Está en la página 1de 3

UNED GEOGRAFÍA

Tema XI La vegetación
4. Clasificación de la vegetación natural

4.1 Distintos criterios


Las clasificaciones de la vegetación son diversas según el criterio, la escala y el método que se utilice
4.2 Clasificación estructural

Bosque
Es una formación vegetal constituida por árboles que crecen unos junto a otros y forman un estrato de hojas que cubre
de sombra el suelo, formando un microclima. Pueden encontrarse en muchas regiones con diferentes climas, aunque
requieren un volumen mínimo de precipitación de 500 mm anuales (por debajo comienza la sabana), admitiendo
variaciones estacionales, configurando así diferentes tipos de bosque con diferentes especies: selva tropical lluviosa,
bosques tropicales de hoja caduca, bosques de zonas templadas, con mayores diferencias estacionales y bosques
boreales o taigas, con condiciones climáticas extremas. Es importante considerar la abundancia de especies, su
morfología y sus características.
Sabana
Es una combinación de árboles y arbustos en proporciones variables. La proporción de árboles es baja, predominando
las extensiones herbáceas. Según la proporción de árboles existen varios tipos: bosque sabana, parque sabana y
sabana herbácea.
La vegetación de sabana tiene relaciones con el clima, el suelo y la geomorfología, así como con la acción antrópica
(incendios y desmontes) e influencias paleoclimáticas.
Las características climáticas son de baja precipitación total anual y desigual distribución estacional. Se encuentran
ocupando extensas llanuras y mesetas.
Pradera
Es una extensión cubierta en su mayor parte o totalmente de hierba, en sus distintas variedades: pradera alta hasta 1’5
m de altura, mixta en torno a 0’8m y pradera corta. Las condiciones climáticas son amplias, en general con poca
precipitación anual y gran amplitud de temperaturas, desde climas con calor extremo a climas fríos.
Desierto
Medio de vegetación escasa y dispersa, que deja al desnudo un elevado porcentaje del suelo, quedando expuesto a los
procesos de meteorización y erosión.
La vegetación presenta aspectos diferentes en función de la naturaleza del material rocoso donde se asiente. Por lo
general son plantas de pequeño tamaño adaptadas a la sequedad, reduciendo la superficie transpirante y desarrollando
las raíces, o bien convirtiéndose en semillas que actuarán tras la lluvia.
El desierto está desprovisto de árboles, si bien pueden darse algunas plantas leñosas en desiertos de zonas templadas.
5. Distribución de la vegetación

5.1 Zona intertropical

Selva ecuatorial
La zona de clima ecuatorial cuenta todo el año con una gran regularidad térmica y pluviométrica, lo que da lugar a
una rica y exhuberante vegetación, en su mayoría de hoja ancha y perenne, denominada selva tropical.
Las plantas pueden llevar a cabo sus funciones en cualquier época del año, haciendo que por ejemplo los árboles
cambien sus hojas paulatinamente a lo largo del año, lo que lleva a considerarlos como de hoja perenne. Si lo hacen a
la vez, se lleva a cabo en periodos muy cortos de tiempo.
En las selvas tropicales existe una gran riqueza vegetal (en la selva amazónica existen más de 8.000 especies), pero
todas tienen un elemento común: están constituidas por plantas megatermas (necesitan altas temperaturas para vivir).
Predominan las especies arbóreas, compuestas por árboles muy desarrollados en altura (hasta 60 m), dispuestos en
estratos, generalmente tres arbóreos y dos de plantas leñosas de gran desarrollo. Aunque la masa arbórea parece
homogénea existen diferencias según los pisos: el superior está espaciado, el segundo tiene mayor continuidad en las
copas de los árboles, mientras el inferior son brotes jóvenes y adultos de copas pequeñas y achatadas.
Junto a las especies arbóreas están otros componentes como enredaderas (lianas de hasta 20 cm de diámetro), plantas
epifitas (se desarrollan sobre otros vegetales, sin raíces en el suelo, como las orquídeas) y plantas herbáceas (su
tamaño y densidad varía en función de la luz y del espacio disponible).

