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Ejercer de psicoterapeuta sistémico requiere el aprendizaje ce Una serie de habllidades que remiten a la ecuacién que preside tantas actividades creativas: clencia y arte, técnica e ins- plracion. La teorfa sistémica y la practica supervisada de la terapia familiar son pilares importantes sobre los que asentar la formacién, pero el proceso no puede completarse sin ut ‘trabajo con la persona de! terapeuta y las capacidades ales que constituyen su estilo. practic, inspirador de Y este libro aporta claves para pacientes) y pragmaticos prescripciones tiles y via Marcelo R. Ceberio es doctor en Psicologia, profesor de Terapia Familiar en varias universidades de Buenos Aires y codirector de la Escuela Sistémica Argentina. 120 y psiqulatra, es profeso! id Auténoma de Bar eauigysis eidesoy ua Je0ey Atos sexeury “1 "f / oMeqe9 “YW PRR o Ceberio y Juan L. WE ese) Rm aie en terapia sistémica La construccion del estilo ae yey i : | Coo A Susana Vega, maestva indiscutible de la formacién vivencial e inspiradora de este libro, 3 @ todos nuestros colaboradores, con quienes tanto construinos juntos RY HACER EN TRRAPIA SISTEMICA ‘iones pragméticas 1es emocionales 13 13 14 27 32 23 144 146 162 185 INTRODUCCION Un viejo profesor de Psiquiatria, de euyo nombre no quiero acor darme, afirmaba que la mayoria de los psiquiatras, con benévole ex clusién de sf mismo, eran oligofrénicos o psicépatas, 0 compat parcialmente ambas condiciones. Si la identidad del personaje en cuestion no merece otro destino que el olvido, salvo quiza para una ya imposible inclusi6n en la borgiana Héttoria universal de la inf ‘mia, no ocusre lo mismo con su afirmacién, que puede servis, y de he- cho esta sirviendo en estos precisos instantes, de punto de partida para una teflexién sobre los recursos del terapeuta. Aunque, desde |, deba ser sometida, a tal efecto, a una doble transformacién se- .. de una parte, psiquiatras por psicoterapeutas, dacdlas las diferencias de tiempo y de contexto, no se traiconard nte la inteneién del infame profesor. Y, sobre todo, ido profundo de la infamante valoraci Basico del psicoterapeuta, a Ia vez que breve pero jugosa leccién de epistemologia llamaba oligofrenia, nosotzos le dire- 16 SER ¥ HACER EN TERAPIA SISTEMICA 10 grado de éxito, Pero se trata de procesos evolutivos en los que las _agudizaciones representan rupturas morfogenéticas o conficmaciones ‘mica de la cronicidad, presidida por la narracion sintomatica, sino ‘que, antes bien, la consolidan, mientsas que las primeras pueden su- poner la irrupcién de la crisis y su narracién heuristica, que busca ucvas solucioncs. La psiquiatria no discrimina entre anas y otras, do relacional, es decir, por si predomina en ellos el componente dé busqueda o el de confirmacién, ~La cronicidad implicxetimperio de la narsacién sintomatice, dela explicacién dozmitiva y, por ende, de la simplificacién y le previsibi lidad maximas. Guarda una obvia relacién con el devenir del tiempo, ‘aunque sea una relacién complefa: un breve perfodo puede bastar para ‘que s¢ instale una cronificacién extrema, mientras que se puede pre servar largo tiempo una telativa fluidex. Erterapeuta debe tener en cuenta cuanto antecede porque seria in én fuera la misma con independencia de la pte- idacl presentes en paciente y familia, No es que el proceso deba sex entendido como algo irremisiblemente biol6- ico, pero los psicoterapeutas que creen orgullosamente en la fuerza eo relacién saben cuén poderosas pueden ser sus consecuencias, Si (0 de los juegos cn curso (en cuanto a obtenet un teconocimien: to aia con ottos medios o en cuanto ainfligt a los demés pautas de depredacion similares a las padecidas, por més dutos) es grande, el terapeuta puede habérselas con un profes zal de los sintomas inserto en una familia, v en sistemas més amp! que han llegado a hacer de la part no pretenda cambiarlos en dos o tres sesiones, salvo que el todopod +roso ecosistema le brinde apoyos cussi milagrovos.7_ El terape. ico goza de una bien ganada fama de creative, yeello es mérito de un modelo que enfatiza lo pos el cambio y estimula Ta