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1177 / 0963662519853228 Comprensión pública de la ciencia Cano-Orón


artículo de investigación 2019

PUS
Trabajo teórico / de investigación

Comprensión pública de la
ciencia 1–17 © El autor (es)
Una campaña de Twitter contra 2019
Pautas de reutilización de artículos:
la pseudociencia: el discurso sagepub.com/journals-permissions
DOI: 10.1177 / 0963662519853228
escéptico sobre las terapias journals.sagepub.com/home/pus

complementarias en España

Lorena Cano-Orón
Universidad de Valencia, España

Resumen
El objetivo principal de este artículo es analizar el discurso del movimiento escéptico sobre las terapias
complementarias en España, así como comprender su movilización frente a estas terapias. Durante los
últimos 2 años, el movimiento escéptico español, constituido por asociaciones ciudadanas contra las
terapias no convencionales y a favor de lasmedicina, ha aumentado su activismo que, como resultado,
ahora es más familiar para el público. Para realizar este estudio se seleccionaron tres fuentes de
información: (a) la campaña #StopPseudociencias, con un corpus de 6252 tuits; (b) 153 artículos de
noticias publicados durante el cronograma del estudio y (c) 7 entrevistas con miembros del movimiento
escéptico, periodistas y políticos. Los resultados de los análisis de contenido y discurso han demostrado
que el movimiento escéptico ocupa una posición discursiva dominante en Twitter, mientras que la
perspectiva es más equilibrada en los diarios digitales.

Palabras clave
campañas sociales, discurso, escépticos, medios de comunicación, política, terapias complementarias,
Twitter

1. Introducción
'Terapias complementarias' (TC) 1 es un término general que se utiliza para referirse
a una serie de técnicas (p. Ej., Homeopatía, acupuntura, naturopatía, reiki, etc.)
derivadas del sistema biomédico de salud y cuya eficacia clínica aún no se ha
demostrado para varios razones. Estas terapias han tenido una acogida diferente en
los países occidentales: en Alemania, Estados Unidos y Canadá, por ejemplo; algunos
han sido más aceptados - legal y socialmente - que otros; mientras que en otros
países, como España, el sistema no los ha integrado y tampoco existen leyes
específicas ni estudios profesionales que aseguren los estándares de calidad.
Los datos internacionales muestran que estas terapias se utilizan menos en
España que en otros países occidentales. Por ejemplo, el 79% de los canadienses han
recurrido a ellos al menos una vez (Esmail, 2017), mientras que en Estados Unidos
han sido utilizados por el 49% de la población (Funk et al., 2017). A pesar de la

Autor correspondiente:
Lorena Cano-Orón, Universidad de Valencia, 46010 Valencia, España.
Correo electrónico: Lorena.Cano@uv.es

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dificultad para comparar estos resultados a nivel europeo (Eardley et al., 2012),
España siguió un patrón similar al de Francia y Alemania en el uso de los diferentes
TC analizados (Kemppainen et al., 2017). El estudio más reciente (CIS, 2018) encontró
que si bien el 95,7% de los entrevistados conocían al menos un TC, solo el 32,5%
había utilizado uno en algún momento de los últimos 12 meses.
A nivel social, hay activistas a favor de la medicina basada en la evidencia que se
han movilizado contra los TC: el movimiento escéptico. Aunque los escépticos
existen en casi todos los países occidentales, tienen una voz más activa en Reino
Unido, Australia y España, donde han lanzado campañas contra los cursos de CT en
las universidades y exigido una legislación más estricta para evitar su
reconocimiento público como efectivos. En algunos casos han logrado convencer a
las autoridades y a la sociedad, pero en otros su voz no ha tenido tanta repercusión.

2. Oposición a los TC: el movimiento escéptico


El movimiento escéptico se refiere al activismo de ciudadanos comprometidos con
la ciencia cuya intención es desacreditar 'fenómenos científicamente imposibles'
(Simmons, 2018: 2). Estos 'escépticos' también apuntan a fomentar el pensamiento
crítico en la sociedad como una herramienta para desenmascarar conspiraciones,
fenómenos paranormales y pseudociencia (Loxton, 2013). Este 'movimiento de
estilo de vida', aunque sin una fuerte identidad colectiva, tiene íconos sociales, a
menudo científicos o comunicadores científicos, y personas influenciadas por la
literatura escéptica que actúan en consecuencia (Simmons, 2018).
El escepticismo tiene orígenes antiguos, como afirma Loxton (2013), al menos dos
milenios. Sin embargo, el movimiento actual surgió alrededor de 2005, junto con el
activismo estadounidense del 'Nuevo Ateísmo' y coincidiendo con la publicación de
las influyentes obras de Richard Dawkins, Sam Harris y Daniel Dennett (Cragun,
2015; Loxton, 2013). Esta ola de escepticismo actual utiliza Internet como su
principal canal de expansión. La comunidad escéptica se reúne en Internet
organizando grupos, foros y sitios web temáticos donde encuentran apoyo mutuo y
participan activamente en la promoción de la causa (Kettell, 2014; Smith y Cimino,
2015). Sin embargo, para Farley (2009), esto equivale a 'predicar al coro', porque los
miembros de la comunidad ya son escépticos. Señala los servicios de redes sociales
(SNS), específicamente YouTube, como el nuevo espacio donde los activistas están, y
deberían publicar, para ampliar el movimiento y 'hacer llegar el mensaje escéptico
a quienes más lo necesitan' (Farley, 2009).
En mayor o menor medida, es un fenómeno mundial. Por ejemplo, si nos
centramos en iniciativas simbólicas contra los TC, concretamente la homeopatía,
una se reproduce de forma global: el suicidio homeopático, que implica tomar una
sobredosis de pastillas homeopáticas para demostrar que la terapia no es eficaz
(Simmons, 2018). Sin embargo, las actividades de este tipo solo están destinadas a
crear conciencia sobre los TC, pero no tienen ningún efecto particular.
Dos movimientos escépticos exitosos en el Reino Unido y Australia, ambos
anteriores al estudiado aquí, lograron presionar a las universidades para que
retiraran cursos en CT. El primer país en hacerlo fue Reino Unido, donde los CT
estaban regulados a pesar de haber sido tradicionalmente tachados de
charlatanería (Wahlberg, 2007, 2015). En 2007, ciertos profesores universitarios y
científicos se movilizaron para protestar contra las universidades que ofrecían
cursos en CT, contactaban con los medios de comunicación, enviaban cartas a
los rectores (Chatfield et al., 2012; Colquhoun, 2007) y creaban blogs (Caldwell,
2017). . En cuanto al tratamiento mediático del tema antes de 2007 , todos los
trabajos sobre las universidades que ofrecen cursos de CT fueron positivos y
neutrales, pero a partir de 2007, los de educación y homeopatía se tornaron
negativos y adoptaron la postura defendida por Colquhoun, una de las más visibles.
científicos críticos (Caldwell, 2017). En el caso del Reino Unido, la campaña fue muy
visible y muchas veces en los medios de comunicación, y aunque el propio
Colquhoun (2013) cree que fue un éxito y el motivo del cierre de numerosos cursos,
Chatfield et al. (2012) atribuyeron esto a problemas financieros.

