Este libro está dedicado a los grandes egúngúns de Ìjo
Òrúnmìlà Atò, en particular a su fundador, Baba Adéyemí Adésìlú. Nunca conocí al Baba Adéyemí Adésìlú, pero su trabajo sigue siendo, sin embargo, una inspiración para los miembros de un templo, incluyéndome. A algunos de los Egúngúns, que por suerte he conocido, les digo: “Òrun rereò - la paz esté con ustedes en su eterno dominio”. Entre estos egúngúns estaban: