Párrafo 1:

Don Hugo siempre demostró mucha habilidad para hacer negocios. Él en pleno secuestro,
con sus fuerzas nulas, no perdió su alma de comerciante, y en su afán por ganar la libertad,
logra convencer a los secuestradores de negociarla. Esta gran capacidad lo lleva también a
sacar el mejor provecho de los momentos difíciles. Es el año 1992, cuando gracias a la
apertura económica impulsada por el entonces presidente Gaviria, y debido al bajo
rendimiento de sus ganancias, decide cambiar el rumbo de sus negocios y es allí, donde se
convierte en un próspero poseedor de grandes extensiones de tierra cultivadas con caña de
azúcar. Todo lo anterior, es una demostración de su tenacidad y vasta capacidad para tomar
las mejores y sabias decisiones llevándolo al éxito inminente en todo lo que se propone.

Párrafo 2:
Don Hugo trabajó fuerte para convertirse en un terrateniente. A lo largo de su vida realizó
sacrificios. Desde los 13 años abandono la escuela y se dedicó a los negocios, obviamente,
al inicio las cosas no fueron fáciles, trabajó en las veredas de los pueblos y luego se
independiza con unos pocos ahorros, su nuevo negocio se centra en la compra y venta de
banano y plátano. A los 15 años con más conciencia de la vida y ya una experiencia mayor
en los negocios, toma la determinación de viajar, contando con la suerte de tener amigos
por toda Colombia, llega a la ciudad de Ibague donde se encuentra con Ignacio Peláez
quien le ofrece un trabajo en una finca, a los tres meses decide volver (con los ahorros fruto
de su trabajo). A su regreso, se dedica a la siembre de tomates y naranjas en una plaza de
tierra propiedad de su abuela, esta nueva aventura, le permite a sus apenas dieciséis años,
conocer gran parte de la geografía colombiana. Ya para los años sesenta, logra obtener un
terreno de 50 plazas con disponibilidad de sembrar lo que quisiera. Así prosigue su vida,
entregado a la siembre de todo tipo de legumbres. Para los años 90 ya con su capital
consolidado, decide en compañía de su socio, cambiar de negocio, pues gracias a las
políticas de apertura económica dictadas por el ejecutivo de momento, estaban perdiendo
participación en mercado y con un panorama poco alentador, se inicia en el cultivo de la
caña de azúcar, haciendo de este un gran poseedor de tierras… todo gracias al fruto de su
dedicación, esfuerzo, sacrificio, astucia y determinación.

Párrafo 3
La postura que tienen don Hugo y los bandidos frente al trabajo son muy diferentes. El
primero un hombre ejemplar que trabajó toda su vida para lograr sus objetivos trazados,
que le ha costado, conseguir lo que tiene. Los segundos, se acostumbraron a obtener dinero
fácil, sin importar el daño que puedan ocasionar, ni a quien puedan perjudicar con tal de
obtener dinero sin el mínimo esfuerzo. Respecto a las posturas, don Hugo a lo largo de su
historia demostró que la mejor forma de salir adelante es con trabajo arduo y los bandidos
nos muestra que solo se requiere de la intimidación, la fuerza, la muerte, la privación de la
libertad, para conseguir algún tipo de recursos. Ambos que por intuición demuestra que son
de dos naturalezas diferentes, don hugo con una idea de trabajo limpia y sin mancha,
mientras los bandidos son seres de maldad, de vida fácil y sin el más mínimo
remordimiento por la vida.