Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La palabra amparo no sólo haga referencia a la protección que alguien o una ley pueda
brindarnos, sino a las mismas personas que nos la brindan. De este modo, se puede usar como
sinónimo de «refugio«.
Algunos autores como el Dr. Carlos Arellano García, señala que: Es la institución Jurídica por la
que una persona física o moral, denominada «quejoso», ejercita el Derecho de acción, ante un
órgano jurisdiccional federal o local, para reclamar de un órgano del Estado, federal, local o
municipal, denominado «autoridad responsable», un acto o una ley, que citado quejoso estima,
vulnera las garantías individuales o el régimen de distribución competencial entre federación y
estados, para que se le restituya o mantenga en el goce de sus presuntos derechos, después de
agotar los medios de impugnación ordinarios.
El Dr. Ignacio Burgoa Orihuela menciona que: El amparo es un juicio o proceso que se inicia por
la acción que ejercita cualquier gobernado ante los órganos jurisdiccionales federales contra todo
acto de autoridad (lato sensu) que le causa un agravio en su esfera jurídica y que considere
contrario a la Constitución, teniendo por objeto invalidar dicho acto o despojarlo de su eficacia por
su inconstitucionalidad o ilegalidad en el caso concreto que lo origine.
a) Es un juicio constitucional;
ACCIÓN DE AMPARO.
Es un derecho público subjetivo que tiene toda persona, ya sea física o moral como gobernado,
de acudir ante el poder Judicial de la Federación, cuando considere se le ha violado alguna de sus
garantías individuales, mediante un acto o ley, por una autoridad del Estado en las hipótesis
previstas por el art. 103 de la Constitución federal, con el objeto de que se le restituya en el goce
de dichas garantías, ya restableciendo las cosas al estado que guardaban antes de la violación, ya
obligando a la autoridad a respetar la garantía individual violada.
• SUJETO PASIVO: Está constituido por la autoridad del Estado que ha violado presuntamente las
garantías individuales del gobernado, en cualquiera de las hipótesis que señala el art. 103 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
La autoridad del Estado puede ser de carácter federal o local (estatal o municipal); pero
siempre, en el caso de invasión de esferas, necesariamente deberá ser estatal o federal.
• OBJETO: Es aquel que mediante la prestación del servicio jurisdiccional imparte la protección al
sujeto activo contra una ley o un acto de autoridad que infringe sus garantías individuales en los
casos que señala el aludido art. 103 constitucional.
• CAUSAS: Se divide en 2:
CAUSA REMOTA: Se manifiesta por la existencia de la relación concreta del quejoso con el derecho
objetivo, de donde resulta que el agraviado puede acudir ante los tribunales de la Federación en
defensa de dicho derecho, consistente en la protección de las garantías individuales en las
hipótesis marcadas en el art. 103 constitucional.
CAUSA PRÓXIMA: Está constituida por la transgresión a los derechos fundamentales del quejoso,
ya por violación a sus garantías individuales, ya por violación a la órbita competencial de la
Federación a los estados y viceversa.
Cuando es ejercitada, aunque la pretensión sea fundada o no, los tribunales de la Federación
despliegan la función que les es propia admitiendo o desechando la de manda, y en el primer caso,
la citación para el tercero perjudicado, si lo hay, la petición de informe a la autoridad responsable,
la celebración de la audiencia constitucional y aún más en la emisión de la sentencia definitiva
(esto sólo en amparo indirecto), ya sea que se niegue, conceda o se sobresea en el amparo
solicitado.
En el juicio de amparo la calidad y determinación de parte se deriva del contenido del artículo 5°
de la Ley de Amparo, que dice así:
I. El agraviado o agraviados;
a) La contraparte del agraviado cuando el acto reclamado emana de un juicio o controversia que
no sea del orden penal, o cualquiera de las partes en el mismo juicio cuando el amparo sea
promovido por persona extraña al procedimiento;
b) El ofendido o las personas que, conforme a la ley, tengan derecho a la reparación del daño o a
exigir la responsabilidad civil proveniente de la comisión de un delito, en su caso, en los juicios de
amparo promovidos contra actos judiciales del orden penal, siempre que éstas afecten dicha
reparación o responsabilidad;
c) La persona o personas que hayan gestionado en su favor el acto contra el que se pide amparo,
cuando se trate de providencias dictadas por autoridades distintas de la judicial o del trabajo; o
que, sin haberlo gestionado, tengan interés directo en la subsistencia del acto reclamado.
