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Avifauna en el Sendero Cedro Rosado de la Universidad del Quindío

Michell Flórez-Salamanca-Esteban Camilo Ochoa


Universidad del Quindío
Facultad de Ciencias Básicas y Tecnológicas
Programa de Biología
Introducción
Las presiones antropogénicas, especialmente la pérdida y degradación del hábitat,
la sobreexplotación para el beneficio económico y el cambio climático, son responsables de
la disminución excepcionalmente rápida de especies animales en los últimos siglos
(Ceballos et al. 2015). Una de las causas más importantes de pérdida de hábitat es
la urbanización, un proceso de asentamiento humano y modificación de hábitats naturales y
ecosistemas (Marzluff et al. 2001). Los estudios han encontrado que las áreas urbanas
tienen las mayores tasas de extinción de especies locales de todos los tipos de uso de la
tierra, porque la mayoría de las especies nativas locales y sus hábitats se pierden con el
desarrollo inicial y la posterior expansión urbana (Chace y Walsh, 2006, Marzluff et al.
2001). La expansión urbana continua ha provocado que más humanos vivan en áreas
urbanas. Por lo tanto, la conservación de la biodiversidad en las áreas urbanas es importante
porque las áreas urbanas presentan hábitats de especies nativas (Chace y Walsh, 2006),
la convivencia con la vida silvestre promueve la calidad de vida de los residentes y aumenta
su apoyo a la conservación de especies (Pellissier et al. 2012 y Savard et al. 2000).
Las aves se han utilizado ampliamente como indicadores ambientales para la evaluación de
los efectos de la urbanización en la biodiversidad porque son conspicuas y fáciles de contar,
forman comunidades complejas dentro de las áreas urbanas y responden rápidamente a los
cambios de hábitat (Chace y Walsh 2006 y Pellissier et al. 2012). La mayoría de los
estudios ornitológicos realizados a lo largo de gradientes urbano-rurales han mostrado
efectos negativos; efectos de la urbanización sobre la diversidad y estructura de las
comunidades de aves (Chace y Walsh 2006 y McKinney 2002), principalmente debido a la
dificultad de establecerse de las aves migrantes. Las especies y la estabilización temporal
del hábitat y los recursos alimentarios promovidos por la urbanización provocan
una homogeneización estacional de composición de aves (Clergeau et al. 2006 y La Sorte
et al. 2014). Además de la pérdida de hábitat natural debido a la infraestructura gris,
las aves reproductoras locales se ven aún más afectadas por el reemplazo de la vegetación
nativa remanente, donde anidan, con plantas ornamentales no nativas ( Lerman et al.,
2014 ). El tráfico y los humanos también perturban a las aves reproductoras, mientras
que los animales domesticados, como los gatos y los perros, son depredadores de muchas
aves que anidan en el suelo y en arboles (Kark et al. 2007). Loss y cols. (2013) sugirieron
que los gatos son probablemente la mayor fuente de mortalidad para aves y mamíferos,
estimando que en los Estados Unidos los gatos matan entre 1.4 y 3.7 mil millones de aves
anualmente. Sin embargo, diferentes especies muestran diversidad respuestas a la
urbanización, y algunas se adaptan al nuevo entorno y otras lo evitan (Fischer et al.
2015). Las especies con requisitos de alimentación y anidación altamente especializados
generalmente no pueden adaptarse a los entornos urbanos (Evans et al. 2011). Por otro
lado, las áreas urbanas pueden tener mayores densidades de especies comensales humanas,
como el canario común (Sicaliz flaveola ) y la paloma ( Columba livia ), que pueden
explotar la mayor disponibilidad de alimentos descartados por los humanos (McKinney,
2002).
La pérdida y fragmentación de los hábitats naturales causada por la urbanización aumenta
drásticamente el borde del hábitat y expone a los organismos a condiciones bióticas y
abióticas alteradas (Fahrig, 2003, Pereira et al. 2004). La zona donde los elementos urbanos
y no urbanos se entremezclan a lo largo del borde del hábitat entre las áreas urbanas
y periurbanas representa un ecotono (MacGregor-Fors, 2010, Puga et al. 2014). Por tal
razón nos planteamos como objetivo comparar esas diferencias en la estructura y
composición de aves en 2 coberturas, borde e interior de bosque ubicadas en un área
urbana.
Metodología

 Área de estudio

El Sendero Cedro Rosado está ubicado en el campus de la Universidad del Quindío al


noroeste de la ciudad de Armenia, en la vertiente occidental de la cordillera Central de los
Andes colombianos (4° 32´ 40’N; 75° 46´ 13´W). El cual posee una extensión aproximada
de 15 ha, encontrándose a una altura entre los 1490 y 1530 msnm, con una temperatura
media de 19° y exhibiendo una humedad relativa entre 65 y 75%. Además, presenta un
clima de distribución bimodal de lluvias, (dos periodos de máxima precipitación en marzo
mayo y septiembre-noviembre, y dos periodos de menores precipitaciones entre diciembre-
febrero y junio-agosto) (Gómez 2005).
Actualmente la vegetación comprende un parche de bosque secundario y guaduales de 6 ha
atravesado por la quebrada La Aldana, que constituye la estación biológica “Sendero Cedro
Rosado”, el área restante está conformada por pastizales, rastrojos, zonas arboladas, prados
y edificaciones (Gómez 2005).

