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UNIVERS

IDAD
NACION
FACULT
ADALDE
AUTON
CIENCIAS
POLITICA
OMA DE PÉREZ CASARREAL BRIAN
ALUMNO:
SY
MEXICO
SOCIALES
PROFESOR (A): PEREZ MENDOZA BLANCA
ESTELA

TRABAJO: CONCEPTOS PRINCIPALES DE LA


PRAGMATICA

MATERIA:
TEORIAS Y
ANALISIS
DEL
CORRIENTE
GRUPO:PRAGMATICA
G9328
DISCURSO
CONCEPTOS PRINCIPALES:
1. El tratamiento de los 3 diferentes aspectos como los pragmáticos del
lenguaje da a entender que todos ellos tienen entidad por sí mismos y al
margen del resto, en perfecta desconexión. Estos distintos aspectos
pueden provocar que se olvide la unidad del lenguaje y de la pertenencia de
éste a la estructura general de los sistemas de signos. Esto conlleva a que
se recuerde que la unidad de todas las parcelas que se encuentran dentro
de la teoría general está dentro de la semiótica.
2. La pragmática “muestra que los signos no solo designan o enuncian, si no
que aprecian, prescriben, etc.”. (Blasco J.L et al, 1999, pág.19)
3. La pragmática “estudia un aspecto del signo en la relación semiótica y
necesita una terminología propia para hablar de la relación del signo con el
elemento del que ella se ocupe”. (Blasco J.L et al, 1999, pág.21)
4. El aspecto pragmático se observa en “las intenciones del emisor del signo y
las reacciones del receptor, connotaciones, etc.., así como con los factores
con textuales de la emisión de los signos”. (Blasco J.L et al, 1999, pág.21)
5. Para la corriente pragmática sus razones son permeables y no
completamente definidas
6. La pragmática se ocupa de las contribuciones del contexto al significado
ocasional de un signo (simple o normalmente complejo)
7. Morris elaboró su clasificación de acuerdo con la respuesta (o «la
disposición para reaccionar») que el signo estaba destinado a producir en el
intérprete, esta clasificación atiende fundamentalmente a un criterio
pragmático porque muestra que los signos no sólo designan o enuncian,
sino que aprecian, prescriben, etc.
8. “Morris clasificó los signos (en realidad, «modos de significar») en:
identificadores, designadores, apreciadores, prescriptores y formadores, Así
pues, estos distintos tipos de signos responden a las preguntas acerca de
dónde, qué, por qué y cómo respectivamente”. (Blasco J.L et al, 1999,
pág.19)
9. Todos los tipos de signos son signos simples, pero, se unen
frecuentemente con otros signos designadores, apreciadores o
prescriptores para poder formar un signo complejo o combinación de signos
complejos que recibe el nombre de adscriptor. Los adscriptores serán de
uno u otro tipo según cual sea el signo dominante.
10. Dentro de las clasificaciones de los signos existe uno que es de gran
importancia, tiene el nombre de signo formador y este “permite agrupar bajo
una única denominación «algunas de las que los antiguos denominaban
partes del discurso [...], las flexiones [...], todos los operativos lógicos o
algebraicos [...], artificios que a simple vista no se clasifican como signos
como, por ejemplo, la entonación interrogativa [...] el orden de las palabras
y la estructura gramatical»” (Blasco J.L et al, 1999, pág.20)
11. Las relaciones diádicas de los signos con: objeto, el intérprete y otros
signos dan lugar a los planos como el pragmático y constituyen al objeto de
semántica, la sintaxis y la pragmática respectivamente.
12. La pragmática “se ocupa de los aspectos relacionados con la psicología del
emisor y el receptor: las intenciones particulares del hablante y las
respuestas buscadas en el oyente (cuando se trata de signos lingüísticos)”.
(Blasco J.L et al, 1999, pág.23)
13. La pragmática también se ocupa de ciertos condicionamientos e influencias
sociales presentes en la comunicación.
14. La pragmática se ocupa de las contribuciones extralingüísticas al
significado e interpretación particulares de las emisiones
15. En el caso de las contribuciones de la pragmática al significado de
determinadas emisiones particulares se adopta la perspectiva más amplia y
se incluye en cada campo elementos que también serán incluidos en el
tratamiento de los problemas desde otro campo distinto.
BIBLIOGRAFIA

BLASCO, J.L., GRIMALTOS, T., & SÁNCHEZ, D. (1999). Signo y pensamiento.


Barcelona. Ariel Filosofía. Cap. 2, pp. 59-85.

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