Está en la página 1de 22

CARRERA:

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLITICAS


CURSO:
DERECHO PENAL GENERAL
TEMA:
“EXTINCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL Y DE LA PENA”
ESTUDIANTE:

PALACIOS VALDIVIEZO ANDY GONZALO


DOCENTE:
JORGE ENRIQUE ARRIBASPLATA QUEVEDO

SULLANA – PERU
2020

PRESENTACIÓN

pág. 1
El presente informe monográfico, titulado “Extinción de la acción penal y de la pena” es
el resultado de las causales establecidas en el Código Penal Peruano que establece la
jurisdicción que pone en funcionamiento los organismos del poder del estado el cual se
destina a juzgar casos concretos y objetivos en virtud de la aplicación y realización de las
normas ejercidas hacia el autor de un delito delictuoso con pretensión punitiva.

El propósito principal de esta monografía es analizar, describir e interpretar la acción penal,


las causas de extinción penal y de la pena, la prescripción de la acción y de la pena
ordinaria y extraordinaria, entre casos de indulto y como se elimina la pena en casos
concretos, los tipos de extinción tanto en la acción penal como en la pena ya que se dan con
la muerte de la persona, entre otros puntos que se irán esclareciendo con los puntos de este
informe.

INTRODUCCIÓN

pág. 2
El derecho penal se define como un medio de control social que es utilizado para controlar ,
orientar, y planear la vida plena en común ya que mediante ello se determinan y definen
comportamientos los cuales no deben ser ejecutados aunque le convengan a determinadas
personas.

La existencia del derecho penal se basa en la necesidad de resolver problemáticas graves


que se producen dentro de una convivencia social, evitando así la venganza privada ya que
debe ser reprimido penalmente los actos ilícitos que pongan en peligro o lesionen los bienes
jurídicos protegidos que sean fundamentales.

Por lo tanto la principal misión es brindar una eficaz protección a bienes individuales o
colectivos que sean amparados por el derecho, ya que al atentar contra los derechos
fundamentales de una persona es el causante para cumplir una condena efectiva que
relacionado al tema del informe veremos cómo se extingue en el ámbito penal dicha acción
y la pena que comete el sujeto activo al momento de la realización de los actos punitivos.

INDICE

1. PRESENTACIÓN.............................................................
2. INTRODUCCIÓN............................................................

pág. 3
CAPÍTULO I: EXTINCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL.................

1.1 DEFINICIÓN.....................................................................
1.2 CAUSAS DE LA EXTINCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL...
A. MUERTE DEL IMPUTADO..........................................
B. PRESCRIPCIÓN..........................................................
C. AMNISTÍA.....................................................................
D. COSA JUZGADA.........................................................
E. DESISTIMIENTO..........................................................
F. TRANSACCIÓN..............................................................

CAPÍTULO II: EXTINCIÓN DE LA PENA..........................................

2.1 CAUSAS DE LA EXTINCIÓN DE LA PENA...........................


A. MUERTE DEL CONDENADO.............................................
B. INDULTO..............................................................................
C. PRESCRIPCIÓN..................................................................
D. EXENCIÓN DE LA PENA.....................................................
E. PERDÓN DEL OFENDIDO..................................................
F. PRESCRIPCIÓN ORDINARIA Y EXTRAORDINARIA......
3. CONCLUSIONES.......................................................................
4. CASOS........................................................................................
BIBLIOGRAFÍA................................................................................

EXTINCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL

La acción penal es aquella que toma como origen un delito y que se actúa la imposición de
un castigo establecido por la ley, la acción penal es el punto de partida del proceso judicial.
Existen dos tipos de acción penal la pública y privada que hace referencia a lo que

pág. 4
concierne al ministerio público sin el perjuicio de la participación de la víctima, la
clasificación de la acción pública penal es cuando existe el ejercicio del acto y depende
estrictamente de una instancia privada, no obstante la acción privada son las violaciones a
la propiedad, injuria o infamación que afecte a un individuo.

CAUSAS DE LA EXTINCIÓN PENAL

Se trata de un conjunto de instituciones jurídicas que imposibilitan continuar con la


persecución del delito e impiden que se aplique la sanción a los responsables del hecho
punible

Muerte del imputado:

La acción penal y la pena se extinguen con la muerte, muerto el imputado es inadmisible


pensar en la persecución penal en su contra, por lo tanto la muerte origina la extinción de la
responsabilidad penal y se archiva la investigación policial o la denuncia. De existir un
proceso en marcha se provoca la suspensión por parte del juez o del tribunal del
procedimiento judicial, salvo que existieran otros procesados, en este caso la acción persiste
contra ellos.

