HERMES

Hermes es el más humano entre los dioses, su carácter lo hace vitalista y

acercado a la naturaleza de los hombres, acoge sus necesidades y pasiones. Sus
manifestaciones no son altruista, y sí alcanzables al destino del hombre. Su valor
es la habilidad. Como refiere Walter Otto, sus trabajos denotan menos fuerza o
sabiduría que agilidad, están en la prontitud y en toda clase de dificultad, los
hallamos en nuestro que hacer espontáneo, por eso recibe el atributo de astuto o
falaz, ingenioso para superarlos. Pero estas habilidades son subliminales, las
encontramos en nosotros mismos, en el servicio a los demás, en ser diligentes
con nuestras labores. Reconocemos en esta tarea un enfoque siempre oportuno y
en concordancia con el significado protector del comercio, que busca en su misión
presta un servicio y un beneficio a cambio, bajo condiciones de empatía y
amabilidad, nunca inoportuna, muy al contrario es de generar un intercambio, un
dinamismo. Hermes es conocedor de la buena suerte, es el mensajero, un camino
hacia una meta, un objetivo, está presente en la visión intuitiva que se quiere
proponer un medio para alcanzar un fin, por medio de la cual no son suficientes la
lógica y la razón para realizar un trabajo, sino una especie de talento, convicción y
optimismo. Según Walter Otto, “de él provienen la ganancias, calculadas
prudentemente o enteramente inesperadas”.es una suerte de dios que se
convierte en un premio, debido al esfuerzo o al azar, los comerciantes confían en
su estrategia de mercado, en sus planes, en su potencial acción, porque Hermes
convierte el cálculo y la oportunidad en una forma de ganancia.
Hermes es el pastor romántico que ve en la convivencia con la naturaleza y su
rebaño, una forma de crecimiento, mientras toca su flauta. Es el pastor que
conduce el rebaño hacia buenas acciones. Hermes también es compañía y
valentía en las oscuridades y caminos equivocados propios de la naturaleza
humana, está en el bien y en el mal, está en la pasión y en la virtud, en la claridad
del día y la oscuridad de la noche, siempre presente con su mensaje, con su
sentido de protección y compañía., es bastón de apoyo para caminantes solitarios.
Convierte la lejanía en cercanía es un dios que encamina los deseos humanos y
prodiga las debilidades.