EL CICLO DE LA VIDA

La naturaleza nos enseña un orden, un equilibrio, una danza perfectamente sincronizada.

Ella misma nos dice quién es su creador, y también nos enseña el ciclo de la vida. Todos
nosotros queremos vivir; disfrutar de las maravillas de nuestra tierra, de nuestra familia,
nuestros hijos, y para mucho el pensar en la muerte es sinónimo de miedo. Pero, la
misma naturaleza nos enseña que, donde está el blanco, está el negro. Donde hay luz,
también hay oscuridad. Donde hay agua, hay tierra. Donde hay fuego, hay viento. Existe
la tristeza, también la alegría. Existe la felicidad, y también el dolor. También vemos,
hombre y hay mujer. Macho y también hay hembra. ¿Existe la guerra? También la paz.
¿Existe el orden? También el caos. ¿Y el que no trabaja? No come. La naturaleza nos
muestra el Equilibrio de la Vida. Lo que yo le llamo; El Ciclo de la Vida.

Somos tan egoístas que solo queremos vivir las cosas buenas, los placeres de la vida, y
no los malos momentos que nos puedan ocurrir. El sistema de este mundo nos ha hecho
vivir en una mentira por siglos. Nos enseñaron a huir de los problemas, porque es más
fácil pagar que enfrentarlo. Convirtiéndonos en seres sin capacidad de respuesta.

Eclesiastés 3:1-8.
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Tiempo de
nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado;  tiempo
de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar; tiempo de llorar, y
tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar;  tiempo de esparcir piedras, y
tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar; tiempo
de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar;  tiempo de
romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar;  tiempo de amar, y
tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz.

Eclesiastés 12:13-14.
El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos;
porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con
toda cosa encubierta, sea buena o sea mala.

Estas dos fotos las tome para demostrar que toda belleza pasa. Y que toda belleza tiene
un comiendo doloroso y un final triste. Pero en su proceso de vida, en su mejor etapa de
la vida, brilla como la más hermosa. Pero nunca dejó de ser quien era, sino que vivió
para dar lo mejor de sí.