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DICTADURA DISFRAZADA DE DEMOCRACIA.

Porque sí Colombia, es un país que supuestamente se basa en la democracia


para elegir a sus gobernantes (lideres), y además cuenta con un número
considerable de habitantes, para ser un poco más exactos 50 millones de
colombianos, ¿siempre elegimos a las mismas familias que en total son 54
durante los últimos 60 años?

Antes de hacer referencia a la política que se viene dando actualmente en


Colombia, quisiera traer a colación la película “Cóndores no entierran todos los
días” de Gustavo Álvarez Gardeazabal donde la problemática central es la
violencia que se dada a mitad del siglo XX en Colombia, a causa del
enfrentamiento de los partidos políticos de la época como lo eran los
conservadores y liberales, me parece importante resaltar los mecanismos que
se usaban en ese entonces por parte de los políticos, para mantenerse en lo
mas alto de la sociedad y ejercer un control total sobre el pueblo, es ahí
cuando me doy cuenta que nuestros queridos representantes(políticos) siempre
han usado el miedo para lograr sus fines, ejemplo de ello es las innumerables
masacres que se dan en distintas zonas del país y que hasta el día de hoy no
paran, y teniendo como principales victimas a las personas más vulnerables de
nuestra sociedad, a aquellas que se les han negado muchas cosas que por
derecho les corresponden y han sido ignorados totalmente, sin dejar de lado
que desde esa época los mandatarios que eran elegidos ya fuese por voto
popular o en el peor de los casos por imposición, utilizaban su poder para poder
evadir la justicia, afirmando que los delitos que ellos cometían eran
justificables y que están dentro de sus principios.

En cuanto al arraigó que tenían las personas hacia su posición política, en ese
entonces era mas clara, pues se era liberal o se era conservador, no había un
término medio por así decirlo, otro factor importante que se logra evidenciar y
que si nos trasladamos a la actualidad, se puede ver, que el control de los
candidatos y su administración ya no es dirigida por el partido político, si no
que pasa a ser intervenido por las familias con mas influencia en la actividad
socioeconómica del país, si bien es cierto que siempre nos han gobernado las
mismas familias, los partidos políticos que son los que dan el aval pasan a un
segundo plano.
A esto se le suma la doble moral y la falta de ética que nos caracteriza como
seres humanos y buenos colombianos, ya que siempre tratamos de justificar
nuestros actos, como una conducta normal de nuestros principios y/o
costumbres, y que está bien si yo lo hago, pero si otra persona lo hace, lo
condenamos y lo repudiamos, diciendo que no debería ser parte de la sociedad,
un ejemplo de lo anterior es el papel que ha jugado la iglesia dentro, de esta
serie de eventos que se presentan en la sociedad colombiana, puesto que esta
institución justificaba la violencia que se daba por parte de un partido político,
diciendo que lo que hacían era defender sus derechos y mantener un equilibrio
dentro de la misma , esto se debía también a un intercambio de interés entre
las dos partes.

Algo parecido es lo que quiere dar a entender Gabriel García Márquez en su


libro “la mala hora” donde a partir del transcurso de una serie sucesos en un
pueblo de Colombia, muestra el panorama que se vive en nuestro país desde
hace años y que salen a relucir aspectos como la violencia, el desplazamiento
forzado, el abuso de las autoridades, nuestra ingenuidad obligada y también
nuestra falta de decoro para decir y hacer las cosas.

Lo sugestivo del texto, es la ironía con la que se hablan los personajes y como
esto nos ayuda a entender sus verdaderos pensamientos, pero debido a el
entorno en el que se encuentran decir las cosas sin tapujos, trae sin duda
ciertas consecuencias, como por ejemplo la desaparición forzosa y donde las
autoridades aprovechan la situación y aseguran que la persona desaparecida es
uno de esos malandros que no merecen estar en la sociedad.

