EL CUATERNARIO Y EL CAMBIO CLIMATICO GLOBAL

UNA VISION GEOLOGICO GEOTECNICA DE LA INCIDENCIA DEL CLIMA EN

LA FORMACIÓN DE LOS SUELOS DE BOGOTA Y ALREDEDORES QUE
CONTRIBUYE A LA INTERPRETACION DEL CAMBIO CLIMATICO GLOBAL.

José Camilo Alarcón Bulla1

1
 UNA VISION GEOLOGICO-GEOTECNICA DE LA INCIDENCIA DEL CLIMA EN
LA FORMACIÓN DE LOS SUELOS DE BOGOTA Y ALREDEDORES, PARA
CONTRIBUIR CON LA INTERPRETACION DEL CAMBIO CLIMATICO GLOBAL.

RESUMEN.

En la última década, el tema obligado en todos los foros medioambientales y los esfuerzos científicos del Planeta, se han
orientado a entender y manejar un concepto complejo, bautizado por propios y extraños como el “cambio climático global”.
Los personajes, una vez involucrados, adoptan enseguida diferentes y muy variadas posiciones: unas muy serias,
responsables y eruditas, respaldadas en investigaciones formales con sistemas estandarizados de medición y verificación de
resultados, otras pseudo científicas, empiezan por especular en forma tremendista, adoptando de inmediato, sesgos
económicos o políticos, persiguiendo objetivos particulares, usando toda clase de tretas sensacionalistas, siguiendo las líneas
de un abierto terrorismo ambiental, que es muy rentable, por la ignorancia rampante sobre el tema.

Para encontrar soluciones proactivas a la humanidad, es absolutamente necesario empezar por buscar mediante una mejor
educación, interpretaciones racionales del fenómeno, que de una manera clara y sencilla, proponga a las personas, protocolos
lógicos y tangibles para manejarlo o mitigarlo, teniendo como base, un sistema real de monitoreo de evidencias sistemáticas
que ayuden a los posibles ajustes del clima mundial, que en un próximo futuro pueda aportar la tecnología, así como los
ajustes sociales que obligatoriamente deben implementarse para poder hacer las respectivas previsiones sin desmedros a la
vida.

Palabras Clave: Cambio climático ambiental global.

SUMMARY.

In the last decade, forced in all environmental forums and scientific efforts of the Planet theme, they have focused on
understanding and managing a complex concept, called by friends and strangers as "global climate change". The characters,
once involved, take once different and varied positions: a serious, responsible and erudite, backed by formal investigations
with standardized measurement and verification of results systems, other pseudo scientific, begin to speculate as alarmist,
adopting of immediate economic or political bias, pursuing particular objectives, using all kinds of tricks sensationalist, along
the lines of an open environmental terrorism, which is very profitable, rampant ignorance on the subject.

To find proactive human solutions, it is absolutely necessary to start by looking through better education, rational interpretations
of the phenomenon that a clear and simple way, propose to people, logical protocols and tangible to manage or mitigate,
based, monitoring system a real systematic evidence to help the possible adjustments of the global climate, that in the near
future can provide the technology and social adjustments which necessarily must be implemented to make the respective
forecasts without detriment to life.

Keywords: Global environmental change.

1. Ing. José Camilo Alarcón B. Consultor Geológico y Geotécnico Grupo YS, Profesor Catedrático Facultad de Ingeniería Civil,
Corporación Universitaria Minuto de Dios

Portada: Laguna chiquita, páramo de Sumapaz.

