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Anatomía y biomecánica
del gran artejo o hallux
M. Maestro, T. Leemrijse, J.-J. Rivet
El gran artejo (o hallux) prolonga el arco medial y pertenece al pie astragalino, espe-
cializado en la función propulsiva. Incluye dos falanges (F1 y F2) articuladas por una
trocoide y se articula por la base de F1 con la cabeza del primer metatarsiano (M1),
al cual está conectado por una cápsula fibrosa plantar reforzada por un mecanismo
sesamoideo que lo une al sistema musculotendinoaponeurótico. La base de F1 y el sis-
tema capsulosesamoideo forman una cavidad glenoidea en la que se desliza y rueda la
cabeza de M1. Ocho músculos (cuatro de ellos intrínsecos) dan movimiento al hallux,
que se conecta a todas las estructuras anatómicas proximales, lo que explica la precisión
de su funcionamiento. Su patología, tanto traumática como degenerativa, es extrema-
damente frecuente; también se encuentra afectado en las enfermedades inflamatorias y
metabólicas. Aunque no es estrictamente necesario para la locomoción, es necesario para
ritmos rápidos debido a la potencia de propulsión requerida. Para tratar las patologías
que lo afectan es necesario conocer bien su biomecánica. Restaurar la función del hallux
a veces es difícil si se quiere asegurar al mismo tiempo ausencia de dolor, movilidad,
estabilidad y fuerza de apoyo. El hallux presenta los dos últimos pivotes de la marcha
situados al nivel de las articulaciones metatarsofalangosesamoidea (3.er pivote) e inter-
falángica (4.◦ pivote), donde las tensiones dinámicas son a veces enormes. Estos pivotes
de movimiento también son útiles para la aceleración, la marcha rápida, la carrera y
diversas actividades, incluidas actividades deportivas; el hallux puede considerarse el
dedo del rendimiento. El sacrificio de la movilidad del tercer pivote por artrodesis a veces
es necesario para asegurar una fuerza eficaz de apoyo del pulpejo. El ajuste óptimo de
su posición requiere tener en cuenta la biomecánica del pie y la marcha en relación con
el contexto individual. La precisión de su biomecánica debe tenerse en cuenta para el
diseño de las artroplastias, ya que, según la amplitud de movimiento, la articulación
metatarsofalangosesamoidea se comporta como una bisagra o como una articulación
diartrodial bicondílea compleja, lo que se aleja bastante de la rótula esférica o de la
condílea simple, que a menudo han servido de modelo para el diseño de las artroplastias
totales.
© 2018 Elsevier Masson SAS. Todos los derechos reservados.
EMC - Podología 1
Volume 20 > n◦ 3 > agosto 2018
http://dx.doi.org/10.1016/S1762-827X(18)91762-1
E – 27-010-A-50 Anatomía y biomecánica del gran artejo o hallux
M1
2
8
1
1 9
10
3 2
11
4
3
12
4
2 13
3 5
4 14
A 1 B 15
6
Figura 1. 16
A. Posición embrionaria. 17
B. Posición fetal al tercer mes y adulta con los pivotes de movi- 7 18
miento de la marcha. 1. Primer pivote talón/suelo; 2. segundo
19
pivote del tobillo; 3. tercer pivote del antepié, distribuido en
lateral (M5-M2) para la marcha lenta y medial (M2-M1) para
la marcha rápida y la carrera; 4. cuarto pivote interfalángico
hallux/suelo.
