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EL COSTO DE SEGUIR A JESUCRISTO

MATEO 10:34-42
”34No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no he venido para traer paz, sino
espada. 35Porque he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su
madre, y a la nuera contra su suegra; 36y los enemigos del hombre serán los de su casa. 37El que
ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no
es digno de mí; 38y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. 39El que halla
su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará.”

INTRODUCCION

En esta porción del capítulo 10 del evangelio de Mateo el señor Jesucristo sostuvo una
conversación con los doce Apóstoles, en la cual les dijo con honestidad cual es el costo
que debían pagar si en verdad querían ser sus discípulos

En las Escrituras en ningún momento Jesucristo dice que seguirle sería una cosa fácil,
al contrario, Jesucristo dijo una y otra vez que seguirle de corazón es cosa para valientes.
En Mateo 8:19-20, vemos que “19Y vino un escriba y le dijo: Maestro, te seguiré
adondequiera que vayas. 20Jesús le dijo: Las zorras tienen guaridas, y las aves del
cielo nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar su cabeza”.

En este pasaje Jesucristo en forma precisa señala a los apóstoles tres cosas que forman
parte del costo, que debían estar dispuestos a pagar para ser sus discípulos, estas son:
los familiares y amistades, el yo, la propia vida, en otras porciones de las Escrituras el
señor repite estas demandas o incluye demandas adicionales, Lucas 14:26, Lucas 14:27,
Lucas 14:33, Lucas 9:62, Mateo 16:24.

El costo del discipulado que el señor demando a sus apóstoles, es enteramente aplicable
para todos y cada uno de nosotros los creyentes hoy día, así que, con la finalidad de
afianzar nuestra fe y nuestra fidelidad a Cristo, veamos este primer mensaje sobre el
costo del discipulado, desarrollando los siguientes puntos:

I. LA PRESENCIA DE CRISTO TRAE CONFLICTO EN LA PERSONA


II. LA PRESENCIA DE CRISTO TRAE CONFLICTO EN LA FAMILIA
III. CRISTO DEMANDA AMOR SUPREMO Y FIDELIDAD SUPREMA

Iniciemos de inmediato el desarrollo de nuestra primera enseñanza:


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I. LA PRESENCIA DE CRISTO TRAE CONFLICTO EN LA PERSONA

A. UNA ACLARACION NECESARIA, Mateo 10:34, “34No penséis que he venido


para traer paz a la tierra, no he venido para traer paz, sino espada”

1. Con esta afirmación Jesús quiso decir que no vino para dar su aprobación al
pecado y a la maldad que hay de la tierra.

a. La tierra y todo lo que hay en ella esta corrompido por el pecado, y cada
día se corrompe y se deteriora más. El mundo está lleno de heridas, dolor,
sufrimiento y ambición.

2. Jesús nunca podría dar paz o bendición de Dios a un mundo tan lleno de
maldición, de corrupción, y rebelión contra Dios, tan lleno de egoísmo y
división entre los hombres.

3. Jesús vino a repudiar la corrupción, la inmoralidad, la hipocresía y el pecado


de los habitantes de la tierra. Vino a traer una espada a la tierra para batallar
contra el pecado y el mal, tanto dentro como fuera del hombre.

a. Jesús vino para batallar contra la decadencia y la muerte. Vino para extirpar
lo enfermo y corrompido, vino a quitar dominio a Satanás sobre aquellos
que serán salvos.

B. CRISTO CREA CONFLICTO INTERNO EN LA PERSONA

1. Cristo vino para traer la espada de su palabra al mundo. Su palabra más


aguda que una espada de dos filos, penetra el corazón, discierne los
pensamientos e intenciones de la persona, induce la persona a convertirse en
seguidor de Dios y de su justicia.

2. La presencia de Jesucristo automáticamente causa división, cuando una


personas se convierte a Cristo y sigue el camino de la justicia, inmediatamente
aparece un conflicto en su propia persona tanto interior como exterior, porque
ahora es nueva criatura, 2 Corintios 5:17.

a. Interiormente hay un conflicto entre su naturaleza caída y su nueva


naturaleza divina,

3. Las dos naturalezas son opuestas. El viejo hombre quiere vivir


primordialmente para el mundo, el hombre espiritual quiere vivir para Dios y su
justicia, Efesios 4:22-24
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C. CRISTO CREA CONFLICTO EXTERNO A LA PERSONA

1. El creyente vive en la tierra pero es del cielo, vive físicamente pero también
espiritualmente. Vive fundamentalmente para Dios y su justicia procurando
alcanzar los hombres con el evangelio de Cristo.

2. Es normal que se afecte la relación entre el creyente y los que escogen


rechazar a Jesús y seguir el camino de las tinieblas.

3. Dios manda al creyente a no comprometer su integridad cristiana con una


relación comercial, sentimental y amistosa con una persona no creyente, 2
Corintios 6:14-18.

II. LA PRESENCIA DE CRISTO PRODUCE CONFLICTO EN LA FAMILIA

A. EL CREYENTE PODRIA TENER OPOSICION DENTRO DE SU PROPIA


FAMILIA, Mt. 10:35-36.

1. Lamentablemente y con frecuencia la división ocurre entre familiares y amigos


cercanos del creyente, cuando una persona acepta a Jesús es salvada y llega
a ser una nueva criatura, nacida de Dios con nuevos ideales, en cambio otros
familiares o amigos que rechazan a Cristo permanecen en tinieblas, deseando
las cosas del mundo y que agradan a la carne.

