síndrome de alienación parental sobre sus hijas, pues con

independencia de que esa pericial se ofreció para desahogarse en la
persona de ********** y no sobre las menores, que es quienes en todo
caso debieron ser sujeto de estudio a fin de analizar si su mente
estaba contaminada, la prueba idónea para acreditar esa aseveración
era la pericial en psicología, pues la pericial en psiquiatría en todo
caso es adecuada para demostrar una enfermedad de tipo mental en
las menores, mas no para evidenciar que éstas han sido manipuladas.
Del mismo modo, esta probanza (pericial en psiquiatría sobre

**********), tampoco favoreció a los intereses de ********** para
demostrar la primer premisa en que sustentó la acción reconvencional,
pues a través de ella no se pudo demostrar que la actora en lo
principal no se encuentra en un estado físico y mental adecuado para
ejercer la patria potestad de sus hijas.
Lo anterior es sí, pues el A quo negó valor probatorio al dictamen

rendido por ********** (perito designado por él), en razón de que no
acreditó contar con título que lo avale como psiquiatra 72.
Determinación que se estima acertada, pues si bien **********

mediante escrito presentado el veinte de enero de dos mil nueve,
aceptó y protestó el cargo conferido, manifestando bajo protesta de
decir verdad que tenía la capacidad suficiente para emitir el dictamen
encomendado, anexando para tal efecto su cédula profesional, así
como una identificación expedida a su favor por la Secretaría de
Salud, lo cierto es que la cédula que acompañó lo acredita como
médico cirujano, más no como médico psiquiatra. 73
72
Ibídem. Tomo III. Foja 277.
73
110
Situación que incluso se hizo notar por **********,

quien por escrito de fecha veintitrés de junio de dos
mil nueve, indicó que con motivo de la averiguación previa **********
que inició en contra de **********, se giró orden de presentación a
**********, razón por la que compareció ante la autoridad ministerial; y
al ser interrogado por el Ministerio Público, con fecha diecisiete de
junio de dos mil nueve, expresamente afirmó que no cuenta con
cédula profesional que lo acredite como médico en psiquiatría 74.
Para demostrar su dicho, mediante escrito presentado el

veinticuatro de junio de dos mil nueve, ofreció como prueba
superveniente copia certificada de la comparecencia de ********** ante
la autoridad ministerial, de la que se desprende que en lo que aquí
interesa, bajo protesta de decir verdad declaró lo siguiente:
“QUE COMPARECE VOLUNTARIAMENTE A ESTA OFICINA

MANIFESTANDO QUE EL EMITENTE ES MÉDICO CIRUJANO CON
CÉDULA PROFESIONAL NÚMERO ********** Y CON
ESPECIALIDAD EN PSIQUIATRÍA Y NO CUENTA CON CÉDULA
PROFESIONAL EN DICHA ESPECIALIDAD, PERO QUE CUENTA
CON ESTUDIOS DE TERAPIA SEXUAL Y DE PSIQUIATRÍA...” 75
Con esta probanza a petición de su oferente, se ordenó dar vista

al Ministerio Público adscrito a efecto de que emitiera su opinión, quien
desahogó la vista solicitando girar oficio a la Dirección General de
Profesiones de la Secretaría de Educación Pública a fin de que
informara al juzgado si ********** cuenta con cédula profesional para
ejercer la especialidad en psiquiatría, lo que se acordó de conformidad
el treinta de junio de dos mil nueve.76
74
75
Ibídem. Tomo II. Foja 83
76
Ibídem. Tomo II. Fojas 94, 95.
111
En cumplimiento a ese requerimiento, el Director de Colegios de

Profesionistas de la Dirección General de Profesiones de la Secretaría
de Educación Pública, informó que ********** cuenta con cédula
profesional como médico cirujano y no se localizó registro como
especialista en psiquiatría, indicando a la vez que dicha persona
podía tener su título profesional o haber realizado estudios en el
extranjero y no haber solicitado aún el registro del título y la expedición
de la cédula profesional.77
Por su parte, mediante escrito de once de agosto de dos mil

nueve, ********** manifestó que se encuentra laborando como médico
especialista “B” en el servicio de consulta externa del Hospital
Psiquiátrico Fray Bernardino Álvarez, y debido a un procedimiento de
certificación profesional que requiere dicha Institución, su título
académico se encuentra en resguardo de esa Institución, por lo que se
encuentra impedido, para exhibirlo.
Para acreditar lo anterior exhibió una constancia expedida por el

Jefe de Consulta Externa del referido hospital, en la que se hace
constar lo siguiente:
“A QUIEN CORRESPONDA:
Por este conducto informó que el C. **********, se encuentra adscrito
en el Servicio de Consulta Externa del Hospital Psiquiátrico Fray
Bernardino Álvarez como médico especialista “B”.
Lo anterior en virtud de haber cubierto los requisitos académicos

requeridos para tal función.
Sin embargo, y con la finalidad de actualizar la documentación

correspondiente y dar cumplimiento al proceso de certificación tanto
institucional como profesional desde el mes de abril del presente año
77
112
se encuentra efectuando los trámites

correspondientes ante las instancias respectivas
tanto intra como extra institucionalmente.
Por tal motivo tanto el título como la cédula de especialidad se

encuentran sujetos a lo anterior y podrá efectuarse la exhibición de
los mismos hasta los meses de octubre y/o noviembre del presente
año.”78
Ahora bien, aunque la Dirección General de Profesiones de la

Secretaría de Educación Pública estableció la posibilidad de que
********** aún sin tener registrada cédula profesional en la especialidad
de psiquiatría, podía tener el título correspondiente o haber realizado
estudios en el extranjero sin haber solicitado aún el registro del título y
la expedición de la cédula, lo cierto es que ello no es suficiente para
concluir que ********** se encuentre en esa hipótesis, pues si bien
exhibió una constancia en la que se indica que labora como médico
especialista “B” en el Hospital Psiquiátrico Fray Bernardino Álvarez por
haber cubierto los requisitos académicos para tal función y que
atendiendo a un proceso de certificación, tanto el título como la cédula
se encuentran sujetos a ese proceso, lo cierto es que ello no es
suficiente para establecer con certeza que cuenta con cédula
profesional en psiquiatría, o con los conocimientos necesarios para
emitir un dictamen en esa materia, pues no se debe olvidar que en su
declaración ante la autoridad ministerial, el quince de junio de dos mil
nueve, expresamente reconoció que no cuenta con cédula profesional
en la especialidad de psiquiatría, y si bien manifiesta que sí cuenta con
estudios en esa materia, no se sabe qué estudios tiene al respecto, ni
muchos menos si éstos le permiten fungir como perito en ella, pues
aunque en la constancia referida se indica que cumplió con los
requisitos académicos para la función que desempeña en ese hospital,
78
113
lo cierto es que en dicha constancia no se indica cuáles son esos

requisitos, ni mucho menos se menciona si el titulo y la cédula se
refieren a la especialidad en psiquiatría, por lo que no se puede
deducir que realmente esté capacitado para fungir como perito en la
materia, máxime que como se indica en la propia constancia, tales
documentos estaban sujetos a un proceso de certificación de cuyo
resultado no se tiene conocimiento.
En esa virtud, es evidente que el dictamen rendido por **********

no podía servir de base para establecer si ********** se encuentra en
un estado físico y mental adecuado para ejercer la patria potestad de
sus menores hijas.
Ello es así, pues si el objeto de la prueba pericial es el auxilio en

la administración de justicia, en tanto que por un lado, permite verificar
determinados hechos o aspectos, sus causas y sus efectos, que por
requerir conocimientos en una determinada técnica, arte o ciencia
escapan de la cultura jurídica común del juez; y por otro lado,
suministra al juzgador las reglas técnicas, artísticas o científicas de la
experiencia especializada de los peritos, para formar convicción en el
juez sobre tales hechos o aspectos, y en su caso, sus causas y sus
efectos, a fin de que los entienda mejor y pueda apreciarlos
correctamente en la resolución de la controversia, es evidente que
para que dicha probanza pueda cumplir adecuadamente su objeto, el
perito designado, debe ser especialista en la técnica, arte o ciencia
sobre la que dictamina, pues es la única manera de saber con certeza
que los conocimientos que proporciona al juzgador tienen una base
sólida y que por ende pueden llegar a ser confiables al momento de su
valoración, pues de no ser así, no tendría razón de ser el
nombramiento de peritos.
114
Además, el artículo 346 del Código de

Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, señala
que los peritos deben tener título en la ciencia, arte, técnica, oficio o
industria sobre la que ha de oírse su parecer, si la ciencia, arte,
técnica o industria requieren título para su ejercicio; y en el caso debe
considerarse que la especialidad en psiquiatría si requiere título para
su ejercicio, pues el artículo 5 de la Ley Reglamentaria del Artículo 5°
Constitucional, relativo al Ejercicio de Profesiones en el Distrito
Federal, señala que: “para el Ejercicio de una o varias especialidades,
se requiere autorización de la Dirección General de Profesiones,
debiendo comprobarse previamente: 1.- Haber obtenido título relativo
una profesión en los términos de esta ley; 2.- Comprobar, en forma
idónea, haber realizado estudios especiales de perfeccionamiento
técnico científico, en la ciencia o rama de la ciencia de que se trate.”
Por otro lado, los dictámenes rendidos por los peritos ********** y
********** tampoco favorecen la pretensión de **********, pues aunque
al primero no se le otorgara valor probatorio en tanto que no respondió
ninguno de los cuestionamientos formulados por las partes, lo cierto es
que el dictamen emitido por el perito tercero en discordia **********
resultó adverso a sus intereses, pues la impresión diagnostica de
dicho perito fue que **********, no sufría ninguna patología mental.
En efecto, en dicho dictamen se señaló lo siguiente:
“IMPRESIÓN DIAGNÓSTICA
SIN PATOLOGÍA MENTAL
Se procede a responder las interrogantes formuladas por las
partes en el presente juicio:
Por la parte demandada:
115
1. ¿Dirá el perito si puede determinar que la C. **********,

presente algún trastorno psiquiátrico?
R. No presenta ningún trastorno psiquiátrico.
2. ¿Dirá el perito, en caso de que exista, cuál es el trastorno

psiquiátrico que padece la C. **********?
R. No procede la pregunta.
3. ¿Dirá el perito si el trastorno psiquiátrico que padece la C.

**********, pone en riesgo el desarrollo psicológico y
emocional de las menores ********** todas ellas de
apellidos **********?
R. Como no existe patología psiquiátrica en este punto en
particular no pone en riesgo el desarrollo psicológico ni
emocional de sus hijas.
4. ¿Dirá el perito si el trastorno psiquiátrico que padece la C.

**********, propicia una apreciación distorsionada de la
realidad?
R. Durante la realización del presente estudio no se
detecta tipo de distorsión de la realidad, del tipo de los
delirios o alucinaciones.
5. ¿Dirá el perito si debido al trastorno psiquiátrico que

padece la C. **********, se recomienda que la misma sea
sujeta a un tratamiento especializado?
R. Como no existe patología mental específicamente de
tipo psicótico que pueda distorsionar la realidad no
requiere de tratamiento especializado. A decir de la misma
********** ha estado en terapia psicológica, se sugiere que
pueda continuar con la misma y pueda enfrentar mejor la
situación judicial que ha promovido en beneficio de ella y de
sus hijas.
116
6. ¿Que diga el perito en qué se basó o

qué métodos o técnicas empleó para
contestar las preguntas anteriores y para emitir su
dictamen?
R. La elaboración de la Historia Clínica Psiquiátrica, Entrevista
directa y dirigida, y mi experiencia profesional como médico
Especialista en Psiquiatría por más de 20 años en el
diagnóstico y tratamiento de las enfermedades mentales.
Por la parte actora:
 ¿Si la suscrita sufrió algún trastorno emocional por el

actuar del **********?
R. Cursó con manifestaciones depresivas y ansiedad, que en
la actualidad prácticamente los síntomas cardinales de estas
alteraciones prácticamente han desaparecido, por lo que
puedo afirmar que su estado emocional se encuentra
dentro de parámetros considerados como normales.
 Si la suscrita tiene secuelas postraumáticas,

consecuencias del actuar del señor **********?
R. Durante el presente estudio no se detectan secuelas de
estrés postraumático.
CONCLUSIONES.
La SRA. ********** no presenta patología psiquiátrica
alguna por lo que se dictamina como mentalmente sana.
1. Producto de los conflictos sexuales de su esposo

desarrolló manifestaciones de tristeza, decepción,
ansiedad y preocupación hacia sus hijas, por lo que busca
ayuda psicológica y poder enfrentar la problemática de su
esposo.
Se sugiere continúe en tratamiento psicoterapéutico y
pueda reforzar sus recursos psicológicos para enfrentar
acertadamente su problemática.
117
2. Del estudio practicado se desprenden rasgos de

personalidad como la dependencia, evitación ante una
persona que siente superior y que admira, sin ser capaz de
enfrentarla directamente en el momento en que surgen los
conflictos, por ser criticada o ridiculizada ante la falta de
información y conocimiento de la problemática de su
esposo, lo que repercute en sentimientos de inferioridad
ante su pareja, sin embargo, estos rasgos no son lo
suficientemente consientes para poder integrar una
patología de la personalidad.
3. Se sugiere se realice batería completa de pruebas

psicológicas, con especial énfasis en la personalidad,
si se quiere profundizar en este aspecto en particular.
4. Se sugiere se realice pruebas psicológicas a la hija

mayor y valorar si efectivamente ha sido manipulada o
influenciada, o en su caso violentada por alguno de los
padres.”79
De lo anterior se advierte que el dictamen pericial en psiquiatría

realizado en la persona de ********** no benefició a su oferente para
demostrar la primer premisa en que se sustentó la solicitud de
suspensión de la patria potestad, pues con éste no se demostró que la
actora no esté mentalmente capacitada para ejercer la patria potestad
de sus hijas; por el contrario, se dictaminó como mentalmente sana,
señalándose específicamente que como no existe patología
psiquiátrica, en este punto en particular, no se pone en riesgo el
desarrollo psicológico ni emocional de sus hijas.
Ahora bien, aunque el perito tercero en discordia sugiere que si

se quiere profundizar en la personalidad de **********, o determinar si
79
118
la menor ********** ha sido manipulada o en su caso

violentada por alguno de sus padres, es necesaria la
realización de pruebas psicológicas, lo cierto es que en el juicio del
que deriva el acto reclamado, ********** no ofreció dicha probanza80; y
si bien la actora en lo principal sí la ofreció, también es cierto que con
posterioridad se desistió de ella81; siendo así que como esa situación
fue advertida por la Segunda Sala Familiar del Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal, al estimar que la prueba pericial en
psicología era trascendente para poder resolver la controversia, al
emitir la sentencia de fecha veinticuatro de enero de dos mil once,
ordenó reponer el procedimiento a efecto de obtener los estudios
psicológicos y aquellos que se consideraran necesarios para conocer
las circunstancias que imperan en torno al núcleo familiar de los
contendientes.82
Así en cumplimiento a lo ordenado en esa ejecutoria, el Juez

Trigésimo Octavo de lo Familiar del Distrito Federal con fecha
veinticuatro de febrero de dos mil once, emitió un auto en el que
ordenó girar oficio al Director del Servicio Médico Forense a fin de que
se sirviera practicar estudios psicológicos a los padres y a las
menores; en cuanto a los primeros a fin de determinar si han sido
víctimas de violencia familiar, quién es el receptor y quién el
generador, personalidad de los mismos, trastornos, la repercusión
en el núcleo familiar, el grado de afectación; y en cuanto a las
segundas, a fin de determinar si han sido víctimas de violencia
familiar, quién es el generador, si existe manipulación y quién es el
generador de la misma, personalidad, trastornos, la repercusión en el
núcleo familiar y el grado de afectación83.
80
Ver escrito de ofrecimiento de pruebas fojas 216 a 238 del Tomo I del expediente **********.
81
Ver foja 486 del Tomo I del expediente **********.
82
83
119
Con ese propósito se nombró como perito en psicología a

**********84, quien en lo que aquí interesa, con fecha veintinueve de
abril de dos mil once, emitió su dictamen en los siguientes términos:
“DICTAMEN PERICIAL
I. **********
[…]
TÉCNICAS Y METODOLOGÍAS EMPLEADAS

[…]
DATOS PERSONALES Y FAMILIARES

[…]
FUNCIONES MENTALES Y COGNITIVAS

No hay indicios que deban ser corroborados por una prueba
neurológica, de alguna disfunción orgánica cerebral que
pudiera estar alterando su conducta.…
DINÁMICA DE LA PERSONALIDAD
Tiende a ver el lado bueno de las cosas, es optimista en cuanto a
las posibilidades que le ofrece el futuro, le resulta fácil pasarlo (sic)
bien y enfrentar con ecuanimidad los altibajos de la existencia,
busca estimulación, excitación y atención. A menudo reacciona con
vivacidad ante situaciones de las que es testigo, pero por lo general
su interés se desvanece rápidamente. Frecuentadora de la alta
sociedad, brillante y simpática, también puede ser exigente y
manipuladora, por lo general es apocada, tímida y experimenta
nerviosismo en situaciones sociales. Desea intensamente agradar y
ser aceptada, pero a menudo teme que los demás la rechacen.
Sensible y emotiva, es al mismo tiempo desconfiada, solitaria y

propensa a aislarse. Está más habituada al sufrimiento que al
placer, es sumisa y tiende a rebajarse ante los demás.
84
Ibídem. Tomo III. Foja 9
120
Tiene recuerdos del pasado y no olvida injurias y

desprecios hacía su persona y percibe ataques en su reputación que
no son aparentes para los demás, interpersonalmente busca el
mayor provecho para sí misma en búsqueda de lograr sus metas.
Se conduce en sus rangos de personalidad distraída sin embargo

se percibe con un pensamiento brillante como medio de defensa.
Su rol es dependiente y se adhiere como una seguidora ejemplar

que busca controlar su fuerza de voluntad por conducirse
escrupulosa socialmente y compulsiva intenta dar una imagen de
tranquilidad y serenidad sin embargo logra detectarse
impulsividad y negativismo.
Sus rangos de carácter están en un nivel alto, por lo que tiene

un adecuado manejo de su agresividad, que eventualmente se
manifiesta en violencia verbal, pero sólo en situaciones de alto
estrés, canalizándola a actividades productivas.
Es organizada y predecible en su manera de abordar las

experiencias de la vida. Transforma los conocimientos nuevos
adecuándolos a lo ya conocido y es cuidadosa, cuando no
perfeccionista, incluso a ocuparse de pequeños detalles. En
consecuencia, se le considera ordenada, minuciosa y eficiente.
II. **********
[…]
[…]

[…]
121
Explica que la problemática comenzó cuando en una ocasión su

ex pareja lo encontró en el baño masturbándose, por lo cual
tuvieron una discusión donde lo corrió de la casa, por lo que se
fue durante tres días posteriormente regresó y en otra discusión lo
volvió a correr, por lo que el motivo de estudio no quiso irse. …
[…]

No hay indicios que deban ser corroborados por una prueba
neurológica, de alguna disfunción orgánica cerebral que pudiera
estar alterando su conducta. …
Tiende a ver el lado bueno de las cosas, es optimista en cuanto a las
posibilidades que le ofrece el futuro, le resulta fácil pasarlo (sic) bien
y enfrentar con ecuanimidad los altibajos de la existencia, toma su
vida en sus manos y hace que las cosas sucedan en lugar de
mantenerse pasivamente en espera. Se ocupa diligentemente de
modificar su entorno e influye en los acontecimientos a fin de que
éstos satisfagan sus necesidades y deseos. Deriva sus
conocimientos de lo tangible y concreto; confía en la experiencia
directa y los fenómenos observables más que el uso de la inferencia
y la abstracción. Lo práctico y lo real, lo literal y lo fáctico son lo que
hace sentir cómodo y le inspira confianza, busca estimulación,
excitación y atención. A menudo reacciona con vivacidad ante
situaciones de las que es testigo, pero por lo general su interés se
desvanece rápidamente. Frecuentador de la alta sociedad, brillante y
simpático, también puede ser exigente y manipulador, es probable
que sea honrado y tenga autodominio. Su relación con la autoridad
es respetuosa y cooperativa, y tienden a actuar con formalidad y
buenas maneras en las situaciones sociales. Es improbable que
deje traslucir su personalidad o que actúe espontáneamente.
Es enérgico y a menudo dominante y socialmente agresivo.

Tiende a verse a sí mismo como intrépido y competitivo. Para él la
gentileza y las demostraciones de afecto son signos de debilidad, y
122
por lo tanto las evita, mostrándose obstinado y

ambicioso.
Tiende a creer que es más competente y talentoso que quienes lo

rodean. A menudo es ambicioso, egocéntrico y seguro de sí mismo.
Es probable que los demás lo vean como arrogante y
desconsiderado. Su rol es dependiente y se adhiere como un
seguidor ejemplar que busca controlar su fuerza de voluntad por
conducirse escrupuloso socialmente y compulsivo intenta dar una
imagen de tranquilidad y serenidad sin embargo logra
detectarse impulsividad y negativismo.
III. **********
[…]
TÉCNICAS Y METODOLOGÍAS EMPLEADAS.

[…]
DATOS PERSONALES Y FAMILIARES.

Originaria del Distrito Federal, proviene de una familia completa,
desintegrada por separación de los padres y aparentemente
funcional de tipo nuclear, con normas y valores tradicionales, donde
los roles parentales están bien definidos. Nace en un núcleo familiar
integrado, separándose sus padres por diferencias, por lo que
actualmente vive con su mamá. Al preguntarse si sabía porque se
encontraba en la valoración refiere que no sólo le dijeron que
tenía que ir a un lugar donde había dicho el Juez, al cuestionarle
sobre si quería ver a su papá refiere que si le gustaría verlo,
porque juegan, al preguntarle si le gustaría verlo más seguido
responde que no, además de que no lo extraña y vive en otro
lado, que lo ve los sábados en el centro de convivencias.
MENTALES Y COGNITIVAS
No se percibe daño orgánico cerebral evidente. Impresiona un
coeficiente intelectual término medio, muestra funciones mentales
123
y cognitivas conservadas, no se perciben alteraciones precepto-

motoras. Impresiona apropiado desarrollo infantil, conforme a las
áreas de desarrollo motriz, adaptativa, social y de lenguaje, memoria
mediata e inmediata conservadas, no se perciben alteraciones
percepto-motoras.
Existe habilidad para manejar impulsos racionales y discernimiento
fácilmente, prefiere los juegos que requieren de un pensamiento
racional en la lucha de agradar a las figuras parentales y obtener
muestras de amor y aceptación.
No existe alteración en alguna esfera de su sexualidad.
Canaliza el ambiente negativo y abrumador en la búsqueda de

amistades sinceras que le proporcionen seguridad como muestras
afectivas.
No se presentan conflictos en sus emociones, volición, sentimientos

y conducta típica, debido a la manera en que se está llevando la
educación de la menor, también se muestra una buena introyección
de normas y reglas. Por haber ocurrido la separación de sus
padres en su infancia temprana, tiene una adecuada imagen de
ambos padres, dicha situación no ha afectado la capacidad de
manifestar cariño a la figura materna, a la que siente gran
apego, sin embargo se observa un enorme distanciamiento con
la figura paterna al cual casi no mencionó, así como no mostró
ningún interés, ni rechazo, con relación a esta figura. Sus rasgos
de carácter se encuentran en nivel alto de actividad, por lo que la
canaliza en actividades lúdicas y educativas.
No tiene manifestaciones de agresividad ni violencia, ni estrés
postraumático, por lo que se descarta que haya sufrido
violencia verbal o física.
IV. **********
[…]
124
TÉCNICAS Y METODOLOGÍAS EMPLEADAS.

[…]

actualmente vive con su mamá. Al preguntarle si sabía porque se
iba a salir, al preguntarle por su papá refiere no tener papá, al
cuestionarle por ********** contesta que sabe quién es sin
embargo no sabe que es de ella, sólo que lo ve los domingos, y
que si le gusta ir a verlo, pero sólo al centro de convivencias, al
preguntarle si quería a su familia responde que si “a todos hasta
mi papá” sic.
FUNCIONES MENTALES COGNITIVAS

coeficiente intelectual término medio, muestra funciones mentales y
cognitivas conservadas, no se perciben alteraciones precepto-
áreas de desarrollo motriz, adaptativa social y de lenguaje, memoria
mediata e inmediata conservadas, no se perciben alteraciones
percepto-motoras.
DINAMICA DE LA PERSONALIDAD
Presenta una adecuada manifestación afectivo-emocional, social y
socializable, interesada y perceptiva de su medio, con vínculo
afectivo hacia ambos padres, sin embargo se observa un
enorme distanciamiento con la figura paterna al cual casi no
mencionó, así como no mostró ningún interés, ni rechazo, con
relación a esta figura. Sus rasgos de carácter se encuentran en
125
nivel alto de actividad, por lo que la canaliza en actividades lúdicas y

educativas.
No tiene manifestaciones de agresividad ni violencia, ni estrés

postraumático, por lo que se descarta que haya sufrido violencia
verbal o física.
Es importante fomentar los lazos paterno-filiales del menor con

ambos padres, por lo que debe permitirse la convivencia
suficiente y de calidad que no afecte las actividades propias de
cada uno.
V. **********
[..]

