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El suegro de Jacob le dijo que nombrará el precio y que él se lo daría, pero que continuará
trabajando para él. En este ambiente de negociación, Jacob hizo una petición inusual. Era
una solicitud que a cualquier mente científica se le hubiera considerado tonta y mal
asesorada. Jacob hizo una sugerencia que en su momento fue considerada genéticamente
imposible. Jacob dijo a su suegro que trabajaría para él un par de años más, con la
condición de que le permitiera tomar como su salario, los animales que salieran con pintas
de colores provenientes de los animales de un color.
Jacob pidió algo imposible para ese tiempo, ante tal petición Labán pensó que Jacob se
quedaría para siempre trabajando allí.
Después de que su nuevo contrato de trabajo con su empleador Labán había sido firmado,
Jacob descubrió el resto de lo divino del plan de negocios y la metodología. La Biblia dice
que Jacob fue y cortó las ramas de un árbol, luego, tomó un cuchillo, y cortó manchas
blancas en todas las ramas. Jacob cruzó estas ramas que había creado. Y, llego a pasar
que cada vez que algún animal fuerte del ganado de color entraba en celo; Jacob colocaba
la plantilla de las ramas atravesadas frente a ellos. Los científicos cerebros de hoy en día
saben que en situaciones altamente emocionales, la formación reticular del cerebro se abre,
y cualquier imagen que entra en el cerebro durante esos momentos tiene un efecto
modificador en el cerebro y la genética.
En estos dos pasajes vemos como los nombres juegan un papel importante, ya que esto
determinará el comportamiento de alguien o algo. Antes de que Isaac naciera Dios lo llamó
por su nombre, antes de que Josías naciera Dios lo llamó por su nombre y dijo que era un
reformador, igualmente con Juan el bautista a través del ángel Gabriel.
El ángel Gabriel aparece por última vez, en el Nuevo Testamento, para anunciar el
nacimiento del Mesías prometido del mundo - Jesús. Cuando el ángel Gabriel apareció en
sueños a José y le dijo que llame al niño que iba a ser nacido del vientre de María, Yeshua
(Jesús) que significa “ Salvador.” Estas incidencias claramente muestran la importancia de
los nombres en el reino espiritual. Un nombre incorrecto puede dar nacimiento a una
expresión inexacta de una persona o el propósito de una entidad. Y así, Dios el Señor formó
de la tierra todos los animales del campo, y todas las aves de los cielos, y se los llevó a
Adán para ver qué nombre les pondría; y el nombre que Adán les puso a los animales con
vida es el nombre que se les quedó. Génesis 2:19
Esta antigua tecnología espiritual (la tecnología de los nombres) es el método que Dios usa
para determinar la capacidad, la función y carácter de una cosa.
UN NOMBRE INCORRECTO PUEDE DAR NACIMIENTO A UNA EXPRESIÓN.
Realmente creo que la tecnología de los nombres es una de las principales tecnologías
espirituales que Dios utiliza, sobrenaturalmente ingeniar o reconfigurar la quebrantada
genética, de los hijos e hijas de los hombres.