2
INTRODUCCION.
Este documento, es una nota técnica con
soporte e interpretación científica derivada
de evidencias, asociadas al fenómeno
climatérico que se avecina. Pretende ser
realista sin especulaciones del evento
venidero, con el fin de aportar
proactivamente al manejo y la posible
solución del fenómeno, asociado al cambio
climático y aspira colateralmente entender
un poco mejor el fenómeno natural que
vivimos y su influencia sobre los materiales
más jóvenes y blandos superficiales de la
sabana de Bogotá y sus alrededores que
permite entender mejor los fenómenos que
los originaron, al presentarse una
oportunidad excepcional que involucra un
importante tramo de prueba en la ciudad
para verificar estas apreciaciones.
El “cambio climático ambiental global”, es
un fenómeno natural cíclico que tiene por
misión, dentro del desarrollo geológico
histórico de la Tierra, la más importante
participación: aportar las variaciones
necesarias para generar la diversidad
biótica que se reflejará en los ajustes
evolutivos que hacen todas las especies en
tiempo y espacio, concepto comprobado en
los cambios fisiológicos detectados entre
ejemplares del mismo filum en función del
tiempo, conforme registros paleontológicos
y estratigráficos de los materiales y las
rocas que los preservan y son en última
instancia, quienes las renuevan, con
aportes adicionales de materiales minerales
y nutrientes que mantienen la biota,
propiciando nada menos que la necesidad
de ajustarse y evolucionar la vida y sus
entornos para permanecer. Esta
afirmación, tiene ejemplos por doquier, con
evidencias tangibles en rocas y materiales,
cuyas condiciones solo pudieron ser
producidas, por procesos de perioricidad
climática, que derivaron en secuencias
cíclicas repetidas, presentes en diferencias
estratigráficas en tiempo y espacio, como
fenómenos que solo pudieron estar
relacionados con el clima. (Van der
Hammen 57).
La Tierra ha dejado en todo el entorno,
testigos tangibles representativos de los
mencionados cambios, que han sido
periódicos, cíclicos, pertinaces y
permanentes, con múltiples evidencias
embebidas dentro de los materiales que los
caracterizan, así que es indispensable
empezar por interpretar correctamente las
evidencias, para entender que el cambio es
un fenómeno natural, que se repite en forma
cíclica y que los humanos solo podemos,
con el tiempo que nos queda, aprovechar
los recursos disponibles para superar las
circunstancias venideras de la mejor
manera posible o esperar que la tecnología
del futuro, sea capaz de superar la prueba
que el ciclo natural actual implica a mediano
y largo plazo para la humanidad.
3
UNA BREVE HISTORIA.
La prehistoria del hombre, relaciona su
evolución, con cambios climáticos severos,
que ameritaron ajustes biológicos
evolutivos e incluso, bajo amenaza de
extinción, de progresos y ajustes culturales
para facilitar su adaptación al medio y su
asegurar su supervivencia, pero sustrae el
hecho de que solo se trata de que los
cambios climáticos lo han forzado
evolucionar y el hombre moderno actual,
solamente hace parte del mismo viaje, con
mejor equipaje para realizar las hazañas del
futuro.
Entender que el cambio climático global,
como un proceso cíclico activo, es un
fenómeno natural, es el principio
fundamental, de suma importancia para el
manejo racional del problema, porque en
forma simple, el cambio climático global no
es solamente el producto de la acción
irresponsable del hombre en el manejo de
los hidrocarburos, sino el producto de un
actuante adicional en la necesidad de
disponer las cargas adicionales de bióxido
de carbono a la atmósfera, como parte de la
vida, ante la necesidad de compartir la
saturación del ambiente, con el principal
actor determinante del cambio que aunque
los científicos lo saben desde el principio,
permanece desconocido para el vulgo: la
actividad volcánica periódica y el
subproducto del proceso natural
piroclástico: la emisión de gases volcánicos,
que implica la expulsión de enormes
volúmenes de gases con efecto invernadero
inmediato, que es al final, conforme los
registros paleontológios en hielos antiguos,
los reales y verdaderos determinadores del
fenómeno cíclico que afecta el clima y lo
seguirá afectando indefinidamente en la
Tierra, mientras siga como planeta en el
mismo cosmos.
Una forma sencilla de verificar la incidencia
permanente del mencionado cambio
climático global en un entorno, se puede
lograr mediante el estudio detallado de los
materiales más recientes que conforman el
piso que ocupamos actualmente los
humanos, donde, milímetro a milímetro,
podemos encontrar, pruebas tangibles en la
biota, de fenómenos que solo pueden
imputarse al clima, incluso con una
capacidad innata de producir “cambios
climáticos de gran espectro”, donde, todas
las diferencias encontradas en una columna
estratigráfica, muestran a gritos, las
estrechas relaciones en tiempo y espacio
con el clima, que indican, que la historia de
un terreno y su entorno, están
estrechamente ligadas a fenómenos
naturales, que enmarcan a la vez, procesos
de cambio climático permanente, como
respuesta a todos los fenómenos naturales
específicos.(HUBACH 57).
Para entender racionalmente el concepto
del cambio climático global que
experimentamos, tenemos que tomar como
ejemplo, el cambio anterior al calentamiento
global actual que nos preocupa, que
efectivamente llegó a afectar en tiempo, al
incipiente desarrollo humano y los terrenos
cubiertos por otros posteriores que ya no
vemos, pero que guardan las evidencias en
materia biológica y cultural, que podemos
correlacionar con respuestas tangibles en
las áreas geológicas y geotécnicas, para de
una manera más sencilla, entender y
asimilar de la manera menos dramática
posible, la que preocupadamente vemos
avanzar.
4
EXPERIENCIA EN EL MEDIO.
Una forma eficiente de contribuir con una
interpretación racional del mencionado
fenómeno de cambio, es desarrollar un
ejemplo específico en algún lugar del
entorno, aprovechando la oportunidad de
encontrar las condiciones y el ambiente
perfecto para realizar un análisis empírico
comparativo, con la mayor fidelidad posible,
que define la participación del clima,
comienza con la invaluable ocasión que se
nos presentó de usar un modelo de prueba,
a escala real, consistente en un amplio
corredor de la ciudad, donde se ha podido
verificar la incidencia de los cambios