[…]

actualmente vive con su mamá. Al preguntarle si sabía porque se
iba a salir, al preguntarle por su papá es el abuelo, al
preguntarle por ********** sólo contesta que es la persona con la
que van a jugar.

coeficiente intelectual término medio, muestra funciones mentales y
cognitivas conservadas, no se perciben alteraciones precepto-
126
áreas de desarrollo motriz, adaptativa, social y de

lenguaje, memoria mediata e inmediata
conservadas, no se perciben alteraciones percepto-motoras.
Existe habilidad para manejar impulsos racionales y discernimiento
fácilmente, prefiere los juegos que requieren de un pensamiento
racional en la lucha de agradar a las figuras parentales y obtener
muestras de amor y aceptación.
No existe alteración en alguna esfera de su sexualidad.
Canaliza el ambiente negativo y abrumador en la búsqueda de

amistades sinceras que le proporcionen seguridad como muestras
afectivas.
No se presentan conflictos en sus emociones, volición, sentimiento y

conducta típica, debido a la manera en la que se está llevando la
educación de la menor, también se muestra una buena introyección
de normas y reglas. Sin embargo la figura paterna ha sido
desplazada a su abuelo por lo que es importante fomentar los
lazos paterno-filiales de la menor con ambos padres, por lo que
debe permitirse la convivencia suficiente y de calidad que no
afecte las actividades propias de cada uno.
CONCLUSIONES
Ambas figuras parentales tienen habilidades, actitudes y
aptitudes para brindar a los menores ********** de apellidos
********** un ambiente que favorezca el sano desarrollo integral,
sin embargo cada uno por separado debe trabajar con sus afectos y
emociones para darles a los menores una convivencia de calidad,
Isaac, Montalvo y Abelsohn (2001) citan: “…hemos notado que
aquellos progenitores que se desempeñan bien con sus hijos logran
un mejor ajuste tras la separación”, agregando respecto al trato con
los menores, que deben “…mejorar su relación de progenitores,
contraponiéndola a su relación de cónyuges… Aún divorciándose,
127
estas parejas pueden calcular hasta qué punto utilizarán, en un trato

recíproco, su pericia en el arte de exigir, tolerar y perdonar, a la vez
que mantienen su continuidad en la resolución conjunta de
problemas.”
Es importante que el conflicto se resuelva con la menor intervención

de las menores, a fin de que no sean afectadas a futuro, que puedan
ocasionar bajo rendimiento en sus actividades cotidianas y en el
establecimiento de relaciones interpersonales o en una afectación
emocional futura, ni obstaculizar el coeficiente intelectual de las
niñas. Se debe tener en cuenta que la convivencia sana con ambos
padres representa un fuerte vínculo paterno-filial prioritario. Por lo
tanto, se debe evitar causar una impresión negativa del otro padre
cuando se está conviviendo con los hijos. Ambos padres deben
someterse a tratamiento psicológico que los lleve a resolver sus
actuales conflictivas (sic) y de esta manera mejore su forma de
convivir sanamente con las menores.
RECOMENDACIONES
Es importante que ambos padres trabajen sus conflictos personales
y prevengan un daño emocional a las menores inmediato y a futuro,
por lo que se recomienda que las partes y las menores sean
canalizadas a terapia psicológica, individual y conjunta que
permita una adecuada manifestación de sus emociones y
sentimientos, con lo que se evite un daño posterior a las
menores y se haga conciencia por ambos padres de la
importancia de crear un ambiente sano de desarrollo y
convivencia para los menores, situación que puede realizarse
aun cuando los padres vivan separados.
También se sugiere que se exhorte a ambos padres para que no

ejerzan influencia negativa en los menores respecto de la otra
figura parental, y en específico sobre la figura paterna, que
pueda generar una imagen distorsionada de la figura masculina
o dificulte a futuro que las menores establezcan relaciones
128
interpersonales adecuadas. Todo lo anterior

con la visión de procurar un sano desarrollo
de las infantes, en un ámbito de igualdad de género.
[..]”85
Como se advierte de ese dictamen, la perito advirtió que

********** no presenta indicios que deban ser corroborados por una
prueba neurológica de alguna disfunción orgánica cerebral que
pudiera estar afectando su conducta concluyendo que ambas figuras
parentales tienen habilidades, actitudes y aptitudes para brindar
a sus menores hijas un ambiente que favorezca a su sano
desarrollo integral.
En esa virtud, es evidente que éste dictamen no favorece a

**********, para poner en evidencia la primer causa por la cual solicitó
que le fuera suspendida a su contraria la patria potestad que ejerce
sobre sus menores hijas, la cual se hizo consistir en que no existía
certeza médica de que ********** se encuentre en un estado físico y
mental adecuado para ejercer la patria potestad, pues el dictamen en
cuestión revela lo contrario.
Ahora bien, por lo que hace a la segunda causa debe decirse lo

siguiente, si bien la perito en psicología, señala que ********** puede
ser exigente y manipuladora, y sugiere exhortar a las partes para que
no ejerzan una influencia negativa en las menores respecto de la otra
figura parental, y en específico sobre la figura paterna, lo cierto es que
en ninguna forma concluye que las menores estén manipuladas
por la madre a efecto de crear en ellas una animadversión hacía
la figura paterna, además del contenido del propio dictamen no se
puede advertir con claridad que las menores se encuentren
85
129
manipuladas, pues la perito en psicología señala que en la dinámica

de la personalidad, ********** presenta una adecuada manifestación
afectivo-emocional, social y socializable, interesada y perceptiva de su
medio, con vínculo afectivo hacía ambos padres, lo cual según se
analizó al estudiar el síndrome de alienación parental, no podría
considerarse propio de un niño que ha sido alienado.
Luego, si bien no pasa inadvertido que la perito en psicología

señaló que en ********** y **********, se observa un enorme
distanciamiento con la figura paterna pues no muestran ningún interés
hacía él, lo cierto es que también refiere que tampoco se observa
un rechazo, razón por la que ese distanciamiento por sí sólo no es
suficiente para evidenciar con claridad que ********** haya manipulado
a sus hijas en contra de su progenitor, pues de acuerdo a lo señalado
cuando se analizó el síndrome de alienación parental, este síndrome
está encaminado a producir odio o rechazo hacía el progenitor
alienado y en el caso, el propio dictamen pone en evidencia que no
hay tal rechazo, pues incluso se señala que ********** manifestó que sí
le gustaría ver a su padre aunque no tan seguido, aspecto que es
importante de tener en consideración, pues como también se
mencionó al analizar en qué consiste el síndrome de alienación
parental, de acuerdo con los expertos en el tema, el hijo que se
encuentra alienado, muestra un odio sin ambivalencias, sin fisuras ni
concesiones hacia el padre alienado, lo que en el caso no se pone en
evidencia en el dictamen que aquí se analiza, además el
distanciamiento de referencia podría tener diversas causas (entre
ellas, podría estar el abuso sexual de que es acusado –sin que esto
se esté afirmando en esta sentencia–).
Del mismo modo, si bien se aprecia que según lo referido por la

perito, ********** no identifica al tercero perjudicado como su padre, en
130
tanto que la figura paterna la ha llenado su abuelo,

ello por si solo tampoco es un indicativo de que la
madre la haya manipulado en contra de su padre, pues no se debe
perder de vista que cuándo ésta abandonó el domicilio conyugal (junio
de dos mil ocho), la citada menor sólo contaba con seis meses de
edad86, por lo que podría ser comprensible que no identifique a
********** como su progenitor.
Atendiendo a ello, es evidente que el dictamen rendido por la

perito en psicología **********, no demuestra en forma
fehacientemente que las menores se encuentren manipuladas en los
términos que pretende el aquí tercero perjudicado, máxime que de su
propio contenido se advierte que las menores no estaban
aleccionadas con relación a lo que tenían que manifestar a la citada
perito psicóloga, pues al ser cuestionadas en relación a si sabían por
qué estaban en la valoración ********** refiere “que no, que sólo le
dijeron que tenía que ir a un lugar donde había dicho el juez”; mientras
que ********** y ********** al mismo cuestionamiento refirieron que no,
que “solo le dijeron que iba a salir”.
Atendiendo a lo anterior, si la pericial en psicología, que como ya

se dijo sería la prueba idónea para acreditar la existencia el síndrome
de alienación parental, no pone en evidencia que las menores sean
objeto de un síndrome de alienación parental hacia la figura paterna
ejercido por su madre, entonces no resulta válido que la autoridad
responsable refiera que con el dictamen rendido por ********** “se
acredita que la C. ********** incumplió con sus obligaciones de crianza,
toda vez que no ha procurado la seguridad física, psicológica y sexual
de sus hijas”87.
86
De acuerdo con el acta de nacimiento que obra agregada en la foja 18 del Tomo I del expediente
**********, la menor nació el día 27 de diciembre de 2007.
87
Ver foja 159 del Toca **********.
131
Ahora bien, aunque no pasa inadvertido que de las constancias

de autos se desprende que ********** ofreció como prueba documental
superveniente, el dictamen pericial en psiquiatría emitido por el doctor
**********, efectuado sobre la menor ********** en el diverso juicio
********** con posterioridad **********, en el cual se señala que la citada
menor sufre de un grado mínimo de afectación del síndrome de
alienación parental con características imputables a su madre, el cual
puede agravarse88, lo cierto es que dicha documental por sí sola no
demuestra de manera fehaciente que la citada menor sea portadora
del síndrome de alienación parental, pues el contenido de dicha
documental sólo podría tener un valor indiciario, más no el valor que
se puede derivar de una pericial como pretende la responsable 89, en
tanto que en el juicio del que deriva el acto reclamado, no se tiene
certeza de que en el diverso juicio (**********, con posterioridad
**********), el perito haya demostrado ser experto en la materia, no se
sabe si respecto de esa pericial se rindieron más dictámenes, ni los
términos en que fueron rendidos a efecto de que de la ponderación
relativa se pudiera derivar su valor, por tanto como ya se dijo, en el
juicio del que deriva el acto reclamado sólo puede tener un valor
indiciario, pues de lo contrario se podría incurrir en el error de otorgarle
un valor superior al que pudiera otorgársele o se le otorgó en el juicio
en el que se rindió.
En ese orden de ideas, es evidente que ni la documental de

referencia, ni el dictamen en psicología rendido por la perito **********,
pueden probar en forma plena que las menores padezcan o sean
portadoras del síndrome de alienación parental con efectos nocivos
hacía el padre, es decir no demuestran que las menores ya se
encuentren alienadas.
88
Expediente **********. Tomo II. Fojas 543 a 550.
89
Ver foja 156 del Toca **********.
132
Además, si se tiene en consideración que de

acuerdo a lo señalado al analizar la figura del síndrome de alienación
parental, uno de los síntomas que presentan los hijos alienados y que
permiten identificar la presencia de ese síndrome, es el mostrar un
odio sin ambivalencias (sin fisuras ni concesiones, es decir sin
sentimientos encontrados) hacía el progenitor alienado, entonces
tampoco es dable concluir con certeza, como lo hizo la responsable,
que las menores ya se encuentran alienadas en contra de la figura
paterna, pues de las constancias de autos no se advierte que las
menores muestren un odio sin ambivalencias hacía **********, por el
contrario, de las referidas constancias se advierte que si bien en
algunas ocasiones presentaron cierto rechazo hacía el padre al no
querer convivir con él, lo cierto es que durante el procedimiento
también tuvieron muestras de afecto hacía su progenitor y en
ocasiones se mostraron contestas de convivir con él.
Se afirma lo anterior porque de la copia certificada de la

audiencia de seis de noviembre de dos mil ocho, llevada a cabo en el
diverso expediente **********, después **********, en la cual se hace
constar la plática que el Juez Vigésimo Octavo de lo Familiar del
Distrito Federal sostuvo con **********, se advierte que la menor
expresó querer a su padre y que además lo extraña.
Ciertamente, en dicha audiencia la menor señaló lo siguiente:
“En seguida se procede a escuchar a la menor **********

manifestando: Que tiene cuatro años de edad, que tiene dos
hermanas de un año, que las cuida, que las trata bien, que cursa el
kínder, que no recuerda como se llaman sus maestras, que su mamá
se llama **********, que vive con su mamá en su casa, en donde
viven cuatro personas, que sus abuelitos no viven con ellos, que su
133
mamá la lleva a la escuela, que la trata bien, que su mamá no la

regaña ni tampoco le pega, que no quería pasar a platicar; que sabe
que su papá se llama **********, que a su papá lo quiere y lo
extraña y que antes la llevaba a pasear, le gustaría que su papá
90
la llevar (sic) a pasear,…”
Las muestras de afecto hacía el padre también se pueden

desprender de las copias certificadas de algunos reportes de las
convivencias llevadas a cabo en el Centro de Convivencia Familiar
Supervisada del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, pues
de ellos se desprende que las menores llegaron a participar con
alegría en dichas convivencias y que además tuvieron muestras de
afecto hacía su padre y sus familiares.
En efecto, entre esos reportes se encuentran los siguientes.
REPORTE DE CONVIVENCIA FAMILIAR

DE 20 DE MARZO DE 2010
“[…]
Por último las menores vieron un fragmento de una película infantil,

al tiempo la menor **********le hizo un dibujo a su padre.
Finalmente, terminó el tiempo de la convivencia y las pequeñas se

despidieron con un beso en la mejilla de su padre. Cabe hacer
mención que durante la convivencia las menores ********** y
**********, abrazaron constantemente a su padre, buscando estar
cerca de él.”91

DE 2 DE ABRIL DE 2011
“[…]
90
91
Ibídem Tomo II. Foja 982
134
Después, el progenitor le comentó a **********:

“les mandó moños **********, yo me quedó muy triste, ¿ya te quieres
ir?” **********le respondió que no y agregó: “me quedo un ratito”. Por
otra parte, las menores ********** y **********, estando a un lado
de ellos, veían las cosas que traía su padre, mientras lo
abrazaban, diciéndole que ellas si se querían quedar.
A continuación, **********se reunió con sus hermanas y vio las cosas

que su padre trajo para la convivencia, enseguida, ********** buscó
un muñeco, pero al no encontrarlo hizo berrinche, su papá le
prometió que se lo traería en la próxima convivencia, la niña se
calmó y de inmediato el señor ********** le dio a cada una de sus
hijas un libro infantil, también les mostró fotografías de ellos mismos,
en tanto comentaban sobre las fotos; al mismo tiempo, el progenitor
proyecto a las pequeñas una película infantil, mientras les daba de
comer donitas. Después el señor ********** entretuvo a sus hijas con
calcomanías infantiles y jugó con ellas tratando de atrapar un billete
en el aire, en tanto las niñas comían frituras y leche saborizada,
enseguida el progenitor cargo a ********** y a **********, mientras
giraba con ellas, al poco tiempo **********y ********** jugaron ping
pong, mientras el señor ********** cargaba a ********** en sus
hombros.
Posteriormente, los cuatro permanecieron en el jardín, jugando con

la cuerda para saltar, hicieron burbujas de jabón, asimismo
consumieron pizza y refresco, al terminar de comer **********uso un
juego del “I pad” en tanto ********** usaba un juego del celular de su
padre.
Durante la convivencia las niñas rieron con su padre, lo

abrazaron y se abalanzaron en su espalda, entre los juegos la
menor ********** en ocasiones lloraba porque perdían en algunos
juegos, en tanto ********** y **********, en una ocasión se pelearon
por el “I pad”; por su parte, el progenitor platicó con sus hijas para
que moderaran su actitud.
135
Al concluir la convivencia, el señor ********** les dio a sus hijas un

pequeño álbum con fotografías de ellos mismos, asimismo les dio
los libros mencionados y unos muñecos, también se despidió de
ellas con besos.
[…]”92

DE NUEVE DE ABRIL DE DOS MIL ONCE
“[…]
Después, los participantes consumieron salmón, sushi y bebieron
refresco, asimismo, el Sr. ********** les ofreció a sus hijas unos
panques de chocolate y sólo **********aceptó. Más tarde el
progenitor, cargo en hombros a ********** y la paseó por las
salas, observando a la infante sonriente. A continuación, **********
y ********** agarraron un libro infantil y comenzaron a jalarlo, por lo
que el padre se sentó junto a ellas y leyó el libro en voz alta, en
tanto las menores lo escucharon, mientras **********se entretuvo con
video juegos en una “I pad”. Luego los participantes se divirtieron
con una lotería.
En el jardín, jugaron teléfono descompuesto. Más tarde, el padre

cargó en hombros a sus hijas, mientras la Sra. ********** les tomó
fotografías con una cámara digital. Luego, el progenitor les entregó
un recipiente con agua y jabón y las niñas hicieron burbujas,
observando a las niñas sonrientes y participativas durante las
actividades que realizaron, además, el papá y los abuelos, por
momentos abrazaban y besaban en la mejilla a las menores, las
cuales correspondían de la misma manera.
Al finalizar la convivencia, los participantes se despidieron con

un abrazo, un beso en la mejilla y palabras afectivas. Las niñas
se llevaron los obsequios que les dieron sus abuelos y su
papá.”93
92
Ibídem. Tomo III. Fojas 193 y 194.
93
Ibídem. Tomo III. Foja 196 y 197
136

DE DIECISÉIS DE ABRIL DE DOS MIL ONCE.
“[…]
A continuación, el señor ********** se integró nuevamente con sus
hijas, ********** y su papá se tomaron varias fotografías haciendo
gestos, también el padre mostró a las niñas varias fotografías de
cuando ellas eran más pequeñas. Al termino padre e hijas se
despidieron con un abrazo y un beso en la mejilla.”94

DE VEINTIUNO DE MAYO DE DOS MIL DIEZ.
“[…]
A continuación el señor ********** y sus familiares les mostraron a las
niñas unas bolsitas, unas playeras y unas muñecas de trapo,
mencionándoles que eran para ellas, al tiempo que el padre
comenzó a realizar trucos de magia con unas mascadas y unas
cajas, así como un sombrero, captando la atención de las niñas
********** y **********, en tanto que la niña ********** continuó
manifestando su deseo de retirarse y al ver el interés que mostraba
su hermana ********** por los juegos en tres ocasiones se acercó a
ella intentando susurrarle algunas palabras en el oído, ante ello el
señor ********** le pidió a su hija ********** que hablara en voz alta,
pero la menor no aceptó. Por último, el padre les preguntó a sus
hijas si se quedarían a convivir, ya que habían transcurrido quince
minutos aproximadamente, después de que la madre le había dicho
que pasaran a despedirse, retirándose únicamente la niña **********
quien no recibió los obsequios que sus familiares le habían traído,
sin decir el motivo. Retirándose la menor observándose cabizbaja.
Las participantes continuaron divirtiéndose con los trucos de

magia, observándose en ellos gestos de alegría, asimismo por
momentos los familiares de las niñas las abrazaban y les daban
94
137
besos en la mejilla, respondiendo las menores los gestos de

afecto de la misma forma. También, se entretuvieron realizando
manualidades con figuras de madera las cuales pintaban con
acuarelas, al tiempo que platicaban cordialmente. Además, hicieron
figuras con plastilina no tóxica e iluminaron cuentos para colorear.
En las actividades las niñas comieron donas y bebieron jugo.
Concluyendo la visita al despedirse las menores de sus
familiares con un beso en la mejilla y con un abrazo.”95
Finalmente, otra muestra de afectó hacía el progenitor por parte

de sus hijas se puede derivar de la plática sostenida entre las menores
y el Juez Trigésimo Octavo Familiar del Distrito Federal en el
expediente **********, llevada a cabo el treinta de marzo de dos mil
once, pues en ella, las menores refieren que les gusta jugar con él, y
le muestran su afecto con un beso.
En efecto, de esa plática se desprende lo siguiente:

“Manifestando la mayor de ellas llamarse ********** tener seis años y
medio, que su nombre se lo puso su mamá y su papá, que ella y su
hermana menor se parecen a su mamá y su otra hermana se parece
a su tío que está en Cancún, que ellas viven en México, y les gusta,
que su hermana menor tiene tres años, que ella hace sola su tarea,
y su hermana ********** también, que su hermana menor va a entrar
en trans (sic), que vive con su mamá y su abuelo, que ven los
sábados a su papá y que juegan con él, que a ella le gusta
saltar la cuerda, que ella no saludó a su papá porque ella estaba
en el baño, se le pidió al padre de las menores que las saludara,
a lo que las menores respondieron con un beso en la mejilla, y
ella la mayor le comentó a su papá que su hermana ********** se
había lastimado la espalda y le pusieron una venda. **********
manifestó que su papá vive solo, que no sabe en dónde y que le
gusta jugar con su papá a las escondidillas y a las trais, que su
papá la atrapa, que ella si saludó a su papá, cuando su papá la
saludo le platicó la menor que se había lastimado la rodilla. La
95
138
menor de nombre **********, cuyo nombre fue

señalado por la mayor de las menores, comentó
que su papá la carga. Después el padre de las menores se retiró
y se despidieron del mismo con un beso en la mejilla,…”96
Así, aunque por las razones anteriores no puede considerarse

que en autos haya quedado plenamente demostrado que las menores
se encuentren alienadas como afirmó la autoridad responsable, no
puede pasar inadvertido que en el dictamen emitido por la perito en
psicología **********, se recomienda exhortar a las partes para que no
ejerzan una influencia negativa en las menores respecto de la otra
figura parental, y en específico sobre la figura paterna, pues en el caso
esa recomendación resulta trascedente, porque si bien dicha perito en
ninguna forma concluye que las menores estén manipuladas por la
madre a efecto de crear en ellas una animadversión hacía la figura
paterna, ello sí podría ser un indicativo de que la perito advirtió la
potencial posibilidad de que las menores empiecen a ser
manipuladas por la madre en contra del padre, o de que ya se
encuentran en ese proceso, aspecto que es de suma importancia,
pues de las constancias de autos se advierte que **********, ha
incurrido en conductas que de acuerdo a lo señalado al analizar la
figura del síndrome de alienación parental, podrían ser propias de un
alienador (en esta sentencia no se está aseverando que lo sean).
Ello es así, pues de las referidas constancias se advierte que

**********en diversas ocasiones ha impedido directa o indirectamente
que sus hijas tengan contacto con **********, pues se ha rehusado a
que sus hijas tengan contacto telefónico con su progenitor, ha
impedido que éste ejerza su derecho de convivencia con sus hijas, ha
organizado actividades con sus hijas que han propiciado que su
contrario no ejerza normalmente su derecho de convivencia, le ha
96
139
atribuido actos negativos frente a sus hijas, y les ha hecho saber de su

enojo cuando lo ven.
Se afirma lo anterior en razón de lo siguiente:
 Ha impedido que sus hijas tengan contacto telefónico con

su progenitor.
En la demanda reconvencional ********** afirma que desde el

diez de julio de dos mil ocho, ********** le ha negado el acceso a sus
hijas, pues ni siquiera ha podido hablar telefónicamente con ellas.
Para demostrar esa aseveración ofreció como prueba la

grabación de la conversación telefónica que sostuvo con su contraría
el dieciséis de julio de ese año, de la cual se desprende que
efectivamente ********** le ha negado el acceso telefónico a dichas
menores.
En efecto de la grabación de esa conversación destaca lo

siguiente:
“… **********: ¿Me puedes pasar, podría platicar con las niñas? ---
**********: No. --- **********: Bueno, ¿No me dejas saludarlas? ---
**********: No. --- **********: Bueno ¿las puedo ir a ver? --- **********:
No.--- **********: Ok, este, bueno, está bien. Voy, ¿les puedo hablar
mañana? --- **********: No **********, y sí ya no puedes hablar con
ellas. --- **********: ¿Hasta cuándo? --- **********: Hasta que me lo
autoricen. --- **********: ¿Te lo autorice quién? --- **********: La
persona con quien estoy viendo mis cosas, ahorita no...”
Grabación que adquiere valor probatorio para demostrar ese

extremo en tanto que en la audiencia de pruebas correspondiente,
140
********** reconoció el contenido de dicha grabación,

pues aunque señaló que estaba editada en el tema de
carácter económico que trataron en esa conversación, no negó el
resto de la conversación.97
Lo anterior se robustece con la confesional a cargo de **********,

pues al absolver la posición número 6, formulada en los siguientes
términos: “6. Que usted se abstiene de permitir a las menores
**********, todas de apellidos **********, comunicarse telefónicamente
con **********”; respondió, “que si es cierto.”98
 Ha impedido directa o indirectamente que ********** ejerza

su derecho de convivencia con sus hijas.
En la demanda reconvencional ********** afirma que desde el

diez de julio de dos mil ocho, ********** le ha negado ver a sus hijas.
Lo anterior se acredita con diversas fe de hechos notariales,

pues a pesar de que en el diverso procedimiento ********** con
posterioridad **********, se fijó un régimen provisional de visitas y
convivencias en el domicilio donde habitan las menores, de esas fe de
hechos, se desprende que los días tres de octubre, ocho y quince de
noviembre de dos mil ocho, catorce, veintiuno y veintiocho de febrero,
seis de junio, once de julio y cinco de diciembre de dos mil nueve, así
como el nueve y veintitrés de enero, seis y trece de febrero de dos mil
diez, ********** no pudo convivir con sus menores hijas, ya sea porque
en el domicilio donde habitan nadie atendió a su llamado, porque se
argumentó que la convivencia no era posible en tanto que la
determinación en que se fijó ese régimen provisional aún no se
97
98
Ibídem. Tomo I, fojas 425 y 431.
141
encontraba firme, porque las menores no se encontraban o porque

simplemente le negaron la convivencia.99
Del mismo modo, de las constancias de autos se desprende que

en diversas ocasiones ********** tampoco presentó a sus hijas en el
Centro de Convivencia Familiar Supervisada del Tribunal Superior de
Justicia del Distrito Federal, lugar donde con posterioridad se señaló
debería tener lugar la convivencia entre las menores y su progenitor,
ello según lo ordenado en el diverso expediente **********, después
**********.
Ello es así, pues de las copias certificadas de los reportes de
convivencia familiar, se advierte que los días trece y veintisiete de
marzo, tres, diez, diecisiete y veinticuatro de abril, nueve de
septiembre y once de diciembre de dos mil diez, así como el ocho de
enero, diecinueve de febrero, veintiséis de marzo, veintitrés y treinta
de abril de dos mil once, la convivencia no pudo llevarse a cabo
porque ********** no presentó al centro de convivencias a sus menores
hijas.100
Además, del estudio socioeconómico practicado a **********,

fechado el veintiséis de abril de dos mil once, se advierte que en la
entrevista sostenida con el licenciado en trabajo social **********,
aquélla le manifestó lo siguiente: “Lo que pretendo es que se
99
Entre las fe de hechos exhibidas se encuentran las siguientes:
 Fe de hechos de 3 de octubre de 2008 realizada por el Notario Público ********** del Distrito
Federal.
 Fe de hechos de 8 y 15 de noviembre de 2008, emitidas por el Notario ********** del Distrito
Federal (Foja 171 del Tomo I).
 Fe de hechos de 14, 21, 28 de febrero, 6 de junio, 11 de julio, 5 de diciembre de 2009, 9, 23 de
enero y 6 de febrero de 2010, realizadas por el Notario Público número ********** del Distrito
Federal (Tomo I, fojas 492 a 498, 547, 548, Tomo II, Fojas 198, 623 a 627, 656 a 658, 706 a
709, 712 a 715, 753).
 Fe de hecho de 13 de febrero de 2010, elaborada por el Notario Público número ********** del
Distrito Federal (Tomo II. Foja 766).
100
Ver fojas 990, 994, 995, 996, 997 y 1000 del Tomo II, así como 175, 185, 186, 187, 191, 201 y
202 del Tomo III del expediente **********.
142
suspendan de manera definitiva las visitas de

convivencia ya que no quiero que el señor **********,
tenga contacto con las menores.”101
 Ha organizado o permitido el desarrollo de actividades

que han propiciado que ********** no ejerza normalmente
su derecho de convivencia.
Se afirma lo anterior porque de las constancias de autos se

desprende que si bien ********** a fin de cumplir con la orden de
presentar a sus hijas en el Centro de Convivencia Familiar
Supervisada del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, se
presentó con ellas a dicho lugar a efecto de que éstas convivieran con
su progenitor, lo cierto es que de las copias certificadas de los reportes
elaborados en dicho Centro, se advierte que la convivencia no se
desarrolló con la anuencia o total convencimiento de las menores, en
razón de que querían retirarse a realizar diversas actividades a las
cuales su madre las llevaría o les permitiría ir, precisamente el día de
la convivencia con su padre, como son el ir a una fiesta, al zoológico, a
montar a caballo, a Acapulco o acudir a un festival.
En efecto, de los reportes en cuestión se desprende lo siguiente:

DE 25 DE SEPTIEMBRE DE 2010.
“La convivencia se efectuó, de la manera siguiente:
El Sr. **********, acudió al Centro a las 9:05 horas. La Sra. **********,

presentó a las menores: **********, de apellidos **********, a las 9: 09
horas.
101
Expediente 1317/2008. Tomo III, foja 67.
143
Quien suscribe, salió a la recepción, instante en que la Sra. **********

comentó que sus hijas no se querían quedar porque iban a ir al
zoológico. A su vez, la de la voz invitó a las pequeñas a que
ingresaran a las salas, quienes volvieron a decir que no se
querían quedar porque su mamá las iba a llevar al zoológico
porque lo cerraban temprano, que así se los había dicho su
mamá. La de la voz, les dijo que podían quedarse a convivir y
cuando salieran de la convivencia podían ir al zoológico,
entonces, ********** viendo a su madre dijo: “¿Ah sí? Mama, dice
la señorita que el zoológico lo cierran hasta tarde, entonces si
pasamos, la Sr. ********** sin responder a lo que la hija le dijo, la
miró fijamente y le sonrió.
**********y ********** pasaron con su padre, pero ********** se quedó

abrazada de una pierna de su madre. Asimismo, la suscrita invitó a
la niña a que pasara para que viera lo que su papá le había traído,
pero ********** movió la cabeza en sentido negativo. Por otro lado, El
Sr. ********** también se acercó a su hija, la abrazó y le pidió que por
favor entrara para que viera los juguetes que trajo para que jugaran
y que si después se quería retirar con su madre que lo hiciera.
Finalmente, ********** aceptó y entró con su papá. Estando en el

área del comedor, ********** se mostró cabizbaja, por lo que el
progenitor se posicionó en cuchillas, quedando a la misma
altura que su hija, la abrazó y le preguntó qué le pasaba y por
qué estaba triste, la menor no contestó y recargó su cabeza en
el pecho de su padre, mismo que le dijo que la quería mucho, le
pidió que no estuviera triste y que fuera al zoológico cuando
saliera del inmueble, si se iban a quedar. Enseguida, **********
comenzó a registrar una bolsa, sacó un juguete y comenzó a jugar.
[…]”102

DE 20 DE NOVIEMBRE DE 2010
102
144
“La convivencia se efectuó, de la manera

siguiente:
El Señor **********, registró su ingreso a este Centro a las 9:04

horas. Por su parte la Señora ********** llegó en compañía de las
menores **********, todas de apellidos **********, a las 9:06 horas.
En un inicio, en el área de recepción la menor ********** externó a su

papá el deseo de retirarse ya que se sentía mal, momento en que la
progenitora refirió que la pequeña se encontraba agripada; de la
misma manera, ********** comentó a su padre que no quería
quedarse ya que su mamá la llevaría a clases de equitación, no
obstante el Sr. ********** y la suscrita invitaron a las niñas a pasar
por unos minutos y cuando ellas lo solicitaron se podían retirar. Por
lo anterior, se le solicitó a la madre de las niñas que aguardara en
recepción a sus hijas.
Posteriormente, ya instalados en las salas, las pequeñas

comenzaron a decorar con diversos materiales, figuras de cartón
con formas de animales y comieron donas que proporcionó su
progenitor, enseguida ********** expresó a su padre que ya se quería
retirar porque se sentía mal, quien la cargó para llevarla al lado de
su madre, pero al llegar al área de recepción la señora ya se había
retirado, por lo que se localizó para regresar por su hija.
Más tarde, las niñas continuaron decorando sus figuras y **********

decidió subir a su montable infantil que trajo su progenitor,
donde de manera espontánea mencionó a su padre en repetidas
ocasiones y de manera sonriente: me quiero ir, porque me voy
a ir a Acapulco, me va a llevar mi mamá y no voy a ir a la
escuela seis días ni tampoco voy a venir aquí, a lo que su padre
le contestó, “está muy bien, te diviertes mucho, cuando quieras
salir así sólo avísame, no hay ningún problema, retirándose la
menor a las 9:50 horas en compañía de su madre.
145
Después, el Señor **********, ********** y ********** comieron frituras,

tomaron jugos envasados y salieron al patio a dibujar figuras con
gises en el piso, luego continuaron jugando a las escondidas en la
casita infantil, actividad en la que se entretuvieron por varios
minutos.
Al término de la convivencia y en presencia de la progenitora

********** se mostró molesta con su papá y le comentó: “ya no
pude ir a mi clase, por estar aquí, y su padre le respondió ya te
prometí que yo te llevó después a montar caballos, no te enojes
conmigo”, despidiéndose de cada una de sus hijas con un abrazo y
103
un beso en la mejilla.”