intervencién pata conse; llomando agudos alos sintomas activos sin, preocuparse por su senti- INFRODUCCION 7 virat a paralizantes, como resistentes sino terapeutas rmulaciones que, de estimulantes, pues aquella que afirma que no existen fami incapaces. Sabo Entce cl impulso ala creatividad y el temor « la incompet conveniente que el ta sistémico evitard embestir cont: is pacientes, soslayando cambios en la estructura de la per ‘otros modelos, para aplicarse a fondo en el trabajo d iciones y las mitologies fami res, asi como en las nat el arraigo de uno: respuesta de imp 1a previsibilidad de los sintomas. SER Y HACER EN TERAPCA SISTEMIGA is, todo Jo que permite afismar ciertas conc nicas y ticticas. Ei xr y hacer en terapia sistémica, Aleanzs 1s, revisat ef proceso de formacié ‘entender claramente les delimitaciones y caracteristicas de ~ peicoterapia permite reflexionar acerca de los métodos je del mismo. de psicoterapia, comprometido cn la tarea dela for ne semejante empreso.con empefio y actitud responsible formador es aquel que tespeta al aprendiz v toes a5 sino que las enmarca ace con la paciencia del vando con avales por qué no ¢s aconsejable tal 0 Tila sesién, Lejos, entaaces, de las Ortodoxias y de jpida a los patrones de modelos ters maniobras ‘on, a nuestro enten: del profesional. El cesencial en la formaciéa, consiste en mol fare ensefadle a observar y 3 La conjuncioa en para desde lo pragmatico 106 son Fatificados 0 rectif ‘componente de este tripods como Ia posibilidad de ser Jnente, ayudado y respaldado cn la teoria y en ta ‘alumno sucede Jo que sucede en toda relaci focimientos especificos, sino todo un comple- abajo del genograma fay 10s juegos sis- yextensas, El genograma es ica mediante el taller del yyo centro de gravedad se en el primer capitulo, ‘c describen los componentes que cara: bbésqueda de una definicién que permi: ‘Ademés, cn coherencia con el co est compuesto por una serie de fe apuntan a arvojer alguna luz sobze la elecciGn de la pro (o personal, También explora la hebilidad ps terapéutieas, como forma de autoconoci ‘cudles son las que deben rectificarse y las ae se ' y relacionales del terapeuta en una ‘dades, en el entendido de que su ppauta las interacciones que él mismo tar, ‘e, en las conclusiones se presenta una seric de vifietas ramos que es ser un buen terapeuta. que aport ismo de los oportunistas, 20 SER Y HACER BN TERAPIA SISTBMICA YY, por encima de todo, el texto intenta transmitir un gran sentido ético y de responsabilidad de rol, proponiendo el perfil de un profe- sional que ejerce su vocacién desde la pasién pero sin postergar la fascinacién por el conocimiento. Un profesional que goza de buena autocstima y valora su sapiencia sin ezer en palabras pretenciosas 0 acciones omniporentes. Un profesional que entiende y siente a los se- res hnmanos que tiene delante, en la dificil tavea de desear erecer y cambiar. 1, LA RELACION TERAPEUTICA No cabe duda de que la comunicaci6n humana es un fenémeno de lu més alta complejidad. Nadie, ni desde la ignorancia ni desde a in- podria definisla como simple, definible ;) sa, como matt, niicleo y germen de las intecaccio- ia vida misma, se constituye en uno de los canales posibles y vi- cde una pauta negentrpica en el constante y desorganizado fluir -xperiencia humana. Y uno de los espacios donde se vehiculiza dinamica es la psicoterapia. E] espacio terapéutico es un 4mbito. mediante la comunicacién entre terapeuta y pacientes o fami- se trubaja acerca de la comunicacién de étos con su contexto, planos cognitive, emocional y pragmstico (Linares, 1996) pue- ser considerados los jes que enmarean la vida relacional Buna 22 SER Y HACER BN TERAPLA SISTEMICA, zaciones, aunando distinciones similares en una clase (Whitehead y Russell, 1910-1913). Categorias que son atribuciones de segundo or- den y que dependen del modelo de conocimiento en el contexto que se aplique. ‘Todos estos clementos, en el acto de conocer, generan la produc cidn de abstracciones. Y son éstas el pasaporte para estructurar hipé- tesis que, como esquemas conceptuales, una vez elaborados acentian la realizacién de nuevas abstracciones, Estas