F1 20
y fisiológicas (Fig. 1)
Nociones de anatomía y fisiología (Fig. 2)
Nociones de embriología [2]
Las dos falanges del hallux están conectadas por una
Muy temprano en el embrión, durante el desarrollo del articulación interfalángica (IF) de tipo trocoide, que da
metatarso, el primer radio es el más grande y está en una principalmente un rango de movimiento en el plano sagi-
posición de aducción y supinación. Más tarde en el feto, tal. La cápsula articular gruesa en zona plantar explica
el crecimiento del lado tibial del pie lo llevará en posi- su posición de bloqueo en extensión o flexión dorsal,
ción plantígrada y el M1 se reorienta, para alcanzar en el excepto en estiramiento, aunque permite pequeños movi-
adulto un ángulo intermetatarsiano de 6-9◦ y un ángulo mientos en todos los planos. A veces hay un sesamoideo
de inclinación o de ataque de unos 25◦ [3] . plantar que puede causar perturbaciones dolorosas [6] . Si
Estas nociones de embriología pueden explicar las esta cápsula está distendida bajo el efecto de tensiones
variaciones encontradas al nivel de la articulación cuneo- anormales como en la patología del hallux rigidus o la
metatarsiana del primer radio, así como los distintos retracción de los gastrocnemios, se produce un hallux
morfotipos rotatorios y torsionales. Así, se observa la exis- erectus por hiperflexión dorsal. La angulación en valgo
tencia de trastornos de orientación de la epífisis articular a este nivel (valgo interfalángico) es más o menos pro-
distal en relación con la diáfisis de M1 medida por el nunciada según los morfotipos. En caso de tratamiento
ángulo articular metatarsiano distal (AAMD). Una posi- quirúrgico puede necesitar una corrección distal en F1.
bilidad es que el AAMD se exprese más bien en el plano El hallux crea un ángulo fisiológico en valgo (o abduc-
horizontal con una articulación congruente y desviada tus) de 5-10◦ en el plano horizontal del pie plantígrado.
en valgo; en este caso, hay que distinguirlo del AAMD Por la base de F1 excavada en cúpula se articula de forma
torsional-rotacional, que se origina en la torsión de M1 y compleja con la cabeza de M1 al nivel de la primera arti-
la rotación en pronación de las articulaciones proximales culación metatarsofalángica (MTF1).
y está muy influido por las condiciones de medición [4] . La cabeza metatarsiana tiene una geometría variada y
Según De Wilde [5] , por analogía con los metacarpianos, relativamente variable (Fig. 3). Es similar a una bicondí-
M1 no es el homólogo ontogénico de los otros metatarsia- lea asimétrica. Los radios de curvatura de la cabeza en el
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1 F1 1
A B
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Es importante considerar este mecanismo articular en que también se insertan en el lado medial de la base de
el diseño de las artroplastias y puede explicar el desgaste M1. Esta disposición particular explica fácilmente las defi-
de los polietilenos unidos a la base de la falange. ciencias de apoyo contra el suelo del R1, consecutivas al
desequilibrio de este par de fuerzas musculares. Éstas se
encuentran en la hipotonía del PL y en algunas patolo-
Activadores articulares gías neuromusculares que se acompañan con frecuencia
de un metatarso elevado o un metatarso elevado aducto.
Del mismo modo, en el pie plano valgo, en particular degene-
Los músculos intrínsecos y extrínsecos, que son elemen- rativo o inflamatorio, el colapso y la horizontalización del arco
tos activos controlados por el sistema nervioso, son de transversal mediotarsiano es responsable de una ineficacia de
suma importancia para preservar la estructura pasiva y acción de PL, con supinación secundaria del antepié.
resistir las fuerzas, así como para animarlo y permitir la Esto también explica la reducción espontánea del varo
transferencia coordinada y sincrónica de la carga en los del metatarso después de la artrodesis de M1F1.
diversos apoyos.
Con carga y sin ésta, la flexión dorsal del hallux es pro-
ducida por el tendón del ELH insertado en la cara dorsal
de F2. La extensión de la primera falange se debe a la
Fuerzas (Fig. 7)
expansión medial del ECH (o pedio) que se inserta en el M1 con apoyo trabaja sobre todo en compresión axial,
borde dorsolateral de F1 y la correa del ELH que actúa con dos zonas de estrés ubicadas en plantar y dorsolateral
de acuerdo con el mecanismo del cabestrillo en conexión que es importante considerar para el diseño de osteoto-
con el sistema sesamoideo [31] . mías que normalmente las evitarían [35] .