DE 27 DE NOVIEMBRE DE 2010.
“Observaciones del Trabajo Social: La Sra. ********** no presentó a

**********, comentando que se encontraba en Acapulco.
[…]”104

DE 19 MARZO DE 2011
“La convivencia se realizó, ocurriendo lo siguiente:
El Señor **********, se presentó a las 09:00 horas y esperó en el área

de recepción.
La señora ********** y las menores ********** de apellidos **********,

llegaron a las 09:13 horas, enseguida el padre las saludó
verbalmente, pero ellas no correspondieron a tal cortesía, instante
en que las niñas abrazaron a la progenitora, misma que realizaba el
registro correspondiente, al concluir las atrajo hacia ella y
alternadamente en el oído les habló en tono de voz bajo, sin que se
103
104
146
escuchara. Después, la progenitora cargó en

brazos a la menor ********** y caminó unos pasos,
al tiempo que la niña refirió: No quiero quedarme mamá. Ante ello, el
progenitor mencionó a las niñas: ¿quieren ver que traje?, de
inmediato les mostró juguetes y golosinas, sin embargo, ********** no
prestó atención y besó a su madre en la mejilla, en tanto sus
hermanas nuevamente abrazaron a la mamá y movieron la cabeza
de manera negativa, por tal motivo la suscrita solicitó a la señora
********** el espacio con la finalidad de que el padre invitara a sus
hijas a la convivencia, quien aceptó sin comentar nada al respecto y
permaneció en el área de recepción.
Acto seguido, el señor ********** y las menores entraron a una sala

de convivencias alterna de la recepción, donde el papá, de una
maleta que trajo enseñó material didáctico y ellas escogieron
realizar pulseras, en ese momento el padre les preguntó: “¿Por
qué no quieren jugar?” La menor ********** correspondió: Quiero
irme a la fiesta de **********, en eso **********manifestó: Yo, ya me
quiero ir a la fiesta y prosiguió: Oye por tu culpa, vamos a llegar
tarde a la fiesta de **********. El señor ********** preguntó: ¿A qué
hora es la fiesta?” La menor respondió: “A las cinco de la
mañana o muy temprano”. El papá sonrió y dijo: ¿Quieren jugar
conmigo? De manera espontánea lo abrazaron y **********Expresó:
Bueno sólo un ratito”. La menor ********** Agregó: “Mamá dice que
tenemos la fiesta”.
Mientras la pequeña ********** jugaba con una pelota con luces,

instante en que el señor ********** puso a cada niña un collar de
fantasía y corrió de un lado a otro, de inmediato las niñas lo
siguieron y alternadamente lo sujetaron de la camisa que traía
puesta exclamando: ¡ya está quemado papá!; además el papá
corriendo infló globos y lanzó flores de papel, entonces ellas las
juntaron e hicieron figuras con los globos.
Posteriormente, la suscrita avisó a la progenitora que las menores

ya se habían integrado a jugar con el padre y ella dio las gracias, al
147
tiempo que se retiró.
Más adelante, mientras las menores desayunaban galletas,

sándwich y leche de sabor chocolate, momento en que ********** y
********** e insistieron en retirarse refiriendo que iban a llegar
tarde a la fiesta. De manera rápida el progenitor las motivó a pintar
con pinceles, pintura en líquido y ellas aceptaron.
Con el apoyo del papá elaboraron paisajes y adornaron un botecito

de material de madera, al terminar dichas manualidades
nuevamente de forma insistente **********Manifestó: Tengo que
irme, instante en que el papá se mostró triste y la niña **********
expresó: No papá no te voy a dejar, te dije que no me voy”. Pero
**********procedió de manera exigente: ¡Papá vamos a llegar
tarde a la fiesta de **********! ¡Qué no sabes que la fiesta es
temprano! ¡Muy temprano!”
El señor **********, debido al comportamiento de su hija **********

solicitó se localizara a la progenitora, siendo aproximadamente las
11:10 horas, vía telefónica se le avisó a la madre la decisión de la
menor.
Cabe destacar que la señora **********, regresó aproximadamente a

las 11:39 horas y al momento de que se le entregó a sus hijas en la
recepción, mencionó que se hubieran quedado más tiempo, la fiesta
es a la una”. Luego la progenitora se llevó a las menores.” 105

DE 2 DE ABRIL DE 2011.
“La convivencia entre el señor ********** y sus hijas **********, de

apellidos ********** se realizó de la siguiente manera:
Al inicio el señor ********** asistió a las 9:00 hrs. Después, la señora

**********presentó a sus hijas a las 9:20 hrs. Mientras la madre
105
Ibídem. Tomo III. Fojas 189 y 190
148
registraba su asistencia el señor ********** saludó

a sus hijas, pero la menor ********** le mencionó
que no quería quedarse, su padre le preguntó el motivo, pero
ella no le contestó, sólo mostró un gesto triste, enseguida el
progenitor invitó a las tres niñas a entrar, ellas aceptaron pero
cuando iban ingresando, el señor volteó a ver a su contraparte,
diciéndole en tono molesto: “síguelas manipulando”, la
Licenciada **********, profesional ejecutivo de servicios
especializados del Centro, le dijo al padre que no hiciera esos
comentarios.
De inmediato el progenitor dirigió a las niñas a una de las salas de

convivencia y, siguió preguntándole a ********** porqué no se
quería quedar, la niña continuó con la misma actitud, su padre
le insistió que se quedara a jugar, pero la niña respondió
haciendo un signo negativo con su cabeza, el señor ********** le
preguntó: “¿No quieres ver a papá?, platícame, ¿te duele la
panza, la cabeza?, ¿tienes una fiesta?, la niña le respondió con
un signo negativo, después su padre le dijo: “¿No le dijiste al
Juez que te gustaba saltar la cuerda?”, ********** asintió y le dijo:
“”es que la otra vez dijiste que un ratito...”, su papá le
respondió: “si y se fueron temprano, se fueron a las once y
media, no se fueron a la una”, ********** le comentó: “no
pudimos llegar”, su padre le aclaró: “si, pero ustedes me
dijeron que la fiesta empezaba a las tres, entonces si salieron a
las once y media, si les daba tiempo de llegar, si no llegaron fue
por otra cosa, ¿entonces qué?, ********** le respondió: “sólo un
ratito”, su papá le preguntó: “¿qué tienes que hacer?, la niña le
contestó: “nada, sólo me quiero quedar un ratito, todos los
sábados te tengo que ver”, el señor ********** le explicó: “es que
es el único día que las puedo ver, no las puedo ver otro día,
¿por qué te quieres ir?, ¿alguien te dijo que no dijeras nada?”
********** le dijo que no.
Después, el progenitor le comentó a **********: “les mandó moños

**********, yo me quedó muy triste, ¿ya te quieres ir?” **********le
149
respondió que no y agregó: “me quedo un ratito”. Por otra parte, las
menores ********** y **********, estando a un lado de ellos, veían las
cosas que traía su padre, mientras lo abrazaban, diciéndole que
ellas si se querían quedar.
[…]
Por otra parte, la que suscribe le hizo la observación al señor

********** que no le hiciera comentarios a su contraparte y menos
enfrente de las niñas, él respondió que estaba bien y agradeció la
atención recibida.”106

DE 14 DE MAYO DE 2011.
“Observaciones del Trabajador social.
Las menores comentaron que no querían convivir con su padre,

porque preferían estar con su mamá, mostrándose renuentes a
platicar con su padre, siguiendo con su negativa; ********** comentó
que irían a un festival, al tiempo que ********** decía: no ya no
digas más intentando tapar la boca a su hermana. El señor
********** tomó fotografías a sus hijas y les obsequió donas,
asimismo las menores querían llevarse algunos objetos, pero el
padre les dijo que no y las niñas los aventaron. Finalmente se
despidieron con un abrazo y un beso.”107
La actitud de las menores de no querer convivir con su padre en

razón de que la madre organizó o permitió que las menores realizaran
actividades precisamente el día en que debían convivir con su padre,
se corrobora con el contenido de la copia certificada del expedientillo
**********, formado con motivo de la comparecencia de **********ante la
Juez Décimo Noveno de lo Familiar del Distrito Federal, solicitando la

suspensión provisional del régimen de visitas y convivencia que
106
107
150
********** tendría con sus menores hijas el día ocho de

enero de dos mil once en el Centro de Convivencia
Familiar Supervisada del Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal, pues de él se desprende que el día siete de enero de dos mil
once, la referida juzgadora tuvo una plática con las menores **********
y ********** **********, de la cual se advierte que la primera de las
menores refirió en lo que aquí interesa, lo siguiente:
“… llamarse como ha quedado precisado con anterioridad, tener seis

años de edad, ir en primero de primaria en el Colegio **********, vivir
con su mamá, abuelo y hermanas, que ahí no vive su papá **********,
que no sabe porque no vive con ella, que si lo ve en el centro de
Convivencias, los días sábados, y sus hermanas también, que se
divierten ahí y juega con su papá y sus hermanas, que no le gusta ir
ahí y le gustaría verlo fuera del Centro, que no le gusta ese lugar,
que también tiene otras actividades a las que podría ir y que le
paga su mamá y no puede asistir, como montar a caballo,
108
porque su colegio tiene una granja en el Ajusco, …”
De igual manera, de la copia certificada del reporte de

convivencia familiar de veintidós de mayo de dos mil diez, se
desprende que la postura asumida por **********en el Centro de
Convivencia Familiar Supervisada del Tribunal Superior de Justicia del
Distrito Federal, también llegó a propiciar que ********** no pudiera
ejercer normalmente su derecho de convivencia.
En efecto, de ese reporte se desprende lo siguiente:
“La convivencia no se llevó a cabo debido a las circunstancias

siguientes:
108
Ibídem. Tomo II. Foja 1376 vuelta.
151
La señora **********, presentó a las menores, **********, todas de

apellidos **********, a las 9:07 horas, el señor ********** llegó a las
9:09 horas.
Mientras la señora ********** registraba su entrada en el reporte,

sentó a ********** en el escritorio de los reportes, mientras **********y
********** las traía de las manos. A su vez el padre les mandaba
besos desde donde se encontraba, y las niñas sonreían.
Cuando la progenitora concluyó su registro, la que suscribe se

acercó a las niñas y las invitó a que pasarán a una de las salas para
dar comienzo al encuentro, instante en que la sra. ********** refirió:
“las niñas no se quieren quedar, las traje a la fuerza, mírelas
como están, ********** venía llore y llore y si hace ocho días se
quedaron, fue porque el trabajador social las obligó a quedarse,
mis hijas me lo dijeron y les creo, pero este día no va a ocurrir
eso, porque me las voy a llevar”.
Ante la actitud de la señora, se le explicó que en ningún

momento se obliga a los niños y se le pidió que por favor
brindara el espacio para que las niñas se encontraran con su
padre, al tiempo que también se le informó que la menor ********** no
podía permanecer sentada sobre las bitácoras, debido a que en ese
momento estaban llegando los otros usuarios a sus convivencias y
tenían que registrarse, sin embargo, la mamá hacía caso omiso a la
petición antes citada, por lo que se le sugirió que por favor
acompañara a las niñas para iniciar el encuentro y aceptó.
Al ingresar se quedaron en el área del comedor, donde la señora

********** sentó a ********** en una de las mesas, mientras que el
progenitor, mostró diversos juguetes, libros infantiles y colores a
********** y ********** y las invitaba a que se quedaran a pintar como
lo habían hecho la vez anterior que se quedaron. Nuevamente, la
Sra. ********** interrumpió diciendo: “si se quieren llevar las
cosas hijas, lo pueden hacer, finalmente, todo lo que les están
mostrando son de ustedes, se quedaron en la otra casa donde
152
vivíamos antes, se acuerdan?”, las menores

no contestaron y continuaron observando los
juguetes que el padre trajo. ********** tomó un pizarrón mágico,
se rio y miró a su padre quien le dijo: “No te angusties hija, si no
quieres quedarte no hay ningún problema, no te van a obligar,
pero no te quiero ver así, no llores por favor”, instante en que
cargó a **********, se observó que sólo se le humedecieron los
ojos. Por otro lado, el Sr. ********** pidió a ********** que se bajara
para que continuara viendo los juguetes. Asimismo, la que suscribe
pidió a la Sra. ********** que por favor bajara a **********, debido que
al cargarla, quedó con la cara hacia la pared e impedía que se
hablara con ella, pero la mamá comentó: “¿te quieres bajar
**********? Si no quieres no lo voy hacer”, finalmente, no la bajó y
el Sr. ********** movió la cabeza. Pasado unos minutos, el padre
mostró a ********** otro juguete, ********** sonrió, se bajó y
comenzó a observar el juguete, mientras la Sra. ********** la miró
fijamente y enseguida ********** regresó con ella y no aceptó ver
otros juguetes y mencionó de manera insistente que ya se
quería retirar. Enseguida ********** también dejó uno de los
juguetes que traía, se dirigió a su madre y le decía que se
fueran. El Sr. ********** las exhortó a que se quedaran un rato
para que jugaran, pero ********** y ********** no aceptaron,
mientras que ********** dijo que si se quedaría, entonces la Sra.
********** tomó las manos a ********** y a ********** y se dirigió
hacia la recepción, donde asentó su salida. ********** regresó al
área del comedor y le decía a ********** que ellas ya se iban a ir y
que ella se quedaría sola e incluso la jaló para llevársela, pero el
papá le dijo que no la jalara, pues ********** si se quería quedar,
entonces, ********** se salió para la recepción.
El Sr. ********** comenzó a mostrarle los juguetes a **********, quien

comenzó a llorar, el progenitor trató de tranquilizarla, pero **********
continuó llorando, por lo que el Sr. ********** mencionó que lloraba
porque ya no estaban sus hermanas y que mejor la iba a
entregar para que se fuera porque tampoco quería ver a su hija
llorar.
153
Finalmente, se le aviso a la Sra. ********** que esperara un momento

porque ********** también se iba a retirar. Enseguida, el Sr, **********
llevó a su hija ********** a la recepción, mientras la Sra. **********
asentaba su salida a las 9:30 horas.
El Sr. ********** se retiró del inmueble a las 9:37 horas.” 109
 Ha atribuido actos negativos a ********** frente a sus hijas.
De las constancias de autos se puede desprender que **********,

también ha hecho comentarios negativos de ********** frente a sus
hijas, comentarios a través de los cuales, las menores se han formado
una imagen negativa de su progenitor, en tanto que lo perciben como
una mala persona, la cual incluso les genera temor, un temor que de
acuerdo a lo narrado por las menores, ha sido generado por la propia
madre, ello aunado a que no siempre lo identifican como su padre.
Lo anterior es así, pues de la copia certificada de la audiencia de

ocho de marzo de dos mil diez, llevada a cabo en el diverso
expediente **********, después **********, se advierte una plática
sostenida entre el Juez Vigésimo Octavo de lo Familiar del Distrito
Federal y la menor **********, de la cual se advierte que la menor, en lo
que aquí interesa, manifestó lo siguiente:
“… el sábado y domingo salen con su mamá y l e gusta ir al parque,

no le gusta ver a su papá (cuando se le pregunta por qué motivo no
le gusta ver a su papá, únicamente mueve la cabeza en sentido
negativo y omite contestar), dice que no se acuerda cuando fue la
última vez que lo vio, y que no quiere ver a su papá, porque su
papá golpeó a su mamá, que ella no lo vio, pero que su mamá se
lo dijo. …”110
109
Ibídem. Tomo II. Fojas 1053 y1054.
110
154
Del mismo modo, los comentarios negativos

hacia el padre también se advierten del contenido de la copia
certificada del expedientillo **********, formado con motivo de la
comparecencia de ********** ante la Juez Décimo Noveno de lo
Familiar del Distrito Federal, solicitando la suspensión provisional del
régimen de visitas y convivencia que ********** tendría con sus
menores hijas el día ocho de enero de dos mil once en el Centro de
Convivencia Familiar Supervisada del Tribunal Superior de Justicia del
Distrito Federal, pues de él se desprende que el día siete de enero de
dos mil once, la referida juzgadora tuvo una plática con la menor
**********, de la cual se desprende que la citada menor manifestó lo
siguiente:
“…que refiere la menor que no tiene papá, que su mamá se llama

(sic), que su papá se llama ********** y que no es su papá, que es
malo porque le tocó a su hermana la colita, que se lo contó su
hermana **********, que su papá le quitó juguetes, que la menor
refiere que si hoy se queda con él va a ir a su casa y la va a
llevar con él a su casa, que su mamá le ha dicho que es malo,
porque le quita cosas a su mamá, que cuando va al Centro de
Convivencias, juega con sus hermanas y su papá, que su papá le
toma fotos y le pone princesas que a ella le puso Blanca Nieves, que
la casita tiene un timbre y sí funciona y entran sus hermanas a jugar
y juegan con su papá de verdad y que todas son las bebes y
********** es su papá y que juegan a hacer la comida, que en el
Centro de Convivencias hacen dibujos y comen, y que si les gusta
estar con su papá, pero que hoy no quiere ir con su papá porque
se va a quedar en su casa siempre, que eso se lo dijo su mamá,
que su papá le compra muñecos que cuando va al Centro de
Convivencias se divierte que cuando quiere ir sí, que su mama la
trata bien y su papá más o menos, que su papá tiene llaves de su
casa y se lleva sus juguetes, que su mamá le dijo que su papá
se lleva sus juguetes, que la menor no ha visto que entre a su
155
casa, que sólo fue al cuarto de su mamá, que la menor vino con
su mamá porque iba a trabajar, que la menor no sabe por qué está
aquí, que a la menor sólo la quiere su mamá y su abuelo y su
papá más o menos que su papá le da permiso de irlo a ver, que le
gustaría ver más a su papá en el parque, pero que sólo lo ven en el
Centro y le gustaría que fuera en otro lado, que le gustaría que la
llevara al parque, a comer un helado, que sus papás estén
contentos, que la niña menciona que trae medallas en el cuello
que le compró su mamá de vírgenes para que la cuiden de
********** porque es malo y sólo en el Centro de Convivencias no
111
lo es …”
 Les ha hecho saber a las menores de su enojo cuando

ven a su progenitor.
Se asevera lo anterior porque entre las constancias de autos

existe copia certificada de la audiencia de seis de noviembre de dos
mil ocho, llevada a cabo en el diverso expediente **********, después
**********, en la cual se hace constar la plática que el Juez Vigésimo
Octavo de lo Familiar del Distrito Federal sostuvo con **********, de la
cual se advierte que la menor expresamente manifestó que su madre
se enoja si ve a su padre.
En efecto, en dicha audiencia la menor manifestó lo siguiente:
“En seguida se procede a escuchar a la menor **********,

manifestando: Que tiene cuatro años de edad, que tiene dos
hermanas de un año, que las cuida, que las trata bien, que cursa el
kínder, que no recuerda como se llaman sus maestras, que su mamá
se llama **********, que vive con su mamá en su casa, en donde
viven cuatro personas, que sus abuelitos no viven con ellos, que su
mamá la lleva a la escuela, que la trata bien, que su mamá no la
regaña ni tampoco le pega, que no quería pasar a platicar; que sabe
111
Ibídem. Tomo II. Fojas 1377 y 1377 vuelta.
156
que su papá se llama **********, que a su papá lo

quiere y lo extraña y que antes la llevaba a
pasear, le gustaría que su papá la llevar (sic) a pasear, que su
mamá se enoja si ve a su papá, que le gustaría que su mamá le
112
diera permiso de salir con su papá.”
Así las cosas, aunque la recomendación de la perito en

psicología en el sentido de exhortar a las partes para que no ejerzan
una influencia negativa en las menores respecto de la otra figura
parental, y en específico sobre la figura paterna, adminiculada a las
conductas antes referidas, podrían llevar a considerar que si bien
en el caso no se demostró plenamente que las menores estén
alienadas o manipuladas en contra de su progenitor, en tanto que
no presentan un odio sin ambivalencias hacía la figura paterna,
que según se vio al analizar el síndrome de alienación parental, es
propio de los hijos alienados o manipulados, tales conductas sí
podrían llevar a estimar que las menores se encuentran en un
proceso de manipulación o alienación parental hacia la figura
paterna, pues por un lado, las conductas de la madre podrían
considerarse propias de un progenitor alienador o manipulador; y
por otro lado, en algunas ocasiones las menores (especialmente
**********) han mostrado rechazo hacía dicha figura.
No obstante, atendiendo al interés superior de las menores,

el cual obliga a otorgarles una protección legal reforzada, para
poder concluir de esa manera, en primer lugar se tiene que
descartar que el rechazo mostrado por las menores hacia
********** obedezca al hecho de que éste haya tenido conductas
impropias frente a sus hijas, como son el ver películas
pornográficas y masturbarse delante de ellas; y además, se tiene
que verificar, en la medida de lo posible, que no haya abusado
112
Ibídem. Tomo I. Foja 160.
157
sexualmente de su hija ********** (tocándole la colita para

masturbarla), pues de ser así, si bien algunas conductas de la
madre para predisponer a sus hijas en contra del padre e impedir
que éste conviva con ellas, no podrían considerarse correctas o
acertadas, sí podrían ser perfectamente entendibles desde el
punto de vista de una madre que pretende proteger a sus hijas de
su propio padre.
Por ese motivo, para poder afirmar que ********** se

encuentra en un proceso de alienación o manipulación por la
madre en contra del padre, o que sufre un grado mínimo de
afectación del síndrome de alienación parental con características
imputables a la madre el cual puede agravarse, como lo validó la
autoridad responsable, y basarse en ello para decretar la
suspensión de la patria potestad ejercida por **********, primero es
preciso descartar que tales acusaciones sean ciertas, lo que en el
caso no se realizó, pues para desestimar las aseveraciones
vertidas por ********** en el sentido de que ********** abusó
sexualmente de su hija ********** y además tuvo conductas que
hacen peligrar a sus menores hijas, la autoridad responsable al
igual que el A quo, básicamente se limitó a señalar que de las
averiguaciones previas iniciadas al respecto, se infiere que se
decretó el no ejercicio de la acción penal.
Ciertamente, para el juzgador el simple hecho de que en la

averiguación previa correspondiente no se haya ejercitado acción
penal en contra de ********** fue suficiente para desestimar las
acusaciones vertidas en su contra por **********, sin advertir que él no
ejercicio de una acción penal puede deberse a múltiples circunstancias
(entre otras el no haber investigado debidamente los hechos
denunciados); y que por ello, esa determinación no lo relevaba de la
158
obligación de suplir la deficiencia de la queja a favor

de las menores e investigar cualquier indicio que
pudiera servir de base para determinar con objetividad si las
acusaciones vertidas en su contra pueden o no tener una base cierta.
Se afirma lo anterior, porque atendiendo al interés superior de la

infancia; y por ende, a la obligación que tiene el estado de tomar las
medidas que resulten necesarias para proteger a los niños contra toda
forma de perjuicio o abuso, en suplencia de la deficiencia de la queja,
el juzgador tenía la obligación de investigar cualquier indicio que se
relacionara con las acusaciones de referencia, pues sólo de esa
manera se podría considerar que contó con los elementos objetivos
suficientes para tomar una decisión que no resulta nociva para los
menores ni contraria a su formación y desarrollo integral, sino que por
el contrario, es la más acorde a su sano desarrollo.
No obstante, como se adelantó, esto no aconteció en el caso que

nos ocupa, pues aunque es cierto que en la averiguación previa
iniciada al respecto se determinó el no ejercicio de la acción penal,
también lo es que dentro de ella, no sólo existe una acusación por
parte de ********** en contra de **********, sino que además existe una
declaración vertida en su contra por la propia menor **********.
En efecto, aunque en el caso a estudio la autoridad responsable
omitió remitir junto con su informe justificado la totalidad de las copias
certificadas de las actuaciones que integran las averiguaciones previas
ofrecidas como prueba, de los anexos adjuntos se desprende que el
propio ********** señala que ante la autoridad ministerial, en fecha diez
de julio de dos mil ocho, la menor ********** realizó la siguiente
declaración:
159
“COMPARECE DE MANERA VOLUNTARIA SIN PRESIÓN DE

NINGUNA ÍNDOLE NI FÍSICA NI MORAL, EN ESTE MOMENTO NO
CUENTA CON DOCUMENTO OFICIAL ALGUNO PARA
IDENTIFICARSE, SE PRESENTA ACOMPAÑADA DE SU MAMÁ
**********, CON QUIEN QUIERE IRSE A SU CASA, EN ESTE
MOMENTO SE LE PREGUNTA CÓMO SE LLAMA Y LA MENOR
CONTESTA **********, SE LE PREGUNTA CÓMO SE LLAMAN LAS
PARTES DE SU CUERPO, EL PERSONAL ACTUANTE LE SEÑALA
SU CABEZA Y LA MENOR CONTESTA CABEZA, SE LE SEÑALAN
LOS OJOS Y LA MENOR CONTESTA SUS OJOS, SE LE SEÑALA
LA NARIZ Y ELLA RESPONDE QUÉ SE LLAMA NARÍZ, SE LE
PREGUNTA POR SUS MANOS Y ELLA REFIERE QUÉ SE
LLAMAN MANOS, SE LE PREGUNTA CÓMO SE LLAMAN SUS
PIES Y ELLA CONTESTA QUE PIES, SE LE PREGUNTA CÓMO
SE LLAMA LA PARTE DONDE HACE PIPI Y LA MENOR REFIERE
QUE SU COLITA Y SE LE PREGUNTA CÓMO SE LLAMA POR
DONDE HACE POPÓ Y LA MENOR SEÑALA POMPI, SE LE
PREGUNTA SI ALGUIEN LE HACE ALGO Y SE QUEDA
CALLADA, CON PENA, SE LE PREGUNTA EN VARIAS
OCASIONES, SI ALGUIEN LE HACE ALGO O LE TOCA SU
CUERPO Y LA MENOR SE QUEDA CALLADA, SE LE
PREGUNTA, NUEVAMENTE SI ALGUIEN LE TOCA SU COLITA Y
LA MENOR REFIERE QUE YA SE LO DIJO A SU MAMÁ EN UN
SHOW, SE LE PREGUNTA QUÉ SHOW Y LA MENOR REFIERE
QUE SU TÍO ********** LE TOCA AQUÍ, SEÑALA SU COLITA(CON
SU MANO DERECHA SU ÁREA PÚBICA), SE LE PREGUNTA
CUÁNTAS VECES Y DICE QUE POQUITAS, SE LE PREGUNTA
QUE SI POR ENCIMA DE SU ROPA O POR DEBAJO Y LA
MENOR SEÑALA QUE POR ENCIMA, SE LE PREGUNTA SI LE
DOLIÓ MUCHO O POQUITO Y LA MENOR REFIERE QUE
POQUITO Y SE LE PREGUNTA SI ERA POR EL DÍA, TARDE O
POR LA NOCHE Y LA MENOR REFIERE QUE POR LA TARDE,
SE LE PREGUNTA SI ESTABA EN LA CASA DE SU TÍA **********,
ES HERMANA DE SU PAPÁ, SE LE PREGUNTA QUE MÁS LE
HACE SU TÍO ********** Y DICE QUE NADA MÁS, SE LE
PREGUNTA SI ALGUIEN MÁS LE TOCA SU COLITA (ÁREA
160
PÚBICA) Y LA MENOR RESPONDE QUE SÍ, SE