ocurridos, repetidos y distanciados en
escala de tiempo geológico, con disposición
geométrica específica, verificables en
directo, en las secuencias superiores de las
formaciones arcillosas de una amplia zona
de origen lacustrino en el centro occidente
de la ciudad de Bogotá, Colombia, con
parámetros geotécnicos incluidos, que
ayudan a la interpretación cualitativa y
cuantitativa del tema.
Esta preciosa ocasión se presentó, gracias
al generoso apoyo de las empresas del
GRUPO YS, comandado por el ilustre
ingeniero colombiano Yamil Sabbagh, quien
con su amable invitación para participar en
el equipo de trabajo para la instalación de
largos tramos de tuberías de importantes
diámetros, sentadas por los métodos de con
zanja y sin ella, en los trabajos
pertenecientes a la Empresa de Acueducto
y Alcantarillado de Bogotá, EAAB, que nos
brindó la maravillosa oportunidad de
observar y recuperar insitu, de primera
mano, con acceso ilimitado a ingentes
cantidades, los materiales más
representativos de las capas arcillosas
estratificadas con planos de sedimentación
definidos, pertenecientes a vastos sectores
de topografía plana de la ciudad, con origen
lacustrino de Bogotá, obtenidas durante el
proceso de lanzamiento de tuberías,
procedimiento que han permitido, acceder
en forma continua, a largos tramos de
materiales de excavación con los que se ha
verificado la configuración litológica,
estratigráfica, paleontológica y edafológica
de la cuenca específica del río Bogotá, con
las columnas estratigráficas presentes,
donde fue posible realizar pruebas de
campo y laboratorio, con los protocolos
representativos del sistema y la invaluable
oportunidad de tocar y mirar al microscopio
los materiales extraídos, que han permitido
hacer las mejores correlaciones entre la
estratigrafía histórica y la geotecnia, la
paleontología y la palinología de los
materiales en los tramos intervenidos, que
nos ha permitido configurar los argumentos
necesarios para implementar normas y
procedimientos apropiados de trabajo,
establecidos dentro de los protocolos de
ingeniería especializada, con una base
geológica e histórica sustentable, para
hacer las correlaciones en tiempo y espacio
con los materiales encontrados y el clima,
para argumentar casos tangibles del
proceso de cambio.(EAAB2.015)
Dentro de las primeras observaciones
importantes, se presenta la pertinaz
uniformidad de las capas que componen los
terrenos planos de la ciudad capital, que
descritas en columna estratigráfica de
arriba hacia abajo, permiten tener la
descripción del suelo en los últimos dos
millones de años con precisión.
Para definir de ésta manera el perfil de
suelos involucrado en los trabajos, en
tiempo geológico, lo analizamos de menos
a más, situación que nos permite ubicar los
materiales en tiempo y espacio, como
representativos de los materiales del
modelo, quienes, luego de la incidencia
actual de carácter antrópico, presenta las
secuencias naturales más jóvenes, de
carácter limoso de origen torrencial y
paludal que representan las últimas
5
incidencias del último período frío de hace
10.000 años, que dio origen a las últimas
líneas y pendientes de la formación de la
sabana, con depositaciones de tiempo frío
verificables, tangibles en los materiales que
contienen importantes cantidades de turbas
filamentosas, como materiales de control,
que para su formación, necesitaron tiempo
frio, mucha agua y poco oxígeno, dentro de
un clima perteneciente a la última
deglaciación global, representada en
rellenos de materiales arrastrados durante
la fusión del hielo del entorno congelado en
la glaciación, conocida en la nomenclatura
académica local, como el interglacial Würm
de Europa, término usado en el medio
académico colombiano, derivado de la
herencia alemana en la geología nacional.
Continúan en profundidad los materiales de
textura arcillosa y origen lacustrino,
consideradas la clave del estudio, con
materiales que fueron dispuestos durante el
período interglacial Wurm-Riss II, espacio
de tiempo contemporáneo con la
deglaciación “Illinois” de norte América, que
comenzó hace 200.000 y terminó hace
140.000 años, tiempo que define el período
Pleistoceno, con los materiales que forman
el basamento del sistema y el techo del
depósito de interés.
Estas arcillas se presentan oxidadas y
desecadas formando una costra superior o
techo, seguidas por secuencias de
materiales mineralógicamente similares, en
un estado muy blando. Es aquí en donde el
cambio de densidad, representa la
evidencia del fenómeno climatérico que
explicaremos detalladamente como el
fundamento del argumento del estudio y
que a continuación detallamos.
El entorno estudiado estuvo caracterizado
por presentar puntos extremos de bajas
temperaturas, producto de grados tóxicos
de contaminación atmosférica por bióxido
de carbono volcánico, en fenómenos de
poca iluminación por aire enrarecido, que
provocaron el descenso por centurias, en
forma dramática la temperatura, fenómeno
que supone paralelamente la formación de
enormes y largas crestas glaciares en el
entorno montañoso sabanero, con miles de
millones de metros cúbicos de nieve y hielo,
que se fundieron luego, al cambiar de nuevo
el clima, al influjo del calor ganado durante
la depuración atmosférica que siguió
producto de calma volcánica posterior,
desprendiendo enormes masas glaciares
en terribles avalanchas sucesivas de rocas,
suelos, lodos y agua corriente, acopiados al
vaso de la sabana de Bogotá, formando
turbios lagos, que sedimentaron su carga
suspendida, formando nuevas capas
paralelas, conforme el medio estaba
ganando calor, a medida que la
contaminación atmosférica se fue
sedimentando en sumideros naturales,
aumentando la radiación solar, a medida
que fue cediendo la carga de bióxido de
carbono que la saturó el aire durante
milenios y que generó la gran glaciación
descrita.
Paralelamente al fenómeno climático
relacionado, debe sumarse la tectónica
local remanente del alzamiento andino,
como aporte de la disipación de energía de
la terminación del cretácico, que marcó la
profundización del valle de la cuenca
cerrada que formó, una vez más, los
penúltimos materiales de relleno de la
sabana de Bogotá, producto de una enorme
sismicidad tectónica y saturación de gases
invernadero.
La combinación de estos fenómenos
contribuyeron al llenado del vaso cerrado