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Australia es el otro precedente. Los Amigos de la Ciencia en Medicina (FSM), un
grupo escéptico compuesto en su mayoría por médicos y científicos (Brosnan, 2015),
actúa como lobby para la eliminación de los cursos universitarios en CT, con la
ayuda de su contraparte británica. El grupo también se puso en contacto con los
medios de comunicación (FSM, 2011) y escribió a los rectores para exponer su caso.
Flatt (2013), MacArtney y Wahlberg (2014) y Lewis (2019) critican el discurso del
FSM, reproducido también por los medios de comunicación, por utilizar una
retórica que promueve sus creencias al tiempo que suprime visiones alternativas,
así como por utilizar un lenguaje paternalista al referirse a los pacientes que son
descartados como susceptibles e ingenuos. Este tipo de discurso también ha sido
criticado por Ernst (2004), quien aconseja a estos grupos moderar su tono, no
generalizar y no argumentar que las personas simplemente no comprenden o
tienen dificultades para captar una relación o la evidencia a primera vista. sin
prueba.

El caso español
Durante la última década han surgido en España diversas asociaciones escépticas -
entre ellas ARP-SAPC, Círculo Escéptico, FarmaCiencia y APETP- que tienen como
objetivo fomentar el pensamiento crítico y contrarrestar la promoción de los TC. En
2014, se organizaron protestas cívicas como la campaña #NoSinEvidencia
[#NotWithoutEvidence] (El escéptico, 2014) para protestar contra la clasificación de
los remedios homeopáticos como medicinas. En ese momento, no fueron tan
influyentes, pero más tarde y al igual que con los precedentes británicos y
australianos, lograron cerrar una serie de programas de maestría en 2016.
Al igual que con sus puntos de referencia globales, estos grupos suelen ser mucho
más activos en Internet. En sus sitios web y perfiles de redes sociales, han diseñado y
lanzado campañas digitales, utilizando una variedad de lemas y hashtags. Algunas
de sus actividades son más simbólicas, como las relacionadas con el Día de la
Homeopatía, cuando colocan carteles en fuentes públicas con el lema 'Homeopatía
gratis', antes de tomarles fotos y publicarlas en sus perfiles de redes sociales -
asociaciones escépticas en torno a la world también organiza protestas durante la
Semana Mundial de Concienciación sobre la Homeopatía. 2 Otros son más agresivos,
como protestar contra las conversaciones pseudocientíficas y tratar de evitar que se
realicen; otros son más 'permanentes', como SugarFree, 3 un buscador español que
permite a los usuarios encontrar la 'farmacia sin homeopatía' más cercana.
El 13 de febrero de 2017, una coalición de asociaciones (APETP, GEPAC, Red UNE, Círculo
Escéptico y ARP-SAPC) lanzó una campaña contra la pseudociencia en Twitter 4 . En un
primer llamado a la acción, 5 instó a los ciudadanos a solicitar al Ministro de Salud que
luche contra la pseudociencia, mencionando en Twitter al Ministerio (@sanidadgob) o al
Ministro de Salud (@DolorsMM) e incluyendo un enlace a cualquiera de los 1800 casos que
promueven este tipo de terapias contenidos en su base de datos, bajo el hashtag
#StopPseudociencias [#StopPseudocience]. Esta campaña, como se anunció, fue la antesala
de un acto denominado 'Las Terapias Peligrosas: parasitando la salud', programado para el
próximo 18 de febrero en el Hospital La Paz de Madrid.
Al día siguiente, Ciudadanos (partido político liberal) anunció públicamente una
propuesta no legislativa (PNL) que obligaría a los profesionales de la salud a
denunciar prácticas pseudocientíficas. Este anuncio y la popularidad de la campaña
en Twitter motivaron la publicación de dos hashtags: el primero, #
HomeopatíaSíGracias [#HomeopathyYesThanks], por parte de la comunidad
homeopática española; seguida inmediatamente por la segunda, #
HomeopatíaNoGracias [#HomeopathyNoThanks], continuando la campaña lanzada
el día anterior.
Los datos de Trendinalia muestran que el hashtag principal de la campaña
(#StopPseudociencias) fue el segundo trending topic en España el día 13, con
tendencia a las 12.20 horas, y el 14 a las 4.45 horas. Los otros dos hashtags que
surgieron como resultado de esa campaña, # HomeopatíaSíGracias y #
HomeopatíaNoGracias, tuvieron una tendencia de 3,40 horas y 4,20 horas,
respectivamente, el día 15. Finalmente, el hashtag del evento, #TPeligrosas
[#TDangerous], fue el tercer trending topic en España, siendo trending durante 11
horas el día 18 y durante 3,30 horas el día 19.

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Aunque, como ya se señaló, la campaña provocó protestas de la comunidad


homeopática, estas fueron menores y bastante discretas. A nivel personal, se
presentaron denuncias contra dos usuarios de Twitter por afirmar que la
homeopatía era una estafa y que los homeópatas eran estafadores (Jiménez, 2017);
pero la mayoría de las declaraciones a favor de estas terapias se alejaron bastante
de la controversia. De hecho, la COFENAT [Asociación de Terapeutas Naturales y
Autónomos] solo expresó su desacuerdo con la PNL de Ciudadanos y comenzó a
recolectar firmas 6 para detener la iniciativa pero no la campaña en las redes
sociales per se.

