Está en la página 1de 1

De la misma manera que Jesús, desde el monte de los olivos, nos dice sobre los

verdaderos profetas: “por sus obras los conoceréis” (Mt. 7-16). Gimeno nos dice sobre el
texto curricular: “el currículum se reconoce en el proceso de su desarrollo”. Así,
reconoceremos el verdadero curriculum no por lo bien escrito que esté o por sus ideas
progresistas y católicas, sino por las consecuencias que deriva en el aprendizaje. No
obstante, Gimeno nos alerta de que lo que podemos evaluar y medir del aprendizaje es
posiblemente la punta del iceberg y que la correspondencia entre lo que se quiere enseñar y
lo que de hecho se aprende es bastante pequeña.

Por otro lado, pasando de la metáfora cristiana a la platónica, me parece muy interesante
los cinco niveles de realidad con respecto de (la idea) curriculum. De esta manera, a medida
que nos alejamos del texto curricular hacía los efectos comprobables del aprendizaje hay
una degradación de la idea, siendo más partícipe de ella la interpretación de los profesores
que el currículum realizado en el mundo concreto. Por ello subraya Gimeno la importancia
de la redacción del currículum, y la controversia y debate social que causa.

Otro de los puntos que considero más relevantes es el de la adecuación de los contenidos
del currículum al mundo (laboral) actual. Gimeno nos alerta de la justificación por medio del
utilitarismo tanto de la ciencia como de la educación, que conlleva a una visión educativa
dirigida al aprendizaje de tecnologías. Al mismo tiempo que nos invita a pensar un
contenido nuevo que retome las promesas ilustradas y de modernidad.

Esta parte final del texto me recuerda al informe sobre la condición postmoderna de
Lyotard, donde advierte de la transformación de la legitimación del saber, y por tanto de la
educación. Si justificamos la ciencia por su propia performatividad, esto es, por su
capacidad para crear nuevos enunciados de lenguaje o, más concretamente, por su
capacidad para producir nueva tecnología, la educación acaba subordinada a las exigencias
de los mercados. Que es, en última instancia, la denuncia de Gimeno sobre los contenidos
del currículum que buscan acercar la escuela a la vida por medio del modelo productivo.

También podría gustarte