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Predicación Homilética nº 8 (Defensa de la fe): Salmo 60:4

Lectura: Salmo 60:4

Objetivo: Afianzar que la marca distintiva de nuestra creencia con respecto a otras se
encuentra en la figura de Cristo, nuestra bandera.

Sal 60:4 Has dado á los que te temen bandera


Que alcen por la verdad. (Selah.)

He CONVERSADO muchas veces con personas, a varias les he entregado tratados, con
otros discutimos. Es sorprendente a la cantidad de conclusiones, diferencias y hasta
acuerdos a los que se puede llegar. Pero algo en lo que NUNCA he podido encontrar a
alguien que piense como yo es con respecto a Dios.

¡Cuántas diferencias he encontrado en la opinión de la gente! Muchas veces me ha pasado


que entrego un tratado o hablo con una persona y le pregunto:

¿Usted cree en Dios?

Me han respondido:

¡Claro! Soy mormón

En ese mismo instante ya sé que no estamos hablando del mismo Dios…

En dos oportunidades me he topado con gente a la que le hago la misma pregunta, pero en
estos casos a conocidos, compañeros de estudio:

¿Tú crees en Dios?

A lo que me responden:

Yo creo en Dios, pero como una fuerza especial que rige todo. Algo así como una gran
energía.

Parece un chiste…

El problema con el que vivimos en la actualidad no es menor. ¿Ha escuchado de la


DESINFORMACIÓN?

La desinformación no consiste en quitar a la gente la información con respecto a un tema,


sino que es MODIFICAR LA INFORMACIÓN con tal que la gente se convenza de algo
distinto a la realidad, para que luego, cuando uno intente mostrarle los datos correctos, la
gente los rechace.

En política se da mucho este fenómeno, hasta el punto que uno ya no sabe de qué lado
están los datos correctos y la información verdadera y confiable. Ahora está pasando lo
mismo en el ámbito eclesiástico.

Muchas personas dicen creer en Dios y están convencidos de que sus creencias son las
correctas porque alguien los convenció de que era así. Otras se auto-engañan con filosofías
y religiones y conciben su propio dios y no hay quien los aparte de ahí. Se
DESINFORMAN.
¡Cuántas sectas han nacido, mostrando un dios no bíblico, y enseñando a las gentes que
ellos están en la razón! ¡Cuántos profetas se han inventado con tal de llegar a la gente
indecisa para convencerlas!

Si uno averigua por internet, no tardará en saber que ya existen más de 12 o 13 MILLONES
de MORMONES en el mundo, y que hay unos 4 o 5 MILLONES de TESTIGOS DE
JEHOVÁ, por dar algunos ejemplos. Y quizás esos datos sean de mayor magnitud que los
que les estoy entregando, debido a su acelerado crecimiento en el entorno mundial.

Y cuantas sectas más se precipitan por convencer a la gente de sus creencias…

Entonces ¿Qué diferencia a nuestro Dios de su dios? Porque muchos profesan del Señor los
mismos atributos que nosotros podamos conocer de Él. Algunos hasta pueden saber más
que nosotros con respecto a las características, presentadas en la Biblia, de nuestro Padre
Celestial.

Dios mismo nos da una respuesta: Él dará BANDERA a los que le temen.
Pero ¿Cuál es esta bandera? Con respecto al CONTEXTO DEL REINO DE DAVID, esta
bandera sería aquella que representara su GOBIERNO, así como “su establecimiento y
ampliación sobre todo Israel”. Esta bandera unía a todos los israelitas, y sería esta bandera
la que infundiría terror a sus enemigos, contra los cuales sería un permanente desafío.

En NUESTRO CONTEXTO, solo hay una bandera que UNIRÍA AL VERDADERO PUEBLO
DE DIOS. Esta bandera, bien defendida, infundiría terror y angustia a los enemigos de la
causa divina, porque este signo de distinción que tenemos por bandera venció el pecado y
la muerte y nos sería por estandarte de salvación, para la gloria de Dios. Nuestra bandera
es CRISTO.