 Observaciones directas

Se realizó un recorrido entre las 6:30 y 11:30 am, el día 31 de agosto de 2019. Donde se
tomaron dos coberturas vegetales de referencia (Villareal et al. 2006), incluyendo borde e
interior de bosque, en estas se efectuarán observaciones puntuales donde las aves se estaban
alimentándose o posadas sobre algún sustrato (árbol, hojarasca, etc.). Las observaciones se
realizaron con binoculares 7x 50 mm y de cada especie se tomaron datos tales como,
numero de individuos, tipo de cobertura en la que situaba, tipo de reporte (visual o
auditivo) y el reconocimiento de las especies por medio de guías ornitológicas (Tabla 1).

 Análisis de datos

La identificación de especies se realizó con base en la guía de aves de Colombia publicada


por Ayerbe (2018); por su parte, la curaduría del orden taxonómico y la nomenclatura se
llevó a cabo con la clasificación de Remsen et al. (2018) (A Classification of the Bird
Species of South America). Así mismo, las especies con alguna categoría de amenaza se
determinaron con el Libro Rojo de las Aves de Colombia para los Andes (Renjifo et al.
2014), comprándola con las listas rojas de la Unión Internacional para la conservación de la
Naturaleza (2019) y CITES (2019).
Resultados y discusión
Durante 5 horas de observación en las dos coberturas vegetales (interior y borde de
bosque), se obtuvo un total de 101 registros pertenecientes a 36 especies de aves, las cuales
se agruparon en 22 familias y 11 ordenes.
Las familias que exhibieron mayor número de especies fueron Thraupide con 6 especies,
Tyrannidae con 6 y Psittacidae con 3 (Fig. 1). Por lo cual se deduce que en el Quindío es
dominante la fauna de aves Passeriformes, ya que la mayor cantidad de especímenes fue de
este orden, donde se incluyó cerca de 21 especies, es decir el 69%.
7

5
Número de especies

0
e e e e e e e e e e e e e e e e e e e e  e e
i da ida cida lida tida lida lida iida ida tida lida cida ida lida ida lida rida ida tida ida ida lida
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Familias

Figura 1. Familias de aves más representativas en las dos coberturas vegetales, en el


campus de la Universidad del Quindío.
Así mismo, se determinó el grado de conservación de las especies registradas, según la
Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) y el Convención sobre
el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES)
(Tabla 1). Identificando solo una especie en estado vulnerable de las 36 especies
observadas.

Tabla 1. Especies con algún interés para la conservación registradas en el campus


universitario. Lc: preocupación menor y Vu: Vulnerable.
Por otro lado, se realizó una curva de rango de abundancia (Fig. 2), una acumulación de
especies (Fig. 3), de cobertura (Fig. 4) y de diversidad (Fig. 5)
Figura 2. Curva de rango de abundancia de las especies de aves muestreadas en la
universidad del Quindío.
Se observó las especies ubicadas de la más abundante a la menos abundante, siendo Sicaliz
flaveola o canario común la más abundante en la zona, presentando aproximadamente 30%
de los individuos muestreados. Así mismo, Pigochelidon cyanoleuca presento casi el 20%
de los individuos muestreados, el resto de especies presentaron Pi bajos <10%.

Figura 3. Curvas de acumulación de especies con respecto al número de individuos para


diferentes órdenes de diversidad q (0,1,2).

Por otro lado, se identificó que en las curvas de acumulación de especies de orden q=1,2,3
para las 2 comunidades y/o sitios de aves presentes en la universidad del Quindío (borde de
bosque e interior de bosque). Determinando que para el orden de diversidad q=0 que
equivale al número de especies (S), el borde de bosque exhibió un mayor muestreo que en
el interior, además debido a que se solapan los intervalos de confianza, se deduce que no
hay diferencia significativa en el número de especies de ambas comunidades. A su vez, en
el borde se observó 20 sp cuando se tienen aproximadamente 100 individuos muestreados,
mientras que en el interior se identificó un bajo número de individuos muestreados y una
cantidad de aproximadamente 20 sp.
No obstante, para el orden q=1 o equitatividad de especies se identificó que la comunidad
de borde es mucho menos diversa presentando aproximadamente 10 sp comunes, mientras
que la comunidad de interior tiene sus sp con frecuencias relativas muy similares, siendo
casi la totalidad de las especies muestreadas comunes en la comunidad.
De igual modo, el orden de diversidad q=2 que considera las especies más dominantes de la
comunidad se observó que la comunidad de borde presentó pocas especies dominantes,
siendo aproximadamente 3. Por otro lado, la comunidad de interior exhibió especies con Pi
más equitativos y por tal razón presenta una mayor diversidad para este orden de
diversidad.

