CHAVEZ GONZALEZ VIANIS ADRIANA

FACULTAD DE ENFERMERÍA

RESURECCIÓN DE LA VIDA
CUENTO

CONTRIBUYENDO AL CUIDADO DEL MEDIO

AMBIENTE
TEMA

RECORDAR EL DESASTRE QUE HUBO EN

AUSTRALIA Y TOMAR CONCIENCIA DEL
DESASTRE QUE EXISTE.
OBJETIVO
LUKA . -Viejo koala, con una pequeña familia de dos pequeños koalas y su esposa.
MU. – Esposa de Luka.
SEÑOR CANGURO. -Mejor amigo de Luka desde la infancia y amigo de la familia.
SOFI. -Amiga de señor canguro y Luka, es de color verde fosforescente.
LULU.- hija de Luka y Mu.
Rich. -Hijo de Luka y Mu.
Luci y Mario. – Ayudaron a rescatar a los animales
 Había una vez en una tierra remota, un
Enorme paisaje lleno de vegetación por doquier, con
montañas y valles, en cada esquina había vegetación de
diversos colores, habidos y por haber donde nacían y
vivían animales de todas las especies en el cobijo de los
árboles, con gran cantidad de frutos y fuentes de agua,
que lo hacia un lugar mágico y único.

Este lugar se encontraba por toda Australia, un país con una dimensión muy grande donde
habitan miles de personas en conjunto con los grandes paisajes que ahí se encontraban.
Cualquier persona que estuviera ahí y tener la dicha para ver tal majestuosidad era
afortunada, ya que pocos había en todo el mundo.

En este lugar en un gran árbol vivía Luca un koala ya viejo junto a su familia que se
encontraba dándose un gran bufet con las plantas de eucalipto, aquí tenía grandes vecinos
como el señor canguro que era su mejor amigo desde la infancia que lo venia a ver todos
los días, junto con una pequeña rana llamada Sofi, esta era de color verde fosforescente y
era maestra de química que le daba clases a los hijos de el Sr. Canguro y de Luka.

Todos vivían en armonía, plantas, animales y humanos, hasta que un día todo cambio…

Las temperaturas comenzaron a subir y estaba haciendo sequía en muchas partes del bosque
ya que no había llovido en días, con esto cerca de donde vivían Luka y sus amigos se había
secado.

Un día por la mañana en día sábado todos estaban tranquilos, Luka estaba con toda su
familia y amigos en su casa, cuando de repente vieron a lo lejos a un par de personas que
estaban haciendo fogatas.

Lulu (Hija de Luka). – Mira mamá, papá, hay personas que están haciendo fogatas, es
peligroso puede provocar un incendio.

Luka. – Hija, ¡¡es muy cierto!!, no pueden estar haciendo eso aquí, está muy seco el pasto.

Señor canguro. – Miren, ya se van, pero…dejaron encendida la fogata, ¡¿qué hacemos?¡

Mu (Esposa de Luka). . Tenemos que intentar apagarlo, hay un rio cerca de aquí, pero si
nos damos prisa se va a propagar.

Sofi. – Entonces hay que ir rápido por agua.

Fueron todos a buscar agua, pero quedaba mas lejos de lo que pensaron, ya al regresar,
todos quedaron en shock ante lo que veían.

Todos. - ¡No puede ser ¡

La pequeña fogata que habían hecho los humanos se había extendido más allá, el fuego
había quemado más terreno y ahora solo un poco de agua no iba a servir para apagar ese
ahora incendio.

Sofi. – Este pequeño bote con agua no servirá para nada, si no hacemos algo más esto se
pondrá peor, tenemos que pedir ayuda.

Todos fueron a avisarles a los demás, estos al ver lo que estaba pasando hicieron todo lo
que pudieron, pero el tiempo pasaba y el fuero cada vez cobraba más terreno, todos
quedaron espantados, sin saber que hacer.

Ornitorrinco. – Esto… está más allá de nuestras patas.

Pajaro. – Tenemos que seguir intentándolo, o si no todo se pondrá aún más peor.

Todos los animales seguían trayendo agua, pero el fuego seguía incrementándose, se volvía
más peligrosos día a día, hasta que el incendio destruyó los hogares de casi todos.

Luka. – Nuestro hogar ha sido destruido por el fuego, ya no hay nada más que hacer,
tenemos que irnos de aquí.

Señor canguro. – Pero a donde iremos?

Mu. -Solo tenemos que alejarnos lo suficiente del fuego, tenemos que alejar a los niños.

Ornitorrinco. – Entonces hay que darnos prisa.

Todos siguieron avanzando, hasta que encontraran una zona segura del fuego.
Rich (hijo de Luka). -Miren, hay humanos tratando de detener el fuego, pero son muy
pocos contra el gran incendio.

Mu. – Ya no hay nada más que hacer.

Todos seguían huyendo pero cada que caminaban había animales muertos, animales
pidiendo ayuda y huyendo al igual que ellos del fuego, vieron que todo lo que antes
ya no es más ahora.
Lulu y Rich. - ¡¿Por qué está pasando esto mamá?!

Mu. – Espero todo esto acabe.

Siguieron caminando y en cada paso que dieron había bomberos contra el fuego, pero
algo pasó...
Todos. -Miren, ese humano nos puede ayudar.

A lo lejos vieron a un señor que iba en una camioneta rescatando a varios animales del
gran incendio.
Mario. – Mira Luci, animales que necesitan nuestra ayuda, tenemos que ir a ayudarlos.
Luci. – Voy por agua y cobijas frías para sus patas, deben estar muy heridos, además de
comida.
Ellos fueron a verlos y se dieron cuenta que estaban tan cansados que no podían estar
De pie, a lo que los llevaron al carro donde había más animales con cobijas y el clima
encendido.
Luka. – Que gran alegría haberlos encontrado, estamos a salvo.
Señor canguro. – Por ahora estamos a salvo, pero, ¿qué pasará con los demás?
Ornitorrinco. – Solo esperemos que estén todos bien y el incendio pronto se apague.
Al llegar la noche, en la radio estaba pasando un programa donde se hablaba de la situación
y la gran afectación que había por todos lados.
Mario. – Tenemos que llevar a los animales a un refugio y regresar para ver encontramos
más.
Luci. – Hay que hacerlo e intentar algo más para poder ayudar, esta situación nunca la
había visto antes.
Llevaron a los animales a un refugio donde se iban a sentir más a salvo y ahí podían
ayudarlos.
Al pasar de los días las cosas empezaron a bajar un poco, varios de los países empezaron a
enviar helicópteros y aviones llenos de alimentos para los animales asi como agua y poder
apagar el fuego desde los cielos.
Luka. -¡Escucharon eso!, todo va estar mejor.
Sofi. – Ahora que todos los humanos se han unido para poder ayudarnos, la situación esta
mejorando, y todos nosotros y amigos estarán, ahora bien.
Los animales de todos los bosques de Australia se encuentran en diferentes zonas de
protección animal, en rehabilitación y poco a poco están sanando sus heridas, mientras que
los bosques que han sido incendiados ahora están cada vez más apagados y el fuego está
siendo consumado con la ayuda de todas las personas.