abstracciones confirma: 14a. 0 desconfirmaran las hipétesis, pero siempre bajo el marco de un ‘modelo conceptual previo. Cuando actuamos, hablamos o comunica- Asi, cognicion e inferaccién se unen en un todo com| objetivo de construir realidades, puesto gue, dependiendo teracciones que se desarrollen, se trazarin distinciones que puntua- rin al hecho observable del cusl somos participes. Se descr comparaté'y se reilizarin abstracciones, todo elle desarrollado en el marco de las interacciones. Pero los ptocesos cognitivos ¢ interactives adquieren un nivel de — [A RELAGION TERAPEUTICA 2 tindole o utilizando Ia fuerza, que una madre qudexplique con pe: ciencia el porque del error y emo superarlo. Son distinias formas de cocrear sentimientos asociados a la experiencia que, isomérficamente, podrin trasladarse-a otsas situaciones 0 a otros periodos de la vida ero, aun contando con la asociacién del plano emocional con las cexpetiencias cognitivas y pragmiticas de construir el mundo, es po- sible conducisse mis disociadamente de la emocién, desplazindola y actuando mds racionalmente, en las situaciones menos involucradas afectivamente. En cambio, en presencia de un vinculo afectivo pro fundo, como una selacidn de pareja o una relacién materno o pater- o-Tlal,- te hace mis evidente la repercusign emocional sobre delee ados comtenidtas; con To que la emocién desplaza en mayor o menor zgrado al manejo racional. En este caso, la relacion fluye de forma mas sencilla y previsible, pero también estd expuesta a reacciones mas vis- cerales.7 Resuimiendo, la construccién de realidades puede ser entendida Et Rzerrisoald {ue nosotros mismos construimos_y construimos To que estainos ob-(", Tht que, cuando nos proponemos conocer nUESETO CO es decis, cuando nos preguntamos acceca de nuestra ¢ resultado es nuestro modelo de conocimiento. buciones seménticas que devienen de dicho modelo de ct impregnan las interaceiones desarrolladas en Ja peagm las conductas y acciones de 24 SER Y HACER EN TERAPIA SISTEMICA , ag emociones no sélo emergen de dichas constraccio- nes cognitivas, sino que tanabién las pautan. Un sentimiento Teva a aro impregna una determinada percepeién, que teadré sus im- En consecuencia, cebe concebit Ja relacién terapéutica como una leccion y tendrair fe fabrica, implicando en ef terapevta una habilidad natural , mientras que otras sen incorporadas mediante fer en esta danza de intervenciones, que requiere un agudo entre- (0 aprender un néamero ingente de té&nicas, de devecrar eviiles son las indicsdas, en fur El hecho de que el in par de profesionales o de que haya LA RELACION TERAPE La palabra paciente denuncia una pasividad (el que espera ser atendido) inexistente. Nada més activo que una persona que asiste.2 consulta. El paciente piensa, reflexiona, Hora, se angustia, se contenta ccon encontrar respuestas a sus Interfoganies, se emociona, realiza ta- peo, adcinés, e da trabajo un profesional, Tan activa cs su un trabajo en equipo, donde los pantes se sinergizan de mancca equilibrada: pautands técima- \s de las funciones oficiales de terapeuta-paciente, ci- igo de funcionamiento e imponiendo pautas, més mn esa persgna que consulta y ese terapeuta, en el momento Gnico ypetible de'cada sesién efecto, el consultante es tan activo que con su problema genera icultad o un problema en el profesional (de acuerdo al grado istemoldgico que le produzca). Es decir, la actividad recursivamente, cualquier intervencién de unos o de 4 el juego de las interacciones, de la misma manera que 1e8 surgen como resultado de tales interacciones cibernética, tan- 26 SER Y HACER EN TERAPIA SISTAMUCA LA RBLACION TERAPEUTICA a sesi6n, en un interonmbio comunicucional donde transitan emocio- nes, practices y teflexiones, ni el rerapeuta ni el paciente son los mis- ‘mos, puesto que ambos,han_resuelia situacionss en la relacion. Por tanto, han pasado por una experiencia de aprendizaje poniendo en ‘marcha una accién de crecimiento. No obstante, es nccesatio aclaras, sin abandonar la concepcién epistemolégica dialéctico de | de scsi sitica en el intento de focalizar cul es el problema y, eventualmen , cudles