3. Comunicación científica y activismo


Internet y las redes sociales han cambiado la forma en que el público consume
información sanitaria; los ciudadanos aprovechan estos espacios para informarse
(Bravo y Hoffman-Goetz, 2016). La rápida difusión de información permite la
creación de espacios de debate donde expertos y laicos puedan discutir temas
científicos (Gibson, 2018; Yeo et al., 2016), ya que organizar grupos con intereses
compartidos es más simple y conecta a personas no comprometidas con activistas
(Mercea , 2012). Y los factores afectivos juegan un papel clave en la configuración de
las visiones científicas de quienes participan en este tipo de acciones (Dudo y Besley,
2016).
Las nuevas herramientas digitales han facilitado el desarrollo de nuevas formas
de activismo (Van Laer y Van Aelst, 2010), que se pueden resumir básicamente en
cuatro tácticas electrónicas : peticiones en línea, boicots, escribir cartas a
representantes políticos y campañas de correo electrónico (Earl y Kimport, 2011).
Este tipo de activismo digital coincide con iniciativas que ha implementado el
movimiento escéptico, como las peticiones en línea para revisar la legislación sobre
estas terapias (por ejemplo, la campaña #StopPseudociencias), boicotear charlas
pseudocientíficas, enviar cartas abiertas a ayuntamientos y entidades para
cabildear ellos para evitar que tales eventos se realicen y así sucesivamente.
El uso de Twitter para promover conversaciones o acciones sobre temas de salud
no siempre tiene el mismo efecto. Los hashtags relacionados con temas de salud
tienden a enfocarse en compartir información, sensibilizar al público y mejorar el
conocimiento de este tema, aunque la mayoría no cumple con estos criterios, ya que
son muy unilaterales (Xu et al., 2015). Aun así, tiene sentido que en España se
utilizara esta herramienta para canalizar la campaña, porque es fácil cuestionar a
personajes públicos en Twitter que, en cualquier caso, es público, es decir,
cualquiera puede participar en la conversación, ayudar a difundir el mensaje y el
lobby. Además, a diferencia de otras redes sociales como Facebook, los nombres
reales no tienen por qué usarse en Twitter, lo que facilita mucho el apoyo a una
causa (Croeser y Highfield, 2014).
La razón por la que muchos científicos deciden comunicar la ciencia
públicamente, especialmente en Internet, es para defenderla, apoyar la postura de
la comunidad científica e influir en la implementación de políticas públicas. Lo
hacen habitualmente para corregir conceptos erróneos de los medios de
comunicación a la hora de cubrir temas científicos o para contrarrestar visiones
anticientíficas (Dudo y Besley, 2016) y sus intervenciones se justifican por el impacto
que tiene la construcción y difusión de noticias en el público en general. . Además
de difundir conocimientos, el periodismo de salud media entre científicos,
profesionales de la salud, grupos de presión y audiencias y, lo más importante,
proporciona contextos en los que se puede entender la medicina (Hallin y Briggs,
2015). Por lo tanto, los periodistas científicos juegan un papel clave en informar al
público y dar forma a la opinión pública sobre temas controvertidos que son, a su
vez, elementos esenciales para condicionar la comprensión pública (Stocking y
Holstein, 2009). En el caso concreto del debate público en España sobre la validez y
eficacia de los TC, existe una división de opinión entre los periodistas científicos: los
que creen que la pseudociencia no tiene cabida en el periodismo científico y los que
piensan que hay que cubrirla para alertar al público sobre sus riesgos
(Cortiñas-Rovira et al., 2015). En otras palabras, aquellos periodistas que deciden
abordar el tema lo hacen de forma tendenciosa, con un pie (o ambos pies) en el
campo de los escépticos.
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4. Objetivos e hipótesis
El principal objetivo de este estudio es analizar el discurso de los escépticos
españoles en Twitter y comprender la movilización contra estas terapias por parte
del movimiento escéptico. Utilizando una muestra de la campaña escéptica lanzada
en Twitter durante la semana del 13 al 19 de febrero de 2017, el objetivo específico
es identificar quiénes participaron en la campaña, con qué propósito y el impacto
político, mediático y social que generó.
Debido al espíritu militante mostrado por los usuarios que apoyan estas
asociaciones en las redes sociales, la discusión se basa en la siguiente hipótesis:

H1: La estrategia de comunicación del movimiento escéptico favoreció un


discurso de agitación, con la intención de lograr un impacto político.

Además, ante la aparente falta de cobertura mediática de los profesionales que


practican el TC y de que más de la mitad de la población española cree en ellos
(FECYT, 2017), se afirma aquí que

H2: El éxito de la campaña y los argumentos utilizados por los escépticos


generaron una espiral de silencio que resultó en que no hubo oposición.

Las diferentes acciones políticas que tuvieron lugar durante y después de la


campaña del movimiento escéptico apuntan a la posibilidad de que este grupo
funcionara como lobby:

H3: Las movilizaciones lideradas por grupos escépticos lograron cambios políticos,
mediáticos y sociales.

5. Metodología
Se emplearon tres técnicas metodológicas cuantitativas y cualitativas: análisis de
contenido, análisis cualitativo del discurso y entrevistas en profundidad . Se crearon
variables ad hoc en base a la casuística de la campaña y siguiendo el estándar de las
otras investigaciones, realizadas en el marco del equipo. Todos los libros de códigos
fueron supervisados por los nueve investigadores del equipo y aplicados por un
codificador (consulte el Apéndice complementario). La muestra está compuesta por
tweets, noticias y stakeholders involucrados.

Tweets y usuarios involucrados en la campaña


Los tweets de los diferentes hashtags de la campaña se recopilaron con la
herramienta de extracción de datos data-miner.io . Se recuperaron los tweets
publicados con cualquiera de los hashtags relacionados con la campaña entre el 13
y el 19 de febrero de 2017 (Tabla 1); todos ellos fueron escritos en español. Este
período de tiempo fue seleccionado debido a la popularidad de la campaña durante
estos días, en los que sus hashtags fueron Trending Topic.
Para identificar los perfiles de Twitter más activos durante la campaña, de los
1528 usuarios únicos identificados en el corpus, se analizaron las 10 cuentas
principales que publicaron tweets originales esa semana utilizando los hashtags de
la campaña. Posteriormente, se aplicó una metodología de análisis de contenido a la
descripción que pusieron en sus biografías, con el fin de conocer más sobre estos
actores. En concreto, las variables analizadas fueron (a) el tipo de cuenta (anónima /
corporativa / personal) y, para esas cuentas personales, (b) la profesión y (c) si
estaban especializadas en biomedicina.
En este corpus de 6252 tuits se realizó un muestreo aleatorio sistemático, con un
nivel de confianza del 95%, un intervalo del 3%. El coeficiente de elevación fue 6, es
decir, por cada seis tweets, uno