Con las partidas de defunción se acredita el fallecimiento de los encausados, por lo que de
conformidad a la normatividad vigente, es procedente declarar la extinción de la acción.

La prescripción:

La razón de ser de la prescripción está vinculada a los efectos que genera el paso del
tiempo. Como causa de extinción de la acción penal (art. 78.1 CP), la prescripción pareciera
estar ligada a la gravedad del hecho y, en menor medida, a la responsabilidad del sujeto.

Consiste en la extinción de la responsabilidad por el transcurso del tiempo, los fundamentos


lo encontramos en criterios de política criminal tales como:

- Transcurso del tiempo, lo hace innecesario el castigo.


- Presunción de que el autor del delito se ha enmendado con el paso del tiempo.
- Falta de interés que tiene el estado en penar un delito cometido hace mucho tiempo.

pág. 5
- Dificultades de probar el delito.
- Necesidad de que cese la inseguridad jurídica en relaciones del delincuente con el
estado.

Plazo ordinario: Delitos sancionados con cadena perpetua 35 años y los delitos
sancionados con pena privativa de libertad en tiempo igual al máximo de la pena

Interrupción: Desaparece el tiempo transcurrido y se aplica la prescripción extraordinaria


que es el máximo de la pena más la mitad por ejemplo la comisión de un delito doloso.

Amnistía:

Corresponde al derecho de gracia que se define como la potestad que tiene el estado de no
emplear el sistema punitivo respecto a ciertos delitos o algunas personas en un determinado
momento, su fundamento es lograr la estabilidad política, ansias de popularidad, fechas
importantes o conmemorativas, entre otros. Por lo tanto la amnistía es el olvido del delito
que constituye una atribución al poder legislativo.

Como su propio nombre indica, la amnistía supone un total olvido del delito. Su concesión
mediante ley borra todo recuerdo del delito cometido o de la pena pronunciada. En
definitiva, extingue por completo la pena y todos sus efectos.

Una vez admitido afirma Dorado Montero, el poder para la concesión de amnistías no
reconoce límites, a no ser que la Constitución o la propia ley le pongan restricciones. En
consecuencia, puede referirse a toda clase de delitos (comunes o políticos); si bien en la
práctica se ha reservado fundamentalmente para los delitos de matiz político. Como regla
general, puede afirmarse que se hace uso de esta modalidad de gracia después de
revoluciones o agitaciones políticas, con fines de pacificación social.

El estudio de los efectos de la amnistía ha de realizarse atendiendo en cada caso a la


disposición que la concede; tales efectos se condicionan siempre a situaciones
extrajurídicas históricamente diversos y políticamente coyunturales. Carecen en suma las
amnistías de las suficientes notas comunes para alcanzar una doctrina general. Las
convenientes políticas juegan al respecto un papel decisivo. Con las limitaciones apuntadas,
puede intentarse una esquematización de los efectos de la amnistía:

pág. 6
a) Al suponer la amnistía que los delitos objeto de la misma se tienen por no cometidos,
extingue las penas impuestas y las acciones penales pendientes. En consecuencia, no puede
ser instruido procedimiento alguno para perseguir hechos incluidos en una amnistía; si éste
ya se ha iniciado, debe ser suspendido en el momento en que entre en vigor la amnistía. Las
penas impuestas quedan anuladas y extinguidos completamente sus efectos, tanto si la pena
no ha comenzado a cumplirse como si ha sido cumplida parcialmente.

b) La amnistía determina la automática cancelación de los antecedentes penales. La


condena se borra a todos los efectos y, por ello, no puede ser tenida en cuenta para
fundamentar una agravación de la responsabilidad criminal del sujeto en posibles delitos
ulteriores.

c) Los amplios efectos de la amnistía no suelen alcanzar a la responsabilidad civil. Una


solución distinta -aceptable en pura teoría, dada la amplitud con que la institución se
configura lesionaría gravemente los derechos de la víctima y de los perjudicados por el
delito a la justa reparación del daño causado.

Cosa juzgada:

La cosa juzgada es el efecto impeditivo que, en un proceso judicial, ocasiona la


preexistencia de una sentencia judicial firme dictada sobre el mismo objeto. Es firme una
sentencia judicial cuando en derecho no caben contra ella medios de impugnación que
permitan modificarla.

Nadie puede ser perseguido por segunda vez en razón de un hecho punible sobre el cual se
falló definitivamente.

