Pensando en cómo se divertían y compartían haciéndose parte de ese tiempo.

Imaginándose en los recreos, junto a compañeros de su misma edad, con los cuales
compartían tantas cosas. Cosas como prestarse lápices de colores, saltar la soga,
intercambiar figuritas, jugar a la escondida, etc.
Esos recreos donde se hacía una fila larga para comprar golosinas en el kiosco.
Luego al salir de la escuela sabiendo que mamá nos esperaba en casa con la
chocolatera con galletitas para luego hacer las tareas que les daban en la escuela.
Ese tiempo antiguo donde se podía compartir tantas cosas y es tan distinto al mundo
de hoy!
De repente,
El profesor mecánico dice:
- Margie, Margie, estás bien? Estás ahí?
Ella respondiendo con cara triste le contesta:
- Si profesor mecánico solo estaba pensando en algo que usted no creo pueda
entender y que tampoco creo que pueda suceder.
Sabiendo que cada vez que entraba en esa sala solo estaba el profesor mecánico y
ella.
Que ese tiempo en los que se podían expresar e intercambiar sentimientos de otra
manera estaba tan lejano.
Solo podía imaginarlos cada vez que se escondía a leer esos libros en donde si volvías
a la página anteriory en ella seguían las mismas palabras que se habían leido por
primera vez.
Cada vez que leía esas historias ella podía hacerse parte de ese mundo donde todo
fue tan distinto y donde expresaba esos sentimientos de afecto y cariño junto a esos
compañeros de esa escuela de la que le hubiese gustado ser parte.