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Tabla 1.   Tweets recopilados del 13 al 19 de febrero de 2017.
Etiquetas Descripción Tweets recopilados Tweets analizados
    (universo) (muestra)
         
#DetenerPseudocienciasHashtag de campaña inicial 3821 556 (61%)
#HomeopatiaSIgracias Hashtag publicado por homeópatas 298 44 (10,5%)
  contra la campaña      

#HomeopatiaNOgracias Escépticos contra homeópatas 660 96 (4,8%)


  hashtag      
#NoSinEvidencia Hashtag secundario en este 55 10 (1,1%)
  Campaña      
#Tpeligrosas a Hashtag del evento 1418 206 (22,6%)
Total 6252 912
   

a Se descartó la posibilidad de incluir tweets de #TerapiasPeligrosas en el corpus, porque la mayoría de


la gente usaba el hashtag abreviado #TPeligrosas.

se seleccionó el tweet; respetando las proporciones de los hashtags. La muestra


resultante, compuesta por 912 tweets, se utilizó como base para el análisis de
contenido.
Se realizó un análisis de contenido manual en la muestra. Las tres variables
analizadas fueron (a) posicionamiento (si el tweet era escéptico, neutral o favorable
a los CT, o si era irrelevante para el tema - ver Anexo complementario), (b) tipo de
fuentes de información contenidas en los mensajes y (c) uso de menciones.
Además, también se realizó un análisis cualitativo del discurso de los tweets
utilizando la herramienta Nvivo, con el fin de categorizar los argumentos
planteados por los usuarios.

Noticias relacionadas
Para detectar la representación escéptica de la campaña en los medios, las noticias
se recuperaron de la base de datos MyNews, un repositorio de periódicos españoles
con aproximadamente 1000 fuentes de medios internacionales, nacionales,
regionales y locales indexadas en ese momento (papel y digitales). Noticias sobre el
tema publicadas durante la campaña de una semana (13-19 de febrero), publicadas
en medios españoles indexados en MyNews, que contienen las palabras '
pseudociencias [pseudociencia]', ' medicina alternativa [medicina alternativa]', '
terapias alternativas [alternativa terapias] 'o' homeopatía [homeopatía] ', se
recogieron. Esta búsqueda arrojó 153 noticias. Se eliminaron las noticias repetidas
(es decir, aquellas que aparecían varias veces porque estaban indexadas en varias
ediciones regionales o habían aparecido tanto en versión digital como en papel), así
como aquellas que no trataban específicamente de los TC sino que solo las
mencionaban de pasada. Esto resultó en un corpus de 73 noticias.
Mediante un análisis de contenido manual se aplicaron las siguientes variables:
(a) si el tema principal cubría la campaña de escépticos, (b) la posición que tomó el
artículo sobre los TC y (c) si el ítem contenía la nota de prensa emitida por la
asociación promotora de la campaña.

Actores entrevistados
Para tomar en cuenta el testimonio de los actores en esta controversia, se contactó
con los 20 actores más relevantes involucrados (activistas escépticos, periodistas
científicos expertos y políticos con capacidad para actuar en este tema) ofreciéndoles
la posibilidad de realizar una entrevista personal por Skype o por teléfono. . Se
realizaron un total de siete entrevistas a dos activistas del movimiento escéptico (del
Círculo Escéptico y APETP), dos periodistas científicos (de El País y El Confidencial )

Cano-Orón 7
     

      
Figura 1.   Uso de fuentes de información en los tweets de la campaña.
Porcentaje calculado sobre los tuits relacionados con la campaña ( n  = 859). Se excluyeron los tweets ruidosos.

y tres políticos de alto nivel (de Podemos - progresistas; Ciudadanos - liberales; y PSOE
- socialdemócrata regional) entre diciembre de 2017 y febrero de 2018, cada una
con una duración media de 45 minutos.
Las entrevistas fueron semiestructuradas y los miembros del grupo de
investigación que realizó este estudio validaron el cuestionario utilizado, aplicando
un intervalo de confianza para el coeficiente alfa.
Después de transcribir las entrevistas, se realizó un análisis temático para
organizar los datos basados en texto por temas clave.

6. Resultados
¿Qué se dijo en Twitter y quién lo dijo?
La mayoría (79,1%) de los tweets publicados con los hashtags de la campaña fueron
en contra de los CT. Mientras que los tuits defendiendo el uso de CT representaron el
3,3% de la muestra y los neutrales el 11,8%. El porcentaje de mensajes que
utilizaron los hashtags para abordar otros temas fue del 5,8%.
En cuanto al uso de fuentes de información (Figura 1), más de la mitad de los
tuits analizados no usaban ni mencionaban fuentes (54,7%), y la mayoría que lo
hacía incluía habitualmente enlaces a otros mensajes publicados en redes sociales
(15,3%), a sitios web a favor de los CT (9,2%), que suelen utilizarse como ejemplo o
para contenidos informativos (8,8%).
En cuanto a las menciones (Figura 2), siguiendo las consignas de la campaña, el 28,8% de
los tuits se referían al ministerio o al ministerio de salud, aunque un gran porcentaje
(46,2%) de los mensajes no lo hacía. En mucha menor medida (1,3%), estos relatos fueron
citados para denunciar públicamente otros relatos relacionados con estas terapias.
Asimismo, el porcentaje de conversaciones identificadas también fue menor (9,3%).
Los usuarios prolíficos identificados en el corpus (Figura 3) incluían una
asociación escéptica (U7), una cuenta de divulgación científica (U9), un blog
escéptico (U5) y usuarios que simpatizaban con estos

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Figura 2.   Uso de menciones en los tweets de la campaña.
Porcentaje calculado sobre los tuits relacionados con la campaña ( n  = 859). Se excluyeron los tweets ruidosos.

asociaciones (U1, U2, U3, U4, U6, U8) - que, según su descripción en Twitter, no son
especialistas en biomedicina.
Aunque el discurso en Twitter fue contra las pseudoterapias en general, se centró
sobre todo en la homeopatía, la acupuntura, la osteopatía, el reiki y la
BioNeuroEmotion. El discurso surgido de los mensajes de campaña contra los CT
tenía la clara intención de desacreditarlos, como refleja el lenguaje y el tono
utilizado: 'estafas', 'fraudes', 'curas falsas', 'curas de charlatanería', 'pseudociencia',
'y' teísmo disfrazado de ciencia 'fueron solo algunas de las expresiones utilizadas. El
tema recurrente de los tweets giraba en torno a dos ideas clave:

