Ríase el show

Ríase el show es una obra de Julián Arango y Antonio Sanint, escrita y protagonizada
por ellos dos actores colombianos y pioneros del Stand-Up Comedy en Colombia, el
show tiene aproximadamente 20 años desde su primer estreno, y para 2018 ya había
completado más 1.500 funciones. Antonio Sanint y Julián Arango utilizan a lo largo de
esta obra algunos personajes de la Comedia del Arte. Desde los Amantes, pasando por
el viejo Pantaleón, Colombina, Magnifico y Zanni. Así como muchas pausas,
expresiones y estructuras que tienen como fin hacer reír al público.

En esta escena analizaré la escena donde Marcelo, un argentino que acaba de llegar a la
ciudad se encuentra con el taxista que lo va a llevar al hotel donde el se va a hospedar.
Cabe resaltar que, si bien el taxista tiene una posición de sirviente, también tiene una
actitud bastante burda, haciendo chistes de doble sentido y con comentarios fuera de
tono, también representa un taxista de un estrato social bajo. La anticipación comienza
con la presentación de los personajes al público y el encuentro entre ellos, donde el
taxista de inmediato empieza a lanzar cometarios un poco “espinosos” donde la posición
de Marcelo es “hacerse el loco”. Nuestro taxista insiste ser “ampón” e intentar cobrar
por su servicio más de lo que a lo que nutro argentino sigue sin darle mucha
importancia.
Hay movimientos específicos que causan risa en la gente, como lo es que nuestro
taxista se rasque la entrepierna, Marcelo lo mire, mira al público y luego vuelve a
mirarlo a el con cara de desagrado, hace esto continuamente con varias expresiones que
tiene el taxista, como decir “subnundo”, o cuando malinterpreta la expresión de
estimuladores de sociedades tercer mundistas. Lo cual empieza a incomodar mucho a
Marcelo, hasta que le pide respeto con el tono de voz bastante elevado, lo que crea una
tensión entre los dos personajes que es donde empieza el desarrollo, el taxista empieza a
defenderse y a ser bastante vulgar, toma posiciones corporales similares a las de Zanni y
uniéndolas con algunas expresiones vulgares muy colombianas, a lo que el argentino se
muestra confundido con lo que esta sucediendo. Continua una conversación donde se
libera un poco mas la tensión hasta que Marcelo vuelve a subir la voz y lo llama
“canchero” y nuestro taxista vuelve a su modo más vulgar y lo amenaza con llamar a
“Orlando”. Marcelo se excusa y le explica que no tiene dinero, que qué es lo que quiere,
el taxista le expresa que “ se lava las manos” llama a “Orlando” y se va.
Marcelo se encuentra asustando, mirando a todas partes, sintiéndose desprotegido, mira
al publico con miedo, hace una pausa y comienza a recordarse a si mismo lo grande que
es, deja sus inseguridades y respira. Enseguida entra Claudio Paul y empieza la descarga
del acto cómico, Marcelo se tira a llorar sobre su amigo balbuceando e imitando todos
los movimientos groseros y las vulgaridades del taxista. Cabe resaltar que en esta
imitación se usa una posición completamente Zanni, la cabeza del actor se encuentra
hacia adelante, esta encorvado y flexiona sus rodillas. No habla de manera clara y
comienza a usar solo sonidos para imitar lo que el taxista había hecho durante su
incomoda conversación, el público estalla en carcajadas mientras esto sucede y les
regala un aplauso. Es así como el show se continúa desarrollando entres risas y
aplausos.

Escogí esta obra por me gusta disfrutar de nuestro talento y de lo que producimos como
país, pero también lo escogí por la interacción que puede haber con el publico en un
teatro y como podíamos percibir la reacción de este frente a los personajes, estructuras y
expresiones que los actores proponen sobre el escenario.

Para concluir, cada acto cómico tiene expresiones, estructuras y personajes

determinados, así como pausas, miradas y complicidad entres los actores para hacer reír
al público.