8-C domingo 18 de marzo de 2001 NOSOTROS

Los Leones presentes

Por Jorge Romero Montañez
Cuando era estudiante de secundaria, un día vi a
un compañero de la clase caminando de regreso a su
casa. Se llamaba Carlos, iba cargando todos sus li-
bros y pensé: “¿Por qué se estará llevando a casa to-
dos sus libros el viernes? ¡Debe ser un intelectual!”.
Yo tenía otros planes para el fin de semana; fiestas
y un partido de futbol con mis amigos el sábado por
la tarde; así que me encogí de hombros al ver en él la
diferencia, por lo que seguí mi camino.
Mientras caminaba, vi a varios chicos corriendo
hacia él, cuando lo alcanzaron, le tiraron todos sus
libros y le hicieron una zancadilla que lo tiró al suelo,
vi que sus anteojos volaron y cayeron sobre el pasto a
varios metros de él. Miró hacia arriba y pude ver una
tremenda tristeza en sus ojos. Mi corazón se estreme-
ció, así que corrí hacia él mientras gateaba buscando
sus anteojos, vi lágrimas en sus ojos. Le acerqué a
sus manos sus anteojos y le dije: “¡Esos chicos son
unos torpes, no deberían haber hecho esto!”. Me
miró y me dijo: “Caramba, muchas gracias”.
Había una gran sonrisa en su cara; de esas sonri-
sas que mostraban una verdadera gratitud. Lo ayudé
con sus libros, ya que vivía cerca de mi casa. Le pre-
gunté por qué no lo había visto antes y me contó que
se acababa de cambiar de una escuela privada. Cami-
namos hasta casa. Lo ayudé con sus libros; parecía
un buen chico. Le pregunté si quería jugar futbol el
sábado conmigo y mis amigos. Aceptó. Estuvimos
juntos todo el fin de semana. Mientras más conocía a
Mayra Peregrina de Morales espera el nacimiento de su bebé y fue festejada con una merienda Carlos, mejor nos caía, tanto a mí como a mis amigos.
preparada en conocido restaurante de la ciudad. En la foto la acompañan: Martha Arriaga, Llegó el lunes por la mañana y ahí estaba Carlos
Marisa Núñez, Sonia de Zárate y Cristina Enríquez Poullard. nuevamente con aquella enorme pila de libros. Me
paré y le dije: “Caray amigo, vas a sacar buenos mús-
culos si cargas todos los días esos libros”. Se rio y me
dio la mitad para que le ayudara.
Durante los siguientes años, Carlos y yo nos con-
vertimos en los mejores amigos. Cuando ya estába-
mos por terminar la preparatoria, Carlos decidió estu-
diar medicina y yo administración, sabía que segui-
ríamos siendo buenos amigos y que la distancia no
sería ningún problema. El día de la graduación, Car-
los fue el orador de nuestra generación. Yo lo admira-
ba todo el tiempo diciendo que era muy “inteligente”.
Llegó el gran día. El preparó el discurso, yo estaba
feliz de no ser el que tenía que hablar, Carlos se veía
realmente bien, era una de esas personas que se ha-
bía encontrado a sí mismo desde la secundaria, había
mejorado en todos los aspectos y se veía bien con sus
anteojos. ¡Tenía más citas con chicas que yo y todas
lo adoraban! ¡Caray! Algunas veces hasta me sentía
celoso. Hoy era uno de esos días, pude ver que él esta-
ba nervioso, así que le di unas palmaditas en la espal-
da y le dije: “Vas a ver que estarás genial amigo”. Me
miró con una de esas miradas (realmente de agrade-
cimiento) y me sonrió. “Gracias”, me dijo. Limpió su
garganta y comenzó su discurso: “La graduación es
un buen momento para dar las gracias a todos aqué-
llos que nos han ayudado a través de estos años difí-
ciles: tus padres, tus maestros, tus hermanos, quizá
algún entrenador... pero principalmente a tus ami-
María Guadalupe Medina en la reunión que le ofrecieron sus compañeros del I.M.S.S. con moti- gos. Yo estoy aquí para decirles a ustedes que ser
amigo de alguien es el mejor regalo que podemos dar
vo de su jubilación.
y recibir, y a propósito, les voy a contar una historia.
Yo miraba a mi amigo incrédulo, cuando comenzó a
contar la historia del primer día que nos conocimos.
Aquel fin de semana él tenía planeado quitarse la
vida, ya que estaba muy deprimido. Habló de cómo
limpió su gaveta y por qué llevaba todos sus libros
con él; para que mis padres no tuvieran que ir des-
pués a recogerlos a la escuela, me miraba fijamente y
me sonreía.
“Afortunadamente fui salvado, mi amigo me salvó
de hacer algo irremediable”. Yo escuchaba con asom-
bro cómo este apuesto y popular chico contaba a to-
dos ese momento de debilidad. Sus padres también
me miraban y me sonreían con esa misma sonrisa de
gratitud. Recién en ese momento me di cuenta de lo
profundo de sus palabras: “Nunca subestimes el po-
der de tus acciones; con un pequeño gesto puede
cambiar la vida de otras personas, para bien o para
mal, Dios nos pone a cada uno frente a la vida de
otros para impactarlos de alguna manera. Mira a
Dios en los demás”. Ahora tienes dos opciones: de
hacer llegar este mensaje a todos tus amigos, o igno-
rarlo y actuar como si no hubiera tocado tu corazón,
¡yo escogí la primera! “Los amigos son ángeles que
nos llevan en sus brazos cuando nuestras alas tienen
problemas para recordar cómo volar”.
Es obligación de los socios mantener el firme pro-
pósito de robustecer sus clubes, con nuevos elemen-
tos que consoliden las actividades a desarrollar y sus
funciones para obtener logros más positivos, más
importantes y perecederos. Debe ser ordenada y sin
precipitaciones para no proyectar la imagen de que
estar amontonando “bultos” únicamente con el fin
de lograr alturas impresionantes, sino que ante todo
el objetivo es realizar este plan asumiendo cada
quien la delicada misión de padrino con la responsa-
bilidad que el caso requiere, toda vez que debemos
mantener la seguridad de que nuestro recomendado
reúna los requisitos y atributos más relativos y rele-
vantes para esperar de su actuación como “León” los
beneficios que se pretenden.
No es la cantidad numérica la que determina la
importancia de una misión o el buen éxito de la mis-
ma, son la calidad moral del hombre aunada al fer-
viente deseo de servir los factores que, aún en reduci-
da proporción, hacen posible la fiel ejecución de los
planes que conducen a escalar las cumbres más altas
por inaccesibles que parezcan.
Deberemos valorizar en toda su magnitud la feliz
circunstancia de contar con los elementos que ahora
componen nuestro club, aprovechando su concurso,
aunque ocasionalmente su rendimiento no sea tan
sensible, pues no todos estamos hechos del mismo
barro y las fallas momentáneas pueden remediarse
con paciencia y comprensión que sólo los familiares y
leales amigos habrán de impartirnos para su total
rectificación.
La naturaleza humana está supeditada a una di-
versidad de imperfecciones que invalidan en gran
parte la ejecutoria del hombre para considerarlo
omnipotente o con cualidades sólo atribuibles a los
dioses de la dimensión mitológica. No pretendemos
encontrar hombres perfectos porque no los hay, sólo
hombres idóneos para conducir a puerto seguro la
nave que almacena la preciosa carga de nuestros idea-
les, la que lleva también otros hombres sanos y leales
que en gesto fraterno mitigarán penas, restañarán
heridas y tenderán su mano al que la necesite en
prueba de comprensión, de amor y amistad. “Pensa-
miento Leonístico”: La pérdida de nuestras ilusiones,
es la única pérdida de la que nunca nos recobramos...
“Nosotros servimos”.

