Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
hacemos referencia a un acto que tomamos por costumbre, es una acción que se
realiza muchas veces y puede ser una distracción para quien lo realiza, son ya
costumbres del ser humano y se adaptan a ese entorno que los rodea. Pueden ser
corresponsables de un a manía, la cual puede convertirse en una obsesión en
ciertos casos.
Cuando el ser humano se siente cómodo, no tendrá reparo en seguir disfrutando
de esa comodidad, por ejemplo, si una persona se siente cómoda con otra,
nacerán sentimientos al punto que compartirá con estos el tiempo que se
disponga, será un hábito vivir con esa persona, lo mismo pasa con los hábitos
morales, la conducta del ser humano se basa en principios fundamentados en la
sociedad, hacer el bien o hacer el mal, se puede sin problema alguno llegar a ser
habitual entre ellos.
Una buena postura es esencial para la salud porque mantiene los huesos y las
articulaciones en una alineación correcta de manera que los músculos puedan
cumplir con su función de una manera adecuada da la fuerza necesaria para hacer
cualquier actividad física sin poner tensión innecesaria en ninguna parte del
cuerpo.
Si claro que se presenta, El estar sentado por tiempo indefinido, es más dañino
por varias razones: la circulación sanguínea, especialmente en las piernas, hacia
donde debe ir y retornar, no cumple su tarea con la misma eficacia si no hay
movimiento que la ayude. la columna vertebral, que debería mantenerse erguida,
a menudo es maltratada con la pésima costumbre de inclinarse-encorvarse hacia
el escritorio y, sobre todo, hacia el teclado de la computadora. Esto, sumado al
estrés, que va poniendo tensos los músculos, termina por hacer presión sobre las
vértebras, ocasionando leves molestias en el mejor de los casos, o causando
desplazamientos de esos delicados huesos que, junto a los nervios, componen un
intrincado mecanismo. Así llega el dolor de espalda, y si a ello se suma el hecho
de que la pantalla de la computadora no está frente al usuario, sino a un costado,
el cuello sufrirá las consecuencias. Además, los brazos, a menudo sin apoyo,
deben realizar un esfuerzo adicional, del que rara vez somos conscientes, para
darles a las manos la fuerza para apretar las teclas y movilizar el mouse. Lo
anteriormente planteado trae como consecuencias una serie de patologías como
severos problemas de columna, síndrome de túnel carpiano, dolor de cuello y
espalda, dolores de cabeza constantes, tendinitis y también molestias en hombros,
piernas y otros problemas relacionados con la salud individual y colectiva.
son breves descansos durante la jornada laboral que sirven para recuperar
energía, mejorar el desempeño y eficiencia en el trabajo, a través de diferentes
técnicas y ejercicios que ayudan a reducir la fatiga laboral, trastornos
osteomusculares y prevenir el estrés.
Por eso es importante realizar pausas activas, es decir, actividades físicas o
ejercicios cortos que alivian la fatiga física y mental durante breves espacios de
tiempo mientras transcurre la jornada de trabajo, con el objetivo de recuperar
energía, prevenir el estrés laboral, mejorar la oxigenación muscular, tenemos las
siguientes:
1. Disminuye el estrés.
2. Favorece el cambio de posturas y rutina.
3. Libera estrés articular y muscular.
4. Estimula y favorece la circulación.
5. Mejora la postura.
6. Favorece la autoestima y capacidad de concentración.
7. Motiva y mejora las relaciones interpersonales, promueve la integración
social.
8. Disminuye riesgo de enfermedad profesional.
9. Promueve el surgimiento de nuevos líderes.
10. Mejora el desempeño laboral.
Son recomendables períodos de 5 minutos de pausas activas cada dos horas de
trabajo, mínimo 2 veces al día. Lo ideal es hacerlos en la mañana o antes de
empezar el turno como calentamiento muscular que prepara el cuerpo para la
jornada laboral y la segunda vez puede ser a mitad de jornada o final de ésta con
el objetivo de relajar o estirar los músculos fatigados.
Hacer pausas activas cada 60-90 minutos, para elongar los músculos. Los
expertos hablan de efectuar “micro pausas compensatorias”, de pocos segundos,
en cuanto se sienta alguna molestia, por pequeña que sea. Ello es mejor que
esperar “mayor dolor”