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ii. Hacer buenas decisiones que traen gozo y por ende alegran a los
demás.
e. “Dios no supedita su voluntad, o sea el no le somete a usted a hacer
obligatoriamente lo que Él quier. Dios no manda a nadie al infierno. Nosotros
somos los que elegimos ir allá rechazando su voluntad para nosotros. Dios lo ama
y quiere que usted sea parte de su familia, pero si usted se mofa de Dios y le da la
espalda, no puede echarle la culpa a nadie más que usted. Ese es el libre
albedrío.”
2. DIOS USA EL DOLOR PARA LLAMARNOS LA ATENCIÓN
a. El dolor no es su problema. Ni siquiera su depresión, su ansiedad y su
temor son sus problemas. Simplemente son luces de advertencia que le
indican que algo está mal y requiere atención inmediata. Dios usa el dolor
para llamarnos la atención: “Con golpes y con azotes se corrige a los malos
pensamientos».”( Proverbios 20:30 -BLS)
i. El dolor natural de una quemadura en la piel, por ejemplo, nos dice que
nos estamos quemando, el dolor es solo un alerta de que algo
preocupante está pasando.
ii. Entonces el dolor es una bendicion, Pablo dijo esto acerca del beneficio
del dolor: “Pero ahora estoy contento, porque esa tristeza hizo que
ustedes cambiaran y que le pidieran perdón a Dios. En realidad, Dios así lo
quiso.” (2 Corintios 7:9 -TLA)
iii. ¿Cuál es su problema? ¿baja autoestima? ¿pérdida, abandono o abuso?.
Su dolor le indica que estos asuntos requieren urgentemente su atención.
A nadie le gusta el dolor, pero Dios lo utiliza para que usted preste
atención.” Y se acuerde de que Él está allí pendiente de su problema. Y
diga como Jonás dentro del gran pez “Al sentir que se me iba la vida, me
acordé del Señor».” (Jonás 2:7) Preste atención a Dios, el usa el dolor
para llamar nuestra atención y además…
3. “DiOS USA EL DOLOR PARA ENSEÑARNOS A DEPENDER DE ÉL”
a. Lean conmigo ahora esta porción: 2Cor. 1:8b “porque fuimos abrumados de
manera extraordinaria y más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que hasta
perdimos la esperanza de seguir con vida” (2 Corintios 1:8b -RVC)
b. Después de hablar del consuelo divino en tiempos difíciles, el Apóstol pasa
a mencionar su caso particular: “…la tribulación que nos sobrevino en Asia”
(v. 8a). No se sabe cuál fue la experiencia tan amenazante que abatió su
vida, pero suponemos que era lo que ocurrió en la ciudad de Éfeso. Pablo
invirtió más tiempo y energía en esa ciudad que en cualquier otra de Asia.
En fin, allí se armo un escándalo, todo un alboroto contra los cristianos y
fueron amenazados de muerte. Fue de tanta trascendencia que Pablo lo
señaló como una experiencia horrible y amenazante. Pero fíjense lo que
dice, . Pero la sentencia de muerte que pendía sobre nosotros fue para que no
confiáramos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos. ” (2
Corintios 1:9 -RVC). En esta porcion Pablo nos dice que, en realidad, nos sentíamos
como los condenados a muerte. Pero eso nos ayudó a confiar en Dios, que puede
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hacer que los muertos vuelvan a la vida, y no a confiar en nosotros mismos.: “No
importa cuan grande sea el sufrimiento, y el dolor, Dios lo usará para enseñarnos a
depender de Él.
c.Repitasmole a Dios lo siguiente, “Estuvo bien que me hicieras sufrir porque así
entendí tus enseñanzas” (Salmos 119:71 -BLS)
4. “DIOS PERMITE EL DOLOR PARA QUE AYUDEMOS A OTROS”
a. “Cuando tenemos dificultades, o cuando sufrimos, Dios nos ayuda para que
podamos ayudar a los que sufren o tienen problemas” (2 Corintios 1:4 -BLS)
b. Si me entregas tu dolor, te dice el Señor, lo usaré para bendición tuya y de los
demás.
c. “Dios quiere usar y reciclar el dolor que hay en su vida para ayudar a otros, pero
usted tiene que estar dispuesto y ser completamente sincero. Si quiere quedarse
solito con su herida, la está desperdiciando. Dios quiere reciclar sus dolores, sus
complejos y sus malos hábitos para ayudar a otros.”
d. Dios es más grande que cualquier persona que te alla hecho o haga daño. Sin
importar cómo le hayan lastimado los demás, Dios puede reciclar ese dolor y
usarlo para bien. Dios nunca desperdicia una herida. Pero usted sí puede
desperdiciarla, si no aprende de ella y la comparte. Muchos otros podrán ser
ayudados y animados si usted comparte los problemas y las luchas que ha
enfrentado. Dios puede y quiere usar su dolor para ayudar a otros, si usted se lo
permite.”
¿CÓMO PODEMOS USAR NUESTRO DOLOR PARA AYUDAR A OTROS?