1. Debemos defender la ciencia de la 'anti-ciencia' y así adquirir un 'compromiso para


combatir la pseudociencia' y 'luchar (aunque solo sea en Twitter) contra estas
prácticas dañinas con fines de lucro '. En este sentido, hubo tuits de presión como
'¿Permitirá @Aytolena que los charlatanes celebren sus charlas en un espacio
público?' y 'Detengamos a los estafadores' Charlas BioNeuroEmotion '.
2. Debemos defender a los ciudadanos, ya que son 'los más vulnerables', 'víctimas' y
tienen poco conocimiento científico. De hecho, este argumento sirvió para pedir al
gobierno, 'Cuida a los enfermos @DolorsMM', para detener la venta de estos
productos e introducir legislación para restringir su uso, al tiempo que enfatizaba la
impunidad de la que gozan ciertos pseudoterapeutas con el laguna regulatoria
actual. Sin embargo, los llamamientos a los partidos políticos fueron insignificantes,
solo se mencionó a Ciudadanos debido a la PNL que el partido había anunciado esa
semana, más un comentario que enfatizaba que apoyar a los CT "no es
necesariamente de izquierda".

Además, también hubo referencias a médicos que practicaban pseudoterapias,


descritos como 'el enemigo interno', 'estafadores' o 'incompetentes' y acusados de
violar su código ético. Además

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Figura 3.   Publicaciones de los usuarios durante la campaña (en todos los hashtags).
Usuarios únicos ( n  = 1528) ordenados por tamaño, que es proporcional a la cantidad de sus
publicaciones. Los 10 usuarios principales que publicaron más se muestran en negrita.

alegando que los TC eran ineficaces contra las enfermedades, se sostuvo que
cualquier mejora en la salud de un paciente se debía únicamente al efecto placebo.
Aunque no tan abundantes, también hubo tweets con datos de campaña,
incluyendo cifras de participación e incluso comparaciones entre los dos hashtags
opuestos, # HomeopatíaSíGracias y # HomeopatíaNoGracias, y enfatizando que
habían alcanzado la categoría de trending topic.
El argumento opuesto, a saber, el pequeño conjunto de tweets que respaldan los
TC, se basó en tres ideas principales: (a) el derecho y la libertad de los pacientes a
elegir su propio tratamiento; (b) la afirmación de que la eficacia de la homeopatía
está respaldada por pruebas científicas: "Las pruebas demuestran que la
homeopatía funciona"; y (3) la demonización de la ciencia porque es una " narrativa
autoritaria del siglo XIX que carece de validez frente a otras narrativas".

¿Cómo se representó la campaña y la postura de los medios?


En total, durante la semana se publicaron 73 noticias relacionadas con la TC . De
estos, el 21,9% apoyó estas terapias, el 24,7% estuvo en contra de ellas, el 43,8%
mantuvo una postura neutral y el 9,6% fueron mixtas. Del total de noticias, el 26%
fueron comunicados de prensa del movimiento escéptico y el 34,2% estaban
directamente relacionados con la campaña, que se pueden dividir en escépticos
(28%), neutrales (68%) y mixtos (4%), mientras que no hubo noticias que respalden
los TC.

¿Qué piensan las partes interesadas sobre el movimiento?


Los datos recopilados en las entrevistas se presentarán ahora en cuatro secciones,
ya que este material aborda el movimiento desde una perspectiva más amplia:

Definición del movimiento escéptico.   El movimiento escéptico está formado por diferentes
asociaciones cuya misión es 'fomentar un espíritu crítico' (Escéptico 1). Los participantes lo
hacen de forma voluntaria,

10 Comprensión pública de la ciencia 00 (0)


   

porque 'no es un movimiento corporativo […], es algo que la gente hace en su


tiempo libre' (Skeptic 2). Los escépticos y periodistas entrevistados describieron
estos grupos como heterogéneos profesional y sociodemográficamente, aunque
admitieron que, como en cualquier movimiento, algunas personas eran más
visibles que otras. De hecho, de los políticos entrevistados, solo el Político 2 conocía
el movimiento y creía que estaba compuesto en su mayoría por científicos. El
movimiento ha ganado popularidad recientemente porque tiene "una mayor
presencia en los medios y en la sociedad" (Escéptico 1), pero "su discurso ya no es
solo de ellos, ya que se ha vuelto más común" (Periodista 1).

Construcción y difusión del discurso escéptico.   El activismo del movimiento escéptico


es incesante y se dirige a personas de todos los ámbitos de la vida. Para transmitir
su mensaje, utiliza principalmente blogs, para temas que requieren más
explicaciones, y Twitter, aunque esta plataforma se usa más como un accesorio y
para 'generar esa presión social' (Skeptic 2). Las acciones de comunicación del
movimiento se pueden dividir en tres categorías: (a) envío de cartas de advertencia a
las entidades 'para brindarles información y advertirles de manera respetuosa'
(Escéptico 2); (b) campañas de información , como charlas en pubs y (c) acciones
dirigidas a grupos destinatarios , como la Jornada «Terapias peligrosas: parasitar la
salud» destinada a los profesionales sanitarios.
Desde una perspectiva organizacional, existen campañas tanto organizadas como
espontáneas, que en ocasiones son invisibles al ojo público por el hecho de que
implican un contacto privado directo (Escéptico 1). Pero, en general, la planificación
de la organización y el diseño de estrategias son inexistentes, ya que las acciones
son improvisadas. Cierto es que,

es bastante anárquico en realidad. Lo que suele ocurrir es que alguien que ha sido
afectado o tiene conocimiento específico de ello inicia una acción […] y la gente se suma
a esa campaña, intenta difundirla o alguien notifica al grupo [de una acción] […]. De 400
personas, quizás 10 terminen involucrándose activamente, que es lo que siempre
sucede. Pero, oye, de esas 400 personas tal vez 50 te retuiteen, y tal vez uno tenga un
contacto con los medios que lo capte […] No es algo que esté coordinado, lo cual es un
problema porque podría o debería serlo. (Escéptico 2)

La difusión del discurso escéptico también se ve influida por el crecimiento de la


ciencia en los medios de comunicación, "que tratan cada vez más de educar a sus
lectores en ciencia" (Periodista 2).