Se reconoce como principio constitucional, en virtud que está prohibido juzgar nuevamente
a una persona por los mismos hechos, y no se pueden revivir procesos ya fenecidos, la
causal es la extinción de la existencia de una decisión jurisdiccional nacional o extranjera
que adquiere la calidad de cosa juzgada, que debe tratarse de una decisión inmutable e
irrevocable.

Desistimiento:

pág. 7
Solo procede respecto a los delitos de persecución privada o ejercicio privado de la acción.
Según Roy Freyre lo define esta causal como la facultad que tiene el agraviado de renunciar
a continuar con la acción penal que hubiera iniciado contra su ofensor, se efectúa en
cualquier momento o estado del proceso y su consecuencia es el archivamiento.

Transacción:

Se aplica a los delitos de persecución privado, si efectuamos el análisis basados en


conceptos de transacción se afirma que no es un acuerdo, sino las concesiones recíprocas
entre el querellante y su ofensor, se ajusta las pretensiones por parte del querellante y el
querellado para llegar a mutuas concesiones como el monto de una reparación civil, o de
índole moral como una retractación pública.

EXTINCIÓN DE LA PENA:

La extinción de la pena tiene presupuestos específicos y circunstancias que sobrevienen


después de cometida la infracción penal y tiene el fundamento anular la ejecución de la
pena.

En tales circunstancias se limita grandemente el derecho del Estado imponer la pena hasta
llegar a cesarse tal potestad. Para el sujeto que cometió el delito desaparece la obligación de
cumplir la pena consecuencia de su accionar.

CAUSAS DE LA EXTINCIÓN DE LA PENA

Según el artículo 85 del código penal establece causales que extingue la ejecución penal
siendo estas:

Muerte del condenado:

La extinción de la responsabilidad criminal por muerte del reo es consecuencia del


principio de personalidad de las penas que inspira a todo el derecho penal

pág. 8
El concepto de reo no puede confundirse con los de procesado, acusado o detenido. El reo
es aquella persona cuya conducta ya ha sido definitivamente calificada como delictiva en
una sentencia condenatoria firme.

- Los delitos ocasionan consecuencias en el ámbito civil como la responsabilidad civil


derivada del delito cometido por una persona que ha fallecido antes de responder por ella,
es transmisible a los herederos. La muerte del reo no puede afectar a la responsabilidad
civil, ya que podrá ser exigida por los perjudicados, ante la jurisdicción civil, contra los
herederos del responsable (siempre siguiendo las normas contenidas en el Código Civil al
respecto).

En el ámbito penal la pena es inminentemente personal, por lo tanto es intransferible ya que


muerto el condenado no cabe terceros que respondan por sus acciones

Indulto:

Manifestación de gracia, que es el acto de perdón de la pena que corresponde al poder


ejecutivo a través de una resolución suprema refrendada por el ministerio de justicia y su
fundamento es humanitario, por ello se otorga con carácter personal.

Consiste el indulto en la gracia otorgada por el Jefe de Estado a los condenados por
sentencia firme remitiéndoles toda la pena impuesta o parte de ella, o conmutándola por
otra de menor gravedad.

Sus efectos son más limitados que los de la amnistía. Aun siendo total el indulto, se
mantiene la inscripción de la condena en el oportuno Registro; el indultado dejará de
cumplir la pena impuesta, o parte de ella, pero técnicamente es un penado y si vuelve a
delinquir podrá ser apreciada la circunstancia modificativa de reincidencia. El indulto no
puede hacerse extensivo a la responsabilidad civil ni a las costas procesales; en caso de
recaer sobre penas pecuniarias – y a no ser que expresamente así se determine – eximirá al
indultado del pago de la cantidad aún no satisfecha, pero no abarcará la devolución de lo ya
pagado.

 El artículo 118 de la Constitución Política del Perú señala las atribuciones del Presidente la
República. El punto 21 dice que una de estas es “conceder indultos y conmutar penas.

pág. 9
Ejercer el derecho de gracia en beneficio de los procesados en los casos en que la etapa
de instrucción haya excedido el doble de su plazo más su ampliatoria".

Casos:

A. José Enrique Crousillat López Torres

En año 2009 durante la gestión del expresidente Alan García, al empresario se le otorgó el


indulto humanitario tras recomendación de una Junta Médica, debido a diferentes
enfermedades al corazón.