1. ACEPTE SU MISIÓN. Dios tiene una misión para usted. Se llama La gran comisión y se
encuentra en la Biblia: «Vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos
en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo».” (Mateo 28:19 -NVI)
a. Aquí hay unas pregunta: responde con un SI o con un NO a cada una, hazlo
con valentía, con fuerza, no te de pena, el evangelio no avergüenza, la
pregunta es, ¿Eres un seguido de Jesús?, ¿Le has entregado TODA tu vida a
Cristo? ¿Toda de verdad? Recuerda de donde has caído, donde te encuentras
ahora (complejos, culpas, penas, dudas, rencores, odios, vergüenza,
fracasos, miedos, y vivo en el closet de mi propia desesperación): siguen
las preguntas: ¿Eres un verdadero creyente en Cristo?, ¿Si? Entonces tu haz
cruzado la frontera de la muerte a la vida, si eres un creyente de Jesús, eres un
misionero de Jesús, y estas dentro del plan de Dios para ayudar a otros a sanar
sus heridas y alcanzar a los perdido, ¿Qué estas esperando?
2. CUENTE SU HISTORIA.
a. Sea humilde. Sin arrogancia, sin falso espiritualismo, recuerda que tu también
fuiste un mendigo, tu manos estaba extendida esperando la limosna de Dios.
Cuéntale a otro mendigo el plan de Dios para salvarlo de su dolor.
b. Sea real. Tienes heridas y faltas, no hables como si no lo supieras, las tienes,
debes sanarlas, abre tu vida con franqueza, bríndale al mundo la oportunidad
que Dios te ha dado. Imagínate que el cielo alguien te diga, “estoy aquí por
usted, muchas gracias”
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c. No sermonee: Pero no meta a la gente por la fuerza al cielo. Cuenta solo tu
historia. Dios necesita testigos, no jueces. Hay muchos que no vienen a la
iglesia para no oír un sermón, no sermonees, cuenta tu historia. No te
imaginas como llegarás al corazón de la gente, y no pienses que tienes que ser
perfecto para hablar de ello, si asi fuera el mundo nuca conocería la mas
grande historia jamás contad, la historia de la Redención
3. CONSIDERE A SUS BENEFICIARIOS.
Una vez que experimentamos recuperación, la restauración, vez que nos invade la paz de
Dios, ‘el dice: “Quiero que le comuniques todo esto a otros”. Esa es la prueba de tu
recuperación. ¿Cómo sabemos que ya estamos recuperados? Es muy simple. Cuando
comenzamos a ayudar a otros que tienen un problema similar. Si no estamos ayudando a
otro a sanar de un sufrimiento similar al que teníamos, aún no estamos recuperados.
Todavía tenemos que terminar de recorrer el camino. Probamos que estamos
recuperados cuando empezamos a ayudar a otros.
Dios nunca desperdicia un sufrimiento. ¡Nunca malgasta una sola de nuestras heridas!
Nosotros sí. Malgastamos nuestro sufrimiento constantemente. No aprendemos de las
cosas que nos lastiman, así que somos lastimados una y otra vez. Pero si le damos a Dios
los pedazos de nuestra vida, su propósito puede transformar nuestros problemas. Y él
puede sacar lo bueno de lo malo. Esa es la especialidad de Dios. Si tomas los pedazos de tu
vida y se los das a Dios, él los volverá a armar y te devolverá una vida nueva. Él de dará paz
mental y te transformará en un agente de paz para otras personas.
Bosquejo tomado de: John Baker – 8 Decisiones Sanadoras
Editorial:Free Press 2008 - pp 339-402
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¿POR QUÉ PERMITE DIOS EL DOLOR?
Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de
buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.
(2Corintios 12:9 - RVR1960)
Esta es una pregunta universal. ¿Por qué un Dios bueno permite el dolor y el sufrimiento? Existen
varias razones, pero hablemos de las cuatro principales.
1. DIOS NOS HA DADO LIBRE ALBEDRÍO
a. “En Génesis, el libro de los comienzos, leemos: «Y Dios creó al ser humano a su
imagen».” (Gen 1:27).
2. DIOS USA EL DOLOR PARA LLAMARNOS LA ATENCIÓN
a. “Con golpes y con azotes se corrige a los malos pensamientos».”( Proverbios 20:30 -
BLS)
b. “Pero ahora estoy contento, porque esa tristeza hizo que ustedes cambiaran y que
le pidieran perdón a Dios. En realidad, Dios así lo quiso.”(2 Corintios 7:9 -TLA)
3. “DiOS USA EL DOLOR PARA ENSEÑARNOS A DEPENDER DE ÉL”
a. “porque fuimos abrumados de manera extraordinaria y más allá de nuestras
fuerzas, de tal modo que hasta perdimos la esperanza de seguir con vida. Pero la
sentencia de muerte que pendía sobre nosotros fue para que no confiáramos en
nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos;” (2 Corintios 1:8-9 -RVC)
b. “Estuvo bien que me hicieras sufrir porque así entendí tus enseñanzas” (Salmos
119:71 -BLS)
4. “DIOS PERMITE EL DOLOR PARA QUE AYUDEMOS A OTROS”
a. “Cuando tenemos dificultades, o cuando sufrimos, Dios nos ayuda para que
podamos ayudar a los que sufren o tienen problemas” (2 Corintios 1:4 -BLS)
¿CÓMO PODEMOS USAR NUESTRO DOLOR PARA AYUDAR A OTROS?
1. ACEPTE SU MISIÓN. Dios tiene una misión para usted. Se llama La gran comisión y se
encuentra en la Biblia: «Vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos
en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo».” (Mateo 28:19 -NVI)
2. CUENTE SU HISTORIA.
a. Sea humilde.
b. Sea real.
c. No sermonee
3. CONSIDERE A SUS BENEFICIARIOS.
Bosquejo tomado de: John Baker – 8 Decisiones Sanadoras
Editorial:Free Press 2008 - pp 339-402