Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Documento Sin Título
Documento Sin Título
"Las parejas masculinas usan pantalón negro, camisa blanca, pañoleta azul cruzada, chal
flequeado, y cruzado del hombro hasta la cintura, alpargatas de cabuya, sus caras se
ocultan detrás de un velo que lleva dibujado los ojos, las cejas y la boca.
La pareja femenina emplea el follado típico de la mujer campesina, con su refajo o follado
de lana debajo, la blusa de colores adornada con boleros y encajes. Todos llevan en sus
cabezas un sombrero adornado con cintas de colores, las mujeres llevan pegadas las
trenzas hechas de lana y permiten resaltar el rol femenino dentro de la danza.”
Son 9 días bailando los ritmos propios de los Andes, evocando el sincretismo religioso
donde se cruzan los ritos católicos e indígenas, Las Mojigangas son dirigidos por el capitán,
Ángel María Pascuaza, agricultor, tiene 83 abriles, y entró a hacer parte de esta danza
desde los 13 años, lleva 69 años bailando.
El baile de las Mojigangas de Funes, representa la identidad de un pueblo que con música y
danza día a día lucha por su memoria.
El grupo con su música andina y ritmos autóctonos se asimila a lo que fue la cultura
indígena de antes, en donde los instrumentos todos son ancestrales, esto viene de familia a
familia, ahora son 18 danzantes y 6 músicos.”
“En época de la Colonia, los españoles, abusando del poder que tenían sobre estas tierras y
sus habitantes, bebían chicha hasta embriagarse y para satisfacer sus deseos sexuales
abusaban de forma violenta de las indígenas. Éste hecho hizo reflexionar a los hombres
quienes para evitar estos desmanes armaron un plan: se disfrazaron con los vestuarios de
las mujeres y los esperaron, ya llegada la noche, cuando los españoles iban a iniciar con su
festín, se enfrentaron a hombres que los castraron y les dieron muerte”.
Esta es una de tantas versiones que existen sobre la aparición de las mojigangas en Funes,
una más que destaca en los pueblos ancestrales que poblaron el sur, la valentía de sus
pobladores y también la resistencia al dominio español, por eso el baile de las Mojigangas
se constituyen en un legado cultural e histórico que año tras año en las fiestas patronales
evocan la resistencia.