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RESOLUCION DE CONFLICTOS

ACTIVIDAD 3 – EVALUATIVA: ANÁLISIS DEL CONFLICTO ENTRE INDIGENAS


Y
AFROCOLOMBIANOS EN EL CAUCA

PRESNTADO A:
MARGARITA LUCIA POLO BLANCO

POR:
STEPHANIE CARDOZO OVIEDO
ID 622635

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS


FACULTAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES
CONTADURÍA PÚBLICA
BARRANQ
ACTIVIDAD 3 – EVALUATIVA: ANÁLISIS DEL CONFLICTO ENTRE INDIGENAS
Y
AFROCOLOMBIANOS EN EL CAUCA.

Como señala el módulo leído y referenciado para el adelanto de esta esta actividad, “el
conflicto es un fenómeno natural que está presente en toda sociedad. Pensar en el conflicto
social, es hablar en un hecho social, inherente a la vida colectiva.” (Carreño, 2013) esta
perspectiva y para salir del cliché del conflicto en Colombia con los grupos insurgentes
(FARC, EPL, ELN, BACRIM, etc.), el equipo de trabajo decidió analizar en esta
oportunidad el conflicto que aún mantiene enfrentados a los indígenas NASA y los
campesinos afrodescendientes, dada la restitución de un predio que les fue entregado a los
primeros dentro del marco de la Ley de Restitución de Tierras.
Este conflicto es la base del documental “Conflictos por la tierra en el Cauca: tensiones
interétnicas, terratenientes y el Estado colombiano”, además del artículo periodístico de
Myriam Bautista (2011) titulado “El conflicto entre indígenas y afro-colombianos en el
Cauca: sangre de tu sangre”.
El litigio por la tierra en el Cauca entre las comunidades negras y las indígenas se remonta
al siglo XIX. Los afros acreditan la propiedad de esas tierras con nombres, apellidos y
resquebrajados títulos de propiedad, que nunca fueron respetados. Una de esas propiedades
es la finca San Rafael, de 517 hectáreas, ubicada en la comunidad de Mazamorrero,
municipio de Buenos Aires. Según las comunidades afro esas tierras pertenecieron a sus
antepasados a quienes se las arrebataron terratenientes de la zona sin pagarles un solo peso,
los antepenúltimos dueños con escrituras legalizadas fue una familia Cabrera de Popayán.
Estas personas permitieron a unas 1.200 familias campesinas utilizar la finca para sacar
leña, llevar los animales y desarrollar proyectos agrícolas cuyos frutos se venden en
supermercados de
Cali, Bogotá y otros pueblos del suroccidente del país. Los campesinos crearon la
Asociación Regional para el Desarrollo Campesino Norte-Caucano (ARDECANC) para
que los representara en sus negocios.
En diciembre del 2007, el ministro del Interior Holguín Sardi, a través de su Viceministra
María Isabel Nieto, entregó a los indígenas Nasa la finca de San Rafael, como parte de los
Acuerdos por la Masacre del Nilo ocurrida en noviembre de 1991 y en la que 20 indígenas
fueron asesinados.
Después de una demanda, el Estado reconoció su responsabilidad en la masacre y por ello
se comprometió, a través del desaparecido Instituto Colombiano para la Reforma Agraria
(INCORA) a entregar 15.663 hectáreas de tierra a miembros del Consejo Regional Indígena
del Cauca (CRIC), como compensación por sus muertos. La finca San Rafael era la cuota
inicial de ese compromiso. El gobierno escrituró la finca a 85 familias indígenas paeces,
para que este territorio formara parte del Resguardo indígena de Toribío, ubicado a por lo
menos dos horas de camino, en otro municipio.
En virtud a lo anterior, la Junta Directiva de ARDECANC, los campesinos
afrodescendientes advierten los riesgos incurridos en este hecho dada la inconveniencia del
traslado de un grupo indígena a una comunidad habitada en su totalidad por campesinos
afrodescendientes, puesto que estos consideran que atenta contra su integridad étnica y
cultural, violando el derecho a ser previamente consultados y que los pone en peligro de
disolución como comunidad. De igual forma, también plantearon diferentes propuestas para
la compra del predio a los indígenas, quienes en ese entonces estaban dispuestos a venderlo.
Pero los funcionarios del Gobierno rechazaron esta solicitud.
Desde esta situación pasaron dos gobiernos (URIBE y SANTOS) sin que se obtuviera una
solución al conflicto, que estalló en la tarde del domingo 22 de mayo, cuando se
enfrentaron campesinos afrodescendientes con los indígenas en San Rafael, porque la vaca
de los campesinos negros había sido abusivamente sacrificada por los indígenas. La
confrontación dejó un saldo de 15 personas heridas, algunas de ellas de gravedad, y un
indígena caucano muerto, de escasos 17 años.
La Junta Directiva de ARDECANC, lamenta esta muerte que no tuvo explicación ni
justificación alguna porque el dueño de la vaca y quienes lo acompañaron fueron a hacer el
reclamo de manera pacífica y de un momento a otro resultaron agredidos, dado que, en la
región, la mayoría de campesinos y de indígenas, por la violencia que se vive, portan armas
de fuego y
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Bautista, M. (2011). El conflicto entre indígenas y afro-colombianos en el Cauca: sangre de
tu sangre. Razón Pública - 10 años. .
Carreño, K. (2013). Módulo Resolución de Conflictos. Bogotá: UVD Uniminuto.
Vargas, J. (2010). Guerreros y campesinos. El despojo de la tierra en Colombia. Estudios
Socio Jurídicos. Vol.12 No.2.

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