LE PREGUNTA QUIÉN Y DICE QUE SU PAPÁ
**********, SE LE PREGUNTA QUÉ LE TOCA SU PAPÁ ********** Y
ELLA SEÑALA CON SU MANO DERECHA SU COLITA (ÁREA
PÚBICA), SE LE PREGUNTA SI POR ENCIMA O POR DEBAJO
DE SU ROPA Y SE METE SU MANO DERECHA POR DEBAJO DE
SU PANTALÓN Y POR ENCIMA DE SU CALZÓN Y SE LE
PREGUNTA SI TAMBIÉN POR DEBAJO DE SU CALZÓN Y LA
MENOR RESPONDE QUE NO, QUE POR ENCIMA DE SU
CALZÓN, SE LE PREGUNTA QUE SI LE DUELE Y ELLA DICE
QUE POQUITO, SE LE PREGUNTA SI SU PAPÁ LE TOCA LA
COLITA POR LA MAÑANA, TARDE O POR LA NOCHE, LA
MENOR RESPONDE QUE POR LA NOCHE, SE LE PREGUNTA SI
SU MAMÁ ESTÁ CUANDO SU PAPÁ LE TOCA LA COLITA Y LA
MENOR RESPONDE QUE NO, QUE SU MAMÁ ESTA VIENDO LA
TELE EN OTRO LADO DE LA CASA, SE LE PREGUNTA SI SU
MAMÁ SE DA CUENTA Y LA MENOR RESPONDE QUE NO,
PORQUE ELLA ESTÁ EN SU CAMA Y SU MAMA ESTÁ VIENDO
LA TELE, DICE QUE YA SE QUIERE IR, PORQUE YA ES TODO,
QUE EN CUANTO A LA MEDIA FILIACIÓN DE SU PAPÁ Y DE SU
TÍO ********** YA LA PROPORCIONÓ SU MAMÁ, ASÍ MISMO DICE
QUE YA ES TODO”.113
Ante esa declaración, el juzgador debió investigar todos los

indicios que le pudieran llevar a determinar en la medida de lo posible
la veracidad o la falsedad de dicha acusación.
Ello es así, pues aunque no pasa inadvertido que en el dictamen

médico de integridad física, ginecológico, proctológico, y de peso y
talla realizado por la perito médico forense ********** en la misma fecha
de la declaración de la menor (diez de julio de dos mil ocho), se
concluyó que al momento de exploración física la menor no presenta
huella externa de lesiones y que en el examen ginecológico se apreció
113
Esta información se desprende del escrito signado por **********, en su carácter de defensor de
********** el cual obra agregado en la foja 18 del legajo de copias certificadas por el Agente del
Ministerio Publico con relación a la averiguación previa **********.
161
himen íntegro no elástico, que en el momento de la evaluación no se

encontraron datos clínicos de enfermedad de transmisión sexual, y en
el examen proctológico no se apreciaron alteraciones anatómicas y
patológicas, ni datos de transmisión sexual 114; lo cierto es que el hecho
de que la perito señale que tiene el himen íntegro, es intrascendente,
pues no se debe perder de vista en el caso la acusación en contra de
********** no es por violación, sino por abuso sexual debido a
conductas impropias con su hija, quien señaló en su declaración que
le tocaba su “colita”.
Del mismo modo no pasa inadvertido que el veintiuno de julio de

dos mil ocho, la perito en psicología ********** apoyándose en una
entrevista dirigida a base de preguntas y respuestas concluyó que en
la menor ********** no se detectaron alteraciones psicológicas
114
El contenido del dictamen que obra agregado en la fojas 1248 y 1249 del Tomo II del expediente
**********, es el siguiente:
“El que suscribe Perito Médico Forense adscrito a esta procuraduría en virtud de la designación
hecha al efecto por el C. Coordinador General de Servicios Periciales, he sido encargada de emitir
el Dictamen correspondiente según oficio arriba citado, siendo el resultado el siguiente:
Siendo las 20:50 hrs., del día de la fecha se examinó en el Servicio Médico de esta Institución la
menor **********, de 04 años DE EDAD LA CUAL SE ENCUENTRA EN COMPAÑÍA DE SU
MADRE DE NOMBRE **********quien autoriza y está presente en los exámenes que se realizan a
la menor.
EXAMEN FÍSICO: A la exploración física: En el momento de la exploración en general NO
PRESENTA HUELLA EXTERNA DE LESIONES RECIENTES.
Peso 18.800 Talla 105 cm.
EDAD CLÍNICA.
POR SU ASPECTO Y DESARROLLO EN GENERAL POR NO PRESENTAR LOS SIGNOS DE LA
PUBERTAD ES INPUBER, POR CONTAR CON 20 PIEZAS DENTALES EN TOTAL TIENE UNA
EDAD CLÍNICA PROBABLE MAYOR DE TRES AÑOS Y MENOR DE CINCO AÑOS.
EXAMEN PROCTOLÓGICO: Glúteos y espacios interglúteos sin alteraciones, esfínter anal externo
con tono conservado, pliegues anales radiados y bien definidos, mucosa anal externa sin
alteraciones.
ANTECEDENTES GINECOSTETRICOS: sin datos de impúber.
EXAMEN GINECOLÓGICO. Pubis desprovisto de vello, genitales externos infantiles en vías de
desarrollo de acuerdo a edad y sexo labios mayores cubriendo los menores y estos adosados entre
sí, observándose en esta área ligera hiperemia (enrojecimiento) y en malas condiciones de higiene,
horquilla integra, himen de forma anular integro y en el momento sin datos clínicos de enfermedad
de transmisión sexual.
Refiere la madre que le mandó realizar el día de ayer a la menor examen de exudado vaginal a
laboratorio particular por percibir un olor desagradable en genitales de la menor y salida de líquido,
el cual al momento no se observa.
CONCLUSIÓN:
La menor ********** EN EL MOMENTO DE LA EXPLORACIÓN FÍSICA EN GENERAL NO
REPRESENTA HUELLA EXTERNA DE LESIONES RECIENTES, POR SU ASPECTO Y
DESARROLLO EN GENERAL TIENE UNA EDAD CLÍNICA PROBABLE MAYOR DE TRES AÑOS
Y MENOR DE CINCO AÑOS, AL EXAMEN GINECOLÓGICO HIMEN ÍNTEGRO NO ELÁSTICO,
EN EL MOMENTO SIN DATOS CLÍNICOS DE ENFERMEDAD DE TRASMISIÓN SEXUAL, AL
EXAMEN PROCTOLÓGICO SIN ALTERACIONES ANATÓMICAS NI PATOLÓGICAS, SIN DATOS
DE ENFERMEDAD DE TRASMISIÓN SEXUAL.”
162
compatibles con las que se han encontrado en

menores que han sido agredidos sexualmente,
emitiendo al respecto el dictamen que a continuación se reproduce:
“DICTAMEN PSICOLÓGICO
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA:

De acuerdo a la petición del C. Agente del Ministerio Público en la
que solicita:
“Determine si presenta sintomatología como consecuencia de

agresión sexual y si puede precisar fecha y hora en los hechos
considerando su edad”.
ANTECEDENTES FAMILIARES Y PERSONALES:

Mencionó la C. ********** madre de la menor que el Padre de la menor se
llama ********** del cual expresó que lo conoció en un empleo, en el que
lleva 14 años laborando, con el cual estableció a los dos meses de
conocerlo una relación de noviazgo durante cuatro o cinco años, los
cuales tenían planes de boda, pero la C. **********, diez días antes de la
fecha decidió no casarse, debido a que había observado que era
agresivo, se dejaron de ver dos años, hasta que se lo encontró,
nuevamente sostienen una relación de noviazgo a escondidas de sus
padres ya que no estaban de acuerdo, durante seis meses, después
deciden casarse, en el año dos mil tres. Vivió con él cinco años los
cuales los describe como difíciles debido a que dijo que no se dio cuenta
que él era adicto a la pornografía, donde al principio ella no sabía si era
normal o no, tuvieron otros problemas entre él y ella, en alguna ocasión
cuando se peleaban, ********** lloraba. La madre de la menor le pidió el
divorcio de manera voluntaria, entre marzo y abril, pero el C. ********** le
dijo que sí, pero que él se quedaba con **********, él no se fue de la casa,
hace dos semanas la madre de la menor decide salirse e irse a vivir a
casa de su padre, es decir, con el abuelo de las menores. Mencionó que
desde abril del presente año buscó asesoría legal para iniciar su divorcio,
ya que no sabe cómo manejarlo, tuvo un abogado antes, pero no hizo
nada por lo que cambió y éste último es quien le dijo que viniera.
163
La madre del menor se llama **********, quien tiene 31 años de edad,

dedicada actualmente al hogar, cuenta con estudios de Licenciatura en
Administración de Empresas.
La valorada es la hija mayor de tres procreados por ambos padres de

nombres **********de 4 años de edad (Evaluada), ********** de 2 años de
edad y ********** de 6 meses.
Acerca del área escolar comenta la madre de la menor que se paso a

kínder dos:
En cuando a la salud de **********, comentó la madre de la menor que al

nacimiento no tuvo problemas, ni complicaciones, no padece
enfermedades crónicas, ni ha tenido alguna cirugía o fracturas. Así
también, mencionó que hace unos meses, la madre del menor tuvo una
infección en la vagina, al mismo tiempo la menor también la tuvo, el
doctor le recetó pomada, le hicieron a la menor un exudado y salió
bien.
VERSIÓN DE LOS HECHOS:

Respecto a los hechos que se investigan la menor **********, proporcionó
la siguiente información:
Como primer paso durante su entrevista se estableció rapport. Se

llevó a cabo una entrevista dirigida debido a su edad. La menor
presenta buena pronunciación, la menor responde lo que se le pregunta
de forma espontánea. Se encuentra ubicada en persona, sabe su
nombre, sabe el nombre de las personas significativas para ella, sabe
identificar el área genital, a la que le llama con el nombre de ‘colita’
y de igual forma sabe identificar al área de las nalgas, a la que le llama
con el nombre de ‘pompas’.
Respecto a los hechos que se investigan la menor ***********,

proporcionó la siguiente información:
164
1. ¿Cómo te llamas? **********

2. ¿Cuántos años tienes? “Tengo Cuatro”
3. ¿Con quién vives? “Con mi mamá, con mis hermanitas”
4. ¿Vas a la escuela? “Si”
5. ¿Conoces las partes de tu cuerpo? “Si”
6. ¿En dónde está tu cabeza? “Se toca la cabeza”
7. ¿Y tus ojos? Señala correctamente sus ojos”
8. ¿Tu boca? “Se toca su boca”
9. ¿Tus manos? “Se toca sus manos”
10. ¿Tus dedos? “Los muestra y se los toca correctamente”
11. ¿Y tu cuello? “Señala correctamente”
12. ¿Tu estómago? “Señala adecuadamente y dice panza”
13. ¿Tus piernas? “Señala adecuadamente”
14. ¿Y tus orejas? “Indica correctamente”
15. ¿Por dónde haces pipí y cómo se llama? “Señala el lugar
correcto y dice ‘colita’
16. ¿por dónde haces de la popó y cómo se llama? “Señala el
lugar correcto y dice ‘pompas’”
Se le realizan preguntas específicas, en relación a los hechos

que se denuncian donde la menor **********, refiere lo siguiente:
17. ¿Alguien te ha tocado tu cuerpo o donde haces pipí?

“No”
18. ¿Alguien te ha tocado donde haces popó? “No”
19. ¿Tu papá te ha tocado alguna parte de tu cuerpo? “No”
20. ¿Tu papá te ha tocado donde haces pipí? “No”
21. ¿Tu papá te ha tocado donde haces popó? “No”, ya no
vive mi papá, sólo viene a visitar, hoy ya no, ya se hizo de
noche, si me gusta que vaya”.
22. ¿Qué haces cuando estas con tu papá? “Juego con la
pelota, a las muñecas, a los piratas, a las ballenas”
23. ¿Cuándo estabas con tu papá veías la televisión? “Si veo
a Dora, yo tengo una película, a las ballenas”.
24. ¿Has visto películas que no te gusten con tu papá? “No,
sólo la de Peter Pan que tiene un pirata malo”.
165
25. ¿En la computadora de tu papá has visto películas donde

salen personas sin ropa? “No”
26. ¿En la televisión has visto con tu papá películas donde
salen personas sin ropa? “No, sólo en la calle un señor no tenía
zapatos ni calcetines y su ropa estaba rompida”
En cuando a la versión de los hechos que la C. **********, madre de la

menor es la siguiente:
Cuando yo le decía algo al papá de mis hijas, él me empujaba, me decía

que alucinaba, yo me volví insegura, inestable. Hace dos años me salí de
la casa y hablé con su hermana y lo mandaron al psiquiatra, como estaba
embarazada de mi tercer hija regresé con él, cuando nació mi hija, él
lloró porque quería un hombre”. A partir de abril o marzo de este año le
dije que por qué veía pornografía, me dijo que siempre lo hacía cuando
las niñas no estaban, pero en abril vi que mi hija ********** estaba parada
afuera del cuarto donde estaba su papa y fui rápido, como sé que esa
puerta siempre estaba abierta, vi que él estaba viendo la televisión y se
masturbaba, yo desde marzo ya no tenía relaciones sexuales con él, lo
que vi que cuando no veía pornografía, él se dormía como que se
deprime. Como a los veinte días fue a ver a un psiquiatra y me dijo que
no le dijo nada de que veía pornografía, fue cuando le dije que quería el
divorcio, él me dijo que quería a **********, se puso loco. Yo estoy
preocupada, yo como podía saber los daños, porque me grita y me jala,
********** le grita y le dice que no me regañe, es que ella es muy apegada
a mí. Ahora que estamos con mi papá, hasta le dice en lugar de abuelo,
papá. Por todo esto fui con una psicóloga y yo estaba jugando con títeres
y dijeron ********** y ********** que su papi y su tío ********** les
lastiman en su colita, que las rasguñan, esto fue hace mes y medio.
Hace dos o seis meses ********** me dijo que le dolía su colita la llevé
al doctor, me dijo que era una infección, yo también tenía una
infección, el ginecólogo y el pediatra sólo pusieron que era una
infección no quisieron poner algo más. Ahora la niñita ya está mejor,
ya es más feliz, habla fuerte, es una niña sana, va bien en la escuela,
antes como que era muy violentona.
RESULTADOS:
166
Impresión de su coeficiente intelectual.

En la evaluada se pudo apreciar por su forma de
expresarse, en donde emplea ideas para darse a entender, así como por
su nivel de pensamiento y grado de escolaridad, impresiona clínicamente
una capacidad intelectual de término medio.
De acuerdo al especialista en desarrollo infantil la niña se encuentra

ubicada en el periodo de Preoperacional, el cual se caracteriza por que el
niño o niña entiende que los objetos y las situaciones tienen ciertas
características que los distinguen de otros, sin embargo, debido a la edad
con la que cuenta la menor no puede referir fechas, días y horas exactas,
ya que no está capacitada aún para realizar abstracciones de conceptos
de número, así como de tiempo, llegando a manejar sólo nombres que
sean familiares para ella, lo cual es normal a su edad.
Por todo lo anteriormente expuesto se emite las siguientes:
CONCLUSIONES
Primera. La menor evaluada **********, durante su valoración psicológica

está orientada en persona, lugar y tiempo, coherente y congruente, en
cuando a su memoria mediata e inmediata se encuentran conservadas,
así como sus capacidades de atención y concentración.
Segunda. Impresiona con una capacidad intelectual dentro del Término

Medio.
De acuerdo al especialista en desarrollo infantil se encuentra ubicada en

el periodo de Preoperacional, debido a la edad con la que cuenta la
menor no puede referir fechas, días y horas exactas ya que no está
capacitada aún para realizar abstracciones de conceptos de número, así
como de tiempo, lo cual es normal a su edad.
Tercera. La menor evaluada proviene de una familia desintegrada donde

ambos padres le han tratado de cubrir sus necesidades básicas de
atención, protección, guía y afecto, de acuerdo a sus posibilidades.
167
Cuarta. Finalmente, de acuerdo a los resultados de la evaluación, al

análisis de lo referido por la menor, por su madre en sus entrevistas, y
para dar respuesta al planteamiento del problema, se concluye que en
la menor **********, no se detectaron alteraciones psicológicas, las
cuales sean compatibles con las que han encontrado en menores
que han sido agredidos sexualmente.
Lo que hago de su conocimiento para los fines legales a que haya

lugar.”115
No obstante, tampoco puede pasar inadvertido que contrariando

la conclusión señalada en el dictamen antes referido, con relación a la
averiguación previa **********, con posterioridad en fecha nueve de
marzo de dos mil nueve, se emitió otro dictamen psicológico, suscrito
por las licenciadas en psicología ********** Y **********, adscritas a la
Fiscalía Central de Investigación para Menores, en el que se concluye
que la menor ********** sí presenta indicadores psicoemocionales
asociados a los que se han identificado en menores víctimas del
delito de corrupción de menores de tipo sexual.
En efecto, el dictamen de que se habla fue rendido en los

siguientes términos:
“DICTAMEN PSICOLÓGICO VICTIMAL.
I. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA.
Se solicita realizar dictamen psicológico a la menor que responde al

nombre de ********** de 04 años de edad de, quien se encuentra en
calidad de víctima, a efecto de determinar si presenta alteraciones
psicológicas de victimas de corrupción de menores de tipo sexual y
115
Dictamen agregado en copia simple al expediente **********, Tomo II, fojas 1236 a 1242.
168
de presentarse determinar si es debido a las

conductas de los probables responsables
********** y **********.
II. METODOLOGÍA (TÉCNICAS Y CRITERIOS EMPLEADOS)

1. Lectura y análisis de Averiguación previa correspondiente.
2. Entrevista Psicológica Forense con la menor **********.
3. Aplicación de los siguientes instrumentos psicológicos.
 Test Guestáltico Visomotor de Lauretta Bender.
 Test de la Figura Humana (interpretación de KOPPITZ).
 Frases incompletas de Dacks.
 Test de Apercepción infantil (CAT)
 Test del casa- Árbol- Persona
 Persona bajo la lluvia
5. DATOS PERSONALES
NOMBRE ********************
EDAD 04 AÑOS
F DE NAC 08 DE JUNIO DE 2004
LUGAR DE NAC NO LO REFIERE MÉXICO D.F.
ESCOLARIDAD 2° PREESCOLAR
OCUPACIÓN NO TIENE
…IV. ESTADO MENTAL Y ACTITUD ANTE LA EVALUACIÓN
La menor es presentada ante esta Representación Social por su

señora madre de nombre **********, con quien refiere la menor
encontrarse viviendo a partir de que sus papás se pelearon y su
mamá corrió a su papá.
La menor es presentada a su cita de manera puntual y en

condiciones de higiene y arreglo adecuados. Sin problemas de
psicomotricidad a simple vista.
La actitud que muestra ********** al momento de ingresar al área de

Psicología donde se procederá a realizar la aplicación de
instrumentos así como la entrevista, ella se maneja con cierto recelo,
169
se mantiene callada por un espacio considerable, no mantiene

mucho el contacto visual, y se muestra un tanto recelosa.
Al realizar las acciones de rapport la menor fue cambiando su

postura y lenguaje corporal, acepta el acercamiento físico, para
tocarle la mano, en muestras de saludo, ella responde tímidamente
al dar su nombre y demás información, se va identificando
claramente como ella intenta socializar más profundamente, ella
alcanza niveles de confianza identificados en respuestas sociales
tales como comentarios sobre el medio, sonrisas e intercambio
visual, la niña **********, ciertamente responde a dichas acciones de
manera positiva, accede a iniciar en la ejecución de los instrumentos.
Cabe mencionar que la menor porta una muñeca que utiliza como un
objeto de apoyo al sentir cierta seguridad en él, pero se destaca que
conforme la menor va adquiriendo confianza ella es capaz de dejar
de atender a su muñeca y presta atención y cumple lo que se le
asigna.
Ante los diferentes instrumentos aplicados y para poder llevar a cabo
la evaluación, la menor respondió de manera lenta aunque no de
manera significativa, al momento de responder los instrumentos,
sobre todo los de corte proyectivo, la menor muestra situaciones
que evidentemente alteran su emotividad ya que ciertamente al
hablar de situaciones de temor o angustia sobre situaciones
que ella misma va planteando, se manifiesta su discurso con
latencias largas y cuestiones mesuradas, hay momentos en que
la menor guarda silencio, se retrae y pierde la atención, con
cosas vagas, solicita comer y hay claras muestras evasión.
Sobre sus procesos de atención, libres de tensión, ella responde de

manera satisfactoria, se identifica que no presenta problemas en
evocar eventos, aunque si bien ella no ubica en su totalidad fechas
exactas, sí le es posible identificar lugares y personas por ser
significativas para ella, lo que implica el uso de sus memorias
episódicas.
170
En cuanto a su discurso y uso de lenguaje,

********** se maneja con un nivel de repertorio
amplio de acuerdo a su edad, sobresale que en muchos momentos
utiliza términos del idioma inglés, para nombrar, a sus padres
(mother, father, grandfather babe o animales, cat, dog, etc.).
Se observa que la niña hace referencia a los eventos desde su

propia perspectiva. Sin que por ello deje de ser trascendente como
ella ha ido asimilando los eventos que expone su discurso se centra
en los mismos, sin alteraciones u omisiones, así como con estructura
adecuada en cuanto a la semántica y sintáctica acorde a su edad.
Por lo antes expuesto se detecta que la menor presenta ubicación en

espacio, persona y de modo parcial en tiempo, más por las
alteraciones emocionales que le provoca hablar de
determinados eventos se encuentra que la niña ubica la
circunstancia encontrando desagrado ante su posición dentro
de la misma.
Ella emplea juicios simples, se mueve entre la asignación de

valores de afecto, amor, respeto, cariño, lo bueno, lo mano, lo triste,
lo alegre, por ello es capaz de connotar adecuadamente sus
emociones en función de cómo las percibe en el contexto que
se ha desarrollado.
V. ANTECEDENTES FAMILIARES Y PERSONALES. La menor

********** es capaz de reconocer a sus padres por los nombres de
********** ********** y ********** **********, menciona que ella cuenta
con otras dos hermanas que son más pequeñas de nombres
********** y ********** de 2 y 1 año de edad respectivamente,
argumentado que la bebé ********** es muy bonita y pequeñita pues
es tan sólo un poco más grande que su muñeca a la que también
llama **********.
La menor menciona que ella vivía al lado de sus padres, que no sabe
a que se dedican, pues dice que no sabe en que trabajen pero que
171
ella cree que su papá no trabaja en nada porque siempre estaba en

la casa.
La niña trata de exponer como se daba su dinámica familiar,

argumentando que ella vivía en la casa con sus papás y sus
hermanas, que no veía que sus papás tuvieran pleitos o pelearan,
hasta que su mamá corrió a su papá, luego aclara: “bueno, él se
quedó en la casa, porque nosotras nos fuimos” (sic), se le cuestiona
que si ella sabe los motivos por los que se quedó su papá en su casa
y ella junto con su madre y hermanas se fueron a vivir a otra casa, a
lo que ella responde “Mi mamá se enojó porque ella supo que mi
papá me había tocado, ella le dijo que por qué y entonces lo
corrió, bueno él se quedó cambiamos de casa, nos fuimos a la casa
de mi abuelito **********” (sic).
Con respecto a la relación y trato que mantenía por parte de sus

padres, ella menciona “Mi mamá es buena, ella no me pega, me
cuida, me lleva al doctor”; sobre su papá dice, “él es bueno, no me
pega pero me hacia cosas” (sic), se le cuestiona que cosas
hacía y la menor en tono bajo disminuye su atención, baja la
cabeza, se torna evasiva voltea la cabeza en todas direcciones e
inserta ideas fuera de contexto, sobre todo con referencia a su
muñeca, menciona que la muñeca es pequeña, y que no quiere
que ella oiga lo que va a decir, entonces se le sugiere que
llevemos a la muñeca a otra área y la menor acepta,
mencionando entonces que su papá, le tocaba su colita y le
ponía el dedo así, rascándose en su pierna derecha a la altura
del muslo, seguido ella ejerce presión y dice “me hacía así, eso
me dolía mucho, yo le decía que ya no me tocara, él se reía”
(sic)
La menor es capaz de permanecer sin su muñeca a partir de

entonces y sólo la pide nuevamente casi al concluir la entrevista.
Al momento de exponer la niña y describir cómo es que le

tocaba su papá, se le cuestiona en donde es que su padre le
172
tocaba y ella señala entre sus piernas en el

área genital, mencionando que su papá le
tocaba muchas veces, respondiendo al cuestionamiento si su
mamá alguna vez vio lo que le hizo su papá y ella menciona mi
mamá no estaba, ella se había ido, al “súper”, eso fue una vez
porque en otras tampoco vio, porque no estaba tampoco.
Entonces se le pregunta a la niña, donde estabas tú con tu papá

cuando él te tocaba y ella responde en la casa.
En dónde? En mi cama, casi siempre en mi recamara, él me

tocaba, ¿sabes cómo cuántas? No, fueron muchas, ¿qué
sentías tu? Me dolía y le decía que no.
¿Qué más hacia cuando estabas sola con él? Responde: veía la
tele. ¿Qué veían? Películas: ¿Qué películas, recuerdas el
nombre de una de ellas o de que trataba? Sí, era de los piratas y
otras eran de gente fea, hacían cosas feas. ¿Recuerdas que
hacían en la película? No, estaban sin ropa, pero no sé” (sic)
esquiva la mirada.
La menor entra en periodos aunque cortos, en donde ella se

manifiesta callada, destaca que pierde contacto visual, se
muestra tímida, hubo un momento que ella recuesta su cabeza
en el brazo derecho, éste extendido y sus ojos se llenan de
llanto, sin llegar al llanto franco. Se le baja la tensión a la menor
y se le pide que diga que es lo que pasa, ella dice que esta
triste, solicita salir, por lo que se decide parar la entrevista y se da
un receso de 10 minutos, para que pueda estar en el área de juegos
infantil.
Una vez cubiertos y dado que se perdió cierta conectividad, debido a

que es evidente que la menor entra en periodos de angustia y
ansiedad evidentes que se niega a hablar y para no
sobrevictimizarla se retoman otro tipo de preguntas a fin de que
ella adquiera nuevamente confianza.
173
Cuando la menor se muestra activa, platicadora y alegre, con

sonrisas y elabora cuestionamientos de interés personal, entonces
se le aborda sobre otro tipo de situaciones, ella es capaz de
mencionar que desde que se cambiaron de casa están con su
abuelito **********, que también tiene una muchacha que se llama
********** y que ella la cuida que antes cuando estaban con su papá
todavía no estaba ********** con ella y dice: “********** no vio lo que
me hacia mi papá porque no vivía con nosotros. (sic), ella
confiada menciona que su papá le tocaba muchas veces que
ella ahora se toca en las noches, y baja nuevamente la mirada,
pero retoma la confianza y dice, me tocó mi colita, muchas
veces en la noche, pero poquito rato, me gusta porque mi papá
me, siento cosquillitas, igual que cuando mi papá me tocó” (sic).
La niña menciona que su papá estaba viendo la televisión que
ella pasó por “casualidad”, dice “porque sólo iba pasando
cuando vio él se tocaba su colita, señalando nuevamente su
área genital, continúa lo vi como si se estuviera tocando su
dedo pero no vi nada más” (sic)
La niña hace referencia a que ella si quiere mucho a su papá y que

le gustaría volver a vivir con él y su mamá y la bebé y **********, que
no le da miedo pero que cree que si la volverá a tocar otra vez y
eso no le gusta.
********** establece que lo que le hizo su papá es malo, porque le

dolía pero cuando se le cuestiona que si ella se ha tocado y
acepta, se le dice que si cree que eso sea malo y baja la mirada,
sus facies cambian y asienta ligeramente con la cabeza, justifica
seguido, que ha sido poquito, dice que se toca porque le
gustaba que le tocaba su papá y ahora ella se toca porque si le
gusta, todo esto lo menciona en susurro y le maneja como si
fuera un “secreto”.
Se le comenta si además de su padre hubo alguien más que le

tocara y ella menciona que si que su tío ********** le tocó, ¿en
174
dónde le tocó, menciona en mi colita, en

donde estabas? Responde en la casa de mi
abuelito aquí en México.
Se le pregunta a la menor si alguien vio que le tocara su cuerpo

y menciona “no vio mi papá que me tocara mi tío y cuando mi
papá me tocaba no veía mi tío **********.” (Sic).
Dentro de los temas que se abordan con la menor, se encuentran

situaciones de su cotidianidad, mencionado que quien compraba las
cosas en el “súper” era su mamá, que su mamá actualmente es
quien la lleva a la escuela, en ese aspecto, la niña menciona que se
siente contenta en la escuela ya que ha aprendido muchas cosas
porque tiene dos maestras a las que reconoce como Miss **********
quien le imparte Español y Mis ********** quien es su maestra de
inglés. La menor niega tener problemas en la escuela mencionada
que tiene sus amigos y le gusta ir a ese plantel.
En relación con el área de la salud, la menor niega tener

problemas serios de salud, aunque reconoce que su mamá la
ha llevado al doctor, pero no explica los motivos. En cuanto a
sus hábitos de sueño y alimenticios, la niña dice sentirse “bien”
aunque dice que ha habido ocasiones que ha soñado pesadilla
que sueña con lobos que la persiguen.
La niña al momento de la entrevista, expuso que se sintió contenta y

tranquila al haber sido entrevistada, pero que ella si tenía algo de
miedo, menciona “sentí miedo, cuando me dijo mi mamá que iba
platicar con una psicóloga, y me dieron ganas de vomitar” (sic).
Situación que refleja sentimientos de angustia y ansiedad, latente en
la menor.
VI VERSIÓN DE LOS HECHOS.
La menor en cuestión, manifiesta: “Mi mamá me trajo para que

platique con la psicóloga, sentí un poco de miedo, y me dieron
175
ganas de vomitar” No sé de qué iba a platicar, pero creo que

decir lo que me hacía mi papá de tocarme mi colita, con su
dedo, me hacía así (presiona el dedo contra su pierna) me
tocaba aquí señala su área genital.
VII RESULTADOS DE LA EVALUACIÓN
ESFERA FAMILIAR Y SOCIAL:
La menor proviene de un núcleo familiar constituido por sus padres