"Se trata de un adulto mayor que sufre de cardiopatía hipertensiva moderada, enfermedad
vascular cerebral, fibrilación auricular crónica, obesidad, síndrome ansioso depresivo",
señalaba la resolución firmada por el entonces exmandatario y el exministro de
Justicia Aurelio Pastor.

Sin embargo, el 14 de marzo de 2010 le fue revocado el indulto. Según el ex procurador


Ronald Gamarra se demostró que no estaba enfermo y el acta de la Junta Médica se hizo de
forma irregular. Inclusive Crousillat fue sorprendido realizandocompras en el balneario de
Asia.

López Torres fue condenado a ocho años de prisión preventiva por vender la línea editorial
de su canal a favor del gobierno de Alberto Fujimori

B. Alberto Fujimori Fujimori

El indulto a Alberto Fujimori, oficialmente denominado «indulto y derecho de gracia por


razones humanitarias fue un beneficio concedido el 24 de diciembre de 2017 por el
entonces presidente del Perú, Pedro Pablo Kuczynski a favor del expresidente Alberto
Fujimori, quien se encontraba cumpliendo condena por violaciones a los derechos
humanos que tuvieron lugar durante su gobierno. En 2009, Fujimori había sido condenado
por violaciones de derechos humanos y sentenciado a 25 años de prisión por su papel en los
asesinatos y secuestros cometidos por el escuadrón de la muerte Grupo Colina durante la
guerra de su gobierno contra el grupo terrorista Sendero Luminoso. El veredicto marcó la
primera vez que un jefe de estado electo fue extraditado a su país de origen, juzgado y

pág. 10
condenado por violaciones de derechos humanos. Fujimori fue específicamente encontrado
culpable de asesinato, daños corporales y dos casos de secuestro

Prescripción:

La prescripción de la pena se define como transcurso del tiempo que extingue la


persecución de un delito por parte del estado la facultad de ejercitar en caso concreto el ius
puniendi

La razón de ser de la prescripción está vinculada a los efectos que genera el paso del
tiempo. Como causa de extinción de la acción penal (art. 78.1 CP), la prescripción pareciera
estar ligada a la gravedad del hecho y, en menor medida, a la responsabilidad del sujeto. Lo
primero porque los plazos de prescripción de la acción penal se determinan en función a la
gravedad de la pena con que se conmina el delito (art. 80 CP), y también porque los delitos
de lesa humanidad no prescriben. Lo segundo porque el art. 81 CP reduce el plazo de
prescripción en una mitad si el agente tenía menos de veintiún años o más de sesenta y
cinco años al momento de comisión del hecho punible. Según la ley (art. 80 CP), el plazo
ordinario de prescripción de la acción penal es, para los delitos que tienen prevista pena
privativa de libertad, igual al máximo de la pena, sin que éste pueda sobrepasar los veinte
años. Si el delito se sanciona con cadena perpetua, la acción penal prescribe a los treinta
años

Exención de la pena:

Se trata de la abstención por parte del estado de aplicar una sanción que opera como
beneficio dentro de la legislación, es decir dentro de la normatividad que en nuestro país se
aplica en delitos de terrorismo, tráfico ilícito de drogas, delitos tributarios y aduaneros, etc.

Para aplicarse la exención de pena a la inculpada, a pesar de haberse demostrado su


responsabilidad en el delito de peculado culposo, debe considerarse que la pena aplicable es
menor a dos años de pena privativa de libertad, que ha devuelto el dinero perdido y ya
haber sido sancionada administrativamente

pág. 11
Perdón del ofendido:

Opera en la pena impuesta para delitos de persecución privada, se impone la pena mediante
un fallo firme y el ofendido formula el perdón ante el juez penal que tiene a su cargo la
ejecución.

Para que tenga validez se debe reunir condiciones, se otorga en forma expresa, debe ser
acto personal, de tal manera que uno de los querellantes no perjudique el derecho de los
demás y por último el juez debe declarar sin efecto la sanción y ordenar su anulación o
cancelación de los antecedentes que generó dicho delito.

