El reto más grande que tiene Colombia y su sistema político es lograr cambiar la imagen de

que este país no es simplemente un productor de sustancias psicoactivas y de pobreza, para

así lograr una inversión con el apoyo de los demás gobiernos del mundo; el gobierno debe
apoderarse de todos estos sectores que han sido usados para la guerra y poder sacar
provecho de este; permitir que estas personas que a lo largo de sus años han sufrido por
estos actos de guerra puedan ver la luz al final del túnel y tener esperanza. ¿Cómo logramos
la esperanza? Con oportunidades, son muchas las víctimas de este conflicto que deben tener
oportunidades y con aliados de otros países podría llegar a cambiar la historia. Lo que se
puede concluir es que mientras Colombia realice unas buenas inversiones en el pos
conflicto, y cumpla con los acuerdos que se pactaron en la Habana, no va a tener problemas
con todos los países que realizaron sus aportes para éste proceso, de lo contrario si el
proceso de paz es un fracaso, Colombia si tendría muchos inconvenientes; la relación que
tiene con los EE.UU de América es muy importante que empiece Colombia a trabajar duro
en la erradicación de todos los cultivos ( para la realización de sustancias psicoactivas) que
tiene sembrado en su territorio, ya que el aporte que realiza éste país es bastante alto y
esperan que el nuevo gobierno en Colombia, actúe de una manera transparente y
contundente para que elimine en su totalidad cultivos y procesamiento del alcaloide en
Colombia.

Esto con el fin de que lleguen inversionistas extranjeros y dejen de ver a Colombia como un
país con alto grado de violencia y un índice elevado en consumo y productividad de
sustancias alucinógenas.