La influencia del discurso escéptico.   La sociedad española es cada vez más consciente
del discurso escéptico; no solo ha aumentado la membresía de la asociación, sino
también el número de defensores (Escéptico 1). “Nadie cuestionaba la homeopatía
hace unos años, pero gracias a estos movimientos escépticos, las universidades han
comenzado a retirar los programas de maestría en ella” (Skeptic 2). El seguimiento
en Twitter les ha ayudado, en varias ocasiones, a alcanzar metas que no podrían
haber logrado a través de la información privada (Skeptic 2).
A nivel corporativo, 'según Boiron, afectamos las ventas de homeopatía en un
14% en España, lo que me lleva a pensar que estamos haciendo al menos algunos
avances' (Skeptic 2). El periodista 1 atribuyó esta pérdida económica a dos factores:
el discurso escéptico y la situación socioeconómica en España, donde la homeopatía
es cara.
Desde una perspectiva política, los escépticos, periodistas y políticos
entrevistados identificaron a este movimiento como un grupo de defensa. Skeptic 2
confirmó que las declaraciones de misión de las asociaciones que componen el
movimiento se referían intencionalmente a la promoción, aunque reconoció que su
impacto no fue lo suficientemente grande como para generar cambios notables:
'Estamos llegando, pero no tenemos la apalancamiento, […] los políticos saben esto
y ven 40,000 votos en comparación con 300 fanáticos que predican en el desierto en
Twitter '. Aunque, como señalaron los periodistas, la presión fue más directa, como

Cano-Orón 11
   

cada vez que un político se sobrepasa un poco, su propio partido condena su


comportamiento y lo devuelve al redil. […] Cada vez que alguien se sale de la línea,
inmediatamente vuelve a comprar, y creo que es porque saben que el lobby social, que
generalmente está dirigido por estos grupos de escépticos, no les dará una sola
oportunidad […] todo el grupo reaccionará y empezará a afilar sus cuchillos y encender
sus antorchas. A veces reaccionan de forma exagerada, y hay personas que no hacen
más que reaccionar de forma exagerada y yo creo […] que cuando lo hacen, a veces
cometen errores. (Periodista 1)

Los entrevistados también detectaron un tipo de lobby menos sutil

cuando un ayuntamiento organiza una charla o proporciona un espacio para la


realización de un evento de promoción de terapias alternativas sin ningún motivo. Por
ejemplo, [estos grupos] hacen mucho alboroto al respecto y el consejo a menudo cancela
la charla o el evento; esto sucede en las universidades, en los ayuntamientos, en los
espacios públicos […] son un grupo de presión muy efectivo y tienen mucha influencia
en Twitter, y aunque […] Twitter tiene un impacto limitado, ves que tu cuenta de Twitter
se llena con tweets de gente que te llama "un ignorante", "un sinvergüenza", "un
acaparador de dinero". (Periodista 2)

Las reacciones de estas asociaciones han hecho que los políticos sean conscientes de
las nefastas consecuencias que tendrán que afrontar si cometen un error, lo que les
obligará a tomar partido. 'Es decir, no es solo que los conocen, sino que trabajan con
ellos', como Ciudadanos, que admite que es 'un grupo de presión cualitativamente
importante' (Político 2).
Los periodistas entrevistados sintieron la presión a la hora de abordar estos
temas porque querían evitar publicar algo incorrecto, convirtiéndose así en blanco
de la campaña de los escépticos (Periodista 2). “Recientemente hemos observado un
indicio interesante, o más bien satisfactorio, en los medios […] se han dado cuenta
de que este es un problema social que no se estaba abordando […] con mucha
sustancia” (Skeptic 2).
En este contexto, los proponentes de los CT,

en lugar de discutir con alguien en particular, inicie su propio blog o publique un


artículo en su propia revista […] donde nadie pueda impugnarlo, y si alguien publica un
comentario crítico, puede […] asegurarse de que nunca aparezca, de modo que todos los
comentarios son favorables […] y todos los demás son idiotas. Creo que de eso se trata
más o menos. Controlar dónde se publican sus ideas o declaraciones. (Escéptico 2)

Aunque, según los expertos, Facebook es una de las redes sociales más utilizadas por estos
grupos, ya que además de poder elaborar todo lo que quieran sobre un tema, 'Facebook está
lleno de grupos que comparten publicaciones como' hey , mi hijo tiene x-itis ”, “ dale
belladona ”, es decir, a menudo trabajan bajo el radar '. 'También tienen su forma de
involucrar a la gente. A menudo no hay necesidad de que un líder popular predique
”(Periodista 1). Asimismo, como afirmó el Periodista 2, este tipo de críticas al discurso
escéptico “no se mencionan a menudo en público, se envían por correo electrónico a
alguien en particular, en forma privada”. De hecho, el Político 3 mencionó que no hubo
protesta pública contra las medidas adoptadas por la Generalitat Valenciana, aunque en
privado recibió algunas críticas.

La campaña StopPseudociencias.   La campaña #StopPseudociencias es recordada por


los escépticos entrevistados como una de las mejor organizadas, aunque, en su
opinión, no había tenido un éxito especial:

Hubo campañas previas, como 'No sin evidencia' que fue lanzada principalmente por
profesionales de la salud y tuvo una gran repercusión mediática, probablemente porque fue
organizada por trabajadores de la salud; digamos que tenía un aire más autoritario. Creo que esa
campaña fue lo que inspiró a varios otros movimientos. 'Stop pseudocience' fue más una llamada
de atención a nivel social […]. Con ese

12 Comprensión pública de la ciencia 00 (0)


   

campaña, otros partidos comenzaron a darse cuenta de que […] el asunto tenía que ser
abordado. Nos ayudó a centrarnos en nuestros contactos políticos, pero ¿logramos llegar
tan lejos como queríamos o deberíamos haber llegado, es decir, a nivel ministerial? No.
(Escéptico 2)

No obstante, los escépticos también reconocieron la utilidad de la campaña:

#StopPseudociencias fue trending topic en Twitter, pero lo más significativo fue su


impacto offline: la reacción de los partidos políticos, el hecho de que la ministra tuviera
que comentarlo y que salieran de la carpintería otros políticos, como Carmen. Montón 7
con su iniciativa contra la pseudociencia en la Comunidad Valenciana. (Escéptico 1)