En este momento quiero remitirme al libro “¡BASTA YA ¡COLOMBIA:


¡MEMORIAS DE GUERRA Y DIGNIDAD” un informe del grupo de memoria
histórica, más exactamente al capítulo número uno que trata sobre las
dimensiones y modalidades de violencia!

Este documento es de vital importancia, ya que lo que se busca con este es dar
a conocer las verdaderas cifras que da dejado la violencia en Colombia durante
años, ya que como es conocido los medios de comunicación al menos en su
mayoría no son muy realistas con respecto a información que proporcionan, y
donde los televidentes la toman como cierta desconociendo totalmente el
trasfondo de las situaciones que se presentan en el país.
Inicialmente se da un cifra aproximada del total de victimas que ha dejado el
conflicto armado entre los años 1958 y 2012 con un total de 220.000 personas,
comparando el numero de muertos a la desaparición de una ciudad como
Popayán o Sincelejo, ahora bien es cierto que normalmente la violencia viene
dada por factores propios de la misma (actores armados), sin embargo en
Colombia podemos decir que la violencia también se da por estrategias políticas
y militares basadas en alianzas complejas y dinámicas sociales.

Luego realizar un informe de este tipo, no es una cuestión sencilla pues la


recolección de información se dio muy tarde, por la falta de disposición de los
políticos, pues no querían reconocer que había una problemática y muchos
menos querían enfrentarla, además de problemas logísticos. Para el 31 de
marzo del 2013 según el registro único de victimas reporto alrededor 166.069
civiles como victimas fatales del conflicto armado hasta la fecha, obviamente
exceptuando aquellas que no lograron ser reconocidas y que están dividas entre
civiles y combatientes, pero siendo siempre mayor la cifra de civiles afectados
que no tenían o pertenecían a alguno tipo de combate. Estadísticamente
hablando tres de cada cuatro homicidios han quedado por fuera de la justicia.

Al generalizar la violencia los victimarios aprovechan para invisibilizar sus


acciones y llegar a confundirlas por hechos violentos perpetrados por otros
grupos ilegales, las practicas mas usuales son actos sicariales, desapariciones
forzadas y asesinatos selectivos, logrando así que se dificultara el
esclarecimiento de los hechos y se esparciera la resonancia de sus diferentes
modalidades de violencia. Pero la letalidad de la violencia del conflicto armado
no ha sido homogénea ni constante.

Desde el año 1958 hasta el año 2002 se dieron varios cambios, pues hasta el
año 1964 estuvo marcada por la transición de la violencia bipartidista a la
subversiva, luego entre 1965 y 1981 se dio una violencia baja y estable
marcada por la irrupción de la guerrilla y su confrontación con el estado, ya
para los años 1982y 1995 se continuo con la expansión de las guerrillas, la
aparición de grupos paramilitares, la propagación del narcotráfico, las
reformas democráticas y crisis políticas, finalmente el nivel mas critico se dio
por el fortalecimiento militar de las guerrillas , la expansión nacional de los
grupos paramilitares, crisis estatales y la reconfiguración del narcotráfico.
Otra modalidad que debieron enfrentar las diferentes comunidades fue el
secuestro y que pasándolo a cifras reales es equivalente a poblaciones
completas de municipios como San Pablo en el sur del departamento de Bolívar,
adicionalmente esta el desplazamiento que para el año 2012 era de 26 personas
desplazadas por hora y cada 12 horas era una persona secuestrada, pero para
el año 2005 una persona fue secuestrada cada 8 horas y un civil o un militar
cayeron cada día en una mina antipersonal, convirtiendo a Colombia en el
segundo país después de Afganistán con mayor número de víctimas con minas
antipersonal y el primero con el mayor número de desplazados.

La gravedad de todo esto radica en que no se le ha dado la importancia, es la


implicación que han tenido las fuerzas militares dentro de las distintas
muestras de violencia, y que según ley son los que protegen la soberanía del
estado, aparte que no se les ha dado el castigo correspondiente a sus delitos. Y
sin duda alguna la falta de empatía tanto de los medios quien son los
encargados de divulgar las noticias, así como también la ingenuidad obligada de
nosotros hacia nuestros compatriotas.