La flexión plantar es producida por los músculos intrín- Cuando el hallux se fija sobre el apoyo, sufre la fuerza
secos (FCH, AdCH, cabeza oblicua y AbCH) y un músculo de reacción del suelo que lo tensa en supinación (exorro-
extrínseco, el FLH. tación). M1 es móvil en la base falangosesamoidea y
La fuerza de flexión plantar (fuerza de apoyo contra también es solidaria con el pie que se colocará en inversión
el suelo) es mayor que la fuerza de flexión dorsal. Por gracias al efecto de cabrestante de la aponeurosis plantar.
ejemplo, si durante una liberación quirúrgica excesiva Pero por el simple hecho de los movimientos de la marcha,
los ligamentos sesamoideofalángicos son seccionados, los al levantar el talón, con el pie configurado en inversión,
intrínsecos pierden su estabilización de la flexión plantar al mismo tiempo que se flexiona, M1 también realizará
sobre F1 y el hallux se deformará en cabeza de gallo (cook- una pronación (endorrotación) centrada en el sesamoideo
up deformity). La artrodesis M1F1 será la única solución lateral. Esto ya se ha mencionado (cf supra), y permite la
de rescate para realinear el hallux y restaurar su fuerza de alineación de los ejes metatarsianos y falángicos (desapa-
apoyo contra el suelo. rición del valgo fisiológico), que entonces se alinean con
También se entiende que la ablación de los dos sesa- el eje del FLH. Este sistema de contrarrotación entre F1 y
moideos disminuye el brazo de palanca de la fuerza de M1 inducirá un giro y permitirá la sujeción del ligamento.
los flexores intrínsecos y, por lo tanto, su momento, al Esto luego rigidiza la articulación M1F1 y permite exten-
disminuir la distancia con respecto al eje de rotación arti- der el brazo de palanca para propulsar el punto de apoyo
cular [32] . La posición neutra en el plano horizontal está distal de la IF (cuarto y último pivote en contacto con el
garantizada por el equilibrio entre las acciones del AdCH suelo).
y el AbCH. En el primer radio se ejercen varias fuerzas [36] :
El músculo AbCH gracias a su inserción calcánea tam- • la fuerza de apoyo del hallux (Fh);
bién es un regulador de la tensión y un elevador del arco • la fuerza de apoyo de la cabeza metatarsiana (Fm);
medial. • la fuerza en la articulación (Fa);
La posición de los tendones largos en el centro articu- • la fuerza axial del metatarsiano (Rm);
lar es fundamental para evitar desviaciones del hallux [33] . • la fuerza de flexión del metatarsiano (Mm);
Por ejemplo, en caso de lateralización de un tendón, apa- • la fuerza de cizalla del metatarsiano (Sm).
recen componentes de desviación del hallux en valgo (o Las fuerzas Fh y Fm son proporcionadas por mediciones
en aducción en relación con M2), con traslación medial de presión (error del 2%); las otras se estiman con un error
de la primera cabeza y agravación del metatarso varo. Este de alrededor del 25%.
mecanismo de desviación también se aplica en el sentido La fuerza máxima que actúa en la MTF1 es aproxima-
de la abducción (en relación con M2) para el hallux varus, damente igual al peso corporal.
en particular iatrogénico. M1 es cuatro veces más sólido que M2 que, sin embargo,
El PL también es aductor del primer radio, con exca- soporta tanta carga vertical como el primero durante la
vación del arco plantar transversal. Este movimiento se marcha. El primer radio se puede considerar como una
combina con una rotación en pronación de M1, que se reserva de potencia motriz.
desliza hacia abajo y hacia afuera alrededor de la base En el momento del contacto con el suelo, las cabe-
de M2 y así tensa los metatarsianos [34] . Esto se opone a zas metatarsianas soportan la carga durante el 85% del
la acción abductora (en relación con M2) o varizante o tiempo, y el hallux, el 60%. La primera cabeza meta-
aductora (en relación con el plano sagital del cuerpo) de tarsiana y el hallux alcanzan su presión máxima casi al
las fibras tendinosas distales del músculo tibial anterior, mismo tiempo.