a los cuales ella connota como afectivamente ligados a ella, siente
que su familia está integrada por sus padres y hermanas, viviendo
una dinámica familiar a la cual ella no es capaz de asignar un
concepto, para ella sus padres permanecen juntos hasta que la
madre descubre que su papá le hacía tocamientos, sin embargo, la
menor no es capaz de hablar de manera precisa de los
antecedentes a la denuncia y cómo es que la madre decide
formularla.
Aún así la niña establece que la conducta de su padre hacía ella

no era buena, ya que le causaba dolor al ser tocada por éste y
finalmente cuando la menor establece que “tocarla era malo y
ahora ella se toca por ende también lo es” ella presenta
alteraciones a partir de la ruptura familiar y los motivos que
subyacen a la misma donde la niña se ubica como el centro de la
situación.
Ciertamente la menor no es capaz de hablar de una dinámica

cotidiana de forma extensa ubica que su padre está en casa, viendo
televisión y que su madre sale eventualmente. De acuerdo a sus
pruebas psicológicas la menor identifica a las figuras parentales
como jerarquías distintas connotando con más poder al padre,
afirmando “mi papá es alto, más fuerte, tiene las manos muy
grandes y los ojos como de cocodrilo”. (sic) Ella ante presenta
variabilidad ante la prueba la prueba (sic) de la Familia, interrumpe
su dibujo diciendo que no quiere dibujar, sin embargo previo a esto,
176
la niña había mencionado que si deseaba hacer

un dibujo donde estuviera su papá con una
corona, a su mamá con otra corona y sus hermanitas y ella las iba a
dibujar sin corona porque ellas eran unas princesitas.
Después de un rato, dice si voy a hacer el dibujo, realizando un

dibujo ilustrando a cada uno de los miembros de su familia. (no
realiza el dibujo como ella había descrito, pues omite la corona a los
padres). De acuerdo a su reflejado en el mismo, la menor proyecta
un sentimiento de tensión e irritabilidad, se preocupa por las
relaciones interpersonales, ella se ubica con menor jerarquía aún a
la de sus hermanas incluso a la de la bebé **********, ella refleja
niveles de angustia y sentimientos de culpa por considerarse
con maldad natural, busca situarse como una niña de mantener
tamaño y edad, alegando” soy ésta la de aquí la más chiquita es que
era antes cuando estaba chiquita”.
La situación inconsciente de la menor al desear ser más

pequeña, no resulta aislada si se considera que los menores
que han presentado condiciones de agresión o donde se ubican
como víctima ellas presentan regresiones con fines de volver a
etapas donde ellas se sentían protegidas y efectivamente
aceptadas.
Por la disposición que tiene con respecto a la figura de las

hermanas, ********** se refleja con cierta rivalidad fraterna, lógica a
su edad, ella intenta lograr los beneficios de su hermana menor en
cuanto a la búsqueda de protección que naturalmente los padres
asignan a los hijos más pequeños. Reflejando así niveles de
regresión y desvaloración de sí misma.
De igual modo de acuerdo al emplazamiento y ubicación del

padre se encuentra que ante la figura paterna, la menor
encuentra una separación ante dicha figura y presenta
sentimientos de miedo y agresión. “mi papá es alto, más fuerte,
tiene las manos muy grandes y los ojos como de cocodrilo”. (sic)
177
A la madre le ubica como un bloque que le separa del padre aunque

con menor jerarquía que éste.
La niña de acuerdo a la forma en que ella percibe al padre es

como agresivo existe en ella temor hacía dicha figura que no
sólo se ve reflejada en la prueba de la familia, en el dibujo de la
figura humana ella refleja culpas masturbatorias en la figura
paterna, al proyectar que él emite dichas conductas; tendencias
agresivas hacia la figura materna, ciertamente no deja de ser
manifiesto en sus instrumentos que la menor al presenciar
situaciones de riñas y pleitos entre sus padres, les ubica como
agresivos.
No obstante dicha percepción por lógica tiene su contrapartida de

acuerdo a los requerimientos y búsqueda de seguridad de sus
progenitores, entrando en conflicto por la ambivalencia que tiene
hacia ellos, por un lado siendo que la madre puede ser la que pone
las reglas y por otro aunque el padre puede ser agresivo también
le ha prodigado situaciones de confort y placer (situaciones
masturbatorias) de igual modo los lazos de afecto están presentes,
haciendo dicha circunstancia lo que ha sido quebrantado por el
padre hacia la menor.
En cuanto a la familia extensiva, sus abuelos, tanto los paternos

como su abuelo materno representan para ella personas que de
algún modo han estado presentes, actualmente ubica más a su
abuelo materno al decir que viven con él en su casa, desde que
dejaron la casa donde vivía con su padre, mencionando que
visitaban a los abuelos de ambos lados parentales, ubicando
entonces a su tío ********** como agresor, aunque en dicho caso
no explica con detalle cómo llegó a realizarle tocamientos, pero
si ubica que fue en la casa de su abuelita **********, aquí en
México y en su cama.
En cuanto a su esfera social, la menor no identifica tener problemas

para relacionarse con sus pares, asiste a la escuela juega sin
178
alteraciones, ella niega tener problemas para

poder cumplir lo dispuesto por sus maestras, se
le nota efectivamente ligada a éstas.
ÁREA COGNITIVA:
De acuerdo a su nivel de ejecución y desempeño general por parte

de la menor se pudo apreciar que la menor puede bajar sus niveles
de ansiedad, siempre y cuando no perciba situaciones
amenazantes, ella se maneja con niveles de adaptación, sin
embargo como se ha dejado expuesto hubo momentos en que
la niña se vio alterada por momentos por manifestaciones de
angustia y ansiedad que fueron controladas con fines de evitar la
alteración o pérdida de fiabilidad, respondiendo la niña
favorablemente.
Siempre y cuando la niña permaneciera tranquila su ejecución la

llevaba con fluidez y seguridad. Sus narraciones y descripciones
las realizó con un tono adecuado y como se mencionó de
acuerdo a un repertorio característico a su edad, la niña no hace
alusión a fechas precisas, sin embargo dado su etapa de desarrollo
se considera que la menor se encuentra en una etapa
preoperacional de acuerdo a la clasificación de tales etapas de
desarrollo del niño establecida por Jean Piaget, en donde define que
los niños son capaces de comunicar con sus palabras
pensamientos, de una forma organizada y entendible, pudiendo
reconstruir situaciones pasadas y hablar de lo que ellos
presenciaron o le acontecieron con sus propias palabras,
identificando a las personas con las que vivenciaron dichas
experiencias, sin embargo no son capaces de ubicar fechas exactas
y horas sin embargo se exponen de acuerdo a periodos de día
noche o cierta ubicación en el espacio, recordando los nombres.
Una característica de la etapa en la que ********** se encuentra

está el hecho de que no puede crear situaciones que no ha
visto o experimentado, ya que cuenta (sic) con la capacidad de
179
abstracción potencial intelectual dado el desarrollo cognitivo de

crear o inventar situaciones ficticias.
Lo anterior hace pensar que de acuerdo a la manera en que la niña

ha ido describiendo no es capaz de connotar abiertamente la
posición que ella desempeñaba en relación con sus padres y
específicamente con su padre.
Si se considera que al igual que existe un desarrollo cognitivo, el

cual está en función con las situaciones y el entorno social y familiar,
se tiene que la niña, congnitivamente presenta un desarrollo acorde
a su edad, que ha tenido condiciones y oportunidades de desarrollo
que le ha permitido adquirir conceptos que para su edad son lógicos.
Situaciones que le hacen manejarse en un entorno académico de

modo natural y sin alteraciones con sus pares respondiendo
adecuadamente de acuerdo a dicha estadio o etapa de desarrollo.
Sin embargo, ante su ejecución y puntaje obtenido en el Test de

Bender se tiene que ella alcanza un puntaje de 22 correspondiente a
un Nivel de Maduración de 4-0 años que comparativamente con su
edad presenta un nivel más bajo al contar con edad cronológica de
4-8 años a la menor, lo que se detecta como alterado en función
a la angustia y estrés al que la niña responde por situaciones
obvias a la intervención y por el compromiso emocional que ha
invertido.
Por su lenguaje, repertorio, y forma en que ella responde al medio

impresiona nivel de inteligencia promedio.
Sus niveles de pensamiento se dan de un modo concreto y sin

lograr establecer detalles o situaciones que aderezaran su discurso,
ella tiende a ser sencilla y simple, cuando no contaba con el
concepto, como es claro para su edad, se quedaba callada o
simplemente decía “no sé”.
180
Como se expuso y dado que la menor se

encuentra en una etapa donde se empieza a
constituir su juicio moral.
De acuerdo a la Teoría de Kolberg (1964) en donde se establece

que de acuerdo al desarrollo cognoscitivo los niños van adquiriendo
conciencia de los hechos, en función a las etapas de desarrollo,
para el niño se establecen criterios de entre lo bueno y lo malo, sin
embargo dicha postura se mantiene a lo largo de la vida,
simplemente va variando la concepción de la intencionalidad. El niño
conforme va madurando va cambiando su concepción de daño o
perjuicio y va adquiriendo la concepción de intencionalidad en donde
va cambiando no las normas morales sino el contexto en el que se
quebrantan. De igual modo conforme se va avanzando en edad, los
juicos no van cambiando en su cualidad, pero si se van añadiendo
las razones aducidas para justificarlos.
En el caso de la menor que nos ocupa se tiene que si bien ella se

encuentra en una etapa que como se mencionó y utilizando la
clasificación de las mismas por Jean Piaget, se tiene que la niña se
encuentra en una etapa de juicios sencillos y específicamente
los juicios morales son simples y marcados solo por lo bueno y
lo malo, ella no alcanza aún conceptos para justificar la
conducta de ella o la de los demás en este caso (La conducta
específica de su padre y tío) ante una situación de estimulación
sexual donde pueda ir más allá de emitir un valor de “conducta
mala” y dicha alusión simplemente la hace en función del dolor
que a ella le causa, más no por la intención que su padre haya
tenido ante tal conducta.
La niña entra en un conflicto con respecto a dicha concepción de

juicio moral ya que ella en una primera etapa sabe que dado que su
padre es una autoridad poderosa dado su rol, ella al obedecer
comete una conducta buena, pero dado el daño o dolor le provoca
un juicio moral como malo, pero de acuerdo a las características
esenciales de la primera y segunda fase que la niña ha atravesado
181
de dicho desarrollo en el cual, la primera habla de un desarrollo

moral preconvencional y la segunda de orientación evidentemente
egoísta, en la primera debe acatar las órdenes de un superior a
causa del miedo al castigo y en la segunda, la moral del acto
depende de que se satisfaga una importante necesidad de la
persona o de algún pariente.
********** explica que su padre le tocaba y hacía algo malo pero

él no respondía a su negativa, se reía y ella lo interpreta como
una mayor fuerza de él hacia ella, en la segunda postura
********** sabe que solo es malo si ella sufre un dolor, pero
cambia su postura cuando ella logra decir que si su padre la
toca, ella se toca y obtiene un placer.
Sin embargo para la niña ya no resulta simple cuando ella entra

en el juego de ubicarse dentro del plano social y ella connota
dichas conductas como malas, bajo el contexto social que se
ha ido estableciendo y donde ella logra introyectar el sentido de
vergüenza, culpa y tristeza o desconcierto por las mismas
conductas que ella no logra entender sobre su incipiente juicio
moral.
Lo anterior es expuesto con fines de plantear que la menor está

en confusión sobre su juicio moral ya que ha entrado en juego
otros aspectos sociales que le brindan entonces un contexto
emocional y que se traducen entonces en las afecciones
emocionales que la menor ha ido añadiendo o sumando a su
formación psicoemocional.
ÁREA AFECTIVA.
Deseando vincular el área anterior que fue el área cognitiva-
intelectual se sabe que todo individuo va adquiriendo madurez y
desarrollo de manera paralela, esto es cuando el desarrollo se
puede considerar como sano o normal de acuerdo a los estándares
de la población, cuando esto no va vinculado o un área es afectada
significativamente por el contexto o las circunstancias inherentes al
182
sujeto, entonces se habla de un desarrollo

alterado.
En el caso de ********** se tiene que ella se encuentra en una etapa

en donde se van conformando sus patrones afectivos y emotivos de
acuerdo a las vivencias o experiencias y como se han ido
organizando en sus estructuras cognoscitivas (historia, memorias,
memorias efectivas, etc).
La estructura del yo o del autoconcepto para ********** está un

tanto alterada, como se mencionó en el apartado de la esfera
familiar, ya que la niña cursa con problemas de autoestima, su
autoconcepto se encuentra en minusvalía.
Por la etapa de desarrollo psicosexual que la menor atraviesa y

retomando la Teoría psicodinámica se tiene que por la edad la niña
se encuentra en una tercera etapa en donde el niño empieza a
tener conciencia de su cuerpo, desea explorarlo para
conocerlo, empieza a tener una conciencia de su yo y de su
cuerpo, ante la diferencia del cuerpo de los padres entre en juego la
identificación con el sexo opuesto y cierta rivalidad con el mismo
sexo, parece que un buen término de esta etapa es cuando al
reconocer su cuerpo y adquirir la seguridad de su sexo, hay
identificación con el mismo sexo, esto es, cuando de niño se trata
inicialmente se sentirá atraído y más cercano a la madre con tintes
de posición y satisfacción de sus impulsos por parte de la madre, al
ser niña el rol parental que está en juego es el del padre, la niña
rivaliza con su madre y esto sólo es superado cuando la niña
alcanza a identificarse con el rol femenino.
La etapa en la que ********** se encuentra de acuerdo a su edad

cronológica y estado de desarrollo y que ha sido denominada por los
teóricos como etapa fálica, hace pensar que la niña se encontraba
vulnerable ante la satisfacción de sus impulsos de conocer y
explorar su cuerpo, sin embargo ella al haber sido inducida o
iniciada en dicha actividad por su padre la hace proclive a que
183
permanezca en la misma etapa de exploración, las conductas

masturbatorias que la menor practica la hace sentir bien en
cuanto logra encontrar placer y gusto, natural y lógico de
acuerdo a dicha exploración, sin embargo el haber sido moldea
dicha conducta y modelada por el padre hace pensar que la
niña no ha logrado alcanzar una madurez psicosexual
apropiada a su edad.
Si se retoman a otros teóricos de la Psicología se tiene que el

desarrollo de la individualidad que engloba un desarrollo más
amplio a solo el desarrollo psicosexual, el cual está en riesgo
en la menor por el hecho que haya sido expuesta a un modelaje
de una conducta masturbatoria, bajo el esquema de lo bueno o
malo, lo que provoca en la menor sentimientos de vergüenza y
culpabilidad, situaciones que le hacen tener alteraciones
conductuales definidas.
La menor entra en juego con un conflicto emocional al haber

vivido situaciones de abuso por parte de quienes ella sentía
emotivamente ligada a ella (su padre y tío) en donde le hace ser
susceptible al uso de poder que de manera sutil ellos emplean,
en un factor conocido como seducción en donde entra en uso
el aprovechar por parte del agresor de dichos lazos para
establecer el control sobre su víctima, que lógicamente resulta
ser más impactante en la menor el proceder del padre por
sentirse más ligada a éste.
En donde no hay uso de violencia o amenazas, simplemente se

hace uso de la fuerza que connota los afectos de la niña. Para la
niña sólo busca el afecto y la seguridad que el adulto ofrece a
cambio.
Para el adulto implica la satisfacción de sus fantasías sexuales en

este caso, para ********** y dada su posición social en cuanto a su
desarrollo, ella busca un lugar en el mundo de los adultos en donde
se vaya conformando y estructurando su conciencia y capacidad de
184
verse con “otros” esto es si capacidad de

identidad.
La menor de acuerdo a sus pruebas proyecta alteraciones

significativas en este rubro ya que aunque ella no habló
abiertamente de cómo se dieron ciertos eventos, si pudo
manejarlos a través de sus proyecciones.
********** aportó información significativa en sus respuestas y ante

las láminas de la Prueba de Apercepción infantil (CAT)
En las láminas generalmente ella se ubica dentro de un contexto

familiar, de acuerdo a la lámina uno ella ubica al padre como con
quien se encuentran los hijos, menciona que él les observa para
comer porque la mamá no está al haber salido a comprar más
comida, mientras el padre se queda con los niños, lo que hace que
éstos se sientan bien, porque el papá les da besos, en la mejilla, en
la boquita en la pancita (no), en los piecitos, en las rodillas.
Lamina dos. Observa a los padres peleando por el hijo, ella dice que
el niño se va a quedar con la madre porque ella va a ganar aunque
el papá es juguetón la mamá es más cariñosa.
Lamina tres, cuatro, cinco y seis habla de situaciones aisladas, sin

embargo en la lamina número siete, ella expone: “la bruja la
quiere tocar en su colita, que se vaya el señor”. Sus papás lo
salvaron, él se toca su cuerpo, sus pompas y colita, lo ve el
niño, el señor toca al niño en su colita.
Lamina ocho.- ante esta lámina, la menor mencionó “le dice un

secreto, señala a la pareja que está sentada en el sillón” de su
papá; que su papá se toca su colita y mueve su mano (la niña
se toca un dedo) prosigue le toca a niño o a la señora (señala la
figura de la señora que ilustra estar al lado del niño dentro de la
lámina estimulo).
185
Lámina nueve.- la menor ante la lámina se niega a hablar, dice esa

no! Seguido dice está llorando (señala a la cuna) porque su mamá lo
despertó, porque salió el sol, él había tenido una pesadilla, yo luego
sueño con una pesadilla la de los lobos que me persiguen. De
veras, si sueño eso!
En la lámina diez es el bebé que se acaba de bañar, no quería ir al

baño le da una nalgada, fuerte no, lo cuida la mamá.
Por lo que la menor expone deja ver que ella presenció la

situación masturbatoria de un adulto, que basada en su
narración (es su padre). La niña exhibe sentimientos de miedo y
temores, englobados no sólo en su discurso en la prueba antes
descrita, ya que ella ante los demás instrumentos proyecta
sentimientos de minusvalía ella se ubica como una niña
devaluada con una necesidad de ser adulta para poder
defenderse, ella se ve envuelta en temores y sentimientos de
desprotección, ella no ha generado defensas ante situaciones
de estrés. Hay momentos que sus relaciones sociales les percibe
amenazantes, se torna aislada y con sentimientos básicos de
insuficiencia por ello busca reforzar sus defensas idealizándose
como superhéroe, ella se siente vulnerable a que le hagan daño, ve
alterada su seguridad principalmente de los adultos.
De acuerdo a los especialistas se tiene que la relación de agresión

entre los adultos y los niños resultan más traumáticas entre más
cercano es el agresor, afectivamente hablando.
Lo anterior se vincula estrechamente con su preocupación hacia las

relaciones sociales, se muestra hipersensible y nerviosismo ya
que presenta sentimientos de inadecuación ante la figura
paterna.
Ante lo expuesto se ubica que la menor ha desarrollado

sentimientos de culpa, temores, vulnerabilidad, zozobra,
temores nocturnos; la menor presenta una marcada
186
ambivalencia afectiva hacia el padre, presenta

temores y a la vez mantiene un lazo de afecto
que se ven quebrantados presentándose sentimientos de
traición.
ÁREA CONDUCTUAL
De acuerdo a la interacción de variantes y factores que han
determinado las diferentes áreas y esferas de integración en su
dinámica personal y de desarrollo de la menor se tiene que ha
habido en ella alteraciones conductuales trascendentes, la
menor se ha desarrollado ante modelos parentales donde se ha
gestado una problemática de pareja que de manera implícita se ha
hecho evidente en la forma y comportamiento hacia ella, por otro
lado la forma en que han moldeado ciertos aprendizajes en la
niña ha afectado a su formación psicoemocional, que por ende
provocan en la menor alteraciones conductuales. La niña ha
llegado a presentar conductas de tipo sexual que aunque tienen
bases psicológicas antes explicadas también se han generado
a partir de la estimulación que el padre ha hecho hacia la
menor.
La menor es evidente que fue testigo de conductas

masturbatorias en el padre que a su vez retroalimentaron y
provocaron en la niña conductas hipersexualizadas por la
incidencia que la niña tiene (sic) a presentar la misma conducta,
teniendo su ángulo de disfuncional por los efectos emocionales
que provoca en la menor, los cuales son la culpa y vergüenza.
Es claro que a partir de que el padre establece dicha

estimulación sexual a la menor, esta refiere empezó a tocarse
“su colita”, sabiendo que no es del todo adecuado, en función
al establecimiento del juicio moral del cual se habló en su
momento, provocando entonces conductas de aislamiento,
retraimiento que se manifiestan en su temor hacia los adultos y
por ende a la evasión y problemas para manejarse ante los
adultos.
187
Por la consistencia en sus resultados de presentar niveles altos

para la falta de control de sus impulsos, que explica como ella
llega a tener un exceso de exposiciones a la masturbación ya
que es muy probable que con ello y al resultar una acción
placentera, ella reduzca temporalmente los niveles de angustia
que le provoca la disfuncionalidad familiar, y a la vez, se
produzca en ella un efecto rebote de vergüenza y temor de ser
estigmatizada. Por ello minimiza dichas exposiciones cuando
dice “si me toco mi colita pero no mucho (sic).
De igual modo y bajo el mismo principio, la falta de control de

impulsos mas las condiciones de angustia, desamparo y
sentimientos de agresión, que ella vive hace proclive a tener otras
alteraciones conductuales, como son rabietas u otras conductas que
conllevan agresividad como un mecanismo de defensa y de dilución
de sus sentimientos de minusvalía ante su postura de víctima, de la
cual conscientemente no se ubica. O alteraciones en el control de
sus esfínteres, muy probablemente si se considera que tiende a
mostrar regresiones.
Algunos autores han manifestado que entre más pequeña o más

temprana la edad de la víctima de agresión sexual mayores
afectaciones arrastrará en su vida futura, se por ejemplo disfunción
en sus relaciones interpersonales, problemas de índole
psicosomático, (frigidez, retrasos, menstruales, esterilidad, etc.) o
simplemente alteraciones de tipo conductual, aislamiento social,
rabietas, muestras de agresividad, acompañada por conductas
hipersexualizadas en contraparte.
La niña en su modalidad más sencilla presenta sentimientos de

abandono y necesidad de mostrarse protegida y respaldada.
La situación conductual que la menor presenta está

directamente proporcional a la forma en que ella se enfrentó a
situaciones específicas del orden sexual que alteraron,
188
modificando la intensidad, frecuencia y

fundamentos psíquicos de la menor, ya que si
bien por naturaleza los niños presentan un comportamiento
exploratorio a su cuerpo, ella se mantiene en un nivel alto de
autoestimulación, llegando hasta un comportamiento excesivo,
provocado por la forma en función de la estimulación que han hecho
las personas que le moldean, modelan y premian o castigan sus
conductas, siendo todo lo anterior, la forma en que ella responde a
la estimulación social, para conformar una autoestima y
autoconcepto, como fue expresado en su momento, que de hecho
es donde la menor presenta un riesgo latente de continuar con
dicha pauta de conducta manteniéndose hipersexualizada, por
ello es conveniente que reciba tratamiento psicoterapéutico a
fin de dar apoyo con técnicas especializadas y dirigidas a
restablecer en la menor niveles de desarrollo psicosexual
acordes a su edad.
De acuerdo a la teoría Conductual y cognoscitiva social, (Skinner y

Bandura, 1953, 1997) se sabe que las conductas, desde las simples
hasta las más complejas se han generado por el juego que existe
entre las variables conocidas como reforzamientos o no
reforzamiento, castigos y premios, en donde se van moldeando las
conductas en una condición personal y debido a la propia
interpretación ya que si bien se imitan mucho conductas, no siempre
se imitan todas, ya que entra en juego básicamente la forma en que
se apercibe el entorno.
En el caso de ********** ella tiende a imitar conductas de su padre,

en función de ser él su modelo más significativo, (lazos de afecto),
ser él quien comparte un espacio tiempo determinado, además de
considerar que ella no presenta un esquema completo de juicio
moral que le permita identificar si la conducta de su padre se
connota como buena o mala por la intención. Para **********, la
intención de su padre, por ser simplemente su padre (quien da
seguridad y protección, quien provee de condiciones
satisfactorias a ella) no podrá tener una intención negativa, por
189
ende sus conductas moldeadas y ejercidas hacia ella,

tocamientos y estimulación, hace que la niña cree en su
concepción de su conducta como algo permisible, en ese
momento, ya que posteriormente y dentro de un juego más
amplio, la niña percibe que sus ganancias sociales no son tan
gratificantes, por ello entonces, se presentan sentimientos
ligados a su postura social como angustiantes, vergonzosos y
de gran peso social para ella.
La niña al tener dicho comportamiento ha generado cambios en

otros comportamientos y hábitos, como los alimenticios y de
sueño.
Ella intenta focalizar dicha situación hacia el padre como quien
llevó a cabo con ella conductas específicas, sin embargo es
claro que ubica perfectamente a su tío **********, sin dejar de
lado que quien presente mayor incidencia sobre la aparición de
la conducta masturbatoria en la menor fue el padre. Ubicando al
tío como un agresor de tipo sexual, lo que provoca en la menor
la resignificativa del evento de agresión sexual del padre, al
connotarlo de manera más intensa y reveladora por las
sanciones que le provocan las conductas de tipo sexual que el
padre emite hacia ella.
Las alteraciones que la menor presenta se exacerban cuando a

partir de que la madre descubre que ella ha sido víctima de
agresiones sexuales por parte de su padre y que se provoca
una ruptura ella se ubica como responsable de la misma al
saber que su madre pelea con su padre por tal razón
abandonando el seno familiar, lo que hace que la menor genere
aún más sentimientos de culpa, imprimiendo en la menor mayor
angustia y sentimientos de inadecuación.
CONCLUSIONES Y SUGERENCIAS.
PRIMERA.- A partir de la evaluación realizada a la menor **********
de 04 años de edad. Si presenta indicadores psicoemocionales
asociados a los que se han identificado en menores víctimas
190
del delito de corrupción de menores de tipo

sexual en función de las conductas y de la
relación que establece su señor padre con la menor por parte
de su progenitor **********.
Por lo que hace al señor **********, se establece una relación de

abuso sexual de acuerdo a la forma en que se ubican los
eventos, al reconocer que su tío le realiza tocamientos.
SEGUNDA.- Por lo que hace al señor **********, su padre se

considera que a partir de las conductas emitidas, tocamientos y
estimulación sexual a la niña, de manera reiterada, en donde
producto de éstas se altera el sano desarrollo psicosexual y el
libre desarrollo de su personalidad en la menor, al presentar
alteraciones cognitivas, conductuales, afectivas y sociales.
Presentando las siguientes características: temor, angustia,

inseguridad, necesidades de afecto y protección, miedo,
sentimientos de minusvalía, bajo estima, tristeza, así como
alteraciones en su comportamiento psicosexual, haber
experimentado y testificado conductas de tipo sexual
generando en ella confusión y respuestas sexuales fuera de un
contexto sano al haber sido inducidas.
El señor ejerce conductas masturbatorias frente a la menor,

provocando en ella situaciones que indicen en ella excitación
sexual al fungir él como modelo, induce a que la niña presenta
conductas masturbatorias en términos disfuncionales a su
edad y desarrollo psicosexual. El señor presenta conductas de
exhibicionismo corporal, en actos reiterados al presentar actos
sexuales (masturbatorios) y material gráfico películas
pornográficas, provocando en la niña respuestas fisiológicas
de excitación que ella reproduce al provocar conductas de
masturbación en ella, de manera repetida.
191
Se detectan variables de peso que exacerban las características de

la menor como víctima del delito que se investiga. En tanto se da:
 El lazo de afecto y parentesco de la menor con el agresor, al ser