Plazos Prescriptorios

Según el nuestro Código Penal, a tenor del art. 80, la acción penal prescribe en un tiempo
igual al máximo de la pena fijada por la ley para el delito, si es privativa de libertad. Por
ejemplo, el robo tipificado en el Art. 188, el marco penal es de 3 a 8 años. De modo que la
prescripción ordinaria se cumpliría a los 8 a años

En caso de concurso real de delitos, las acciones prescriben separadamente en el plazo


señalado para cada uno. Ejemplo Un sujeto el día 15 de noviembre del 2011 mata a otro
sujeto y luego el 24 del mismo mes realiza un hurto agravado. En el primer delito por
homicidio simple, según el Art. 106 tiene una pena privativa de libertad no menor de 6 ni
mayor de 20 años, en consecuencia la acción penal prescribe a los veinte años. En el
segundo delito, tipificado en el art. 188 CP. con una pena privativa de libertad no menor de
3 ni mayor de seis. En este caso la prescripción se cumple a los 6 años. Por tanto, pasado
los 6 años no se puede perseguir el delito por hurto agravado, siendo posible la persecución
del delito por homicidio hasta los veinte años.

En caso de concurso ideal de delitos, las acciones prescriben cuando haya transcurrido un
plazo igual al máximo correspondiente al delito más grave. Por ejemplo un sujeto
conduciendo en estado de ebriedad causa lesiones graves a una persona y causa

pág. 12
daños materiales en una vivienda. Las lesiones graves recogido en el Art. 121 CP. con una
pena de 4 a 8 años. Los daños materiales tipificados en el art. 205 CP. con una pena
privativa de libertad no mayor de dos años. En tal caso la prescripción se cumple a los 8
años, por ser el más grave.

En casos de delitos cometidos por funcionarios y servidores públicos contra


el patrimonio del Estado o de organismos sostenidos por éste, el plazo de prescripción se
duplica. Ejemplo, por malversación de fondos tipificado en el Art. 389 CP. con una pena de
3 a 8 años, en tal sentido la pena prescribe a los 16 años.

En los delitos que merezcan otras penas, deferente a la pena privativa de libertad, la acción


prescribe a los 02 años.

3.2. Reducción de los plazos de prescripción

 En casos de los delitos que el máximo penal superen los veinte años, la prescripción
no será mayor a 20 años. Ejemplo El secuestro, tipificado en el Art. 152 CP. con una
pena de 20 a 30 años. En este supuesto la prescripción se cumple a los viento años

 Tratándose de delitos sancionados con pena de cadena perpetua se extingue la


acción penal a los 30 años.

 Los plazos de prescripción se reducen a la mitad cuando el agente tenía menos de


21 o más de 65 años al tiempo de la comisión del hecho punible.

3.3. Inicio de los plazos de prescripción.

Los plazos de prescripción de la acción penal comienzan, según el Art. 82 CP. teniendo en
cuenta el tipo de delitos.

En la tentativa, desde el día en que cesó la actividad delictuosa;

En el delito instantáneo, a partir del día en que se consumó;

En el delito continuado, desde el día en que terminó la actividad delictuosa; y

En el delito permanente, a partir del día en que cesó la permanencia.

3.4. La Interrupción

pág. 13
Interrupción de la prescripción de la acción penal se interrumpe por las actuaciones del
Ministerio Público o de las autoridades judiciales, quedando sin efecto el tiempo
transcurrido.

Después de la interrupción comienza a correr un nuevo plazo de prescripción, a partir del


día siguiente de la última diligencia.

Se interrumpe igualmente la prescripción de la acción por la comisión de un nuevo delito


doloso.

Sin embargo, la acción penal prescribe, en todo caso, cuando el tiempo transcurrido
sobrepasa en una mitad al plazo ordinario de prescripción.

3.5. Suspensión

Suspensión de la prescripción, si el comienzo o la continuación del proceso penal dependen


de cualquier cuestión que deba resolverse en otro procedimiento, se considera en suspenso
la prescripción hasta que aquel quede concluido.

3.6. Renuncia de la Prescripción.

En el Código Penal de 1991, esta figura aparece como la innovación más importante en


la materia de extinción de la acción penal y de la pena.

A través de esta institución el imputado tiene derecho a renunciar a la prescripción de la


acción penal, permitiendo que la acción penal pueda ejercitarse incluso superado el plazo
de prescripción. Es decir por un acto voluntario del imputado la pena puede ser ejecutada
en cualquier momento, sin importar el cumplimiento de los plazos prescriptorios.

La razón de ser del art 91 C.P. estaría orientado a la posibilidad de salvaguarda de su


reputación del imputado. Dado que en el subconsciente social permanece internalizada la
idea de quien se ve involucrado en un proceso penal merece reprobación social, censura
que subsiste aun cuando se emita pronunciamiento jurisdiccional que no suponga en
puridad una condena. Este artículo permite desarrollar un derecho, también de orden
constitucional y reconocido internacionalmente, como es el derecho al honor, la honra y la
buena reputación.

pág. 14
Prescripción ordinaria y extraordinaria:

El artículo 83 del Código Penal (CP), que señala: “Sin embargo, la acción penal prescribe,
en todo caso, cuando el tiempo transcurrido sobrepasa en una mitad al plazo ordinario de
prescripción”.