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El hallux representa una reserva de superficie y de sus- El aparato falangosesamoideo durante la marcha pro-
tentación que alivia la carga sobre la primera cabeza [37] . porcionaría en un continuo sincronizado cuatro tiempos
Durante la marcha, la carga en valgo del hallux es funcionales [40] :
permanente. Esta acción puede ser desestabilizante en • un tiempo de suspensión entre el choque del talón y
algunas situaciones patológicas: el apoyo plantar en el suelo (el 0-15% del ciclo), que
• ya sea a través de la flexión plantar insuficiente de guiará el posicionamiento del hallux;
M1 vinculada al déficit del mecanismo de inversión. • un tiempo de fijación del apoyo anteromedial por con-
Esto puede ocurrir, por ejemplo, en caso de retracción tracción isométrica de los músculos intrínsecos, antes
de los músculos gastrocnemios y, de forma secundaria, de levantar el talón y durante el despliegue de los dedos
por insuficiencia del músculo tibial posterior; el antepié (el 15-40% del ciclo). Tan pronto como se levanta el
continúa su movimiento de abducción y flexión dorsal talón, los músculos pueden revertir su punto de acción
contra el resto del pie, que permanece plano porque no a partir de los sesamoideos con apoyo estable en el
puede invertirse; suelo y actuar hacia arriba. Las cargas del antepié se
• o a través de la inestabilidad de la articulación metatar- reorientan y canalizan, recuperándose la energía para
sofalángica. Esta inestabilidad articular puede ocurrir los tiempos siguientes;
por distensión ligamentosa (como resultado del exceso • el tiempo de coordinación, que corresponde a varios
de flexión dorsal M1F1 y/o de rotación medial por pro- hechos. La elevación del talón se acentúa, M1 se coloca
nación excesiva de M1, por insuficiencia muscular, etc.) en flexión plantar y en carga, la cabeza gira en prona-
o por un sesamoideo medial bipartito con alargamiento ción y se desliza sobre los sesamoideos, bloqueando la
de la parte medial de la aponeurosis plantar superficial articulación a medida que se produce la flexión y orien-
que altera el mecanismo del cabrestante. tando los sesamoideos en el plano transversal, de forma
perpendicular a la línea de marcha. Esto puede explicar
la desviación lateral de la cresta respecto al eje de M1.
La tracción sobre la aponeurosis plantar debido a la fle-
Aparato xión dorsal M1F1 activa el mecanismo del cabrestante
falangosesamoideo [38] e induce la inversión del pie mientras excava el arco
medial. El calcáneo se inclina en varo, el astrágalo se
Debido a la fugacidad y amplitudes muy pequeñas de evierte, la articulación mediotarsiana se bloquea y el pie
sus movimientos, es una entidad cuya dinámica es muy se vuelve rígido. De la misma forma, los tejidos blandos
difícil de estudiar. Es un verdadero nudo de transmisión plantares, así como la piel de la planta del pie, se ten-
localizado dentro de los tractos fibrosos tridimensionales san y rigidizan para resistir las fuerzas de cizallamiento.
y las inserciones de los músculos intrínsecos, que encierra El peroneo largo bloquea activamente M1 contra M2
y guía el tendón del FLH. y el antepié se contrae, convirtiéndose en un brazo de
Se pueden distinguir varios roles según el concepto de palanca rígido;
tensegridad: • el último tiempo, de «catapulta» en el momento del des-
• amortiguar y absorber la carga anteromedial; pegue (toe-off), en torno al 60% del ciclo: el FLH se tensa
• proteger el FLH y orientar su momento de acción; y propulsa el pie como una catapulta por medio de los
• favorecer la acción del FCH para concentrar y devolver sesamoideos, que empujan la cabeza metatarsiana hacia
las cargas; arriba y hacia delante; el apoyo se produce entonces
• estabilizar el primer radio a través del mecanismo sobre el cuarto pivote de la marcha, representado por
del cabrestante aumentando el radio de la primera la IF contra el suelo.
cabeza [27] y las inserciones de los músculos intrínsecos
(AdCH transverso y oblicuo, FCH, AbCH).
El sesamoideo medial es paralelo al suelo, en el eje de
la falange y el FLH.
“ Punto fundamental
La articulación metatarsofalangosesamoidea parece
presentar dos tipos de comportamiento para mantener el Los cuatro tiempo del aparato falangosesa-
eje del tercer pivote de la marcha en el plano transversal. moideo
Desde la alineación M1F1 con apoyo, por lo tanto, entre • Tiempo de suspensión
0◦ de flexión plantar y 30◦ de flexión dorsal de la falange, • Tiempo de fijación del apoyo anteromedial
es de tipo gínglimo, es decir, articulación de bisagra con • Tiempo de coordinación
un eje transversal y un grado de libertad articular en el • Tiempo de «catapulta»
plano sagital.