Cristo ha de ser por “pendón a los pueblos”, para que en Él se uniera su gente, y al alzar la
vista hacia nuestro salvador, adquiriésemos nuevos ánimos y nueva fortaleza en la lucha de
su causa.

Luego, el SELLO DISTINTIVO que separa a nuestro Dios de los dioses falsos de este
tiempo es nuestro Señor y salvador Jesucristo. Nuestro Señor se DISTINGUE por medio de
Cristo de manera clara.

Pero se preguntarán ¿No creen algunas sectas falsas en Dios y en Jesús al igual que
nosotros?

ERROR. No toman la palabra de Dios en cuenta. Le atribuyen a Cristo solo el rasgo de


profeta o gran maestro. CRISTO FUE DIOS EN LA TIERRA Y SIGUE SIENDO DIOS ALLÁ
EN LOS CIELOS, SENTADO A LA DIESTRA DE DIOS PADRE TODO PODEROSO.

Cristo, nuestra bandera, es Hijo de Dios como dice en Juan 20:31:

“Estas empero son escritas, para que creáis que Jesús es el Cristo, el
Hijo de Dios; y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.”
(Juan 20:31)

Y como tal es participe de la Trinidad, siendo Dios, y a la vez siendo uno con el Padre y el
Espíritu Santo. Siendo Cristo denominado como el Verbo, como dice 1a. Juan 5:7:

“Porque tres son los que dan testimonio en el cielo, el Padre, el Verbo, y
el Espíritu Santo: y estos tres son uno.” (1a. Juan 5:7)
Tomás, al que se referían como el dídimo exclamó al ver a Jesús resucitado, diciendo:

“¡Señor mío, y Dios mío!”


Creemos en un Cristo nacido de una virgen conforme a las escrituras. Como leemos en
Lucas 1:26-35

“Y al sexto mes, el ángel Gabriel fué enviado de Dios á una ciudad de


Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un varón que se
llamaba José, de la casa de David: y el nombre de la virgen era María.
Y entrando el ángel á donde estaba, dijo, ¡Salve, muy favorecida! el
Señor es contigo: bendita tú entre las mujeres.
Mas ella, cuando le vió, se turbó de sus palabras, y pensaba qué
salutación fuese ésta.
Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia
cerca de Dios.
Y he aquí, concebirás en tu seno, y parirás un hijo, y llamarás su
nombre JESUS.
Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo: y le dará el Señor
Dios el trono de David su padre:
Y reinará en la casa de Jacob por siempre; y de su reino no habrá fin.
Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será esto? porque no conozco
varón.
Y respondiendo el ángel le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la
virtud del Altísimo te hará sombra; por lo cual también lo Santo que
nacerá, será llamado Hijo de Dios.”
(Lucas 1:26-35)

Creemos en un CRISTO REDENTOR que murió para pagar por nuestros pecados, sin el
cual estaríamos CONDENADOS sin forma de salvación, sin otro camino. Mateo 26:28

“En el cual tenemos redención por su sangre, la remisión de pecados


por las riquezas de su gracia”
(Efesios 1:7)

“Porque esto es mi sangre del nuevo pacto, la cual es derramada por


muchos para remisión de los pecados.”
(Mateo 26:28)

Creemos en un Cristo VIVO.

Creemos en un Cristo que

“fué muerto por nuestros pecados conforme á las Escrituras;


Y que fué sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme á las
Escrituras”
(1º Corintios 15:3-4)

// “Ysi Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana


es también vuestra fe.”
- Cristo como dios  infinito
- Cristo es el unico medio de redencion
- El valor del sacrificio de cristo  satisfizo la justicia de dios, luego cristo vive

Donde vemos que el valor de cristo para el sacrificio es suficiente, en dos cosas:
- Dios mismo lo envió
- Dios mismo lo resucitó de los muertos (se cumplió la obediencia, la maldición
absorbida, la ira satisfecha, el precio del perdon pagado, la justicia totalmente
vindicada.