éste su padre, se crea una condición de abuso sexual. Motivado
por situaciones de agresión sutil y encubierta, donde la mayor
desea agradar y recibir afecto y seguridad en tanto el padre
desea satisfacer sus fantasías sexuales.
 El uso de jerarquía del adulto hacia la menor, en tanto la niña

acata instrucciones y acepta dicha jerarquía por un código moral
que la niña empieza a instaurar.
 La vulnerabilidad que la menor presente de acuerdo a la etapa

formativa y de desarrollo psicosexual.
TERCERA.- En cuanto a las vivencias de abuso sexual por parte de

su tío **********, el cual implica conductas lascivas sin que ella por su
edad, nivel de estimulación y repertorio tuviese plena conciencia de
los hechos y las intenciones reales de éste provoca en la menor la
resignificación de los eventos y situaciones que ha mantenido con
su señor padre.
Por lo anterior se sugiere que permanezca bajo los cuidados de su

señora madre, considerando que de momento la menor se siente
protegida por ésta, a más de que se detecta la necesidad de que la
menor mantenga situaciones de tratamiento y seguimiento
profesional para que aprenda a manejar, diluir y eliminar los efectos
provocados porque presenta en sus diferentes áreas y esferas por
efecto de las conductas delictivas a las que fue víctima.
Se sugiere que la menor sea canalizada a C.T.A. (centro de apoyo

de delitos sexuales) de esta procuraduría en **********. Firmas y
rúbricas.”116
116
Este dictamen se puede apreciar en los anexos remitidos por la autoridad responsable al rendir
su informe justificado.
192
Así, ante la declaración efectuada por la menor

ante la autoridad ministerial en donde personalmente acusa a su padre
de tocarle la “colita” y la oposición de los dos dictámenes referidos, en
tanto que hay uno en donde se concluye que la menor ********** sí
presenta indicadores psicoemocionales asociados a los que se han
identificado en menores víctimas del delito de corrupción de menores
de tipo sexual, la obligación del juzgador era investigar en la
medida de lo posible, si la acusación de la menor obedecía a una
manipulación o alienación por parte de la madre como afirma el
padre; o si por el contrario, ésta podría tener sustento en las
propias conductas del padre, lo que en la especie no aconteció a
pesar de que de las constancias de autos y los anexos respectivos, se
desprende que por un lado, en la averiguación previa antes
referida, existe otro dictamen en el que se señala que a
consecuencia de la agresión sexual vivida, la niña ofendida
presenta alteraciones afectivas y que por otro, la acusación de la
menor en contra su padre fue reiterada por la propia menor en
diversas declaraciones.
En efecto, se afirma que existe otro dictamen en el que se señala

que a consecuencia de la agresión sexual vivida la menor presenta
alteraciones afectivas, porque a pesar de que la autoridad responsable
no remitió la totalidad de las constancias que integran la averiguación
previa **********, en el legajo de copias certificadas por el Agente del
Ministerio Público, que se remitieron como anexo, se encuentra un
escrito de fecha veintiséis de marzo de dos mil nueve, signado por
**********, en su carácter de defensor de **********, en el que se hace
referencia a un dictamen en Psicología, suscrito por la perito **********,
adscrita al Centro de Terapia de Apoyo a Víctimas de Delitos
Sexuales, afirmando que en él se señala en síntesis lo siguiente:
193
“En presencia de la madre de niña ofendida ********** con el fin de

indagar los hechos denunciados, se procedió a establecer clima de
confianza con la niña ofendida mediante actividades lúdicas, cuando la
niña ofendida se mostró extrovertida participando en el juego, se
procedió a indagar los hechos denunciados refiriendo de manera
libre y literal “Mi papá ********** (presunto responsable) me tocó la
colita por donde hago pipí en casa de mis abuelos en Cuernavaca
fue en su cuarto de mis abuelos en la cama, estábamos solos tres
veces.”
“… A consecuencia de la agresión sexual vivida la niña ofendida

presenta alteraciones afectivas, tales como ambivalencia de
sentimientos hacia el padre (ahora procesado), pues desea seguir
conviviendo con él por el lazo afectivo que existe entre ellos
(amor), sin embargo existe temor y tristeza de volver a ser
agredida pues esto genera en la niña ofendida sensación de
desagrado, así como afligida pues no le agradó lo que el presunto
responsable le hizo, a lo que refiere “me da miedo de que mi papá
me vuelva a hacer así, no me gustó y me siento triste porque mi
papá me tocó, quiero ver a mi papá porque lo quiero pero que no
me toque otra vez” cuando expresó lo anterior se percibe que la
niña ofendida aumentó su nivel de ansiedad y angustia
percibiéndose tensión en su cuerpo canalizada hacía su postura
pues por un tiempo prolongado se mantuvo en una posición
rígida. La niña ofendida presenta alteraciones en su desarrollo
psicosexual de acuerdo a su edad, por haber sido sobre-
estimulada manifestándose con conductas de hipersexualidad
pues manifiesta necesidad de estimulación sexual (tocamientos
de sus genitales) convirtiéndose en compulsivos, sin embargo
estas conductas han disminuido pues la niña ofendida expresó:
“cuando mi papá me tocaba la colita sentía cosquillitas en la colita
y en la panza me gustaba como se sentía un poquito rico, yo si me
tocó mi colita a veces se siente rico en la noche pero ya no tanto,
siento rico en mi panza.” Cuando la niña ofendida expresa lo
anterior se aprecia enrojecimiento en su rostro, así como
194
esconder su mirada a la que suscribe denotando

que lo anterior le provoca sentimiento de
vergüenza.”117
Del mismo modo se afirma que existen diversas declaraciones

de la menor *********** en donde acusa a su progenitor de tocarle la
colita, porque en el mismo escrito de fecha veintiséis de marzo de dos
mil nueve, signado por **********, en su carácter de defensor de
**********, se hace referencia a una declaración rendida por la citada
menor el dieciséis de enero de dos mil nueve, ante la Fiscalía para
Menores de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal,
afirmando que ella señala en síntesis lo siguiente:
“… acompañada de la licenciada **********
… y que su papá no vive con ella porque el tocaba su colita…

…se le pregunta a la menor si alguien más le tocaba su colita y refiere
la menor que sí, el personal de actuaciones le pregunta que quien, y la
menor responde que su tío ********** también le tocaba su colita…
… se le pregunta a la menor dónde estaba cuando su tío ********** le

tocaba su colita y la menor responde la menor (sic) que een (sic) la
casa de sus abuelos en Cuernavaca y también en la otra casa de sus
abuelos en México.
… El personal de actuaciones le pregunta a la menor en donde

estaba cuando su papá le tocaba la colita, la menor responde que
en Cuernavaca y donde vivían antes cuando todos vivían juntos,
su papá, su mamá ella y sus hermanitas, en el edificio de Polanco.
… Se le pregunta a la menor porque se ha tocado su colita y la

menor responde que se ha tocado porque su papá y su tío
********** (sic), antes le tocaban su colita.
117
Ver foja 17 del anexo.
195
… El personal de actuaciones le pregunta a la menor si ya no desea

responder a las preguntas y la menor responde que si desea
responder, pero que le da pena tocarse su colita porque su mamá
le ha dicho que la colita no se toca y que no le gusta lo que le
hacía su papá y su tío porque la colita no se toca, pero que no
sabe porque ella solita se toca su colita adentro de su calzoncito y
de su pijama…”118
Aunado a ello, de la copia certificada del expedientillo **********,

formado con motivo de la comparecencia de ********** ante la Juez
Décimo Noveno de lo Familiar del Distrito Federal, solicitando la
suspensión provisional del régimen de visitas y convivencias que
********** tendría con sus menores hijas el día ocho de enero de dos
mil once, en el Centro de Convivencia Familiar Supervisada del
Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, se desprende que el
siete de enero de dos mil once, la referida juzgadora tuvo una plática
con la menor **********, en la cual dicha niña expresó lo siguiente:
“… que quiere mucho a su mamá y al preguntarle a la menor de si

quería a su papá, solo hizo un gesto y se queda callada, que
manifiesta que le tocaba la colita cuando vivía con él, que la
menor se sujeta los antebrazos del sillón cuando contesta, que ya
no ha pasado con su papá, que la menor va al psicólogo, sólo una
vez, que se llama **********, que es grande, y platica mucho con
ella, que su mamá la trata bien que cuando ella no hace la tarea o sus
quehaceres su mamá la regaña, que la menor no hace travesuras, que
su papá y su mamá no se peleaban cuando estaban juntos, que la
menor cuando ve a su papá en el centro de convivencias ella se
siente bien porque su papá no le da miedo, que su papá sólo le
tocó una vez su colita y ella tenía como cuatro años o tres y que
nadie mas estaba con ella, y le dijo la menor que no le gustaba y
su mamá le dijo que se iban a ir de esa casa, que nunca vio a su
papá que él se tocara alguna parte de su cuerpo, que su papá ha
118
Ver fojas 21 y 22 de la copia certificada por el Ministerio Público remitida como anexo.
196
visto películas de personas que se encuentran

desnudas, que su papá casi no está en la casita del
centro de convivencias con la menor y está más tiempo en ella, que su
papá no le pega pero que sólo la regaña como la vez que no quería
comer, que la menor vino al juzgado porque la mamá la trajo, que le
dijo que iban a venir a ver a la juez para acompañarla y para hablar
para que ya no vaya su mamá al centro de convivencias y se pueda ir
de vacaciones la menor, que la menor ya no quiere ir al centro de
convivencias, pero quiere seguir viendo a su papá, que su papá la
quiere a ella y a sus hermanas, que la menor lo quiere poquito a su
papá, que está enojada la menor con su papá porque le tocó la
colita, que la menor no se quiere acordar que su papá la tocó, que
no sabe si sus papás están enojados…”
Luego si se tiene en consideración que dicha juzgadora también

platicó con **********, y ésta le manifestó lo siguiente:
“… refiere la menor que no tiene papá, que su mamá se llama (sic),

que su papá se llama ********** y que no es su papá, que es malo
porque le tocó a su hermana la colita, que se lo contó su hermana
**********...”
Y que además, la asistente de menores presente en dichas

pláticas señaló lo siguiente:
“… tomando en cuenta las manifestaciones de las menores de edad y

atendiendo al interés superior de las mismas, se observó que dichas
menores se encuentran afectadas por la problemática familiar que
viven y en relación a la menor ********** se observa que menciona
haber tenido un incidente con su papá en el cual ella misma
comenta que le tocó la colita, que esto le molestó y que por eso
está enojada con él, y de igual forma menciona que ha visto a su
papá viendo películas donde hay gente desnuda y estás
manifestaciones las hace con cierta reserva, se observa
avergonzada y refiere que no quiere acordarse de lo sucedido, por
197
lo que sugiero, que referente a lo antes observado, se le practique a la

menor ********** un estudio psicológico, para saber si la misma ha sido
víctima de abuso sexual y referente a ello, se tenga un tratamiento
para dicha situación, …”119
Es evidente que el juzgador, atendiendo al interés superior de la

menor, estaba obligado a investigar sobre la veracidad o falsedad de
dichas declaraciones, lo que no hizo a pesar de que de las
constancias de autos y sus anexos se desprenden diversos aspectos
relacionados con las declaraciones de la menor que se pudieron
investigar a efecto de poder resolver con mayor objetividad lo que
resultase más conveniente para el sano desarrollo de las menores.
En efecto, los aspectos que se derivan de las constancias de

autos y sus anexos, sobre los que se pudo investigar son los
siguientes:
PRIMER ASPECTO QUE SE DEBIÓ INVESTIGAR.

Si como ya se analizó, de las constancias de autos se advierte
que la menor **********, ha realizado diversas declaraciones de las que
se desprende la aseveración de que su progenitor ********** le ha
tocado la colita, ante la existencia de dictámenes periciales
contradictorios, sobre si presenta o no, alteraciones afectivas o
indicadores psicoemocionales asociados a los que se han identificado
en menores víctimas de delitos de tipo sexual, la obligación del
juzgador, con independencia de lo resuelto en la causa penal
relacionada con la averiguación previa iniciada al respecto, era
investigar si la acusación de la menor obedecía a una manipulación
por parte de la madre como afirma el padre, o si por el contrario, ésta
podría tener sustento en las propias conductas del padre, lo que no
efectuó a pesar de que tal efecto pudo realizar lo siguiente:
119
Expediente **********, Tomo II, foja 1366.
198
 Ordenar el desahogo de una pericial en

psicología sobre la menor **********, a efecto de que a
través de los estudios o la aplicación de las baterías
que resulten específicamente aplicables o necesarias
al caso, se determine de manera concreta si la menor
presenta algún indicador, trastorno o conducta
asociada con algún abuso de tipo sexual, de ser así, se
indique en qué consiste dicho indicador, trastorno o
conducta; y de ser posible, el origen de éste. En caso
contrario, es decir de no advertirse lo anterior, precisar
en la medida de lo posible, y de acuerdo a los estudios
psicológicos que resulten apropiados para ello, cuál
pudo ser el motivo por el que la menor acusa a su
padre de haberle tocado la colita, si fue una
manipulación por parte de su madre o si pudo existir
alguna otra razón, en su caso, precisar cuál.
SEGUNDO ASPECTO QUE SE DEBIÓ INVESTIGAR.

De la demanda que dio origen al expediente **********, se
advierte que ********** señaló que desde el inicio de su matrimonio
********** tiene un problema o enfermedad de tipo sexual que acabó
por afectar a sus menores hijas, en tanto que de mañana, tarde y
noche acostumbra ver películas pornográficas y masturbarse, llegando
a tal grado, que ya ni se percataba o no le importaba hacerlo en
presencia de sus hijas, y que además, abusó sexualmente de su hija
**********, pues ésta le dijo que su padre le había tocado la “colita”, por
lo que ante esta situación, en el mes de junio de dos mil ocho se vio
obligada a salir del domicilio conyugal.
199
Ahora bien, aunque al responder la demanda instaurada en su

contra, ********** negó tener ese problema, señalando que jamás se ha
masturbado o visto pornografía enfrente de sus hijas y que sin ningún
motivo o justificación alguna abandonó el domicilio conyugal,
señalando además que la actora fue omisa en referir tales
acusaciones al contestar la diversa demanda instaurada en su contra
en el expediente **********.
Al respecto debe decirse que si bien es verdad que al contestar

la demanda instaurada en el expediente **********, **********no hace
referencia a las acusaciones que después menciona en la demanda
que dio origen al juicio natural del que deriva el acto reclamado en el
presente juicio de garantías, ello no es suficiente para desestimar tales
acusaciones y dejar de investigar sobre las mismas, en tanto la
denuncia penal correspondiente se realizó el diez de julio de dos mil
ocho, es decir, con anterioridad a la presentación de la demanda que
dio origen al expediente **********, la cual se presentó el catorce de
agosto de ese año,120 lo cual implica que las acusaciones referidas por
********** ya existían aún desde antes de que fuera demandada por
**********.
Por otro lado, aunque al contestar la demanda instaurada en su

contra, ********** niega que ********** haya abandonado el domicilio
conyugal por las razones que ésta afirma, señalando que lo abandonó
sin ningún motivo o justificación 121, lo cierto es que de las constancias
de autos se desprende que existen declaraciones de ********** en
donde acepta que el abandono del domicilio conyugal por parte de la
actora en lo principal, sí obedece a motivos relacionados con las
acusaciones que ella realizó en su contra.
120
Ver fojas 11 y 31 del legajo de copias certificadas extraídas del expediente **********, remitido
como anexo.
121
200
Se afirma lo anterior porque del estudio

socioeconómico practicado a **********, se desprende que en la
entrevista que sostuvo con el licenciado en Trabajo Social **********,
reconoce que su contraria abandonó el domicilio después de acusarlo
de abuso sexual en contra de una de sus hijas.
En efecto, del estudio socioeconómico mencionado se
desprende lo siguiente:
“En entrevista el señor ********** afirma lo siguiente:
 Nos separamos en razón a que la señora ********** mostró

ciertas inestabilidades emocionales, creando ideas falsas
de cosas que en realidad no sucedían. No cumple
adecuadamente con sus obligaciones y función de madre.
Ella quería imponer su criterio. Era una persona muy
cambiante. Cuando se va, lo hace porque tuvimos una
discusión. Me acusa de un supuesto abuso sexual
hacia una de mis hijas. Se va y se lleva a mis tres hijas
…”122
De igual manera, del dictamen pericial en psicología practicado

por la Licenciada **********, se advierte que en la entrevista sostenida
con el demandado en lo principal a efecto de establecer los datos
personales y familiares, éste reconoce que la problemática que dio
origen a la separación y abandono de su esposa obedeció a
cuestiones relacionadas con una masturbación.
Ello es así, pues en dicho dictamen se establece lo siguiente:
“DATOS PERSONALES Y FAMILIARES

[...]
122
Expediente **********. Tomo III. Foja 59.
201
Explica que la problemática comenzó cuando en una ocasión su

ex pareja lo encontró en el baño masturbándose, por lo cual
tuvieron una discusión donde lo corrió de la casa, por lo que se fue
durante tres días, posteriormente regresó y en otra ocasión lo volvió a
123
correr …”
Aunado a lo anterior, en la prueba confesional a su cargo, al

responder las posiciones marcadas con los números 6 y 10, **********,
acepta que sí veía películas pornográficas y reconoce que sí se
masturbaba.
Se afirma lo anterior, porque las posiciones y respuestas dadas a

las mismas son las siguientes:
“6. ¿Qué usted veía páginas pornográficas en internet en el domicilio

Conyugal ubicado en calle de **********?
Respuesta:
“Que si es cierto, aclarando si alguna vez mas no en los términos en
los que mi contraparte me acusa o señala.”
“10. ¿Qué usted se masturbaba en el domicilio conyugal ubicado en

calle de **********?
Respuesta:
“Que si es cierto, aclarando durante cinco años viví ahí, pero no en
los términos en los que me acusa mi contraparte, aclarando que era en
un lugar privado.”
Lo anterior resulta trascendente, no sólo porque de las

constancias de autos se advierte que ********** reconoce que el
abandono del domicilio conyugal sí se relaciona con las acusaciones
hechas en su contra, sino porque además acepta que sí se
123
Ibídem. Foja 78.
202
masturbaba y veía películas pornográficas en el

domicilio conyugal, pues aunque aclara que no lo
hacía en los términos que refiere su contraria, lo cierto es que de la
demanda inicial se desprende que **********manifestó que debido a
que los problemas que presentaba ********** con relación a su
necesidad de ver películas pornográficas y masturbarse ya eran
insostenibles, en noviembre de dos mil tres inició terapias con el
psiquiatra ********** y con posterioridad en marzo del año dos mil seis
acudió con el doctor ********** en la CLÍNICA **********.
Para acreditar que el demandado acudió con el doctor citado en

segundo término, la actora exhibió diversos recibos de pago de
honorarios extendidos por el doctor ********** el veintitrés y treinta de
abril, nueve, dieciséis, veintiuno y veintiocho de mayo, cuatro y once
de junio de dos mil ocho, así como tres recetas médicas expedidas por
dicho profesional el veintisiete de septiembre y veinticinco de octubre
de dos mil seis, así como el treinta de abril de dos mil ocho 124
(documentos que como se advierte fueron expedidos con anterioridad
al abandono del domicilio conyugal).
Al respecto el demandado acepta haber acudido con dichos

profesionales, y aunque señala que con el primero acudieron ambas
partes de manera independiente para tratar de resolver los problemas
conyugales que tenían y no discutir125, respecto del segundo reconoce
que acudió a consultas con él, limitándose a señalar que: “El hecho de
que la actora exhiba ante ese Juzgado facturas de pago de honorarios
de un médico no acredita la veracidad de su dicho, simplemente
acredita que el suscrito acudió a ver a un médico y por tanto en nada
le benefician.”126
124
Estos documentos se pueden apreciar en los anexos remitidos por la autoridad responsable.
125
126
203
La aceptación de haber acudido ante el primer médico se

corrobora con la confesional a cargo de **********, pues si bien al
responder la posición marcada con el número 13 inicialmente lo niega,
después acepta haber acudido con dicho especialista.
En efecto, el contenido y la respuesta dada a esa posición es el

siguiente:
“13. ¿Qué usted acudió a terapia psiquiátrica con el **********”
Respuesta:
“Que no es cierto, aclarando, no fui a terapia fui a dos consultas eso
no es una terapia.”127
Con relación al segundo especialista, si bien al contestar la

posición número 14, niega haber acudido con el doctor **********, lo
cierto es que esa negativa se desvanece con lo manifestado en la
contestación de demanda, además como quiera que sea, al responder
dicha posición reconoce estar acudiendo con él.
En efecto el contenido y la respuesta de la posición número 14

es el siguiente:
“14. ¿Qué usted acudió a terapia psicológica con el **********?”
Respuesta:
“Que no es cierto, aclarando que el doctor no es psicólogo, es
psiquiatra y acudo con él por el efecto de una depresión que me ha
generado el llevar prácticamente siete meses sin ver a mis hijas y por
las constantes amenazas de mi contraparte y de su padre para
limitarme el acceso a mis hijas.”128
127
128
204
Luego, aunque al responder la posición antes

mencionada, ********** afirma que acude con el doctor ********** por la
depresión de que su contraria se llevó a su hijas, lo cierto es que
también reconoció haber acudido con él con anterioridad a que ésta lo
abandonara, pues así se desprende de la contestación de la demanda
y de los recibos de honorarios y recetas que la actora anexo al libelo
inicial, lo cual implica que cuando acudió a él en las ocasiones que
menciona la actora, no pudo ser por la depresión que menciona, pues
ésta todavía no lo abandonaba llevándose a sus hijas.
Así, aunque es verdad lo que afirma el demandado en el sentido

de que el hecho de acudir con determinados médicos por sí solo no
demuestra que haya aceptado tener problemas de índole sexual
relacionados con las acusaciones de su contraria, lo cierto es que
atendiendo a lo manifestado por ambas partes, sí constituye un
aspecto que ameritaba ser investigado por el juzgador, a efecto de
determinar si ********** presenta o no un problema de índole sexual
que pueda poner en riesgo a sus hijas, pues no se puede perder de
vista que ********** señaló haber visto a su padre viendo películas
donde hay gente desnuda y que existen dictámenes periciales en
donde se señala que la menor manifestó haber visto a su padre
tocándose su colita “… como si se estuviera tocando un dedo” y que
además, hay dictámenes periciales que indican que la menor pudo
haber presenciado conductas masturbatorias del padre.
Aunado a ello, también existe el testimonio de **********, en

donde afirma que el propio demandado le platicó acerca de los
problemas que tenía con la masturbación.
205
En efecto, dicho testigo en lo que al tema interesa manifestó lo

siguiente:
“… ********** aceptó hablar conmigo y me dijo que pasaba por mí en

aproximadamente media hora, después llegó y me informa que se le
quedaron las llaves en el coche pegadas y con el motor prendido
entonces había que traer un cerrajero pero el me dijo que sería más
fácil ir al departamento por el duplicado y así lo hicimos y tome mi
coche y en el camino me empezó a platicar sobre los problemas
que tenían aceptando él que se masturbaba, cuando llegamos al
departamento seguimos platicando al respecto y me hizo una
demostración, reconstrucción de hechos porque yo sabía que mi
nieta ********** lo había visto masturbándose, en la habitación que
describí anteriormente la cuna de mi nieta que estaba vertical
hacia la puerta y la puerta del cuarto de televisión paralela y
después la computadora donde él veía pornografía y se
masturbaba, la distancia que debe haber entre el sillón en donde
él se sentaba y la cuna de mi nieta no son más allá de seis metros
esto lo sé porque me dedique a la decoración y se leer cuantos metros
hay de un lugar a otro, después de ese momento ********** tuvo una
serie de cambios de comportamientos, lloro me abrazó y ya
hablaba de la masturbación con una libertad absoluta como si se
hubiera liberado….”129
Así, ante esta situación, atendiendo al interés superior de las

menores, el juzgador a efecto de poder resolver lo más
conveniente para ellas, tenía la obligación de investigar si
********** tenía o no una patología de índole sexual que pudiera
poner en riesgo a sus menores hijas, lo que no efectuó a pesar de
que para tal efecto pudo realizar lo siguiente:
 Ordenar el desahogo de periciales en psiquiatría y

psicología sobre **********, a efecto de que en sus
129
206
respectivos campos de especialidad y a

través de los estudios o aplicación de las
baterías correspondientes, se determinara de manera
especifica si dicha persona presenta o no una patología
de tipo sexual que pueda poner en riesgo el sano
desarrollo de sus menores hijas, en su caso, por qué y
de qué manera.
Ello es así, pues aunque la parte actora ofreció ambas pruebas,

lo cierto es que con relación a la pericial en psicología se desistió 130, y
respecto de la segunda, si bien la parte actora nombró como perito
psiquiatría al doctor ********** y la demandada designó a **********, lo
cierto es que éste último, como se analizó con anterioridad, no
demostró contar con la especialidad en psiquiatría; y si bien el primero
respondió los cuestionamientos formulados, lo cierto es que
expresamente señaló que por el momento no podía llegar a algún
diagnóstico presuncional o definitivo en tanto que para ello era
necesario profundizar su evaluación con una batería de pruebas
psicológicas que midan el manejo y control de impulsos, así como el
desarrollo de la personalidad131.
En efecto, los cuestionamientos formulados con motivo de esa

probanza fueron respondidos por dicho perito de la siguiente manera:
“1.- Por la entrevista realizada al señor ********** y ante la negación del
paciente de tener alguna desviación o compulsión en su patrón de
comportamiento sexual, donde refiere masturbación ocasional en la
intimidad y visualización de material pornográfico ocasional vía
internet, lo cual podría ser considerado un comportamiento habitual
dentro de los parámetros de la normalidad para su edad y género
sexual; así como alteraciones francas en su rendimiento laboral y
relaciones interpersonales de índole social, aunado a que en el
130
131
207
examen del estado mental practicado, no se detectan serias

alteraciones en su nivel de conciencia, memorias, lenguaje, discurso,
forma, curso y contenido del pensamiento así como en su estado
afectivo y juicio lógico y práctico, no se puede concluir que el
paciente tenga una clara patología psiquiátrica manifiesta. Será
necesario profundizar en su evaluación por medio de una serie de
pruebas psicológicas que midan control de impulsos y desarrollo
de personalidad.
2.- Debido que será necesario esperar la evaluación psicológica

de la menor (hija del señor ********** y la señora **********), no se
puede concluir que el señor ********** no pueda vivir con sus hijas.
3.- En caso de que se demuestre que el señor ********** tiene algún
trastorno en el control de impulsos sexuales, así como preferencia
sexual por menores de edad (pedofilia) será necesario que el señor
reciba tratamiento psiquiátrico por especialista en desordenes
sexuales.
4.- Por ahora no puedo llegar a definir algún diagnóstico

presuncional o definitivo.
5.- En caso de que se demuestre que el señor ********** tiene

algún tipo de trastorno dentro del control de los impulsos
sexuales y un desorden de la conducta sexual (pedofilia) sin que
haya recibido ningún tipo de tratamiento, el señor puede
representar un peligro potencial ya sea físico o emocional para las
personas que convivan con él.”132
Lo anterior, implica que el juzgador dictó sentencia sin tener

certeza del estado psiquiátrico del demandado, en tanto que tampoco
nombró un perito tercero en discordia, ni ordenó el desahogo de las
pruebas psicológicas señaladas por el perito designado por la actora.
132
208
Luego, aunque no pasa inadvertido que la

pericial en psicología fue ordenada por la autoridad
responsable al momento de reponer el procedimiento, lo cierto es que
dicha probanza sólo fue ordenada en los siguientes términos:
“… se sirva practicar los estudios psicológicos a las partes y a los

menores hijos de las partes, en cuanto a los primeros se determine si
han sido víctimas de violencia familiar, quien es el receptor y quien el
generador, personalidad de los mismos, trastornos, la repercusión en
el núcleo familiar y el grado de afectación; y en relación a las
menores…”133
Es decir, no se ordenó para que a través de ella se analizara de

manera específica si ********** presenta o no un trastorno de la
personalidad relacionado con algún problema de tipo sexual, que
permita determinar si tiene o no una patología de tipo sexual que
pueda poner en riesgo el sano desarrollo de sus menores hijas, sino
que fue ordenada en términos generales sin poner especial atención
en el problema de fondo, ello aunado al hecho de que de cualquier
manera, el dictamen rendido al respecto no puede servir para
determinarlo, en tanto que ni siquiera responde de manera específica
los cuestionamientos por los cuales se ordenó.134
Atendiendo a lo anterior, con independencia de que la actora

hubiese o no cumplido con la carga probatoria que de inicio le
correspondía, teniendo en cuenta que las menores involucradas en la
controversia requieren de una protección legal reforzada, el juzgador
estaba obligado a recabar las pruebas que resultasen necesarias a fin
de asegurar que la manera de resolver la controversia resultaría
acorde con su interés, lo que en el caso no aconteció, pues para ello
debió ordenar el desahogo de las pruebas periciales referidas, a efecto
133
134
Ver dictamen que obra agregado de la foja 75 a 84 del Tomo III del expediente **********.
209
de que en sus respectivos campos de especialidad y a través de los

estudios o aplicación de las baterías correspondientes, se determinara
si ********** presenta o no algún trastorno o patología de índole sexual;
y en su caso, si ello puede poner en riesgo a sus menores hijas, por
qué y de qué manera.
TERCER ASPECTO QUE SE DEBIÓ INVESTIGAR.