IV. El Ministerio Público Federal, quien podrá intervenir en todos los juicios e interponer los
recursos que señala esta Ley, inclusive para interponerlos en amparos penales cuando se reclamen
resoluciones de tribunales locales, independientemente de las obligaciones que la misma Ley le
precisa para procurar la pronta y expedita administración de justicia. Sin embargo, tratándose de
amparos indirectos en materias civil y mercantil, en que sólo afecten intereses particulares,
excluyendo la materia familiar, el Ministerio Público Federal no podrá interponer los recursos que
esta ley señala.”
Es la parte que está representada por la persona física o moral –de derecho público o de
derecho privado- que ejercita la acción de amparo, en virtud de que considera que un acto de
autoridad le ha violado o vulnerado el conjunto de garantías individuales que prescribe en su favor
la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
El quejoso – y el tercero perjudicado- puede promover su demanda de amparo, ya sea por si o a
través de otra persona. Esta facultad se deriva del artículo 27 de la Ley de Amparo, en donde se le
autoriza al quejoso tener dos tipos de representación. Una de ellas se da en los asuntos que no
son de naturaleza civil, mercantil o administrativa, en los que el nombramiento puede recaer
sobre cualquier persona. Las facultades que implica este nombramiento son entre otras las
siguientes: ampliar la demanda, ofrecer y rendir pruebas, alegar en las audiencias, solicitar se dicte
sentencia para evitar la caducidad o el sobreseimiento, e incluso para interponer recursos. A
pesar de esto, el representante no podrá sustituir o delegar esas facultades a un tercero.
Estas entidades podrán ser Autoridad Responsable, únicamente si la ley que les da vida y regula
su funcionamiento y vida jurídica, las faculta para ordenar o a ejecutar por sí mismas, sin auxilio de
otra autoridad, el acto reclamado en el amparo.
“Es la persona física o moral que puede ser afectada con la sentencia que se dicte en el juicio de
amparo, y la que legalmente se le da intervención en el mismo, radicando normalmente su
pretensión en que se sobresea o niegue al quejoso el amparo al quejoso, y deje subsistente en
acto reclamado.”
El tercero perjudicado está facultado para oponer recursos, ofrecer pruebas y en sí, todos los
derechos que se derivan del artículo 4° de la Ley de Amparo.
Otro derecho que tiene el tercero perjudicado, es otorgar fianza o contrafianza en el incidente
de suspensión, para los efectos de que se ejecute el acto reclamado.
CONCEPTO DE ACTO RECLAMADO.
Esta conducta, que puede consistir en un hacer o en un no hacer, se caracteriza por implicar una
imposición unilateral y obligatoria de la voluntad de la autoridad responsable a la del sujeto
quejoso, de modo que, como lo ha manifestado el Poder Judicial de la Federación, los actos de
autoridad susceptibles de figurar como actos reclamados en el juicio de amparo son los que se
traducen "en la ejecución de una decisión proveniente de un órgano del Estado en ejercicio de su
poder de imperio, que trae como consecuencia crear, modificar o extinguir alguna situación de
hecho o de derecho".
CONCEPTO DE LAUDO.
Laudo es un concepto que se utiliza en el ámbito del derecho para nombrar a la resolución
dictada por un árbitro o un amigable componedor que permite dirimir un conflicto entre dos o
más partes.
El fallo del árbitro puede compararse con la sentencia que dicta un juez, aunque la jurisdicción
de éste se encuentra fijada por la ley y la jurisdicción del árbitro se halla en la autonomía de la
voluntad. Esto quiere decir que la decisión del árbitro debe ser aceptada por las partes para que el
litigio se resuelva.
CONCEPTO DE JURISPRUDENCIA.
Del concepto latino iuris prudentĭa, se conoce como jurisprudencia al conjunto de las sentencias
de los tribunales y a la doctrina que contienen. El término también puede utilizarse para hacer
referencia al criterio sobre un problema jurídico que fue establecido por sentencias previas y a la
ciencia del derecho en general.
La jurisprudencia es una fuente del derecho, compuesta por los actos pasados de los que ha
derivado la creación o modificación de las normas jurídicas. Por eso, en ocasiones, se dice que un
cierto caso “ha sentado jurisprudencia” para los tribunales de un país.