Pero después de los 30◦ , al levantar el talón durante
la marcha cuando ocurre la flexión plantar de M1 y la
cresta pierde su función estabilizadora, la articulación se
convierte en diartrodial con dorsalización de los ejes de Baropodometría,
trabajo [18, 39] para poder absorber los movimientos de electromiografía
rotación-deslizamiento de la cabeza.
y locomoción
Las fuerzas de propulsión debajo del hallux tienden a
“ Punto importante aumentar de forma lineal al aumentar la velocidad de mar-
cha. La superficie de apoyo disminuye a medida que el
hallux se levanta del suelo y la presión aumenta (segundo
Dependiendo del grado de flexión, la articulación pico de presión plantar). Las presiones debajo de la cabeza
metatarsofalangosesamoidea tiene dos tipos de metatarsiana aumentan a bajas velocidades de marcha (de
0,75 a 1,25 m/s) y luego disminuyen cuando la velocidad
comportamiento:
aumenta después de 2 m/s.
• tipo gínglimo o bisagra con un eje de trabajo
Esto se explica por la disminución del tiempo de con-
transversal; tacto a este nivel. Con altas velocidades, el pie tiende a
• tipo diartrodial con dorsalización de los ejes de pasar directamente del choque del talón al despegue del
trabajo. hallux, y en estas áreas las presiones aumentan de manera
significativa [41] .
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hallux
100,0 %
81,8 %
40,9 % 10
hallux
15
22,7 % 20
0,0 %
A B C D
5
Figura 8. Diagrama de los datos baropodométricos de la fase de apoyo en el hallux valgus: el apoyo del pulpejo del hallux es deficiente.
A. Trayecto de los baricentros.
B. Comienzo de la fase de apoyo de los dedos en apoyo plantar.
C. Fase de apoyo del antepié y los dedos.
D. Insuficiente apoyo del pulpejo del gran artejo en el hallux valgus.
Así, el aparato falangosesamoideo debe garantizar una al segundo pico de presión plantar. Por lo tanto, el 85% de
estabilidad perfecta del hallux para conducir a una rigidez la energía producida durante el ciclo de marcha se genera
de la articulación metatarsofalángica y poder pasar sobre entre el 30-50% del ciclo. También es la fase durante la
el pivote de movimiento en la zona de contacto del hallux cual es posible acelerar para ajustar la longitud del paso.
con el suelo (cuarto pivote) para una acción propulsora El FLH luego funciona de forma excéntrica, como un elás-
óptima del FLH. La amortiguación y la transferencia de tico de catapulta. Así, en la fase siguiente de despegue de
energía se producen en un tiempo muy breve (< 40 ms). los dedos y el hallux, sólo los músculos intrínsecos mues-
Con la velocidad de marcha, el ángulo de flexión dor- tran una actividad eléctrica que se detendrá tan pronto
sal del hallux aumenta. Así, más allá de 30◦ de flexión, la como el pie despegue del suelo [43] . Esto implica la com-
articulación metatarsosesamoidea pierde su estabilidad de plejidad y precisión del ajuste que debe tener el aparato
forma porque la cresta (cf supra) sólo es eficaz para cen- falangosesamoideo para estabilizar el apoyo.
trar y guiar la cabeza metatarsiana hasta los 30◦ de flexión Sin embargo, hay variaciones en la actividad eléctrica
dorsal. Su estabilidad y bloqueo dependen entonces de de los músculos debido a las diversas estrategias neuro-
mecanismos de ajustes capsuloligamentosos y muscula- musculares individuales durante la marcha [44] .
res [41] . En la práctica de la carrera, por ejemplo, el hallux es La distribución de las presiones en el pie pasa del 120-
la última zona del pie que se apoya y propulsa [42] (Fig. 8). 130% del peso del cuerpo durante la marcha al 300%
durante la carrera.
Los baricentros, durante la marcha normal, se desplazan
“ Punto importante desde medial al nivel del talón hacia el borde lateral del
mediopié y luego, en el antepié, van desde el borde lateral
hacia el borde medial del hallux.
Es interesante señalar la posibilidad de reducir la pre-
Con la velocidad de marcha, el ángulo de flexión sión debajo del antepié y el hallux mediante el uso de
dorsal del hallux aumenta. zapatos cuya suela exterior tiene un perfil redondeado en
el frente desde las MTF (rocker bottom).