De acuerdo con lo analizado al estudiar el síndrome de
alienación parental frente al abuso sexual, en los casos de abuso
sexual, el menor puede presentar conductas sexualizadas como son
muestras de una masturbación excesiva e indicadores físicos como
infecciones.
En ese orden de ideas, si en el escrito de demanda la actora

manifiesta que a raíz de que la menor le comentó que su papá y su tío
le raspaban con los dedos la colita decidió llevar a la menor con la
psicóloga **********; y al respecto el demandado manifiesta que la
razón por la que acudieron con esa doctora obedece a que en el mes
de marzo de dos mil ocho, su hija ********** comenzó con una
infección urinaria y al no quitársele esa infección acudieron con su
médico pedíatra **********, y en la consulta respectiva la actora le
manifestó al médico que su hija había acusado a un niño de su salón
de haberla lastimado en su zona genital; que saliendo de la consulta la
actora fue al colegio de la niña y como la maestra de la menor y la
psicóloga de la escuela le explicaron que ello no podía ser, coordinó
una cita con la doctora **********.
De lo anterior, destaca que según lo manifestado por el

demandado, desde el mes de marzo de dos mil ocho, la menor
comenzó a sufrir una infección urinaria.135
135
210
Ahora bien, de las copias certificadas por el

Agente del Ministerio Público remitidas como anexo, se advierte que
********** le dirigió un escrito al doctor **********, en el que le informa
que la madre de sus hijas ha realizado diversas imputaciones en su
contra, basándose entre otras cosas, en que a decir de la actora, él le
había informado en una consulta con ********** que “no había sido
penetrada, pero alguien manipula sus genitales, específicamente su
área púbica”; y por esa razón, le solicita que por escrito le haga saber
la verdad de lo ocurrido.136
En respuesta a esa solicitud, en escrito de fecha diez de marzo

de dos mil nueve, el doctor ********** le informó que la menor “fue vista
a los 3 años 4 meses de edad y el dieciséis de junio de dos mil ocho,
por irritación perineal que correspondía a una vaginitis inespecífica
(común en niñas de esta edad dependiente de aseo de la región)…” 137
Con motivo de esta situación, a dicho médico se le cita en la

averiguación previa correspondiente, razón por la que en fecha
veintitrés de abril de dos mil nueve, compareció ante la Fiscalía
Central en Investigación para Delitos Sexuales, Agencia Investigadora
del Ministerio Público, Unidad de Investigación **********, Tercer turno,
indagatoria **********, manifestando que tiene treinta y dos años de
ejercer profesionalmente y que ratifica en todas y cada una de sus
partes la constancia expedida el diez de marzo de dos mil nueve, en la
que señaló que la menor ********** fue atendida a los 3 años 4 meses
de edad, y el día dieciséis de junio de dos mil ocho, diagnosticándole
irritación perineal que correspondía a una vaginitis inespecífica (común
en niñas de esta edad dependiente de aseo de la región),
comprometiéndose a exhibir el expediente clínico de la menor.
136
Copia certificada por el Agente del Ministerio Público. Foja 33.
137
Ibídem. Foja 34.
211
En dicha comparecencia aceptó que se le realizaran diversas

preguntas, las cuales contestó de la siguiente manera:
“1.- QUE DIGA QUIÉN PRESENTÓ A LA MENOR PARA QUE EL

DECLARANTE LA VALORARA.- RESPUESTA.- LA MAMÁ DE LA
NIÑA; 2.- QUE DIGA SI SABE CÓMO SE LLAMA LA MADRE DE LA
MENOR.- RESPUESTA.- **********; 3.- QUE DIGA CUÁL FUE EL
MOTIVO DE LA PRESENTACIÓN DE LA MENOR.- RESPUESTA.-
QUE TENÍA FLUJO VAGINAL Y UNA IRRITACIÓN PERIANAL (SIC);
4.-QUE DIGA CUÁL FUE SU DIAGNOSTICO.- RESPUESTA COMO
LO HIZO CONSTAR EN EL DOCUMENTO QUE YA HA SIDO
RATIFICADO FUE DE VULVO VAGINITIS INESPECÍFICA Y SE
RECOMENDÓ ASEO Y POMADA LOCAL; 5.- QUE DIGA EN QUÉ
CONSISTE LA VULVO VAGINITIS.- ES UNA IRRITACIÓN DE LA
REGIÓN PERIANAL (SIC) QUE PRODUCE PRODUCCIÓN DE
MOCO; 6.- QUE DIGA LAS CAUSAS DE DICHO PADECIMIENTO.-
RESPUESTA.- GENERALMENTE ESTÁ RELACIONADA AL ASEO DE
LOS GENITALES, CUANDO PUEDEN ARRASTRARSE GÉRMENES
DEL ANO HACIA LA VAGINA O EN EL CASO DE LAS NIÑAS QUE
YA CONTROLAN ESFÍNTERES DEJARSE PEDACITOS DE PAPEL
QUE IRRITAN LA REGIÓN PERIANAL (SIC).- QUÉ DIGA SI EXISTE
OTRA CAUSA QUE PUEDA PROVOCAR DICHO PADECIMIENTO.-
RESPUESTA EN GENERAL NO, PARA LA VULVO VAGINITIS
INESPECÍFICA NO; QUE DIGA SI LA MADRE DE LA MENOR LE
COMENTO QUE HABÍA SIDO VICTIMA DE ALGÚN ABUSO
SEXUAL.- RESPUESTA NO; 8.- QUE DIGA SI EL DECLARANTE
REFIRIÓ A LA MADRE DE LA MENOR QUE NO HABÍA SIDO
PENETRADA LA MENOR.- RESPUESTA.- NO; 9.- QUE DIGA SI
RECOMENDÓ A LA MADRE DE LA MENOR SE LE PRACTICARA UN
EXUDADO VAGINAL A LA MENOR.- RESPUESTA.- LE MANIFESTÉ
QUE SI PERSISTÍA LA IRRITACIÓN LE REALIZARA UN EXUDADO
VAGINAL, QUE ES LO QUE SE HACE EN TODOS LOS CASOS QUE
SE VEN FRECUENTEMENTE EN NIÑAS DE ESTA EDAD Y PARA
DETERMINAR EL GERMEN CAUSAL.- 11.- CUÁL ES LA EDAD A LA
QUE SE REFIERE EN LAS QUE SE PRESENTA ESTE
212
PADECIMIENTO.-RESPUESTA ENTRE LOS TRES

Y CINCO AÑOS QUE EMPIEZAN A ASEARSE
ELLAS SOLAS; 12.- QUE DIGA SI EXISTE LA POSIBILIDAD DE QUE
EL PADECIMIENTO DE LA MENOR SE DEBIERA A LA
MANIPULACIÓN DE SU ÁREA GENITAL.- NO LO SE; 13.- QUE
DIGA CUÁL FUE LA ACTITUD DE LA MENOR EN EL MOMENTO DE
SU VALORACIÓN.- RESPUESTA.- ERA COOPERADORA CONMIGO,
LE REALICE UNA INSPECCIÓN VISUAL DE SUS GENITALES; 14.-
QUE DIGA CUÁL ERA EL CUADRO QUE PRESENTABA LA
MENOR.- RESPUESTA.- PRESENTABA UNA LIGERA IRRITACIÓN
DE LA PIEL, SIN OTRAS MANIFESTACIONES.- 14.- QUE DIGA SI
LE HIZO ALGUNA PREGUNTA A LA MENOR **********.-
RESPUESTA.- NO RESPECTO DE SU PADECIMIENTO NO, SÓLO
BROMEÓ CON MIS PACIENTES PEQUEÑOS AL REVISAR SU
CORAZÓN, SU PULMÓN SUS PIERNAS, SUS PIES, SUS OÍDOS;
15.- QUE DIGA SI REVISÓ A LA MENOR SOLA EN PRESENCIA DE
SU MADRE.- RESPUESTA.- LA REVISE EN PRESENCIA DE SU
MAMÁ COMO SIEMPRE.”138
Así, a petición del doctor **********, el día once de mayo de dos mil
nueve, compareció ante la autoridad investigadora ********** a efecto
de exhibir en una foja tamaño carta escrita por ambos lados, el
original de la historia clínica de la menor, para que previo cotejo y
certificación de la misma le fuera devuelto, misma que en la parte
posterior, en el área de observaciones e indicaciones, señala lo
siguiente:
“…
08 06 2-6 Flujo Vaginal
17 kg, 105 Dx Vaginitis inespecífica
BA y cuten”
Ahora bien, a pesar de que el doctor ********** manifestó ante la

autoridad ministerial tener treinta y dos años de experiencia
138
Ibídem. Foja 46.
213
profesional, cuando fue cuestionado sobre las causas que pueden

provocar una vaginitis inespecífica como la diagnosticada a la menor,
señaló que generalmente está relacionada al aseo de los genitales,
cuando pueden arrastrarse gérmenes del ano hacia la vagina o en el
caso de las niñas que ya controlan esfínteres dejarse pedacitos de
papel que irritan la región perineal, y que en general no existe otra
causa que la pueda provocar, incluso al preguntársele si existía la
posibilidad de que el padecimiento de la menor se debiera a la
manipulación de su área genital, expresamente manifestó “ NO LO
SE”.
Este aspecto resulta trascendente, porque de las copias

certificadas por el Ministerio Público remitidas como anexo, se advierte
que en la averiguación previa **********, se ordenó una pericial en
materia de medicina, a efecto de determinar qué es una irritación
perineal, cuáles son las causas de una irritación perineal, qué es una
vaginitis inespecífica, y determinar si la irritación perineal
correspondiente a una vaginitis inespecífica presentada por la menor
pudiera haber sido consecuencia o no de la manipulación de los
genitales de la menor.139
El dictamen correspondiente a esa pericial, se rindió el cuatro de

junio de dos mil nueve por la perito médico forense, doctora **********,
en los siguientes términos:
“ELEMENTOS DE CRITERIO
1).- Historia clínica pediátrica del hospital con logotipo de mi mamá
integral de fecha 2/18/2008 a nombre de ********** firmada por el
********** en la cual se refiere diagnostico flujo vaginal, vaginitis
inespecífica.
139
Ibídem. Foja 159.
214
2).- Dictamen médico ginecológico y

proctológico emitido en esta institución a la menor
********** de fecha 18 de julio 2008. Firmada por la suscrita en la cual
refiero: Examen ginecológico.- pubis desprovisto de vello, genitales
externos infantiles en vías de desarrollo de acuerdo a edad y sexo,
labios mayores cubriendo a los menores y estos adosados entre sí,
observándose en esta área ligera hiperemia (enrojecimiento) y en
malas condiciones de higiene, horquilla integra, himen de forma
anular integro y en el momento sin datos clínicos de enfermedad por
transmisión sexual. Examen proctológico.- glúteos y espacios inter
glúteos sin alteraciones. Esfínter anal externo con tono conservado,
pliegues anales radiados y bien definidos, íntegros, mucosa anal
externa sin alteraciones. Conclusión Ginecológico himen integro no
elástico, en el momento sin datos clínicos de enfermedad por
transmisión sexual. Examen proctológico sin alteraciones anatómicas
ni patológicas.
CONSIDERACIONES.
VAGINITIS: Es una enfermedad de la vagina
La leucorrea es la secreción que se encuentra en vía vaginal

producida por una infección.
Las molestias vaginales son muy frecuentes en la población general y

una de las consultas más frecuentes al médico. Los síntomas
vulvovaginales que se presentan son: comezón, ardor, irritación y
secreción anormal.
Las causas de 7 a 72% de las mujeres con vaginitis pueden

mantenerse sin ser diagnosticadas. En este grupo los síntomas pueden
ser causados por múltiples condiciones como vaginitis atrófica,
problemas diversos de la piel vulvar y vulvodinia.
VULVOVAGINITIS INESPECÍFICA.
Esta designación se ha dado en el pasado a las infecciones
vaginales que parecían no tener agente causal definido.
Actualmente vemos que lo púnico cierto es que el diagnostico de
215
“vaginitis inespecífica” deberá limitarse a las reacciones que se

presentan en las fases prepuberal y posmenopáusica durante las
cuales el epitelio vaginal adelgazado es muy susceptible a diversos
fenómenos irritativos, así como a los gonococos y muchos agentes
infecciosos inespecíficos. A la inversa, durante los años de
menstruación, el epitelio vaginal maduro resiste los ataques de estas
bacterias inespecíficas y de los gonococos, y deberá hacerse lo posible
por conocer la causa específica de la vaginitis. Pensando en la
naturaleza inofensiva de muchas infecciones vaginales: es muy fácil
calcular que el problema es inespecífico y prescribir algún antiséptico o
antibiótico general. Pero todas estas medidas son ineficaces en el
tratamiento de la enfermedad especifica y en algunos casos pueden
incluso prolongar la enfermedad o retardar el tratamiento definitivo.
Evidentemente, el tratamiento adecuado según el agente infeccioso,
dará mejores resultados. Incluso en los casos de vaginitis inespecíficas
en niñas es importante realizar el examen con especulo si la infección
inespecífica no cede al tratamiento local o sistemático.”
CONCLUSIÓN
1.- QUÉ ES UNA IRRITACIÓN PERINEAL
R.- ES UN ENROJECIMIENTO DE LA REGIÓN PERINEAL LA
CUÁL SE ENCUENTRA UBICADA ENTRE LA VAGINA Y EL ANO.
2.- CUÁLES SON LAS CAUSAS DE UNA IRRITACIÓN PERINEAL

R.- ES MULTIFACTORIAL PUEDEN SER: MALA HIGIENE,
CONTAMINACIÓN POR MALA TÉCNICA DE ASEO EN REGIÓN
ANAL HACIA REGIÓN VAGINAL, ROPA INTERIOR MUY
AJUSTADA, INFECCIONES DE VÍAS URINARIAS, MANIPULEO A
NIVEL VULVAR POR LA MENOR O TERCERAS PERSONAS,
INFECCIONES VAGINALES.
3.- QUE ES UNA VAGINITIS INESPECÍFICA.
R.- ESTA DESIGNACIÓN SE HA DADO EN EL PASADO A LAS
INFECCIONES VAGINALES QUE PARECÍAN NO TENER AGENTE
CAUSAL DEFINIDO. ACTUALMENTE VEMOS, QUE LO ÚNICO
CIERTO ES QUE EL DIAGNOSTICO DE “VAGINITIS INESPECÍFICA”
DEBERÁ LIMITARSE A LAS REACCIONES QUE SE PRESENTAN EN
LAS FASES PREPUBERAL Y POSMENOPAUSICA DURANTE LAS
216
CUALES EL EPITELIO VAGINAL ADELGAZADO

ES MUY SUSCEPTIBLE A DIVERSOS
FENÓMENOS IRRITATIVOS, ASÍ COMO A LOS GONOCOCOS Y
MUCHOS AGENTES INFECCIOSOS INESPECÍFICOS, A LA
INVERSA, DURANTE LOS AÑOS DE LA MENSTRUACIÓN EL
EPITELIO VAGINAL MADURO RESISTE LOS ATAQUES DE ESTAS
BACTERIAS INESPECÍFICAS Y DE LOS GONOCOCOS, Y DEBERÁ
HACERSE LO POSIBLE POR CONOCER LA CAUSA ESPECIFICA
DE LA VAGINITIS, PENSANDO EN LA NATURALEZA INOFENSIVA
DE MUCHAS INFECCIONES VAGINALES, ES MUY FÁCIL
CALCULAR QUE EL PROBLEMA ES INESPECÍFICO Y PRESCRIBIR
ALGÚN ANTISÉPTICO O ANTIBIÓTICO GENERAL, PERO TODAS
ESTAS MEDIDAS SON INEFICACES EN EL TRATAMIENTO DE LA
ENFERMEDAD ESPECIFICA Y EN ALGUNOS CASOS PUEDEN
INCLUSO PROLONGAR LA ENFERMEDAD O RETARDAR EL
TRATAMIENTO DEFINITIVO, EVIDENTEMENTE EL TRATAMIENTO
ADECUADO SEGÚN EL AGENTE INFECCIOSO DARÁ MEJORES
RESULTADOS, INCLUSO EN LOS CASOS DE VAGINITIS
INESPECÍFICAS EN LAS NIÑAS, ES IMPORTANTE REALIZAR EL
EXAMEN CON ESPECULO SI LA INFECCIÓN INESPECÍFICA NO
CEDE AL TRATAMIENTO LOCAL O SISTEMÁTICO.
4.- QUE DETERMINE SI LA IRRITACIÓN CORRESPONDIENTE A

UNA VAGINITIS INESPECÍFICA QUE PRESENTARA LA MENOR EN
FECHA 18 DE FEBRERO DEL AÑO 2008 (SIC), PUDIERA HABER
SIDO CONSECUENCIA O NO DE LA MANIPULACIÓN DE LOS
GENITALES EN LA MENOR.
R.- COMO YA SE MENCIONÓ EN LOS RUBROS ANTERIORES

PUEDE SER MULTIFACTORIAL Y EL MANIPULEO DE LOS
GENITALES SI ES UNA DE LAS CAUSAS POSIBLES.”
De esa pericial se advierte que si bien la vaginitis inespecífica

presentada por la menor puede obedecer a diversas causas en tanto
217
que es multifactorial, lo cierto es que una de esas causas, sí puede

obedecer al manipuleo de sus genitales (por ella o por terceros).
Este aspecto es trascedente, en razón de lo siguiente:
 El padre refiere que desde el mes de marzo de dos mil

ocho, la menor comenzó a sufrir una infección urinaria;
 El dieciséis de junio de dos mil ocho se le diagnosticó

vaginitis inespecífica;
 Como se indica en el propio dictamen, en el diverso

examen médico ginecológico realizado en julio de dos mil
ocho (es decir un mes después), se hizo constar que en el
área genital de la menor, se observó lo siguiente: “… labios
mayores cubriendo a los menores y estos adosados entre
sí, observándose en esta área ligera hiperemia
(enrojecimiento) y en malas condiciones de higiene”, y
 De las constancias de autos se advierte que al parecer esa

no es la única infección vaginal sufrida por la menor.
Se asevera lo anterior, porque de las constancias de autos se

advierte que en el escrito de reconvención ********** señala que con
fecha catorce de septiembre de dos mil ocho, su hija ********** fue
ingresada a urgencias del **********, sin que hasta esa fecha (veinte de
octubre de dos mil ocho) tuviera información sobre lo ocurrido en dicho
evento140; y con posterioridad, en el escrito de fecha ocho de mayo de
dos mil nueve, suscrito por **********, en su carácter de defensor de
**********, se señala que la razón por la que ingresó a dicho hospital se
debió a una infección vaginal por retención urinaria 141; no obstante,
140
141
Copia certificada por el Agente del Ministerio Publico remitida como anexo. Foja 125.
218
también se advierte que al rendir su testimonio

**********, en lo que aquí interesa manifestó lo
siguiente:
“TERCERA. Que el testigo sabe y le consta. Que la relación de

********** para con sus menores hijas, ha sido veía la televisión con
**********y la masturbaba, posteriormente la niña se masturbó sola
y se lastimó esto acabó en el ********** donde está asentado este
asunto, posteriormente se le negaron las visitas al padre, un juez, sin
embargo…”142
En ese orden de ideas, si además de que el demandado señala

que en marzo de dos mil ocho su hija comenzó con una infección
vaginal, que el dieciséis de junio de ese año se le diagnosticó vaginitis
inespecífica, que un mes después según el estudio ginecológico
presentó una ligera hiperemia (enrojecimiento), y en septiembre de
dos mil ocho fue hospitalizada en el **********, según su padre por una
infección vaginal por retención urinaria, y según su abuelo porque se
lastimó masturbándose, es evidente que el juzgador debió investigar al
respecto, pues además en la documental consistente relativa al
dictamen pericial en psicología rendido en expediente **********,
ofrecido como prueba por el demandado, se desprende que según lo
referido por el perito ********** le manifestó que “… su hija ********** se
masturba compulsivamente a tal grado que se ha lastimado
seriamente el área genital ...”143
En efecto, si tiene en cuenta que existen declaraciones 144 y

dictámenes periciales145 en los que se indica que la menor manifestó
142
143
144
Declaración referida por el defensor del demandado de dieciséis de enero de dos mil nueve,
rendida ante la Fiscalía para Menores de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
145
Dictamen psicológico victimal de 9 de marzo de 2009, suscrito por las peritos en psicología
********** y ********** y Dictamen en Psicología, suscrito por la perito **********, adscrita al Centro de
Terapia de Apoyo a Víctimas de Delitos Sexuales, referido por el defensor del demandado.
219
que su padre le tocaba la colita con los dedos y señala que ahora ella
sola se toca por las noches la colita adentro de su calzoncito y de su
pijama, porque siente un poquito rico y le gusta y siente cosquillitas
igual que cuando su papá la tocó, y además existen dictámenes
periciales en los que se concluye que la menor manifiesta necesidad
de estimulación sexual (tocamientos de sus genitales) convirtiéndose
en compulsivos, refleja culpas masturbatorias y una conducta
hipersexualizada, es claro que aún sin otorgar valor probatorio pleno a
esos dictámenes, ante las infecciones vaginales de la menor
reconocidas por las partes, aunque no coincidan en las causas de las
mismas, el juzgador debió investigar al respecto, situación que no
realizó de manera apropiada en razón de lo siguiente:
Si bien es verdad que el juzgador requirió al representante legal

del ********** a fin de que remitiera copia certificada del expediente
médico de la menor **********146, lo cierto es que no tuvo el cuidado de
requerir al representante de ese hospital a efecto de que manera
concreta manifestara si la menor fue internada en el mes de
septiembre de dos mil ocho, o en alguna otra fecha a partir de ese
año, si la razón de su internamiento obedeció a una infección vaginal,
y de ser así, qué clase de infección sufrió, si ésta pudo haber sido
causada por una masturbación o manipulación de los genitales de la
menor; y en su caso, de ser posible, especificar la causa concreta de
esa infección.
Aunado a ello, el juzgador tampoco tuvo el cuidado de verificar

con detenimiento la información que en cumplimiento a ese
requerimiento le fue enviada por el **********.
146
Expediente **********. Tomo I, Foja 271.
220
Se afirma lo anterior, porque si bien es verdad

que el referido hospital le remitió copia certificada del
expediente clínico de la menor, dicho juzgador no advirtió que este
expediente sólo se refiere a un ingreso de la menor al **********, en
fecha catorce de febrero de dos mil cinco, cuando según lo referido en
el citado expediente, la menor sólo contaba con un año ocho meses
de edad, lo cual implica que la información proporcionada por dicho
nosocomio, según lo referido por las partes, no está completa o en su
defecto, no fue ingresada a dicho hospital con posterioridad, lo que es
poco probable en tanto que según lo referido por **********, existe una
hoja de alta del ********** de fecha trece de septiembre de dos mil
ocho.
En tal virtud, atendiendo al interés superior de las menores, y en

especial el de **********, el juzgador a efecto de poder resolver lo más
conveniente para ella, tenía la obligación de investigar si dicha menor
además de la vaginitis inespecífica diagnosticada en junio de dos mil
ocho, sufrió alguna otra infección vaginal, y de ser así, qué clase de
infección, si ésta pudo haber sido causada por una masturbación o
manipulación de los genitales de la menor; y en su caso, de ser
posible, establecer la causa concreta de esa infección, lo que no
efectuó a pesar de que para tal efecto pudo realizar lo siguiente:
 Requerir al ********** a efecto de que de manera concreta

informara si la menor fue internada en el mes de
septiembre de dos mil ocho, o en alguna otra fecha a
partir de ese año, si la razón de su internamiento
obedeció a una infección vaginal, y de ser así, qué clase
de infección sufrió, si ésta pudo haber sido causada por
una masturbación o manipulación de los genitales de la
menor; y en su caso, de ser posible, especificar la causa
221
concreta de esa infección; requiriéndole además, copia

certificada de la totalidad del expediente o expedientes
clínicos formados en dicho hospital con relación a la
citada menor.
CUARTO ASPECTO QUE SE DEBIÓ INVESTIGAR.

De la demanda inicial se advierte que ********** manifiesta que
cuando su menor hija le comentó que lo más feo que le había pasado
era cuando su papá y su tío le raspaban con los dedos su colita,
decidió llevar a la menor con la psicóloga **********, a donde también
acudió **********.
También refiere que después de presentar la denuncia penal por

el delito de abuso sexual cometido en agravio de su menor hija
**********, ante la magnitud del problema que presentaba su hija, el
dieciocho de julio de dos mil ocho, la Subdirectora Clínica del Centro
de Terapia de Apoyo a Víctimas de Delitos Sexuales, la canalizó con
la doctora **********, adscrita a la Procuraduría General de Justicia del
Distrito Federal; dentro de dicha Procuraduría iniciaron un proceso
dentro del Sistema de Terapia para Menores y la psicóloga que
atendió a **********comentó que tenía depresión moderada y síntomas
de auto mutilación, razón por la que se encuentra en tratamiento
psiquiátrico clínico y emocional con la supervisión de la subdirectora
clínica **********, quien la remitió con el psiquiatra particular en la
Clínica **********, Doctor ********** (psiquiatra infantil) y con la dentista
particular **********, para evaluar y tratar las lesiones que su hija se
había inflingido.
También indica que la dentista le informó que el problema de su

hija se debía a grandes cargas de estrés emocional, y por ello era
222
necesario someterla a un tratamiento multidisciplinario

que incluya tratamientos profesionales en psicología y
psiquiatría.
Del mismo modo, indica que la terapia con el doctor ********** es

dos veces por semana y actualmente la doctora ********** está tratando
el daño emocional sufrido.
Ahora bien, para demostrar parte de esas afirmaciones, la actora

exhibió como prueba lo siguiente:
 El original de un escrito de quince de julio de dos mil ocho,

suscrito por la doctora **********, Cirujano Maxilofacial, en el que
se hace constar que en esa misma fecha revisó a **********,
quien presenta dos lesiones ulcerativas en parte ventral de
lengua, compatible con aptas mayores, que son lesiones que se
presentan con poca frecuencia en pacientes pediátricos y las
causas son principalmente exceso de radiación solar,
desnutrición, pacientes inmunocomprometidos y estrés; y que al
parecer la paciente estuvo sometida a una fuerte carga de
estrés, por lo que se sugiere que en caso de no remitir las
lesiones en dos semanas, se realice una biopsia excisional para
la confirmación del diagnóstico clínico, además de someterla a
tratamiento multidisciplinario con pediatra, psicólogo y psiquiatra.
 Escrito de dieciocho de julio de dos mil ocho, suscrito por la
doctora **********, en su carácter de Directora del Centro de
Terapia de Apoyo a Víctimas de Delitos Sexuales, de la
Dirección General de Atención a Víctimas del Delito, en el que
canaliza a la menor ********** con la doctora **********, a fin de
que reciba atención psiquiátrica y psicoterapéutica como víctima
223
de violencia sexual, solicitándole un reporte periódico sobre el

caso, comunicando el diagnóstico y el tratamiento.
 Escrito de dieciocho de septiembre de dos mil ocho, suscrito por

el doctor **********, médico psiquiátrico, en el que hace constar
que atiende a ********** desde el treinta y uno de julio de dos mil
ocho, quien acude a dos sesiones de psicoterapia de juego por
semana.
Del mismo modo ofreció como prueba el testimonio de la doctora

**********, sin embargo, éste no se llevó a cabo en virtud de que
********** le informó al juzgador que dicha doctora le había informado
que no comparecería a la audiencia si no era a través de un
requerimiento judicial147; y pese a ello, el juzgador fue omiso al
respecto
Ante esas manifestaciones, el juzgador teniendo en cuenta que

el interés superior de la menor le obligaba a recabar todas las pruebas
tendientes a conocer la verdad del caso; y por ende, resolver de la
manera más objetiva posible la controversia sometida a su
consideración, estaba obligado a investigar en la medida de lo posible,
cuál era la situación psíquica y emocional que presentaba la menor en
el tiempo en que se realizó la denuncia, en tanto que ello podría
resultar revelador para determinar si realmente pudo existir un abuso
de índole sexual; o si por el contrario, la acusación sobre el abuso sólo
está vinculada a una manipulación ejercida sobre la menor; lo que no
hizo, pese a que al respecto pudo realizar lo siguiente:
 Requerir a la doctora ********** a efecto de que informara si

atendió a la menor **********, si con motivo de esa atención
147
Ibídem. Tomo I, Fojas 251 y 394.
224
platicó directamente con la menor, en su

caso qué le manifestó la menor, en su
experiencia cuál era el estado psíquico y emocional que
apreció en la menor en ese momento, si en base al análisis
o consulta realizada, pudo o no formarse un criterio sobre
un posible abuso sexual cometido en agravio de la menor,
por qué y cuál fue la actitud de los padres al respecto.
 Requerir a **********a efecto de que precisara o aclarara si
la doctora **********, adscrita a la Procuraduría General de
Justicia del Distrito Federal es la psicóloga que atendió a
********** y le comentó que tenía depresión moderada y
síntomas de auto mutilación, o en su caso precisará qué
psicóloga es la que realizó tales afirmaciones, a efecto de
requerirla para que informara si las aseveraciones vertidas
en el sentido de que tenía síntomas de depresión
moderada y automutilación eran ciertas, y en su caso,
señalara qué síntomas de depresión moderada tenía,
cuáles eran los síntomas de automutilación advertidos; y
en su caso, conforme a su experiencia y la evaluación
practicada a la menor, si estos son característicos de niños
abusados, o si por el contrario esa depresión y síntomas
pueden obedecer a otra causa y de ser así cuál,
manifestando además, en base a la atención brindada cual
era el estado psíquico y emocional que advirtió en la menor
y porqué.
 Requerir a la doctora ********** a fin de que informara si en

atención al escrito de dieciocho de julio de dos mil ocho,
suscrito por la licenciada, en su carácter de Directora del
Centro de Terapia de Apoyo a Víctimas de Delitos
Sexuales, de la Dirección General de Atención a Víctimas
225
del Delito, ella personalmente o algún otro médico atendió

a la menor **********, y en caso de ser así, ella o el médico
que la haya atendido, informe cuál fue el diagnóstico de
dicha atención y si éste se encuentra vinculado a un abuso
sexual o algún otro motivo y porqué.
 Requerir al Doctor ********** a efecto de que de acuerdo a
su experiencia y en atención a la terapia de juego que
proporcionó o proporciona a la menor **********, informé
cuánto tiempo le brindó o le ha brindado terapia a la menor
**********, en qué consiste esa terapia, si de esa terapia
advirtió alguna conducta hipersexualizada de la menor o
algún otro síntoma característico presente en niños que
han sido víctimas de abuso sexual, en su caso precisar
cuál y por qué, o en su defecto, indicar por qué no podría
considerarse como un niño que ha sufrido abuso sexual; y
de ser así, si esto último podría obedecer a una alienación
parental;
 Requerir a la doctora ********** a efecto de que informe si

ha tratado a ********** por algún daño emocional sufrido, de
ser así, cuánto tiempo la trató la ha tratado; cuál es el daño
emocional advertido, si ese daño se relaciona con un
posible abuso sexual, o en su defecto indique la probable
causa de este.
Lo anterior es relevante, en razón de que según lo narrado por la

actora, tales personas fueron los primeros especialistas que
atendieron a ********** después de que ésta presentó la denuncia
penal ante la acusación de la menor en el sentido de que su papá y su
tío le raspaban con los dedos su colita; y por ende, son los que
probablemente puedan tener una mejor impresión acerca del cuál era
el estado emocional y psíquico de la menor en la época en que se
226
presentó la denuncia, y en su experiencia profesional

pueden señalar si a su criterio ese estado emocional y
psíquico es compatible con el presentado por niños abusados o si en
su defecto, puede responder al de un niño alienado o alguna otra
causa y por qué.
QUINTO ASPECTO QUE SE DEBIÓ INVESTIGAR.

