¿Volvieron los tiempos de la Violencia en Colombia?

Por: Luis Eduardo Mercado Espitia

Twitter: @lemer1976

El fin de semana nos hallamos con la triste noticia de una nueva masacre en Colombia,
esta vez en la vereda Santa Catalina, zona rural de Samaniego – Nariño, las noticias
registran (8) ocho jóvenes asesinados en una reunión que se realizaba en las afueras
de este municipio. Esta noticia enluta nuevamente al país, y es la tercera en menos de
una semana, a la que hay que sumarle la de los 5 jóvenes del barrio Llano grande de
Cali y la de los dos jóvenes asesinados a quemarropa entre cauca y Nariño y la de los
dos indígenas en Corinto – Cauca.

Al parecer los tiempos aquellos de la década de los 90, en la que cada día nos
enterábamos de una nueva masacre en el Urabá antioqueño perpetradas por grupos al
margen de la ley, están resurgiendo. Una realidad que parecía haberse superado, pese
a los pocos avances del desvanecido y débil acuerdo de paz firmado por el gobierno y
el grupo beligerante FARC – EP.

En los últimos dos meses se han presentado cerca de 20 asesinatos en Nariño, en esta
oportunidad las víctimas son jóvenes de entre 17 y 25 años, y fueron identificados
como: Oscar Andrés Obando (17 años), Laura Michel Melo (19 años), Campo Elías
Benavides (19 años), Daniel Vargas (22 años), Bayron Patiño (23 años), Rubén Darío
Ibarra (24 años), Jhon Sebastián Quintero (24 años) y Brayan Alexis Cuarán (25 años). 

Un grupo de jóvenes que solo querían recordar un festival que año tras año se
realizaba, tal vez una causa justa, pero en momentos de confinamiento debieron saber
que no se podía realizar dicha reunión, pero que no justifica el accionar de los
responsables.

Es triste que miembros de grupos belicosos tengan el control en ciertas zonas del país.
No se puede ignorar lo delicado de esta situación, pues al parecer la presencia del
estado en esta parte del sur del país no se ve, y por el contrario los integrantes de
grupos al margen de la ley y de las bandas emergentes caminan sin ninguna dificultad
a lo largo y ancho de este territorio; no se puede desconocer que el gobierno tiene que
velar por la paz del territorio, y no se puede ahora salir a decir que “se va a llegar a lo
más hondo de esta investigación”, pues esta frase ya se ha convertido en frase de
cajón o de cliché.

En un país que está viviendo momentos de crisis debido a la pandemia a causa del
Covid – 19, y donde las situaciones cobran importancia de acuerdo a la investidura de
quien la sufre se hacen necesarias acciones contundentes y una mejor presencia de la
fuerza pública en los lugares asediados por los grupos beligerantes.

Tal vez en Colombia sea más importante informar acerca del número de contagiados y
muertes por el Covid – 19, cifras de dudosa ortografía; o que es más significativa la
detención de un escuálido expresidente, o sea más trascendental la discusión desatada
por la locución de un cantante que se expresó de Montería como un pueblo artesanal;
al parecer lo fundamental y esencial que es la vida ha quedado a un lado, en el caso de
Samaniego no se escucha una invitación a movilizaciones, o marchas o cosas por el
estilo.

Hay conjeturas de los responsables de esta masacre, pero son solo hipótesis, no hay
respuestas contundentes, solo mensajes de solidaridad y condolencias a los familiares
y las promesas, las de siempre, de investigar y llegar hasta las últimas consecuencias.

Es triste saber cómo en Colombia se está volviendo a los tiempos de la violencia

(aunque al parecer nunca ha dejado de estar, o es lo que nos han hecho creer) y el
gobierno solo pone pañitos de agua tibia, cuando lo que se necesita es otro accionar,
el pueblo está cansado, el pueblo ya no aguanta más, pues no se trata solo de las
masacres de la semana pasada, también de la muerte de 185* líderes sociales, de la
muerte de más de 25 docentes, periodistas, médicos, ingenieros… y el listado continúa,
ante esta situación surge la pregunta: ¿Qué está pasando en este país, para que se
genere una nueva, cruda y reiterativa violencia?

* http://www.indepaz.org.co/paz-al-liderazgo-social/