Luego, de lo dicho anteriormente tengo que hacer un recuento de lo que se


entiende por democracia y también cómo son definidos la política y el político.

Ariel en su video sobre la clase política tradicional hace una relación entre la
democracia y el político y los diferentes conceptos que se han generado, según
esto los gringos toman la política como un establecimiento con ciertas
estructuras políticas, económicas y sociales que están destinadas a tener el
poder, en el caso de los europeos lo toman como un arte y/o profesión.

Sin embargo, en unos estudios recientes realizados apareció el concepto de


autoritarismos subregionales, y que lo único que genera es un rompimiento total
de la democracia, siendo así, tres factores los que generan estos
autoritarismos; en primer lugar aparece la violencia ya que se genera una
homogenización política provocando así que se consoliden las elites, una
muestra de ello es la expansión militar AUC entre los años 1997-2005, a esto
se le suma la corrupción que se evidencia en lo que conocemos como mermelada
que es básicamente la desviación de recursos públicos, ahora bien, en las
próximas elecciones presidenciales la nueva generación será quien elija al
presidente, pero nuestros queridos políticos no quieren perder su poder y
buscan que en el congreso se vote una reforma política tratando de evitar este
cambio que ya es prácticamente inevitable.
Luego en nuestro país criticamos la política que hay en otros países como
Venezuela, Bolivia y los calificamos como regímenes, dictaduras, sin contar que
en Colombia hemos elegido a los mismos durante más de 60 años, ¿pero cómo
logran estas familias mantenerse en el poder?, anteriormente mencione los
autoritarismos subregionales, luego estos políticos se encargaron de crear
casas políticas en todo el país para distribuir su poder.

En el video los “clanes políticos que gobiernan en Colombia”, desarrollado por la


revista semana y en el que Ariel Ávila junto con otros expertos expusieron
cómo funcionan los diferentes clanes políticos en Colombia, se hizo referencia
a tres en específico, empezando con los CHAR que funcionan y tienen más
influencia política en la costa atlántica, uno de los fuertes de este clan es el
poder político y económico que tienen, pues cuentan con 25% de contratación
de concesión vial y aeroportuaria del país debido a que cuentan con bastantes
maquinarias clientelares (olímpica, superdroguerias).

Entonces podríamos decir que un problema aquí es, como lo confesaron algunos
de los miembros de este clan es la compra de votos y la retención de cedulas,
provocando una competencia desleal por tanto lo que habrían de ser votantes e
importantes factores dentro del desarrollo de la misma no lo son. Si bien es
cierto y tomando como un ejemplo Barranquilla quien ahora su alcalde es
Pumarejo y que desde un principio era el candidato con mas opciones a ganar la
alcaldía, hasta tal punto que se dijo que no era necesario las elecciones, de esto
me referiré mas adelante tomando la entrevista que dio León Valencia a dos
orillas. Bueno volviendo al tema Barranquilla como ciudad ejemplo por el
increíble progreso que tuvo en los últimos ocho años, es innegable tal vez la
gran gestión que hizo o hicieron los Char, sin embargo, se tienen las pruebas
suficientes para enviar a la cárcel a más de un miembro de este clan, pero ¿Por
qué si tienen las pruebas, estos personajes siguen ejerciendo como si nada?
Muy simple o no tanto, ellos siempre han tenido sus estrategias para desviar la
atención, como comprar un jugador para el equipo local o mejor dar una
entrevista en las mejores emisoras, y como es sabido los colombianos por
naturaleza tenemos un problema de memoria.