De las constancias de autos se advierte que en la audiencia de
fecha ocho de marzo de dos mil diez, el Juez Vigésimo Octavo de lo
Familiar del Distrito Federal le preguntó a ********** si la menor
********** actualmente se encontraba asistiendo a alguna terapia; y en
respuesta a ese cuestionamiento, la actora manifestó que la menor sí
está en terapia, que acude a la procuraduría “CTA” aproximadamente
cada veinte días, en su colegio dos veces por semana y a
equinoterapia aproximadamente cada quince días, que también estuvo
yendo con un psiquiatra pero ya se la dio de alta 148.
En la comparecencia ante la Juez Décimo Noveno de lo Familiar

del Distrito Federal de fecha siete de enero de dos mil once, **********
manifestó lo siguiente:
“… que en el mes de octubre de dos mil diez me mandaron llamar del

********** que es donde asisten mis hijas, comentándome la psicóloga
del colegio su preocupación, ya que mi hija de nombre **********,
constantemente, comenta del miedo que tiene de ver a su papá de
nombre **********, que no le gusta ir al centro de convivencias, que no
le gusta que la toque y que a partir de ese mes la menor está
tomando nueva terapia psicológica y psiquiátrica y apoyo en la
escuela, …”149
148
149
Ibídem. Tomo II. Foja 1366 vuelta.
227
Del mismo modo, en el acta circunstanciada de once de enero

de dos mil once, realizada con motivo de la comparecencia de
**********, ante la Directora de Orientación Ciudadana y Derechos
Humanos del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, se
advierte que ante dicha autoridad manifestó lo siguiente:
“… Aproximadamente en el mes de octubre del año 2010, fui citada en

el **********, donde estudia mi menor hija de nombre ********************,
citándome las dos sicólogas, manifestándome su preocupación
ya que constantemente la niña platica con sus amigas y maestras
que no le gusta ir a ver a su padre **********, que no le gusta ir al
centro de convivencias, que le da miedo que la “toque”. Mi menor
hija de nombre **********inicio una nueva terapia a la cual actualmente
acude dos veces por semana y en últimas fechas la niña ha estado
muy inquieta mencionando que no quiere ir con su padre **********, por
tal motivo acudí a esta Dirección a solicitar las medidas de protección
para salvaguardar el bienestar de mis tres hijas y el de la suscrita.” 150
De lo anterior, se advierte que si la actora en diversas ocasiones

manifestó que la mandaron llamar del colegio de su hija en razón de
que las psicólogas del mismo le manifestaron su preocupación por los
comentarios de la niña en el sentido de que tiene miedo de que su
padre la toque y que está tomando terapia con apoyo de la escuela, el
juzgador a efecto de contar con elementos objetivos que le permitieran
preservar el interés superior de la menor debió investigar al respecto,
lo que no hizo a pesar de que pudo realizar lo siguiente:
 Requerir a las psicólogas del ********** a efecto de que

manifestaran si es o no verdad que en octubre de dos
mil diez citaron a ********** a efecto de informarle que
********** constantemente platicaba son sus amigas y
maestras sobre el miedo que sentía de que su padre la
150
228
tocara, de ser así, señalen si es verdad

que con motivo de ello se le brinda
apoyo psicológico o terapéutico por parte de la
escuela, y en su caso informaran que apoyó se le está
brindando, el resultado de éste y si de acuerdo con ese
apoyo y en base a su experiencia podían determinar si
los tocamientos a que alude ********** pueden
considerarse parte de un abuso de carácter sexual o si
por el contrario, obedecen a una manipulación por
parte de su madre o alguna otra causa y por qué.
SEXTO ASPECTO QUE SE DEBIÓ INVESTIGAR.
La Convención sobre los Derechos del Niño, en sus artículos 9,

apartado 2 y 12, apartados 1 y 2, dispone lo siguiente:
“Artículo 9.
1....
2. En cualquier procedimiento entablado de conformidad con
el párrafo 1 del presente artículo, se ofrecerá a todas las partes
interesadas la oportunidad de participar en él y de dar a conocer
sus opiniones.”
“Artículo 12.
1. Los Estados Partes garantizarán al niño que esté en
condiciones de formarse un juicio propio el derecho de expresar su
opinión libremente en todos los asuntos que afectan al niño,
teniéndose debidamente en cuenta las opiniones del niño, en
función de la edad y la madurez del niño.
2. Con tal fin, se dará en particular al niño la oportunidad de

ser escuchado, en todo procedimiento judicial o administrativo que
229
afecte al niño, ya sea directamente o por medio de un

representante o de un órgano apropiado, en consonancia con las
normas de procedimiento de la ley nacional.”
De lo anterior se advierte que uno de los derechos

fundamentales de la niñez, consiste en otorgar a los menores que
estén en condiciones de formarse un juicio propio, la oportunidad de
participar y expresar sus opiniones en todos los asuntos que les
afecten.
Este derecho fundamental que también es reconocido en los

artículos 38, 39 y 41 de la Ley para la Protección de los Derechos de
Niñas, Niños y Adolescentes151, implica que en un juicio como el que
nos ocupa, en donde se está decidiendo una cuestión relativa a la
patria potestad, el juzgador tiene la obligación de escuchar de manera
directa al menor tomando en cuenta la opinión que tiene sobre la
controversia en función de su edad y su madurez, y de acuerdo a lo
que resulte más conveniente a su interés.
No obstante, para que el derecho del menor a expresar sus

opiniones en los asuntos que le atañen sea debidamente respetado,
no basta con que el juzgador tenga una plática sin sentido para la
controversia con el referido menor, cuando éste es capaz de formarse
una opinión al respecto, por el contrario, esa platica debe estar
encaminada a establecer la verdadera y genuina opinión que el menor
puede formarse respecto de la controversia en función de su propia
madurez, por ello cuando lo que está en juego es la patria potestad de
151
“Artículo 38. Niñas, niños y adolescentes tienen derecho a la libertad de expresión; la cual
incluye sus opiniones y a ser informado. Dichas libertades se ejercerán sin más límite que lo
previsto por la Constitución.”
“Artículo 39. Niñas, niños y adolescentes tienen derecho a ejercer sus capacidades de opinión,
análisis, crítica y de presentar propuestas en todos los ámbitos en los que viven, trátese de familia,
escuela, sociedad o cualquier otro, sin más limitaciones que las que establezca la Constitución y
dicte el respeto de los derechos de terceros.”
“Artículo 41. El derecho a expresar opinión implica que se les tome su parecer respecto de: A. Los
asuntos que los afecten y el contenido de las resoluciones que les conciernen.”
230
los hijos y por ende su custodia, el juzgador debe

procurar que el menor exprese la percepción que tiene
de sus padres, la manera en que se siente con cada uno de ellos, así
como la forma en que le procuran amor, cuidado y educación, pues
ello le ayudará a ponderar si la opinión del menor es auténtica o si en
su caso se encuentra manipulada, así como el valor que merece
adminiculada al resto del material probatorio recabado, en función del
interés que en estos casos debe prevalecer.
Lo anterior es así, pues las pláticas que se realizan en este tipo

de juicios, no deben ser simbólicas o carentes de sentido para la
controversia, pues con ello no se logra respetar el derecho de la
infancia a expresar su opinión en cuestiones que le atañen, por el
contrario, su opinión y por ende la plática relativa, en función de la
madurez del menor, debe estar encaminada por el juzgador a conocer
la verdadera opinión que tiene sobre las cuestiones concretas que se
están debatiendo.
En función de lo anterior, se puede establecer que en el caso a

estudio no se respeto ese derecho.
En efecto, de las constancias de autos se advierte que si bien el

A quo, en acatamiento a lo ordenado por la Segunda Sala Familiar del
Tribunal Superior de Justicia, el día treinta de marzo de dos mil once,
tuvo una plática con las menores ********** todas de apellidos
**********, lo cierto es que atendiendo al contenido de dicha plática, se
puede advertir que el juzgador no respeto el derecho de las menores,
en función de su madurez, a expresar una opinión genuina sobre la
controversia en la que se debaten cuestiones que les atañen.
231
Se afirma lo anterior porque el contenido de esa plática es el

siguiente:
“… manifestando la mayor de ellas llamarse ********** tener seis años y

medio, que su nombre se lo puso su mamá y su papá, que ella y su
hermana menor se parecen a su mamá y su otra hermana se parece a
su tío que está en Cancún, que ellas viven en México, y les gusta, que
su hermana menor tiene tres años, que ella hace sola su tarea, y su
hermana ********** también, que su hermana menor va a entrar en
trans (sic), que vive con su mamá y su abuelo, que ven los sábados a
su papá y que juegan con él, que a ella le gusta saltar la cuerda, que
ella no saludó a su papá porque ella estaba en el baño, se le pidió al
padre de las menores que las saludara, a lo que las menores
respondieron con un beso en la mejilla, y ella la mayor le comentó a su
papá que su hermana ********** se había lastimado la espalda y le
pusieron una venda. ********** manifestó que su papá vive solo, que no
sabe en donde y que le gusta jugar con su papá a las escondidillas y a
las trais, que su papá la atrapa, que ella si saludó a su papá, cuando
su papá la saludo le platicó la menor que se había lastimado la rodilla.
La menor de nombre **********, cuyo nombre fue señalado por la mayor
de las menores, comentó que su papá la carga. Después el padre de
las menores se retiro y se despidieron del mismo con un beso en la
mejilla, se solicitó a la madre de las menores se acercara a las pláticas
y las menores comentaron a lo que su madre les preguntaba, respecto
de ********** que le gustaba más de comer y ********** contestó fijoles
(sic), de ********** contestó que la carne y de ********** cuando su
mamá le preguntó qué le gustaba de comer, comentó que chilaquiles y
su mamá le preguntó que de qué color y la menor mencionó que
verdes, la madre le preguntó qué picaran o no picaran y la menor refirió
que picaran.”152
De lo anterior se advierte que la plática que el juzgador sostuvo

con las menores, en ningún momento se dirigió a tratar de inquirir cuál
era la opinión que éstas tienen sobre la controversia, en tanto que
152
Expediente **********. Tomo III. Fojas 19 y 20.
232
dicha platica en términos generales se limitó a

establecer aspectos triviales que no tienen ninguna
trascendencia para la misma, como son: establecer en donde vivían
las menores, que juegos les gustaba, a quién de sus padres se
parecían, qué comida les gusta, etcétera.
Lo anterior implica que pese a la plática que el juzgador sostuvo

con las menores, el derecho que éstas tienen de expresar su opinión
en función de su edad y su madurez fue transgredido, en especial el
de **********.
Se estima de esa manera, pues a pesar de que la controversia

básicamente gira alrededor de ella, en razón del abuso sexual o la
manipulación de que cada una de las partes afirma fue objeto, y de
que la menor manifestó tener seis años y medio de edad, y en función
de esa edad, pudo ser cuestionada sobre la percepción que tiene de
sus padres, a que obedece esa percepción, la manera en que se
siente con cada uno de ellos, la razón de ello, así como la forma en
que le procuran amor, cuidado y educación y lo que hace o hacía con
cada uno de ellos, y con quien le gusta estar más y por qué, el
juzgador fue omiso en dirigir la plática hacía esos aspectos, a pesar de
que ello le hubiese ayudado a ponderar su decisión.
Conclusión
Atendiendo a todo lo anterior, si el juez de primer grado decidió
que en el caso se demostró que la menor ********** era portadora del
síndrome de alienación parental con características imputable a la
madre en perjuicio del padre, sin antes descartar que la menor no
haya sido abusada sexualmente por su padre, y esa decisión fue
confirmada por la autoridad responsable, pese al hecho de que como
también se analizó, en el caso se dejaron de investigar diversos
233
aspectos que pueden resultar trascendentes para determinar con

mayor objetividad si ********** pudo haber sido víctima de abuso sexual
por parte de su padre o estar siendo objeto de alienación parental por
parte de la madre, es evidente que al dejar de investigarse esos
aspectos, no sólo se infringió el interés superior de la infancia que
obliga a resolver lo que resulte más favorable para el sano desarrollo
de los menores, sino que además se pasó por alto que debido a su
falta de madurez física y mental el juzgador atendiendo a lo dispuesto
en los artículos 3, apartado 2, 4 y 19, apartado 1 de la Convención
sobre los Derechos del Niño, estaba obligado a adoptar todas las
medidas que fuesen necesarias para dar efectividad a sus derechos; y
por ende, a realizar y recabar cualquier prueba que resultase
necesaria y conveniente para su bienestar, y así estar en posibilidad
de establecer con un criterio más objetivo, que lo decidido al respecto
es lo más conveniente para protegerlas de cualquier tipo de violencia,
en especial la psicológica y la sexual.
Lo anterior además de encontrar sustento en los criterios relativos

a la suplencia de la queja que se citan en el considerando séptimo de
esta ejecutoria, también encuentra apoyo en la tesis aislada 1ª.
CXXXIX/2007 sustentada por esta Primera Sala, visible en el
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época,
Tomo XXVI, Julio de 2007, página 268, que lleva por rubro:
“PRUEBAS. SU ADMISIÓN Y DESAHOGO EN LOS
PROCEDIMIENTOS EN QUE SE CONTROVIERTEN DERECHOS DE
LOS MENORES”.153
153
“PRUEBAS. SU ADMISIÓN Y DESAHOGO EN LOS PROCEDIMIENTOS EN QUE SE
CONTROVIERTEN DERECHOS DE LOS MENORES. Con independencia de que la admisión de
las pruebas ofrecidas por las partes en el juicio es uno de los aspectos procesales más relevantes
y que con mayor cuidado debe observar el juzgador, tratándose de los procedimientos que directa
o indirectamente trascienden a los menores y a fin de velar por el interés superior de éstos
-previsto en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la Convención sobre los
Derechos del Niño y la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes-, el
juez está facultado de oficio para recabar las pruebas necesarias con el objeto de establecer
aquello que resulte de mayor conveniencia para preservar dicho interés, practicando las
diligencias que considere necesarias y conducentes para el conocimiento de la verdad respecto de
234
En esa virtud, si por las razones antes

mencionadas y en suplencia de la deficiencia de la queja, se advierte
que la sentencia reclamada resulta violatoria de los derechos
fundamentales antes señalados, en cumplimiento a lo ordenado en el
artículo 80 de la Ley de Amparo, con la finalidad de restituir a las
menores en el pleno goce de esos derechos, lo que procede es
otorgar el amparo y protección de la Justicia Federal, para el efecto de
que la Sala responsable deje insubsistente la sentencia reclamada, y
proceda a emitir otra en la que ordene al A quo reponer el
procedimiento, para que atendiendo los lineamientos establecidos en
esta ejecutoria, disponga lo necesario para:
 Ordenar el desahogo de una pericial en psicología sobre

la menor **********, a efecto de que a través de los
estudios o la aplicación de las baterías que resulten
específicamente aplicables o necesarias al caso, se
determine de manera concreta si la menor presenta
algún indicador, trastorno o conducta asociada con
algún abuso de tipo sexual, de ser así, se indique en qué
consiste dicho indicador, trastorno o conducta; y de ser
posible, el origen de éste. En caso contrario, es decir de
no advertirse lo anterior, precisar en la medida de lo
posible, y de acuerdo a los estudios psicológicos que
resulten apropiados para ello, cuál pudo ser el motivo
por el que la menor acusa a su padre de haberle tocado
la colita, si fue una manipulación por parte de su madre
o si pudo existir alguna otra razón, en su caso, precisar
cuál.
los derechos del menor que se controvierten en el juicio”.
Amparo directo en revisión 908/2006. 18 de abril de 2007. Unanimidad de cuatro votos. Ausente:
José de Jesús Gudiño Pelayo. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Secretario:
Heriberto Pérez Reyes.
235
 Ordenar el desahogo de pruebas periciales en psiquiatría y

psicología sobre **********, a efecto de que en sus
respectivos campos de especialidad y a través de los
estudios o aplicación de las baterías correspondientes, se
determine de manera especifica si dicha persona presenta o
no algún trastorno o patología de tipo sexual capaz de poner
en riesgo el sano desarrollo de sus menores hijas, y de ser
así, se explique por qué y de qué manera.
 Requerir al ********** a efecto de que de manera concreta

informe si la menor ********** fue internada en el mes de
septiembre de dos mil ocho, o en alguna otra fecha a partir
de ese año; si la razón de su internamiento obedeció a una
infección vaginal, y de ser así, qué clase de infección sufrió,
si ésta pudo haber sido causada por una masturbación o
manipulación de los genitales de la menor; y en su caso, de
ser posible, especificar la causa concreta de esa infección,
requiriéndole además, copia certificada de la totalidad del
expediente o expedientes clínicos formados en dicho
hospital con relación a la citada menor.
 Requerir a la doctora **********a efecto de que informe si

atendió a la menor **********, si con motivo de esa atención
platicó directamente con ella, de ser así, refiera qué le
manifestó la menor; en su experiencia cuál era el estado
psíquico y emocional que apreció en la menor en ese
momento, e indique si en base al análisis o consulta
realizada, pudo o no formarse un criterio sobre un posible
abuso sexual cometido en agravio de la menor, porqué, y
cuál fue la actitud de los padres al respecto.
236
 Requerir a **********a efecto de que precise

o aclare si la doctora **********, adscrita a la Procuraduría
General de Justicia del Distrito Federal es la psicóloga que
atendió a ********** y le comentó que tenía depresión
moderada y síntomas de auto mutilación, o en su caso
precise qué psicóloga es la que realizó tales afirmaciones, a
efecto de requerirla para que manifieste si las aseveraciones
vertidas en el sentido de haber informado que la menor
tenía síntomas de depresión moderada y automutilación son
ciertas o no; y en su caso, señale qué síntomas de
depresión moderada tenía, cuáles eran los síntomas de
automutilación advertidos; y en su caso, conforme a su
experiencia y la evaluación practicada a la menor, si estos
son característicos de niños abusados, o si por el contrario
esa depresión y síntomas pueden obedecer a otra causa y
de ser así cuál, manifestando además, en base a la atención
brindada, cuál era el estado psíquico y emocional que
advirtió en la menor y porqué.
 Requerir a la doctora ********** a fin de que informe si en

atención al escrito de dieciocho de julio de dos mil ocho,
suscrito por la licenciada **********, en su carácter de
Directora del Centro de Terapia de Apoyo a Víctimas de
Delitos Sexuales, de la Dirección General de Atención a
Víctimas del Delito, ella personalmente o algún otro médico
atendió a la menor **********; y en caso de ser así, ella o el
médico que la haya atendido, informe cuál fue el diagnóstico
de dicha atención y si éste se encuentra vinculado a un
abuso sexual o algún otro motivo y porqué.
237
 Requerir al Doctor ********** a efecto de que de acuerdo a su

experiencia y en atención a la terapia de juego que
proporcionó o proporciona a la menor **********, informé
cuánto tiempo le brindó o le ha brindado terapia a la menor,
en qué consiste esa terapia, si de esa terapia advirtió alguna
conducta hipersexualizada de la menor o algún otro síntoma
característico presente en niños que han sido víctimas de
abuso sexual, en su caso precisar cuál y porqué, o en su
defecto, indicar por qué no podría considerarse como un
niño que ha sufrido abuso sexual; y de ser así, si esto último
podría obedecer a una alienación parental;
 Requerir a la doctora ********** a efecto de que informe si ha

tratado a ********** por algún daño emocional sufrido, de ser
así, cuánto tiempo la trató o la ha tratado; cuál es el daño
emocional advertido, si ese daño se relaciona con un
posible abuso sexual, o en su defecto indique la probable
causa de este.
 Requerir a las psicólogas del ********** a efecto de que

manifiesten si es o no verdad que en octubre de dos mil diez
citaron a ********** a efecto de informarle que **********
constantemente platicaba son sus amigas y maestras sobre
el miedo que sentía de que su padre la tocara, de ser así,
señalen si es verdad que con motivo de ello se le brindó
apoyo psicológico o terapéutico por parte de la escuela, y en
su caso informen qué apoyo se le está brindando, el
resultado de éste y si de acuerdo con ese apoyo y en base a
su experiencia puede determinar si los tocamientos a que
alude ********** pueden considerarse parte de un abuso de
carácter sexual o si por el contrario, obedecen a una
238
manipulación por parte de su madre o

alguna otra causa y por qué.
 Requerir a ********** para que presente a las menores en el

juzgado en donde se tramita la controversia a efecto de que
el juez del conocimiento, siguiendo el protocolo elaborado
por esta Suprema Corte de Justicia de la Nación respecto
de la intervención de los menores en procesos judiciales,
sostenga una plática con ellas, en donde en función de su
edad y madurez, a través de cuestionamientos relacionados
con la percepción que tienen de sus padres, a qué obedece
esa percepción, la manera en que se sienten con cada uno
de ellos, la razón de ello, así como la forma en que les
procuran amor, cuidado y educación, lo que hacen o hacían
con cada uno de ellos, y con quien le gusta estar más y por
qué, se les respete su derecho a expresar su opinión sobre
la controversia.
Lo anterior sin perjuicio de que si el juzgador en beneficio del interés
superior de las menores y a efecto de resolver la controversia de la
manera más objetiva posible, advierte la necesidad de ordenar el
desahogo de una prueba diversa o incluso perfeccionar las que aquí
se están ordenando, formulando otros cuestionamientos a las
personas que debe requerir, proceda a realizarlo; además deberá
tener presente que al requerir a dichas personas, les debe hacer de
su conocimiento que como parte de la sociedad, en términos de lo
dispuesto en artículo 4 constitucional, están obligadas a coadyuvar o
contribuir a respetar y hacer que se respete el interés superior de las
menores, y por ende contribuir a su sano desarrollo, ello a efecto de
que tomen plena conciencia de la importancia de la veracidad y
objetividad de los informes que se les requiere en el caso que nos
ocupa.
239
Por lo expuesto y con apoyo además en los artículos 76 a 79 y

190 de la Ley de Amparo, se resuelve:
ÚNICO. La Justicia de la Unión ampara y protege a **********, en

contra del acto que reclama de la Segunda Sala Familiar del
Supremo Tribunal de Justicia del Distrito Federal, consistente en la
sentencia de fecha diecinueve de octubre de dos mil once, dictada
en el toca de apelación **********, para el efecto precisado en la parte
final del último considerando de esta ejecutoria.
Notifíquese; con testimonio de esta ejecutoria, devuélvanse los

autos relativos al lugar de su origen y, en su oportunidad archívese el
toca como asunto concluido.
Así lo resolvió la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia

de la Nación, por unanimidad de cinco votos de los Señores Ministros:
Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Guillermo I.
Ortiz Mayagoitia, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Presidente y Ponente Jorge Mario Pardo Rebolledo.
Firman el Presidente de la Sala y Ponente con el Secretario de

Acuerdos, que autoriza y da fe.
PRESIDENTE DE LA PRIMERA SALA Y PONENTE
MINISTRO JORGE MARIO PARDO REBOLLEDO
240
SECRETARIO DE ACUERDOS
DE LA PRIMERA SALA:
LIC. HERIBERTO PÉREZ REYES
En términos de lo previsto en los artículos 3°, fracción II, 13, 14 ó 18, de la Ley
Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, en
esta versión pública se suprime la información considerada legalmente como
reservada o confidencial que encuadra en esos supuestos normativos.
241

Visto Bueno Sr. Ministro

Cargado por

Información del documento

Título original

Derechos de autor

Formatos disponibles

Compartir este documento

Compartir o incrustar documentos

Opciones para compartir

¿Le pareció útil este documento?

¿Este contenido es inapropiado?

Copyright:

Formatos disponibles

Visto Bueno Sr. Ministro

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

JUICIO DE AMPARO DIRECTO 22/2012

PONENTE: MINISTRO JORGE MARIO PARDO REBOLLEDO

México, Distrito Federal. Acuerdo de la Primera Sala de la

V I S T O S, para resolver los autos relativos al amparo directo

PRIMERO. Demanda de amparo. Por escrito presentado el

 Segunda Sala Familiar del Tribunal Superior de Justicia del

 Juez Trigésimo Octavo de lo Familiar del Distrito Federal, en

 Ejecución de la sentencia definitiva de diecinueve de octubre

SEGUNDO. Garantías constitucionales violadas y tercera

TERCERO. Antecedentes. El presente juicio de amparo tiene su

Juzgado Vigésimo Octavo de lo Familiar en el Distrito

Lo que se hace de la siguiente manera:

I. Expediente **********, del índice del Juzgado Vigésimo

1. Demanda Inicial. Por escrito de catorce de agosto de dos mil

Para dar sustento a sus pretensiones el actor señaló que desde

2. Hechos supervenientes expuestos por el actor. En escrito

3. Trámite de la demanda inicial. De esa demanda tocó su

4. Contestación a la demanda. Mediante escrito de veintiséis

5. Contestación a los hechos supervenientes.

6. Régimen provisional de guarda y custodia. En audiencia de

“…por lo que hace a la menor ********** los días sábados de cada

6.1. Recurso de apelación en contra del régimen

sentido de modificar el auto recurrido, para quedar en los siguientes

“...se decreta un régimen de visitas y convivencias a favor del señor

6.2. Demanda de amparo indirecto y cumplimiento a lo

6.3. Incidente de modificación del régimen provisional

procedente, razón por la que se modificó para quedar

“… el régimen de visitas y convivencias provisional que se decreta a

7. Excusa. Por proveído de once de marzo de dos mil diez, el

8. Sentencia de primera instancia. En fecha veinticinco de

esa situación debería acontecer de la misma forma el domingo

9. Expedientillo **********. Conforme a la Ley de Acceso de las

II. Expediente **********, del índice del Juzgado Trigésimo

1. Demanda inicial. Por escrito presentado el veintiséis de

a. La declaración judicial de que ********** ha

b. La declaración judicial de que ********** ha incumplido con la

c. La declaración judicial de que ********** ha abandonado a sus

d. La declaración judicial de que ********** ha perdido la patria

e. El pago de una pensión alimenticia provisional y luego

f. La guarda y custodia, primero provisional y luego definitiva de

g. El pago de los daños y perjuicios que los actos de violencia

h. El pago de los gastos y costas que se originen con motivo del

Para sustentar sus pretensiones, en los hechos de la demanda

han abusado sexualmente de su hija ********** y además ha incumplido

Al respecto básicamente argumentó lo siguiente:

En cuanto a la adicción a la pornografía y el abuso de la

El doce de abril de dos mil tres contrajo matrimonio con el

Desde su luna de miel en abril de dos mil tres, sorprendió a su

Así, en noviembre de dos mil tres la corrió del domicilio conyugal,

un padecimiento clínico que ameritaba ser tratado en

Como el tiempo trascurría y el demandado seguía

Al explicarle a sus suegros lo ocurrido, recibió su total apoyo; y

Durante el plazo que no excedió de un mes a partir de que el

Posteriormente, en la semana del trece al diecinueve de abril de

********** lo estaba viendo, advirtiendo que el demandado ya ni

Como la enfermedad de su esposo ya afectaba directamente a

Ante esa situación decidió llevar a la menor con la psicóloga

ello, el padre hizo caso omiso de lo manifestado

Ante la magnitud del problema que afectaba a su hija **********,

La dentista le informó que el problema de su hija se debía a

someterla a un tratamiento multidisciplinario que incluya

La terapia con el doctor ********** es dos veces por semana y ha

Actualmente la doctora ********** está tratando el daño emocional

Postal de , enviada desde a los padres del demandado.