que forma la sabana, que sirvió de
receptáculo a la inundación con grandes
avalanchas de lodos, terminando, una vez
se ha colmatado el fondo de lagos
interconectados someros, que a la vez,
recibieron los materiales sedimentados bajo
agua turbia, consistentes en los sólidos
6
aportados por el proceso de erosión
detonado posteriormente por las corrientes
jóvenes de la deglaciación y el ciclo
meteorológico avenido subsiguiente,
removiendo, arrastrando, acumulando y
sedimentando materiales degradados de
rocas friable blandas, que estuvieron
expuestas durante el proceso de fusión de
los glaciares.
Millones de toneladas de sedimentos
suspendidos en los turbios y fríos lagos,
fueron sedimentándose, formando el relleno
de la cuenca con lodo arcilloso oscuro
suspendido, espeso, denso y de elevada
plasticidad, ocasionado por la mineralogía
de las rocas predecesoras, el tipo de
intemperismo y los tiempos de
sedimentación de partículas arcillosas
provenientes de rocas de la misma
composición, que formaron la masa
estratificada resultante que asumimos,
basamento del sistema. La cuenca fue
rellenándose de sedimentos oscuros finos
inertes, mineralógicamente clasificados
como arcillas inorgánicas, sedimentadas en
las frías y turbias aguas de lagos de
carácter cianótico por pérdida de
movimiento, que a la vez permitió que se
acumularan en gruesas capas, sedimentos
microscópicos, que llegaron a conformar
bancos de espesores importantes de no
menos de 80 metros, con materiales de una
muy baja y pertinaz consistencia, que se
consolidaron parcialmente por peso propio
a medida que las aguas superiores fueron
aclarándose, terminando la deglaciación,
hasta que las aguas someras estacionales
mantuvieron saturados los sedimentos del
fondo y permitieron que los aportes de
aguas claras del final del período que
sobrevinieron posteriormente, cambiaran
drásticamente, ayudados por un ambiente
biológicamente renovado por el clima más
cálido, que permitiera que los últimos
sedimentos estuvieran mezclados con
evidentes trazas de vida acuática, similar a
la que perdura hoy en día, de pequeños
peces de escaso volumen, controlados por
depredadores acuáticos más dotados y
sobre todo, invadidos por una profusa
colección de plantas acuáticas de cuerpo
tubular del tipo elodea, que conjuntamente
con una fauna y flora macro y microscópica
de plantas acuáticas, algas y
microorganismos, completaron el cuadro
venidero.
Los rastros fosilizados, integrados a la
cubierta final de los sedimentos
depositados en la cuenca, indican, de un
lado, un proceso de invasión biótica exótica
y abundante, que proliferó durante el
espacio de tiempo cálido calculado entre la
terminación del Riss I, marcando y la
glaciación Riss II, en donde se advierte una
gradual pérdida periódica de agua, en
donde sistemática y periódicamente los
materiales estuvieron expuestos a la
aireación por desecación, que detonaron un
elevado efecto de sobreconsolidación,
característico.
Conforme los numerosos e importantes
estudios del profesor T. Van Der Hammen,
en ellos se hace énfasis en la periodicidad
climática y la influencia que tiene en la flora
en el entorno de las épocas estudiadas.
Estos documentos han puesto todo el
énfasis en el período cuaternario de los
terrenos de Bogotá y sus alrededores,
enriqueciendo el conocimiento de las
propiedades de los depósitos superficiales.
Para el proceso de análisis, Van der
Hammen tomó las variedades de polen de
la macroflora como parámetro indicativo
para establecer las hipótesis palinológicas.
Estas investigaciones son extremadamente
interesantes por cuanto permiten ubicar
especies vegetales en tiempo y espacio,
verificando la presencia de ejemplares
extintos y sobrevivientes, cuyas evidencias
están marcadas en los sedimentos de las
zonas profundas en donde inclusive se han
podido identificar rasgos fósiles de bosques
7
densos de árboles sobrevivientes como el
ejemplar de alnus, (Aliso) hallado a 20
metros de profundidad en los depósitos
blandos del basamento de la zona
urbanizada al norte de Bogotá,
demostrando la verdadera escala del
fenómeno y la inmensa magnitud de
energía dispuesta por la naturaleza, durante
los eventos relativamente recientes que nos
han precedido.
Entre tanto a escala humana, el curso de
pocos años, numerosos ilustres ingenieros
geotecnistas locales han expresado sus
ideas respecto a la caracterización de los
materiales encontrados en el piso
urbanizado de Bogotá, con énfasis en la
notoria diferencia en la consistencia
detectada entre los suelos superficiales y
los suelos profundos de sectores de
Bogotá, que enmarcan a menudo el
quehacer profesional.
Teniendo en cuenta el origen de los
materiales involucrados, esencialmente
lacustre, es obvio que en tiempo han sido
sometidos a procesos de carga por
acumulación sobrepuesta de partículas,
mas no a descarga equivalente, solo
relacionada con procesos de disminución
de la cantidad de agua por desecación, por
esta razón, los materiales solo presentan
sobreconsolidación superficial forzada, en
tanto que en profundidad han permanecido
saturadas y con mínimas variaciones
derivadas del proceso ambiental natural. De
esta forma se hace evidente la diferencia
entre los valores calculados de las
presiones de preconsolidación de arcillas
de la cubierta superficial y los mismos
parámetros para los suelos los suelos
arcillosos en profundidad, que son
notablemente contrastantes.
Esta comparación es real, la cubierta
superficial es evidentemente más
compacta, densa, consistente y resistente,
acompañada de una elevada relación de
sobreconsolidación que la de los suelos
blandos en profundidad, que muestran el
rango típico de los depósitos normalmente
consolidados con una relación de
sobreconsolidación, conocida como RSC,
regularmente unitaria.(Moya 2.005)
Esta diferencia podría provocar malas
interpretaciones en ingenieros mal
preparados o entrenados, pues de un lado,
la desecación puede ser una enorme
ventaja, dependiendo del proyecto
específico, si se trata de una edificación de
baja altura o de alta inercia, ésta situación,
es un regalo de la naturaleza, pero si se
trata de un proyecto esbelto en altura, con
baja inercia en medio de un vecindario
vulnerable, podría interpretarse como una
situación riesgosa, donde el manejo de
excavaciones profundas ameritan, en forma
obligatoria, la implementación de un
adecuado sistema de contención que evite