Tema XI La vegetación 1
UNED GEOGRAFÍA

En regiones litorales existe una adaptación a suelos inundados y a la salinidad de las costas, los manglares. Se dan en
la costa Oeste, donde hay aguas cálidas y pueden extenderse hacia el interior ocupando marismas y lagunas. Están
formados por plantas de raíces aéreas y un follaje adaptado a una elevada transpiración.
Bosque tropical con estación seca: selva tropical, sabana
La selva tropical presenta modificaciones con respecto a la selva ecuatorial en función de la pluviosidad. La
vegetación de la selva tropical es menos densa y con menos estratos que la ecuatorial. Se incrementan las especies de
hoja caduca, manteniéndose muchas de hoja perenne, y hay mayor densidad de sotobosque herbáceo al penetrar más
la luz. Son características las asociaciones de bambú.
La vegetación de sabana se deriva de un período seco superior a tres meses o una adaptación a las variaciones del
contenido acuoso del suelo. Pueden encontrarse en los valles más húmedos, llamados bosques-galería tropicales.
Dentro de la sabana existen diferencias según la aridez. Sus características generales se traducen en un menor número
de especies que en las selvas, una vegetación arbórea compuesta por especies resistentes al fuego y una reducción en
la altura de los árboles (entre 10 y 18 m). La densidad del arbolado decrece con la estación seca hasta llegar a un
paisaje con arbustos leñosos con espinas.
Las especies herbáceas presentan modificaciones en altura, llegando hasta 3’6 m en zonas húmedas, y por debajo de
60 cm en zonas áridas.
5.2 Zona templada
Comprende una amplia gama vegetal adaptada a las variedades climáticas. Según se asciende en latitud se distinguen:
- Bosques de hoja perenne de climas subtropicales.
- Bosques de hoja caduca de climas templados y húmedos.
- Bosques de coníferas de climas subártico y marino de latitud media.
Bosques de hoja perenne de climas subtropicales
En los climas Cfa existe un bosque mixto de menor cobertura que los de la zona intertropical húmeda, con menor
altura y número de especies, con mezcla de caducifolios y perennes debido a la estacionalidad. Donde ha intervenido
poco la mano del hombre dominan los árboles frondosos (robles, arces, tilos, magnolios), destacando la laurisilva,
con bosques de hoja perenne y menor presencia de coníferas. Existe un amplio desarrollo de arbustos (landas o
brezales, resultado de la degradación del bosque templado caducifolio) y musgos.
En los climas Csa (mediterráneos), las plantas se encuentran condicionadas por la sequía y el calor estival, con
árboles de hojas pequeñas, fuertes y enceradas, de hoja perenne, troncos cortos de corteza gruesa con un profundo
sistema de raíces. Forman bosques claros estratificados en tres formaciones: cubierta arbórea, arbustiva y herbácea.
En la cubierta arbustiva hay especies de hoja caduca y perenne de entre 1 y 3 m, destacando el maquis, la garriga y el
chaparral. El maquis y la garriga son de monte bajo, derivadas de la acción humana o resultado del clima en la
periferia de los bosques esclerófilos. El maquis, en suelos silíceos, incluye numerosas especies, algunas espinosas. La
garriga, en suelos calizos, es discontínua y alcanza menor porte. El chaparral, en regiones más meridionales, es un
bosque enano arbustivo.
La estepa arbustiva o herbácea anuncia el desierto.
Las especies más características son el alcornoque (en suelos silíceos con precipitaciones), la encina (en suelos
calcáreos), las coníferas cálidas (pinos) en zonas secas, olivares y plantas aromáticas (romero, tomillo, lavanda,
jara...).
Bosques de hoja caduca de climas continentales húmedos
Los climas continentales, más rigurosos, desarrollan bosques de hoja caduca, bosques de coníferas y praderas
herbáceas. La variedad de especies difiere según los continentes, predominando árboles altos de hoja grande. En el
piso inferior hay arbustos y árboles jóvenes, y en el piso más bajo las hierbas se desarrollan cuando el suelo recibe luz
(en primavera). Las especies más representativas son, en regiones frías, el haya, roble y fresno; en suelos con
deficiente drenaje, el olmo y el fresno. Pueden encontrarse abedules, nogales, arces y castaños.
Bosques de coníferas del climas subártico y marino de latitud media
Los bosques de coníferas se instalan donde la continentalidad es más acusada y hay influencia polar. Hay bosques
templados de coníferas y bosques de coníferas de latitudes altas o taiga, situados entre la tundra y el bosque de hoja
caduca o las estepas.
Las coníferas poseen hojas estrechas en forma de aguja o escama, que son renovadas de forma contínua todo el año.
Son de hoja perenne, aunque hay algunos de hoja caduca, como el alerce o el ciprés pelado. El tronco es de corteza
gruesa, con raíces bien desarrolladas (aunque con poca profundidad en zonas heladas). En latitudes meridionales hay
también especies de hoja caduca, como abedul, haya, arce, sauce o chopo. Las coníferas más representativas son el
pino y el abeto.
La degradación de este bosque origina praderas herbáceas, que en zonas de sequedad dan paso a las estepas.

Tema XI La vegetación 2
UNED GEOGRAFÍA

5.3 Zonas cicumpolares: tundra


Al norte de la taiga y de los bosques boreales se desarrolla la tundra, extensión de tierra pelada o terreno inhóspito,
tierra sin árboles. Se localiza en climas muy fríos, con humedad y suelos saturados, con una vegetación muy pobre de
plantas leñosas enanas, arbustos bajos, plantas herbáceas, líquenes y musgos. Hay cuatro tipos de tundra: tundra de
plantas almohadilladas, tundra herbácea, tundra arbustiva y tundra arbórea.
Las plantas leñosas son sauces achaparrados y abedules diseminados en regiones abrigadas.
Esta vegetación se desarrolla también en altura debido a los vientos fríos y falta de abrigo. En el medio montañoso se
llama tundra alpina, por debajo del suelo desnudo y las nieves perpetuas. El elevado contenido de azúcar de esta
vegetación hace que puedan sobrevivir especies de animales muy grandes.

Tema XI La vegetación 3

También podría gustarte