Lo que sucede es que ni siquiera se entiende la naturaleza jurídica de la interrupción de la


prescripción, cual es la de dejar sin efecto el tiempo transcurrido al momento de presentarse
la causal de interrupción, implicando el comienzo de un nuevo plazo. Debe entenderse que
esta es la regla y no como –equivocadamente– opina la doctrina y jurisprudencia
dominantes, que la prescripción extraordinaria siempre será igual al máximo de la pena
fijada, más la mitad.

El último párrafo del artículo 83, lo único que hace es fijar una garantía frente al exceso,
pues lo que quiere comunicar, es que en ningún caso, el plazo de prescripción puede
sobrepasar el máximo más la mitad. Ello por poner un límite temporal razonable.

Pongamos el ejemplo del homicidio (art. 106 CP), que prevé una pena de 6 a 20 años.
El plazo ordinario, será de 20 años, pero si se interrumpe dicho plazo, comenzará uno
nuevo, es decir, otros 20 años y no –sumados– 30, como erróneamente se cree. Aquí viene
la diferencia. Si por ejemplo, el plazo se interrumpe a los 5 años, el delito prescribirá a los
25 años, por cuanto la consecuencia de la interrupción es la de comenzar a correr un nuevo
plazo, es decir, esperar los 20 años como límite máximo de pena legal establecida. Pero si
la interrupción se da a los 15 años, no debemos esperar otros 20 años (que al final sumarían
35 años) como dice la regla, sino que en este caso, la prescripción se dará a los 30 años
(plazo máximo más la mitad), como garantía temporal impuesta por el legislador.

Esta es la única interpretación razonable y no como equivocadamente se ha venido


aplicando tal dispositivo legal. Argumentar lo contrario, implicaría afirmar que la
consecuencia jurídica de la interrupción, no es la de dejar sin efecto el tiempo transcurrido,
sino la de sumar (simplemente) la mitad del plazo máximo. Así, en todos los casos en que
se verifique una causal de interrupción, la prescripción se daría en un tiempo igual al

pág. 15
máximo más la mitad, circunstancia que vacía de contenido a la institución misma de
la interrupción, pues su naturaleza, no es la de sumar la mitad del plazo máximo, sino la de
dejar sin efecto el tiempo transcurrido.

Ordinaria:

Cuando el tiempo transcurrido es igual al máximo de la pena prevista para el delito


cometido que según el artículo 83 del código penal sucede por actuación del ministerio
público, de autoridades judiciales y por la comisión de nuevos delitos, por ejemplo delito de
hurto.

Extraordinaria:

Según el artículo 83 establece dos hipótesis que después de la interrupción comienza a


correr un nuevo plazo de prescripción y que la acción penal prescribe cuando el tiempo
transcurrido sobrepasa en una mitad al plazo ordinario de prescripción por ejemplo el
secuestro.

CASO DE EJEMPLO:

EXP. N.° 2506-2005-PHC/TC.


LIMA
VÍCTOR MANUEL
OTOYA PETIT
SENTENCIA DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
En Lima, a los 2 días del mes de julio de 2007, la Sala Primera del Tribunal Constitucional,
integrada por los señores magistrados Landa Arroyo, Alva Orlandini y Bardelli
Lartirigoyen, pronuncia la siguiente sentencia
ASUNTO
Recurso de agravio constitucional interpuesto por don Víctor Manuel Otoya Petit contra la
resolución de la Tercera Sala Penal para Procesos con Reos en Cárcel de la Corte Superior
de Justicia de Lima, de fojas 91, su fecha 27 de diciembre de 2004, que declara
improcedente la demanda de autos.

