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Aprendizaje organizacional, proximidades y coordinación

En el núcleo del sistema de innovación hay tres procesos profundamente entrelazados, que son un
proceso de aprendizaje adaptativo y acumulativo, un sistema de interacciones entre agentes y
grupos próximos y una coordinación de proceso dinámica construida en los otros dos. Juntos estos
procesos constituyen las dinámicas del sistema de meso innovación.

El aprendizaje es un proceso acumulativo a través del cual el nuevo conocimiento, se incrusta de


nuevas reglas, convenciones, rutinas y filtros. Además el aprendizaje, no está restringido a una
simple modificación de rutinas y reglas, él también desencadena una transformación de las
representaciones, objetivos, normas y estrategias. Pero el aprendizaje requiere un entorno interno
responsablemente bien definido, actuando como una capa sensible, sin la que las nuevas
experiencias no serían registradas o representadas como nuevas.

Las rutinas arraigadas en el contexto y la historia, están incrustadas en un patrón de fundamentos,


convenciones e instituciones que le otorgan al proceso de toma de decisiones y aprendizaje una
unidad y estabilidad. Para cualquier agente en un grupo, el entorno es aprendido como una
representación, pero también hay diferencias entre las representaciones de los diferentes
miembros, esta es una fuente de aprendizaje desde que la organización puede explotar las
diferencias y diversidad como una fuente de conocimiento.

En cualquier momento estas representaciones y reglas pueden ser más o menos adecuadas, eso es
que ellas pueden ser más o menos efectivos armisticios socio técnicos entre el entorno físico
envolvente y los valores y planes envolventes de los agentes y grupos. El acuerdo de actitud no es
invariante si las circunstancias cambian, está arraigado en la probabilidad de supervivencia y en la
capacidad de desarrollar el requisito de competencias y capacidades para sobrevivir.

Mencionada la siempre imperfecta naturaleza de las representaciones mentales, convenciones y


reglas, y el proceso de aprendizaje, la modificación de ambas representaciones y reglas constituye
la manera en que la socio economía envuelve, transforma y aprende. Este aprendizaje puede ser
más o menos efectivo dependiendo de la naturaleza de los retos generados por el entorno.

Nelson y Winter mostraron que las organizaciones tienden a pegar en su rutina usual siempre que
su actuación permanece encima de ciertos niveles objetivos. Este balance entre la explotación del
conocimiento disponible y la exploración y búsqueda de nuevo conocimiento y nuevas
posibilidades subrayado por March, se relaciona con los mecanismos de selección y mutación, un
procedimiento o rutina que actúa mientras sea adoptada por el sistema. En el caso de la selección,
mientras algunas rutinas inadaptadas entre rutinas y el medio cambiante puede dirigir a una
mutación en la rutina o el procedimiento.
Proximidades

La noción de una economía del aprendizaje y de la innovación como una forma de aprendizaje ha
ayudado a reafirmar dramáticamente nuestras perspectivas en el progreso económico. De la
misma manera que en la vieja economía habían fallas en la asignación de recursos, en la nueva
economía hay fallas de aprendizaje.

El proceso de aprendizaje colectivo basado en conversaciones con la situación y con interacciones


entre las partes interesadas, es de necesidad situada si uno está concentrado en la innovación
tecnológica o organizacional o institucional. En cada caso, la proximidad de una especie con otra
es necesaria para la conversación o el proceso de interacción.

El proceso de proximidad no es un concepto espacial. El aprendizaje se refiere a un proceso social


cognoscitivo, consecuentemente requiere cierta interacción y una fuente más grande de
beneficios externos que viene de la cercanía geográfica que genera no sólo una probabilidad
máxima de contacto sino una probabilidad máxima de aprendizaje por aprendizaje, eso es
desarrollar nuevas capacidades no solo a través de economías de aglomeración sino a través de
una mayor densidad de interacciones de cognición-conducción situadas.

Coordinación

La bondad de ajuste entre el proceso de aprendizaje en una mano y el proceso de clustering


territorial y organizacional que acompaña y apuntala en la otra, es la característica central de la
gobernanza de la economía del aprendizaje. El sistema territorializado de innovación, es una
manera de brindar un marco de referencia que ayude a coordinar las decisiones interdependientes
de varios grupos de actores.

Hay también varios mecanismos que no son de mercado que trabajan como lo son organizaciones,
instituciones, estándares, normas y reglas que son necesarias para que se materialice la
coordinación. Por ello para Arrow hay instituciones visibles e invisibles que son necesarias para
complementar el mercado en la coordinación de acuerdos que no han sido especificados de una
forma general.

En el caso del equilibrio de Nash, la indeterminación sólo puede ser resuelta por una convención o
regla, en la práctica la indeterminación es un resultado de una información contextual que
constituye el conocimiento tácito o común que ayuda a generar un punto focal en el que los
protagonistas se ponen de acuerdo.
Los procesos cognitivos que generan la emergencia para que un punto focal se materialice en la
forma de convenciones en la base de alguna racionalidad interactiva, estas convenciones emergen
del ajuste social en el que el juego económico es anidado.

Las características del mecanismo de coordinación enfatizan la necesaria incompletitud de los


mecanismos de mercado y la necesidad de dispositivos complementarios colectivos cognoscitivos
para asegurar la coordinación efectiva. Esto es central en el proceso de innovación que está
basado en complejas intersubjetivas e intemporales complementariedades entre las partes
interesadas durante el proceso secuencial que lidera una innovación, en este juego de
coordinación complejo, el territorio bien puede ser el lugar de la coordinación de producción de
conocimiento, la raíz de la convergencia de los puntos focales.

Estos tres procesos (aprendizaje, proximidad y coordinación) apuntalan el proceso básico de


innovación. Los sistemas de innovación, locales y regionales son configuraciones espaciales que
han emergido como pactos para identificar y como marcos de referencia de pertenencia y
aprendizaje. El territorio no se convierte automáticamente en un dispositivo colectivo y
cognoscitivo, se convierte sólo si se vuelve una fuente de ideas comunes, un clan y una cultura de
valores compartidos.

También la construcción de una dimensión del sistema de coordinación, proximidad, aprendizaje y


los mecanismos de una coordinación sostenible y evolutiva, generan dinámicas de
interdependencia y confianza que se auto refuerzan, en este caso el aprendizaje va más allá de la
acumulación y el desarrollo de protocolos tecnológicos y competencias dentro de la acumulación y
el desarrollo de conocimiento, por lo que se puede generar un sistema de confianza dentro de la
organización.

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