"Cuando Vean a Jerusalén Rodeada de Ejércitos…"

— Luc.21—

Una de las reglas para la correcta interpretación de un pasaje es reconocer no solo a la persona
que habla, sino también averiguar a quién habla. En Lucas 21 Jesús habla a sus discípulos. El
habla de cosas que ellos mismos iban a presenciar. Dice "cuando vean (ustedes)". No dice
"cuando vean otras personas dentro de 2000 años". Este dato es muy importante y si no
reconocemos a la audiencia del Señor, entonces interpretaremos mal las palabras de nuestro
Señor.

ELLOS iban a ver a Jerusalén rodeada de ejércitos. La profecía no es para generaciones futuras,
sino a ELLOS. Unos años después, cuando todavía vivían algunos de los discípulos, el ejército
romano rodeó la ciudad y la sitió. Luego en los ataques, Jerusalén fue completamente destruida y
quedó como un campo arado, ni una piedra sobre otra. El templo fue destruido, junto con los
muebles y utensilios, el arca del pacto y todo lo necesario para hacer los sacrificios. Los
sacerdotes, todos ellos, fueron muertos, no quedó nadie de la tribu de Leví. Todo el sistema de
religión de los judíos fue destruido. La profecía de la devastación de Israel fue cumplida. Fueron
días de retribución por haber rechazado al Mesías. El historiador judío, Josefo, al escribir de este
horrible acontecimiento dijo que el cielo y la tierra habían sido destruidos.

"Porque estos son días de retribución, para que se cumplan todas las cosas que están escritas."
(Luc.21:22)

Fíjense en el lo que dice el versículo, "para que se cumplan todas las cosas que están escritas."
TODO lo que habían profetizado los portavoces de Dios en el Antiguo Testamento, todas sus
descripciones de esa destrucción, y del pueblo que iba a sustituir a Israel, de la Redención, del
Reino etc. ¡Todo fue cumplido!

El cumplimiento no iba a ocurrir milenios después. Las palabras, las advertencias eran para la
gente que escuchaba a Jesús. Y para reafirmar lo que había ya aclarado, Jesús reitera:

"Así también vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, sabed que está cerca el reino de
Dios. De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca."
(Luc.21:31,32).

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J. Hendrix-Weidner