el llegar a situaciones extremas. La causa
del fenómeno que marca la diferencia de
consistencia de los perfiles en profundidad
en Bogotá es múltiple: en primer lugar, el
efecto de una temprana exposición al aire
de dichos materiales, ante una relativa
calma volcánica y evaporación de las aguas
del lago. De otro lado, los cambios
ambientales sobrevenidos son evidentes,
por la participación de agentes biológicos
que actuaron en forma contundente sobre
los materiales superficiales, cuya incidencia
e interacción los modificó con evidencias
que aún son tangibles en los materiales
inalterados.
La situación puntual que dio origen a los
materiales que infrayacen el depósito
sedimentario y que hacen parte del mismo
paquete estratigráfico intervenido del
estudio, es diametralmente diferente, a
pesar que se trata de secuencias arcillosas,
química y mineralógicamente iguales, a las
superficiales superiores, que de acuerdo
con los rangos de plasticidad que tienen,
8
son arcillas inorgánicas de alta plasticidad,
identificadas con la sigla CH, clasificadas
dentro de un estrecho rango de variación y
conforme a los análisis de mineralogía por
difracción de diferentes métodos, se
clasifican como illitas de alta plasticidad,
cuyo origen deriva de la meterorización de
minerales arcillosos de rocas sedimentarias
preexistentes del mismo origen geológico,
con los mismos protocolos de
meteorización, separados por una frontera
de cambio climático en tiempo, que formó
un aislamiento hidráulico y neumático, que
ha mantenido el depósito inferior aislado,
inalterado en profundidad, dentro de un
estrecho rango de humedad fósil, cercano
al límite de la saturación de la masa por lo
que técnicamente algunos lo consideran
como un nivel freático capaza de generar
esfuerzos efectivos, aunque por la posición,
cantidad y ubicación, son realmente, niveles
o lentes epifreáticos colgados en donde los
piezómetros arrojan lecturas de muy difícil
interpretación, por lo que, pequeñas
variaciones en la capacidad de campo del
acuicierre que forman, de inmediato se
transfieren en significativos cambios en las
condiciones mecánicas, que las modifican
geotécnicamente.
(Wu 73)
Por lo general, estos materiales de
basamento profundo han permanecido
latentes dentro de un rango constante de
humedad fósil con pequeñas variaciones en
tiempo, cercanas al límite líquido, que
caracteriza el estado latente de baja
consistencia y elevada compresibilidad, que
las hace extremadamente vulnerables a
migración por extrusión al ser sometidas a
una elevada compresión por cargas
puntuales o por sismos de elevada
magnitud con epicentro cercano, que
provocaría con certeza, el colapso de
muchas estructuras vulnerables.
(NSR-10), (INGEOMINAS 97).
Esta situación propone un abanico de
situaciones diferentes para los dos
depósitos superpuestos, cuya mecánica de
formación, deriva en un origen geológico
común, pero con condiciones ambientales
esencialmente diferentes, que fueron
directa y claramente definidos por el clima,
teniendo como base cambios sucedidos
después de los últimos períodos extremos,
que son evidencias incontrovertibles de
cambios climáticos globales.
Los dos depósitos de arcillas relacionados
en la comparación, hacen parte de una
columna estratigráfica definida, morfológica
y paleontológicamente hablando, con todos
los rasgos comunes, con claras diferencias
biológicas, que representan estrechas
concordancias mineralógicas por ser
secuencias de origen geológico común,
diferenciadas en tiempo, con el mismo
proceso de sedimentación por cambios
ambientales. Para dar una idea más
precisa, nos remontamos al penúltimo
periodo glacial de la sabana, durante el
deshielo que produjeron prolongadas
avalanchas y flujos de lodos que fueron a
parar a las turbias y anóxicas aguas del frío
y profundo lago que se formó, en donde,
debido a la quietud del medio, se produjo la
sedimentación de partículas de menor
tamaño, de la fracción arcillosa de la masa
que se depositaron una a una en forma
sucesiva, configurando el primer nivel de
arcillas.
Pasado el tiempo, con el lago parcialmente
colmatado de sedimentos, fue testigo de
cambio ambiental que se produjo y lo
involucró. Al calentarse, las aguas fueron
llenándose de vida acuática, con algas,
peces, anfibios y plantas, que fueron
creando un paisaje diferente, proliferando la
vida en forma creciente por siglos, bajo un
clima más cálido que permitió el
establecimiento de las diferencias
biológicas detectadas, con las que puede
establecerse la separación en tiempo y
9
espacio, bajo la cobertura de eventos
comunes, concibiendo lapsos continuos de
tiempo diferencial corto, de muy frio a
cálido, que fue definitivamente el motivo
climatérico que permitió la diferenciación
biológica de las cubiertas superiores que
constituyen el terreno actual.
Comparando las columnas estratigráficas
de los terrenos lacustrinos del área de
trabajo, están conformadas por secuencias
estratigráficas sucesivas que pueden
relacionarse entre si de una manera simple,
extremadamente lógica al observar sus
similitudes. Si se ejecuta una excavación
vertical en un terreno abierto, la columna de
materiales naturales que aparece en forma
contínua, son de arriba abajo, primero, los
sedimentos de textura limosa como los
materiales más recientes, conformados por
materiales orgánicos negros de origen
eólico, que terminaron convirtiéndose en las
tierras orgánicas superficiales de jardín, que
cubren a la vez, limos paludales, crudos
oxidados a habano claro, producido por las
oscilaciones periódicas de los niveles de
inundación que todavía son recurrentes,
seguidos en profundidad por los limos de
color ocre que formaban en un pasado, el
fondo somero de lagos intermitentes bien
soleados, densamente colonizados por
plantas acuáticas y algas diatomíticas que
le imprimieron a los lagos ambientes de
aguas claras en donde el potencial
fotosintético oxigenó el lago que terminó
conformando el depósito pletórico de vida
acuática.(VAN DER HAMMEN 57)
Antecedieron en orden, los materiales
arcillosos de origen lacustrino que nos
permiten la interpretación de la evidencia
paleontológica con plantas fosilizadas,
cuyos cuerpos constituyen los testigos de la
última fase lacustrina, con la presencia de
familias de cuerpos fosilizados de plantas
acuáticas, con los que se establecen las
diferencias ambientales.