2. El creyente es llamado a una vida de justicia y batalla contra el pecado y el


mal. Si un miembro de su familia o un amigo cercano está comprometido con
el pecado, habrá un conflicto natural entre el creyente y ese miembro de la
familia.

3. Si un miembro de la familia sigue viviendo en el pecado sin volverse a Dios, si


todavía está buscando los placeres y las cosas del mundo, si todavía vive
fundamentalmente para satisfacer sus deseos carnales, su estilo de vida no
puede armonizar con el creyente.

a. Dios nos manda a cortar las actividades que realizamos con


familiares y amigos que comprometen nuestra santidad y nuestro
testimonio, 1 Pedro 4:1-5.

b. Cristo recalco la realidad del conflicto familiar por causa de la fe,


Lucas 12:52-53”.
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B. EL MISMO SEÑOR JESUCRISTO SUFRIO PERSECUSION DE SU PROPIA


FAMILIA.

1. La peor experiencia para un creyente es tener la oposición por su fe dentro de


la propia familia, que su familia sea contada entre sus perseguidores.

a. Durante el desarrollo de su ministerio terrenal el señor Jesucristo vivió la


mala experiencia de ser perseguido por sus propios familiares.

2. En una ocasión los hermanos de madre de Jesús que no lo entendían ni creían


que él fuera el Mesías, lo fustigaron en gran manera, Juan 7:1-5.

3. Más adelante esos hermanos de madre de Jesús llegaron a pensar que Jesús
estaba loco, y debido a la presión social de tener un loco entre la familia,
intentaron acallarlo poniéndolo en prisión, este plan tuvo la aprobación de su
madre María, Marcos 3:20-22,31-32.

C. ACTITUD DEL CREYENYE CON SUS FAMILIARES Y AMIGOS


INCONVERSOS.

1. El creyente lucha por llevar a salvación a sus familiares y amigos, sin importar
la oposición que pueda encontrar en ellos,

2. Si los familiares y amigos queridos no responden a la predicación y buen


testimonio del creyente, el creyente debe tenerlos por incrédulos y seguir
orando por ellos, pero no puede dejarse afectar por esto, debe seguir adelante
con su vida de fe y sus ojos puestos en Jesús.

3. Jesús no se amilano por sus familiares que no creían en él y que vinieron a


buscarlo para ponerlo en la cárcel, Jesús siguió adelante desarrollando su
ministerio, Marcos 3:33-35.

III. CRISTO DEMANDA AMOR SUPREMO Y FIDELIDAD SUPREMA

A. DEBEMOS AMAR A CRISTO CON AMOR SUPREMO, Mt. 10:37.

1. La familia de una persona constituye la más fuerte y preciosa de las relaciones


entre seres humanos. La persona tiene que amar profundamente a su familia.
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2. Sin embargo, el creyente tiene una relación superior a la de su familia, es la


relación con Cristo. El creyente debe amar a Cristo en forma suprema,
teniendo a Cristo por más digno que todas las cosas, incluso su propia familia.

a. Jesús demanda ese amor supremo, observe las palabras “más que a mí”.
Los creyentes debemos amar a nuestros familiares, pero no más que a
Cristo.

3. Dios debe ser primordial, la primera lealtad la debemos a Dios, Lucas 10:27.

B. PELIGROS DE NO AMAR A CRISTO CON AMOR SUPREMO, Mt. 10:37, “37El


que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo
o hija más que a mí, no es digno de mí”

1. Cuando permitimos que nuestros familiares, amigos, o cualquier otra cosa nos
impidan adorar y servir a Cristo, hemos quitado a Cristo el amor supremo de
nuestra vida.

2. Cuando permitimos que nuestras familias, amigos o cualquier otra cosa nos
impidan adorar y servir a Dios, estamos adorando otras cosas más que a
Cristo.

3. Al poner primero a nuestras familiares, amigos o cualquier otra cosa, estamos


permitiendo que se conviertan en ídolos para nuestra vida.

a. Jesús advierte al creyente que la manera como lo amamos indica si somos


o no dignos de él. Mateo 10:32-33.

C. RAZONES PARA AMAR A CRISTO CON AMOR SUPREMO

1. Existen al menos tres motivos por los que Cristo debe ser tenido por más digno
que todas las demás relaciones en este mundo, estas tres razones lo hacen
merecedor de nuestro primer amor y nuestra primera fidelidad.

a. Cristo es el ser supremo del universo. es el Creador, sustentador, protector


de la vida en nuestro transitar por la tierra, nuestro tiempo y nuestra
protección están en sus manos.

b. Cristo es el Salvador supremo. Es quien da y provee la vida espiritual,


abundante y eterna.
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c. Con Cristo tenemos la relación suprema y su amor por nosotros es


perfecto. Romanos 8:31-39.

CONCLUSION

Hermano, en estos momento ¿es Cristo el amor supremo de tu vida?, en caso negativo
¿cuáles cosas están ocupando el lugar de Cristo en tu vida y recibiendo tu atención y
amor supremo que debe pertenecer a Cristo?

Quiero invitar a que todos reflexionemos y hagamos un plan para restaurar a Cristo y su
obra al primer lugar que le corresponde en nuestra vida.

Quiero invitar a todos hacer un plan que nos asegure que Cristo permanezca reinando
en mi vida y recibiendo la devoción, tiempo y amor supremo que merece.

Amen

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