Está en la página 1de 3

El pasado 15 de julio la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (CEPAL), dio a

conocer el informe escrito, sobre la marca que ha dejado el Covid 19 en la economía del mundo
y en especial en América Latina.

El informe escrito tiene relación con el discurso, presentado por la Secretaria Ejecutiva de Cepal,
Alicia Bárcena, el 12 de mayo, en Santiago de Chile. Allí, se enfatizó la fuerte recesión
económica que la pandemia a causado en las grandes potencias del mundo, y por ende, en los
países poco desarrollados de Latinoamérica y el Caribe. La actual coyuntura dará como resultado
para este 2020, que el PIB mundial se reduzca en un 5,2%, este porcentaje, puede ser comparado
con el del 2010, lo que significaría una recesión de una década en la economía mundial. (Cepal,
2020, pág, 2)

Los retos que enfrenta el sur del continente americano con esta nueva pandemia son grandes.
Esto, porque la mayoría de los países, no se encontraban preparados para asumir esta
circunstancia. Y no solo en el factor económico, sino, social y estructural. Pues, según las cifras
publicadas por Cepal, 14 de los países en estudio, incluido Colombia, no cuentan con la
estructura hospitalaria necesaria para enfrentar esta crisis sanitaria.

Del mismo modo, las empresas han tenido un fuerte impacto por la llegada del virus al mundo.
El mayor efecto se presenta en industrias como el turismo, la aviación, los alojamientos, los
restaurantes, el entretenimiento y el comercio. (Cepal, 2020, pág 8) Sin embargo, servicios de
abastecimiento y farmacéuticos que se han declarado como esenciales en Colombia, siguen
produciendo, hasta la fecha.

Lo anterior, ha causado que muchas empresas detengan su producción, obedeciendo a las


normativas dictadas desde el Gobierno Nacional. O en muchos casos, el efecto de la cuarentena
ha provocado el cierre total de las compañías. Lo cual, ha aumentado el desempleo en el país y
en la región Latam en general, pues se prevé que, al cierre del 2020; con el descenso del PIB, el
desempleo aumente en 5,4 puntos porcentuales, dejándolo en 13,5% en el cierre de 2020 (Cepal,
2020, pág 10, 21)

Por otro lado, las empresas que han logrado sostenerse, han tenido que implementar otras formas
de trabajo, para cuidar su capital y la salud de sus trabajadores. Esto tiene que ver con dinámicas
como el teletrabajo. Para poder ejercer de manera efectiva el trabajo en casa, el uso de las
plataformas digitales a sido crucial. Estas han permitido que los trabajadores desde casa hagan
efectiva su jornada laboral, por medio de reuniones en diferentes aplicaciones, etc.

También, ha permitido, que pequeñas y medianas empresas utilicen herramientas como las redes
sociales para entrar en el mundo del e-commerce con distintas ideas de emprendimiento.
Expertos han indicado que el mundo digital en la actualidad, es la única alternativa para salvar
los negocios. En cuanto a Colombia, estudios revelan que es el país donde la población dedica
mayor tiempo a estar conectado en redes sociales de toda Latinoamérica. Lo que coloca al país,
en uno de los primeros en tomar la alternativa del comercio digital.

Los medios digitales también han permitido que, durante el tiempo de cuarentena, los estudiantes
puedan seguir en pie de aprendizaje por medio de clases virtuales. Sin embargo, la emergencia
del Covid, ha dejado ver la pobreza extrema, en la que está gran parte del territorio. Pues muchas
familias no cuentan con servicio de internet, que le permita a los jóvenes estudiar y al resto del
núcleo, implementar formas para trabajar, lo que las pone en un riesgo mayor ante la pandemia
“La imposibilidad de trabajar desde el domicilio, la necesidad de salir a trabajar para sobrevivir,
las condiciones de hacinamiento y la falta de acceso a agua y saneamiento aumentan el riesgo de
infección de la población en situación de pobreza.” (Cepal, 2020, pág 12)

Pobreza, que, según Cepal, aumentará en Colombia 5,1 puntos porcentuales, pasando del 29,0 %
de la población en pobreza extrema en cuanto al 2019, a un 34,1% cerrando el 2020. (Cepal,
2020, pág11)

La propuesta de Cepal a los países Latinoaméricanos, cuyas poblaciones están en la pobreza


extrema y no pueden tener un acceso estable a la conectividad; es que los países aporten el 1% de
su PIB para de este modo, garantizar a dichas zonas el acceso estable a internet y mitigar el
impacto en las estadísticas negativas, que está dejando el coronavirus a su paso. Hacer del
Internet parte de la canasta social. (Cepal, agosto 2020, Universalizar el acceso a las tecnologías digitales para
enfrentar los impactos del COVID-19)La era digital, sin duda, ha aterrizado en los últimos años con gran
fuerza. Sin embargo, hechos como la emergencia sanitaria que se presenta hoy día, permite que
la idea de que la mayoría de las acciones sean remotas se haga realidad y además se convierta en
una necesidad. El estar informados de todos los acontecimientos políticos, lo permite en muchos
casos lo digital. Con esto, visualizar el papel que está cumpliendo el Estado para hacer frente a la
crisis, pues estos medios son referentes ante el perfil que están mostrando cada uno de los líderes
políticos en cuanto a las estrategias implementadas para controlar de manera eficiente, o no, el
impacto social y económico que trae el Covid19.

Por ejemplo, en Colombia, el primer mandatario del país, utiliza un espacio esencial en los
medios de comunicación diariamente, para aclararle a la población, los últimos acontecimientos
sobre el Covid19 y los cambios a los que los ciudadanos deben acoplarse, haciendo frente a la
crisis y su mitigación.

Es por esto, que el papel del estado es fundamental ante estas situaciones, ya que llevan la hoja
de ruta ante las regiones y la cara frente a el resto del mundo. Enfrentar una situación como la
actual, no es tarea fácil, por eso Cepal, aclara que la participación de los países desarrollados,
ante los países subdesarrollados, es crucial “en especial el Grupo de los 20 (G20), que se
comprometa a capitalizar las instituciones multilaterales de crédito. Por ejemplo, el FMI estima
que las necesidades COVID-19 de financiación de las economías en desarrollo ascienden al
menos a 2,5 billones de dólares, aunque su capacidad de préstamo es de solo 1 billón de dólares.”
(Cepal, 2020, pág 24,25)

También, en el comunicado habla sobre el alivio a la deuda de estos países de renta media y
bajos ingresos, ante el sistema financiero internacional. El alivio de esta deuda podría
implementarse mediante una operación de canje de deuda por “acciones de adaptación al cambio
climático que incluyan la creación de un fondo de resiliencia, la paralización del servicio de la
deuda y un cambio en los criterios de elegibilidad de las instituciones financieras internacionales
para el otorgamiento de financiamiento concesional. Estas acciones podrían complementarse con
la emisión de bonos de contingencia, en especial con cláusulas sobre los efectos de los
huracanes, bonos verdes y azules, y el apoyo a la liquidez mediante la emisión de derechos
especiales de giro.” (Cepal, 2020, pág 26)

Esta cooperación financiera es conveniente, para que los países más afectados por la pandemia
como lo son los países de Caribe y América del sur, puedan solventar los huecos financieros que
va dejando la pandemia y garantizar una sociedad donde no prime la desigualdad y la pobreza.

También podría gustarte