Sin embargo, los periodistas entrevistados no recordaban claramente esta


campaña porque, como afirmó el Periodista 2, 'La #ParaPseudociencias se convirtió
en una especie de eslogan', aunque reconoció que

Tuvo mucho éxito en ese momento, porque logró cambiar la conversación de Twitter a
un contexto público […] un simple trending topic es una pequeña victoria de
comunicación. Pero si logras que un partido político proponga un proyecto de ley al
Parlamento, estás saltando de Twitter al Parlamento.
Desde una perspectiva política, solo el Político 2 recordaba la campaña y sus
efectos: "Fue tan eficaz que, bueno, incluso cambió la opinión pública". Ni el Político
1 ni el Político 3 lo recordaron, comentando que no estaban activos en esas redes
sociales, principales canales de la campaña.
- pero tampoco recibieron solicitudes directas de estos grupos.
Ante esta falta de comunicación directa entre la campaña escéptica y el debate
parlamentario sobre los TC, se preguntó a los políticos entrevistados sobre sus
motivaciones y por qué promovían este tema. Por su parte, el Político 2
(Ciudadanos) respondió:

Nos centramos en ello porque pensamos que era lógico hacerlo y que tenían razón.
Porque es cierto que estos días tienen una influencia sustancial en todo. Y ahora
podemos contar con ellos para otras cosas.

También destacó el impacto mediático del tema: “Ha habido programas al respecto
en diferentes canales de televisión, editoriales en periódicos como El País ; en
resumen, ha tenido una repercusión de gran alcance . Especialmente, en cifras de
ventas, en negocios ”.
Por su parte, el Político 1 (Podemos) afirmó:

Quizás estas prácticas, siempre referidas a aquellas que no perjudican la salud de las
personas, se estén generalizando y […] lesionando los intereses de determinadas
empresas sanitarias. Y cuando eso sucede, hay grupos políticos, directa o
indirectamente financiados por estas entidades o beneficiándose de alguna manera de
ellas, que favorecen un discurso que les conviene, digamos uno que les conviene.

Si bien el Político 3 (PSOE) indicó, 'Viene como consecuencia de que hay muchos
profesionales que reclaman acciones en esto'.

7. Discusión
Debido al hecho de que algunos miembros del movimiento escéptico español eran
más visibles que otros, la campaña analizada aquí puede haber parecido haber
adoptado un enfoque de comunicación de abajo hacia arriba (de la sociedad al
estado) y un enfoque de conocimiento de arriba hacia abajo ( de científicos a
ciudadanos).

Cano-Orón 13
   

Pero a diferencia del FSM (Brosnan, 2015) y del colectivo británico (Caldwell, 2017;
Chatfield et al., 2012), en el caso español el movimiento escéptico es heterogéneo a
nivel social, profesional y educativo. Y es esta heterogeneidad la que le impide
'actuar de manera cohesiva y unificada' (Kettell, 2014: 387).
Al igual que sus homólogos de otros países (Kettell, 2014; Simmons, 2018; Smith y
Cimino, 2015), aunque los miembros del movimiento español expresan sus puntos
de vista en sitios web y blogs de temática escéptica , han conseguido captar un
público mayor de lo habitual. al comunicarse en redes sociales, como sugiere Farley
(2009). Los SNS han jugado un papel clave en este escenario actual porque les han
ayudado a introducir un tema concreto en los medios de comunicación y en la
agenda de las 'redes sociales' empleando un discurso específico.
Los resultados del análisis de contenido de los tuits relacionados con la campaña
confirman que este discurso se centró en desacreditar a los CT. El modelo de
comunicación utilizado en esta campaña, en lugar de ser conversacional y
participativo, que podría inferirse del uso de los SNS, implicó reproducir el modelo
de difusión a partir de mensajes hostiles con miras a convencer a la gente,
asumiendo presumiblemente que el problema residía en un falta de información.
Este modelo sigue la tendencia de otros grupos de defensa científica (Trench, 2008)
que juegan un papel más didáctico que conversacional.
Aunque a la luz de las noticias de apoyo a los TC publicadas durante esa semana,
podemos concluir que los medios parecieron adoptar una postura neutral, esto no
podría haber estado más lejos de la verdad. Ninguna de estas noticias positivas
mencionó la campaña muy popular que se estaba ejecutando en Twitter ni pudimos
encontrar ninguna noticia que la criticara. Por tanto, podemos suponer que los
medios de comunicación también se mostraron escépticos acerca de los TC. Es muy
probable que, como han sugerido los expertos, el discurso a favor de los TC se haya
difundido en otras plataformas y en otros foros, sin afrontar abiertamente la
polémica.
En cuanto al porcentaje mínimo de tweets y noticias que tienen una visión
positiva de los TC en la campaña #StopPseudociencias, y la falta de voluntad o
entre organizaciones de esas personas que respaldan el uso de TC bajo el hashtag
específico (# HomeopatíaSíGracias) que habían creado para Para contrarrestar la
campaña, la debilidad de este discurso en los medios y en Twitter fue digna de
mención. Además, el hecho de que los periodistas entrevistados sintieran la presión
ejercida sobre ellos por los escépticos y que los políticos comenzaran a trabajar con
ellos, confirma que esta situación se vio afectada por la espiral del silencio
(Noelle-Neumann y Petersen, 2004).
Cabe señalar que, durante los meses posteriores a la campaña, el debate sobre la
vigencia y la legalidad de los TC llegó a la Comisión de Salud del Congreso de los
Diputados. Esto obligó a los principales partidos políticos a definir su posición al
respecto y, a diferencia de la posición adoptada en las elecciones anteriores
(Cano-Orón y Moreno Castro, 2017), los cuatro partidos principales (el PP
conservador, el PSOE socialdemócrata, el progresista Podemos y los liberales
Ciudadanos) se manifestaron en contra de los CT. También es notable que el primer
ministro de salud regional en prohibir el uso y la promoción de CT en los centros de
salud pública fue el próximo ministro de salud nacional cuyo discurso contra los CT
es uno de sus caballos de batalla. Este discurso también fue adoptado por la anterior
titular durante sus últimos días en el cargo. Declaró públicamente que España estaba
obligada por las leyes europeas a vender medicamentos homeopáticos, antes de
llegar a un compromiso con una campaña destinada a explicar a los pacientes que
no había evidencia clínica que los respaldara.
Además de esta alienación política, también se puede observar cómo las
organizaciones profesionales y científicas (como la Organización Española de
Facultades de Medicina, que creó un 'Observatorio contra la pseudociencia'
específico para detectar las prácticas de los TC) se han enfrentado a los TC. Por otra
parte, el movimiento escéptico empezó a pasar factura económica al sector, como
confirmó en diciembre de 2017 el director de Boiron en España, quien afirmó que
las ventas de homeopáticos en 2016 habían caído un 14% respecto al año anterior
(Vigario , 2017) y un 13,2% en 2017 (Boiron, 2018). Y