Figura 4. Curva de acumulación de cobertura de muestreo con respecto al número de


individuos.
Además, se identificó que, para la comunidad de borde de bosque, para la cual se realizó un
muestreo de aproximadamente 80 individuos se obtuvo una cobertura de muestreo efectiva
presentando un valor superior de 0.8. Sin embrago, la comunidad de interior de bosque se
presentó un muestreo de aproximadamente 30 individuos, valores que indican que no son
suficientes para alcanzar una cobertura optima, ya que aproximadamente se necesita un
número de individuos muestreados similar al de la comunidad de borde para lograr una
cobertura eficaz.
Figura 5. Curva de acumulación de diversidad de especies, respecto a la cobertura de
muestreo entre dos coberturas para los diferentes órdenes de diversidad q (0,1,2).
Por último, se determinó que en ninguno de los órdenes de diversidad la comunidad de
interior de bosque alcanzó una cobertura de muestreo optima, no superando el 0,4 de la
comunidad muestreada, lo cual nos indica que el esfuerzo de muestreo fue poco eficiente.
La comunidad de borde de bosque si presento una cobertura de muestreo aceptable siendo
>0.7, deduciendo asa que se muestreo una parte significativa de dicha comunidad.
Discusión
Ante la presencia de una especie endémica Sicalis flaveola (Brown 2001), una especie casi
endémicas como el batará carcajada (Thamnophilus multistriatus) (Stiles 1998) y 35
especies categorizadas en preocupación menor, se infiere que la avifauna del campus de la
Universidad del Quindío al igual que en zonas con intervención antrópica, se compone de
un conjunto de especies generalistas de amplia distribución y baja preocupación, y un
pequeño grupo de aves silvícolas dependientes de parches de vegetación (Naranjo 1992),
tal como lo indica la dominancia de algunos grupos de aves de “campos abiertos” como los
Tyrannidae y Thraupidae (Fig. 1) (Naranjo y Estela 1999).
La estancia de estas aves en los parches de bosque, posiblemente se deba a que lo utilizan
de acuerdo con la disponibilidad estacional de recursos alimenticios o irregularmente de
acuerdo al grado de oportunismo de las especies (Orejuela et al. 1979), lo cual indica que
las condiciones geográficas, climáticas y alimenticias del Sendero Cedro Rosado son
favorables para incidencia de avifauna. De igual modo, su presencia o ausencia se debe a
su tolerancia a la perturbación, por lo que son comunes en hábitat menos complejos como
los ecosistemas transformados, en este caso en Sendero Cedro Rosado.
Sin embargo, se hace necesario aclarar que la contaminación auditiva puede afectar
relativamente a la fisiología y el comportamiento animal e indirectamente la abundancia de
estas especies; incluso si esta contaminación auditiva se convierte en crónica, sus efectos
pueden derivarse en una alteración del balance energético, una pérdida en el éxito
reproductor y una tasa menor de supervivencia, de todos modos los efectos reales de la
contaminación auditiva sobre la fauna silvestre, son aún poco conocidos pudiendo
manifestarse tanto ecológica como fisiológicamente (Brown 2001).
Esto le puede servir
la reducción de parches de vegetación aledaños a la universidad producto de la
construcción de condominios en la zona norte de Armenia ha aumentado el aislamiento de
las poblaciones de aves dependientes del parche de bosque. La alta afluencia de estudiantes
al parche de vegetación ha ocasionado una baja tasa de observación de aves.
Bibliografía
Ayerbe Q. (2018). Avifauna Colombiana. Wildlife Conservation society.
Brown L. (2001). Overview of research on the effects of noise on wildlife.in: Proceedings
of the Effects of Noise on Wildlife Conference, Happy Valley -Goose Bay, Labrador.
Gómez M. (2005). Avifauna del campus de la Universidad del Quindío. Fundación
Ornitológica del Quindío, Universidad del Quindío.
Naranjo L. (1992). Estructura de la avifauna en un área ganadera en el Valle del Cauca,
Colombia. Caldasia 17(1):55-66
Naranjo L y Estela F. (1999). Inventario de la avifauna de un área suburbana de la ciudad
de Cali. Boletín SAO 10 (18-19):11-27.
Orejuela J, Raitt R y Álvarez H. (1979). Relaciones ecológicas de las aves en la reserva
forestal de Yotoco, Valle del Cauca.
Remsen, J, Areta JI, Cadena CD, Claramunt S, Jaramillo A, Pacheco JF, Robbins MB,
Stiles FG, Stotz DF y Zimmer KJ. (2018) Una clasificación de las especies de aves de
América del Sur. Sociedad Americana de Ornitología.
Renjifo M, Gomez F, Velasquez J, Amaya-Villarreal M, Kattan H, Amaya-Espinel D, y
Burbano- Giron J. (2014). Libro rojo de aves de Colombia, Volumen I: bosques húmedos
de los Andes y la costa Pacífica. Editorial Pontificia Universidad Javeriana e Instituto
Alexander von Humboldt. Bogotá D.C, Colombia.
Stiles, F. (1998). Aves endémicas de Colombia. Págs. 378-385 en: M. E. Chaves y N.
Arango (eds) informe nacional sobre el estado de la biodiversidad 1997. Tomo I:
Diversidad biológica, IAvH, Bogotá
UICN (2018). Red List of Threatened Species.

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