soa los intentos fracasados per resalverlo. Y més directivo vuelve cuando sus preguntas rompen wencionalistmo de de las personas. na de una manera in cara os otfos en un juego interaccional, Preguntas que d i el porgué, of ~ Esta estructura de conocimiento, que, como sefialbamos anterior constituye todavia la epistemologia de una mayor, hace muy nen una posicién que propugna ‘yun juego terapéu tico doade cl profesional es poco intervencionista, dejando a la per: sona a su libre discurso y pautindola lo menos posible. Esta linea de ttabajo ao concibe Is relacién tezapeuta-paciente como una conversa cién terapéutica x, en sa postura més fundamentalista, puede llegar a criticar a los terapeutas sistéinicos como manipladores, en el sen peyorativo del témino. A propésito, en el afio 1981 Lynn Hoffin en su libso Fundamentes de la terapia familar, sefalabu espet teen el modelo esitatégico de Palo Alto que: iendo tareas que redefinan las acciones. Todo cor bio. Aungue esta dizcctividad también ¢s posi ‘iamente. Una funcin directiva puede ejercerse siexiste un in s, pcs, de lo eontratio, se corre el riesgo los estraégicas. lo afisman ser hibiles artesanos que problemas de la gente de las maneras més expeditivas ly menos (L. Hollman, 1981, pag. 260.) Si nos remitimos al significado del término may rio de la Real Academia Espafiola, 28 SER Y HACER EN TERAPIA SISTEMICA ta concepeién organicista.o biologista del proceso del enfer- In salud halla su paralelismo y contrapartida en los ctiterios anotmalidad, pero desde otro baremo: el sacial-es- , 6s decir, que son referentes del contexco donde se desa- Ja desviacién de la norma {actos anormalcs) los que imponen n tal caso, la enfermedad, entendida como degenetacin , si evoluciona en un Ambito determinado, por prensién o gencrando puntos ciegos, que influyen en Ja constmucci6n, Ge hipétesis. En la pragmatics, se traducind en ‘ reactiver la ciberética, como también que la entorpezcan, blogues Tole, fracasando en los intentos de solucién y estancando el proceso ico. ‘imo, gLconterte-es-otto de los clementos que hay que con: dderar, sepulando la cibernética y las narsativas de la psicoterapia. El hecho de desarrollar una tetapia en un marco privado, donde el habi- la estética del lugar es agradable, condiciona las ‘se realiza en un manicomio 0 En algun peutas a amoldarse a tales circuns de espera, bares 0 hasta el jardin del ho: TA RELAGION TERAPRUTICA 47 mos cibeméticos muy distintos, tanto et los pacientes rapeutas, : El espacio donde se jucga la relacién no s6lo delimita un perime- Jos terapeu- un buen de- __ ashe ae mr decid shun pofeonal eal papa, ¢ verd influenciado negativamente en su iniciativa y creatividad, re dendando en una disminucién de su efcacia sae Bee ,‘iteizando, nara pcoterapetn pu consi com el ensamblaje cibernético y narrativo de dos instancias reales y ce mil ples fantasmas. La acomodacidn de sistemas de creencias, de personales, de contenidos y tipos de relaciones y de ciclos arcades en aéteis que conehoran, certian 9 descnfrmanaeines yeu los. Un espacio destinado a ayudar al ser bunrano a disminuir razona- beter sas TERT Tae luyendo lo que convencionalmente se nde pOr a dudes, asi como resolver problemas o, simplemente, cambiar para mejorar la ‘ 2. EL ESTILO TERAPEUTICO eG: S, MODELOS tule anterior se han desarreilado algunas concepciones lacién terapéutica, y ahora conviene adentrarse en el and- is de qué se considera epistemolo ‘omo et a relacién que exi vuna rama de la filosofia que se ocupa de tocos los elementos que pro- ‘curan conocer ¢ investiga sus fndamentos, limites, métodos y val ‘También puede entenderse como un modelo de conoei cos que sustenta numerosos modelos de conocimiento. Pu ¢Cémo y cual fue mi funcién? {Soy preguntén? ¢Pregunto minuciosa y detalladamente? ¢Me Fareresan los temas de otras personas y trato de investigarlos? © -Quién era ast en mi familia de origen u ottos grupos? ¢De dénde Joaprendi? FI ESTILO TERAPEUTICO 7 * @Me gusta narrar historias, anéedotas y cuestos? ¢Soy ua buen narrador y atrapo a la gente con mi relato? cAlguiea era asi

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