“Porque Cristo, cuando aún éramos flacos, á su tiempo murió por los
impíos.
Ciertamente apenas muere alguno por un justo: con todo podrá ser que
alguno osara morir por el bueno.
Mas Dios encarece su caridad para con nosotros, porque siendo aún
pecadores, Cristo murió por nosotros.
Luego mucho más ahora, justificados en su sangre, por él seremos
salvos de la ira.
Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la
muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos
por su vida.”
(Romanos 5:6-10)

“Y el Dios de paz que sacó de los muertos á nuestro Señor Jesucristo, el


gran pastor de las ovejas, por la sangre del testamento eterno, os haga
aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo él en
vosotros lo que es agradable delante de él por Jesucristo: al cual sea
gloria por los siglos de los siglos. Amén.”
(Hebreos 13:20-21)

Con lo cual dios manifiesta que el sacrificio de cristo fue totalmente suficiente

Esto se contrapone a la salvación por obras (sacramentos) y a la salvación por la iglesia //

Creemos en un Cristo que es EL PAN, que es EL CAMINO, que es LA VERDAD, que es LA


VIDA, que es LA PUERTA por la cual podemos llegar a Dios.

Creemos que cada atributo y perfección de Dios Padre y Dios Espíritu Santo también se
presenta en Jesucristo, porque Él es Dios, es ETERNO, ÚNICO, SANTO, OMNISCIENTE-
PRESENTE Y POTENTE, SUPREMO, SOBERANO, INMUTABLE, etc.

“El cuál siendo el resplandor de su gloria, la misma imagen de su


sustancia y sustentando todas las cosas por la palabra de se potencia,
habiendo hecho la purgación de nuestros pecados por sí mismo, se
sentó a la diestra de la Majestad en las alturas”
(Hebreos 1:3)

Creemos en un Cristo que es el ÚNICO MEDIADOR ENTRE DIOS Y LOS HOMBRES. No


hay más.

“Porque hay un Dios, asimismo un mediador entre Dios y los hombres,


Jesucristo hombre.”
(1Timoteo 2:5)

Creemos en un Cristo que cumple a la perfección el rol de PROFETA, SACERDOTE y REY,


tanto en su estado de humillación como de exaltación.

En fin… creemos en un Cristo BIBLICO, tal cual nos presenta Dios a través de su perfecta y
santa Palabra. Todo lo mencionado anteriormente está avalado por la Palabra del Señor.

Esta es nuestra bandera, la que debemos mostrar al mundo, para que vea a un Señor y
salvador en ella, mostrando lo que la Biblia enseña de Él y no lo que la gente ha inventado.
Es esta bandera la que nos distingue, es esta bandera la que nos unifica por una meta en
común.

Ahora, con una bandera en las manos ¿Qué vamos a hacer con ella? La levantaremos en
alto, pero NO como una bandera ceremonial, sino cual estandarte pronto para la batalla, y
LA ALZAREMOS POR LA VERDAD, para que la verdad prevalezca por sobre la mentira.

Hermanos, puede que seamos una gota de agua en un océano en comparación a otras
creencias existentes. Puede que la desinformación tenga a la gente creyendo en una
variedad de dioses que ni nos imaginamos hasta qué punto pueden ser de diferentes a
nuestro Dios. Y ellos siguen pensando que su dios es el mismo al que creó el universo y
todas las cosas en él existentes.

Pero YA ES HORA, hermanos, de que aquellos que TEMEN A DIOS, tomen la bandera, y
como GRITO DE GUERRA tengamos el EVANGELIO, y vayamos al mundo para que la
VERDAD sea defendida y esparcida a todo lugar, y prevalezca por sobre todos los engaños.

Luego veremos con júbilo como se comprueban cada una de nuestras creencias, al ver a
Jesús glorioso en su segunda venida, corroborando cada verdad escrita en la Biblia sobre
Él, o también si Dios así lo quiere, cuando nos lleve a su presencia, vamos a estar en el
cielo, disfrutando de su Santa Presencia.

Que el Señor les bendiga.

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