Las microfotografías muestran los canales fosilizados vertical y transversalmente dentro de las arcillas
intervenidas, de los cuerpos fosilizados de las plantas con el efecto oxidante del ingreso de aire al sistema,
produciendo el reducto oxidado por la presencia de metales del sistema que desarrolla un cambio
geoquímico evidente, aumentando la resistencia y disminuyendo la compresibilidad.

10
Los cuerpos fosilizados de estas plantas
acuáticas, embebidos dentro de las capas
arcillosas, se sitúan a lo largo de todo el
tramo fuertemente desecado, guardan una
posición vertical y las evidencias
demuestran que cada ejemplar fosilizado,
con generaciones sucesivas del mismo,
fueron alargándose conforme las plantas
sobrevivieron insitu por milenios y los
materiales se sedimentaban en su entorno,
aumentando el espesor de la capa,
convirtiéndose al final en múltiples canales
naturales que ayudaron eficazmente al
proceso de desecación de la masa,
detonando el efecto de preconsolidación de
la capa, sacando agua e introduciendo aire
al sistema, generando la oxidación insitu de
la capa por el ingreso de aire, con la que se
alcanzó un importante efecto de pseudo-
litificación de la capa arcillosa superficial,
que le da a las arcillas, la consistencia
necesaria, para que se convirtiera por
esencia, al revisar la consistencia del perfil,
en el nivel ideal de emplazamiento seguro
para las estructuras superficiales del
entorno.(TERZAGHI 2.001).
Con base en estas circunstancias, por lo
regular y muy frecuentemente en la vida
real, los perforadores e ingenieros, al
interpretar los resultados de exploración,
reportan en sus informes, la presencia de
“raíces” o simplemente “vetas de
oxidación”, sin saber, que se trata
realmente de cuerpos fosilizados de plantas
acuáticas del tipo elodea, que se
caracterizan por tener un cuerpo tubular
silíceo cuya composición incluye un
exoesqueleto que forma un tubo, donde la
planta, al crecer, fue aumentando su
longitud, renovándose unida a si misma con
nuevos tallos interconectados, hasta
convertirse en un eficiente sistema de
drenaje interno, ingresando aire y
extrayendo el agua. (DAS 2.008).

