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La institución primera de la sociedad radica en el hecho de que la sociedad se crea a si

misma como sociedad, dándose instituciones animadas por significaciones sociales


específicas en determinada sociedad: existen así diversas sociedades, con diversas
significaciones sociales.
Esta institución primera se articula en y se sirve de las instituciones segundas, que se
pueden dividir en dos categorías. Transhistóricos: son las instituciones que han de estar
presente de alguna forma en todas las sociedades, pero no son lo mismo en todas ellas
puesto que tiene un carácter histórico, dependen de la institución de cada sociedad a la
que pertenecen. Ejemplos: la infancia, la familia.
También tenemos las instituciones segundas específicas de determinada sociedad que
son portadoras de las significaciones imaginarias sociales de cada sociedad. Pensar una
institución secundaria tiene un mayor grado de dificultad, debido a que un modo de
relación con la institución es la alineación. Consiste en la autonomización de las
instituciones con respecto a la sociedad, hace ver a las instituciones no como creaciones
sociales sino como exteriores y anteriores a la sociedad (estuvieron allí desde siempre).
Así cuando pienso en ejemplos como el fútbol, me remito a la institución del deporte la
cual no puedo pensarla como inexistente en algún momento. El fútbol es una creación
contemporánea una institución que traspasa ya al ámbito del deporte y reúne una serie
de significaciones imaginarias propias de nuestra sociedad (himno nacional, 10, 1986,
etc.).
Es en el escenario de lo simbólico donde se da la institución. La institución es una red
simbólica, socialmente sancionada en la que se combinan, en proporción variable, un
componente funcional y un componente imaginario. Lo simbólico debe entrecruzarse
con lo económico funcional para poder sobrevivir y también con lo imaginario social
sin lo cual la sociedad no hubiese podido reunirse.
Castoriadis denomina las sociedades en heterónomas y autónomas. Las primeras la
institución afirma q no es obra del hombre, a los individuos se los educa para q sean
completamente absorbidos por la institución de la sociedad. Las autónomas crean las
propias leyes son concientes de esto, consiste en el poder de cuestionar la propia
institución de la sociedad.
Volviendo sobre estos temas se me plantea pensar sobre la homosexualidad en la
actualidad. Con la nueva ley de matrimonio igualitario se tiende a una constitución
particular de la familia hay un cambio radical, se pasa de estar conformada por personas
de diferentes sexos a personas del mismo sexo. La institución familiar transhistórica
sigue a pesar de la transformación que promete. Este cambio deja entrever el potencial
creador de la sociedad. La autonomía, la capacidad de reconocer, de plantear ciertas
cuestiones que no están institucionalizadas, pero que no pueden dejar de verse. No hay
siempre autonomía sola también encontramos un grado de autonomía en toda sociedad
autónoma. En el tema de la homosexualidad hay políticas progresistas como la de la ley
de matrimonio; pero otras que no se adecuan a estos cambios como la legislación sobre
hoteles alojamiento que no permite el ingreso de personas del mismo sexo.
Me pregunto sin embargo, cuales son las significaciones que intervienen en este cambio,
que

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