14 Comprensión pública de la ciencia 00 (0)


   

Sobre el uso y conocimiento de los TC en España, también es significativo que la


primera encuesta de opinión sobre el tema se publicó en febrero de 2018 (CIS,
2018).
Si bien se puede afirmar que el movimiento escéptico tuvo cierto grado de
influencia en la opinión pública, es imposible confirmar que los desarrollos antes
mencionados se debieron íntegramente a esta campaña específica, ya que aquí solo
se ha analizado una muestra. No obstante, los esfuerzos del movimiento escéptico
para elevar la opinión pública a lo largo del tiempo ciertamente han jugado un
papel central.

8. Conclusión
En España, el movimiento escéptico se ha convertido en un grupo de presión que
ejerce presión no solo sobre periodistas sino también sobre políticos (se confirma
así H3) en el contexto específico del debate sobre la eficacia de los TC. La campaña
#StopPseudociencias, cuyo hashtag se ha convertido en un eslogan muy conocido ,
según confirma Periodista 2, fue un éxito en la medida en que logró impactar en la
agenda mediática. Y a la luz de los acontecimientos recientes, podemos asumir con
seguridad que el movimiento escéptico en general también ha influido en la agenda
política, ya que los miembros del movimiento han trabajado junto con los políticos
en propuestas destinadas a regular y controlar los CT.
Sin embargo, contrariamente al supuesto inicial (H1), el movimiento escéptico no
solo buscaba un impacto político. A pesar de mantener un discurso combativo,
incluso agresivo en ocasiones, sus miembros sí creían que involucrar al público en
general formaba parte de su misión, aunque admitían que sus estrategias de
comunicación eran insuficientes al respecto.
Pasando a la opinión pública, los escépticos lograron acorralar a los defensores
del CT, produciendo una espiral de silencio (H2). Debido al hecho de que los
profesionales a favor de los CT no intentaron desacreditar las opiniones escépticas
en los medios de comunicación dominantes, se nos podría perdonar por pensar que
la campaña escéptica no tuvo oposición. El número de tuits en contra de la
campaña fue anecdótico, y ningún líder o institución pública habló con tanta fuerza
como los escépticos en los medios de comunicación. Según lo confirmado por los
entrevistados, el discurso en contra de esta campaña apareció en otras plataformas,
como sitios web, blogs y grupos privados de Facebook.
Este estudio tiene una serie de limitaciones: la muestra fue de una sola campaña
del movimiento escéptico; solo se analizaron los tweets que incluían los resultados
de búsqueda de los hashtags; y analizar la audiencia potencial de la campaña, con
el fin de identificar cuántas personas habían estado expuestas a su contenido estaba
fuera de sus límites. No obstante esto, el corpus no planteó aquí ningún problema
grave.
Por último, cabe destacar la importancia del seguimiento de la evolución de la
relación sociopolítica de los TC en España. Para profundizar en este fenómeno, sería
interesante comparar los diferentes discursos internacionales a favor y en contra
de su uso, específicamente con datos del Reino Unido y Australia, así como analizar
la influencia de diferentes factores culturales, legislativos y sociales. sobre la
evolución de la legitimidad y reputación de los CT.

Agradecimientos
Un agradecimiento especial a Guillermo López García y Carolina Moreno Castro, quienes
han actuado como revisores y consultores de esta investigación. La autora también desea
agradecer la participación de todos los entrevistados y de las personas que la ayudaron a
contactarlos.

Fondos
Los autores declararon haber recibido el siguiente apoyo financiero para la investigación,
autoría y / o publicación de este artículo: Este trabajo ha sido apoyado por el Ministerio de
Economía y Competitividad y cofinanciado con fondos FEDER de la Unión Europea.
Comisión a través del proyecto 'Estudio y clasificación de

Cano-Orón 15
   

las terapias naturales, complementarias y alternativas a través de los medios y las redes
sociales. Transferencia de ideas y valores aplicados al imaginario social '
(CSO2014-57778-R).

Material suplementario
El material complementario de este artículo está disponible en línea.

Notas
1. Lo que este estudio llama "terapias complementarias" a veces también se denomina
"terapias alternativas", " terapias no convencionales ", "terapias naturales" o
"pseudoterapias" en otros lugares; el nombre de este conjunto de terapias depende de
la perspectiva de la fuente que lo nombra (Gale, 2014; Schreiber, 2005). Esto también
ocurre a nivel político en España, ejemplo concreto de ello es el discurso de cada
partido político en las elecciones anteriores (Cano-Orón y Moreno Castro, 2017).
2.
https://www.awarenessdays.com/awareness-days-calendar/world-homeopathy-awareness-week-20
3. https://sugarfree.io/.
4. Twitter es una red social de microblogging que se caracteriza por tener límites de
caracteres (280) por mensaje, llamado tweet. Más información sobre esta red social
está disponible en https://about.twitter.com
5. http://www.escepticos.es/node/5034.
6.
http://www.europapress.es/comunicados/salud-0910/noticia-comunicado-cofenat-acusa-cs-prom
7. Carmen Montón (PSOE), consejera de Sanidad de la Comunidad Valenciana en ese
momento, anunció la prohibición del desarrollo y promoción de estas terapias en los
centros de salud pública.

ORCID iD
Lorena Cano-Orón https://orcid.org/0000-0003-4270-1924

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Biografía del autor


Lorena Cano-Orón está realizando actualmente su investigación de doctorado en la Universidad de
Valencia con una beca predoctoral otorgada por el Ministerio de Economía y Competitividad de
España (beca del programa FPI BES- 2015-072409). Además de la Licenciatura en Comunicación
Audiovisual por la Universitat de València, por la que recibió el Premio Extraordinario, tiene un
Máster en Investigación en Comunicación y Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona
y un Máster en Interculturalidad, Comunicación y Estudios Europeos por la Universidad. de
Valencia. También es miembro de los grupos de investigación 'Mediaflows' y 'ScienceFlows'.

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