Durante el lanzamiento de tunerías en el sector de Puente Aranda en Bogotá, se muestran las

secuencias de arcillas habanas con plantas acuáticas embebidas en la resaga del sistema de
lanzamiento de tuberías sin zanja que se orientó directamente dentro del nivel de arcillas
desecadas a ras con el río Fucha, importante corriente de agua que atravieza la ciudad.
Esta prevalencia de plantas acuáticas en
mayor o menor cuantía, produce la
inmediata oxidación de la capa afectada por
el efecto climático y es evidencia de un
mejoramiento sustancial de la cubierta, que
de un lado, indica una muy apreciable
longevidad de los especímenes vegetales,
que quedaron embebidos en las capas
recientes, con indicativos de una elevada
oxidación en presencia de materiales
ferrosos que le confieren el color ocre
característico, en tanto que la presencia de
materiales de descomposición de los
materiales limosos superiores, con elevada
carga de ácidos, genera en las arcillas un
fuerte efecto de desecación con oxidación
blanquecina de los materiales arcillosos que
contrastan con los colores oscuros en
profundidad, que denotan un ambiente
cianótico y el efecto de un proceso
geológico de consolidación, provocado por
el peso de la sobrecarga, generando
exudación del agua hacia el contacto
discordante con las capas de arcillas
superficiales.(BOWLES 97).
Este contacto es, para los procesos de
excavación, el lugar geométrico de la
discordancia más grande en consistencias
y calidad mineralógica, indica un claro
efecto ambiental, que dentro de los límites
en tiempo, sería equiparable, a la historia
escrita del hombre, a la coincidencia de
eventos asociados a grandes inundaciones
que mencionan las diferentes culturas,
incluyendo la muisca, equiparables a la
última gran glaciación, conocida como
Würm o Wisconsin, sucedida hace 10.000
años atrás, que involucró al ser humano
moderno, como la era del hielo, que no es
más que el último cambio ambiental global
y en la actualidad, el techo de esta capa
mejorada, constituye la plataforma ideal
para el emplazamiento segura de
soluciones de cimentación superficial de
estructuras. (BARDET 2.001).
De otro lado, las condiciones de las capas
blandas de profundidad, evidencian
condiciones ambientales diferentes a las
superiores, al ser materiales primigenios,
sedimentados en aguas turbias, de
condiciones anóxicas, inorgánicas,
avaladas por la inexistencia de fósiles, que
geotécnicamente se clasifican como arcillas
inorgánicas francas de alta plasticidad, mal
llamadas arcillas “grasas”, para cuya
operación de excavación, se debió
enfrentar capas de materiales
excesivamente blandos donde un pequeño
esfuerzo produciría la destrucción total de la
microfábrica original de las arcillas,
llevándolas a la consistencia del límite
líquido, con el más bajo rango de esfuerzo
cortante, sin que se genere un efecto
tixotrópico inverso de mejoramiento con el
tiempo, dificultando los procesos de
excavación a cielo abierto, pues producen
como consecuencia directa, una pertinaz
falla de fondo de cualquier proceso, pues no
tienen otra forma de mejorar diferente a otro
proceso de consolidación en tiempo
geológico, que escapa a cualquier
proyección en tiempo humano.
(LAMBE & WITHMAN 73).
12
 Las fotografías muestran, durante el lanzamiento de tuberías en el sector de San José de
Bavaria, la textura de las arcillas blandas extraídas por el método sin zanja, en donde los tubos
barrenadores indican la extrema fluidez de los materiales remoldeados por el efecto de
excavación.
OBSERVACIONES Y CONCLUSIONES.
Por las condiciones encontradas en el
corredor estudiado, se deduce, que el
concepto de “cambio ambiental global” se
reduce al efecto racional creado por un
fenómeno natural repetitivo, inherente a los
ciclos del clima que vive el Planeta, creado
por efecto volcánico exclusivamente y
simplemente es una historia que se repite
una y otra vez, sin fin, como producto de la
historia evolutiva de la vida en la Tierra.
Como valor agregado, se puede concluir
con seguridad, que todas las facilidades o
dificultades constructivas experimentadas
durante el manejo de los materiales
involucrados, están asociadas a una buena
interpretación de los efectos evolutivos que
los cambios ambientales han impreso a los
terrenos y materiales de un entorno que
influyen de manera directa en la Tierra.
En consecuencia, en cualquier perfil de un
terreno, se detecta el efecto de más de un
ciclo ambiental, que obedece a un “cambio
ambiental global”, que se ha superado en
tiempo y espacio, que fue creado por la
naturaleza y ha sido superado en forma
natural, con un evidente efecto evolutivo,
mejorando o empeorando la condición,
detectado regularmente en profundidad,
que explica las diferencias en consistencia
de los materiales del entorno, pero a la vez,
si se analiza cuidadosamente el fenómeno,
muestra que fueron dichos elementos
fueron objeto de un cambio radical e
importante, con relación directa a las
condiciones climatéricas, en serie,