pág. 16
ANTECEDENTES
Con fecha 9 de noviembre del 2004, el recurrente interpone demanda de hábeas corpus y la
dirige contra el juez del Vigésimo Quinto Juzgado Penal de Lima, don César Guillermo
Herrera Casina. Refiere que es procesado por el supuesto delito de usurpación simple y que
los hechos que son materia del proceso tuvieron lugar el 17 de mayo de 1997, por lo que la
acción penal habría prescrito el 17 de noviembre de 2001. Señala que dedujo la excepción
de prescripción con fecha 26 de noviembre de 2001 y 1 de abril de 2002; sin embargo, sin
haberse resuelto los medios técnicos de defensa que dedujo para extinguir la acción penal
incoada en su contra, mediante resolución de fecha 3 de octubre de 2003 se le amplió la
instrucción por el delito de usurpación agravada. Señala, finalmente, que el Juez
emplazado, rechazando todos sus pedidos, dispone mediante la resolución de fecha 21 de
octubre del 2004 citarlo al acto de lectura de sentencia, por el delito de
usurpación agravada, programado para el día 16 de noviembre del 2004.
Realizada la investigación sumaria, el accionante se ratifica en su demanda. A su turno, el
magistrado emplazado refiere que se ha señalado fecha para lectura de sentencia debido a
que no se encuentra prescrita la acción penal toda vez que el delito de usurpación agravada
tiene una penalidad no menor de dos, ni mayor de 6 años por lo que, de acuerdo con lo
dispuesto en los artículos 80 y 83 del Código Penal, el término extraordinario de la
prescripción de la acción penal será a los 9 años; en consecuencia, a la fecha no ha operado
la prescripción, por lo que la presente demanda debe declararse improcedente.
El Trigésimo Cuarto Juzgado Penal de Lima, con fecha 18 de noviembre de 2004, declara
improcedente la demanda al advertir que si bien se había señalado fecha para lectura de
sentencia estando pendiente de resolver diversos petitorios del accionante, no es menos
cierto que con fecha 9 de noviembre de 2004 se dejó sin efecto dicha diligencia, no
habiéndose llevado a cabo el acto de juzgamiento. En consecuencia, a la fecha en que se ha
interpuesto la acción de garantía las afectaciones al debido proceso y a las garantías
de administración de justicia que se alegan, se vienen resolviendo en el mismo proceso.
La recurrida, con fecha 27 de diciembre del 2004, declara improcedente la demanda al
considerar que no existen elementos que señalen que nos encontremos ante un acto que
amenace la libertad individual o derechos conexos, por lo que el accionante debe hacer
valer su derecho en la vía judicial.
FUNDAMENTOS
1. 1. La presente demanda de hábeas corpus tiene por objeto cuestionar el proceso penal
que se sigue al recurrente por el delito de usurpación agravada. El recurrente alega que
viene siendo procesado a pesar de que ya ha transcurrido el plazo de prescripción de la
acción penal.
Prescripción de la acción penal

pág. 17
2. Conforme a lo señalado anteriormente por este Tribunal [Cfr. Exp. Nº 1805-2005-
HC/TC, Máximo Humberto Cáceda Pedemonte la prescripción, desde un punto de vista
general, es la institución jurídica mediante la cual, por el transcurso del tiempo,
la persona adquiere derechos o se libera de obligaciones. Y, desde la óptica penal, es una
causa de extinción de la responsabilidad criminal fundada en la acción del tiempo sobre los
acontecimientos humanos o en la renuncia del Estado al ius punendi, bajo el supuesto de
que el tiempo transcurrido borra los efectos de la infracción, existiendo
apenas memoria social de ella. Dicho de otro modo, en una Norma Fundamental inspirada
en el principio pro hómine, la ley penal material otorga a la acción penal
una función preventiva y resocializadora, en la cual el Estado autolimita su potestad
punitiva; orientación que se funda en la necesidad de que, pasado cierto tiempo, se elimine
toda incertidumbre jurídica y se abandone el castigo de quien lleva mucho tiempo viviendo
honradamente, consagrando de esta manera el principio de seguridad jurídica.
3. Así, la ley considera varias razones que permiten extinguir la acción penal, en virtud de
las cuales el Estado auto limita su potestad punitiva: causas naturales (muerte del
infractor), criterios de pacificación o solución de conflictos sociales que tienen como base
la seguridad jurídica (cosa juzgada o prescripción) o razones sociopolíticas o de Estado
(amnistía).
4. En este orden de ideas, resulta lesivo a los principios de economía y celeridad procesal,
vinculados al derecho al debido proceso, que el representante del Ministerio Público, titular
de la acción penal, sostenga una imputación cuando esta se ha extinguido, o que formule
denuncia penal cuando la potestad persecutoria del Estado, por el transcurso del tiempo, se
encuentra extinguida, y que el órgano jurisdiccional abra instrucción en tales supuestos.
5. El Código Penal reconoce la prescripción como uno de los supuestos de extinción de la
acción penal. Es decir, que mediante la prescripción se limita la potestad punitiva del
Estado, dado que se extingue la posibilidad de investigar un hecho criminal y, con él, la
responsabilidad del supuesto autor o autores del mismo.
6. El artículo 80 del Código Penal vigente al momento en que se cometieron los hechos
imputados establece que la acción penal prescribe:
[E]n un tiempo igual al máximo de la pena fijada por la ley para el delito, si fuera privativa
de libertad [...].
7. Por otro lado, es preciso tomar en cuenta que, conforme al artículo 83 del Código Penal,
en caso de que hubiera operado una de las causales de interrupción de la prescripción, a
saber, las actuaciones del Ministerio Público o de las autoridades judiciales o la comisión
de un nuevo delito doloso, será de aplicación el plazo extraordinario de prescripción, que
equivale al plazo ordinario de prescripción más la mitad.
Análisis del caso

