UNIVERSIDAD DE NARIÑO.

ENTREGADO POR: Andrés Aristizabal Burgos.

CODIGO: 217013021.
ASIGNATURA: Un paso a la conciencia y memoria ambiental.

REFLEXIÓN SOBRE PAYADA PA´ SATÁN.

Este es un cortometraje que aun que dure tan solo siete minutos deja un mensaje claro y
sensato sobre el impacto de la megaminería en el medio ambiente y los grupos sociales que
habitan cerca a esos lugares donde ocurre esa mega extracción de recursos. Vemos en el
video como dos personas que habitan felizmente junto a las montañas pasan a tener vidas
tristes y miserables tras la explotación de tierras próximas a donde habitan, dejándoles sin
tierra fértil, agua limpia, flora muerta, animales pereciendo en el suelo y una mujer amada
agonizante por consecuencias del envenenamiento u enfermedades seguidas de la
destrucción causada por la minería.
La minería es la extracción bien seleccionada de minerales de nuestras tierra y con el
agregado mega, pasa esta a ser de forma colosal y sin contención alguna, en este caso, los
daños causados al ecosistema incrementan en formas casi incalculables, pero podemos
pensar en que este tipo de minería y junto a otros, pueden llegar a gastar y generar
sustancias contaminantes, el uso de grandes cantidades de energía, uso y desperdicio de
gran cantidad de agua que puede llegar a ser potable, drenaje de ácidos, gran ocupación de
tierras, producción de desechos tóxicos, etc. No hay que olvidar también la explotación de
trabajadores y situaciones denigrantes en las que estos laboran, siendo expuestos a riesgos
biológicos.
En el video ya visto queda claro que estas entidades que proliferan la megaminería no
tienen nada de conciencia contra las formas de vida que habitan cerca a estas instalaciones
de muerte y como buenas bestias, esas fuerzas políticas y militares que promueven estos
actos se visten de rojo al igual que el diablo, pero ahora sabemos que “el diablo todo lo
mata”. Es ahora nuestro problema luchar contra ese poder que nos vende al asar de la
supervivencia en un mundo que en estos días avanza a pasos agigantados hacia la
autodestrucción generada por mano del hombre que nada ve y es sordo al llanto de un
mundo que a gritos muestra señales de que es hora de un verdadero cambio, en donde al fin
pueda encontrarse un equilibrio.