acumuladas dentro de un mismo depósito
de materiales, en un entorno, capaz de
guardar fielmente las evidencias.
Las condiciones geotécnicas de un lugar,
pueden estar fielmente representadas en
valores numéricos de los parámetros
involucrados, pues reflejan estrictamente
las condiciones ambientales sobrevenidas,
capaces de hacer que dos materiales
filiales, mineralógicamente similares,
emparentados, cambien y se diferencien
drásticamente, tanto en sus condiciones de
entorno biótico, como de comportamiento
mecánico a la exigencia física.(PECK et all
73).
13
El cambio ambiental explicado, a pesar de
la rudeza en los valores representativos de
temperatura y pluviosidad, mantuvieron las
condiciones para la preservación de la vida
pasada y futura, en donde el producto de su
acción, se reflejó en la evolución necesaria
para superar el problema, en un rango de
causa y efecto que realmente puede
involucrar muchas generaciones de
humanos venideros, pues desde el lapso de
tiempo transcurrido desde que se produjo la
última glaciación global, el ser humano
pudo evolucionar y adaptarse sin tecnología
ni recursos, y prueba de ello es que
seguimos en la lucha con una muy variada
y entretenida historia.(WINTERKORN 73).
Esta condición implica, que la adaptación a
las nuevas condiciones, precedidas por un
calentamiento que antecede a un
enfriamiento, son fenómenos geológicos
naturales normales y cíclicos, que al
producirse teniendo como testigo al ser
humano actual, solo podrá ser superado
con educación, que implique ajustes
premonitorios válidos como disminución
racional consciente de la población a la
estrictamente necesaria, mediante estricto
control natal y un riguroso control de la
producción de alimentos, que implique
seguramente el aprovechamiento industrial
del exceso de bióxido de carbono para
producir biomasa de alimento, que será la
nueva fuente de provisión de energía,
mediante sistemas de agricultura
controlada, a medida que las condiciones
terrestres irán empeorando.
La supervivencia de los humanos puede ser
exitosa y segura, al tener que entrar a una
nueva fase de educación, entendiendo que
la causa del fenómeno no importa por ser
un evento natural insalvable, sino las
previsiones a tomar, para mitigar su efecto,
que deberá tener prontamente, un
incremento apreciable del equilibrio
volcánico y sus efectos colaterales,
representado en un incremento importante
de la sismicidad, por lo que la educación en
el perfeccionamiento de los códigos y la
calidad de la construcción son vitales para
superar el riesgo y enfocarse en diseños de
calidad para mitigar los cambios climáticos
severos que se avecinan, aprovechando la
ventaja de permanecer en un corredor
tropical, que puede establecer la diferencia
al recrudecerse el sistema global de clima.
Bogotá, Marzo de 2.017
REFERENCIAS.
BRAJA DAS. (2.008) Advanced Soil
Mechanics. Third Edition Taylor & Francis,
London, N.Y.
BOWLES Joseph. (1.997)Foundation Analysis
and Design. 5 Edition. Mc Grau-Hill, N.Y.
HUBACH ENRIQUE. (1.957). Estratigrafía de
la Sabana de Bogotá y alrededores.
Boletín Geológico, S.G.N. mayo-agosto 1957.
Pag 94 a 119.
EAAB, (2.016). EMPRESA DE ACUEDUCTO Y
ALCANTARILLADO DE BOGOTA.
Documentos de contrato oficial “Diseño
detallado y construcción del alcantarillado
troncal y diseño de ingeniería básica de redes
locales de alcantarillado sanitario para el barrio
San José de Bavaria, Bogotá D.C.
EAAB, (2.014). EMPRESA DE ACUEDUCTO Y
ALCANTARILLADO DE BOGOTA.
Documentos de contrato oficial “Diseño y
Construcción del alcantarillado e ingeniería
básica para el alcantarillado pluvial y sanitario
del sector de Puente Aranda, Bogotá D.C.
EAAB, (2.016). EMPRESA DE ACUEDUCTO Y
ALCANTARILLADO DE BOGOTA.
Documentos de Contrato oficial ”Diseño y
Construcción del alcantarillado troncal del
alcantarillado pluvial del sector de la Y de
Fontibón”, Bogotá, D.C.
14
INGEOMINAS-UPES-UNIANDES. (1.997)
Microzonificación Sísmica de Santa Fe de
Bogotá. Bogotá.
LAMBE & WHITMAN. (1.980). Soil Mechanics.
Wiley & Sons N.Y.
MOYA BARRIOS JULIO E. (2.005). Problemas
de Estabilidad y Deformaciones en suelos
blandos. NOTAS, Excavaciones en
Condiciones Complejas, Escuela Colombiana
de Ingeniería. Bogotá.
NSR-10. (2.010). Código Colombiano de
Construcciones Sismo Resistentes, Tomo 4.
Título H-1. Ministerio del Medio Ambiente,
Vivienda y Desarrollo Territorial.
TERZAGHI, PECK & MESRI. (2.001). Soil
Mechanics in Engineering Practice, 3Th
Edition, Wiley&Sons, N.Y.
JEAN PIERRE BARDET.(2.001) Experimental
Soil Mechanics. Prentice & Hall.N.Y.
VAN DER HAMMEN, THOMAS. (1.957).
Climatic Periodicity and Evolution of South
American Maastrichtian and Tertiary Floras.
Boletín Geológico, Servicio Geológico
Nacional, SGN. Mayo-agosto de 1957. Pags.
50 a 90.
WU TIEN HSING. (1.976) Soil Mechanics,
Second Edition, Allyn and Bacon, N.Y.
PECK, HANSON & THORNBURN. (1.973)
Foundation Engineering. Wiley& Sons. N.Y.
1.973.
WINTERKORN & FANG. (1.973) Foundation
Engineering Handbook. Van Nostrand.
London, N.Y.
15