pág. 18
8. En autos obra, a fojas 26, el auto de apertura de instrucción de fecha 1 de setiembre de
1997, donde consta que al accionante se le abrió instrucción por el delito de usurpación, por
hechos ocurridos el 16 de mayo de 1997. Asimismo, obra en autos, a fojas 34, la resolución
de fecha 25 de junio del año de 1999, emitida por el Noveno Juzgado Penal de Lima, en
donde se dispone que la extinción de la acción penal solicitada se resuelva juntamente con
la sentencia.
9. Asimismo obra, a fojas 46 y 47, tanto el dictamen fiscal, de fecha 29 de setiembre del
2003, en donde se solicita la ampliación de apertura de instrucción para comprender al
accionante como presunto autor del delito de usurpación agravada, así como la resolución
de fecha 3 de octubre del 2003 en donde el Noveno Juzgado Penal de Lima resuelve
ampliar el auto de apertura de instrucción contra el accionante por el delito de usurpación
agravada.
10. De otro lado, a fojas 49, consta que mediante resolución de fecha 21 de octubre del
2003, el Juez del Noveno Juzgado Penal acepta la recusación planteada por el accionante;
siendo así que la Sexta Sala Especializada en lo Penal para Procesos con Reos Libres de la
Corte Superior de Justicia de Lima, mediante resolución de fecha 11 de junio del año 2004,
obrante en autos, a fojas 52, dispone que la causa se remita al Vigésimo Quinto Juzgado
Penal de Lima. En este sentido se aprecia que el Juez emplazado, mediante resolución de
fecha 9 de julio del año 2004, obrante en autos, a fojas 54, resuelve, por disposición
superior, avocarse al conocimiento de la causa; asimismo consta que dicho magistrado,
mediante resolución de fecha 21 de octubre del año 2004, obrante en autos, a fojas 55,
señala fecha para la diligencia de lectura de sentencia.
11. El artículo 202 del Código Penal sanciona al delito de usurpación simple con una pena
privativa de libertad no menor de uno ni mayor de 3 años; asimismo se tiene que según el
artículo 204 del mismo cuerpo legal, la pena privativa de libertad para el delito de
usurpación agravada es no menor de 2 años ni mayor de 6 años. Por tanto, de conformidad
con el artículo 83 del Código del Código Penal, el plazo de prescripción extraordinaria sería
de nueve años. Como se ha señalado, si bien se abrió instrucción contra el accionante por el
delito de usurpación simple, luego se amplió la instrucción por el delito de usurpación
agravada. Siendo así, habiendo ocurrido los hechos, según el auto de apertura de
instrucción, el 16 de mayo de 1997, la acción penal no habría prescrito al momento de
interponerse la demanda, por lo que la pretensión no puede ser estimada.
Por estos fundamentos, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la
Constitución Política del Perú
RESUELVE
Declarar INFUNDADA la demanda de hábeas corpus.
Publíquese y notifíquese.

pág. 19
SS.
LANDA ARROYO
ALVA ORLANDINI
BARDELLI LARTIRIGOYEN.
 

MAPA CONCEPTUAL

pág. 20
BIBLIOGRAFÍA

Calderón, A. (2004). Derecho penal Parte General. Lima Perú: Fondo editorial
escuela graduados Águila y Calderón.

pág. 21
Roy, L. (1997). Extinción de la acción penal y de la pena. Perú: Editora Jurídica
Grijley

https://legis.pe/la-prescripcion-extraordinaria-siempre-sera-igual-al-maximo-la-pena-
fijada-mas-la-mitad/

https://listindiario.com/puntos-de-vista/2013/2/3/264529/Como-se-extingue-la-accion-
penal

pág. 22

También podría gustarte