Primero, desglosemos la palabra sentido. Esta palabra tiene 2
acepciones, las cuales nos pueden dar a entender un poco más el concepto al que queremos llegar.
“Sentido” es, en primer lugar, significado, pues así es como nos
preguntamos qué sentido tiene tal cosa u otra. Igualmente soñamos con tener el conocimiento de la significación de la creación de nuestro ser en general. Siendo así, un interrogante, hasta el momento, imposible de responder. Con continuidad nos preguntamos el cómo y el porqué de las cosas, y algunas cosas que nos suceden pueden parecer absurdas o sinsentido.
“Sentido” también es, una dirección, es el sentido en que va
una marcha. De ahí se origina la pregunta “hacía dónde” y también solemos usar esta acepción cuando queremos saber el destino de nuestra vida, que rumbos tomaremos y a donde llegaremos.
Ya sabiendo un poco más que significado recibe la palabra
sentido, podemos dar una explicación un poco más coherente a la hora de preguntarnos por “el sentido de la vida”. La respuesta más clara y a la que la mayoría de personas llegamos es que, el sentido de la vida consta en encontrar la felicidad, bien sea por las decisiones que tomemos y también de las opciones que tengamos para decidir, o bien sea por vivir una vida con sentido, la cual la veo más arraigada a la idea de felicidad. Cada vida personal es un enigma por descubrir. Hay que leer en la vida para descubrir su sentido.
La mayor parte de las religiones dan una respuesta
trascendental, diciendo que el sentido de la vida no se encuentra en la misma, sino que esta vida es una preparación para la otra vida que viviremos en otra dimensión.
En religiones monoteístas la fe y nuestro comportamiento
determinan si Dios nos manda a un lugar de premio o castigo.
En la religión vikinga lo que importaba era la manera en la que
uno moría, era vivir para morir.
En religiones de India es alcanzar la iluminación y romper el
ciclo de la reencarnación.
Por otro lado está la filosofía que usa la dialéctica y la
mayéutica, la ontología, la metafísica, gnoseología, epistemología, lógica, ética, axiología y estética.
En los hedonistas el sentido de la vida está en encontrar el
placer. Aristóteles, era partidario de que conseguir una cosa siempre es un medio para conseguir otra, por lo tanto hay que distinguir cual es el bien supremo, ya sea felicidad o virtud. Existen también las ciencias ocultas y el deseo del ser humano por saber su futuro y encontrar las respuestas a sus constantes preguntas es muy antiguo. En esta ciencia se ven los horóscopos, el tarot, la quiromancia y el análisis de las estrellas.