La fuerza propulsiva dinámica deriva de la energía La interpretación de los datos baropodométricos del pie
potencial. Ésta se transforma en energía cinética por frente a un problema patológico sólo puede concebirse
la caída del centro de gravedad y la inercia pendular después de una exploración física precisa capaz de analizar
del miembro opuesto. Esta fuerza propulsiva puede ser los fenómenos de adaptación, compensación o evitación.
fácilmente amplificada por el tríceps y el FLH, que es
electromiográficamente activo del 15 al 50% del ciclo
de marcha. Este período corresponde a la fase de simple
soporte monopodal que incluye las fases de apoyo plantar El primer radio
(del 15 al 40%) y despegue del talón (del 40 al 50%). Esto
difiere ligeramente de la terminología de los anglosajones es el órgano del rendimiento
con la posición media (mid-stance, del 10 al 30%) y la posi-
ción terminal (terminal stance, del 30 al 50%) [32] . El FLH El pie, verdadero órgano cibernético [45] , tiene una
se contrae al mismo tiempo que los músculos del compar- capacidad de alargamiento automático de los brazos de
timento posterior y los músculos peroneos, conduciendo palanca que permite la aceleración, la marcha rápida y la
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Durante esta fase final del paso, el cuerpo se eleva [3] Bonnel F, Nicoleau F, Briand D, Montagne J. Anatomie
con relativa ingravidez y, por lo tanto, la carga que hay radiologique et biométrie des métatarsiens. Med Chir Pied
que superar disminuye, mientras que la fuerza propulsora 1995;11:138–41.
alcanza su máximo. La fuerza muscular entonces sirve [4] ElSaid AG, Tisdel C, Donley B, Sferra J, Neth D, Davis
para la aceleración y luego para el mantenimiento del B. First metatarsal bone: an anatomic study. Foot Ankle Int
ritmo. 2006;27:1041–8.
Así, esta posibilidad de aceleración y el mantenimiento [5] De Wilde AG. Developmental aspect of ridges and
creases (dermatoglyphics). Collegim Anthropologicum
de una velocidad rápida reflejan el buen funcionamiento
1979;3:201–10.
biomecánico del antepié y el pie. Este criterio probable- [6] Roukis TS, Hurless JS. The hallucal interphalangeal sesa-
mente merecería un lugar en las tablas de evaluación moid. J Foot Ankle Surg 1996;35:303–8.
funcional del antepié y en la subsección deportiva de [7] Bonnel F. Articulations métatarso-sésamoïdiennes et
medición de la capacidad del pie y el tobillo (FAAM, foot métatarso-phalangienne de l’hallux. Bases biomécaniques et
and ankle ability measure) [51] . Lo mismo se aplica a la capa- incidences cliniques. Monographie de l’AFCP. Montpellier:
cidad de inversión activa del pie con apoyo. Sauramps Médical; 2015.
De todo este estudio, parece que todavía queda por des- [8] Dereymaeker G, Mulier T, Girisch P. The first metatarsop-
cubrir y explorar un inmenso campo de investigaciones halangeal joint meniscus and its relation to hallux valgus
como, por ejemplo, el interés de las plantillas ortopédica deformity–an anatomical and clinical study. Foot Ankle Surg
u ortesis con: 2011;17:270–3.
• un apoyo subcapital medial de M1 para compensar [9] Khaw FM, Mak P, Johnson GR, Briggs PJ. Distal ligamentous
(«buscar apoyo») una supinación del antepié; restraints of the first metatarsal. An in vitro biomechanical
• un soporte (o barra) retrocapital medio para estimular study. Clin Biomech 2005;20:653–8.
los músculos intrínsecos (FCH y AdH); [10] Hicks JH. The three weight bearing mechanisms of the foot.
En: Evans FJ, editor. Biomechanical studies of the musculo-
• una plantilla termoformada en la posición de dorsifle-
skeletal system. Springfield: CC Thomas; 1961. p. 161–91.
xión del hallux para excavar, reorientar naturalmente [11] Sarrafian SK. Anatomy of the foot and ankle. Philadelphia:
según la persona, la bóveda medial por efecto de cabres- JB Lippincott; 1993.
tante; [12] Bibbo C, Arangio G, Patel DV. The accessory extensor ten-
• un elemento subdiafisario de F1 del hallux en el caso don of the first metatarsophalangeal joint. Foot Ankle Int
de un hallux erectus para devolver el apoyo propulsivo 2004;25:387–90.
de F2; [13] Sanders AP, Snijders CJ, Van Linge B. Medial deviation of
• así como el uso de un vendaje de sujeción elástico para the first metatarsal head as a result of flexion forces in hallux
limitar y modular una movilidad o para ayudar a una valgus. Foot Ankle 1992;13:515–22.
acción muscular. [14] Dykyj D. Pathologic anatomy of hallux abducto valgus. Clin
Podiatr Med Surg 1989;6:1–15.