Mas adelante Esteban Salazar cuenta como esta esto de los clanes ya en el
departamento de Córdoba, “se puede narrar como una novela de amores,
engaño y corrupción” y que hablando a grandes rasgos en lo que se refiere a la
gobernación, hace mención a los dos últimos mandatarios, el primero
condenado por parapolítica y el segundo vinculado a mas de 21 procesos por
malos manejos , ya en las ultimas elecciones regionales del 2019 dan como
ganador a Orlando Benítez , quien es apoyado por David Barguil y Gustavo
Petro con un supuesto voto de opinión, este señor Benítez es además apoyado
por el clan liberal donde sus integrantes o la gran mayoría son investigados por
la desviación de recursos públicos además de tener relación con la parapolítica,
o mejor dicho, ser de cierta manera herederos de estos votos manteniendo así
el control político de la región. Y como si fuera poco Orlando Benítez es
apoyado económicamente por el clan musismo liderado por el ahora preso y
exsenador Mussa Besaile quien es investigado por el cartel de la toga y entre
otras cosas, además de contar con otro hermano preso Edwin Besaile quien
fuera gobernador del departamento y fue destituido por la procuraduría ,
luego esto, no es un impedimento para seguir ejerciendo control político, pues
John Besaile ocupa la curul de su hermano y sumándole a esto, este señor
Edwin es uno de los mejores amigos de Oto bula el cerebro de Odebrecht,
bueno por algo será que seguimos siendo robados.

Ya para el ultimo clan que se da en el departamento de la Guajira, y conocido


como nueva fuerza guajira la situación no es diferente, en cambio es mas
aberrante aun, ya que los integrantes de esta casa política se han aprovechado
de los recursos que tendrían que ser para cientos de niños. Estos politiqueros
no hacen más que desviar los recursos públicos, manejar el departamento de
prosperidad social ,incluido el ICBF , además de acabar con los recursos
naturales, ¿pero cómo es posible que se presenten este tipo de situaciones,
donde siguen gobernando los mismos? , pues usando la estrategia de la
retención de cedulas y obviamente la violencia generando el temor de sus
habitantes, como quedo evidenciado en un video y donde un candidato sale a la
calle con otros sujetos con armas largas. Definitivamente La violencia es el
único lenguaje que entendemos y que paradójicamente no nos permite hablar.

Sin duda alguna, para mi criterio nos encontramos de frente a un régimen


disfrazado de democracia, y con esto me refiero a las 54 familias que
gobiernan a 50 millones de colombianos, esto se debe según León Valencia a que
los partidos ya se volvieron en rehenes de las casas políticas ya que estas son
las se encargan de la administración pública (contratación, servicios) y los
movimientos políticos se subordinan alrededor de estos, creando coaliciones de
tal manera que salen a flote candidaturas que son muy cuestionadas por sus
antecedentes y relaciones que tienen con personajes que han generado
controversia por la manera como han gobernado, a esto se le llamado
autoritarismos regionales, ya que, los partidos no son los que deciden a quien
dar aval, tal vez por prestigio; si no que lo hacen por el control absoluto del
poder.

En conclusión, uno pensaría que la situación que vive nuestra democracia tiene
un único responsable son los políticos y su politiquería, y sus formas para
mantenerse en la cima de esta pirámide, sin embargo, yo creo que una situación
que ha contribuido bastante para que estemos en este nivel de corrupción es
el pensamiento individualista, de la búsqueda únicamente del bien propio, y esa
idea de si hay un problema y no me afecta directamente deja de importarme,
creería yo, que es el momento para que empecemos a salir de la burbuja que
solamente encierra nuestra realidad, donde vemos solo lo que nos gusta y
queremos ver, es increíble que a final de cuentas y aunque no queremos
aceptarlo nos encanta la violencia (la que no nos toca a nosotros),ser robados y
que se nos quite por completo nuestra identidad(porque somos militantes del
mal hacia al otro, ya no nos definimos),por esto elegimos a quienes generan
violencia, elegimos a nuestros verdugos.

En definitiva, somos todos unos fascistas, hipócritas buscando una igualdad


efímera, cuando lo único que corre por nuestras venas es la avaricia y el poder.

ELABORADO POR : JOHANA ALEXANDRA SANABRIA ESPINOSA

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