Felicidades al
COLEGIO MIGUEL ÁNGEL
y a su Directora, Srita. Profra.
ROSA MARÍA DÁVILA SALDAÑA
No labramos en piedra, ni en mármol, ni en bronce;
nuestro trabajo es mil veces mejor,
trabajamos labrando en la mente infantil y juvenil
de cada uno de nuestros queridos alumnos,
sembrando en ellos los más altos valores FELICITAMOS
de igualdad y respeto en el Amor a Dios y a sus Semejantes. al señor
Grabaremos algo que el tiempo no borrará
y que resplandecerá en su eternidad.

Gracias Señorita Rosy, por permitirnos colaborar con

Lic. Alejandro Sánchez Hernández
Usted en tan noble labor. por su designación el jueves 15 de marzo
del año en curso como
Nuestra Admiración, Cariño y Gratitud.
Amalia de Martínez. Georgina Sáenz. Marthita de Llorens. MAGISTRADO DE SALA SUPERIOR
Angélica de Mayorga. Gloria de Rivas. Maty de De la Cueva.
Armandina de Marmolejo. Irma Delia de Flores. Mayela de Romero. DEL TRIBUNAL FEDERAL DE JUSTICIA
Betty de Orrante. Isabel de Escobedo. Laurita de Rdz.
Carmelita de Orrante. Juanita de Serna. Naty de González. FISCAL Y ADMINISTRATIVA
Carmelita de Anaya. Licha de Viesca. Paty de Arizpe.
Carolina de López. Lolita de Aguilera. Pily de Serrano.
Clemen de Sada. Lupita de Ramírez. Rebeca de Yáñez. Nombramiento otorgado por el señor
Consuelo de Farhat.
Chayito de Rivera.
Lupita de Vargas.
Leonor de Robles.
Rosa Cruz de Sánchez.
Rosa de De la Cruz.
Presidente de la República
Chelita de Ávila. Ma. Elena de Rivera. Sandra de Gutiérrez. y ratificado unánimemente por la
Fátima de Chamán. Mariquita de Guerrero. Coco de González.
Gaby Araiza. Ma. Luisa de Arellano. Tere Hijar. Comisión Permanente del
Gelys de Arizmendi. Mariana de Villalobos. Thelma de Marín. H. Congreso de la Unión.
Georgina de Madinaveitia. Maribel de Balboa. Tere de Arellano.
Tere Esparza. Tere Ortiz. Tere de Romero.
Tere de Tea. Thelma de Rodríguez. Betty de Escárcega. Ing. Eduardo Montaña Castañeda y Familia
Luz Elena de Ramírez.
Torreón, Coah., a 18 de marzo de 2001. Torreón, Coahuila, marzo 18, 2001.

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