[15] Levin SM. Continuous tension, discontinuous compression,
Conclusión a model for biomechanical support of the body. Bulletin of
Structural Integration, Rolf Institute, Bolder: 1982. p. 31–3.
Aunque el gran artejo no es indispensable para la mar- [16] Collan L, Kankare JA, Mattila K. The biomechanics of the
cha lenta (< 1,2 m/s), se vuelve fundamental para el first metatarsal bone in hallux valgus: a preliminary study
rendimiento locomotor. Su implicación patológica siem- utilizing a weight bearing extremity CT. Foot Ankle Surg
pre tendrá un impacto sobre la marcha normal y sus 2013;19:155–61.
modulaciones. [17] Viladot A. Pathologie de l’avant-pied. Barcelona: Toray;
Su patología traumática debe tratarse con precisión. 1974.
[18] Shereff MJ, Bejjani FJ, Kummer FJ. Kinematics of the
La patología de la MTF1, que se puede expresar por ines-
first metatarsophalangeal joint. J Bone Joint Surg Am
tabilidad con deformación (hallux valgus) o por artrosis 1986;68:392–8.
(hallux rigidus), es extremadamente común e incapa- [19] Halstead J, Redmond AC. Weight-bearing passive dorsi-
citante. Se puede tratar de una manera conservadora flexion of the hallux in standing is not related to hallux
utilizando las posibilidades del calzado, plantillas ortopé- dorsiflexion during walking. J Orthop Sports Phys Ther
dicas, rehabilitación, medicamentos, etc. 2006;36:550–6.
Los tratamientos quirúrgicos conservadores con preser- [20] Nawoczenski D, Bavorhaver J, Umberger B. Relations-
vación articular o paliativos por artrodesis o artroplastia hip between clinical measurements and motion of the first
están indicados después del fracaso de los métodos ante- metatarso-phalangeal joint during gait. J Bone Joint Surg Am
riores. 1999;81:370–6.
Un buen conocimiento de la biomecánica y los fenóme- [21] Hall C, Nester CJ. Sagittal plane compensations for artificia-
nos de la marcha constituye un hilo conductor útil en la lly induced limitation of the first metatarsophalangeal joint: a
realización de la exploración física, en la que primero se preliminary study. J Am Podiatr Med Assoc 2004;94:269–74.
deben evaluar movilidad, estabilidad y fuerza. También [22] Kirane YM, Michelson JD, Sharkey NA. Contribution of the
flexor hallucis longus to loading of the first metatarsal and first
es una ayuda valiosa en las elecciones terapéuticas. Asi-
metatarsophalangeal joint. Foot Ankle Int 2008;29:367–77.
mismo, ayuda al desarrollo de calzado protector, incluso
[23] Cornwall MW, McPoil TG, Fishco WD, O’Donnell D, Hunt
facilitador en lugar de restrictivo. En efecto, éstos pueden L, Lane C. The influence of first ray mobility on forefoot plan-
ser destructivos a largo plazo de la función de propul- tar pressure and hindfoot kinematics during walking. Foot
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M. Maestro (maestromichel@wanadoo.fr).
Institut monégasque médicochirurgical du sport (IM2S concept), 11, avenue d’Ostende, 98000 Monaco.
T. Leemrijse, MD.
Foot and Ankle Institute, avenue Ariane 5, 1200 Bruxelles, Belgique.
J.-J. Rivet.
Biomecaswing Performance Center/ETPI, Domaine de Terre-Blanche, 3100, route de Bagnols-en-Forêt, 83440 Tourettes, France.
Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Maestro M, Leemrijse T, Rivet JJ. Anatomía y biomecánica del gran
artejo o hallux. EMC - Podología 2018;20(3):1-11 [Artículo E – 27-010-A-50].
Disponibles en www.em-consulte.com/es
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complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico
EMC - Podología 11